Los tres no podían creer lo que veían, miraban a Hagrid extrañado, no parecía el mismo, el hombre robusto les decía que no era para tanto, pero cualquiera que conociera al guardabosques probablemente ni le reconocerían ni de lejos. —Hagrid...te has afeitado—Dijo Hermione con los ojos bien abiertos. El hombre cerró la puerta enfadado,¿tanto había cambiado?, era lo que se preguntaba.
HAHAHAHAHAHAHAH el amor, el amor. Que risa me dio esto. Porque sí, una buena afeitada hace mucha diferencia.