Novela negra: La dama de Negro

Novela negra: La dama de Negro

Novela negra: La Dama de Negro​

Parte I​

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Capitulo 1: Frío pasado

Noviembre del ‘70, Paris (Francia).

-Dime, Kikyo, ¿Por qué mataste a tus padres? – Preguntaba un psiquiatra a una hermosa niña de cabellos puramente azabaches con ojos fríamente castaños y una tez tan pálida como la nieve. Vestía un vestido hasta las rodillas, mangas cortas y algo viejo y gris. - ¿No quieres responder? – Le pregunto sentado delante de ella en un taburete de madera, igual que la niña.
-¿Por qué? – Dijo la niña, la cual sus cabellos tapaban su rostro.
-¿Por qué que?
-¿Por qué hace siempre las mismas preguntas?
-Es por tu bien…
-¿Por mi bien? No mienta…
-¡Estoy arto de tu insolencia, niña! – Grito el doctor levantándose bruscamente del taburete.
-No me asusta, doctor.
-¡Veras como algún día tu y tus palabras se volverán en tu contra!
-Yo saldré de aquí y entonces… - Dijo la niña soltando una leve sonrisita.
-Vamos doctor cálmese… - Decía una mujer, su secretaria, que llevaba una falda gris que le llegaba pos las rodillas, conjuntado con un chaleco del mismo color, unas medias oscuras, zapatos bajos y unas gafas con las lentes cuadradas. El pelo era castaño oscuro, lo llevaba recogido en un moño alto.

Día tras día le hacían las mismas preguntas: “¿Por qué los mataste?” “¿Recuerdas algo que te impacto?” “¿Tienes amigos?”. A esta ultima la niña siempre respondía: “Mis únicos amigos son la soledad y la oscuridad…”
Al pasar 2 años, sacaron a la niña del manicómio y la enviaron a un internado a las afueras de la ciudad.
El edificio era grande, con las paredes de piedra, gris, deprimente, tenebroso, con el tejado de tejas naranjas, en secante, las ventanas tenían unas cortinas blancas y también, en la parte trasera, había un patio, con caminos entre lo verde, bien mantenido, había rosas y alguna que otra flor decorativa y fresca.

Kikyo, ya con 8 años, vestía una falda negra, de tablas, le llegaba hasta las rodillas y un sueter negro. Era solitaria, no quería jugar con ningún niño y cuando tenia tiempo libre, se las pasaba leyendo libros sobre homicidios y de terror, aunque los profesores le decían que no leyera esas cosas, pero ella lo hacia.
Un día una niña, ojos miel, cabello hasta los hombros, recogido en dos coletas y de color castaño claro se acerco a ella.

-¿Quieres jugar conmigo?
-… - Le lanzo una mirada despectiva y fría.
-Ven vamos, te enseñare un lugar que solo yo conozco. – Dijo la pequeña agarrándola de la mano y llevándosela detrás de la casa.
-Ven, pasa por aquí, pero no se lo digas a nadie. – Dijo destapando un agujero que había en unos arbustos.

Las dos llegaron a una parte del bosque donde había un río y un pozo viejo. La niña de las coletas jugaba feliz mientras que la otra solo la miraba con unos ojos llenos de frialdad.

-¿Por qué eres tan feliz?
-¿Eh?
-Que por que eres tan feliz. Te veo jugando entre las plantas sin sentido alguno, chillas como si quisieras llamar a algo, ¿Por qué todos sois tan felices mientras que yo solo soy una infeliz? No me parece justo… - Decía intimidándola y haciendo que la niña caminara hacia atrás hasta llegar al pozo pero esta seguía, hasta que callo, y tras ella un grito que se apagó.

Nadie supo nada de la pequeña, pero tampoco parecía importarle a nadie.
Pasaron los años, aquella niña cada día era más solitaria y su odio iba creciendo, nadie sabia por que, antes era una niña muy alegre que siempre estaba feliz y ponía de buen humor a cualquiera, estuviera como estuviera, hasta que, una noche en la que llovía, la niña tuvo un extraño sueño, estaba en una habitación grande y oscura, una voz de fondo le decía: “Hazlo, Kikyo, hazlo, se que quieres hacerlo…”, ella estaba con sus padres en aquella habitación, y cuando no pudo más, gritó y después vio a sus padres asesinados, la sangre en las paredes, el suelo, en todas parte, cuando se dio cuenta, estaba en la habitación de sus padres, con el cuchillo en la mano lleno de sangre.

Noviembre del ’81.

Ya han pasado 9 años, Kikyo es, ahora, una adolescente, no ha cambiado en estos últimos años, sigue igual de solitaria y llena de odio. Viste una mini falda negra, un suéter negro y una corbata blanca.
Hacia un mes había llegado un nuevo chico al internado, tenia los cabellos largos, azabaches, sus ojos eran fríos y de color negro azabache. No tardo en hacerse amigos de los demás chicos, pero era diferente, casi como Kikyo.

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Ni hao

Bueno, hos presento mi 2º fanfic: "La dama de Negro" que espero que tenga más exito que el 1º ¬¬
pro bueno, en resumen.. la historia trata d una psicopata asesina y d homicidios y d sangre
supongo q a kotono l gustara jaja
en fin... pos eso espero q os haya gustado y postead ^.^

gracias x leer y postear

 

Re: Novela negra: La dama de Negro

Capitulo 2: El extraño chico

-¡Oye tío! A que no sabes que le hemos hecho a la profesora de lengua… - Le dijo un chico de ojos azules y pelo negro, corto, vestía una camisa blanca y unos pantalones azules. - ¿Qué estabas mirando?
-Nada…
-¡Mentira! La estabas mirando a ella, te he pillado pillín. ¬u¬ Pero no tienes ninguna oportunidad, ella no se habla con ninguno, solo se la pasa leyendo libros sobre asesinatos, una vez intento suicidarse haciéndose unos tajos en las muñecas, es linda pero un poco…
-Miroku, que me ibas a decir que le hicisteis a la profesora de lengua… - Dijo desviando el tema.
-¡A si! Pues veras…

A la tarde, Kikyo se encontraba leyendo un libro en la biblioteca. Hasta que llego el chico de ojos negros y cabellos largos y negros. Este se sentó al lado suyo y le preguntó:

-¿Qué estas leyendo?
-“El inquisidor” de Lee Anderson. – Dijo mirándole fríamente.
-Mi nombre es Sesshomaru, el tuyo es Kikyo ¿No?
-Si. – Dijo levantándose de la silla.
-Se que fuiste tú quien mato a aquella niña. – Dijo levantándose. Kikyo le miro con su mirada fría de tal modo que los dos quedaron frente a frente. – Se callo por un pozo cuando la estabas intimidando con palabras.
-¿Cómo lo sabes?
-Por que yo estaba allí, detrás de un árbol.
-¿Por qué estás aquí?
-Por el mismo motivo que el tuyo.
-Yo mate a mis padres, y eso es algo que nadie sabe.
-Yo torturaba a mis muñecos, y no paraba de amenazar a mis amigos, por diversión. Me han dicho que te gustan los homicidios.
-No te han dicho mal.
-¿Y te gusta investigarlos?
-¿Qué quieres decir?
-Que nos unamos para buscar al ladrón de corazones, es un tipo que mata a sus victimas y luego les arranca el corazón y se lo queda. Sus victimas suelen ser lindas jovencitas.
-No es mala idea… Como quieras.
-Bien, la última vez que “trabajó” fue en la mansión de la Srta. Midoriko.

Los dos fueron a la mansión en busca de algo que les ayudara en su investigación.
La casa era de un estilo de la edad moderna, al entrar se podían ver unas grandes escaleras de mármol con una alfombra roja de bordes dorados, tenia unos cuadros de gente rica que supuestamente vivió allí. Era muy lujosa, en el salón había, en el techo, una gran lámpara de araña que iluminaba todo aquel enorme salón. En conclusión: era una familia millonaria.
Entraron en la habitación de la Srta. Midoriko, allí estaba su cuerpo ensangrentado, con un gran agujero en el pecho, donde estaba su corazón, que ya había sido sacado.

-El ladrón de corazones no pudo limpiar sus huellas, que se dirigen hacia la ventana.

Los dos bajaron al jardín, era enorme, tenía en el centro una fuente en forma de ángel de piedra blanca.

-Mira esto… - Dijo Kikyo cogiendo del suelo una tarjeta. – Una tarjeta.
-¿Qué pone?

Dr. Naraku​

​

Hospital Henderson.​

Avenida mayor, 13 1º 2​

​

-Vamos.
-Si.

Nuestros protagonistas llegaron al hospital, estaba cerrado ya que había anochecido, parecía que no había nadie.

-Bien, el plan será en que tú te metas en el hospital fingiendo que estás mal. Él vendrá a por ti e intentara matarte, entonces yo entro y lo delatamos.
-Si.

Ella entro, y tal como había dicho Sesshomaru, él Dr. Naraku vino en su búsqueda. La llevo a su despacho y saco un cuchillo, antes de que este le pudiera hacer nada, Sesshomaru entro.

-Vaya, vaya Dr. Naraku, así que usted es el ladrón de corazones…
-Malditos críos…

Cuando volvieron al internado los profesores estaban muy enfadados ya que se habían ido sin permiso.

Al atardecer, Kikyo estaba leyendo en la clase de ciencias naturales. Hasta que vino el profesor de ciencias, Bankotsu, que vestía una bata blanca, por debajo una camisa blanca y unos pantalones grises.

-Que tarde tan bonita hace hoy, ¿No crees Kikyo? – Dijo mirando por la ventana, pero esta seguía leyendo. – Siempre estás tan solitaria y siempre te encontramos leyendo…
-No se que es lo que pretende, profesor, pero si quiere decir algo, dígalo ya.
-Ja, ja, ja… - Se río maliciosamente mientras cerraba las puertas y las ventanas con llave.
-¿Que hace? – Dijo asustada mientras se levantaba.
-No te preocupes, primero te violare y luego… Te matare. – Decía mientras se desabrochaba la camisa.
-No se atreverá…
-A que no… - Decía acercándose a ella, pero cuando estaba muy cerca ella cogió un taburete y le dio en la cabeza con el. - ¡Aaa!

Luego salio caminando, como si nada hubiera ocurrido.

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ni hao

jeje a q no creias q era l?? jeje kiero saber kien criais q era
pro bueno en fin..
espero q hayais disfrutado est capi
y gracias x postear!!
jo mañana empieso 1º de secundaria q royo...
pro bueh!

 

Re: Novela negra: La dama de Negro

Capitulo 3: Asesinato en el internado

Un día como cualquier otro en el internado, las clases, los alumnos… Pero, en clase de literatura…

-Oye, ¿Sabes donde esta Houjo? – Decía un chico a una chica.
-No se, hoy no ha aparecido en todo el día…
-¿Qué crees que le habrá pasado?
-Pues, no se… Seguro que está haciendo novillos otra vez…
-Si.

-¿Has oído eso?
-Si… - Se decían Kikyo y Sesshomaru.
-Es extraño, porque siempre me dice cuando va a hacer novillos.
-Lo ví por última vez en el desván, pasaba por allí para leer en la biblioteca y lo oí todo…

-Flash Back-
Kikyo estaba al lado de la puerta del desván, oyendo como Houjo y un chico discutían:

-¡¡Como pudiste hacerme eso!!
-Oye no era mi intención quitarte a tu novia.
-Mentira. Esto lo pagaras muy caro… - Decía el chico rubio de ojos grises mientras se iba.

-Fin del Flash Back-

-Bien vamos al desván.

Los dos están en el desván viendo supuestamente donde estaban los dos. Kikyo se fija en el suelo y encuentra un mechón de pelo rubio corto, en el internado solo habían 3 alumnos rubios: Hakudossi, Netsuo y Kanna. Los tres tenían el pelo hasta los hombros y la misma edad, parecían trillizos. Hakudossi era muy amigo de Houjo, pero Kanna no se hablaba con él y Netsuo solo le avisaba de lo que pasaba.

Los dos se fueron al jardín para pensar, en eso encontraron un poco de sangre en la caseta de las herramientas. Algo un poco raro, el rastro seguía en la parte de atrás, donde había un gran roble.
En el roble encontraron el cadáver del muchacho, estaba sentado en el árbol, con la cabeza decapitada y metida en la barriga, le habían cortado el pecho y sacado los ojos que los tenia en las manos.
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-El único que tenia novia era Hakudossi… - En ese momento aparece Hakudossi asustado detrás de ellos.
-¡¿Qué hacéis aquí?!
-Quien iba a pensar que su mejor amigo lo asesinaría… - Le dijo fríamente Kikyo.

Después de eso, Kikyo fue a su habitación y Sesshomaru al pasillo del 2º piso que nadie visitaba, solo para ir a la lavandería. Se apoyo en la pared y saco un cuchillo.

-(Siento como mi cuchillo se oxida por no ser utilizado…) Necesito sus manos…

Kikyo entró en su habitación pero cuando cerró la puerta no esperaba encontrarse con él… Él cogió un pañuelo mojado en formol y la durmió, luego la agarró y se la llevo.

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Una hora más tarde esta se despertó en el sótano del edificio, atada a una columna.

-Sabía que me harías esto…
-¿Entonces por que no lo evitaste? – Le dijo en un tono medio burlón.
-Quería saber lo que se sentía al estar en una situación así…
-Ahora ya lo sabes… Desde que me contaron lo de tu… - Decía mientras que Kikyo, sin que se diese cuenta, sacaba una pequeña navaja de su manga y cortaba la cuerda. – Suicidio, solo quiero tus manos, tu vida, buscaba tu confianza y el momento justo y… Aquí te tengo. – Dijo agachándose frente a ella, quedándose justo a unos pocos milímetros de ella.
-No hables tanto, y actúa rápido. – Dijo arañándole los dos lados de la cara y liberándose.
-Eres una caja de sorpresas… - Ahora estaba tirado en el suelo mirándola. – Pero tus manos serán mías… - Decía él levantándose y empujando a Kikyo contra la columna haciendo que está ahora estuviese inconsciente.

Se le acerco, se agacho al lado, la miró, luego se puso encima de ella y empezó a quitarle el suéter junto con la camiseta por el hombro derecho, dejándola ver el sujetador negro que también se lo quito por el mismo lado y del mismo modo, ahora tenía el hombro derecho al descubierto.
Él se la quedo contemplando, de repente ella abrió los ojos y le empujo con las piernas impulsándolo unos metros hacia delante. Se paro e intento marcharse, pero Sesshomaru no se rendiría fácilmente así que le intento pegar un puñetazo pero esta lo detuvo en seco, él le intento dar con su otra mano pero ella la esquivo saltando y se quedo justo detrás de él, el joven corrió muy rápido para cogerla y estamparla con el objeto que se encontraba detrás, en este caso: unas cajas de madera. Ella cerró los ojos fuertemente y se agarro a la ropa del chico esperando el impacto, cuando ella choco con las cajas emitió un gemido con el sonido “aah” mezclado con el de “ooh”.
Los profesores se acercaron a ver que era lo que pasaba, Sesshomaru escapo por una puerta que daba con el patio de atrás y Kikyo callo inconciente al suelo, los profesores la llevaron a enfermería y cuando despertó le preguntaron:

-¿Qué fue lo que te paso?
-Nada, se me debió de caer algo… - Decía fríamente y mirando hacia las sabanas blancas de la camilla en la que estaba.

Enero del ’84, Paris (Francia)

Kikyo tiene 20 años y Sesshomaru 21. Ese día seria el último en el que ella estaría en el internado, porque ya tenía que irse hacia un nuevo futuro. Sesshomaru se fue hace un año.

-Adiós Kikyo, ha sido un placer verte conocido. – Decían sus compañeros que apenas la conocían.

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Ni hao

Siento ver tardado tanto, esque con el insti y las cosas q stub aciendo (buscar libros, comprar, etc) no tub mucho tiempo
espero q os guste
y postead
os lo agradesco :)

 

Re: Novela negra: La dama de Negro

Capitulo 4: Revelación

Agosto del ’84, Tokio (Japón)

Kikyo vive sola, en una casa vieja y un poco deshecha, su única compañía, un gato negro de ojos amarillos, un viejo piano de cola, la oscuridad y su propia sombra... Su casa estaba situada detrás de un cementerio desolado y siniestro, la casa de madera era de un color marrón penoso, con musgo, su jardín era inmenso, pero las hierbas estaban secas y había un árbol, muerto, caído, ennegrecido.
Los adultos y niños no se acercaban ni a la casa ni a ella, y los adolescentes la insultaban y burlaba, le decían cosas como: “¡Psicópata de mal agüero!” y cosas por el estilo. La joven, hablaba sola y también con su gato, también, en ocasiones, se desahogaba con su reflejo, sentada en frente de un espejo antiguo, redondo, con bordes de oro.

Ya habían pasado 6 meses desde que salio del internado.
Un día iba paseando con su compañero, el gato, el cual ella decía que se llamaba Sombra. Iba vestida con un vestido de terciopelo negro, de mangas largas, largo asta los por encima de los pies y con medio cuello, ajustado, hacia que sus curvas se remarcaran y que pareciera más flaca de lo que ya era, llevaba botas negras de tacón alto, un collar de medallón dorado, redondo, con esmeraldas y rubíes, su piel era más blanca que la mismísima nieve pura y sus ojos y labios iban maquillados de negro intenso.
Caminaba por una calle del cementerio. Hasta que unos adolescentes la pararon rodeándola y diciéndole en tono burlón:

-¡Anda! ¡Pero mira quien es! La loca de las sombras.
-Y su único amiguito el gato negro.

Un chico la agarró por detrás dejándola inmóvil, ayudado por otro, porque la chica tenia fuerza aunque no lo pareciera…

-¿Qué es lo que queréis? – Dijo ya más tranquilizada, con su mirada fría y perdida.
-Venganza…

Dijo un chico, al parecer el líder del grupo, que agarro al gato de las patas y otro agarraba una piedra de un sitio del prado.

-Agárralo bien, Renkotsu, este gato araña – Dijo agarrando la piedra de su hermano.
-Está bien, jefe Suikotsu.
-¡¿Qué le vais a hacer?!
-Jejeje… Vamos a vengar lo que le hiciste a nuestro hermano mayor, Bankotsu.

-Flash Back-
Kikyo estaba leyendo en la clase de ciencias naturales. Hasta que vino el profesor de ciencias, Bankotsu, que vestía una bata blanca, por debajo una camisa blanca y unos pantalones grises.

-Que tarde tan bonita hace hoy, ¿No crees Kikyo? – Dijo mirando por la ventana, pero esta seguía leyendo. – Siempre estás tan solitaria y siempre te encontramos leyendo…
-No se que es lo que pretende, profesor, pero si quiere decir algo, dígalo ya.
-Ja, ja, ja… - Se río maliciosamente mientras cerraba las puertas y las ventanas con llave.
-¿Que hace? – Dijo asustada mientras se levantaba.
-No te preocupes, primero te violare y luego… Te matare. – Decía mientras se desabrochaba la camisa.
-No se atreverá…
-A que no… - Decía acercándose a ella, pero cuando estaba muy cerca ella cogió un taburete y le dio en la cabeza con el. - ¡Aaa!
-Fin del Flash Back-

-Ese día, él cogió una hemorragia cerebral y luego murió… ù.u
-…
-¡Ahora probarás lo mismo!

Después de las últimas palabras, miro al gato y luego lo fue golpeando con la piedra, Kikyo miró eso con desagrado y ojos atentos, intentando soltarse, mientras que el gato maullaba fuertemente y se movía, hasta que dejo de hacerlo y ella fue liberada. El grupo se fue, y ella se quedo frente al cadáver de su amigo y susurro tapándose los ojos con el flequillo y mirando con el más profundo odio en sus ojos:

-Me las pagareis muy caro, vosotros y todos los que me hicieron sufrir.

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Ni hao

bueno, aki está la conti, siento ver tardado, si esque tarde... pro con lo del insti y eso no m deja continuar, asi q intentare continuarlo los miercoles los viernes y el fin de semana, ya que los miercoles y viernes no tengo clase por la tarde *-* q bien jeje
bueno espero que os aya gustado

y bienvenida inu-clj92 me alegro de que te guste... y si la traicino.. que esperabais?? lgo romantico?? puff!

jaja bueno mis mas oscuros saludos

 

Re: Novela negra: La dama de Negro

Parte 2​

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Capitulo 5: Pánico en las calles

Octubre del ’84, Tokio (Japón)

-¡Espera! ¡¡No!! ¡Lo siento! – Gritaba un chico en un callejón sin salida, gris, sombrío, el chico vestía camiseta bordó y pantalones grises, estaba acorralado, tirado en el suelo, por una chica con antifaz negro, vestido negro, sombrero negro con una redecilla que tapaba parte de su cara, guantes cortos a ganchillo negros, zapatos de tacón alto y una chaqueta-bolero a ganchillo negra. - ¡¡Perdóname!! Ten piedad. ¡¡¡Aah!!!
-Um… ¿Dices que te perdone después de que tú fueras uno de los que asesino a mi único compañero? Um. – Rió levemente.

Un grito agudo y agonizante se oyó por las calles.

-¡Vaya! Otro asesinato, ¿Por el mismo método? – Decía un investigador, de chaqueta marrón, larga, sombrero hundido marrón con una raya negra, pantalones grisáceos verdosos, parecía joven.
-No, está vez el asesino utilizó un método más sutil, lo apuñalo con un puñal un tanto raro, con la hoja curva y el mango dorada, con una extraña piedra en la punta del mango.
-Investigad si hay huellas o alguna pista.
-Si, inspector Inu-no-Taisho.

Después de unas horas, terminaron de buscar las pistas, pero no encontraron nada.
Llamaron otra vez, una persona muy asustada y nerviosa.

-¿Diga? ¿Quién es?
-Ee… ¡En mi casa, en mi propio patio!
-¡¿Qué paso?!
-Un… ¡Un asesinato!
-¡¿Qué?! Está bien, dígame la dirección, vamos en camino.

Colgó el teléfono. Otro asesinato que había sucedido, esta vez en la casa de un inocente, los investigadores fueron a la casa de un hombre, Kaito Fushijari, 32 años, trabaja como dependiente de una tienda de ropa en el centro, soltero, vive solo en una casa de dos pisos, un poco desordenada y un jardín al cual se nota que no cuida.

Llegaron a la casa del chico, vieron en la parte de atrás del jardín al cadáver, el que lo asesino le despellejó, le quito los ojos y la lengua y lo crucifico en el único árbol que había.

-Es horrible… - Dijo Inu-no-Taisho.
-No parece haber ningún rastro de nada que nos pueda ayudar.
-Seguid buscando.

Siguieron buscando, hasta encontrar un pelo largo, negro, en el charco de sangre que dejo la victima.
Lo llevaron al laboratorio, parecía de mujer, pero…

-No aparece nadie en la base de datos con este cabello. – Decía una mujer, pelo en una coleta, castaño, ojos alegres y castaños, con una bata blanca y por debajo una minifalda marrón y una camiseta de mangas cortas beige.
-¡Imposible! Vuelve a revisarlo todo, Sango.
-Si.

Al cabo de unos minutos, volvieron a llamar, eran los investigadores, que habían encontrado una pista en el escenario del crimen.
Era una nota.

Mis queridos amigos agentes…​

​

Soy quien más conocéis pero menos intuís. Esto es un juego, que sobretodo, hay alguien de los vuestros que lo conoce muy bien, ¿No es así Inu-no-Taisho?​

Os espero en el pentáculo del edificio gris, cuando la sangre invade el cielo.​

​

Inu-no-Taisho la leyó muy atentamente, pensativo. Luego se giro hacia sus compañeros, y les dijo:

-¿Alguno conoce algo como esto? ¿Qué significa “el pentáculo del edificio gris”?
-…
-El pentáculo es la cruz judía…
-¿Quién dijo eso?
-Mi nombre es Kagura, y os puedo llevar hasta donde deseáis…
-¿Qué hacemos, jefe?
-No nos queda más remedio…
-Está bien. – Dijo la chica, que vestía un kimono rosado, con una sombrilla roja y el pelo lo llevaba en un moño.

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pues nah solo actualiso

 

Re: Novela negra: La dama de Negro

Op: http://www.youtube.com/watch?v=MpXpbrJTo2E

Capitulo 6: Juramento de sangre

Llegaron a una de las iglesias judías que habían esparcidas en la ciudad. En la torre mas alta, el pentáculo, dorado y en el centro un reloj.

-Aquí es.
-Gracias, señorita.
-No me diga “señorita”, llámeme Kagura.
-Está bien.

Estuvieron inspeccionando el lugar, pero lo único que consiguieron fue enfadar al sacerdote y a los vecinos que vivían en esa zona.

-¡Dejen ya de perturbar la casa de Dios! – Decía el sacerdote desesperadamente.
-Solo nos queda investigar… La capilla principal.

Todos se fueron allí, era una capilla inmensa, con una lámpara de araña que cuando la tocaba la luz del sol brillaba como el arco iris.
Al entrar vieron claramente, en la pared, escrito a sangre:

Llegasteis… Si leéis esto supongo que sabréis quien soy… Si no… Os doy una pista… “Papa”.

-¡No creo que sea posible! – Dijo enojado Inu-no-Taisho.
-No estará diciendo que…
-Si, así es… Soy yo, tu querido hijo.
-¡Sesshomaru! ¿Dónde esta? Quedas arrestado por las muertes de varios ciudadanos.
-¿Cómo piensas capturarme si ni siquiera me ves?
-¿No? Eso es lo que tú te crees… - Sonriendo picadamente.

Dos policías agarraron a Sesshomaru que estaba arriba, en el balcón de la capilla. Bajaron y lo pusieron en frente de su padre.

-¡Juro que saldré y me vengare!
-Sesshomaru… - Dijo Kagura, la cual hacia su aparición entre la oscuridad del recinto tapándose los ojos con la sombrilla que llevaba. - ¿Me recuerdas no? – Dijo ya quitándose la sombrilla.
-…
-Soy la niña aquella del internado, la que se ocultaba detrás de cosas para seguirte… Y un día me llevaron a otro reformatorio.
-Ya me acuerdo de ti…

Este se soltó rápidamente de los policías y sacando un puñal la apuñalo, haciendo que de su boca saliera sangre y que sus últimas palabras fueran:

-Te quiero…

Lo sujetaron rápidamente y cuando se calmo…

*Disparo*

Una bala atravesó el corazón de su padre, este miro como caía espantado, y se soltó y se fue a sujetarlo.

-¡Padre!
-Hijo… Te… Te qui…
¡¡Padre!!

Este volvió a agarrar el puñal y mato a los presentes. Miro desde donde había venido la bala, justamente en frente de él, a unos metros de distancia. Con una pistola en su mano, la cual le salía humo, y un vestido negro y su sombrero con una red la cual le tapaba la mitad de su rostro. Bajó el arma, y se dio media vuelta.

-Tú… ¡¿Quién eres?! – La chica solo guardo silencio. – Juro que te matare… - Bajo un momento la mirada, agarro el puñal y lo lanzó hacia donde ella estaba, pero cuando se fijo, no estaba y el puñal solo se quedo en la pared. Fue donde estaba, ni rastro de la muchacha.

-(¡¿Habrá sido mi imaginación?! No, mi padre está muerto…) – Se dijo él en sus pensamientos. - ¡¡¡Juro que te encontraré!!!

Ed: http://www.youtube.com/watch?v=MmhZ6FYoNEs

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jaja pues ac tiempo q no lo continuaba xD jaja falta d tiempo.. ._.

pro buneo mejor tarde q nunca asi q... -o-

en fin.. buneo espero os guste y sino.. tambien xD jajaj en fin.. buneo q estoy mu mal lo se.. y ahoram e preguntara kotono: ¿Y a kien mato para escribir?

¬¬ pues a alguien.. ya t lo repsondo y too =) xD jaja


bueno pues eso xao y s cuidan