Para Harry era una costumbre de Snape, todas las clases que tocaban con él la aborrecían, siempre restando puntos a Griffyndor, por cualquier cosa, no prestar un momento atención a su clase, hacer algún apunte o simplemente se inventaba las cosas. Pero Harry pensaba que luego esa manía era contrarrestada por Dumbledore, haciendo que ganen la copa de la casa cada año.