Nada [Días del abecedario]

A de arma Atl
​

Mis verdugos no me ven a la cara, como si no existiera hacen su trabajo, mecánicamente sin malicia. No hay interés en su tarea, no risas malvadas ni llanto desesperado. Las agujas van perforando mi cuerpo una detrás de otra, hace mucho que deje de sentir el dolor, ahora son sólo una molestia, entran en mi carne como un palo de madera en el cadáver de un perro. Eso lo sé porque de niño lo hice muchas veces, con los perros que se juntaban junto a las bolsas de basura en las calles. Pero esos perros ahora no importan, sólo el líquido que entra por mis venas. Lo pensé muchas veces antes de que pasara, me imaginé en este mismo momento, sin ninguna oportunidad, vencido. Me imaginé escapando libre de todo, en un túnel quizá, huyendo sin que se dieran cuenta, pero eso era imposible, sólo lo imaginé para pasar el tiempo, para no aburrirme en un cuarto donde nada pasaba. Las agujas vuelven a perforarme. Hubiera preferido la guillotina o cualquier otra arma más rápida que no me dejara pensando, un tiro limpio y luego nada. El aire empieza a faltarme, pero aún es suficiente. Los perros tiene más suerte, sólo un crujir en su cráneo y todo ha acabado, aún los menos afortunados tienen un dolor insoportable, agudo, hasta que cierra sus ojos y no hay nada. Aquí no hay nada, quisiera que no hubiera nada. Pero el líquido ha hecho su trabajo y no hay dolor que me distraiga, si hubiera dolor, no habría nada antes. Los perros deben ser felices, sin ver sus cuerpos picados con un palo, sin pensar en nada y no teniendo que imaginarla. A cada bocanada de aire la maldigo, todavía nada. Pronto no habrá nada

 

B de beber Atl​

Dejo la botella vacía en la caja de cartón. Abro otra. Está fría, mojada. Te pregunto si quieres otra y no me respondes, sólo me estiras tu mano. Te paso la que ya está abierta. Tomo otra de la caja, le doy un trago. Nunca me ha gustado la cerveza, sigo tomando igual que tú. Sentados sin vernos seguimos bebiendo. Viendo a la pared, contando las botellas que faltan. Escupes en el piso, me pides más. No estoy seguro de que hago. Le quitó la tapa a otra y la pongo en tu mano, no la agarras, el líquido se tira y no le quedamos mirando, sin hacer nada. Tomo otro trago. Uno se acostumbra al sabor, probablemente a ti tampoco te guste, pero sigues tomando. Creo que a nadie le gusta el sabor, pero siguen tomando, después de todo, todavía quedan botellas en la caja.

 

C de criatura Atl​

17 de mayo

Ayer, en el lavamanos de mi baño, apareció una pequeña criatura, se la ha pasado nadando desde entonces. No me he atrevido a lavarme mis manos, me parece que le importunaría semejante acto, yo me enojaría si algún gigante decidiera meter sus manos mientras nado tranquilamente en una alberca. No es que sea necesario, nunca realmente le he visto el caso. Lo que debería hacer es hablarle, preguntarle porque decidió visitar mi casa, pero no he encontrado el momento oportuno, siempre parece tan relajada, con sus ojos cerrados, moviéndose de un lado a otro. He decidido aplazar semejante interrogatorio para una ocasión más adecuada.

18 de mayo

La criatura sigue en el lavamanos y no parece tener intención de irse, ya me he acostumbrado, no poder lavarme las manos me parece menos molesto, cada que la veo me siento relajado y los pequeños problemas que me causa, los olvido. Hoy casi llego tarde a mi trabajo por perder la noción del tiempo observándola. He pensado grabar un vídeo y subirlo a internet, quizá a la gente le interese verla.

19 de mayo

No puedo hacer más del baño en mi casa, no parece correcto. Una actividad tan poco grata no debería hacerse mientras la pequeña criatura siga nadando en el lavabo, sería como tratar de hacerlo en una iglesia o cualquier otro lugar sagrado, tendré que hacerlo en el trabajo o en algún otro lugar. Tampoco estoy seguro de subir el video, las personas que lo vean pueden querer venir, tan buenas como puedan ser sus intenciones, lo más seguro es que la molesten y decida mudarse a otro lugar, sería una pena que eso pasará.

20 de mayo

Hoy me levanté en la madrugada para revisar si la criatura seguía aquí, por suerte continuaba nadando como la primera vez que la vi, pareciera que no se va a detener. Me quedé parado con las manos en las orillas del lavamanos hasta que mi despertador sonó, no me creí apropiado desnudarme frente a ella, así que me metí a la ducha vestido, salí escurriendo y me cambie en mi habitación. Cerré con llave el baño antes de irme, quiero evitar que algún ladrón vaya a verla, después de todo, podría intentar venderle a algún coleccionista privado. Espero que haya sido suficiente, nada de valor puede haber en un baño para que alguien se tome la molestia.

21 de mayo

Volví a levantarme temprano para ver a la criatura, casi no oigo el despertador. Decidí no bañarme hoy y aprovechar el tiempo que tengo contemplando los pequeños sonidos que hace mientras navega por mi lavamanos. Al regresar de mi trabajo volví a meterme al baño, no sin antes apagar mi teléfono para evitar ser interrumpido, cuando lo hacía volví a pensar en subir un video, pero me pareció una idea peligrosa. Los ojos de personas que no conozco verán a tan hermosa criatura, no cualquiera puede hacerlo, algún criminal sería indigno de maravillarse con los movimientos de la criatura. Pasé el resto de mi día parado junto a ella. Quizá mañana no vaya a trabajar.

22 de mayo

Me siento un poco cansado, sólo dormí un poco antes de regresar al baño. No es realmente una molestia. No fui a trabajar hoy, no lo creí necesario, aquí tengo todo lo que necesito, comida, agua y a mi maravillosa criatura nadando de un lado a otro.

23 de mayo

Hoy tocaron tres veces mi puerta, no conteste, seguro es el vecino que quiere decirme algo sin importancia. He estado aquí todo el tiempo sólo salí por algo de comer a la cocina. No es importante. Conté los veces que llega de un lado a otro mi criatura, es realmente hermoso, todos sus movimientos son prueba de que no hay nada más perfecto que ella. Su ritmo no es regular, a veces va lento, casi imperceptiblemente llega a la otra orilla, otras parece una pequeña lancha. Quizá deba observarla más detenidamente.

24 de mayo

Recordé que no le había preguntado nada a mi criatura desde que había llegado, estuve a punto de hacerlo, pero no me pareció bueno detener su movimiento ideal para expulsar un par de llanas palabras que quizá sólo la enfurezcan y decida cambiar de lugar, a uno en el que no haya personas tan entrometidas. El vecino volvió a golpear la puerta que hoy, creo que esta vez un poco más fuerte, quizá sepa algo de mi criatura, aunque es poco probable, mejor olvidar semejantes pensamientos que me distraen de lo que es realmente importante.

25 de mayo

Estoy seguro que el vecino sabe algo, volvió a golpear la puerta y esta vez con más insistencia, no debo dejarle saber que estoy en casa, seguramente me pedirá permiso para ver a mi criatura.

26 de mayo

Su movimiento es tan hermoso, uno, dos, cada uno más que el otro.

27 de mayo

Han pasado dos días y él no ha vuelto a tocar la puerta, por fin lo he convencido de que no estoy, por fin podré seguir viendo a mi criatura, uno, dos, moviéndose de un lado a otro.

28 de mayo

¿Cuántas veces la he visto pasar por estas aguas?

29 de mayo

Creo que esto es lo que él quería, no me iba a pedir permiso para ver a mi hermosa criatura, quiere entrar a hurtadillas mientras no estoy, sacarla de mi lavamanos. No ha tocado la puerta hoy, ni ayer. Planea algo.

30 de mayo

Sonidos. No debería haber sonidos. Mi criatura es silenciosa, mi aliento apenas un soplo de viento. Él debe estar en alguna parte.

31 de mayo

Mis pies duelen un poco. La criatura sigue nadando, eso es importante.

32 de mayo

Sólo espera a que este dormido, a que salga un momento, no puedo permitirlo algo debo hacer.

33 de mayo

Mi criatura no me debe ser quitada. Algo podrá hacerse.

1 de abril

Está decidido, sólo será un trago, rápido sin dolor para nosotros. Él no sabrá.

2 de abril

Mientras escribo esto, pongo mis manos en las orillas del lavabo. Él no debe saberlo. Mi criatura nada tan hermosa como siempre, me prepara, saco todo el aire de mi cuerpo. Él no debe saberlo. La atraparé con mis dientes, mi cabeza tomará su lugar. Él no debe saberlo.