Un año más había transcurrido, y Halloween estaba, una vez más, a la vuelta de la esquina. Esta vez, sin embargo, estaba preparado. Tomó sus rollos de papel higiénico y su pintura en aerosol y salió por la puerta de su casa. Sin embargo, no se fue muy lejos, pues a penas dio unos cuantos pasos fuera, giró media vuelta y comenzó a arrojar los rollos en su propio techo, rodeando su propiedad con papel. Después, con el aerosol en mano, pintó rayones por todos los muros. Satisfecho con su trabajo, entró de nuevo a su hogar. No podían vandalizar su casa sí él ya lo había hecho.
JAJAJAJA, omg. Inesperado. Me has salido con esto de la nada y omg yo estoy complacida. Es un relato simple pero con ese toquecito de humor que lo hace encantador. Eso último no me lo esperaba, vaya. Vandalizar su propia casa para que no lo hiciera otro. Por el amor de dios qué maravillosa idea (??) ahre, ¿pero luego lo va a limpiar él? hmm. Al menos se ha divertido :D (?) Btw aquí te faltó una tilde, mi amor <3 Sigue así~ a ver si ganas esta vez (?)
¿Qué tan harta puede estar una persona para llegar a eso? Creí que era algo de ponerle ajo a las ventanas o así, pero esto me ha gustado mucho, que vamos, las risas y cara de wtf que se pudo haber echado algún vecino que lo vio xD Y a toooodas estas, ¿el tipo siempre caía en truco? Vamos, una bolsita de caramelos no lo iba a matar xD
El pensamiento del muchacho me pareció muy irónico, graciosos pero irónico porque para evitar que “decoren” su hogar, él lo decora primero. Mientras leía, en un principio me imaginé que el escrito iba a ir por ese lado, no obstante, pensé que finalizaría con un: “Solo se tiene una vez al año en que se puede vandalizar con su propia casa” o algo así. Pues, ¿por què no?, yo haría eso, ya después culparía a los "traviesos" del barrio xD Pero bueno… Un divertido relato.