Hush Hush In the Air Tonight. {Hush, Hush}

In The Air Tonight {Patch x Nora}
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Sus pasos perdían agarre contra la gravilla que cubría la carretera cada vez que volteaba su cabeza sobre los hombros. No había sido un buen día para ponerse bailarinas.

Corría todo lo que sus piernas le permitían, pero Nora Grey sabía que poco faltaba para que la alcanzasen. Ellos eran más rápidos y decididamente más fuertes, más arriesgados. Pero no más listos.

Ellos eran aún Nephilims jóvenes, por lo que no eran conocedores de la totalidad que abarcaba sus poderes. Ella sí, aunque no fuera un Nefil, lo había visto de primera mano. Y tenía miedo, mucho miedo.

Scott había desaparecido un tiempo antes, preocupado de que su pequeña escapada juntos a los almacenes Nefil hubiera alertado a la Mano Negra. Fue prudente y muy listo al hacerlo.

Pero ahora ella estaba sola, sola y a merced de unos sanguinarios y destructivos chicos que lo único que querían era desquitarse torturándola. Por lo menos, esa sensación de ser perseguida le recordaba algo; cosquilleaba en su memoria. Aunque rápidamente podía decir que no era algo bueno. Si había sido perseguida antes, tal vez volviera acabar secuestrada o nuevamente sin memoria.

Y no quería eso.

Nora da un grito ahogado cuando uno de ellos se adelanta y agarra con fuerza su antebrazo, chocando su rostro contra el duro pecho masculino y desorientándola. Fue un duro golpe en la cabeza y aún veía negro en las esquinas de sus ojos.

Espera, ¿negro?

Negro...

Y esos ojos volvían a capturar su mirada. Dilatadas orbes que transmitían furia y algo más. Aunque pudo deducir que no iba dirigida a ella.

"Tranquila, Ángel. Ahora ya estás a salvo."

La voz masculina sonó en su mente, con un deje de nostalgia y cariño que le puso los pelos de punta. Una corriente eléctrica recorrió su espina dorsal, pero no fue dolorosa, fue... placentera.

Una vista atrás y todos los Nephilims estaban tendidos en el suelo con sus cuellos partidos y las extremidades volteadas en ángulos incorrectos. Todo era ahora silencio y tranquilidad, pero él había desaparecido.

Juraría haber reconocido la presencia que le había provocado tal oleada de placer y confort. Lo recordaba, un nombre deslizándose por los confines de su mente.

Patch...

Con un respiro ahogado, recorrió el lugar con su vista ardiendo en fuego. ¡Él había estado allí! Aunque no podía encontrarlo aún sentía la mirada penetrante de esos ojos, siguiéndola a cada paso que daba.

I can feel it coming in the air tonight...
I've been waiting for this moment, all my life, oh Lord.