Espérame...pronto iré contigo.

Tema en 'Relatos' iniciado por Hyuuga Erina, 1 Mayo 2012.

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    Hyuuga Erina

    Hyuuga Erina Entusiasta

    Escorpión
    Miembro desde:
    19 Diciembre 2011
    Mensajes:
    58
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    Espérame...pronto iré contigo.
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1383
    Hola! Les estoy trayendo un original para la actividad “Antes de Morir yo...”
    Bien, es algo así también como la continuación de mi otro original El Mundo ya no me Necesita… por si escribo algo que no se entienda bien…xD bien, sin más, el original…
    Espérame...pronto iré contigo.
    Era el tercer día de la eliminación, Thalia se encontraba en la orilla de su cama pensando… Ella era la sexta, y temía saber a quien le tocaba…Su corazón anelaba que no fuera él, pero sabía… si, ella sabía bien que Leo era el tercero. En su mente se cuestionaba como debería actuar en una situación así, la persona que más amaba estaba a unas horas de ser eliminado. Aunque eso no fuera como la muerte, se le acercaba…a veces, ella lo creía incluso más doloroso.
    Leo, por otra parte, se encontraba en el baño de su habitación. Estaba quieto, enfrente del espejo, contemplando la cifra III marcada en su brazo. Y la imagen de un león con alas sobre su pecho. Unos segundos después suspiró. “Antes de morir… Sólo quiero estar con ella.” Pensó él. Se cambió, y salió de su habitación. En la puerta se encontró con Luzyana.
    —Hola, Luzy…—dijo apartando un poco la vista. —Yo.. este.. necesito que me hagas un favor.
    Ésta sonrió de lado.
    —Lo que desées, Leo. —dijo ella sonriendo.
    Leo le dijo al oído lo que necesitaba. Ella sonrió, asintió, y se dispuso a irse.
    —Gracias por todo. —dijo Leo antes de que ella se fuera.
    Ella se dió rápidamnte la vuelta para que el no la viera.
    —No es nada… es… es mi deber. —dijo ella tartamudeando.
    Ella se dirijió a la habitación de Thalia. Mientras que él, se dirigió al patio de atrás.
    Toc-toc.
    Thalia seguía en su cama pensativa, y se exaltó.
    —Eh-eh, a-adelante. —dijo tartamudeando.
    La puerta se abrió, Luzy entró y cerró la puerta detrás de ella.
    —Ah Luzy —dijo Thalia aliviada. —.¿Sucede algo?
    —Leo quiere verte en el patio trasero. —contestó Luzyana.
    Thalia sonrió.
    —De acuerdo, estaré allí en un segundo. —dijo levantandose.
    Luzyana se retiró. Thalia se cambió, y se arregló un poco, nada de maquillaje, a él no le gustaba.
    Salió de su habitación, y se dirijió al patio trasero, cuestionandose todavía como iba actuar en frente de él, pero al final, decidió dejar de pensarlo. Ya no era necesario, sólo tenía que actuar como si todo estaba bien, así que como lo querría él.
    Cruzó la cocina, y salió por la puerta hasta el patio. Bajo sus pies, se extendía un gran terreno lleno de pasto verde, hasta llegar al bosque que se hallaba más atras. Unos cuantos árboles enanos, un par de rosales de distintos colores, y una laguna en el lado izquierdo. Él la esperaba debajo del árbol mas alto.
    Él le sonrió al verla llegar.
    —¿Y bien? —dijo ella. —¿Para que me citaste?
    Él la miró sonriente y suspiró.
    —Que fría. —dijo él.
    Ella rió, y lo miró divertida.
    —Solo te estoy imitando. —dijo ella sin dejar de reírse.
    Él estaba feliz, verla sonreír era lo único que necesitaba para olvidarse de todo.
    —¿En serio soy tan así? —Preguntó.
    Ella asintió. Y se lanzó sobre él abrazandolo.
    —Pero así es la persona de la que me enamoré. —dijo ella a su oído.
    Ambos se rieron.
    Leo se sentó debajo del árbol, y se apoyó en el tronco. Thalia, se acomodó sobre el pecho de él, mientras él la rodeaba con el brazo. No necesitaban palabras, ambos se conocían bien, siempre habían estado juntos.
    —Cántame algo. —dijo ella.
    Thalia adoraba escucharlo cantar para ella. Leo tarateaba “Te voy a amar”-Axel-, y ella cerró los ojos.
    —Lo digo en serio. —dijo Leo cuando terminó.
    Thalia lo miró extrañada.
    —La letra de la canción, lo digo en serio. —dijo él.
    —Creo que no escuché la letra de la canción. —dijo ella divertida.
    Él sonrió.
    —Te voy a amar, ahora, y por siempre. Siempre te elegiré a tí y solo a tí. Soy, fuí, y seré el que te cuide como tu ángel guardián. —dijo mientras la tomaba del mentón, y se acercaba.
    Se acercó más y más, y fundió sus labios en un dulce y tierno beso. Al separarse, ella sonrió.
    —¿Si? Dime más. —dijo ella.
    —En un beso tuyo siempre encuentro mi paz. —dijo mientras la besaba nuevamente.
    Para cuando los dos se dieron cuenta, el sol ya había comenzado a bajar. Cuando Thalia se precató de ello su expreción cambió. Se levantó, sus ojos se cristalisaron. Ella no quería que Leo la viera así. Sin pensarlo dos veces salió corriendo. Leo se levantó en seguida, y la observó irse corriendo. Sonrió de lado. En seguida se dispuso a seguirla, lo que no le costaría demasiado a él, después de todo, no existia nadie más rápido que él.
    La encontró parada en el medio de la pequeña laguna.
    —No es justo, ¿Sabes? —dijo él. —Yo no puedo caminar sobre el agua.
    —Y yo no tengo la velocidad de la luz. —dijo ella.
    Sonrió de lado.
    —¿No te darás vuelta? —dijo él.
    Su voz sonaba apagada. Quería verla una vez más, solo una vez mas antes de irse.
    —Tengo miedo. —dijo ella sin darse vuelta.
    Él la miró extrañado.
    —Temo que cuando me dé vuelta desaparesacas. —dijo ella sollozando.
    Thalia comenzó a caminar hacia adelante, saliendo de la laguna.
    Leo miró el atardecer con nostalgia.
    —El que desaparesca o no, no depende de nosotros. —dijo él.
    Thalia seguía avanzando. Leo esperó a que estuviera a unos metros sobre la tierra. Cuando ella lo hiso, él apareció a su espalda. Se acercó y la abrazó de atrás.
    Turn around bright eyes…(Total eclipse of de heart -Glee-)—le cantó al oído.
    A él le encantaban los ojos de ella, los adoraba. Volteate, ojos brillantes…Amaba como brillaban cuando estaba con él.
    Al escuchar ésto, ella no pudo contenerlo, las lagrimas brotaron de sus ojos sin parar.
    —Perdón por irme antes... perdón por dejarte sola. —dijo él. —Te amo.
    Ella no respondió.
    —¿No vas a decir nada? —preguntó.
    —Tu sabes bien lo que siento por tí. —dijo ella sollozando.
    —Te amo… Ahora, antes y por siempre…Siempre estuvimos juntos… Y no será esto lo que nos separe… te seguiré incluso en la muerte, en el cielo, el infierno, o a donde sea que vayamos. Espérame… pronto estaré contigo. —dijo ella.
    —Te amo…—dijo una vez más.
    El cuerpo de Leo comenzó a desaparecer, hasta que no quedó nada, dejándola sola a su amada.
    —Espérame…pronto iré contigo…—dijo una vez más.
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    ¿Qué les pareció?
    Espero que les haya gustado, bien, quería aclarar que es la primera historia que escribo en tercera persona. Huf~ fue un poquito complicadoo~ xD
    Bien, gracias por leer!
    Nos vemos~
     
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