Amy: Cuando estoy contigo y cuando no lo estoy, más me enamoro de ti. Él empieza a sonreír más con ella. Sonic: Igual yo, mi preciosa, no existe nada que no haría por ti y para ti. Haría cualquier cosa, excepto dejar de ser tu novio, eso nunca lo haré aunque me chantajearan con dinero. La toma de la cintura. Sonic: Eres más hermosa que todas las chicas que he visto en toda mi vida. Ella empieza a llenarse de más amor y felicidad. Amy: Sonic, te besaré y nada ni nadie me lo impedirá. Sonic: También te besaré y no existe nada ni nadie que me lo impida. Pusieron las bocas así, se acercaron lentamente cerrando los ojos y se besaron por treinta segundos. Sonic: Te amo tanto como tú a mí, mi estrella. Amy: Te amo totalmente más que a nadie y totalmente más que a mí misma, mi lucero azul. Sonic: Mañana haré todo lo que debo hacer para dejar mi casa sin esperar a vendérsela a nadie. Amy: Lo mismo haré yo. Sonic: Nos iremos para siempre a un pueblo del que muchas veces escuché durante los últimos cuatro años, uno llamado “Paraíso del Verdadero Amor Eterno y Perfecto”. Amy: Perfecto, y estaremos juntos para siempre. Finalmente, llegó el día de mañana, hicieron lo debido para dejar sus casas, se fueron al pueblo que Sonic mencionó y vivieron felices, enamorados y juntos para siempre. FIN