One-shot de Pokémon - Ojos (Advanceshipping)

Años sin poner una historia por aquí, espero la disfruten y me dejen sus comentarios, opiniones y sugerencias, pero lo mas importante es que disfruten de la lectura y se diviertan al hacerlo...

Ojos


El sol comenzaba a perderse entre las montañas dejando a su paso diferentes tonalidades en el cielo, comenzando a desaparecer el tenue brillo que se asomaba entre las nevadas calles de aquella ciudad, el viento empezaba a bailar con las hojas mientras la noche se hacía paso entre
la colorida boveda celeste.


Las hojas de los arboles de aquel pequeño parque se movían en una danza nocturna provocando que copos de nieve cayeran al piso, el cual se encontraba cubierto por una fina capa de color blanco que brilla con la luz de las estrellas que poco a poco hacían su aparición
en la bóveda celeste.


Un puño de nieve proveniente de la copa de uno de los arboles cayó sobre la cabeza de un chico de cabello azabache que solo se sacudió y rio un poco al sentir el helado tacto de la nieve
con su cabello.


“Hacía mucho tiempo que no jugaba con la nieve”-pensó mientras con sus manos acariciaba el árbol en que se encontraba recostado-“Han pasado dos años desde lo ocurrido, el tiempo vuela cuando te diviertes”-se dijo para si en voz apenas audible, paso su mano por su rostro y
se detuvo sobre unas gafas negras que tapan sus ojos del brillo nocturno de la noche.


Los cantos del viento eran acompañados por el tranquilo ruido de las personas paseando por el parque acompañando de las risas de algunos pequeños que se divertían con la nieve
parejas disfrutando un momento romántico.


Unos ligeros pasos se escucharon detrás del árbol y el chico solo sonrió y se acomodo los
lentes mientras una pequeña sonrisa se formaba en su rostro.


“Hola castaña”-saludo alegre sin moverse de su lugar.
“Como supiste que era yo”-pregunto una chica que en efecto tenía el pelo castaño que era resguardado por un gorro navideño rojo.
“Hace mucho que aprendí como caminas así que se cuando son tus pasos los que vienen conmigo”- volteo su cabeza a donde se encontraba la castaña y con un ademan la invito a sentarse a su lado.
“Gracias”-contesto tímida mientras se acomodaba la minifalda para sentarse bajo el árbol.
“Como puedes andar con una minifalda en invierno sin congelarte de frio”-pregunto curioso mientras pasaba delicadamente su mano por el rostro de la chica.
“Es increíble cómo puedes saber lo que traigo puesto”- un sonrisa triste apareció en su rostro y tomo con sus manos la del chico y la apretó con cariño.
“Habilidades que ganas con el tiempo”-contesto con misterio mientras se dejaba invadir por una sensación de calor proveniente de su mano-“No siempre se puede ver o si”-pregunto serio para después comenzar a reír.
“No, no se puede”- su voz era quebradiza, tomo con delicadeza los lentes del chico y los retiro de su rostro, observo por un momento sus ojos de color café, un café casi invisible y se quedo sin moverse observándolos con cuidado.
“Tengo algo en la cara”-pregunto curioso.
“No”-respondió entre algunos sollozos al tiempo que una lagrima caía sobre la mano del chico.
“Porque lloras”-cuestiono moviendo sus ojos en direccion a su acompañante.
“No lo se”-respondió con risa nerviosa evitando la mirada de su amigo posando la suya en la nieve.
“Vamos, no me digas que es por esto”- su tono de voz se elevo provocando la mirada de la chica en el-“Por favor perdónate a ti misma de esto”- su voz cambio de tono y se quebró completamente-“Tu no tuviste la culpa de lo que paso, acaso alguna vez te dije que lo fue, jamás te reclame lo que paso”-las lagrimas comenzaron a fluir de sus transparentes ojos mientras se deslizaban por su mejilla.
“Claro que lo fue”-grito con desesperación-“Si no hubiera ido a esa estúpida fiesta tu aun podrías ver”-cayó sobre la nieve y dejo que su voz fuera desgarrada por el llanto.
“Si recuerdas bien yo también estaba en esa fiesta”-grito también enojado tratando de encontrar la forma de levantarse.
“Lo sé pero tú fuiste para cuidarme”-contesto también gritando-“Tu odiabas a esas personas, si no hubiera ido tu tampoco lo hubieras hecho”- apenas era entendible lo que salía de sus labios mientras las lagrimas chocaban en el suelo.
“Nunca me arrepentí de ir a la fiesta y no me arrepiento de lo que hice”-Contesto con voz segura, se puse de pie con la ayuda del árbol y con un bastón comenzó a golpear levente su alrededor-“Tal vez mis ojos no puedan ver, pero eso no significa que estoy ciego totalmente, puedo sentirte, puedo oírte, puedo tocarte y tu rostro jamás se borrara de mi mente”- detuvo su búsqueda y se inclino hasta tocar uno de los brazos de su compañera, busco su rostro y lo levanto con cuidado y cariño levantando la vista de la castaña haciéndola chocar con la suya.

Ninguno se movió, quedaron perdidos en ese momento en que sus ojos se cruzaron, los azules de ella y los cafés de él, el viento pasaba entre los dos y el único sonido que se escuchaba eran los sollozos de la joven castaña, el joven sonrió y se acerco lentamente rodeando a su compañera con su brazos, la chica le correspondió y se fundieron en un tierno abrazo mientras las lagrimas seguían fluyendo de los hermosos zafiros de la joven.

El abrazo termino y poco a poco se fueron separando el uno del otro, sus manos seguían deslizándose acariciando la ropas del otro hasta que sus manos quedaron juntas, sus dedos se entrelazaron en un pequeño baile de nostalgia, sus rostros se acercaron con extrema lentitud el uno al otro mientras sus ojos se cerraban al compas de su unión y ahí se quedaron a la expectativa del siguiente movimiento.

La nieve caía con delicadeza en la ciudad mientras las luces provenientes de algunas casas y negociosos hacían su aparición alrededor de aquel parque, el viento jugaba con los niños que corrían y reían mientras jugaban con sus padres, las parejas caminaban con lentitud tratando de imitar los pasos de alguna melodía romántica que les recordara su amor.

Siguieron inmoviles, por un segundo el tiempo se detuvo y ni el viento ni el frio parecia romper la atmosfera en la que estban inmersos, la distancia se desvanecio entre los dos y en un instante sus labios fueron acariacidos por los del otro, parecia imposible pero por un momento los ojos del joven recuperaron el brillo que habia desaparecido con el tiempo, al tiempo que unas lagrimas recorrian las mejillas de ambos.

Se separaron cuando el oxigeno no llegaba a sus pulmones y ambos se quedaron estaticos sin siquiera poder respirar.

“No importa que no te pueda, no importa que no vea un atardecer o un anocher, mientras estes a mi lado no necesito mis ojos, solo necesito saber que tomas mi mano para saber que estoy contigo, por que si estas conmigo, se que puedo ver”- dijo el joven al tiempo que toma las manos de la joven-“Por eso, mientras estes conmigo, no me importa nada”-prosiguio-“No me importa nada, por que te amo”-finalizo llorando.

“Te amo”-respondio la chica, que siguio el ejemplo de su compañero y sus rostro se vio inundado en lagrimas.