Para mi linda hija Vania, para que veas que no es difícil escribir una poesía. Apareciste en mi vida de repente, sentí que mi corazón vivía nuevamente, en una más de mi familia te convertiste, pues tu mi bella artista, feliz me hiciste. Siento que sin ti, amiga mía, no hay nada más que una solitaria vida, comprendiste mi llanto en silencio, solicitaste tu espacio, me llevaste a otro universo. Cual delicado pétalo de alhelí, cual bella rosa de Aladín, cual hermoso prado del cariño, cual perfecto día de domingo. Tú eres perfecta a tu manera, eres dulce, bonita y sincera, mi bella amiga en la eternidad, mi gran hermana en la adversidad.
Querida madre, me encantó. No tengo palabras para expresarme en este momento, pues me ha llegado como sorpresa. Te admiro por tu forma de expresarte, por la sinceridad en tus palabras, por tu bella poesía. La letra destacada va con tilde, ya que te refieres a una persona no a su pertenencia. Lamento no poder ayudarte más, pero no soy muy buena con este tipo de escritos. ¡Nos vemos!