Hija de la lluvia

Hija de la lluvia

Esta historia la hice inspirada en muchas cosas, entre ellas lo complejo que es el amor, no sé si este buena, puede tener errores... se la dedico a mi amigo Arias que diempre me escucha cada cosa que se me ocurre, ​

​

​

​

​

​

​

Hija de la lluvia​

Amar es una de las cosas más dolorosas que he sentido, pero aún así deseo amar por la eternidad de los tiempos; hasta que mi alma se consuma.
Eso lo descubrí cuando el destino puso en mi camino a Kai.
Yo iba jugando como siempre por los terrenos de mi familia ya que, la primavera por fin había llegado.
Mientras iba corriendo, caí torciéndome gravemente el pie, no podía moverme.
Pasaron horas de horas hasta que la noche se dejó caer… yo ya sentía miedo, debido a que hace poco se anunció en el pueblo que rondaban ladrones de la peor calaña. Mientras yo pensaba en eso, de los arbustos se sentían ruidos de pasos, “¡Ay Dios! Voy a morir de una forma tan triste” susurre.
Una sombra muy alta se acercó a mí.
-Te lo ruego, no me hagas daño, haré lo que sea- le supliqué.

-Tranquila señorita, sé que no tengo derecho para pasear por sus tierras, pese a eso rompo las reglas, no la dañaré, se lo juro- su voz era extrañamente agradable a mis oídos, a la luz de la luna, aquel hombre parecía un ángel.

-Ayúdeme, me torcí el pie y no he podido volver a mi casa-

-Claro, sin embargo ¿a su familia no le incomodará verme?-

Era obvio que me preguntara eso, en el pueblo mi familia es conocida por no tener contacto con nadie pues somos reconocidos por ser brujos.

-No- dije molesta- no por tener talentos distintos a los usuales, nos convertimos en malas personas-

-Entiendo- se comenzó a reír- una mujer tan bella no le haría daño a nadie, ¿cierto?-

-Para nada, ¿es acaso que me veo como una bruja mala?- yo sabía a la perfección que no parecía una bruja como la de los cuentos de hadas, yo tenía la piel blanca, mi cabello largo y negro, además mi cuerpo era notablemente delgado, él podría sujetarme y me reduciría al instante.

-No, usted es muy hermosa- lo naturalmente, tan naturalmente que no pude evitar sonrojarme- permítame hacer esto- me levantó entre sus brazos y con sumo cuidado me llevó a mi casa.

Mi familia no estaba, así que le pedí llevarme a mi habitación.

-No me digas más “señorita”, pareciera que lo hicieras para hacerme sentir mal- le dije en un tono muy serio.

-¿Y entonces cómo le digo?- en su cara se esbozaba una hermosa sonrisa.

-Shizuren, ese es mi nombre, a ti tampoco puedo decirte “tú”, ¿cómo te llamas chico valiente?- no pude evitar ser sarcástica.

-Shizuren… nunca he escuchado un nombre así- se detuvo a pensar un rato- Mi nombre es Kai, y la valiente eres tú Shizuren, dejaste entrar a un desconocido a tu hogar-
-No creo que seas malo, si lo fueras esta casa no te permitido el acceso- me acerqué a Kai- eres bueno por donde se te mire-

-¿Segura?... pues soy muy malo, porque hace mucho que te miro a escondidas… me gustas mucho Shizuren- se quedó callado esperando a ver mi reacción.

-No sé qué decirte…-

-En una semana más podrás caminar sin problemas, hasta aquel día yo te esperaré, y ahí empezaremos algo, anda al mismo lugar en que te encontré, ¿vale?-

-No hago promesas ni juramentos, no esperes nada se mí- repuse enojada por esa maldita seguridad.

-Ya veo- se levantó y se alejo para irse- Te espero mi “princesa Shizuren”-


Siguen más capitulos, dependiendo de que si les gusta la continuo!!!

 

Re: Hija de la lluvia

Gracias a todas!!
en la tarde subiré lo que falta, y Yuni
después necesito de tu sabio consejo para terminarla
tengo un predicamento horrible!!
adiosin

 

Re: Hija de la lluvia

Pues hace mucho que olvidé poner continuación!!! si no fuera por mi secretaria del mal lo olvidaría....



Día tras día era inevitable pensar en Kai, él era muy guapo, su cabello negro y un cuerpo que pese a ser delgado, al cogerme en sus brazos se notaba la gran fuerza que tenía… a su aspecto físico, se le agregaba su personalidad tan franca, tan pura; me estaba atrapando en su alma.

La semana se cumplió y yo fui al lugar dicho por Kai, él estaba ahí esperándome, con una gran sonrisa.

-Eres testarudo, ¿qué habrías hecho si yo no hubiese venido?-

-No pensé en esa posibilidad, pensé en la posibilidad de hacer esto si venías- se acerco mucho, en cosa de segundos tuve su cara frente a la mía-

-Detente, ¿piensas en faltarme el respeto?- me estaba asustando, si él seguía acercándose yo no podría parar lo que vendría después

Cerré mis ojos abruptamente, y sentí su risa que me seducía. Algo puso en mi cabello, y cuando abrí mis ojos, y toqué mi cabello había una rosa.

-¿Darle una flor a una dama es una falta de respeto?, Shizuren en tu familia parecen ser muy estrictos-

-¿Una flor?, ¿sólo eso?-

-¿Esperabas algo más?- acariciaba mi cabello suavemente mientras hablaba.

En mi piel blanca, era más evidente el rubor natural que Kai provocaba… Kai parecía notar lo que causaba en mi, pero yo en cambio, no tenía ni la más remota idea de qué era lo que yo le provocaba, sólo sabía lo que él me había dicho; que hace mucho que me veía, sin embargo ¿eso es algo en lo cual confiar?

Pasó un mes desde que yo y Kai nos conocimos, y yo me había dado cuenta que lo amaba, mis poderes no estaban estables, aunque era primavera la lluvia no cesaba. Mis padres lo notaron y decidieron hablar conmigo.
-Hija, ¿qué te pasa?-

Yo no podía decirles la razón de mi desequilibrio mágico, mis padres querían casarme con algún brujo de nuestro nivel, y responderles con la verdad, sería un suicidio familiar.

-¿Por qué?- disimulé lo mejor que pude.

-Tus poderes están desequilibrados- suspiro mi padre- eres una bruja, ya lo debiste haber notado-

-¿Desequilibrados?, padre sólo por unas cuantas lluvias, no puedes atribuírmelas sólo a mí, recuerda que la madre lluvia tiene todo el derecho de hacer llover cuando así lo estime, no puedo ser siempre yo quien la conjure-

-Querido, Shizuren tiene razón- mamá intenta siempre calmar a papá- ella es una gran bruja, y te aseguro que lo tiene bajo control, no por nada es nuestra hija-

-¿Ves papá?, mamá me conoce más que tú-

-Ya, ya. Dejemos esto como que la madre lluvia es la responsable- gruño- eso sí, quiero que practiques tus conjuros, debes tener un nivel mejor-

-Lo haré- asentí- ahora si me permites voy a pasear al campo-

-Ve Hija, y diviértete- mamá me daba ánimos.

En el lugar de siempre estaba Kai, y aunque le pedía a mi cuerpo que no corriera, lo hacía igual, sólo con tener a Kai mi mundo se iluminaba.

-¡Kai!- salté a sus brazos.

-Shizuren, cada día estas más cariñosa-

-¿Te molesta?-

-No, para nada. Me gusta-

-Quiero hacer algo…- mi voz se entrecortaba- desde el día en que te conocí-

-¿Si? Y que sería-

-Esto- me incliné lo más que pude y lo besé, tenía miedo que me rechazara, pero Kai me correspondió el beso

-Shizuren… quiero decirte algo, que quizás te moleste-

-¿Qué cosa?- empecé a tener miedo de que se hubiese ofendido por mi beso y que se fuera.

-Que te amo más que a nada en este mundo-

Sentí un gran alivio, a tal punto de casi desvanecerme en sus brazos.

-Tú… ¿me amas?- preguntó con el mismo miedo que yo sentía.

-Yo…- las lagrimas que desde hace pocos minutos contenía comenzaron a caer

-¿No me amas?-

-Te amo más que a mi propia vida-

Ambos nos amábamos, y sólo nos quedaba ser felices.
Quise conocer un poco más acerca de Kai, así que me dispuse a ir a su pueblo. Era una forma de que nuestra relación fuese más formal.
Caminé por aquellas callecitas con miles de olores muy agradables, niños jugando, parecía como un sueño.
“Quiero tener unos hijos tan hermosos como estos niños” dije.
Mi alegría fue gigante, al ver a Kai. Lo seguí, para darle una sorpresa. Él se abrazó con una chica. “debe ser su hermana”, pensé, sin embargo Kai la besó efusivamente.

Mi corazón se detuvo, y la lluvia cayó fuertemente… mis actos que siguieron fueron por inercia. Caminé hasta el lugar donde nos encontrábamos, y me arrodillé.
“¡No me ama, me traicionó!” grite, la lluvia me empapaba toda, y yo en medio de mi dolor no sentía nada, absolutamente nada.

El cansancio me hizo dormir en ese sitio, sin importar la lluvia u otros peligros. En el fondo de mi, yo lo esperaba.

-¡Shizuren!, amor mió, ¿qué te sucedió?- La voz de Kai me rompía los oídos.

-Traidor… no me amaste nunca- apenas si conseguía hablar.

-No es cierto, ¿quién te dijo semejante mentira?-

-¡Deja de mentir! ¡Yo te vi! Tienes a otra- rompí a llorar y de nuevo la lluvia apareció.

-La viste…- Kai se puso pálido- te lo quería decir, pero no pude, si lo hacía te hubiese alejado de mí- me abrazó fuertemente- ¡perdóname!-

-¡No me amas!, suéltame- lo alejaba inútilmente

-Es que yo le hice una promesa a ella, la amo, pero a ti te amo más- Kai lloraba junto conmigo.

-Promesa… dime que le prometiste-

-Ella es muy débil, necesitaba de mí, así que le juré que yo estaría toda mi vida con ella-

-No puede ser- el viento soplaba cada vez con más fuerza- ¡me ilusionaste desgraciado!-
-Shizuren, si tú hubieses aparecido antes que ella yo me quedaría contigo, te amaría sólo a ti, pero no puedo romper una promesa, eso sería peor-

Mi alma parecía abandonarme, caminé lentamente, y me alejé de él.

-Por favor, ¡espérame!- aunque yo lo esperara Kai siempre estará atado a esa chica- por lo menos déjame explicarte las cosas-

-Vete- pude al fin hablar.

-No. ¡Escúchame!-

-¡¡Vete!!- la rabia estaba invadiéndome, logrando que la lluvia lanzara un viento fuerte, tirando al piso a Kai.

Si bien yo no me sentía en un plano terrenal, paso a paso dejaba que la lluvia fuera me único consuelo, mi tristeza se fundía con el temporal.
Kai nunca estaría conmigo, yo creía en su mirada tan pura, tan serena.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Espero que les guste!!! gracias a los que la han leído!!!