ADHumanos: Inicio

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por RosaNegraRosaClara, 9 Enero 2012.

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  1. Título:
    ADHumanos: Inicio
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Fantasmas
    Total de capítulos:
    6
     
    Palabras:
    3829
    RESUMEN
    ADhumanos trata sobre el mundo de los humanos que vive engañado sin conocer la existencia de los Anjells & Daimers, todos los seres míticos y fantasiosos que creen que solo están en su imaginación, incluso seres que nunca an visto ni escuchado de ellos, estos seres son rivales naturales pero que se mantienen al margen de los humanos, los Daimers (son los Vampiros, Licántropos, Dioses del Fuego,…) y los Anjells (son los Magos, Elfos, Ángeles Blancos,…)…

    Esta es la historia de Daniell "Dan", un chico que no es muy común, y vaya que no lo es, solo es mitad humano, su madre es una vampiresa y una muy poderosa. Sus últimos dos años y medio de vida los paso en Europa, pero regreso a su país hace poco, listo para encontrarse con sus antiguos amigos de infancia, los otros protagonistas, Toru (Daimer) y Haru (Anjell). Tras su llegada ocurren muchos eventos entre ellos la revelación de los Daimers y Anjells ante los humanos, Además de un problema mayor que lleva años en secreto a todos, los problemas se acercan demasiado pero Dan intentara detenerlos.

    ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~​
    1° PLUMA ~ OCULTOS
    Están ocultos en el mundo, nadie sabe de su existencia, esos son los Anjells y daimers. Ellos tienen una batalla eterna desde hace muchos siglos, pertenecen a este mundo pero no muestran su verdadera identidad, para que termine la destrucción y masacre entre las dos razas, desde hace años han intentado que por medio de un matrimonio se unan.
    Según el acuerdo la más importante de las familias Anjells, la Kihomi hizo un convenio con la familia Kazahana, una de las tres familias Daimers mas importantes del mundo, la Anjell Haru Kihomi y el Daimer Toru Kazahana deben casarse para unir a las dos razas, desde su nacimiento se hizo este Acuerdo………
    — ) ( —
    Casa de Acamura Yuken. Daimer Principal del Mundo.

    — Hijo, ya es hora de ir a clases, Daniell — dijo en voz fuerte una mujer de cabello marrón (Acamura Yuken).

    — Mama ya voy, no es tan tarde — respondió “el muy puntual” Daniell.

    — Daniell, mira tú reloj — le ordeno Acamura a su hijo. Su hijo se pasaba, era perezoso hasta la muerte y ni lo admitía.

    Daniell mira su reloj y habla.

    — Mama, no es tan tarde y ya te dije que me digas, Dan — replico Daniell — Daniell suena muy formal — replico otra vez.

    — Si te llamo Dan pero cuando te regaño, tu nombre completo, chico desobediente — le explico Acamura a su hijo.

    — Mama, solo son 5 minutos, ni que no quisiera ir, quiero ver como a estado Tor — dijo Dan.

    — Hmp, y ¿Por qué? — pregunto Acamura con cierta molestia en su voz, no es que no quisiera a Toru pero ella no era muy dada digamos a, confiar en la gente y no confiaba en que su hijo se llevara buenas cosas y noticias al volver a verlo.

    — Como que por qué, él era mi mejor amigo antes de que nos mudáramos por tu trabajo de embajadora principal daimer — le respondió Daniell a su madre. El si tenía muchos deseos de volver a ver a su mejor amigo ya alguien…más.

    — Dan, fue hace dos años y medio — le recordó Acamura, esperaba que asi su hijo entendiera el mensaje aunque aun cabía la posibilidad de estar equivocada, no lo parecía y ella no lo decía pero era una madre muy protectora y amorosa.

    — No exageres, además, no conozco a muchos daimers en este lugar — repuso Dan y pues era verdad, se acordaba de muy poquitos otros chicos además de su amigo Toru.

    — Podrías conocer humanos, no es ilegal, aunque…no he visto a un humano en mucho tiempo, no sé si sea una buena idea que los traigas aquí — dijo Acamura. Eso le recordó algo a Dan, algo que a él le importaba mucho.

    — Mama, se que papa era un humano pero nada más — comenzó — porque no me cuentas de él — sugirió tanteando el terreno, nunca lo había hecho, eso de preguntarle por él, por varias razones, la primera fue de niño cuando vio a su madre más triste que nunca solo por observar su foto la cual ya no recuerda, la segunda cuando una mujer la insulto diciéndole que necesitaba de un hombre porque era mala madre soltera, su madre era juvenil pero Dan podría jurar que era mucho mejor que muchas madres, o mejor, que todas y la tercera era lo mucho que lo enorgullecía que ella lo hiciera de padre y muy bien a su parecer, estaba orgulloso y feliz de tener una madre asi, sabía que su padre era un tema delicado eh cuanto a ella y que debía tener cuidado — ni siquiera sé cómo era, no me has mostrado ninguna foto — pregunto ilusionado, quizás hasta podía mostrarle una foto de su papa, si se podía claro, quizás ella no quería algo que se lo recordara y volviera a llorar, Dan prefería ver a su mama fuerte y muy feliz, incluso con otro hombre si ella asi lo quería, una vez tuvo la idea de que quizás sería hermanito de Harena pero jamás se dio aunque aun creía firmemente que si su mama salió de nuevo con un hombre, ese sería el.

    — El vivió hace mucho, murió defendiéndome de otro Daimer — conto con tristeza en sus ojos, a Dan lo le agrado ver eso pero sabía que no se podía evitar, solo seria una vez para conocerlo un poco — porque al casarme con un humano y tan joven muchos me vieron como un blanco fácil a quien matar, los Daimers, como ya sabes, aumentan su energía destruyéndose entre sí — claro, Dan recordaba eso y era triste que muchos hicieran eso porque el también era de esa raza — él ni siquiera sabía que estaba embaraza ni yo en ese entonces — eso definitivamente no le gusto y le dio mucho tristeza, su padre ni lo supo, ¿le habría agradado de haberlo sabido?, Dan jamás conocería esa respuesta — me regrese con mi familia, estaba tan triste que no quería ni hablar, después no volví a pisar el mundo humano hasta varios años después — pobre, pensó Dan, su mama enserio sufrió, como le daban ganas a el de viajar en el tiempo y detener al asesino de su padre, no para conocerlo sino para que su madre nunca se viera asi de triste como la tenía enfrente — pero tú tienes solo unos cuantos años menos que él y aun así eres idéntico, casi te diría que lo estoy viendo a él, tú no te pareces en nada físico a mí, salvo ya sabes — continuo contando esta vez algo de él, ella lo extrañaba pero sabía lo contento que pondría a su hijo saber algo de él. De su Lyon, su Lyon que nunca supo que esperaban a su hijo pero que ella estaba segura que primero se hubiera quedado pasmado de la noticia y luego hubiera estado más que feliz.

    — Mama, no quería ponerte triste, perdón — se disculpo Dan con su madre al ver que quería comenzar a llorar.

    — No, está bien Dan, hace mucho lo supere, aunque te llamas Daniell porque el siempre me dijo que si se cambiaba su nombre se llamaría así, no dejaba de decirlo en broma todo el tiempo — le conto Acamura a su hijo.

    — Ya me tengo que ir pero quisiera que me contaras mas sobre él cuando vuelva y que me digieras como es que en momentos eres tan cruel y luego tan amable, me dejas algo confundido — le pregunta Dan a su madre aunque la segunda en broma ya que él tiene mucho de haberse acostumbrado a ella y después de decir eso se va por la puerta apurado, Daniell Somerku era igual de “responsable” que Lyon Somerku.

    En la inmensa Casa de los Kihomi.

    Llega a ella Toru Kazahana y toca el timbre. Un hombre joven se asoma por la ventana y abre.

    — Toru Kazahana, ¿qué haces aquí? — pregunto un hombre de cabello azul, sorprendido y confundido y mirándolo receloso, no le gustaba que hombres visitaran a su Haru y menos hombres que estaban comprometidos con ella.

    — Vine para acompañar a la escuela a Haru — respondió Toru con naturalidad.

    — ¿Por qué? — pregunto el mismo hombre confundido pero ahora enojado, definitivamente ahora si no le gustaba que visitaran a su Haru.

    — Ya que me debó casar con su hija cuando ella sea mayor de edad, al menos quisiera conocerla más, antes del trágico día — respondió el joven Daimer de cabello oscuro, le dejo pasar lo de trágico día solo porque demostraba desprecio por el matrimonio arreglado, quizás de grande se hartaba y abandonaba todo, sabía que su Haru era demasiado buena como para hacer lo mismo.

    — Por un momento olvide que eres su prometido — dijo aquel hombre medio llorando, su pobre y pequeña Haru, como permitía que se la llevaran — como diablos deje que entregaran a mi linda hija a algún idiota, nunca debí aceptar — dijo enojado levantando un puño, a vaya que era infantil.

    — ¡Ya cayate idiota!, si se ban casar, al menos que se conozcan mejor, deja de molestar — hablo enojada una mujer pelirroja y golpeo con el palo de una escoba a aquel hombre, no, no era la sirvienta pero ya que la sirvienta le ofreció amablemente la escoba como rechazarla, para golpear a su marido. A veces Riuko Kihomi no se media en sus tonterías.

    — Hola señora Sameda, ¿como esta? — la saludo Toru. Ella le caía bien, claro, no era como el maridito que tenia.

    — Hola Toru, pasa, mi hija ya baja — le aviso y saludo la mujer pelirroja de nombre Sameda, que ya es obvio que es la esposa.

    — Auuuuhhh — se quejo el hombre de azul cabello, su esposa era buena, pero a veces parecía que solo un 10 porciento del tiempo.

    Unos minutos más tarde en la sala de la “Casa” Kihomi.

    Una chica de cabello azul se ve bajando las escaleras.

    — Hola Toru — lo saludo y este sonrió al verla, el problema era este…el solo veía bajar a su casi hermanita, no a una mujer.

    — Hola Haru, ¿nos vamos? — correspondió el saludo pensando que definitivamente los milagros no existían, tendría que casarse con Haru, quien le diría la sorpresa que se llevaría después, nuevas y recién llegadas sorpresas futuras.

    — Vamos entonces — dijo ella alegre, ella también se llevaría una sorpresa.

    Después de un rato de caminar mucho y recordar su infancia sorpresivamente sintieron nostalgia por Dan, su amigo que hace casi tres años que no veían, quien sabe porque había venido justo hoy a sus mentes el chico Pelirrojo. Después de un rato mas de caminata llegaron a la escuela y ambos se fueron despidiéndose con un simple adiós a sus salones, ya que Haru iba en primero y Toru en segundo, el era un año mayor igual que Dan.

    En el salón de Toru [2C]

    El maestro entro pero raramente no cerró la puerta.

    — Muchachos, tenemos a un nuevo estudiante que a regresado de Europa, su nombre es Daniell Somerku — les informo a los alumnos su maestro.

    Eh, ¿dijo somerku? — pensó sorprendido Toru. De repente le vino la alegría, Somerku no era muy común pero aparte también dijo Europa.

    Daniell pasa a adentro del salón.

    — Ah, hola Dan — le saludo Toru que ya tenía claro quién era su nuevo compañero.
    — Hola Tor, hace mucho que no te veía — le contesto Dan, feliz de volver a tener a su molesto, exagerado pero sobre todo buen amigo.

    — Oh genial, mas dolores de cabeza — expreso el maestro su fastidio, si eran tan amigos ya se imaginaba lo que harían si con un Toru era más que suficiente para ir a cardiología diario, el ya lo hacía.

    — Que exagerado profe — le reclamo Toru aunque no tenia fundamentos para hacerlo.

    Dos horas más tarde. En el descanso.

    — Oye ¿cómo has estado Dan?, ¿Alguna europea que hayas traído? — pregunto Toru, curioso.

    — No Tor, no eh salido con nadie — respondió el “honesto” Dan.

    — Si tú, cómo no — dijo Toru con ironía. El no le creía nada, Dan ¿sin mujer? como no.

    — Está bien, si salí con algunas pero ahorita no, nada — respondió Dan.

    — Aguafiestas — dijo Toru decepcionado. Oye, no todos podían ser el, amantes de media escuela.

    — Y ¿tú? — pregunto Dan, el sí que lo le creería si le decía nada también.

    — Ah, ni importa con quien salga, recuerdas, desde que nací estoy comprometido con la Angel — dijo Toru sin muchas ganas ni ánimos, de verdad la situación no le hacía gracia alguna.

    — A sí, pero es por el bien de todos, las batallas entre las dos razas causan muchos problemas aunque, es horrible casarse así — le dijo Dan a su amigo.

    — Hablando de la Angel — dijo Toru.

    — ¿Qué? — pregunto Dan

    — Voy a buscarla ahora — respondió Toru.

    — ¿Por qué? — le pregunto Dan pero Toru no comprendió la verdadera razón de su tono brusco.

    — Porque quiero conocerla más si ya de plano me voy a quedar con ella toda mi vida — le respondió Toru fastidiado, no le hacía nadita feliz eso de toda mi vida.

    — Ahora que lo pienso, no es visto a Haru desde hace mucho, ¿cómo es? — pregunto Dan curioso, como seria ahora su tierna amiga.

    — Pues es muy amable, linda, tímida — la describió — pero no me gusta — replico — no es mi tipo y además es menor que yo y yo no me fijo en las más chicas jamás, ¿entiendes mi problema? — explico.

    — Uy que mal para ti, pero hasta donde dice mi mama, un Anjell y un Daimer deben unir las dos razas por matrimonio y no cualquiera, sino las familias más importantes, ya sabes, los más poderosos — dijo Dan.

    — Sí, pero porque yo, hay tres familias Daimers igual de importantes — reclamo Toru.
    — Una, yo soy mitadhumano y quizás se creyo no que no lo aceptarían, ya sabes cómo son los Anjells, Dos, la otra opción era Harena y el líder Anjell solo tenía una hija, Haru, y Tres, mi mama detesta a tu papa y al papa de Haru, al menos eso hemos visto nosotros — explico Dan como si nada, claro, el no era el del problema, pensó Toru.

    — ¿Te das cuenta que estas culpando a tu mama? — le dijo Toru con diversión.

    — Que acaso ya no te acuerdas de mi mama, creo que las dos primeras son secundarias, la importante es la tres — expuso Dan

    — Cierto — afirmo Toru. También fingiendo que no quería reír.

    — Bueno ¿y Haru?, no se suponía que la ibas a buscar — le recordó Dan.

    — Cierto — respondió Toru.

    Toru y Dan se van al salón 1A

    Una chica de cabello café claro aparece enfrente de ellos

    — Hola, ¿que buscan? — les pregunto la chica de cabello café.

    — Busco a haru kihomi — respondió Toru al instante.

    — Ah, ahoritita le hablo — contesto la chica.

    La chica se fue a dentro del salón.

    — Haru un chico muy lindo de segundo te busca, ¿qué rayos hiciste para que un chico tan lindo te busque?, que envidia y su acompañante también es muy atractivo — le informo la chica a su amiga de cabello azul claro.

    — Mal pensada, tienes la mente llena de rarezas, deja de decir esas cosas, estas muy traumada Kara — le replico Haru — además, tienes novio, cornuda — la regaño.

    — Pero si son lindos, y uno te busca, que esperas para irte con él niña — dijo Kara muy animada.

    Kara avienta a haru en dirección hacia la puerta y Haru sigue el camino hasta toparse con Toru.

    — Hola, ¿quién es el que me dijeron que estaba contigo?, no veo a nadie — le pregunto Haru a Toru.

    — Ah, era Dan que regreso de Europa, estaba aquí pero le dio sed y fue a comprar algo a una maquina — respondió Toru.

    Dan esta aquí, no lo eh visto desde hace mucho y si ya no me recuerda, me acuerdo que me gustaba mucho y lo peor es que todavía me gusta — pensó mientras se sentía un poco deprimida.

    Entonces Dan regresa.

    — Mira Dan, ella es la misma Haru, aunque cambio un poco — decía Toru mientras miraba a Haru.

    — Hola — dijo Dan — que linda es, y con esto te vas a casar Toru, desgraciado suertudo — pensó molesto con su amigo e impresionado al ver a su hermosa amiga.


    CONTINUARA

    Ocultos ~ Capitulo 01
    © Por Lyzz Alias RpsaNegraRosaClara
     
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  2. Título:
    ADHumanos: Inicio
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Fantasmas
    Total de capítulos:
    6
     
    Palabras:
    3334
    2° PLUMA ~ LO QUE PASO EN ESTOS AÑOS
    — Haru, ahora me doy cuenta que hace mucho que no te veía, de verdad si él no me dice que eres tú, no te reconozco — dijo Dan señalando a Toru.
    — No seas exagerado — lo regaño Toru.
    — Yo me esperaba hallar a mi amiga de la infancia, no a ella — reafirmo Dan.
    — Ahora ya no entiendo, ¿a qué te refieres? — pregunto Toru confundido.
    — Es muy diferente y linda — explico Dan.
    — Aaaahhhhh, pues creo que tienes razón en eso — reitero Toru.
    — Verdad — exclamo Dan — a perdón haru, nos pudimos hablar de ti y te dejamos a un lado.
    — Saben yo tengo hambre, vamos a comer — interrumpió Toru.
    — Si, oye haru nos vas a acompañar — pregunto Dan esperando un sí, ansioso.
    Quiere que lo acompañe — pensó Haru — a si, voy con ustedes — respondió animada.
    En el comedor
    Parece que todas las chicas quedaron intrigadas por dan desde que puso un pie adentro del lugar, no dejaban de hablar de lo lindo que les parecía.
    — Dan ¿qué estuviste haciendo en Europa? — pregunto Toru curioso.
    Mi mama me llevo a conocer todos los lugares y cosas que tuvieran que ver ángeles y daimers, y me obligo a aprender combate ella tiene una voluntad de acero, créeme cuando te digo que no la puedes contradecir — respondió Dan.
    Haru se ríe.
    — Es enserio, es perversa cuando se enoja, estoy hablando enserio Haru — rezongo Dan indignado.
    — Dan es gracioso porque es cierto, nosotros si conocemos a tu mama — se explico Toru.
    — Ah gracias por reírte eh — se quejo Dan.
    — Haru también se rio — se defendió Toru.
    — Si pero haru es muy linda y tu eres mi idiota amigo, así que se lo dejare pasar a Haru — respondió Dan.
    — Ja-ja, que gracioso Dan, mira como me rio — ironizó Toru — no puedes poner a tu mejor amigo de la infancia sobre haru solo porque es agradable.
    — No, claro que no, yo dije que era porque es linda no porque es agradable — lo corrigió Dan ignorando su infantil queja.
    — A pero que fijadito — se quejo Toru como hermanito mayor sobreprotector.
    — Toru cuando salgamos de la escuela te llevare a comprar lentes — interrumpió Dan.
    — ¿Eh? — dijo Toru sin entender nada.
    — Porque debes de estar ciego, haru es muy atractiva — respondió Dan las dudas de Toru.
    — Payaso — lo insulto Toru enojado.
    — Yo solo estoy bromeando ¿verdad Haru? — se disculpo Dan.
    — A esto supongo — dijo Haru un tanto tímida, estaba algo avergonzada de oír hablar de ella y que fuera justo Dan el que lo digiera.
    — Excepto en lo de que haru es muy linda, debes de estar ciego para no darte cuenta — repuso dan divertido.
    — Idiota — lo insulto Toru.
    — ¿Qué? — pregunto Dan sin mucho arrepentimiento.
    — Mira como dejaste de roja a Haru — se explico Toru.
    — No creo que haru le importe ¿oh si haru? — se excuso Dan, y voltea para ver a una chica de largo cabello azul muy sonrojada.
    — Vez — dijo Toru.
    — Oficialmente digo que eres un idiota Toru, si yo fuera el que me casara con ella estaría feliz, eres un malagradecido — se quejo Dan.
    — ¿Por qué? — pregunto Toru algo sorprendido y confuso.
    — Por no apreciar las cosas buenas que te da la vida, en este caso la chica linda que te da la vida — se explico Dan.
    — Ja-já, que graciosito resultaste pero ya deja de molestar a Haru — se quejo Toru.
    — Bien, perdón Haru, ya no te molestare, aunque no me retracto de lo que dije me agrado verte otra vez — se ¿disculpo? Dan.
    — A mí también — le respondió Haru.
    — Ah con tus idioteces ya se nos acabo el tiempo, ya debemos regresar a las horribles clases — se quejo Toru enojado, el no era de esos a los que les encanta estudiar mucho que digamos.
    — No exageres — se quejo Dan.
    — ¿Quién eres y que hiciste con Dan? — soltó de pronto Toru.
    Dan le dio un golpe en la cabeza.
    — Tor eres más exagerado de lo que recordaba — se quejo Dan.
    — Pero si el siempre ha sido así — los interrumpió Haru.
    — Tu también Haru — se quejo Toru.
    — Bueno ya me debó ir a clase adiós — se despidió Haru.
    — Adiós — se despidió Dan.
    — Adiós — se despidió Toru.
    Minutos más tarde en Segundo C.
    — Dan, odio la escuela — se quejo infantilmente.
    — Toru no seas quejumbroso, te pasas de exagerado — lo regaño Dan.
    — Pero es aburrida — se quejo de nuevo.
    — Pues tú no fuiste enseñado por tu mama aparte de las horas normales de escuela por dos años y medio, así que no conoces el sufrimiento — le dijo recordando su dolor con Acamura yuken.
    — Si es un poco malo pero aun así, me llamas a mi exagerado ¿no te mordiste la lengua? — le recrimino Toru.
    — Me refería a ser enseñado por Acamura Yuken, no hablaba de lo del estudio extra — aclaro Dan.
    — Bueno cuando lo pones así Dan…te compadezco — le dijo imaginándose lo que sería tener a Acamura yuken de maestra y lo que le haría si no acertaba, después de todo era una Daimer tipo Vampiresa.
    Más tarde cuando las clases acabaron.
    — Oye Dan, te invito a mi casa — le propuso Toru.
    — Deja le marco a mi mama, le dije que quería que habláramos de algo — le dice a Toru y marca un numero en su celular.
    Llamada telefónica:
    Mama, voy a la casa de Toru, en un rato me voy — le explico Dan.
    Está bien Dan — le dijo su madre.
    Cuando regrese hablamos de él ¿sí? — dijo Dan.
    Ok Dan, adiós — dice Acamura y cuelga — este niño tiene la memoria de su padre, no hay duda, supongo que tiene derecho a saber de él después de todo — suspiro.
    En casa de Toru unos minutos después.
    — Vaya Daniell, no te había visto desde hace mucho — dijo un hombre de cabello café oscuro casi negro (Suken).
    — ¿Papa no te importa que lo haya invitado verdad? — pregunto Toru a el hombre de nombre Suken.
    — Claro que no, el me cae muy bien — dijo — es claro que tiene todo del padre — susurro pero Dan puso mala cara.
    — Lo escuche — le recrimino Dan con mirada acusadora.
    — A miren la hora, me debó ir a hacer algo lejos de aquí, me voy — dice y se va tan rápido como le es posible.
    — Valiente padre tengo, pero sígueme contando de lo que hiciste en europa — dijo Toru.
    — Pues la verdad hice un montón de cosas pero hay una que me gusta más que todas — respondió Dan.
    — ¿Cuál? — pregunto Toru.
    — No sé si deba hablar de esto en una casa llena de adultos — expreso su preocupación Dan.
    — ¿Eh?, en una casa llena de…aaaaaaah ya entendí, no, habla con toda confianza nadie en mi casa se pasa por la sala, todos se quedan en otros lugares si no fuera por ti esto sería un lote baldío — le explico Toru — pero si quieres mejor nos vamos a mi cuarto ya se me ocurrió que contarte de mí — propuso y Dan asintió.
    — Con que siendo un esposo infiel desde tan joven eh — le dijo, claro refiriéndose a lo de él y Haru.
    — Mira el acuerdo dice que tanto haru como yo nos debemos casar pero tenemos permiso hasta ese cruel momento de salir con otros — le explico Toru.
    — Mejor ya vamos a tu cuarto, siento que estas soltando tus secretos en un lugar no confiable — le dijo a Toru.
    — Bien vamos — dijo Toru y se fueron a su cuarto.
    En el cuarto de Toru.
    Al abrir la puerta se encuentran a una niña de 12 años.
    — Sukei que rayos haces aquí — le reclamo Toru.
    — Hermanito me dijeron que tu lindo amigo Dan estaba aquí — contesto la “inocente” hermana menor de Toru.
    — ¿Solo para coquetearle a un chico mayor que tú, te metiste aquí? — le pregunto.
    — A mí me parece divertido — dijo Dan riendo un poco.
    — Pues a mí no, largo sukei — se quejo y la corrió.
    — Adiós LindoDan — dijo sukei, lo abrazo y se fue hacia la puerta.
    — Sukei tiene cuatro años más, no inventes te ve como una niña pequeña — le dijo cuando salía.
    — Si una niña pequeña adorable, tu hermanita me cayó bien — le dijo dan sonriendo.
    — Dan te estoy hablando enserio, sukei realmente se fijo en ti — le dijo en tono de reproche.
    — Si, en realidad si lo entendí pero me da ternura, tu hermanita es adorable — le dijo sonriendo.
    — Deja de bromear — le dijo Toru un poco molesto.
    — Ya, está bien — lo calmo, no quería morir joven y el Toru sobreprotector quería surgir.
    — Adiós hermi toru, adiós lindo dan — se despidió y salió del cuarto.
    — Adiós — se despidió dan.
    — Adiós sukei, ya vete — se despidió un poco enojado Toru.
    — ¿HermiToru? - pregunto dan con una ceja levantada.
    — Así me dice, es el apodo que me puso — le dijo Toru — tú eres LindoDan, yo soy HermiToru — le explico.
    — Aaaaahhhh! —
    — Bueno ya que se fue la menor de edad, cuéntame lo importante — le dijo Toru ansioso, era curioso por naturaleza y quería saber de su amigo.
    — Tu primero — le dijo dan.
    — Y yo porque — reclamo Toru.
    — De mayor a menor de edad — dijo dan y Toru se resigno.
    — Bien, fue con una de tercero el año pasado — le explico y dan puso cara de asombro.
    — Te aventaste una dos años mayor que tu — exclamo Dan.
    — Siiiiii — dijo el descarado.
    — A pero que cínico — dijo Dan.
    — Te contare — comenzó Toru — salía hace unos 2 meses con ella y estábamos en su casa, no había nadie y de repente sonó el teléfono como ella dejo que dejaran un mensaje yo también escuche lo que le decían, era que no llegaban hasta mañana en la tarde, era la mejor suerte del mundo en cuanto ella lo escucho me tomo de la mano y me llevo hasta su habitación, en ese momento pensé que no había chica mas aventada en el mundo y aun lo creo por cierto.
    — Vaya los privilegios de salir con una más grande, creo — le dijo Dan.
    — Y vaya privilegios, no aprendí mejores cosas con nadie — dijo Toru “el cínico” Kazahana.
    — Bueno voy yo — comenzó Daniell — hmp pues como decirlo, las francesas son únicas, ah pero las españolas tienen mejores cosas que aportar — le dijo con una sonrisa recordando a una chica de cabellos café claro.
    — Oye no dejas mucho a la imaginación — se quejo Toru.
    — Espera ¿quieres que te cuente sobre mi primera vez? o ¿sobre mi mejor recuerdo? ¿Cuál? — le pregunto.
    — El mejor recuerdo, es lo que me ibas a contar abajo ¿no? — contesto Toru.
    Y Dan volvió a pensar en la misma chica.
    — Era una española de nombre Isabela, créeme cuando te digo que ella era buena en eso pero la vez de la que te digo fue la última noche que estuve en España, mi mama dijo que ya nos debíamos mudar otra vez y se lo dije a ella, me espere muchas cosas menos lo que tuve de reacción ella, me dijo “entonces si ya te vas tenemos que despedirnos bien, ven aquí a las 7 de la tarde” — le dijo Dan
    — ¿Y qué paso? — pregunto Toru invadido por la curiosidad, (no se preocupen, no pondré muchos detalles pervertidos en el capitulo).
    — Fui, sabes esa fue la noche más larga que eh tenido en mi vida, fue la mejor créeme incluso ella hasta traía lencería sexy, se veía muy bien — dijo Daniell “el lujurioso” Somerku.
    — Sabes, me acabo de dar cuenta de algo — dijo de repente Toru.
    — ¿De qué? — pregunto Dan.
    — Necesito una novia y extraño a Minai — explico Toru.
    — ¿Minai? — pregunto Dan confundido.
    — Si la de tercero con la que salía el año pasado — explico Toru.
    — Pues ahora con esta plática ya empecé a extrañar a Isabela — confeso Dan.
    — Hace algún tiempo que no estoy con una chica, ya empiezo a sentir necesidad — confeso Toru.
    — Los hombres somos patéticos, las mujeres pueden vivir sin eso pero nosotros nos morimos sin eso — se quejo Dan
    — Asi es, no se puede cambiar la realidad — dijo Toru “el resignado en tonterías” Kazahana.
    — Oye ya me voy, le dije a mi mama que iba a hablar con ella de algo, te veo mañana en el salón — le dijo Dan — a oye, por cierto, tu eres el que todas las mujeres idolatran del que me hablaban en la escuela hoy ¿verdad? — le pregunto riendo.
    Toru frunció el seño.
    — No se dé que me hablas — dijo mintiendo tan mal que ni el mismo se la cree.
    — Si eres tu verdad — se burlo de el — bueno adiós Toru — se despidió.
    — Adiós — le dijo Toru.
    — Bye (bai-adios) imán de mujeres — se “despidió” Dan.
    — Dan, rayos, maldito idiota, ni se te ocurra decir eso aquí eh — le reclamo enojado.
    — Bien, adiós Toru — se despidió esta vez bien, y salió por la puerta directo a la salida de casa y de ahí a la suya.
    En casa de Acamura Yuken y Daniell Somerku.
    Dan encontró al abrir su puerta a su mama apurada a punto de irse.
    — Hijo, mañana hablaremos todo el día desde que llegues de la escuela sobre tu padre, ahora debo irme, parece que hay humanos que saben sobre la existencia de los daimers y los Anjells, me debo ir a la base central de parlamento Anjell-daimer, te veo en la tarde, si no cenas lo que te deje no te quedes sin comer pide algo por teléfono a algún restaurante — le dijo y el asintió.
    — Ok mama te veo después — le dijo.
    — Adiós hijo — se despidió.
    Ella se fue por la puerta.
    — Mi mama dijo que humanos saben de nosotros pero si eso es muy grave, espero que mi mama este bien yendo ahí — dijo Dan preocupado.
    CONTINUARA
    Lo que Paso en Estos Años ~ Capitulo 02
    Hecho por Blue Rose x Lyzz x
     
  3. luego lo acomodo, lo juro pero ahora estoy con tiempo corto, yo no tengo internet propio y aunque compu si debo ir a un lugar con internet gratuito aqui en mi puerto, y pues apenas tuve el tiempo para venir, justamente hoy que al fin despues de unas inmensas vacaciones entre a clases de nuevo. les prometo publicar pronto.
     
  4. Título:
    ADHumanos: Inicio
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Fantasmas
    Total de capítulos:
    6
     
    Palabras:
    3278
    3° PLUMA ~ LA NOTICIA
    Minutos después en la Base Central del Parlamento Anjell|Daimer que era un inmenso edificio antiguo con arquitectura elegante, nadie podría saber que pasaba ahí, tenía una gran puerta café de madera en medio y cientos de ventanas con vidrios polarizados a los lados.
    Apenas Acamura llego empujo la inmensa puerta y la abrió de golpe furiosa.
    — ¡Pero qué diablos pasa!, porque Rayos nadie me aviso antes — se quejo Acamura con enojo.
    — Lo sentimos mucho señora Acamura pero ellos llegaron de repente, dicen que quieren hacer un acuerdo con los daimers y los anjells por eso usted fue llamada, es una de las tres daimers principales, ya están aquí los otros dos daimers principales y el Anjell principal — le explico el Oficial a cargo.
    — ¿En dónde? — pregunto ella.
    — Yo la llevare, acompáñeme — le dijo un oficial de la base.
    — Está bien, vamos — se resigno.
    El oficial llevo a Acamura por los largos pasillos del lugar hasta que entraron a una gigantesca sala.
    — Ya era hora — reclamaron un pelirrojo en tono fuerte y uno de cabello café tan oscuro que parecía negro, el padre de Toru, Suken.
    — Exagerados — obtuvieron como respuesta.
    Repentinamente algo le molesta a Acamura, hay unos pocos humanos ahí pero ella solo mantiene la vista fija en uno, es de cabello anaranjado claro y alto, esto la impresiono un poco pero decide ignorarlo.
    — Solo se parecen nada mas — pensó tratando de calmarse mientras tomaba asiento.
    — Nosotros queremos hacer una alianza con las dos partes debido a que si no tenemos un acuerdo no sabríamos si deberíamos confiar en ustedes — dijo el que parecía ser el líder de la negociación y al parecer era el mismo humano en el que Acamura se fijo.
    — Ah, qué hombre con más valor — lo “alago” Acamura — ¿si sabes que puedes morir por venir sin protección alguna? — le pregunto curiosa por ver su respuesta.
    — Debemos hacer esta negociación — explico el humano — y no vine solo porque quisiera, los demás fueron demasiado cobardes como para venir — concluyo.
    — Bueno, te ganaste mi respeto, no cualquier humano tiene tanto valor, en especial si cree que va directo a su suicidio — le informo Acamura.
    — Hmm si tu lo dices Acamura debe ser por algo, yo también le daré mi confianza al humano — dijo el pelirrojo que antes había hablado cuando Acamura recién llego, al parecer era uno de los tres más importante daimers, el también se había quedado pensativo con respecto a ese humano en particular que lideraba esto pero Acamura leyó sus pensamientos y lo tranquilizo — ¿segura?, quizás solo lo estas subestimando porque es igual a él — dijo mentalmente.
    Hay Taltor, pareciera que no me conoces desde que vivíamos en Shuhaok, yo le doy mi respeto a cualquiera que se lo gane, además, ya te dije que no debíamos preocuparnos por su parecido, sabes que fue lo que le paso a él y está Muerto, no podemos cambiar el hecho de que…Lyon murió — contesto mentalmente Acamura.
    — Bueno que hable si Acamura que es la más desconfiada de todos lo apoya debe ser por algo — dijo Suken que parecía ser el tercer hombre que lideraba a los Daimers.
    — Vaya par de idiotas pero tienen razón, la menos confiada de todos aquí, soy yo — admitió — sigue con tu propuesta humano — dijo.
    — Se propone hacer un pacto con ustedes para que no haya conflictos futuros entre nuestras razas y poco a poco meter información en los países sobre que si es posible la existencia de los Anjells y los Daimers y dentro de algunos años después revelar su existencia como algo verdadero — explico el líder humano de la negociación.
    — Me parece algo sensato, yo estoy de acuerdo — hablo el padre de Haru el cual era el líder de todos los Anjells
    — Yo estoy de acuerdo también — dijo Taltor.
    — Y yo — hablo Suken.
    — Pero la Daimer principal aquí es Acamura — corto Taltor.
    — Ella decide — termino Suken.
    — Vaya que son idiotas completos, ya se les olvido que cuando discutimos sobre dar o no a conocer nuestra existencia hace años yo propuse la idea de hacerlo — los regaño — voto que sí.
    — Entonces está decidido o ¿hay alguien más a quien debó convencer? — dijo el líder de la negociación humana.
    — No, somos los principales del mundo, no hay nadie que tenga poder sobre nosotros — le informo Acamura.
    Había muchas cosas en las cuales ponerse de acuerdo y eso tomo un largo tiempo.
    Varias horas después Acamura regreso a su casa.
    — ¿Mama que rayos paso?, que es eso de que humanos sabían? — le pregunto Dan preocupado.
    — Hicimos un convenio con los humanos, mañana todos serán informados de esto — contesto.
    — ¿Es enserio? —
    — Si pero los humanos se enterara de esto algunos años después — agrego.
    — Bueno ya me voy a dormir si dices que todo se soluciono —
    — Hasta mañana Dan —
    — Que descanses mama —
    Siguiente día, Escuela Karima. Salón de Toru y Dan.
    — Mi papa me lo conto pero aun no entiendo bien — dijo Haru, Hablaban de la decisión del parlamento.
    — Por mi está bien, ya no nos tenemos que ocultar y aparte tenemos tiempo para resignarnos a nuestro destino de descubiertos — comento Dan
    — Si pero aun así será extraño — dijo Toru, no sería tan fácil acostumbrarse, después de todo, habían vivido asi desde siempre.
    — Pues eso sí, lo que me preocupa es como nos verán ahora los demás, cuando sepan de esto — dijo Dan
    — Yo espero que bien, mi mejor amiga es una humana y no quisiera que esto lo cambiara — comento Haru algo preocupada.
    — Si ella es tu mejor amiga, ¿a mí esto en donde me deja? — pregunto un Dan celoso.
    — Y a mí también, yo te conozco desde hace mucho Haru — se quejo Toru también celoso.
    — Ustedes son mis mejores amigos, no pueden ser mis mejores amigas porque son chicos — se explico Haru y repentinamente los dos chicos se sintieron idiotas.
    — Aaaaahhhhh — dijeron ambos aliviados.
    Un profesor interrumpe en el salón.
    — Muchachos por favor vayan al patio si están en esta lista — comenzó el profesor — …Daniell Somerku,…,Toru Kazahana,…
    — Hm para que nos querrán? — dijo Dan
    — No lo sé pero vamos —
    — Esperen este no es mi salón, ¿y si yo también debo ir? — dijo Haru.
    — Ve a preguntarle — le dijo Dan
    Haru asintió y se acerco al profesor.
    — Disculpe, yo soy de primer año, ¿también debo ir? —
    — Solo si esta tu nombre, dime tu grado y nombre, revisare —
    — Primero A, Haru Kihomi —
    El hombre reviso su lista y hablo.
    — Haru kihomi no, si, tu estas aquí —
    — Gracias —
    — Bueno vámonos — dijo Dan que se había acercado junto con Toru.
    Unos minutos después en el patio escolar.
    Había muchos alumnos de la escuela karima parados, no toda la escuela pero aun asi eran bastantes.
    Pasaron varios minutos y nadie les decía nada, media hora y Toru decía que se moriría de insolación, ya llevaban esperando una hora y 20 minutos cuando Dan que había estado algo pensativo hablo.
    — Qué raro — dijo el mitad Daimer medio confundido.
    — ¿Que es raro, Dan? — le pregunto Toru.
    — Aquí solo hay Daimers y Anjells, no humanos —
    — ¿Cómo?, no te entiendo Dan, yo veo muchos — le pregunto Haru que estaba confundida.
    — Tu puedes distinguir entre los tres tipos — le pregunto Toru y Dan asintió.
    — Si, hace mucho que desarrolle un olfato de bestia muy raro que no todos los daimers tienen —
    — Hm yo no tengo eso, que suerte la tuya — dijo Toru.
    — Entonces todos estos no son humanos — concluyo Haru.
    Una chica de cabello corto color morado oscuro llega junto a ellos.
    — Hola Haru — saludo a la Anjell.
    — Saumi tu también — dijo decepciona y sorprendida, con eso de que todos estos eran Daimers y o Anjells como le había dicho Dan
    — Daimer — dijo Dan respondiendo la pregunta mental de Haru.
    Saumi se puso nerviosa porque no sabía que ellos tampoco eran humanos, bueno Dan medio si era.
    — ¿Qué?, de que me hablan — dijo fingiendo no entender.
    — ¡Eres una Daimer!, que acaso todos mis amigos son Daimers, que crueldad, que malos — dijo alterada y traicionada — ya nadie me dice nada — se quejo.
    — ¡Como rayos saben que soy una Daimer! — exigió sorprendida y alterada.
    — Aquí solo hay Anjells y Daimers — le respondió Dan
    —¡Que! ¡Aquí solo haya Anjells y daimers! — grito Saumi sorprendida y sorprendiendo a todos.
    Todos empezaron a mirarse entre sí.
    — Haru, ¿que son ustedes? — pregunto ansiosa.
    — Daimer — contesto Toru.
    — Anjell — contesto Haru.
    — Daimer mitad Humano — contesto Dan
    — Vaya!!, para ser mitad humano eres bastante lindo — lo “admiro” Saumi, a Haru no le gusto la “Admiración”.
    — Eh??? — dan ni comprendió.
    — Entonces que hacemos aquí — dijo Saumi.
    — Creo que esto tiene que ver con lo que dijo papa — comento Haru.
    — ¿Y qué dijo tu papa? — pregunto Saumi.
    — Haru, mañana les dirán algo a todos los Daimers y Anjells, los reunirán aparte lejos de los humanos — contesto Haru citan e imitando la voz de su papa.
    — Haru, ¿tú de casualidad no tienes un retraso metal? — pregunto Saumi muy segura de que la respuesta era sí.
    — No, ¿Por qué? —
    — ¿Enserio? — no se la creía.
    — Ella es así Saumi, solo ríndete — dijo Toru recordando que siempre había sido igual, el alama de niña ingenua de Haru jamás se iría, una cosa más por la cual la veía como su hermanita pequeña, quien sabe con cuantas el ya había estado.
    — Tú ni me hables, acabo de ser traicionada, el más atractivo de la escuela es un daimer y no me lo dijo — se quejo molesta como si en algún momento hubiera sido obligación de Toru decírselo.
    — JA!, lo sabía, si eras tú el de la fama — dijo Dan sonriendo y celebrando su victoria.
    — Cayate Dan —
    Al fin después de siglos de espera llega un Oficial que parecía ser del Parlamento, tenía el cabello Negro, ropa Negra y aparentaba tener 39 o 40 años.
    — Ayer los tres Daimers principales y el Anjell principal hicieron un acuerdo con los humanos sobre nuestra existencia, de aquí en adelante el gobierno humano trabajara en conjunto con el gobierno Anjell-Daimer para difundir la existencia de nosotros así que no se alarmen si llegan ver alguna noticia sobre Anjells o Daimers por los medios de comunicación, todo está planeado para que lentamente en un tiempo los humanos no se sorprendan con la revelación de nuestra existencia, eso era todo lo que se les iba a informar, por favor regresen a sus clases — hablo el Oficial por un alta voz.
    — Pero ya se acabaron, cuanto cree que se tardo en llegar eeh! — le grito un chico de la multitud.
    — Entonces a sus casas — dijo por el altavoz — ojala que la señora Acamura no me mate por llegar tan tarde y en forma tan desobligada, si se entera me va a ahorcar — susurro con nerviosismo, lástima que su deseo no se cumpliría, su hijo iba a esa escuela y ella se iba a enterar.
    Todos volvieron a sus salones por sus cosas obviamente.
    2 C.
    — Oye Dan, ese señor me agrado — dijo Toru con felicidad.
    — Porque llego tarde y te libro de las clases — dijo Dan, conociendo a Toru no había otra repuesta.
    — ¡Exacto! —
    — Hay toru, no tienes remedio, yo ya me voy — dijo Toru a su amigo sin arreglo.
    — Oye, espérame ¿no? —
    Dan asintió, su amigo no tenía remedio pero era su amigo divertido.
    — ¿Vas a mi casa otra vez? — le pregunto Toru, había extrañado a su mejor amigo y quería que volviera a ser como antes, nadie podía agradarle más que Dan con el que jugó desde que ambos eran muy pequeños, cuando su mama vino de shukakuu con él cuando ambos tenían cuatro años.
    — No puedo, tengo que hablar con mi mama de algo, ayer no pude hacerlo — le contesto, Toru ya se había acordado de que algo asi había dicho Dan ayer.
    — A sí, no te pregunte, ¿de qué van a hablar? —
    — De mi papa —
    — Tu papa? — repitió sin comprender del todo, el jamás había oído absolutamente nada sobre el padre de Dan.
    — Si, tuve uno ¿no? — dijo algo molesto por el tono que Toru uso.
    — No es lo que quise decir, si no que jamás me has contado nada de él, creí que no querías hablar de eso porque quizás no lo querías ver, no se — se explico Toru.
    — No, es que mi mama jamás me había hablado de él pero él no está con nosotros porque murió hace mucho —
    — Enserio, ¿Por qué? —
    — Por defender a mi mama de otro daimer que la ataco —
    — No lo sabía, perdón pero ¿hace cuanto murió? — le dijo Toru con pena — y como que defender a tu mama, ella es muy fuerte — pregunto sin comprender.
    — En ese entonces no lo era, además ella estaba vulnerable y era un blanco fácil por haberse casado con un humano, estaba desprotegida de los daimers según mi mama, ni él ni ella sabían que mi mama estaba esperándome — le explico.
    — Entonces tu papa se murió sin saber de ti —
    — Estoy algo preocupado por mama, aunque quiero saber de mi papa la otra vez que me conto lo poco que ahora se casi lloro —
    — ¿Estamos hablando de la misma Acamura Yuken? — pregunto Toru medio incrédulo.
    — Mi mama no es tan cruel como crees, en realidad mis abuelos dicen que se hizo así de dura después de que mi papa murió —
    — Vaya, debió ser difícil para ella, entonces tienes que hablar con cuidado de no lastimarla — le dijo con pena — nos vemos Dan — se despidió.
    — Si, hasta mañana —
    Dan también se fue a su casa y cuando llego solo tenía algo en mente y eso era saber más de su padre.
    — Mama ¿estás aquí? —
    — Si, Dan —
    — ¿Me vas a hablar de mi papa? — dijo pasando a la sala.
    — Está bien, siéntate —
    CONTINUARA
    La Noticia ~ Capitulo 03
    © Blue Rose – Lyzz –
     
  5. Título:
    ADHumanos: Inicio
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    Palabras:
    3974
    4° PLUMA ~ UNA LARGA PLATICA DEL PASADO
    — Bueno, ¿Qué quieres saber de él Dan? — le pregunto su madre.
    — No lo sé, ¿cómo era?, ¿cómo lo conociste? — le dijo un poco emocionado, además quien no querría saber cómo fue tu padre si no puedes verlo ni mucho menos conocerlo.
    — Fue en la escuela en realidad, si no fuera por una pequeña casualidad no habría pasado, la forma como pasábamos el tiempo en la escuela hacía imposible que nos conociéramos, de pura casualidad Taltor me conocía a mí y a él y por simple casualidad terminamos por encontrarnos cuando ambos lo buscábamos al mismo tiempo — le comenzó a explicar — Todo comenzó en un día de clases normal, yo hablaba con mi amiga saku…
    ---19 años Atrás.---
    — Acamura, necesito tu ayuda — fue lo primero fue me dijo la muy desvergonzada, ni siquiera “hola” aunque sea.
    — Para que saku — le dije con fastidio, temiendo en mi mente las múltiples opciones que traían esas palabras, saku no era la amiga más normal que tenía en ese entonces.
    — Ayúdame, necesito que Taltor me haga un favor y como tú eres su mejor amiga me puedes ayudar ¿verdad? — me dijo con ojitos suplicantes, desgraciada embaucadora.
    — Ni loca, ya sea para dónde vas y te he dicho que no andes de casamentera, nunca te funciona y te ganas gente que te detesta para siempre — le conteste enojada y como no si era la milésima vez que me pedía algo asi, además era la admiradora número uno del “mil mujeres”, digo…Taltor, además una eterna seguidora de “Taltor se ve más lindo con novia aunque esa no sea yo”, IDIOTAS.
    — No, esta vez no le estoy buscando pareja a Taltor si no a mi prima pero Taltor es uno de los mejores amigos de un chico llamado Lyon, que le gusta mucho a mi prima Laih, dile a Taltor que se la presente o al menos que le hable sobre ella siiiiii — y siguió aunque yo no quería tener vela en ese entierro que quizás se volvía literal conociendo los usuales finales de todos los planes de Saku.
    Tome mi teléfono y marque un numero — Taltor, ¿conoces a un tal Lyon? —
    Hace 19 años y unos minutos después, preparatoria Karima, Salón 3 G
    El pelirrojo entro al salón.
    — Oye lyon ven, te quiero hablar de algo — dijo Taltor a un chico de cabello anaranjado claro.
    — Y a mí, ¿de que, Tal? — le dijo amigable — oye cuando vienes así es porque quieres algo — le dijo pensado mejor porque su amigo estaba portándose “bien”, ese no era el Taltor normal, era el engañoso y embaucador que venía con la cola entre las patas porque necesitaba algo, apenas se lo dieras volvería a ser el mismo idiota, rompecorazones y tonto de siempre.
    — Yooo, noooo, ¿qué te hizo pensar eso? — le dijo fingiendo inocencia muy mal.
    — Taltor, te conozco — le afirmo para que entendiera el “a mí no me engañas”.
    Soltó un inmenso suspiro, no era bueno engañando pero ya que era Acamura la que lo había obligado después de que no acepto por las buenas debía de hacerlo — Bien, ven, te lo diré en otro lugar — ahora ya que no había funcionado estaba preparado para suplicar además debía de agradecer que no era él la víctima, no quería volver a acercarse a Saku, al menos después de su intento de conseguirle novia, y todavía peor, porque sabía que él estaba en su mira, gustarle a alguien tan peligrosa no era su idea de felicidad aunque de todos modos el plan no iba a funcionar, lo había odiado desde que había sido la misma Acamura la que le había pedido salir con esa chica, debía de haber un límite para la tortura o al menos eso rogaba él.
    Ambos caminan unos minutos hasta llegar al jardín de la escuela.
    — Necesito que seas lindo con una chica a la que le gustas, se llama Laih — le soltó, Lyon no tenía muy buena cara ni parecía agradarle la idea.
    — Eh? —
    — Al menos sal con ella una vez, tan siquiera finge un día — le rogo, era humillarse pero bien lo haría si eso mantenía la furia de Acamura lejos de él, ella podía partirlo en dos si quería, era la hija de un rey, obvio que podía.
    — Taltor, yo no hago eso — le dijo cortante, ni siquiera lo iba a pensar.
    — Es para hacerme un favor a mí, por favor, no te vas a morir por hacerlo — le suplico más.
    — Nooooooo! es enserio, yo no le miento a nadie y le voy a decir de frente que no me gusta — lo corto y finalizo la discusión, Lyon tenía una voluntad increblantable.
    — Que?!, ¿vas a ser así de cruel? — dijo algo sorprendido, se suponía que el bueno era Lyon, él era el que rechazaba a muchas chicas y con las que salía solo se divertía o pasaba el rato pero sin que ellas llegaran a importarle mucho aunque duraran meses juntos, como Liliana, con la que estaba ahora.
    — Oye don rechazo a todas, ya dime porque te esfuerzas tanto en esto — le exigió.
    — Me lo pidió Acamura —
    — Acamura? —
    — Es una amiga que conozco desde hace años y por más que me niegue siempre termino asiendo lo que me pide aunque hasta yo me doy cuenta que me utiliza —
    — Tú no puedes resistirte a una mujer con carita de te suplico verdad —
    — Noooooo — dijo triste y cabizbajo.
    — Pues quiero conocer a esa Acamura, un día de estos me presentas a tu ama — se burlo y se rio, Taltor frunció el seño al instante.
    — Muy gracioso, ella solo es mi mejor amiga de la infancia y hago todo lo que me pide porque por más que sea lo que sea, lo que pase, sigue sin cambiar eso, ella es ella, no la puedo ni la quiero cambiar — dijo algo enojado.
    — Uy pero no te enojes, tal solo bromeaba pero una chica tan interesante como para que Taltor se quede pegado de ella, eso lo tengo que ver — aseguro.
    — ¡Ya cayate Lyon! ¿Y qué harás con laih? —
    — Ya te dije, no la puedo engañar, yo no hago eso —
    — Ok, es tu problema hacer llorar a una chica —
    — Oye lo dices como si fuera un desgraciado cruel — se quejo.
    — Casi —
    Un rato más tarde Lyon ya había encontrado a Laih, le había pedido hablar a solas y se la había llevado al jardín, ella se notaba muy nerviosa, temiendo obviamente la verdad, por la forma seria en la que Lyon se mostro no había de otra más que el rechazo, total y completo rechazo.
    — Mira… — comenzó buscando valor para continuar — tú no me gustas, no es que no seas linda pero no estoy interesado en nadie ahora — termino con el mayor tacto que pudo, lástima que no el suficiente.
    — Ah, está bien, lo entiendo — le dijo a punto de llorar.
    — Oye no llores, no me gusta ver llorar a una chica y menos por mi culpa, perdón, de verdad quisiera sentir algo por ti para no hacerte llorar y lastimarte pero no es esta vez — le dijo con toda la culpa y sinceridad del mundo.
    — Ok yo ya… — se va corriendo y llorando.
    — Rayos, como odio esto, que mala suerte, pobre chica — se quejo con pena por ella.
    En el salón de Saku hace 19 años y media hora después.
    Cuando Acamura iba a entrar a su salón se esperaría muchas cosas menos esto, aunque era algo muy esperado por ella la agarraron desprevenida, hubiera imaginado todo menos a saku abrazando a su prima Laih que no dejaba de llorar.
    — ¿Qué paso? — pregunto medio confundida, ella se esperaba ese llanto mínimo hasta mañana.
    — La rechazo, le dijo que no le gustaba — contesto Saku medio enojada, Acamura pensó “de que te enojas idiota, esto fue tu idea y ya te había dicho que de casamentera no tienes el don”.
    — No me lo dijo en forma cruel pero aun así me dolió un poco — dijo Laih a un medio llorando.
    — Bueno, no siempre se puede — dijo Acamura esforzándose hasta donde su razón le dejaba por consolarla, no iba a quedarse ahí sufriendo el destino que Saku se merecía pasar solita — bueno..yo…debo preguntarle algo a..a Taltor y…bueno, ya me voy — dijo escurriéndose lentamente hacia la puerta, su idea de felicidad definitivamente no era quedarse a oír el llanto de la prima de Saku.
    Acamura sale del salón y justamente al mismo tiempo salía Lyon del suyo para buscar a Taltor también. Curiosamente ambos terminan llegando solo un segundo detrás del otro, Acamura le gano a Lyon por casi nada en llegar.
    — Disculpen, ¿alguien sabe dónde está Taltor? — pregunto amablemente, aunque no se oyera posible, Acamura trataba bien a quien la trataba bien.
    — Ah Taltor, está en el jardín pero dijo que iba tardarse Acamura — le contesto un chico del salón, Lyon se fijo en el nombre de la chica.
    — Ah, con que tú eres Acamura —
    Acamura voltea al instante y se encuentra con un pelirrojo de tono mucho más claro que Taltor, humano pero atractivo y alto.
    Es realmente linda — piensa un Lyon bastante impresionado, el había visto mujeres linda pero no tan lindas, era un angel y tenía la suerte de estar en el cielo definitivamente.
    — Si soy yo, ¿Por qué? —
    — Yo soy Lyon —
    — Ah, el cruel rechazador cierto? —
    — Oye, como que cruel si no es mi culpa que ella no me gustara y la rechace con el mayor tacto que pude tener — se quejo a la defensiva. Está bien, fue cruel decírselo pero era lo correcto y él se iba a defender.
    — Que te costaba mentirle y salir con ella una vez para luego dejar de buscarla — soltó con cinismo y de aquí el nombre descarada, si buscas en el Diccionario esta palabra al lado verán un foto de Acamura Yuken. Lyon arqueo una ceja sorprendido.
    — No eres como otras chicas cierto —
    — No —
    Lyon ríe.
    — Tú también buscas a Tal? — pregunto suponiendo que la respuesta era un sí.
    — ¿A Taltor? si —
    — ¿Me acompañas a buscarlo?, de todas maneras vamos al mismo lugar — le pregunto, quería seguir viendo a ese chico lindo, enserio reconsideraría el no conocer a fondo a los amigos de Taltor.
    — Sí, porque no? — había más de uno que no quería decir adiós.
    Ambos van al jardín y después de un rato al fin ven a Taltor y se acercan a él.
    — Porque ustedes bueno…están..juntos? — dijo algo confundido, sabía que esos dos no se conocían, aun.
    — Solo te estábamos buscando y nos dijeron que estabas aquí — contesto Acamura.
    — ¿Y para que me buscaban? — pregunto volviendo a ser el de antes.
    — Te quería preguntar si podemos usar el auto de mi papa en vez del de Axel — le dijo Acamura.
    — Si, y tú que me querías preguntar, Lyon —
    — Que si puedo fingir que me llamo Daniell en la salida a la que me invitaste — le contesto y Taltor frunció el seño fastidiado.
    — Lyon tu jamás vas a dejar de renegar de tu nombre o que — se quejo fastidiado de oír eso todos los días.
    — Que tiene de malo su nombre? a mí me gusta el nombre Lyon, por mi está bien — dijo Acamura confundida — pero no me dijiste que invitas a alguien más, eh, Tal —
    — A lo olvide, te iba a enviar un mensaje al rato con eso de que tenias a una chica que consolar — se excuso.
    — Estás loco!, ni que quisiera oír llorar a alguien y que me cuente por que, una y otra vez, además fue su molesta prima la que me pidió el favor, ella es la que ahorita está oyendo llantos y problemas de una rechazada por un chico, aunque yo le dije a saku que dejara de hacerla de casamentera, sus planes nunca funcionan — explico.
    Lyon y taltor solo la miraron ahí con cara de no sé ni que decir, incómodos. Los mentalmente estuvieron de acuerdo, Acamura era única.
    — Bueno Lyon, nos vemos en la tarde y Taltor, si te vuelvo a pedir que me ayudes a hacer un trabajo de Cupido, mátame ¿entendido?, porque oficialmente estarás hablando con una persona que ya perdió la razón, bueno adiós — se despidió ella de una inusual forma y se fue, mientras Lyon reía y Taltor un poco también.
    — Tal, tu amiga es divertida —
    — Si, lo sé — dijo suspirando con despreocupación.
    El presente.
    — Después de eso por ciertas razones tuvimos que irnos caminando cuando cierto idiota estrello el coche donde no debía y tenía que pagar los daños de la estación policiaca, así que se quedo solito firmado un papel en el que se comprometía a pagar todo, nos fuimos separando mientras seguíamos a nuestras casas, yo termine sola con tu papa en algún momento y después de quedarnos hablando un rato de distintas cosas y de reírnos un poco no quedamos en un momento de silencio, el solo se quedo mirándome se fue acercando y cuando menos me di cuenta yo ya le correspondía el beso que me dio, poco a poco empezamos a vernos más y a salir como novios y tiempo después de terminar el primer año de universidad y de que yo le contara sobre los daimers nos casamos — termino de contar Acamura.
    — Te paso como esas personas que se encuentra al que amaran siempre y lo saben desde que lo ven — le dijo Dan algo conmovido por su historia.
    — ¿Por qué? — Ella sonrió.
    — Solo con estar un tiempo a solas con él, supiste que te gustaba —
    — Supongo que sí, mi raza les llama Shiseku — le dio la razón — ¿oye, ya no hay nada más que quieras saber de él? — le pregunto, se había sentido bien al recodar a su Lyon, aunque cierta personita se lo recordaba seguido con su mera presencia.
    — Si, ¿cómo era? — dijo con curiosidad.
    — Por dónde empezar — dijo atrapada en sus pensamientos — era muy soñador, se podía pasar el día entero perdido en sus pensamientos, pero eso no le quitaba que cuando quería era una molestia completa, era muy divertido y siempre estaba alegre y bromeando de todo pero tú eres un poco mas bromista, que eso nadie debe dudarlo jamás, a y sobre todo era el ser más flojo del universo, increíblemente, más que tu — dijo al último riendo.
    — A que graciosa, pero cuéntame más —
    — Lyon era la persona más amable y la mas incorregible, por mas que le digieras algo él nunca haría nada malo o que no estuviera en sus principios, era tan divertido como protegía en todo lo que creía hasta las últimas consecuencias, la verdad siempre terminaba dándome risa el desenlace de esas defensas — dijo recordando un evento muy gracioso para ella, su Lyon siempre estaba saliendo de un enredo para acabar en otro, incluso en cosas que a él no le concernían en la mas mínimo.
    — Me hubiera gustado conocerlo, pero tú lo extrañas verdad, aunque sea un poco, ¿aunque ya pasaron años? — pregunto.
    — Te lo pondré asi — comenzó — Si se pudiera revivir a la gente y Lyon me digiera que no lo hiciera porque la gente debe morir alguna vez, yo lo reviviría sin pensarlo, lo extraño mucho y aun ahora estaría feliz de volverlo a ver otra vez, todavía siento por él lo mismo que sentía entonces, para mi nada ha cambiado, lo extraño demasiado — conto sin tener éxito en no liberar un poco lagrimas. Dan rápido abraza a su mama.
    — No llores, yo estoy aquí aunque él no esté, yo también te quiero — la reconforto, no le gustaba ver a su mama asi, la culpa lo invadió de repente, prefería verla hasta burlándose de el mismo, todo antes que asi de frágil y tiste.
    — Eres igual de noble que él, Dan — dijo comenzando a tranquilizarse un poco, era obvio que ella lo había amado mucho, tanto que no había llenado su lugar con nadie.
    Unas horas después en el cuarto de Dan, cuando él debía dormir. Debía, no lo hacía.
    Dan estaba muy sumido en sus pensamientos — Me hubiera gustado conocerte aunque sea un poco, de verdad, quisiera haber estado contigo aunque sea algunos años nada mas, muchas veces pienso como habría sido mi vida si estuvieras aquí, Papa —
    CONTINUARA
    Una Larga Platica del Pasado ~ Capitulo 04
    (c) Blue Rose ]Lyzz[
     
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