Memorias de Inocencia Otra noche de insomnio en la cual las viejas memorias de juventud vuelven a mí, imágenes que eh trato de reprimir toda mi vida, era tan pequeña e inocente, pensaba que no existía la maldad en el mundo, que ilusa fui. Cuando tenía cinco años, mi hermana se caso yo estaba muy feliz por ello, sin conocerlo mucho comencé a sentir cierto cariño por él, no era guapo pero yo confiaba en el gusto de mi hermana y si ella lo había escogido es porque era una buena persona. Siempre eh querido mucho a mi hermana, siempre estaba con ella más que con mi madre, realmente no recuerdo muy bien como sucedió pero mi vida dio un vuelco. Cuando tenía siete, mi hermana me pidió que fuera a su casa para ayudarle con mi sobrino, y con gusto fui, cuando llegue mi hermana me recibió con su usual sonrisa, era tan reconfortante, luego de un rato me pidió que cuidara del pequeño Kevin, ya que tenía que buscar unas cosas y el estaba durmiendo. Me encontraba sentada en la sala viendo la televisión mientras Kevin seguía durmiendo, escuche el sonido de las llaves, me alegre pensé que mi hermana había regresado, “no ha tardado” fue lo primero que se me vino a la mente, volteé hacia la puerta y no era mi hermana si no su esposo. -Hola pequeña Lilian –musito con usual amabilidad. -Hola Eliot –le respondí mientras continuaba viendo la televisión. -¿Y Marion? –musito mientras tomaba asiento a un lado mío. -Salió a comprar lo que ocupaba para la cena –no sé porque pero en esos momentos me sentía incomoda, estaba comenzando a desear que llegara mi hermana. -Ya veo –se acerco mas a mi estaba intranquila, decidí levantarme e ir con el pequeño Kevin, pero él me detuvo del brazo y comenzó a tocarme de manera impropia, no atine a hacer nada, me quede pasmada “esto tiene que ser un desagradable sueño”, tenía ganas de llorar pero no pude hacerlo, en cuanto escucho que mi hermana había llegado me soltó, corrí hacia la habitación de Kevin, lo abrace fuertemente y las lagrimas comenzaron a brotar. Luego de ese día volvió a hacerlo, y eh decir que agradezco enormemente que no pasara a mas, nunca estaba tranquila no podía estar sola y menos con él , siempre buscaba la manera de estar con alguien, quería decir a mi familia lo que ocurría pero realmente no podía, conocía a mi padre y sé que si se lo decía hubiera cometido alguna estupidez, así que preferí callar, mi manera de ser y ver el mundo ya no fue el mismo, comencé a encerrarme en mi misma, mostrando siempre una sonrisa al mundo, mientras por dentro lloraba con amargura, deje de confiar en las personas, para mí solo eran uno más del montón. Nunca hable con nadie al respecto, fui muy feliz el día en que mi hermana se separo de él y nunca más lo volví a ver, pero mi vida nunca fue lo mismo, aun ahora sigo recordándolo y comienzo a llorar con pesar, ya han pasado trece años y aun no logro superarlo por completo, el inmenso vacío que me invade, hace que me sienta tan sola... .::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::. idea que suergio cuando iba caminando y escuchando la cancion de Oogesa ni aishiteru de Angela Aki, nada que ver con la cancion lo se, bien espero que sea de su agrado
