Fue abrumador ver como el sol salía de su recóndito escondite para iluminar con creces la existencia de un hombre que se veía amenazada por el despertar. No abras los ojos pequeño, duerme, duerme mientras te arrullo con suaves caricias doradas y delicados besos hechos resplandor-musitó el sol haciendo uso de su candor. Tal vez las cosas no sean como se suponen que deban ser, tal vez yo duermo de día y vivo de noche o ni siquiera vivo una vida, pero mis libertades son más amplias en mi imaginación que en cualquier lugar existencial; no es preciso ser niño ni un joven enamorado para ver la vida con amor e imaginación, no es preciso llegar a viejo para darse cuenta del tiempo que pasamos dejando pasar las oportunidades y mirando el pasado como un grillo de constante rodar, porque el tiempo es implacable y constantemente amenaza con llegar a su final. Tal vez me equivoque, puedo llegar a decir tonterías, puede que esté más que errado, pero si la muerte fuese más que un límite, más que un final, si fuese algo palpable a lo que se le pudiera hablar, le diría: "Gracias por retrasar mi partida. He hecho por fin lo que siempre quise hacer,valoré los pequeños detalles y llené mi vida de momentos: tristes o felices; gracias por que pude apreciarla, me hizo quererme a mí y a los que están conmigo, me hizo ser ambicioso... ambicioso de la felicidad."