La Soledad de Shensy

Tema en 'Relatos' iniciado por Namida, 1 Marzo 2012.

Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    Namida

    Namida Entusiasta

    Escorpión
    Miembro desde:
    10 Septiembre 2011
    Mensajes:
    176
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    La Soledad de Shensy
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    780
    Trozo extraído de Jinsei to Shi (libro actualmente creado por dos amigas y yo, este capítulo creado únicamente por mi).

    La Soledad de Shensy
    Era una noche estrellada, donde las estrellas de Estelaria brillaban más que nunca. Sira y Nezil se reunían todas las noches en la playa, bajo la luz de la luna en la suave arena. Mientras, en palacio, los cinco cachorritos dormían plácidamente en sus alcobas. Todo era normal, más o menos. Sira soltó un suspiro, no uno normal, uno más fuerte de lo común. En su rostro se notaba preocupación, pero, ¿por qué?​
    A la mañana siguiente, los pequeños cachorritos madrugaron para ir a sus "clases", ya que en un futuro tendrán títulos de gran importancia dentro y fuera de Estelaria. Sira tenía un amor profundo por sus cachorros, así que ella misma se encargaba de acompañarlos hasta la esquina, donde les esperaban sus maestros. Al dejarlos siempre se despedía de ellos con un abrazo, pero se sentía mal porque Shensy se iba antes que todos al salón. Como siempre, eso le bajaba mucho el ánimo y se notaba. Se sentía bien, pero se notaba en su rostro la preocupación que sentía por Shensy.

    Pasó el tiempo y justamente el día 27 de diciembre, Shensy cumplía un año. ¡¡Qué alegría!! Se levantó y a toda prisa fue a la alcoba de Sira y Nezil.
    –¡Mamá! ¡Papá! ¿No se olvidan de algo?! –decía la joven con mucha ilusión.
    –No, ¿de qué? –interrogó Nezil.
    – Por favor, Shensy, no molestes. Anda y despierta a tus hermanos para desayunar, enseguida vamos nosotros –le ordenó amablemente su madre.
    Shensy asintió desilusionado y fue a llamar a sus hermanos para desayunar.

    –Oye Kyrara, ¿hoy no era el...? –preguntaba Alú.
    –¡¡Calla bobaa!!! –dijo tapándole el hocico a su hermana– ¡¡sshhh!! No lo estropees.
    –¿Estropear el qué? –preguntó Shensy llegando.
    –Nada, nada... –disimuló Alú.
    –Soy su hermana mayor, ¿qué esconden?
    –Oye, ¿no íbamos a desayunar? –dijo Kyrara cambiando de tema, y fueron todos a desayunar.

    "No se acordaron..." pensaba Shensy con un rostro profundamente triste.
    –Ya terminé –dijo Shensy levantándose.
    –¿Dónde vas Shensy? –preguntó su padre, Nezil.
    –Voy al árbol Murasaki.
    El árbol Murasaki era un árbol completamente morado (a excepción del tronco), que despertaba un aura desconocida en el interior de Shensy. Siempre que se sentía sola iba al árbol Murasaki para no sentirse tan mal. Se pasaba la mayor parte del tiempo en aquel lugar, y eso empezó a preocupar un poco a Nezil y Sira.
    –Nadie se acordó... –dijo Shensy–. ¡¡¡Nadie se acordó!!! –gritó mientras de sus ojos salían unas lágrimas moradas.
    –¿De qué no nos acordemos, Shensy? –dijo Sira apareciendo detrás de ella.
    La joven cachorra de tonos morados mantuvo el silencio, no sabía que responder.
    –Tu padre dice que quiere mostrarte algo, así que, cuando puedas, apresúrate y ve a la pradera.

    –La soledad es el mayor enemigo de un lobo –dijo Nezil al ver llegar a Shensy.
    –La soledad es la base de un lobo –respondió ella.
    –Te equivocas. La soledad puede acabar completamente con un lobo. No te dejes vencer por ella Shensy, yo se que eres fuerte. Solamente necesitas demostrar que no me equivoco –dijo desapareciendo.

    Shensy llegó de nuevo al árbol Murasaki, a paso lento, sin la esperanza de que su familia se acordara de que hoy cumplía un año.
    Cuando llegó todo estaba adornado con guirnaldas, luces y muchos tipos de colores de tonos morados. Entonces su rostro cambió completamente y una sonrisa apareció mientras sus ojos se resistían a llorar.
    –¡¡¡Felicidades Shensy!!! –gritaron Kyrara, Alú, Gikuno y Lírian, cuatro de sus cinco hermanos.
    –No estás sola Shensy, nunca lo estarás. No mientras tengas a tu familia –le dijo Sira con una gran sonrisa que trasmitió a Shensy confianza.
    –¡¡Felicidades bruja loca!! –dijeron Alú y Kyrara a coro amistosamente.
    –Happy! –dijo Lírian disfrazado de payaso, única palabra en inglés que en ese entonces conocía (y conoce).
    –No lo olvides –dijo Nezil mientras desaparecía entre la brisa.
    Al rato, Shensy volvió a acordarse de algo.
    –Oigan, ¿no se olvidan de algo?
    –¿Otra vez? –dijo Kaden llegando, extrañado.
    –No, ¿de qué? –dijeron a la vez Alú y Kyrara.
    Entonces se escuchó un gran eructo por parte de Lírian. Todos le miraron con cara de "¿qué has hecho!?".
    Estaba sentado con su forma humana y tenía la tarta en las manos, ya terriblemente desformada, y su cara estaba completamente manchada de fresa, nata y chocolate.
    –Esto no estaba puesto en el mapa –dijo Kaden sin no saber qué más decir.
    –Sin duda, el mejor cumpleaños de mi vida –sonrió satisfecha Shensy al ver a su hermano de esa manera.
     
Cargando...
Similar Threads - Soledad
  1. RedAndYellow
    Respuestas:
    1
    Vistas:
    491
  2. Luncheon Ticket
    Respuestas:
    4
    Vistas:
    771
  3. Lionflute
    Respuestas:
    2
    Vistas:
    393
  4. VocaloidFanGirl
    Respuestas:
    0
    Vistas:
    448
  5. Namida
    Respuestas:
    0
    Vistas:
    477
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso