Confesión

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por Wicherk, 22 Febrero 2011.

  1.  
    Wicherk

    Wicherk Entusiasta

    Virgo
    Miembro desde:
    26 Enero 2011
    Mensajes:
    67
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Confesión
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1050
    Título: Confesión
    Summary: ---
    Tipo: ---
    Cantidad de palabras: 950.
    Clasificación: 13+
    Advertencias: Creo que ninguna.
    Beteado por: HyuggaTenTen

    -------------------------------------------------------------------------------------------------------------
    Aquella época era difícil, todos querían seguir adelante y olvidar el pasado, al menos los ciudadanos que sufrieron innecesariamente en la guerra que acababa de arrasar el país, o eso opinaban mis padres, los que realmente la vivieron y sabían lo que era ,ellos y los viejos perros de la alta política no querían olvidar lo pasado, hasta el punto de dividir nuestro país, ¡imagínense, dividirlo en una época que debería ser de cooperación!, pero bueno, tendría que conformarme con que por lo menos en nuestra Alemania, esa era la ideología, en ese tiempo y aun ahora no me importaba nada de eso.

    Que puedo decir, éramos una nueva generación, no sabíamos de guerras pero no éramos estúpidos, se podía ver el desastre causado, pero la vida tiene que seguir y no quedaba más que aprender de lo sucedido.

    Trabajar y hacer dinero era lo único que podía hacer, conseguir manera de pagar el alquiler y con suerte comprar algo de ropa, no tenía demasiado para preocuparme, siempre pensé que la única manera de ser feliz era manteniendo la vida simple.

    Ese día, al regresar del inmundo bar en el que trabajaba –entre coqueteos y movimientos rápidos evitando que alguna mano lograse posarse en mi culo, pero claro nena, todo sin perder la sonrisa, las propinas las pone el carisma–, decidí dirigirme al centro, pasar por las tiendas y comprar todo lo que pueda; no sé si me entenderán, pero si me gusta, lo quiero y cuando lo puedo comprar el sentimiento es increíble, así que ¿por qué no sentirme así en cada vez que me lo pudiera permitir?

    Cuando el sol amenazaba con empezar a caer emprendí el regreso a casa, nunca me imagine lo que sucedería por simplemente tomar un camino diferente al usual.

    Al llegar al parque me sorprendió ver a dos pequeños niños jugando en el solitario lugar, me sorprendió no ver a alguna persona que pareciera ser la madre o el padre cerca.

    –Hola ¿están bien? –Pregunté mientras acercaba.

    –H-ola…- Me respondió el más pequeño, me pareció tan tierno ese dulce tartamudeo en su voz infantil –M-Me llamo Adelbert.

    Desvié la mirada hacia el otro niño que me observaba desde una distancia prudente y le hice la misma pregunta, pero esté no me respondió, fue Adelbert quien lo hizo.

    –Él se llama Ernest– Mientras miraba a su compañero de juegos.

    –Bueno mucho gusto, mi nombre es Frieda, ¿y su madre dónde está?

    –No lo sabemos –Contestó el mayor con cierta pizca de odio en su voz.

    –Pero ¿ella los dejo acá solos? ¿No les avisó cuando vendría por ustedes?

    –No, nos dejo acá hace ya mucho –Respondió Ernest, mientras con paso decidido se puso detrás del menor.

    Decidía a ayudarles, me agache y empecé a buscar entre mis bolsas algunas prendas para dejárselas, no podría dejar a aquellas criaturas completamente a su suerte.

    –N-no señora, no se preocupe, no n-necesitamos nada, solo tenemos que esperar, ya nuestra m-madre llegara en cualquier momento –Fue lo que me respondió el más pequeño, sentí tanta tristeza al oír esas palabras, el cómo aun después de ser abandonados así, seguían confiando en que volverían por ellos.

    –Insisto, quiero ayudarles, ¿por qué no duermen en mi casa? No tengo gran cosa pero estarán mejor que acá afuera.

    –Frida, no deberías invitarnos así a tu casa podrías arrepentirte –Esto fue lo que me dijo Ernest, fue a partir de ese momento, que muy en el fondo, entendí que algo no estaba bien, el cómo ese niño me miro, la forma en la que pronuncio cada palabra, algo en el me hizo sentir un fuerte escalofrió que recorrió mi espina –De hecho, debería irse ahora mismo, créame que no querrá que caiga la noche

    –No entiendo lo que me dices, ¿por qué no querré que caiga la noche?

    –Porque nosotros no debemos estar aquí y, aunque volvemos, siempre debemos regresar a donde pertenecemos –Contesto Ernest- –Aunque parece que ya es tarde, si va a correr este es el momento –Contesto mientras su sonrisa se ensanchaba conforme las sombras de la noche caían.

    Cuando el ultimo rayo de sol se esfumo en el horizonte, la sonrisa de Ernest se volvió aun más amplia y su mirada tan vacía; estaba tan absorta observando la macabra sonrisa en el niño que apenas pude percatarme que aquello ya no era un niño, media más de dos metros y por mucho que intentaba ver sus facciones, no podía, su rostro era solo una sombra, lo único que podía distinguir era aquella sonrisa y esos ojos vacios.

    Aun atontada fije la mirada en el otro niño, su cuerpo había deteriorado, podía ver como la podrida piel parecía estar fusionada con los huesos de su cráneo, ya no era un niño, si no un cadáver que, en cierta forma, me miraba con tristeza.

    Cuando el ahora alto Ernest empezó a moverse, fue en ese instante que mis instintos de supervivencia se dispararon, la adrenalina lleno todo mi cuerpo, me di la vuelta y empecé a correr desesperadamente; no sé cuánto tiempo corrí, simplemente seguí hasta que mi cuerpo no pudo más, nunca me detuve para mirar atrás, estaba segura de que si me atrevía a hacerlo moriría.

    Esto es algo que jamás me he atrevido a decirle a nadie, escribo esto con la intención de desahogarme, para tal vez así poder al fin expulsarlo de mi sistema.

    A veces cuando estoy en una habitación oscura, tengo esa sensación de estar a punto de ser atrapada y un escalofrió parecido al de esa noche recorre mi cuerpo, pero cuando me doy la vuelta solo hay sombras pero el sentimiento de ser observada, esa sensación desde aquel día… jamás desapareció.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  2.  
    Quelconque

    Quelconque Usuario popular

    Virgo
    Miembro desde:
    8 Febrero 2004
    Mensajes:
    790
    Pluma de
    Escritor
    A veces damos por hecho lo que vemos, pensamos que es simple, cuando podría ser algo mucho más allá de nuestro entendimiento y lo que nuestros sentidos nos permiten percibir. Me dejó esa sensación de temor al ir descubriendo lo que eran en realidad esas dos criaturas aunque, a decir verdad, el título sugiere alguna otra cosa y poco o casi nada tiene que ver con la historia. Pero eso es algo que con el tiempo podrás ir mejorando :)

    Saludos.
     
  3.  
    Almazaran

    Almazaran Iniciado

    Acuario
    Miembro desde:
    21 Febrero 2009
    Mensajes:
    15
    Pluma de
    Escritor
    Buf interesante, me ha gustado ^^
    Sinceramente las sensaciones del final me las he podido imaginar perfectamente, alguna vez me ha pasado que me he sentido observado.

    Buen trabajo, sigue así!
     

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso