One-shot de Naruto - Simples momentos [Shikamaru&Temari]

Autora: LacrymosA
Titulo: Simples momentos
Personajes: Nara Shikamaru & Sabaku no Temari

Simples momentos

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—Y con esto terminamos.
—Supongo que sí.

Ella se levantó de su asiento guardando todos los documentos en una carpeta.

—Iré a llevárselos a la Hokage, solo espero que no haya ningún problema.
—Sería muy problemático si lo hubiera.

Él no se levantó, dejó caer el peso de su cuerpo en el respaldo de la silla y se acarició las sienes, realmente estaba cansado.

—¿Qué harás después?

Pensó un poco antes de contestar.

—Mi trabajo aquí terminó por ahora. Los exámenes comenzarán en un mes, hasta entonces volveré a Suna.

—Ya veo —respondió sin más. Vio como su compañera se encaminaba hacia la salida— Es algo tarde ya, no piensas irte en este instante ¿o sí?

La de cabello rubio se detuvo en la puerta y lo miró con una ceja levantada.

—Sería tonta si partiera ahora. Mañana al amanecer lo más seguro.

El de cabello negro respiró profundo y reuniendo todas sus energías se puso de pie, dejó escapar un gran bostezo y se acercó a la puerta junto a ella.

—Nos vemos al amanecer, entonces.
—No es necesario que lo hagas, no me perderé en el camino hacia la salida de la aldea.

Ambos comenzaron a caminar con dirección a la oficina de la Hokage.

—Puede que no —guardó sus manos en el bolsillo del pantalón mientras caminaba, su vista la mantenía al frente— Pero sabes cómo se pone Tsunade-sama si las cosas no salen como ella las ordena.

—¿Le temes a una mujer?
—Le temo a la Hokage, eso es diferente.
—Como tú digas. Pero te lo reitero, no es necesario que vengas, hablaré con Tsunade-sama al respecto.
—¿En serio?
—Sí, ya pasé toda esta semana en la aldea. Puedo arreglármelas sola.

Luego de entregarles los documentos que contenían los preparativos para los exámenes chunnin, ambos shinobis salieron de la Torre Hokage.
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Eran aproximadamente las seis de la mañana cuando la joven shinobi de la Arena ya estaba terminando sus preparativos para los próximos tres días hacia su aldea natal. Había tenido una semana bastante ocupada respecto a los exámenes y ahora ya era momento de regresar a su hogar luego de haber cumplido su misión.

—Muy bien.

Estando todo listo, abandonó la estancia donde se había hospedado esos días. Salió tranquila, sin ningún apuro. La mañana se presentaba fresca, el cielo despejado y con la aldea de la Hoja en silencio por las horas tempranas.

Pero su tranquilidad no duró mucho. Fue dar unos pocos pasos para encontrarse con la persona menos esperada.

—¿Tú...? —lo vio acercarse aún sin salir de la sorpresa.

—Sabía que te irías temprano —bostezó casi por inercia— Pero no creí que sería tan temprano.

—¿Qué haces aquí? —ignoró por completo su comentario.

El joven Nara suspiró con desgana, fue tonto al creer que no necesitaría una explicación para ella.

—No es como que haya querido desaprovechar la oportunidad de dormir hasta tarde —comenzó a caminar, ella lo seguía— Simplemente me desperté... por más problemático que suene.

Temari no sabía si reírse por la poca fortuna del muchacho o sentir pena. Optó por no ser tan cruel con él.

—Pobre de ti —sonrió.

Ambos continuaron caminando. Sus conversaciones giraban entorno a los exámenes, asuntos de ambas naciones y alguna que otra cosa trivial.

Cuando quisieron darse cuenta ya habían llegado a la salida de la aldea.

—Supongo que te veré cuando comiencen los exámenes —habló él en señal de despedida.

—Así es —afirmó ella— Espero que para ese entonces ya hayas llenado la solicitud para ser Jounnin. Sé que que eres capaz de serlo, sólo deja de considerar todo problemático.

Shikamaru la miró sorprendido. No sólo por lo dicho sino por la forma de decirlo, más que petición o sugerencia fue algo así como una orden. Pero no una como lo diría Tsunade o su propia madre, fue una orden totalmente diferente.

Temari enseguida notó lo descolocado que había quedado el genio Nara con su comentario.

—Ambos sabemos que puedes. Nos vemos.

Se despidió regalándole una sonrisa dulce y sincera, para después comenzar a avanzar.

Shikamaru la observó alejarse. Sé llevó la mano a la nuca, reflexionado en lo dicho por ella.

Vamos, si era capaz de levantarse temprano sin la necesidad de hacerlo, ser Jounnin no se veía tan imposible.

—Mendokusai, Temari...

Fin
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