One-shot de Pokémon - Reflexionando en tí (Pearlshipping)

Tema en 'Fanfics Terminados Pokémon' iniciado por Paulo, 18 Noviembre 2021.

  1.  
    Paulo

    Paulo Athena no Seinto (Santo de Athena)

    Capricornio
    Miembro desde:
    18 Noviembre 2010
    Mensajes:
    228
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Título:
    Reflexionando en tí (Pearlshipping)
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Romance/Amor
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1034
    En medio del camino hacia mi siguiente batalla de gimnasio, me encontraba en un obscuro bosque.

    Sentado sobre un tronco, en silencio y pensante... me hallaba tras el fallido intento de conciliar el sueño a diferencia de mis amigos Brock y Dawn.

    ''¿Qué fue lo que me sucedió?''

    El surgimiento de dicha cuestión se remontaba desde hace un par de días atrás en un gimnasio.

    En ese mismo lugar me ubicaba en el terreno de combate, mientras que el líder y yo nos preparábamos para empezar.

    —¡Vamos Ash, tu puedes Ash, se que ganarás! —Esa era la voz de mi amiga Dawn, pues ahora y por primera vez ante mis ojos iba vestida de porrista.

    Durante el mismo encuentro, nada más que el oír de sus palabras era el motivo constante de mis distracciones, puesto a que cada que podía trataba de verla aunque fuese de reojo o por unos instantes.

    Y bueno... terminando ya con el combate, recibí del mismo oponente mi siguiente medalla de Sinnoh, puesto a que había logrado sobreponerme ante esa situación y derrotado de forma justa a esa persona.

    Luego de eso los días pasaron y ya habíamos abandonado la ciudad, pues ahora íbamos de camino hacia la siguiente mientras cruzábamos antes por el bosque, ese mismo en el cual me encontraba actualmente, de noche y despierto, en comparación a mis compañeros de viaje.

    ''No lo entiendo''

    Palabras tan simples como estas eran las que rondaban sobre mi cabeza, no importaba cuanto siguiera pensando, no había conclusión a la cual podía llegar por mi cuenta.

    En algún momento alcanzo a pensar, en que tal vez mi amigo Brock podría solucionarme dicha duda, pero algo dentro de mi me hace sentir que tal vez esa no sea una buena idea, será... ¿verguenza? Continúo a no comprender la situación, ¿por qué debería de sentirme así con respecto a mi compañera de viaje?

    Mientras sigo cuestionándome tales cosas, aprovecho para observarlos a ambos, pues estaban algo separados en sus respectivas bolsas para dormir.

    Volviendo a la primera solución, bien podría despertar a mi amigo para terminar con este lío mental, pero por razones dadas previamente eso no me era tan sencillo, siendo ese el caso elegí hacer algo por mi mismo y opté por un acercamiento sigiloso.

    Estando ya a su lado me puse de rodillas ante ella, y con ambas manos apoyadas en el suelo y un método analítico me iba deshaciendo con cuidado de la distancia que había entre nuestros rostros.

    ''¿Qué es lo que tienes?''

    Dichas palabras mentales seguían rondando por mi cabeza aun cuando estaba tan próximo de ella, pues poco a poco acercaba mi rostro al suyo dispuesto a llegar a cualquier pista que me ayudara a concluir con esto, aunque el resultado acabó siendo quizás... sorpresivo.

    De tan sumergido en mi mente que estaba, no me había dado cuenta de la proximidad tan extrema a la que había llegado, pues si pudiera dar una medida... diría que a un par de centímetros estaban mis labios de los suyos.

    Y percatándome justo a tiempo de tal cosa rápidamente me alejé de ella.

    ''¿Qué... qué estuve a punto de hacer...?''

    Sorprendido y sonrojado a la vez me había deparado con otra pregunta, aunque ya para este entonces todo rastro de duda iba aclarándose conforme a más pensaba en esto ultimo ocurrido.

    ''Será que... Dawn...''

    Ya no me quedaba de otra, sin importar cuantas respuestas más quisiera haber encontrado en ese momento solamente una era la que resaltaba en mi mente, y esa era la más clara para mí...

    ''Ahora lo entiendo''

    ...

    A pesar de que la noche anterior había sido complicada al final de cuentas pude descansar como los demás miembros del grupo, ya al día siguiente estaba listo para continuar y eso fue lo que hicimos.

    Un tiempo más de caminata tuvimos hasta que por fin llegamos a una nueva ciudad, pues ahí se encontraba mi siguiente desafío y el próximo concurso Pokémon de Dawn.

    Yendo directamente al gimnasio acabamos por llegar enseguida, y aunque breve había sido mi conversa con el dueño pues habíamos acordado en que me daría la medalla a cambio de mi victoria.

    Y bueno... al igual que en la vez anterior, me ubicaba ya en el terreno de combate junto al líder de gimnasio, ambos casi listos para comenzar.

    —¡Vamos Ash, tu puedes Ash, se que peleas como ninguno, y es por eso que eres el numero uno, sí...!

    Y ahí la tenía nuevamente, tratando de inspirarme para ganar mientras iba vestida de porrista.

    A partir de esas palabras el combate había iniciado, y aunque antes me hubiera distraído con facilidad pues lo cierto es que estuve más que concentrado en esta ocasión, dando de esa forma una buena pelea y terminando por vencer a mi oponente en cuestión de minutos.

    —¡Y la victoria va para Ash de la región de Kanto! —Declaraba el juez de dicho encuentro terminado.

    Tras esa afirmación se me hizo la entrega de lo que a mi me correspondía, siendo esto así mis amigos se acercaron a nosotros con la intención de felicitarme por el triunfo.

    —Bien hecho Ash.

    —Gracias Brock, aunque todo se lo debo al animo de una sola persona. —Aclaraba mientras dirigía mi sonrisa a ella.

    —Sí... pero tu fuiste quien peleó, así que gran parte el merito te pertenece a ti Ash. —Mencionaba Dawn sobre el tema.

    —Veo que tienes a dos grandes personas de tu lado, jovencito. —Comentaba el Líder ante lo que veía.

    —Sí, así es, mi mejor amigo Brock... y el mayor apoyo que tuve la suerte de conseguir.

    Dichas palabras salidas de mi fueron mencionadas mientras acortaba aun más la poca distancia que ya había entre nosotros, aprovechando así para posar uno de mis antebrazos en su espalda, mientras que al otro lo ubicaba sobre la flexión de sus rodillas, levantándola de esa forma.

    —Pero qué- ¡qué haces Ash, bájame ya, que esto es vergonzoso!

    Y aunque sus quejas habían sido claras terminé por hacer caso omiso a sus palabras, pues estaba realmente feliz... de que en verdad me gustara alguien como ella, como mi amiga Dawn.

    esteeeee (3).png
     
    Última edición: 18 Noviembre 2021
    • Gracioso Gracioso x 1
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso