Me siento la persona más estúpida de toda la faz de la tierra, incapaz de pensar por si misma, el hazme reír la clase. — Oye Patty, ¿Qué te pasa? — Mi única amiga me pregunta, por curiosidad supongo.— Veeenga ya, no me digas que no tienes pasta pal' bocata. Con lentitud niego con la cabeza, había perdido el hambre una vez haber chocado miradas con él. — Nah, no es eso.— Respondo. — ¿Entonces qué? — Se me pega por detrás como un chicle, con sus brazos alrededor de mis hombros. — Diiiiiime~ — Tararea insistente en mi oído izquierdo. Odio cuando hace eso, me da escalofríos. — Yo solo... no le soporto. — Dejo escapar mientras me alejo de Melina. Me entran unas ganas locas de irme a casa ya. — Hey...¿Quién.... — Ella parece dudar por momentos antes de empezar a reírse como loca.— ¡Aha! Así que él ¿eh?— Me vuelve a achuchar en sus brazos como si yo fuese una muñeca. — ¿No será eso amor? — ¡NO! ¡Dios no! — Niego vehemente, es muy poco probable. — ¿Entonces por qué te pones así por él? ¿Eh? ¿EH? ¿EH? — ¡Porqué no le soporto! — Repito molesta. "Y Porque cuando él me mira...me siento inferior ¿Entiendes? Me siento escoria delante de él y eso me molesta. No soy la más inteligente y de lejos la más hermosa, pero, cuando él me mira...Cuando él lo hace...Me veo como un estorbo, una carga. Y no es que él me mire mal tampoco, es solo... ¿Por qué él tiene qué mirarme en primer lugar? Así que yo le miro a él también, no aparto la mirada aunque desee desviarla. Mi pequeña venganza, hacerle incómodo del mismo modo en que él me hace a mí. Y me molesta aún más que él no me haya hecho nada malo, que no me haya dado razones para odiarlo. Porque yo....yo ya lo hago y eso me molesta. Me molesta no tener motivos por hacerlo." — ¡Tierra llamando Patty! ¡Tierra llamando Patty! — Melina me pellizca la cintura con curiosidad. — ¿Y qué? ¿No le soportas y ya está? A mi me parece que estás loquita por él. — Lo que tu digas. — Doy de hombros, y entonces el timbre del final del recreo suena. — ¿Nos vamos? — ¡Mierda! No me compré el bocata. — Ya. — La arrastro conmigo por el pasillo hasta la entrada de clase. — Hazlo a la hora de salir. — Digo mirando los demás estudiantes que pasan por delante de la puerta de nuestra clase. Pero entonces, mi mirada se topa con la de él de casualidad. Melina se da cuenta de ello y hace ojitos. Yo con indiferencia le sigo observando mientras él se acerca a mí, no aparto la mirada, que lo haga él si quiere. Para mi alegría él lo hace. Una sonrisa casi imperceptible se dibuja en mis labios mientras pronuncio dulcemente — ¿Qué haremos hoy en clase, profe?
Odiar a alguien porque le gusta, wow, me recordó una historia que tengo con el mismo tema. Me gustó la actitud de Melina, quiero decir, parece una chica llena de energía y entusiasmo. Vendría a ser algo así como la voz de la conciencia de Patty =) Melina dio en el clavo al preguntarle "¿no le soportas y ya está?" Y después afirmar la que es. El hecho de que Patty se sienta como se siente cuando él la mira, me hace suponer que en el fondo piensa que no es suficiente para él a pesar de que logra vencerlo con su mirada. Una contradicción ._. Saludos.