One-shot La prueba de gakupo [academia meltdown]

Tema en 'Vocaloid' iniciado por Syel, 6 Julio 2014.

  1.  
    Syel

    Syel Extraña

    Cáncer
    Miembro desde:
    12 Julio 2012
    Mensajes:
    984
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    La prueba de gakupo [academia meltdown]
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Amistad
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    887
    La prueba de Gakupo
    Cuando elegí debutar como mesero, temí por todo lo que me podía pasar en la prueba. Nunca había gozado de “suerte” y sentía que esto no iba a ser la excepción. Tan pronto Len se metió a la cocina, yo me dirigí hacia donde estaban los jueces que evaluaban a los interesados en meseros.

    Debido a que el café que recién iba a abrir en la Academia era de cosplay mi preocupación aumentaba con cada paso que daba, ¿y si ellos decidían ponerme un traje de mujer? ¿Una botarga? ¡¿Una botarga de mujer?! Respiré hondo cuando por fin llegué frente a ellos.

    —Buenas Tardes— saludé con una reverencia formal. Había dos hombres y dos mujeres -que se me quedaban mirando fijamente- ambas jóvenes. Uno de los evaluadores habló:

    — ¿Eres chico o chica? —Se rió de su broma y volteó a ver a sus compañeros pero ninguno lo acompañó en su chiste. Regresó la mirada hacia las hojas que tenía al frente con gesto serio; estaba punto de contestar pero me interrumpió—. Como sea, esta es tu vestimenta, por allá están los vestidores, una vez que estés listo vienes de nuevo aquí para que te demos la prueba— dijo sin apartar la vista de los papeles.

    —De acuerdo, con su permiso— Me acerqué a la mesa y tomé las prendas. Las mujeres me sonrieron y les correspondí, ambas se miraron y me vieron partir a los vestidores. Con nerviosismo extendí la ropa y me di cuenta que era un sencillo traje de mesero: pantalón y chaleco negro, camisa blanca y el característico moño. Aliviado me vestí lo más rápido que pude. Jalé mi cabello para que quedara mejor ajustado y salí.

    Miré a la mesa de los jueces pero en esta solo estaban un hombre y una mujer, miré al otro lado donde estaban las otras dos personas sentadas en una mesa con mantel blanco y un florero en el centro.

    — ¿Ves la mesa de allá? —Me preguntó el hombre, lo miré y asentí— Debes tomar su orden, no te preocupes te pedirán una de las cosas que están aquí— señaló a su lado donde reposaban varios platillos y bebidas—, una vez que anotes lo que piden, vendrás, tomarás los platos y los llevaras a su mesa, ¿entendiste?

    —Por supuesto

    —Entonces, adelante— hice una reverencia y me dirigí a la mesa improvisada. Una vez allí suspiré y sonreí lo más natural que pude.

    —Bienvenidos, seré su mesero en esta ocasión, mi nombre es Kamui Gakupo, ¿qué puedo ofrecerles? —me pareció escuchar una risita por parte de la mujer pero no estaba seguro. El hombre pidió un té helado y la mujer una ensalada de lechuga con fresas y nueces, me pareció una rara combinación pero no dije nada— ¿Es todo? Enseguida se los traigo.

    Me retiré con una sonrisa de oreja a oreja y me dirigí a la mesa de los jueces, tomé la charola y coloqué con sumo cuidado el pedido.

    — ¿Podrías ser más rápido? — se quejó el hombre

    —Lo siento— tomé la bandeja un poco deprisa, tanto que el té casi se voltea pero logre mantenerlo en equilibrio. El juez puso los ojos en blanco, lo ignoré y fui directo a la mesa. —Aquí tienen, buen provecho. Si se les ofrece algo más no duden en llamarme— dije amablemente.

    — ¿Tienes un celular? — me preguntó la mujer. La miré con gesto de confusión, ella rió y se enfocó en la comida –la cual no tocó para nada-. Espere menos de un minuto cuando ellos me pidieron que retirara los platos. Los tomé, coloqué en la bandeja y los llevé a la mesa de jueces. Me parecía un poco tonto tener que hacer eso pero…En fin. La pareja regresó al lugar en donde estaban antes, me quede de pie esperando a que me dijeran algo hasta que una mujer alzó la vista de sus papeles.

    —Ya puedes ir a cambiarte cariño— sonrió. Me incliné y retiré de ahí, no entendía porque me trataban así. Resignado me deshice del traje para colocarme mi ropa "normal". Acomodé una vez más mi cabello, doble las prendas y salí del lugar.

    —Muchas Gracias— dejé la ropa en la mesa y les sonreí.

    —Nosotros te diremos los resultados después— comentó el hombre que desde el principio me había preguntado si era chico o chica, aunque sabía que ya se había dado cuenta decidí contestar su pregunta, tanto de él como de la mujer de hace rato.

    —Antes de irme, quisiera responder sus preguntas: Soy un hombre y no, no tengo celular. Con su permiso— me incliné levemente, cuando me levanté me pareció ver un sonrojo en el rostro de la mujer y un gesto de enojo en el hombre. Me di la vuelta y salí del lugar, una vez fuera suspiré.

    Ahora solo había que esperar.

    ¿Resultaría seleccionado después de lo que dije? Y si de casualidad me eligieran, ¿sería capaz de soportar todo? ¿Estaba bien como lo había hecho? ¿Por qué me trataban como si fuera un animal de circo? En eso vi salir a Len un poco preocupado, un poco aliviado.

    —¡Hey Len! ¿Qué tal tu prueba? — Al menos hablar con él me distraería un poco de mis -insignificantes. preocupaciones.


     
    • Me gusta Me gusta x 4
Cargando...

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso