Un lugar oscuro

Contenido oculto

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Un lugar oscuro, tétrico y vacío. Solo la entrada a través de una puerta se recuerda, aunque luego, al girarse, esa puerta no está. Frente a una, cuando despierta aquí, se puede ver una mesa y dos sillas, únicamente. Alguien se sienta al otro lado.

Ni qué es este sitio, ni como se llega a él, ni por qué. Ninguna de esas respuestas tienen una explicación. Pero ella, cuando abre los ojos, se encuentra dentro de un lugar oscuro. Con la mente borrosa, los pasos la mueven casi de forma automática hasta la silla.

Le espera una larga... "conversación" con alguien.​

 

Thorna no pudo evitar esbozar una risa algo tétrica.

—Siempre así, ¿eh? Con ese ego tuyo... te lo dije entonces, y te lo diré ahora, "Roxanne": sigues siempre los pasos que te marcan. Vas moviéndote por el camino de migajas que otros dejan por ti. La Soberana, Kalef, qué más da. Y es curioso. Luego se te ve determinada, decidida, y capaz de anteponerte a cualquier obstáculo. Pero, ¿para qué, me pregunto?

Barajó sus cartas, las colocó frente a la mesa, tomó una y la miró. Luego se relamió.

—Oh, créeme, puedo ganarte. No me subestimes. Ese es otro de tus errores... creer que eres demasiado fuerte, ¿huh?

Inclinó la cabeza a un lado, mirando a Roxy con profundidad. Sus ojos negros... eran profundos, extremadamente profundos.

—... vamos. Respóndeme. ¿Para qué? Sí, tienes una meta, la tienes clara, y eres capaz de mover putas montañas por ella. Pero, ¿por qué lo haces, qué ganas? Yo si quieres te digo por qué lo hacía todo: por poder. Traicionaría hasta a mi madre por poder, joder. Se sentía tan bien en mis carnes... agh, qué maravilla. Una adrenalina que recorre cada fibra del cuerpo, eso sentíoa al clavarle balas en los cráneos a la gente. Para lograr esa sensación, se necesita poder. El poder se consigue con contactos. Los contactos se mantienen con dinero. El dinero se consigue con favores. Los favores mantienen los contactos —hizo un movimiento circular con su dedo en el aire, la otra mano, con la carta en ella, sujetando su mejilla—. Es un círculo vicioso de poder. Y tú me lo jodiste. Merecido, lo sé... pero, ¿y lo bien que se sintió mientras duró, huh?

>> Yo vine aquí con un objetivo, pero me la sudó por completo cuando saboreé el poder. Y acabé haciendo lo que me salió de los cojones. Pero... tú... ¿por qué? ¿Por qué lo haces tú, huh?

Por qué...

>> No sé por qué
>> Porque es la misión que se me ha encomendado
>> Porque algo dentro de mí me impulsa a hacerlo
>> Porque quiero, no necesito una razón


THORNA
Mano: 1
Baraja: 19
Descartes: 0

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

Thorna miró a Roxy con una sonrisa complacida, pero siempre macabra, para variar. Se veía que estaba encantada de escucharla hablar, de decir cosas que de verdad quería oír. Pero, a la vez, su gesto daba a entrever que estaba deleitándonse ante la idea de estar removiendo algo en Roxy. Y no precisamente parecía querer remover cosas buenas en ella.

—Ah. Así que no lo sabes —robó una carta más, observándola por solo un segundo, antes de volver a clavar los ojos negros en ella—. He ahí la diferencia entre nosotras. Tú no sabes ni por qué te mueves, ni por qué actúas. Y ahí sigues.

>> Puede que creerme más fuerte que nadie me causó acabar de aquella manera, sí. Pero una cosa te digo: lo repetiría una y mil veces. Porque me sentí tan viva. La magnética sensación de poder. La satisfacción al ver a todos temblar ante mí. Incluso ira, la frustración y la rabia incontrolada que sentí cuando todo se vino abajo. Todo ello fueron sentimientos que repetiría una y mil veces, sí. Y los sentí porque mi propósito estaba claro, mi razón de ser estaba clara. Construir algo, estar en la cima, lograr lo que te propones... e incluso ver cómo todo se te desmorona. Cuando tienes algo que construir, experimentar todo eso... eso define la vida, joder.

Sus pupilas oscuras se dilataron más aun, extasiada con sus propias palabras. Se había echado hacia delante, movida por una emoción repentina. Pero pronto miró a Roxy, y se volvió a echar hacia atrás, apoyándose en el respaldo de la silla.

—... pero tú no sabes ni por qué haces lo que haces. Y por eso tu vida es vacía. Y por eso tú estás vacía. No eres una persona que se desarrolla en torno a un propósito; eres un propósito construido en torno a una persona. Por eso tu cara es jodidamente estática, como una estatua de piedra o de puto mitrilo. Por eso no expresas nada. Porque no tienes nada que expresar, ¿huh?

La maldita Thorna... no parecía tener intenciones de parar de intentar hacerla ver como un cascarón vacío. Pero... ¿tenía razón en lo que decía?

De una u otra forma, no solo estaban combatiendo verbalmente. También tenía un juego en el que derrotarla. Y, si una ventaja tenía tener poca expresividad... era que podía engañar bien a otros y captar fácilmente lo que otros escondían.

Y Thorna, en su mano, desde luego no escondía nada especial.

Recompensa: en la mano de Thorna actual, la carta más alta es de nv. 3.


THORNA
Mano: 2
Baraja: 18
Descartes: 0

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

Thorna robó otra carta, pero su atención se centró en las mismas durante solo una fracción de segundo. Parecía mucho más interesada en observar a Roxy, cada reacción, cada gesto.

¿A que iba a ser verdad que le gustaba?

—Claro que me fijé en ti. Casi desde el principio, viendo esa magia tuya... supe que tú eras la persona a la que estábamos buscando, entre otras cosas. Porque, verás, mi objetivo era el mismo que el de mi hermana, las dos vinimos aquí con la misma intención: asegurar los orbes antes que tú, y, cuando llegases, encontrarte y detenerte. Obstruir tu misión. Las dos fuimos al Imperio de Elérea, y de ahí nos separamos para buscar pistas sobre ti. Yo bajé a Fayar, ella subió a Shinryu. Y yo lo hice infiltrándome en el ejército, y fui destinada a Fayar, al portón. Curiosamente, esos imbéciles eran tan, pero tan paquetes, que destaqué de inmediato entre todos esos peleles... por eso ascendí a oficial, e inmediatamente empecé a saborear el poder. Oh, qué maravilla. Dinero, poder, autoridad... me encantaba. Por eso me la acabaste sudando. Tú, el orbe, la Soberana, mi hermana. A la mierda todos.

Sonrió, mostrando sus amarillentos dientes en una mueca malvada.

—Esa es mi historia. Qué curioso el destino. Pasé de tu culo, y al final terminaste viniendo tú a mí cuando menos me importaba. Y precisamente tú fuiste el que acabó conmigo. Tú y ese gilipollas del principito.

... ¿quién era la persona con la que hablaba exactamente? No podía ser la Thorna real, porque había muerto, estaba segura de ello. Tampoco podía ser fruto de su imaginación, pues le estaba revelando cosas que Roxy no sabía. Y no tenía sentido que fuese una impostora, pues daba detalles que solo Thorna debería saber, como quiénes fueron exactamente los causantes de su caída, entre otras cosas.

Entonces, ¿quién, o qué, era?

THORNA
Mano: 3
Baraja: 17
Descartes: 0

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

La idea del purgatorio le hizo especial gracia a Thorna, que empezó a reír nada más escucharlo, mientras robaba otra carta.

—Si esto es el purgatorio, ¿entonces estás muerta? Joder, pues ojalá lo sea.

Y así, socarrona, puso las cartas de su mano en abanico, para luego cerrarlo y colocarlas en una pila que apoyó bocabajo sobre la mesa. Sus dedos tamborilearon sobre esta, mirando a Roxy.

—Roxanne, Roxanne, Roxanne... me pareces curiosísima. No eres la primera persona a la que la Soberana manda a buscar los Ojos, ¿sabías? Pero sí pareces ser la favorita, por algún motivo. Y es que hija, te lo tomas... demasiado en serio. Le bailas el agua que da gusto. ... y con todo, que estemos hablando y me hayas dado esa respuesta, me hace pensar que... hay algo un poco más allá en ti, ¿eh?

>> Tengo otra pregunta. El principito te usa como le da la real gana, y está un paso por delante de ti siempre aunque creas que tú también estás aprovechándote de él, pero... ¿qué hay del pringao ese del brazo, huh? ¿Y la bola de pelo?

Ah, hablaba de Tilkin y Mark, ¿eh? Se aproximó hacia delante, colocando su cuerpo ligeramente sobre la mesa, y habló casi en susurros.

—Dime... si tuvieses que ponerlo en una palabra, ¿qué son para ti? En una sola palabra. ¿Serás capaz de responder?

Esa pregunta era... difícil. Roxy había mostrado cierta preocupación por ellos en varias ocasiones, pero les usaba para sus propósitos. Colaboraban con ella, pero ni siquiera les dijo nunca cuáles eran sus motivos reales. Le habían salvado en alguna ocasión, y ella a ellos también, pero seguramente no le importaría dejarlos atrás.

¿Qué eran para ella? Definirlo en una sola palabra quizá era complicado, pero, si tuviese que decir alguna... quizá...

>> Amigos
>> Herramientas
>> Aliados
>> Compañeros
>> Nada

THORNA
Mano: 4
Baraja: 16
Descartes: 0

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

Thorna rodó los ojos, entrecerrándolos luego, con un gesto de hartazgo.

—"¿Aliados?". Pues menuda mierda de aliados tienes. Te dan más problemas que ayuda, aunque sean marginalmente útiles a veces. Habrías estado mejor juntándote con el coletas, y lo sabes. Él sí era más útil. Ese Mark es un pringao que solo te sigue, babeándote... pero me apuesto lo que quieras a que te ha dado aún más problemas de los que ya te dio cuando viajamos juntitas, que no fueron pocos. Casi la caga en taaaantas ocasiones...

Robó una carta, y suspiró. Soltó luego otra junto a la baraja, con desprecio.

—... bah, vaya mierda de mano, casi tan inútil como ese Mark —se llevó una mano al rostro, apoyándolo con desdén—. De verdad que no entiendo cómo puedes pensar que es tu "aliado". ¿En algún momento le has dicho qué pretendes, siquiera? Apuesto a que no. Te sigue como un perrito faldero, pero ya está. ¿Cómo puede ser tu aliado alguien que no sabe ni para qué cojones te ayuda? ¿Alguien a quien tú no tienes intenciones de ayudar?

La miró entonces, mientras dibujaba, distraída, círculos en la mesa con su mano.

—¿O, acaso... sí que quieres ayudarles, huh? Digo, es raro que los llames "aliados". Se supone que deberías utilizarlos por completo. Se supone que no deberías siquiera acercarte a ellos más allá de lo exclusivamente necesario para lograr tus objetivos. ¿No son esas tus órdenes?

Curiosamente, Thorna parecía saber más de sus "órdenes" que la propia Roxy. Porque aunque sabía que debía conseguir el orbe y que tenía que empezar por Ayra y por el Rey, y de ahí ella misma fue avanzando... no recordaba los detalles, ni nada de lo que le estaba contando.

—¿Sabes qué le pasó a tus predecesores? Que se desviaron de la senda marcada por la Soberana. Y en cuanto ella se dio cuenta de eso, zas. Eliminados. Porque empezaron a... hacer preguntas. Y a recordar. Y a cuestionarse cosas. Se suponía que tú ibas a ser perfecta, pero, chica. No lo eres. A mí no me engañas. "Aliados", tché. Un eufemismo para no reconocer que los aprecias. Pero al menos eres sincera... y no niegas que son más que herramientas.

>> Eres curiosa... empiezas poco a poco a ir abriéndote. Pero aun así, sigues el camino. Aunque te hagan pensar. Los otros no lo hicieron, los otros pararon. Tú no. Je. Quizá en eso sí eres diferente.

THORNA
Mano: 4
Baraja: 15
Descartes: 1
- Tomate letal (nv. 2, neutral)

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

Thorna rio una vez más. Todo lo que decía Roxy... parecía hacerle gracia.

—Ah, menos mal, sí. Ahora te queda mi hermana, sin embargo, que seguro que te dará mucha lata. Ella es más canija que yo, y yo siempre ganaba las discusiones. Pero eso sí, a mala hostia no nos quedamos cortas ninguna. Y ella puede usar magia. Estás jodida, cariño~.

Lo dijo como si fuese una broma, pero en realidad iba muy en serio. Robó otra carta, y echó una a los descartes antes, una de un Mono salvaje.

—Sé muchas cosas, sí, niña. Muchas, muchas. Pero como me la sudaba un poco, nunca me metí demasiado. Oh, pero no te creas especial porque Shawka y yo vayamos a por ti, por cierto; tú no eres el problema, el problema es la jodida Soberana. Tú sí eres su herramienta. Y resulta que hasta ahora, sus otras herramientas no funcionaban bien. Las teníamos vigiladas, sí, pero nada que fuese preocupante.

>> Pero, ¿tú? Oh, cariño. Para empezar, eres una mujer con la misión base de seducir hombres; solo eso ya debería ser motivo de preocupación, porque seguro que salía bien. Pero además, tu magia... es una mierda inestable, sí. Pero peligrosa. Y no somos estúpidas. Por eso tuvimos que venir a por ti.

... o sea, que sí. Ella ha sido la primera a la que persiguieron, ¿eh?


THORNA
Mano: 4
Baraja: 14
Descartes: 2
- Tomate letal (nv. 2, neutral)
- Mono salvaje (nv. 3, tierra)

JEFE: Tomberi (Nv. 20, Oscuridad)

 

Thorna alzó una ceja cuando vio la mano de Roxy.

—... ah, joder. Qué puta suerte tienes. Encima no tenía una mierda para atacarte. En fin... pues sí, es un puto dos a cero. Pero siempre se dice que quien se ríe el último, ríe mejor, ¿no?

Extendió la mano entonces hacia el centro de la mesa, y agarró la carta de jefe. La observó, por un momento, y la volteó para mostrársela a Roxy.

—El Tomberi, ¿huh? Capullos con una cuchilla en la mano, una lámpara en la otra, y que caminan muy lento hacia ti. Poco a poco. Si les golpeas, ¡zas! Te cagas de la hostia que te meten. Y si te alcanzan, bueno. Estás muerta.

Sonrió malévolamente.

—¿Sabías cómo le llaman al ataque que hacen para contraatacar todos los golpes? "Rencor de la raza". Parece como si de la lámpara surgiesen putos espíritus. Y dicen que, a más vidas haya sesgado la persona a la que atacan, más letal será este movimiento. El Tomberi es, así, una especie de, digamos... "emisario" de los muertos. Dispuesto a vengarse de los hijos de puta que matan a los suyos.

>> Puede que me hayas ganado otra vez, Roxanne. Pero aquí la que gana la guerra es la que consigue su propósito. Y yo el mío ya lo conseguí, antes de morirme: saborear el poder. Sí, tal vez pude haberlo disfrutado un par de años más, pero qué más da; fui feliz en ese tiempo. A ti... aún te queda. Te queda para siquiera darte cuenta de cuál es tu propósito de verdad, y cuál es el que te han metido en el coco. Que son dos cosas distintas. En ese sentido, yo he ganado. ¿Tú? Tú eres como un Tomberi. Caminas hacia delante, sin girarte, sin detenerte. Cuchillo en mano, con una meta clara, pero sin preguntarte ni por qué vas allí, ni qué pretendes lograr. Solo sabiendo que, cuando alcances el final, clavarás tu cuchillo, y tu misión habrá acabado. Y a todo lo que te arrojen por el camino, todo ataque que te lancen, será devuelto de forma automática, sin pensar, sin cuestionar: solo porque estorba en el camino.

Otra sonrisa oscura surgió en el rostro de Thorna.

—... eres como un Tomberi. Porque no es de ti de quien surge la fuerza, y no es por ti por quien te mueves. El Tomberi se mueve por el rencor de la raza, por los monstruos caídos. Él, y su lamparita, solo son el receptáculo con el que ese rencor camina y logra canalizarse en sus objetivos. De igual modo que tú eres... justo eso.

>> Te haré una última pregunta, mi querida Tomberita. Dime. Cuando consigas el orbe, cuando cumplas tu misión, si es que eso pasa... ¿qué sucederá luego? ¿Qué planes tienes? ¿Qué pretendes? ¿Huh? ¿Tienes, siquiera, idea de qué harás, qué será de ti?

>> Me ocuparé de la siguiente misión que se me mande.
>> Seré libre de hacer lo que me plazca.
>> Me quedaré sin ningún propósito en la vida.
>> Solo cuando lo consiga lo sabré.


THORNA
Mano:
- Bom galvánico (nv. 3, rayo)
- Bom gélido (nv. 3, frío)
- Bom gélido (nv. 3, frío)
- Mono salvaje (nv. 3, tierra)
Baraja: 14
Descartes: 2
- Tomate letal (nv. 2, neutral)
- Mono salvaje (nv. 3, tierra)

 

Thorna sonrió. Parecía que era la respuesta que esperaba oír, sí.

—Je... sí, ya. No tienes idea, ¿eh? Y crees que cuando acabe todo, lo sabrás. El asunto es que, querida Roxanne... cuando acabe todo, si cumples con tu cometido, no habrá futuro para ti. No habrá nada más para ti. La Soberana... dudo que te dé otro propósito, y si ella no te lo da, tú no podrás elegirlo. Porque nunca tuviste oportunidad de elegir, Roxanne; jamás. La que eligió fue ella.

>> Y mi hermana Shawka y yo queríamos darte otra... función. Una diferente. Quizá nosotras tengamos un propósito mejor para ti, ¿sabes? Al menos yo siempre vi que tenías potencial. Mi hermana era un poco más radical, ciertamente, pero si le demuestras tu poder y lo útil que eres, quizá se piense dejarte con vida. Porque... a mí no me jodas, te ha enganchado, ¿a que sí?

Se levantó de la silla, mirándola desde arriba. Y extendió la mano, para estrechársela.

—... anda. Si tanto crees que has ganado, y que eres mejor que nosotras, demuestra que puedes sobrevivir; si Shawka te mata habrá ganado, y no quieres eso, ¿a que no? Dile a mi hermana eso: que tus poderes son lo suficientemente grandes como para derrocar a la Soberana y permitirle llevar a cabo su plan de dominio que tanto anhela. Dile que hay algo en ti que te dice que no debes seguirla a ella, pero que, aun así, quieres hacerlo, porque no eres la marioneta de nadie. Aunque sea una burda mentira. Así, quizá, salves el pellejo. Luego ya... decidirás si te la cargas o no, si la ayudas o no. Seguramente no lo hagas, y sigas empeñada en el ojo, porque sí que eres una puta marioneta, pero oye. Así al menos puede que engañes a mi hermana.

>> Que se joda. Je... je... je, je, je. Hasta siempre, Roxanne. Mi pequeño Tomberi.

Y, tras eso... se desvaneció. Los párpados de Roxy, una vez más, empezaron a pesar, poco a poco. Todo se hizo negro a su alrededor.

Y terminó cayendo, presa de lo que parecía ser sueño.

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