My Little Pony Una promesa [My Little Pony]

Temprano por la mañana, tal como marcaba su rutina, Applejack se colocó frente a su puesto, desde donde provee a toda Ponyville de manzanas y las mejores delicias derivadas de estas.

Como si tuviera bastante energía a estas horas, alguien venia hasta el lugar como un rayo, haciendo correr a los que caminaban cerca suyo y cubrirse del polvo que echaba el vehículo. Dio la vuelta, frenó, apagó el motor y se bajó, yéndose hacia ella.

—¡Buenos días Applejack! —Rainbow Dash la saludó, como si tuviere un sueño reparador durante la noche anterior

¿Qué tal Rainbow? ¿Te apetece algo de desayunar? —aguardaba que fuera su primera venta del día; aunque no le preocupó tanto que sólo venga a hacerle una visita fugaz.

— ¿Podría comprar uno de tus pies? —miró atenta hacia donde estaban estos pasteles que le hacían agua a la boca.

—Me encantaría… —

Inmediatamente Applejack retiró del mostrador lo que se le había pedido. Al momento de la entrega sus ojos se dirigieron hacia una motocicleta, que estaba estacionada un poco más allá del puesto.

—¡Wow..!—

—Te gusta —Rainbow sonrió de lado, dándole una palmadita al asiento de su Nuevo Tesoro, que impresionó a su amiga.

—¿Donde la conseguiste?

—Ayer se la compre a alguien que, al parecer, ya no la necesitaba. Trataré de darle un buen uso a este bebé.

Se acercó, colocándose sobre el puesto, frente a Applejack, acercando su rostro a corta distancia de donde estaba.

—Por cierto ¿quieres dar una vuelta?

—No puedo —movió la cabeza—. Debo quedarme aquí.

Rainbow fue hacia donde dejó estacionada la moto, montó en ella y arrancó el motor. Dirigió la mirada hacia atrás, para decirle algo.

—Prométeme una cosa: cuando tengas tiempo libre, acompáñame a dar una vuelta.

—Tenlo por seguro —Applejack dio el gesto de aprobación.

Rainbow se marchó de allí a toda prisa, hacia un destino que, dentro de su mente, solo ella sabía, con la esperanza de que un día irán juntas sobre los caminos más allá de Ponyville.