La venganza del vampiro

Este es mi primer intento de hacer algo parecido a una novela hace mucho la escribi y la quiero mejorar por eso espero sus consejos y comentarios. Cualquier opinion es bien resibida si veo que les intereso subire los demas capitulos.

Primera PARTE: Capitulo 1

Al principio al verlo allí parado en la entrada ellas se asustaron, estaba junto a la reja de la mansión, esperando a que le dejaran entrar, eso les produjo cierto temor a las mucamas que lo vieron. Era una tarde de invierno en la que hacia muchísimo frío y el cielo estaba cubierto de nubes cuando apareció un joven vestido con una chaqueta grande violeta oscuro con una capucha que le tapaba el rostro. Una de ellas fue a recibirle y le pregunto quien era, a lo que el visitante le respondió que era el sobrino del dueño de la casa y que lo demás no era asunto de ella. El joven entro a la casa, la cual era grande y antigua, pero muy bien decorada con elegantes muebles y adornos decorativos de todo tipo.

El pidió que viniera su tío y la mucama de mala gana lo llamó e invito al joven a sentarse para tomar un café que ella preparo el cual se veía repulsivo a toda vista. El simplemente le dijo que no y se puso a ver alrededor noto las grandes ventanas, los candelabros sobre su cabeza y las escaleras que llevaban al segundo piso.

El joven se sentó en un sofá en el salón, espero un poco sin tocar la taza de café en la mesita frente a el, fue entonces cuando lo conocí, yo me acerque a él presentándome como Víctor Belmont. Luego el joven aun sentado en el sofá con su bolso en sus manos me dijo:
-Yo soy tu sobrino Courag Belmont te escribí de mí venida hace poco, se que no nos hemos conocido personalmente pero soy hijo de tu hermano Héctor, el me hablo de ti cuando vivíamos en Madrid, gracias por invitarme a tu casa.
Yo le respondí que no hablaba con mi hermano desde hace muchos años pero era un gusto recibirlo en mi casa. Courag me dijo:
-Es un placer conocerte, no tengo ningún otro lugar donde ir.
- lo se por eso mientras buscas alguna pensión puedes quedarte conmigo.
- como te dije en mi carta no pienso estar aquí por mucho tiempo
- que pena esperaba poder conocerte mejor después de todo, no sabia que tuviera otro sobrino, aparte de Jonathan
- es mi hermano, pero ya sabes nuestra familia esta muy separada, es una suerte encontrar un pariente aquí me encontraba como perdido
- yo se lo que de eso, en fin te mostrare tu cuarto.

Fuimos al segundo piso donde están las habitaciones, el baño y un estudio de trabajo, a Courag le di un cuarto apartado con una ventana que daba al frente de la casa.
Al principio no había nada diferente en el nuevo sobrino quien casi no interactuaba con nadie, en la casa las mucamas Rut y María seguían su rutina habitual, el mayordomo Esteban parecía no notar nada diferente y en cuanto a mi solo me ocupe de mi trabajo, hasta que empecé a notar algunas cosas raras Courag casi no salía y siempre estaba tocando el bajo que tenia en el estudio y lo hacia muy bien, comía poco y no contaba nada de su vida ni el motivo por el cual viajo de España a Argentina pero tenia que ver con algún trabajo que tenia y me pareció raro porque no parecía tener más de veinte. Una vez me dijo que estudiaba en las mañanas y por eso no salía ni a desayunar, pero no me contaba nada mas, a pesar de que quería conversar con el.

En las noches empezó a salir con sus cosas, volviendo después con su ropa cubierta de sangre y con un aspecto aterrador daba la impresión de haberse peleado o algo así estando fuera. Por supuesto el muchacho no daba explicaciones al respecto sino que simplemente rehuían el tema.
Para peor de la situación llegue a temer que fuera un delincuente y que se metiera en problemas por cometer crímenes en la noche. Recientemente en la ciudad ocurrieron terribles ataques a las personas que salían de noche, en lugares poco iluminados o solitarios, entonces a las victimas las agredían y siempre perdían mucha sangre aunque en la mayoría de los casos morían, algunas sobrevivientes contaban que las agarraron por detrás, para que no vieran claramente al atacante que las hería para beber la sangre, contaban que tenia mucha fuerza y velocidad para el escape.

Algo realmente aterrador de lo que los periódicos y los noticieros no dejaban de anunciar y se notaba a los vecinos asustados, pero Courag ni se daba por aludido.
Una tarde Courag salió a la tarde con el bajo y volvió con mucho dinero resulta que tenia un trabajo en un café donde tocaba música y hasta cantaba por dinero, mi mucama María me contó que el conocía a una chica allí que trabajaba de mesera y como eran algo como amigos ella le sugirió esa idea.
Pasaron los días y todo seguía igual yo estaba solo con mi trabajo, por alguna razón desde que me mude a este pequeño pueblo dejando de lado mi hogar en Madrid y todos los problemas que allí sufría, he sido olvidado por todos y abandonado en una total soledad, verán, nunca fui aceptado aquí no se porque pero es como un blanco en un barrio de negros, un extranjero en una tierra que no es suya, pero ya no me importan las ideologías locales, me las arregle para establecerme aquí y nadie me sacara.
Sigo aburrido con mi trabajo administrativo y vuelvo a pensar en los ataques y en mi evasivo sobrino.
Capitulo 2

En realidad tenía fundamentos para sospechar de mi sobrino pero no sabia que hacer en esa situación, jamás tuve que lidiar con adolescentes conflictivos, en toda mi vida. Una noche en que vigilaba a Courag de cerca note sus habilidades especiales al ver como levantaba un escritorio enorme con una sola mano para buscar unos papeles finalmente asustado por esto pensé en que debía echarlo de algún modo lo antes posible.

Otra noche paso algo aun peor nevaba con fuerza, el viento soplaba terriblemente y todo el pueblo se resguardo de la tormenta, en casa, Courag revisaba las cosas de su bolso cuando noto que faltaba algo, salió de su cuarto donde pasaba todo su tiempo bajo las escaleras buscando frenético de nervios, recorrió todo el comedor revisando como loco cada rincón, en eso escucha que las mucamas hablaban en susurros sobre el, se acerco discretamente para enterarse lo que estaban diciendo, así, se entero de que rumoraban que lo vieron merodeando cerca de donde sucedían los ataques ellas sospechaban también de el y se alegraban de que yo lo quisiera echar.
Courag se acerco directo a María con intención de discutirle entonces al mirarla se dio cuenta de que estaba mas pálida y con peor aspecto de lo usual al notarlo simplemente se aparto de ella y corrió por todos lados buscando su objeto, parecía aun mas nervioso cuando nos encontramos, su mirada aparentaba cierta impaciencia pero se trataba de temor por lo que Courag tomo el tema con prudencia manteniendo entre nosotros cierta distancia:
-Escuche que quieres que me vaya
A lo que le conteste:
- Es que ya se lo que haces y no voy a soportarlo
Furioso, esta ves, dijo:
- ¿Qué crees que ago?
Le respondí:
- te escapas de noche para atacar personas en la calle ¿no es verdad?
Me miraba confundido y con tono ofendido dijo:
- no es verdad, te equivocas
Me atreví a decir:
- ¿entonces para que tienes este sable? Además como explicas que este manchado de sangre
No respondió.
Continúe la acusación
- la ocultabas bajo tu cama después de tu paseo nocturno ¿cierto?
Parecía molesto, me dijo sombríamente:
- tal ves debí atacarte con ella, a ti primero
Entonces se acerco y me arrebato su sable de las manos rápidamente se retiro de nuevo a su habitación estaba tan furioso que sus ojos se volvieron carmesí.

Les cuento antes que nada que nos encontrábamos en una ciudad de la Patagonia Argentina. La ciudad que les menciono se llama Rosario Hill este lugar se ubica a la vera del río Chubut a 15 Km. de Trelew. Presentan heladas y nieve durante el invierno, cielo constantemente cubierto de nubes, los días son cortos y las noches largas, debido a este clima los pueblos no son muy grandes.
Las casas son nuevas (no hay muchos edificios) como la de mi amigo Carl Finney al que tengo que visitar esta tarde, me invito a comer y cuando llegue me recibió amistosamente ya que somos amigos desde hace tiempo, últimamente nuestros trabajos nos tienen ocupados, no les mencione aun que tengo algunas tierras aquí y que trabajo de abogado, en cuanto a Carl, el es mi amigo trabaja de doctor en el hospital del centro. Después de saludarnos, ambos entramos a su casa cálida y acogedora, perfecta para el invierno. En el comedor salude a sus hijos eran una niña llamada Luna y en niño llamado Seth apenas tendrían doce años su madre Sara les pidió que se portaran bien mientras ella servía la cena. Al verme me invito a cenar, yo me puse a hablar con Carl al principio del trabajo.
Carl es un gordo de poca altura, barbudo, ojos y pelo grises, su bigote peinado y encorvado es muy gracioso, siempre lo visito porque es el único con tanta paciencia como para escuchar mis problemas sin explotar, el parece encontrarle una salida muy simple a cualquier percance en la vida.

Yo en cambio tengo complicaciones hasta para vestirme. En apariencia también nos diferenciamos, soy alto, flaco, de piel clara, ojos marrones y pelo largo un poco ondulado castaño claro.

Ese día como muchos otros tenía un atuendo color morado, los demás estaban con abrigos y pantalones gruesos a pesar de la calefacción.
Cenamos un rico estofado, hablamos un poco de todo del frío y las nevadas, de nuestros autos y después mencionamos a Judith la chica por la que estaba loco éramos novios pero yo aunque quería, no me atrevía a pedirle matrimonio cuando tuve la oportunidad solo me cobarde, eso fue hace unas semanas cuando la visite pero acabe echándolo a perder. Carl dijo:
- sabes que ella no te esperara para siempre
- ¡Pero es mi vida hombre!
- lo sé ¿pero tendrás 80 antes de animarte a casarte, no?
- en cambio vos desde que estas casado y con hijos parece que tuvieras 80 años extras.
Al final hablamos de la inseguridad y de que la policía no parece hacer nada. No se sabe si se trata de una banda de mafiosos o un asesino en serie, solo se le decía a la gente que no salga de noche pero la policía no tenia ni una pista y no ofrecía ninguna seguridad a las personas nerviosas.

 

bueno aqui va la continuacion, es un poco mas corta pero es que ando algo ocupada espero que les guste.

Capitulo3

Por otro lado los demás crímenes a tiendas y en las calles parecían a ver disminuido ni los chorros ordinarios se atrevían a salir a la oscuridad.

En las noches se han vistos ataques a personas de los mas raros, comentó Carl, para él solo se trata de un loco homicida que se escapo de un psiquiátrico, el vio que en las callejuelas se mueven extrañas figuras, en una ocasión estaba volviendo a casa después de terminar su trabajo cuando frente a su auto se cruzo una criatura humana con ojos rojizos que se movía con una agilidad felina, no pudo verlo bien debido a la oscuridad pero tenia apariencia amenazadora según él, es probable que se allá tratado del psicópata asesino.
Antes de que me fuera, me recomendó cuidado, yo me despedí animadamente pero estaba preocupado, nadie podía hacer nada para detenerlo decía la policía, esa era su única respuesta a la situación que vivíamos, en ese momento me pregunte si Courag estaría involucrado en el asunto, la verdad no sabia si fue buena idea discutir con él ya que ni siquiera lo conocía pero era muy raro en ocasiones.
Pienso que en ese momento, empecé a buscar un modo de distraerme de todos mis problemas, aunque no seria fácil.
Al llegar a la mansión Courag estaba acostado en un sofá escribiendo en un cuaderno parecía muy ocupado como para hablarme y no le importo si lo ignoraba de mala gana.

Entonces llego el mayordomo a avisar que las mucamas no vinieron hoy al parecer María estaba enferma y Rut su hermana se quedo a cuidarla, según Esteban tampoco vendrían mañana. Después Esteban pregunto a Courag si comería pero el dijo que no se sentía bien, le dolía la cabeza.

Courag no era de mucha altura pero se mantenía en forma su pelo es crispado castaño oscuro, ojos grandes y marrones piel clara y su edad seria 20 años.

Era una pena que alguien tan joven como él se la pase encerrado en su cuarto pero así era la mayoría del tiempo.

Yo no me moleste en quedarme a hablar con el como debí hacerlo, a veces quería arreglar las cosas decirle que lo apreciaba aunque se comportara tan frívolamente, no quería creer que fuera un asesino.
Sin embargo él se fue a su cuarto pensando en sus propios asuntos y ni me miro entonces, decidí dejar la charla para después, yo también estaba cansado y ni quería pensar en mi trabajo.

Cuando me levante en la mañana y baje a desayunar no podía ni imaginar lo que iba a encontrar, Courag estaba en el suelo sentado jugando con los caballitos de cerámica que tenía de adorno estaba muy entretenido absorto en su juego hasta que me vio y me pregunto como si fuera un niño de 8 años:

- ¿Quién es usted?
- ¿de que hablas? ¿Acaso no lo recuerdas?
- no, nunca lo había visto antes
- ¡¿QUE RAYOS TE PASA?! Llevas viviendo aquí dos semanas
- yo no lo recuerdo y no se quien es usted
- no puede ser, Courag estas comportándote muy raro
- mi nombre es Locky
- ¿que?
- ¿Cuál es el tuyo?
- dime Víctor y soy tu tío
- ha, bueno ¿esta es tu casa?
- así es
- es muy bonita
Siguió jugando como si nada haciendo una carrera de caballitos de cerámica en el suelo, yo lo miraba desconcertado
- ¿te sientes bien?
- Sí, ¿quieres jugar conmigo?
- No, ahora tengo cosas que hacer
- de acuerdo, jugamos después

Yo fui a buscar a Carl para que lo revise para saber que rayos le pasaba en la cabeza. Al principio Carl tampoco quería creer cuando le conté del incomprensible cambio de Courag le explique que ni siquiera me reconoció y el me decía que todo era una farsa que debía estar fingiendo una tonta broma para burlarse de mi.
Pero si lo era fingía muy bien porque realmente parecía un niño de ocho años además no se me ocurre el motivo que lo llevara a comportarse de ese modo.
Un momento, sí existía un motivo, por un tiempo yo había pensado echarlo a la calle porque llegue a pensar que era peligroso y tal vez un asesino había encontrado un sable ensangrentado en su cuarto, se iba a la noche y volvía tarde con manchas de sangre y no daba explicaciones de nada, mientras que la ciudad desesperada por los misteriosos ataques nocturnos, el pánico empezaba a asomar ya que no se encuentra ningún culpable pero yo sospeche de Courag y quise sacarlo de mi casa.
Pero, ¿es posible que aquello lo hiciera llevar estar actuación?
Sería mas sencillo buscar otra casa como el asunto, no cerraba llevé a Carl a rastras a la mansión e insistí en que lo revisara.
Llegamos y Courag o más bien Locky estaba cabizbajo como apenado me vio entrar y dijo:
- lo lamento yo no sabia que se rompían tan fácil, tío
Había roto los caballitos de cerámica, los pedazos estaban por todo el piso, el estaba muy apenado por el destrozo
- lo lamento mucho, de veraz
- no importa Locky fue un accidente
- no lo vuelvo hacer
Me hablaba con unos ojitos de cachorrito tierno mirando al suelo ni siquiera yo me lo creía y Carl asumió que todo era un invento de él.
Para terminar de una vez por todas con esto le presente a Locky, mi amigo Carl.
- Locky este es el doctor Finney el ha venido a revisarte
- ! UN DOCTOR ¡yo no necesito un doctor, estoy bien!
-Pero te has portado muy raro últimamente
- no, por favor yo les tengo mucho miedo, quien sabe que quiera hacerme
Locky estaba aterrado peor que si le hubiera traído a Jack el destripador retrocedió y miro a Carl como si fuera un monstruo Carl quiso calmarlo.
- no voy a hacerte daño solo quiero hacerte una revisiones para saber que te pasa, te aseguro que no será nada de lo que debas preocuparte
- no le creo nada
- solo queremos asegurarnos de que estas bien con unas pequeñas pruebas para saber que te pasa, será rápido y no van a dolerte.
En cuanto Locky vio una de sus jeringas de su estuche se desespero y corrió a mi lado
- por favor no me dejes con el va a torturarme, quiere hacerme cosas horribles y espantosas
- tranquilo es mi amigo no va a lastimarte
- si que lo va a hacer
Estaba lloriqueando y temblaba de miedo aferrado a mi, a pesar de que intentara engañarnos al principio, su miedo era real, estaba aterrado, era un niño aterrado no podía evitar sentir pena de el.
Carl estaba perdiendo la paciencia lo estaban tomando por un maltratador de niños, al comportarse Locky, como si realmente fuese a herirlo.
- ya basta deja de actuar, sabes que no voy a lastimarte,
Solo haces este escándalo para que no vaya a probar que eres un mentiroso
- no, tío detenlo, por favor
- deja de fingir, no engañas a nadie haciéndote el niñito solo quieres que no te echen a la calle
- si quieres me iré a la calle tío, pero no me dejes con el, por favor
- ! ¿Por que haces tanto escándalo, no soy un descuartizador? ¡
- ya basta Carl, ¿que no vez que esta aterrorizado?
- pero… bueno, me iré.
Me quede quieto con Locky abrazado a mí mientras Carl tremendamente enfadado se marchaba con un portazo.
Locky respiraba agitadamente, su cabeza estaba sobre mi hombro en el que seco sus lágrimas, en cuando empezó a calmarse del susto, dijo:
- gracias por cuidarme.