Habéis elegido un camino de muchos.Un tortuoso sendero, lleno de hojarasca quebradiza y murmullos crepusculares.Habéis elegido la desolación momentánea, el suspiro de pesar y un vacío son igual.El eco que palpita en vuestros oídos os hace creer que, cual giro del reloj, nada pasará. Camináis entonces cabizbajo, momentáneamente.Vuestra mirada, triste y afligida recorre el matiz índigo y marrón de sus ojos.Reflejo perdido en los colores difuminados de la bóveda celestial, brillantes.Habéis, pues, optado por alejaros de la luz septentrional que guiaba vuestro ser. Sin más, el pasaje silencioso, expectante y trasversal.Serpentea indefinida y tristemente, perdido siempre en la bruma del olvido.La brisa sopla y el clamor del atardecer, vaivenes eternos del errante.Habéis elegido el caminar solo, añoranza del ayer y un profundo vacío sin igual.