Sala de Música

Volteé hacia la hechicera.—¡En efecto, ella!

—Oh de mi persona, atrapado bajo los trucos de un malvado brujo, esta hechicera envió un conjuro para que yo pudiese salir con mi corona sano y salvo, ¡Honores para ella de parte de su majestad!

 

— No son necesarios los honores querido Rey... me alegra el poder ser yo el que lo haya salvado

 

— ¡Te doy las gracias, hechicera, de mi parte y de todo el reino! — Miré al rey luego de que se resolviese el misterio, la obra estaba a punto de terminar. — Propongo, si a su alteza no le molesta, un banquete de celebración. — Susurré fuera de mi personaje: — ¿Que tal si vamos por algo de comer? Tanta actuación me dio hambre, jajá.

 

--Sí, esperen, y... ¿Daniela? ¿No debería de dar el final? --pregunté mirando a todos lados.

 

— Se escabulló a la cocina... — les explique arreglandome el cabello — Y bueno, ¿vamos?

 

Solté unas bonachonas risas dignas de un rey amable.—¡A la cocina, esta vez la realeza invita el banquete!

Estos chicos eran asombrosos, me había relacionado con millones de personas en toda mi vida, pero con toda la honestidad podría decir que no tenía ningún... como le decían, "Amigo".

 

--¿Muy solo pad.. digo Graham? --dije viendo hasta atrás a Graham.

 

— Fué a la cocina, nos encontraremos con ella ahí. — Me moría de hambre ya que no habia cenado, mas bien, no tenia ganas. — Solo sigan el sonido de los cascabeles... — Dije riendo, mientras me dirigia con los demas a la cocina.

 

Tenía tanta hambre que fue por algo de comer mientra escuchaba muchas voces platicando pero no le tome atención.