de Inuyasha - Soledad [InuxSan]

Soledad [InuxSan]

SOLEDAD​

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[INUYASHA X SANGO]​

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Drabble​

By Stefy Mustang​

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Después de tres días de estar padeciendo de una fiebre incurable, Miroku dio un último suspiro de agonía y falleció.

Sango lo lloró durante días. El hombre que más amaba ya no estaba en este mundo. La Muerte se lo había arrancado de sus brazos.

Inuyasha no hacía más que verla a lo lejos. Él también estaba afrontando la pérdida del amor. Aome había regresado a su época y el pozo había quedado sellado misteriosamente. Sabía que jamás la volvería a ver.

Los días se convirtieron en meses, los meses en años. El mitad bestia no podía seguir tolerando las lágrimas de la joven a pesar de que la entendía a la perfección.

— A él no le gustaría saber lo triste que estás...

Sango alzó su vista y descubrió a Inuyasha sentado justo al lado de ella.

— Aome tampoco volverá. —prosiguió él—. Y por más que no quiera tengo que olvidarla.

— ¡Pero es que yo nunca olvidaré a Miroku!

— ¡¿Y es que acaso dije que tenías que hacerlo?! —gritó, irritado.

Ella desvió su mirada para ocultarle el llanto que volvía a aflorar.

Inuyasha se dio cuenta y tomó el rostro de la exterminadora en sus manos. Se sentía culpable por haberla hecho llorar.

— Discúlpame...

Ella descubrió en el mitad bestia la misma pena que estaba soportando. Aquellas orbes doradas refulgían e intentaban reprimir el deseo de descargar esa soledad que lo acompañaba cada segundo de su existencia.

Su corazón dio un repentino cambio. ¿Acaso Inuyasha estaba empezando a gustarle? Intentó deshacerse de esos pensamientos, pero él se acercaba cada vez más.

Inuyasha la silenció antes que pudiera llegar a decir algo. La silenció con un beso inesperado.

Se separaron, todavía sobresaltados. ¿En que estaban pensando? ¡Eran amigos!

Sin embargo, lo volvieron a hacer. Cada que sus labios se tocaban, sentían que el vacío de sus almas iba desapareciendo.

Se tomaron de las manos y divisaron el horizonte. El sol empezaba a ocultarse para que la noche tomara su lugar en el cielo.

El destino les había brindado una nueva oportunidad para ser felices. El pasado era inevitable, pero tenían derecho a continuar con su vida.

FIN


Notas de la Autora:

Este es mi primer drabble, pero además, mi segundo proyecto con parejas inusuales. El primero es un long-fic y todavía no lo termino. El tercero lo pienso publicar dentro de poco. Sólo digan si se interesan en leerlo y yo les mando la invitación.

Respecto a la historia, no crean que soy fanática de esta pareja. Simplemente fue una idea repentina, un experimento escrito un sábado por la mañana en un momento de inspiración. Espero que les haya gustado, si no, siempre pueden quejarse, pero ya saben, en términos cordiales.

Dedicado a Fernanda, allá en Chile. Aunque sé que hubieras preferido una historia en la cual Miroku no muriera. Créeme Fer–sama que yo también, pero era necesario por el bien de la trama.

Stefy Mustang :sang: