Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

Tema en 'Fanfics Abandonados de Inuyasha Ranma y Rinne' iniciado por Asurama, 9 Febrero 2009.

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    Asurama

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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Venía anunciando este fic desde hace tiempo a mis querídísimas amigas/lectoras/colegas. Bien, esto es para todos los gustos, o al menos lo intentaré
    Comencemos nuestra agradable conversación...
    Con Sesshoumaru...



    Cuando te dicen “Sesshoumaru”, seguramente lo primero que vendrá a tu mente es: “youkai perro, hermano mayor de Inuyasha… en realidad hermanastro”. Pero todo el mundo sabe que él es más que eso, es una caja de sorpresas de la que no tienes modo de saber qué saldrá la próxima vez. Tan estructurado y restringido como impredecible, se ha vuelto un personaje muy enigmático y entrañable.
    Pero ¿Por qué es tan impredecible?
    Eso es sencillo, porque él siempre es el mismo, pero su modo de relacionarse con los demás nunca es el mismo.
    Todos sabemos que él no habla mucho y piensa demasiado pero… ¿y si un día hablara?
    Quizás podríamos mantener con él una dulce conversación… o quizás no tanto. Pero algo es seguro: eso no dependerá de él, sino de cómo seamos nosotros.

    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    —Ella dijo que él le prometió protegerla por siempre —dijo levantando la botella de la fuente
    —Pero siempre es mucho tiempo —tomó delicadamente ente sus manos la blanca copa— y el tiempo cambia las cosas, cambia las circunstancias, cambia a las personas.
    Ella moría por oír su voz, tan grave, aterciopelada, tan serena y con tonos tan armónicos, palabras bien pronunciadas como si de un hechizo se tratara. No hablaba mucho, pero cuando comenzaba ella deseaba quedarse allí y que él hablara por siempre, que le contara mil veces sus historias que conocía
    Le siguió un largo silencio, mientras ella servía el licor y él acercaba la copa a sus labios sin beber.
    Levantó la vista
    —¿Cuánto tiempo ha transcurrido —bajó la copa con delicadeza— parece mucho.
    —Siete años
    —No me di cuenta —bajó la vista— realmente cambiamos con el tiempo
    —Sesshoumaru-sama será igual siempre, no importa cuanto tempo transcurra —dijo ella con una sonrisa
    El miró la copa y movió el líquido en su interior
    —¿Tú crees que no he cambiado en nada? Realmente yo era diferente —levantó la vista e hizo memoria—, en tan poco tiempo cambié mucho. A veces, los cambios más importantes de nuestra vida tardan mucho en darse, como crecer o prepararse, pero a veces los cambios radicales ocurren en períodos muy cortos de tiempo. Mi vida cambió en sólo seis meses, sólo seis, ¡que corto tiempo! —dio un sorbo y volvió a dejar la copa sobre la fuente—, el cambio llegó con Inuyasha, con Kagura, contigo, con las batallas, con golpes duros. Podía haberme pasado siglos buscando responder preguntas sin respuesta y formulando respuestas sin sentido y en sólo seis meses obtuve mis respuestas, sólo caminando entre ustedes. —Cerró los ojos— La vida es incierta.
    —Si no fuera así, quizás sería muy aburrida ¿No lo cree, alteza? —preguntó algo sonrojada sin saber por qué, quizás porque la voz de su interlocutor le causaba muchas sensaciones extrañas, muy especiales, el sentimiento de que unas fuertes olas recorrían su interior, que podían agitarse o calmarse en tan sólo un cambio de sílabas.
    —Quizás —él la miró con una extraña mezcla de deseo y devoción, como si estuviera frente a una diosa—. Hoy estoy aquí, mañana no sé dónde estaré, ni cómo, no sé si estaré entre las mismas personas o en una situación diferente, no sé a dónde me llevará la vida. Contigo también ha sido así.
    —¿Conmigo? —preguntó entre sorprendida y excitada, era tan raro y tan maravilloso oír que él la incluyera en su conversación discreta y rebelde.
    Él asintió, inconsciente de lo que sus palabras estaban causando, sosteniendo una copa en el aire, mientras ella le servía quizás por tercera o cuarta vez, el tiempo transcurría a otra velocidad —ni rápida ni lenta— cuando estaban juntos.
    Él volvió a mirarla con la devoción que solamente ella le inspiraba, viendo sus movimientos suaves y delicados, como el vuelo de un pájaro o una mariposa, siguiendo el contorno de sus hombros hasta llegar a sus delicadas y limpias manos, su posición de reverencia y respeto, su actitud de obediencia y cariño. Verla a ella era como compararla con la caída de la suave lluvia atravesando el cielo, quitándole y regalándole calma.
    Sentarse a beber era sólo una excusa para regalarse una conversación, la conversación era sólo una excusa para obtener atención, obtener atención era sólo una excusa para acercarse íntimamente a Rin, oír su voz, disfrutar de sus atenciones, de su aroma, su esencia, su presencia, su armoniosa vida que le regalaba paz. Parecía impasible, pero por dentro algo lo consumía, lo sabía cuando no podía dejar de verla y oírla, cuando le decía “quédate un poco más”, cuando sentía su mente en otras dimensiones superiores y no podía bajarla a la realidad. Decirle que la amaba era ridículo, era más que obvio y natural, era seguro que ella lo sabía.
    Ella dejaba la botella de licor en el mismo lugar, con la misma delicadeza y suavidad con que la había tomado, levantando la mirada hacia él como nadie se hubiera atrevido, era lo que más le agradaba de ella: que era como él.
    Volvió a sujetar la copa con ambas manos
    —Viviste cinco años con tus padres, dos años de dolorosa soledad, seis meses al borde del filo de un cuchillo, un mes tras mis pasos, tres años de aprendizaje, dos años con el amor de una familia y no has estado aquí más de tres años —bebió y luego la miró—. Así que no me extraña la declaración de los ancianos sobre ti.
    —¿Realmente su alteza cree que Rin ha vivido noventa años, como dicen los ancianos? —bajó el rostro, ya no podía esconder cuánto se había sonrojado, ni siquiera con el mejor maquillaje.
    Él se acercó más a ella, mientras dejaba la copa en la fuente
    —Creo que has vivido cien años, como nosotros, los youkai.
    Ella ya no podía resistir el encanto de su voz, era terrible, una tortura dulce, dulce y tibia… no, era… ¡ardiente! Si el youkai se acercaba más, estaba segura de que se desmayaría, lo deseaba mucho, no podía evitarlo.
    —¿P… por qué accedió a la pelea de Inuyasha hoy? —dijo algo nerviosa, intentando cambiar de tema antes de que el youkai decidiera dejar la copa de lado y “cambiar de licor”.
    El se hizo un poco hacia atrás, dándose cuenta de lo que ocurría, volviendo a poner algo de distancia pero era tarde: el hielo ya se había derretido, lo peor sería que jamás hubiera habido hielo… y así era.

    FLASHBACK
    —Entonces veamos si eres tan fuerte como dices —gritó Inuyasha, fastidiado
    —Como quieras —contestó Sesshoumaru al desafío, sujetando la empuñadura de la Bakusaiga, parado sobre los escalones
    Myouga estaba en el hombro de Inuyasha y tuvo una extraña visión: la imagen alternada de su anterior amo sobre el cuerpo de Sesshoumaru. La armadura que llevaba el joven era idéntica, pero completamente negra y lo único diferente en el rostro eran las marcas.
    —¡Inuyasha-sama no pelee con él! —le gritó la pulga al darse cuenta de que eso no era normal
    —Alteza —le gritó Rin a Sesshoumaru, acudiendo desde un pasillo, intentando impedir una batalla, hubiera sido terrible… para Inuyasha, no quería ver que dos hermanos se pelearan.
    Él comenzó a desenfundar lentamente la espada
    —Sesshoumaru-sama —le gritó Rin
    —No te muevas, Rin —le dijo él con una muy leve sonrisa y unos ojos vivaces, sin quitar los ojos de su hermano, mientras la espada se blandía frente a los ojos de Inuyasha—, el orgullo de un daiyoukai es poder vencer en batalla… al que es más fuerte.
    Inuyasha se quedó pasmado con la declaración ¿Su hermano lo estaba considerando como un igual? Imposible
    Después de una pelea desigual donde Sesshoumaru esquivaba con facilidad las “estocadas” que lanzaba Inuyasha, finalmente consiguió empujarlo y hacer que soltara la Tessaiga, cayendo ésta clavada en la Tierra de la plaza de armas. Inuyasha estaba demasiado lejos y al levantarse vio con horror cómo su hermano se acercaba a la Tessaiga
    “No podrá tomarla”, pensó, pero para su espanto vio que él acercaba sus garrar a la empuñadura, rodeándole y tomándola, sin ser atacado, sir recibir una descarga, como si no existiera una barrera, quitó la espada oxidada de la tierra y la levantó, apuntando hacia Inuyasha. Esta vez no había truco, eran sus verdaderas garras y su única armadura era la muñequera y el guante de hierro que llevaba puesto.
    Sesshoumaru no se sorprendió al sujetar la Tessaiga sin que le sucediera nada, cuando apuntó hacia Inuyasha, pensó “Por la vida de Rin”, entonces la espada comenzó a dar latidos y despertó con una corriente de viento a su alrededor, que la convirtió en el poderoso y majestuoso colmillo.
    La cara serena del príncipe surgió
    —¿Lo ves? —le dijo a Inuyasha— yo soy como él, soy él ¿Lo comprendes? —por supuesto, estaba hablando de Inu no Taishou.
    Todos se quedaron pasmados al ver que ahora podía sujetar el colmillo sin problemas, y manipularlo con la misma facilidad, sin brazo adicional, sin fragmento de Shikon, sin escudo, sin espejo de youkai, sólo con el consentimiento de su padre. Increíble. Imposible.
    —Y aquí tienes —dijo poniendo la empuñadura frente a sus ojos— tu espada basura —y la soltó dejándola caer nuevamente al suelo antes de entrar, como siempre, con Rin a sus espaldas. Todos sabían perfectamente que él estaba seguro de que no necesitaba algo como la Tessaiga, o la Tenseiga.
    Todos quedaron más que asombrados, incluso la misma Rin.

    FIN DEL FLASHBACK

    —Accedí porque deseaba saber algo— respondido él, ella se acercó mirándolo con curiosidad— la prueba fue un éxito —ella se sorprendió con esa respuesta mientras veía cómo él levantaba una mano y la miraba como si estuviera llevando una sortija invisible debajo del guante negro de su armadura—. Cada movimiento, perfecto; cada palabra, igual, idéntica; cada frase cuidadosamente pensada, cada emoción, ese sentimiento de fuerza…
    —Disculpa ¿Molesto? —preguntó Inuyasha entrando intempestivamente en el cuarto tranquil donde Sesshoumaru y Rin compartían la tarde
    —Molestas y mucho —respondió fastidiado, sorprendido, sintiéndose descubierto en algo que no había hecho.
    —Ah, lo siento, vendré más tarde —dijo el hanyou ingenuamente y salió cerrando la puerta.
    Sesshoumaru estaba a punto de hablarle a Rin de su padre, pero con la “inesperada visita”, el hilo se cortó y la armonía de su conversación quedó en el olvido.
    Se levantó, se disculpo y salió del cuarto. Él no se disculpaba con nadie, quizás sólo con Rin porque esta vez le debía unas cuantas respuestas… y muchas conversaciones futuras…
    **************************************************************************************
    Rin es mi preferida porque entra a la historia de un modo muy extraño y aprende a quedarse junto a su bondad y su dulzura. Es tan especial que sólo con su bondad y una sonrisa pudo cambiar el corazón frío de Sesshoumaru y demostrar que muy en el fondo de su ser existe un lado bueno y gentil, muy parecido al de su padre.
    Rin es el polo opuesto de Sesshoumaru y, como suele decirse, los opuestos se atraen…
    Estos dos son grandes amigos, se protegen, se ayudan mutuamente y tienen una increíble capacidad para conectarse con el otro y entenderlo a la perfección.
    Es una forma de demostrar que el amor —y la amistad— viene en todas las formas y no se fija en las diferencias.
    Lo gracioso es la forma en que ella entra en su vida. Al principio no era considerada mejor que a un insecto, él la trataba con rencor y desprecio, como a cualquier otro ser humano, pero luego comprendió que no todos los humanos son iguales… iguales a lo que él creía, y se encariñó con ella. Ella le pareció diferente: no le decía nada, no huía, no le temía, lo ayudaba, no se rendía a pesar de las maldades del muchacho. Qué impresión ¿verdad? ¡Un humano con la fortaleza y el valor de enfrentar al gran Sesshoumaru!, un espécimen digno de estar en su colección y en su compañía... Un modo de demostrar que la primera impresión no importa tanto como la segunda…
     
  2.  
    angome-

    angome- Iniciado

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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Holaa seree la primeraa!
    me fascinoo! osea yo no soy muy devota de esta pareja pero si me encanto comoo expresastes cada sentimiento y cada plabra de sesshomaru! ni yo mismaa me lo hubiera imaginado!
    ahoraa de cuando aca inuyasha entra como si nada y dice "molesto" haha me parecioo comiquisimo noc porq pero me parecio!
    de verdad me encanto como empezastes y esperare la siguiente continuacion!
    besoos
    angome-chan!
     
  3.  
    Asurama

    Asurama Usuario popular

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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Así que te gusta el género SesshoumaruXKagome, te juro que aunque lo intento, no congenio con el género.
    Esta historia será diferente porque, a pesar de que será en tono "SessXRin" no habrá pareja: será múltiple.

    Sí, Sesshoumaru tendrá mucha participación...
    porque se dedicará a entablar largas charlas con todos y cada uno de nuestros personajes, y a cada uno les dirá cosas diferentes.
    Al final, aparecerán mis apreciaciones sobre el personaje y sobre la relación de Sesshoumaru con "X" personaje
     
  4.  
    AkoNomura

    AkoNomura Guest

    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    hola!!
    aquí yo de nuevo XD
    que lastima que Inuyasha los interrumpiera, me habría encantado que Sesshoumaru hablara de su padre, he leído varios que tratan el tema y ninguno me ha convencido hasta ahora, me hubiese gustado ver tu punto de vista (desde Sesshoumaru por supuesto) y las atenciones que le da a Rin.
    el flash back me encantó, cuando tomó la espada "por la vida de Rin" se nota que al fin puede pararse como todo el Inugami Taiyoukai que es, todo orgulloso y sobervio y convertido en el nuevo Inu no Taishou.

    a Ako le gustó mucho mucho!

    nos leemos!
     
  5.  
    angome-

    angome- Iniciado

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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    ammm mas finoo valee! seh amoo el sessh x kagome! pero = me muero por leer tu historia asi q ni c te ocurra dejarla de continuar! =)
    de verdad q tienes todoo mi apoyoo!
     
  6.  
    StarAcua

    StarAcua Usuario común

    Escorpión
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Holaaaaaaaa....soy nueva en tu historia y dejame decirte que esta INCREIBLEEEEEEE!!!!..me encanto, se nota el cambio que tuvo sesshomaru, y me encanta como habla con Rin!!!...jijijijij!!!!..a mi tambien me gusta mucho el sessho/kag pero dejame decirte que tu FF esta DiViNo!!!!..y espero que lo sigas pronto ya quiero ver a sesshy de nuevo!!!!..besossss:D
     
  7.  
    \Tsuyuka/

    \Tsuyuka/ Entusiasta

    Leo
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Hola Lubecita, he vuelto luego de una semana... (Ahora iba a subir las contis y me encontré con tu juevo FF)

    Es muy bonito y tan descriptivo como siempre, con ese toque de no sé que, que me atrapa... Creo que es tu forma de redactar, parecen que las palabras fuesen premeditadas antes de escribir cada una de ellas.

    ¡Qué lástima que no te sangan los Sessh/Kag...! Si quiers te puedo brindar algunas ideas; Porque con tu forma de redactar creo que quedaria maravilloso. (Igualmente creo que me estoy haciendo fanática del Sessh/Rin)
    Continúalo prontito ¿Sip?

    Espero que hayas actualizado tu otro FF: "Cuento contigo, bajo la lluvia", ahora me voy a fijar...
    eso es lo que pas cuando no se entra seguido, te pierdes de todo, jeje.

    Luego te mando el PM con el link de las dos contis, espero verte por allí.

    Atte.

    Tsuyuka, el 5to Dios.
     
  8.  
    Asurama

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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Suplico a las fans del SessXKag que no se me ofendan con el próximo capítulo, no lo hago para atacar a nadie, lo hago desde mi punto de vista, es probable que no les agrade demasiado, así que les suplico a las fans del SessXKag que no lean el capítulo dos
     
  9.  
    \Tsuyuka/

    \Tsuyuka/ Entusiasta

    Leo
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Lubecita, por mi no te preocupes, siempre me gusta leer algo nuevo... Incluso si va en contra de mis preferencias...

    jejeje... Y no creo q nadie te ataque x lo q pongas...

    Prontito pongo conti ,toy terminando de escribir... Espero ansiosa tu conti.

    Besitos, Tsuyuka.
     
  10.  
    angome-

    angome- Iniciado

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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    heyy! xD bueno si lo dices por mi creemee que no me ofendere porque aunque soy fan de esta pareja tamb leo los sessh x rin-los kagxinu- los sesshxkagura
    en fin muchos! asi que espero leer tu continuacion!
     
  11.  
    Izayoimywill

    Izayoimywill Entusiasta

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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    ¡Hola!

    ¡Acabo de leer tu fic! Jajaja ya hablando en serio lo he leído varias veces, me gusta mucho, para que decir más, si siempre todo lo que escribes me gusta… me sorprende.
    Ves, yo siempre estoy pendiente de tus trabajos.
    Si que tuvo un fuerte cambio Sesshoumaru… yo quería que “cambiara de licor” xD
    ¡Ay que bien! Pudo sujetar a Tessaiga… ¡wow!
    Ay pero ¡¿por qué?! Siempre llega Inuyasha en el mejor momento… aaahh pero bueno, eso me pone histérica… no, no tanto, pero me molesta un poco.
    Jajaja ya quiero leer el próximo capítulo, me dejo súper intrigada lo que has dicho sobre ese cap.
    Estaré esperando el cap 2 :)

    Adiós.
     
  12.  
    Asurama

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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Ya advertí sobre este capítulo

    II- “Intentando” reconciliarnos

    No fue a su cuarto, no estaba en sus aposentos, donde acostumbraba a dirigir en la noche, no estaba esperando a Rin, no podía estarse quieto. Era increíble que una insólita palabra de su hermanastro hubiera roto su equilibrio.
    Al primero que se atreviera a decirle que no tenía equilibrio lo borraría del mapa y se olvidaría del corazón compasivo.
    Caminó por los interminables pasillos, llamó sirvientes, puso los pies en la plaza de armas en la que prácticamente se había criado con su padre. Su obligación era una increíble forma de hacerle olvidar sur problemas personales, cuando quería olvidarse de sus obligaciones, su opción era, sin duda, Rin ¡¿Estaba tratando de quitarse a Rin de su mente?! Era natural, su presencia no lo dejaba pensar, lo seguía hasta en las tardes y lo torturaba en las noches. Pasó cerca de un charco de agua y pudo ver parte de su reflejo debajo del cielo rojizo. Impasible, imponente, poderoso, un príncipe glorioso así como su padre, así se veía, era la única imagen que mostraba a los demás, imagen que con sólo una pequeña presencia podía cambiar. Era algo muy curioso.
    Llamó a soldados youkai de diferente rango para indicarles sus tareas personalmente, como un general debía hacer: a los que harían la guardia nocturna, a los que darían el toque de queda y a los que haría patrulla, todos estaban bien guiados y ordenados. Sin darse cuenta, la maravillosa ley de su padre volvía a resurgir brillante bajo su mandato, bajo sus reglas y su poder. Cuando le habló a Inuyasha después de esa insólita “batalla”, tenía toda la razón: “era como él, era como su padre”. Antes quería negarlo, ahora lo aceptaba; antes renegaba y ahora le debía sus respetos, tenía razón en lo que le dijo a Rin: “el tiempo cambia las cosas”. No se lo dijo a Inuyasha porque estuviera orgulloso de ello, sino porque necesitaba convencerse, probárselo a sí mismo, un entrenamiento destinado a convertirlo en un Maestro de corazón sincero, como su padre lo fue.
    Mientras reflexionaba, seguía dictando siempre estoico, los siguientes movimientos de sus súbditos.
    De repente, algo lo sorprendió. Llegó a un pasillo donde no se cumplían en lo absoluto sus órdenes. Los sirvientes no trabajaba, los soldados estaban sentados al borde del pasillo, las criadas charlaban con los invitados. Lo único que le faltaba era servidumbre indisciplinada, con cortarles las cabezas todo acabaría
    —¡Muévanse ya, grupo de alimañas inservibles! ¡Les di órdenes! —el barullo cesó y se convirtió en un silencio sepulcral acompañado de gestos de temor— ¿No me escucharon? —Todos comenzaron a moverse rápidamente de un lado a otro, yendo a sus puestos y sus trabajos.
    El amo tenía paciencia, pero muy poca. A uno de los soldados que estaba levantándose lo empujó desde atrás
    —Levántate y camina, pedazo de insecto —así empujó al que estaba al lado, y al siguiente. Todos comenzaron a pararse rápido uno tras otro: soldados, criados y algunos jóvenes mientras el amo pasaba lista. Cuando ella se puso de pie, él le colocó una pesada mano en el hombro y la empujó hacia abajo, obligándola a sentarse de nuevo
    —Las cortesanas no se levantan entre la servidumbre —le dijo insensiblemente como era su costumbre, luego miró a sus sirvientes.
    Sus ojos se llenaron de lágrimas. Él le exigía a los demás que la llamaran hime-sama y ahora la había tratado de cortesana…
    —¡Ay!
    —Mal
    —Eso le dolió —comenzaban a burlarse y reírse los soldados
    El amo les dedicó una mirada furiosa, de hielo puro, sin pensarlo dos veces, todos huyeron a sus puestos. Nadie lo había notado, pero Inuyasha, Kagome y Miroku estaban ahí también. Ellos miraron alarmados la escena y aún más sorprendidos cuando la vieron correr hacia dentro, con el rostro cubierto por sus manos, como escapando del daiyoukai que ni siquiera la había observado al marcharse.
    Ninguno de los tres llegaba a comprender lo que sucedía, lo único que sabían era que algo estaba muy mal y que Sesshoumaru era el culpable. El trío lo vio retirarse, siguiendo de cerca de sus soldados, sin que le dieran la menor importancia a Rin.
    —Esto no puede ser —murmuró Kagome y entró corriendo detrás de Rin, pero no la encontró.

    —¡No puede tratarla así! —se quejó histérica, Kagome— ¡Que sea el amo del palacio no le da ese derecho!
    —Feh ¿Y qué harás? ¿Decirle que lo arregle? —dijo Inuyasha sarcásticamente— fue un gusto tenerte como esposa.
    —Inuyasha, pensemos fríamente —dijo el monje
    —Díselo a ella—se quejó Inuyasha
    —Osuwari —gritó Kagome mientras Inuyasha levantaba del suelo el tatami en el que había caído bruscamente
    —Más despacio, esto es un desastre —se quejó Sango mientras le arreglaba el cabello a una de sus gemelas.
    —Tú no sabes lo que pasó —le dijo Inuyasha
    —Pues lo lamento por haber tomado mi siesta —le respondió ella mirando hacia otro lado
    —Una siesta demasiado larga
    —Tú no cuestiones, que no haces nada —le reclamó Kagome— Y volviendo a lo anterior ¿Qué hacemos?
    —Keh ¡Que lo arreglen ellos solos! —dijo Inuyasha restándole importancia
    —No puedes decir eso
    —Por esta vez Inuyasha tiene razón —opinó Miroku
    —Miroku-sama ¿De qué lado está? —dijo la miko fastidiada
    —De ninguno, pero piénselo, Kagome-sama. Los youkai son muy impredecibles y si intentamos ayudar puede que sólo empeoremos las cosas —le sonrió en forma cautivante—. Ellos siempre se han llevado bien y se conocen desde hace mucho tiempo, cuando el problema pase, todo volverá a estar bien
    —¿Entonces opinas que sólo debemos esperar? —preguntó Sango
    —Hazle caso y terminemos con esto —dijo Inuyasha bostezando
    —No puede ser… —suspiró Kagome

    —Inuyasha, ¡le dijo cortesana! —le dijo Sango— ¡Es prácticamente un insulto! Eso no lo contaste
    —¿Y yo qué voy a saber? —intentó defenderse el hanyou
    —Es una locura ¡No pudo hacer tal cosa! —se quejó Kagome indignada mientras arrastraba a su esposo por los pasillos— ¡Si lo hubiera sabido desde un principio yo misma le hubiera roto su cabezota
    —Quisiera verte intentarlo —se burló Inuyasha— podría ser al revés
    —Cállate y osuwari —dijo molesta— es peor de lo que pensé, Sango, la pobre chica debe estar muy mal
    Entonces se escuchó el llanto de Rin y cuando se acercó dispuesta a entrar y consolarla, escuchó la voz de Sesshoumaru que la dejó petrificada. Todos se quedaron al margen de la puerta o, mejor dicho, oyendo detrás de ella.
    —…No quería tratarte así, pero no podía hacer nada
    —A… alteza, yo… —sollozaba
    —Promete que no volverás a meterte entre los soldados
    —Se lo prometo —dijo aún llorando
    —Prometo jamás volver a tratarte así —dijo colocándole una mano sobre la cabeza—. Debió ser terrible y deshonroso… tanto como saber que te oyen detrás de una puerta —murmuró con fastidio, mientras oía cómo los visitantes huían de prisa. Curiosamente, la escena calmó a Rin.

    Salió tranquilamente al jardín para respirar el aire nocturno, dando gracias por haber solucionado sus problemas y por haber calmado a Rin. Realmente no quería tratarla de esa forma tan denigrante, pero…
    —¿Por qué la trataste de ese modo tan vil? —gritó ella histérica a sus espaldas
    —Kagome —dijo sin voltear, sin inmutarse
    —¿Cómo te atreves?
    —Me atrevo —dijo impasible—. Aquí se hace lo que yo ordeno y sino se sufren las consecuencias
    —Creí que la amabas
    —¿Qué te hace pensar eso? –preguntó en tono indiferente, mirando hacia un estanque y caminó en esa dirección sin esperar una respuesta.
    Pero ella lo siguió
    —Es por la forma en que la trataste siempre, preocupándote por ella, ayudándola, protegiéndola, respetándola… ¡¿Y ahora le dices semejante cosa?!
    —No es asunto tuyo
    —Pero es importante, al menos para ella lo es. Creímos que lo habías comprendido cuando la trajiste
    —“Creyeron” mal, no hay nada que entender —dijo caminando con el lastre atrás—. ¿Por qué no dejas de seguirme?
    —Lo haré cuando me des una respuesta coherente
    Se volteó
    —Aquí tienes tu respuesta y ahora lárgate antes de que me arrepienta
    —¡Mira cómo tiemblo! —dijo sarcásticamente Kagome— eres un tonto
    —¿Qué me dijiste?
    —Tonto
    —¿Q-u-é m-e d-i-j-i-s-t-e? —dijo furioso
    —¡Tonto!
    Él frunció el ceño como quien siente una molestia
    —Humana tonta, incoherente, repugnante, molesta, entrometida, insolente, imbécil, floja, estúpida, ingenua y engreída –dijo antes de darse la vuelta y alejarse.
    Ella se quedó sin palabras
    —¿Así tratas a la persona que crió a tu Rin? —dijo con la voz quebrada
    —¿Crees que me conmueves?
    —¡Se nota que no le tienes ni un poco de respeto! —dijo con los ojos humedecidos
    Él volteó lentamente, sorprendido
    —Eres un idiota ¿Sabes? No sé cómo te soporta, no sabes cuánto debe sufrir por tu culpa —sería capaz de dar cualquier cosa para callar a esa humana ¡eso él ya lo sabía! ¡No necesitaba que alguien más se lo recordara!— ¡Compadezco a Rin! Tú la tratas como si fuera un objeto de tu pertenencia o un esclavo, ni siquiera tienes en cuenta lo que ella siente ¡No te importa, sólo te importa tu propia vida!
    —¡Cállate! —dijo él y ella guardó silencio— Ya tuve suficiente con escuchar tus insolencias —dijo notablemente molesto—. No tienes idea de lo que dices.
    —¡Por supuesto que…!
    Él la abofeteó dejándole una profunda marca en el rostro, y con tanta fuerza que la tiró al suelo
    —¡Ni una palabra más, Kagome! Ya no quiero escucharte
    Ella se levantó adolorida
    —¿No soportas que te digan la verdad?
    —No soporto que digan puras estupideces —movió la cabeza negativamente, sin quitarle los ojos de encima—. No sabes lo que dices. Una palabra más… —ella lo miró con los ojos muy abiertos— …y te corto la lengua
    —No puedes hacerle algo tan cruel —murmuró ella
    —¿Piensas que eso fue cruel? —le dio la espalda para irse— Tú no tienes idea.

    Kagome cruzó silenciosamente los pasillos, subió pesadamente las escaleras y entró al cuarto común que había sido abierto para ellos
    —Kagome-chan, ¿Qué te pasó? —dijo Sango sorprendida al verla tan triste y con semejante herida en el rostro
    —Nada
    —Déjame ver esa herida
    —No, así está bien
    —Pero Kagome-cha…
    —En serio, Sango. Está bien
    —¿Kagome-sama qué le pasó? —Preguntaron los hijos de Sango al entrar y verla
    —No es nada pequeños —dijo sonriéndoles amablemente, pero ellos se le quedaron mirando
    —Pero Kagome –dijo Inuyasha levantando las orejas ni bien entró— ¿Qué te pasó?
    Ella dio un profundo suspiro
    —Te dije “No, no te metas” —se sentó a su lado con los ojos cerrados— Pero “no”, tú tenías que meterte ¿Ves por qué te digo…
    —Sí —contestó ella cabizbaja
    Él la miró, puso un rostro apenado y bajó las orejas
    —Bueno, no tienes que ponerte así, ya está que…
    —Sí —volvió a decir ella en un tono muy doloroso
    —¿Ese idiota te insultó? sólo dime, iré a reclamarle —dijo poniéndose de pie
    —No, Inuyasha, déjalo así —contestó Kagome mirando hacia un lado
    —Bien, si tú quieres…
    —Oigan, chicos, ya… —cuando Miroku vio la escena, se congeló en la puerta— ¿Qué pasó aquí?
    —Papá, Kagome-sama se golpeó —dijo una de sus hijas
    —¿Ah sí?
    —Fue ese inepto de Sesshoumaru —dijo Inuyasha muy molesto
    —Kagome-sama ¿él la golpeó?
    —Sí —contestó ella, asintiendo con la cabeza baja
    —¿Se puede saber el motivo?
    —Quiso hacerse la valiente y se fue a reclamarle por lo que le pasó a Rin —dijo Inuyasha
    —No debí hacerlo —se disculpó la miko.
    —No te disculpes con nosotros —le dijo Inuyasha despreocupadamente— es más, no te disculpes.
    Hubo un incómodo silencio
    —Bien, ya, arriba ese ánimo y déjanos que te curemos esas heridas —dijo Sango acercándose a ella
    —No —dijo ella alejándose un poco—. Está bien.
    —Pero, Kagome
    —Me retiro a dormir, hasta mañana
    —Hasta mañana —se despidieron todos muy confundidos por lo que pasó.
    Kagome fue a su cuarto y se tendió sobre el futón arreglado, dio un suspiro y se quedó mirando el vacío. No podía creerse que había tenido el valor de reclamarle a Sesshoumaru, tampoco imaginó que él la golpearía. Casi olvidaba que él no era Inuyasha, ni siquiera podía decirle osuwari… lo más terrible de todo era que quizás el Daiyoukai tenía razón, una razón que los humanos no entendían, quién sabe
    “Aquí se hace lo que yo ordeno, sino se sufren las consecuencias”
    “No hay nada que entender”
    “Ya tuve suficiente con escuchar tus insolencias”
    “¡Ni una palabra más, Kagome! Ya no quiero escucharte”
    “No soporto que digan estupideces”
    “¿Crees que eso fue cruel? Tú no tienes idea”
    Sin comprender por qué, sin entender lo que pensaba o sentía en ese instante, sin intentar comprender a otros lloró. Supo que sería una noche larga y lo que menos le dolía era el golpe en su rostro. No quería volver a enfrentar una situación tan denigrante
    —¿Por qué?
    Le dolían esas palabras y comprendió que la mejor arma de ese youkai no eran sus colmillos: era su lengua.

    La cena no fue nada tranquila, y sin Kagome era peor. Inuyasha, que solía tener mucha hambre, no probó ni un bocado, dio vueltas y vueltas y ahí quedó. Los demás comieron —o intentaron comer— en silencio y se fueron a dormir, hasta que solamente quedó Inuyasha, solo, meditando en esa habitación con una vela encendida.
    Se levantó, salió del cuarto, siguió el olor de su hermano y fue a buscarlo para reclamarle, pero no lo encontró. Bajó las escaleras y fue en silencio hasta el cuarto donde dormía junto a Kagome. Ella parecía profundamente dormida. El hanyou se molestó mucho cuando vio la fea marca que el idiota de su hermano le había dejado en el rostro, no se lo perdonaría, no tenía por qué golpearla así, sin importar qué imprudente sermón hubiera tratado ella de utilizar. Se sentó a su lado y ahí se durmió.

    —Sesshoumaru —dudó en las palabras que utilizaría
    —Creí haberte dicho que no quería oír de ti ni una palabra más —la miró. Tan temprano en la mañana y ya estaba fastidiando— ¿Acaso no hablé claro? —dijo molesto
    —Por eso, vine a disculparme
    Él se volteó incrédulo ¿le pidió disculpas? ¿A él qué le importaba eso?
    —Lárgate
    —Primero déjame hablar
    —¿Qué parte de “no quiero escucharte” no entendiste?
    —Está bien —dijo y se dio la vuelta para irse por donde había venido— pero déjame decirte que no deberíamos llevarnos tan mal
    —¿Qué te hace pensar que podemos llevarnos bien?
    —¿Que… somos familia?
    —Tú no eres mi familia
    —Nosotros no lo vemos así. Todos somos parte de una misma familia
    —Sandeces
    —Como quieras, pero no es justo para nadie, ni para nosotros ni para ti
    —Ya lárgate o te saco a golpes
    —Bien, adiós —él se concentró en un papel que estaba leyendo—. ¡No lastimes a Rin-chan! —escuchó de lejos mientras la molesta humana se iba.
    —Familia… sandeces.

    Esa tarde, cuando regresó de su vigilia esperando que la plaga se hubiera ido de su palacio, se encontró con ellos, en especial con ella, la que se sentía con libertad de contradecir sus decisiones, la que se había repuesto de su cachetada y parecía esperar otra.
    Así como digas una palabra, Kagome… me lo pagarás —pensó mientras pasaba entre sus soldados y sirvientes reverenciándole, mientras pasaba junto a su molesto hermano con su “familia”.
    Entró tranquilamente a sus aposentos esperando la hora de la cena
    —Sesshoumaru, quiero hablarte —dijo ella, irrumpiendo de pronto
    —Guardia —gritó él, y los soldados se amontonaron para cazar a Kagome y sacarla de ahí
    —¡Sesshoumaru! —le exigió ella
    —No quiero escucharte
    —¡Por favor!
    Mientras los guardias se la llevaban…
    —Alto —ordenó él y ellos la dejaron caer bruscamente al suelo—. Salgan y déjenos solos.
    Los soldados salieron apresurados y cerraron la puerta principal de las dependencias del amo.
    —¿Por qué los sacaste? —preguntó ella confundida
    —Para que no interrumpan nuestra conversación —dijo él volteando a verla.
    —¿Entonces me escucharás?
    —Sé breve —le dijo
    —Sólo pensaba que si realmente te importaba Rin tanto como dices, tratarla así es inapropiado, que merece más respeto y que, mostrando respeto hacia nosotros, también se lo demostrarías a ella. Además me disculpo, si ella vino aquí es porque es feliz, no importa lo que pase, y que no tengo derecho a juzgar si esto es cruel o no, pero no tengo otra forma de mostrar mi descontento, lo siento.
    —¿Ya terminaste? —preguntó él de forma seca y con su soberbia mirada
    —Sí
    —Ahora tú me escucharás a mí —ella quedó muy sorprendida ¿Qué le diría el cruel príncipe youkai?— Yo tengo derecho a tratar a la gente de mi palacio como mejor me parezca, estén ellos de acuerdo o no, porque están conformes con mis órdenes. Segundo, Rin me comprende y sabe por qué la traté así, no importa lo que piensen ustedes o todos los del palacio y tercero, la relación entre ella y ustedes no me incumbe, mientras ella sabe que jamás los he soportado, por lo tanto respetarlos a ustedes me importa un bledo —Se inclinó hasta quedar a la altura del rostro de Kagome, mirándola con esa superioridad característica— ¿Te quedó claro… onee-san? —dijo sarcásticamente, de un modo despectivo.
    —Sí —dijo ella afirmando con cortos movimientos de cabeza y los ojos muy abiertos— me quedó claro, o-nii-sama
    Él iba a levantarse
    —Sólo para mi tranquilidad… ¿Podrías explicármelo como si yo fuera Rin?
    Maldita humana, estaba pidiendo demasiado. Nadie, absolutamente nadie en ese palacio se atrevería siquiera a compararse con el nivel de Rin.
    —¿Si lo hago dejarás de perturbarme?
    —Sí —dijo ella
    Él asintió con cortos y rápidos movimientos de cabeza. Se sentó sobre las esteras del tatami como si Kagome fuera su igual y sin quitar su mirada de superioridad, habló.
    —Con el tiempo lo aprenderás —gesticuló con las manos— Aquí el youkai está ordenado en estrictos niveles de rango según su poder, siendo yo el más alto. Por tanto no puedo siquiera tratar al humano con respeto, menos como igual, de lo contrario todos los youkai de la región se volverán en mi contra, porque me verán como líder inoperante, lo mismo que relacionarme con ustedes —eso lo dijo de modo más despectivo posible—. Es mi único modo de demostrar que comprendo la seriedad de mi posición, aunque mis intenciones no coincidan con eso y aunque tenga que faltarle el respeto a Rin. No por eso le haré daño.
    —¿Entonces lo haces para mantener tu puesto?
    —No —dijo secamente—. Lo hago para mantener mi vida, la tuya, la de ella, la de los demás… y para conservar el orden. Ella lo sabe, que con eso te baste —la miró en silencio—. Ahora lárgate.
    —Espera… eso significa que no te caemos tan mal después de todo
    —Quizás no —dijo sin expresar ningún tipo de emoción.
    —Eso es maravilloso —dijo ella sonriente
    Él acercó nuevamente su rostro al de ella, a una distancia más que peligrosa. Kagome se congeló.
    —No te hagas ilusiones. Aún así sigues siendo la entrometida y repugnante humana de Inuyasha —dijo poniendo una expresión de rechazo.
    —Comprendo —dijo ella enojada, levantándose y sacudiéndose el polvo—, o-nii-sama —eso lo dijo en tono de sarcasmo.
    Luego de que ella saliera, el Daiyoukai suspiró y se dirigió a mirar por el balcón. Todo parecía tranquilo afuera cuando de repente alguien tocó a la puerta
    —Ya largo —dijo
    —¿Pasa algo malo, alteza? —preguntó ella cortésmente— ¿Desea que me retire?
    Él volteó a verla con una mirada serena.
    —Para nada, entra. No sabía que estabas aquí —parpadeó ilusionado—. Es que tu olor se ha fundido mucho con el de este lugar —hizo un gesto con la mano invitándola a pasar, con una mirada muy dulce.
    Ella entró con pasos lentos, cortos y elegantes, como si caminaran las rosas…
    —¿Le sucede algo malo? —preguntó educadamente
    —No, sólo era alguien que estaba molestando, pero no importa
    —Umh… ¿alteza?
    —Lamento mucho haber cometido el error de confundirte con otra persona que nada tiene en común contigo.
    Ella le sonrió
    —¿Qué desea que haga por usted?
    —Es demasiado tarde para té ¿Te gustaría cenar conmigo? —preguntó educadamente
    La muchacha asintió con una enorme sonrisa, tenía gran facilidad para olvidar sus ofensas y ofrecerle ser uno…

    **************************************************************************
    Cuando leo un Fanfic de Sesshoumaru y Kagome, me río. Es una relación que sería prácticamente imposible.
    Si empezáramos por la parte lógica, ellos son de signos Virgo y Sagitario… —no combinan en nada—.
    Ambos personajes tienen caracteres fuertes que chocan de por sí, estarían tratando de imponerse y pronto ardería el fuego, pero el fuego de un incendio peligroso, probablemente provocado por la caída de un rayo.
    Algunos se basan en la idea de que Sesshoumaru ayudó varias veces a Kagome, pero la realidad es algo diferente: Sesshoumaru ayuda a cualquier “necesitado” que se cruce en su camino —no sólo a Kagome—, aunque él quiera negarlo o evitarlo, diciendo que fue coincidencia… y aunque no siempre lo haga de un modo gentil ¿Ejemplos? Kohaku, Sango, Rin, Jaken, Kagura, Inuyasha, el padre de Kanta… y podría seguir. ¡Él es bueno aunque lo niegue!
    Algunos opinan que es porque formarían una pareja madura, pero hay que reconocer que a veces, Sesshoumaru es tan inmaduro para algunas cosas como Inuyasha, sólo que lo disimula con esa carita… Además no se nota, porque lo acompaña una mocosa inferior y un sirviente inoperante

    Kagome.
    Entró de un modo brusco a la vida de Sesshoumaru, introducida por su amado hermano Inuyasha.
    Kagome, con su carácter fuerte, siempre se le supo oponer, incluso cuando le tenía miedo, aún cuando podía ponerse en peligro de muerte.
    Para Sesshoumaru, ella no es como Rin, es una humana como cualquiera de los otros, nunca se tomó el tiempo de hablar con ella, nunca podrían llegar a ser amigos.
    Para él, Kagome es la humana entrometida y molesta, que es la pareja de Inuyasha, con la que él “se entretiene” —entiéndase en el sentido vulgar en el que nuestro príncipe usó ese término—, la que apoyó que lo desheredaran de la Tetsusaiga, la que ayudó a Inuyasha a vencerlo, la que se atrevió a cuestionarlo, la que lo miró muchas veces con cara de lástima.
    Entonces ¿Por qué rayos la ayuda si no la soporta?
    Simple. Porque está en deuda con ella, porque Kagome también protegió a Rin.
    Y cuando su pequeña humana está en peligro, cualquier ayuda vale ¡Incluso la de su entrometida cuñada!
     
  13.  
    AkoNomura

    AkoNomura Guest

    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    hola~!
    a no! yo que le doy sus pataditas en donde mas le duela! mira que tratármela de cortesana! menos mal que después la cosa se arregló.

    yo también pienso que Kagome y Sesshoumaru no pegan ni juntan, yo no vi ni la mas remota posibilidad en el manga y anime. si me pusiera en el lugar de Sesshoumaru creo que Kagome sería para él un bicho raro, alguien muy extraña, vamos, nadie le explicó que viene de otra época y que sus vestimentas y sus cosas son de allí. es cosa que pienso yo

    ya veía que Kagome terminaba sin cabeza o algo así, temí por su vida.

    nos leemos!

    ETO TI!
     
  14.  
    \Tsuyuka/

    \Tsuyuka/ Entusiasta

    Leo
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    ¡¡¡Oh my god Lube-sama!!!

    Este capi me dejó con boca abierta, que capítulo!

    Desde un comienzo supe que Sesshy sería algo "malito" con Kag, así que no me sorprendí mucho...
    Aunque yo hubiera puesto más ignorancia y tal vez un poco más de descripción en los sentiminetos... (claro, no en los de Sessh, ¿O si?)

    Muy bueno el capi, lo he decidido, ¡No voy a demandarte!
    Espero prontito la conti, ¿Quién será el o la que tendrá esa "hermosa y amena" charla con nuestro amadísimo príncipe?

    Puede que seas Inu, ya que lo anda buscando para arreglar algunas cuentas no? (X lo de Kag)

    O puede que me equivoque y nos sorprendas con nada a lo que nos imaginamos... (un don que pocos autores poseeén, pero que es una de tus características)

    Nos leemos luego si?

    Atte,

    Tsuyuka, el 5to DIos.

    PD: Se ve que no tengo ganas de escribir correctamente no?... Estoy dejando muchas posdatas ultimamente
     
  15.  
    Asurama

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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    ¿¿¿¿¿¿¿así que desean saber pronto con quién hablará el magnífico y estoico príncipe youkai??????
    pues...
    hablará con nosotros!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
     
  16.  
    Asurama

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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    III. Costumbres de un youkai

    El youkai es el fantasma más antiguo que ha habitado Nihon, como nos conocemos nosotros, incluso antes de que desembarcara el ningen. No he estado en otros lugares, por lo tanto no sé cuál es el origen real del youkai, o si hay youkai en otros lugares del mundo.
    El youkai ha convivido odiosamente con el inferior ningen durante muchos años y ha ocupado un lugar muy superior, negándose a ceder su enorme poder.
    Aún así, no existen muchos humanos que vivan para contar cómo es un youkai.
    Por lo tanto mis palabras vienen a descubrir cuál es la costumbre, el patrón del comportamiento del youkai, lo que no significa que todos los youkai sean iguales, esto es sólo lo que la mayoría hace, la forma en que hemos sido educados desde el primer momento en que vimos la luz.

    Organización social
    -Los youkai se organizan en manadas numerosas, las manadas de la misma especie se denominan “familias” o “clanes”, por ejemplo, el Clan Yourouzoku, o Lobo, el Clan Hyounekozoku, o Gato, el Clan Inuyoukai, o Perro, etc.
    -Cada manada tiene un líder, a su vez, todos los líderes de un Clan responden a un General, quien se encarga de regir, ordenar y proteger a todo el Clan. A excepción del Clan Inuyoukai, que tiene dos líderes.
    -El líder del Clan es un youkai generalmente de edad avanzada, que ha superado los mil quinientos años, con mucha sabiduría y mucho poder. Es llamado Anciano y considerado como un dios youkai. Tiene un nivel superior, lleva el título de Daiyoukai. A excepción del Clan Inuyoukai, donde el líder Daiyoukai es muy joven.
    -La manada principal es aquella que es protegida directamente por el líder Daiyoukai, todos los que descienden de esa manada son considerados príncipes, ellos llaman “Maestro” a sus padres y abuelos. A excepción del Clan Inuyoukai, donde se llama Maestro al príncipe de mayor edad y Joven Maestro al príncipe más pequeño.
    -Aunque varía de un clan a otro y de una manada a otra, la estructura se basa en el poder: El youkai de nivel superior somete al youkai de nivel inferior, la manada superior somete a la inferior, la especie superior somete a la inferior y así sucesivamente.
    El youkai de mayor nivel se considera un Daiyoukai. Para llegar a este nivel, son necesarias dos condiciones:
    a) El que ocupa esta posición debe ser adulto, es decir, poder valerse por sí mismo sin ayuda de herramienta o poder extraño y sin apoyo de otro. Esta característica no tiene relación alguna con la edad cronológica.
    b) El youkai debe superar el poder del más fuerte del Clan, el anterior líder y demostrarlo ante otros
    Hay nivel superior, medio e inferior, cada uno con subdivisiones de rango. Se sube de rango al aumentar el nivel de poder. La forma más rápida es derrotando a un youkai de mayor nivel al propio, aunque hay casos especiales como los Kitsune Youkai, que deben dar exámenes atacando humanos con un mínimo de exigencias.
    -Para convertirse en el sucesor de un Clan, deben tomarse en cuenta las condiciones expuestas anteriormente. Cuando el Daiyoukai cede su poder al sucesor, pierde sus habilidades por completo y no puede retornar a su lugar. A excepción del Clan Inuyoukai, donde el sucesor —un hanyou— se negó a ocupar su lugar, quedando el anterior Daiyoukai como líder —yo—.
    -El líder DEBE tener sangre pura, a excepción del Clan Inuyoukai, no hace falta explicar por qué.

    División de Territorio
    -El youkai es muy territorial, no permite que NADIE penetre en sus dominios. Si alguien traspasa los límites autorizados, está permitido matarlo, no importa la raza o especie del invasor.
    -El único límite de extensión del territorio es aquél donde habita un youkai de mayor poder.
    -Dos youkai no pueden vivir en el mismo lugar y considerarlo como territorio. En caso de darse esta situación, se combatirá y el perdedor será exiliado.
    -El youkai que entre en territorio ajeno y lo reclame como propio será considerado invasor y tratado como tal.
    -El territorio estará bajo un dominio general, incluyendo al territorio humano, dependiendo de qué lugar ocupe éste.
    -El territorio del país se divide del siguiente modo:
    *Tierras del Este, ocupadas por mesetas, colinas y bosques. Estos dominios le pertenecen al Clan Ryuujin y a su líder Daiyoukai, que los protege y rige
    *Tierras de Oeste, donde se halla la base de la antigua China, ocupadas por llanos y extensas playas. Estos dominios le pertenecen al Clan Inuyoukai y a su líder Daiyoukai
    *Tierras del Norte, lugar de las montañas nevadas, ocupado por los sabios yourouzoku. Estos dominios les pertenecen al Clan del yuki-kitsune
    *Tierras del Sur, dominadas por el fuego. Estas tierras le pertenecen al Clan del Ave de Fuego, conocida como el dios Susaku.

    Pareja (trato para un macho, trato para una hembra)
    -Las parejas son impuestas por arreglos hechos por los Daiyoukai y dictados a los padres, cuando los youkai “prometidos” son muy jóvenes. A excepción del Clan Inuyoukai, donde cada integrante, desde la segunda generación —Inu no Taishou— ha elegido por sí mismo lo que le pareció mejor.
    -Generalmente el macho es quien tiene mayor edad, a veces la diferencia puede datar de quinientos años. La edad para la boda puede ser cualquiera, llegando a ser la pareja, a veces, niños/as pequeños/as. En estos casos, las hembras permanecen al cuidado de un padre o tutor hasta alcanzar la edad adecuada, copiada de los humanos: trece años.
    -El ritual para una boda a menudo es copiado de las ceremonias humanas, principalmente en las casas aristócratas.
    -Generalmente no hay afecto entre las parejas, salvo que se trate de atracción física o deseo sexual. El youkai no conoce lo que los humanos llaman “amor”. A excepción del clan Inuyoukai, donde cada integrante —me incluyo— ha ido corriendo perdidamente enamorado detrás de la pareja, sin importar las consecuencias.
    -La pareja es de raza youkai pura y generalmente de la misma especie o clan. Salvo el Clan Inuyoukai, donde el macho de la especie —me incluyo— ha comprobado sentir una peligrosa atracción hacia la hembra de raza humana.
    -El macho es considerado como más importante y fuerte. Tiene dominio completo sobre la hembra. Aunque la hembra puede valerse por sí misma, suele depender de las decisiones de la pareja
    -La hembra es celosamente protegida por el macho, que la considera como una pertenencia valiosa. Salvo casos muy excepcionales, donde no le tienen piedad, como si se tratara de cualquier otro youkai. Hay especies que abandonan a la pareja luego de haber procreado.
    El macho es posesivo, no permite que se le acerque otro macho de ninguna clase o raza, un adversario será primeramente advertido de estar “invadiendo”, si éste no se aleja, será vencido y asesinado al instante, si sobrevive, no suele intentar regresar, salvo casos excepcionales.
    -Está permitido matar a todo ser que ponga en peligro la estabilidad de una relación, sea esta del tipo que sea.
    -Si el macho pertenece a un nivel superior, los youkai familiares de menor rango protegen a la hembra y la tratan con respeto, como tratarían a su esposo.
    -No suele haber competencia entre las hembras, de suceder, estas se dan en combates reales que culminan en la muerte de uno.
    -En algunas ocasiones, los machos pueden proteger a más de una hembra, caso muy notable en el Clan Inuyoukai.

    Trato para una hembra
    -En caso de presentarse una batalla, si la hembra no sabe pelear o no puede defenderse, es inmediatamente socorrida y sacada del área de peligro, en lo posible a leguas de distancia. Siempre, en toda batalla, se prepara un lugar de escape o un refugio, a veces de modo espontáneo. En lo posible, la hembra siempre será acompañada de un guardián lo más eficiente posible, que podrá vigilar y pelear por ella.
    En caso de no poder escapar, la hembra deberá permanecer tan cerca como sea posible del youkai que la está protegiendo, debiendo hacer todo lo que éste le ordene. En el caso de recibir una herida, será socorrida en seguida, y acompañada todo el tiempo hasta que se recupere. En este último caso, es posible que un aliado llegue a ofrecerse de escudo vivo si no es capaz de levantar un escudo de energía.
    -Abandonar a una hembra, sea cual fuere la causa, se considera acto de traición y se paga con un fuerte castigo, si no con la muerte.

    Trato para un niño
    -Las crías son celosamente protegidas, incluso más que las mujeres. Son casi inexistentes (o poco conocidos) los casos en los que se haya abandonado a las crías.
    -Quien se atreve a tocar una cría es asesinado de inmediato. Quien no protege a una cría o la abandona cuando se ha dejado a su cuidado, es asesinado también.
    -Los pequeños deben aprender tempranamente a cuidarse y valerse por sí mismos, de todos modos, siempre son protegidos, vigilados y educados por alguien de mayor edad (hermanos, futuros esposos, padres, guardianes, maestros o tutores).
    -La primera porción de comida siempre es para la cría, generalmente aprenden a cazar pronto.
    -Lo primero que aprende el pequeño youkai es a obedecer a su instinto y sus necesidades primordiales, estos lo ayudarán a sobrevivir. Seguidamente, aprende una serie de conductas, basadas en las costumbres del clan y de la raza youkai, es decir, TODO lo que estoy diciendo aquí.
    -La pelea es también muy importante. Desde muy pequeños, a los youkai se los entrena, se les enseña a utilizar las habilidades innatas y las “armas naturales” con las que nace (garras, colmillos, youdoku, etc.). La mayoría aprende a usar la magia o algún tipo de arma mágica. Son muchos los clanes que enseñan a los pequeños a cambiar de forma o a usar ilusiones para defenderse, como los zorros, los mapaches y las nutrias, entre otros.
    -Es común que los youkai puedan librar batallas desde pequeños, se les enseña como meta última y principal llegar a ser Daiyoukai.
    -Los youkai pequeños son los de menor nivel, así que les deben obediencia y respeto a sus mayores, casi todo el Clan. Cualquier signo de desobediencia es digno de castigo, que es impartido por el mismo youkai que fue ofendido, ergo varía su severidad de una situación a otra.

    Para los príncipes, la situación cambia:
    Nacer príncipe es lo mejor y lo peor que puede ocurrirte.
    -Son protegidos como si de joyas se tratara. JAMÁS, y dije JAMÁS son abandonados o maltratados. Aquel que se atreva recibirá un fuerte castigo o la muerte inmediata.
    -Son respetados como si de sus mismos padres se tratara.
    -Vigilados y protegidos todo el tiempo, tienen como mínimo cuatro guardianes.
    -Nadie ataca a un príncipe, y el que lo haga conocerá pronto las puertas del Jigoku.
    -Suelen ser los últimos en crecer —madurar para convertirse en adulto— por ser tan consentidos —entiéndase yo, mi hermano, el lobo apestoso o quien fuere o tuviera la desgracia de nacer príncipe—.
    -Además del entrenamiento “normal” y “común” para un youkai, son severamente entrenados en todas las artes: artes marciales, batalla, estrategia, historia, geografía, escritura, caligrafía, idioma y diplomacia, aunque la última casi no se utiliza. El entrenamiento es práctico, y pronto un príncipe entrará al campo de batalla, esté listo o no. Es generalmente en la práctica donde un príncipe recibe el “entrenamiento principal” con el que comenzará a subir de rango.
    -Desde siempre, están obligados a ser los mejores youkai y al crecer DEBEN convertirse en Daiyoukai como sea.
    -Los príncipes no son castigados bajo ninguna circunstancia, pero de darse un castigo, también es terriblemente severo.

    Otro capítulo. Apareamiento
    -Obligación para cualquier youkai —y para cualquier ser vivo—. Las batallas ponen siempre en peligro de muerte y la única forma de “sobreexistir” es a través de la descendencia en caso de que alguna desgracia ocurra.
    -El youkai se aparea con la pareja que le ha sido asignada, o la que ha elegido, jamás se mete con alguien ajeno a su núcleo, le es indiferente.
    -La mayoría lo considera como un acto fisiológico, destinado a la procreación, es decir, no es “normal” experimentar emociones durante el coito, salvo en el “extraño” caso de sentir afecto por la pareja. Eso se acentúa con el tiempo, al parecer.
    -La resistencia de las energías del youkai es bastante alta, como consecuencia, el youki aumenta considerablemente luego de haberlo realizado. De haber heridas, estas se cierran de inmediato como consecuencia del aumento de Youki, aunque un youkai no daña a su pareja, mucho menos en esa situación.
    -El pudor es algo inexistente en la raza youkai. Puede resultar cualquier cosa de un acto sexual
    -No existen las aberraciones de ningún tipo, esa es una perversión puramente humana.
    -Es común la marca de pertenencia, una marca poco profunda dejada por los colmillos en el cuerpo del amante, es una seña muy instintiva. El lugar de la mordida lo dejo a su imaginación, suponiendo que el humano es un ser “medianamente” inteligente.
    -La duración del coito varía según la resistencia y la tolerancia de los que participan
    -La posición siempre es dominante para el macho, y no sólo eso, sino que debe ser protectora en todo momento, a modo de un escudo, teniendo en cuenta que es el momento de mayor debilidad para cualquiera de los dos. Es decir, no se debe exponer a la hembra de ninguna manera.
    -No es común que un youkai se pierda a sí mismo durante el acto, también hay reglas que “prohíben” perderse más por seguridad de la pareja que por cualquier otra razón. Piensa que para un youkai perder la conciencia sería peligroso.
    -Si hay sangre, es común —incluso esperable— que la pareja lo limpie, lo mismo si hay fluido de cualquier tipo.
    -Un macho nunca se duerme, nunca se voltea ni se separa de la hembra bajo ninguna circunstancia —ni antes, ni durante, ni después—, siguiendo en la idea del “escudo vivo”. Siempre debe estar alerta y listo para atacar por cualquier eventualidad, no sólo por su seguridad, sino también por la de su compañera.
    -Por último, cualquiera que se entrometa, interrumpa, profane o intente profanar una pareja en esta circunstancia, será asesinado en breve, sin ningún tipo de contemplación. Nuevamente, el motivo es la seguridad y la protección del acompañante.

    Muestra de afecto, Lazo fuerte:
    Es la única muestra de afecto que el youkai conoce. Un lazo fuerte es una relación que une a dos seres distintos convirtiéndolos en uno solo a todos los niveles: físico, mental y espiritual, a veces involucrando también los sentimientos. Estos seres piensan y actúan como uno solo y su fuerza aumenta a niveles insospechados. Imagínate que seas amado y protegido todo el tiempo, que nunca llegue a sucederte nada.
    -El lazo se forma cuando dos seres que tienen una relación cercana se unen. Suele ser común entre hermanos, en las parejas y, a veces, en lazos de amistad muy íntimos.
    -A veces el lazo puede involucrar a más de dos personas —y digo personas, porque a veces un youkai puede crear un lazo con un ser humano—.
    -El lazo dura tanto como la vida de los involucrados, e incluso luego de la muerte de uno de los dos. Si no mueren ambos al mismo tiempo, uno se fusiona con el alma y la energía del otro. La forma más común es realizando el ritual del corazón.
    ¿Quieres ejemplos?
    -Kinka y Ginka
    -Hiten y Manten
    -Mi padre con mi hermano
    -Mi hermano y Kikyou
    -Shippou y su padre
    -Hirai-kotsu con Sango
    -Jaken, Rin y yo —no tuve tiempo ni deseos de crear un lazo con Kohaku, y Ah-Un es sólo una montura—.
    -Miroku, Sango y Kagome con mi hermano

    Regla general de relación:
    -La batalla es un modo de vida
    -Sobrevive el más fuerte, el youkai de nivel superior es libre de aplastar a uno inferior. El youkai inferior que desafíe a un superior será destrozado y humillado, pero si gana —cosa difícil— será alabado como superior.
    -si uno no puede pelear por sí mismo con la seguridad de ganar, no debe rebelarse.
    -Ser débil es una deshonra.
    -La muerte es aceptable, sufrir por una muerte no lo es, llorar por la muerte de alguien de menor nivel es impensable.
    -Matar no siempre soluciona un problema, pero lo frena. Suicidarse es una deshonra para el que lo hace y para quienes lo rodean.
    -La presa, el territorio, las pertenencias y la pareja son del que llegó primero, sólo un youkai de nivel superior será capaz de anular eso gracias a su poder. No hay lugar para la generosidad
    -Cuestionar a otro youkai, desafiarlo u ofenderlo, equivale a la muerte o al castigo que el youkai ofendido considere necesario.
    -El único youkai al que se le permitirá ser compasivo es a un Daiyoukai, el resto morirá.
    -El youkai debe mantener la pureza de su raza y, en lo posible, también la de su especie. Conservar la pureza es conservar el poder.
    -El poder es lo único importante
    -El humano es inferior, merece desaparecer, sino ser ignorado
    -El hanyou es tan inferior como el humano y merece ser humillado, no tiene ni voz ni voto; debe honrar su sangre youkai y despreciar su lado humano.
    -El que se relaciona con el ningen o el hanyou es tan basura como ellos
    -Tener un hanyou en la familia es una deshonra —y realmente puedo sentir lo que estoy diciendo—.
    -Tener al ningen en la familia es una deshonra —pero a estas alturas esta regla no me importa—.
    -No hay que acercarse al humano, al hogar del humano o a la aldea del humano, a no ser para destruirlo, tomar su territorio o tomarlos de alimento.
    -Las reglas impuestas por los Daiyoukai deben cumplirse a como dé lugar. El único modo de desobedecerlas es, por supuesto, convertirse en Daiyoukai.
     
  17.  
    AkoNomura

    AkoNomura Guest

    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    hola!!

    sabes... yo me considero una persona muuuy simple, que trata temas simples. pero a ti ya te estoy considerando una persona compleja que trata temas complejos ¡mira que ponerse a analizar como debió ser la organización de los youkais en sengoku jidai!
    hay algunas cosas que nuestro pedófilo... cof cof cof... quiero decir, nuestro daiyoukai favorito no cumple dentro de lo que él mismo dice....mmmhhh.... supongo que es por que él es el que manda.

    espero ver quien es el siguiente en conversar con él (aquí entre nos quiero que sea inuyasha)

    nos leemos!

    ETO TI!
     
  18.  
    Asurama

    Asurama Usuario popular

    Cáncer
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    Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Oh! AkoNomura, él es consciente de lo que hace, de hecho, dice todas las excepciones de las reglas que en su familia no se cumplen
    Y no es que me las haya inventado, cuando comienzas a mirar el anime y leer el manga con suma atención, descubres que los youkai sugieren que la organización es así, además me basé en las tramas de hermosos libros, no iba a dejarles las cosas a medias tintas!!!!!!!!!
     
  19.  
    \Tsuyuka/

    \Tsuyuka/ Entusiasta

    Leo
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    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?



    Jajajajajajajajajaja!!! Hay Lube-san!

    Mira con quien charla no más, yo sabía que nos ibas a sorprender... Esa es la Luchy que todos conocemos, no?

    Puse con colores diferentes lo que has escrito porque quiero decir algo de cada uno de esos puntos:

    Pues lo dice alguien que viaja, no solo con un humano, sino con una niña pequeña, a la cual debe defender; y no olvidemos contar a su hanyou hermanastro, que tenga tu misma sangre te relaciona, quieras o no, con él.

    Pobre de él, ¿Será que Sesshy lo odioa por eso?, ¿O sólo dice odiarlo, para ocultar un peqqueño afecto de hermanos?... Yo creo que es la segunda.
    ¡Oigan!, ¡Esta pregunta me da una idea para un One-shot!, ya mismo me lo pongo a escribir...

    Mmmm... Tiene razón en no importarle, a menos que considere a Rin una E.T., y bueno, con eso resolvemos el porqué lo acompaña... ¿Uds. Qué opinan? (seguro que piensan que ya no me quedan jugadores en mi cabeza, todos se fueron a almorzar, ¡Pero nunca regresaron! ToT)

    Bueno, yo creo que de veras la cree una especie de E.T. Con apariencia humana... Que se habrá tomado Sesshoumaru (¿?)
    (Directamente los jugadores se cambiaron de equipo, se vé que les pagan mejor, o al menos los utilizan...)

    Bien, aquí veo, o leo, porqué este hermoso demonio rompe algunas de esas reglas... Él es el Daiyoukai, el jefe de la manada. Y se toma sus privilegios, con estos, nadie le puede criticar nada; y aunque pudiesen hacerlo, terminarían muerto, ¿O no?

    Luego de eso, debo decirte que está estupendo, ¡Y yo que necesito conocerlos más!

    Creo que estoy loca, pero, sea o no intencional, con este FF me ayudas mucho.

    ¡Aguante la Spicología!, es hora de jugar...

    Atte.

    Tsuyuka, el 5to Dios.
     
  20.  
    Rei sama

    Rei sama Entusiasta

    Leo
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    Escritora
    Re: Una dulce conversación ¿Me concederías el honor?

    Hola!!
    Me encanta este nuevo fic que hiciste Lubecita!!! es hermoso!!
    Bueno yo te voy comentando desde el principio porque emm... me acabo de dar cuenta de que este fic estaba aquí, jajaja *verguenza* estoy muy despistada ultimamente.
    Oye Inuyasha es un autentico entrometido, siempre interrumpe ToT y justo cuando iba a hablar de su padre, pobre Sesshomaru tener un hermano tan cotilla.
    QUÉ??? llamó a mi Rin cortesana :llorar: pero que le dio ya se que es para que le tomen en serio como lider pero hijo la INSULTASTE como lo pille yo lo MATO!! *perverso* o puede que fuera él el que me mataría a mi *verguenza* eso es lo más seguro.
    Vaya los youkais tienen muchas leyes y Sesshomaru es una escepción en muchas *verguenza* hasta para encontrar pareja tienen leyes, lo unico que les falta es tener reglas para aparearse, a no que de esas también tienen *verguenza*.
    bueno buscaste muchas leyes por lo que veo Lubecita, te costaría siglos!! pero te quedó insuperable.
    Bueno solo decir que me ENAMORO :rosa: tu fic!!
    Bye!!
     

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