One-shot [Frostpunk] Los Ultimos Días de Egipto y Rusia

Primero que nada, decir que este es mi primer fanfic que he hecho, así que tampoco esperen la gran cosa, ya lo tengo publicado en wattpad (https://www.wattpad.com/story/310607576) pero pense en difundirlo en otros sitios para que alcance mas personas.

Disfruten.

Los Ultimos Días de Egipto y Rusia

12 de Junio de 1886, Jedivato de Egipto

"Querido Vladimir.

Las investigaciones van bien, ¡La cultura egipcia realmente es interesante!

¿Cómo ha estado tu familia? ¿Sasha sigue igual?

¿Cómo esta el clima por allá? Aquí solía hacer calor hace un año, pero hace frio ahora. Es muy extraño. Tengo entendido que en el Imperio Ruso, hasta el verano es helado, jajaja.

En fin, con mucho cariño, se despide,

James Wilson, Equipo de Arqueología del Imperio Británico, Comisión de Egiptología."

"¿Eso es todo, señor Wilson?" dijo el trabajador egipcio del telégrafo.

"Efectivamente," dijo James, "Espero la respuesta dentro de unos días."

Mientras James salía de la estación de telégrafo, viendo los pájaros volar, aprecio la ciudad del Cairo por un momento, era preciosa. James agarro un libro de estudios del Antiguo Egipto, y mientras lo abria, noto que algo blanco cayo encima de las paginas.

"¿Que diablos?" dijo mientras miraba al cielo... ¿Nieve?

13 de Junio de 1886, Imperio Ruso

"Querido James,

Me alegra volver a escuchar de ti.

Mi familia esta bien. Sasha ya tiene 9 años, ¿Puedes creerlo? ¡Nueve! Los cumplio ayer.

Lo de que es frio en Rusia es cierto en Siberia, no tanto en Moscú, pero efectivamente, hay algo raro con el clima, la temperatura esta helada, de -10°C, o 14°F, no sé que medida usan allá.

Es verano, esto es muy extraño. Pero bueno.

Espero que la estés pasando excelente en Egipto.

Se despide atentamente, Vladimir Petrov."

Vladimir miraba al cielo, la gente parecía preocupada. Esas temperaturas eran bajas incluso para el invierno, aunque no tanto. La nieve seguía cayendo.

"Ultima hora, ultima hora," decía un joven ruso, "Nieve en Egipto, otros países africanos, Italia, España, Portugal e Inglaterra."

"Algo muy raro esta sucediendo," comento Vladimir, antes de darse cuenta de que 'Egipto' fue nombrado, entonces decidió comprar un periódico.

"Son 4 rublos," dijo el joven.

"Aquí tiene," dijo Vladimir.

Vladimir empezó a leer. Era verano, Egipto, como un país caluroso, no podía tener nieve en esta época. Pero... la temperatura era de diez bajo cero en Moscú, en verano. Algo demasiado extraño estaba ocurriendo.

El Tsar ha dicho que hay que mantener la calma decía el periódico, Las temperaturas son anormales, pero no es nada más de lo que estamos acostumbrados durante el invierno regular. Probablemente se regulara para el próximo año.

Sobre todo, hay que ser optimistas, nuestro Imperio no caerá por unas temperaturas.

Es muy probable que la ceniza volcánica por el estallido del Krakatoa haya sido responsable.

La nieve se ha visto ya en varias partes del mundo, con Egipto, Inglaterra, España e Italia siendo los protagonistas del día de ayer segun nos informaron los telegramas.

En otras noticias, Chile sigue en crisis por culpa del meteorito que cayo la semana pasada en la Patagonia Chilena.

Vladimir dejo de leer.

Jedivato de Egipto

James estaba en casa, tratando de ponerse mas ropas cómodas, cuando alguien toco a su puerta.

"Telegrama para James Wilson," dijo el hombre egipcio.

James abrió la puerta y recibió la carta, "Muchas gracias caballero, ¿Extraño clima, eh?"

"Efectivamente, que Alah tenga piedad sobre nosotros," el hombre egipcio se dio cuenta, "O Jesucristo, en su caso."

"Gracias por considerarme," comento James, "No tenia porque, ustedes tienen la cultura dominante aquí."

"Bueno, usted es nuestro invitado. En fin, debería ir a repartir mas telegramas, ¡Nos vemos señor Wilson!"

James empezó a leer, ¿Diez bajo cero? Esto era ridículo.

James empezó a leer el periódico, la temperatura había alcanzado un grado bajo cero en el Cairo, y la nieve se estaba viendo ya en muchas otras partes del mundo.

"¿Que mierda esta pasando?" se pregunto James, con algo de terror en su voz.

14 de Junio de 1886, Imperio Ruso

"Ultima hora, ultima hora," decía una joven rusa, "Temperatura desciende a los quince grados bajo cero en Moscú, en Siberia, estamos viendo una temperatura de cuarenta bajo cero."

Vladimir se acerco a la joven.

"¿Alguna idea de las temperaturas en Egipto?"

"Lo lamento, señor, solo vendo los periódicos, no sé las temperaturas de todo el mundo."

"Es comprensible, toma tres rublos, comprate algo caliente, un café o algo."

"Gracias, señor."

Vladimir seguía caminando por las nevadas calles de Moscú, llegando al sitio de la reunión."

Una mujer lo recibió y dijo: "¡Vladimir! Cuanto tiempo, pasa."

Varios hombres y mujeres estaban en una mesa.

"Que clima," comento un hombre con bigote, "¿Porque estará así en verano?"

"Sea lo que sea," dijo una mujer, "Es una oportunidad para la lucha de clases, se debilitara en varias partes del planeta la maquina industrial, y entonces los proletarios se podrán tomar el poder."

"¿Ya recibimos la carta del alemán?"

"¿Friendrich Engels? Si, aun esta triste por la muerte de su amigo Karl Marx hace tres años, pero nos dio algo de teoría que podemos estudiar sobre como el mundo se podría beneficiar de una rebelión aquí en Rusia, también se quejo del frio, parece que también hay nieve allá en Alemania."

"Comprendo."

Tras una larga discusión filosófica, Vladimir se iba yendo, cuando una de las filosofas se le acerco.

"¿No vas a quedarte a tomar un café? ¿Con el frio que hace?"

"Paso, tengo café y té en casa, gracias Katia."

Vladimir llego a su casa tras una pequeña caminata que se torno eterna gracias a la interminable nieve.

Un policía comento "Dicen que la temperatura ya llego a los veinte bajo cero en Alemania, y que pronto pasara lo mismo aquí."

Vladimir ignoro la conversación del policía, y llego a su casa.

Nikita recibio a Vladimir.

"Amor, ¿Como te fue?" dijo mientras Vladimir temblaba, "Bien, pero hace frio."

"¿Quieres algo de chocolate caliente? Hice algo para los niños."

"Si, por favor, y prepara un baño caliente si fueras tan amable."

"Por supuesto, amor."

Vladimir se acurruco en el sofá, mientras Sasha llegaba.

"Papá, mira, te llego una carta."

Vladimir empezó a leer.

"Iré a la estación de telégrafo en un rato," dijo Vladimir.

"¿Con este frio?" pregunto Nikita

Vladimir le paso la carta a Nikita.

"Querido Vladimir.

Háblame lo antes posible, las temperaturas en Egipto han alcanzado los cinco grados bajo cero, temo que algo extrañísimo esta pasando.

Se cancelo el trabajo de investigación en Egipto hasta nuevo aviso, las pirámides están cubiertas de nieve.

La gente tiene miedo.

Quise pedir un barco de vuelta a Londres, pero me informaron que las tormentas hacen que el próximo barco llegue dentro de un mes.

Me entere de que la temperatura en Estados Unidos también es baja, promedio de treinta bajo cero.

No sé que esta pasando, pero tengo mucho miedo, por favor háblame lo antes posible Vladimir, como cuando íbamos a Cambridge."

"Entiendo," dijo Nikita, preocupada.

15 de Junio de 1886, Jedivato de Egipto

James iba paseando por las calles nevadas de El Cairo, cuando un oficial de policía anuncio mediante un megáfono,

"Atención, la temperatura esta por bajar por veinte grados, todos a sus hogares."

La gente empezó a correr en pánico. Los edificios y casas de El Cairo estaban diseñados para un clima caluroso, dejando entrar el máximo aire posible, la gente no iba a resistir mucho más si las temperaturas seguían bajando.

James rápidamente corrió hacia el oficial

"¡Necesitamos ir a edificios con paredes solidas, que no permitan que entre el aire! Veinticinco grados bajo cero es demasiado helado."

"Por favor caballero calmese,"

"Soy arqueólogo por el amor de Dios, vengo de Inglaterra, nuestros edificios caerían ante esa temperatura, y esos si están diseñados para resistir el frio, estas casas están hechas para el calor, no para el frio, todos vamos a morir si no vamos a un lugar cálido."

"El hombre ingles tiene razón," grito una egipcia, "El palacio del Cairo probablemente es más seguro."

"Señor, no puedo..." decia el policía antes de que llegaran más policías.

"Kefren, nos informan que la temperatura en Alejandria llego a los cincuenta bajo cero, y que se viene la misma temperatura aqui, ¿Que mierda hacemos?"

"Por el amor de Alah," dijo el oficial Kefren, "Hagámosle caso a esta dama y al caballero ingles, vamos al palacio."

James termino de procesar lo que acababa de escuchar.

"Disculpa... ¿Cincuenta bajo cero?"

"Es en todo el mundo, nos acaban de informar que Inglaterra, Francia, Alemania e Italia ordenaron una evacuación de las principales ciudades, la temperatura en Rusia pronto sera de casi cien bajo cero," dijo el oficial, casi entrando en un ataque de panico.

"Tengo que hacer algo."

James corrió lo más que pudo a la oficina del telégrafo mientras que policías corrían gritando, "¡Huyan al palacio ahora mismo!" por toda la ciudad.

Los trabajadores ya se estaban retirando cuando James llego.

"Estamos cerrando, no sé si ha dado cuenta, pero la mayor helada de la historia de la humanidad se avecina," dijo el trabajador.

"Solo tengo que enviar un mensaje."

"¿Donde?"

"Moscú."

"Imposible, nadie lo recibira, la temperatura esta alcanzando los setenta bajo cero allá."

"¡No me importa! Solo envía esto... 'Huyan al Kremlin. No miren atras. Te amo.' Envíenselo a Vladimir Petrov."

"Esta bien."

El mensaje fue enviado y ambos hombres corrieron todo lo que pudieron hacia el palacio del Cairo.

"¡La temperatura ya bajo a veinticinco bajo cero, pero seguirá bajando en las próximas horas!" grito un oficial de policía egipcio.

Imperio Ruso

Todos estaban tratando de llegar al palacio del Kremlin, Vladimir junto a su familia en medio de la tormenta abismal.

Era el frio mas intenso que había sentido en su vida, setenta grados bajo cero.

Varias personas se desmayaban en el camino.

"¡Vamos Nikita! ¡Vamos Sasha!" gritaba Vladimir.

"Atención a todos los ciudadanos de Moscú, el edificio mas cálido es el Kremlin, deben dirigirse allí ahora mismo, la temperatura esta a punto de bajar a ochenta bajo cero."

"¡No, no, no!" gritaba Vladimir, pero ya casi estaban ahí.

"Frio... hace tanto... frio," decía una de las colegas filosofas de Vladimir, mientras se desmayaba

Vladimir consiguió llegar al Kremlin, los guardias no hacían ninguna pregunta, solo dejaban pasar.

"Refúgiense en las habitaciones, hacínenlas, entre mas gente en espacios pequeños, mejor," dijo el guardia.

"El Kremlin se cierra, la temperatura esta llegando a los ochenta bajo cero."

Miles de personas golpeaban las puertas del Kremlin demandando entrar, pero entonces... silencio...

"Nunca le pude decir a James..."

"¿Que lo amabas?" pregunto Nikita.

"Amor, por favor..."

"No te preocupes, lo entiendo... el ya lo sabia."

"Disculpe, ¿Alguna idea de la temperatura en Egipto?" pregunto Vladimir a un guardia.

"Según lo ultimo que escuche, Alejandria esta a setenta bajo cero, y pronto el Cairo estará a sesenta bajo cero," dijo el guardia, "Consideraría a la gente del Cairo como afortunada, dicen que Sudamérica esta a casi noventa bajo cero, y pronto será el caso aquí también."

"¿Que esta diciendo?"

"Las estaciones meteorológicas fueron abandonadas hace pocas horas, pero lo ultimo que captaron es que se avecina una baja masiva de temperatura en Rusia. No sé cuanto más podremos aguantar aquí."

Jedivato de Egipto

"¡Sellen las ventanas! ¡Ignoren las leyes islámicas! ¡Junten hombres y mujeres! Entre más cantidad de personas en un espacio pequeño, mejor," gritaban las autoridades egipcias

"No puedo creer que voy a morir así," dijo James, "En un país que ni siquiera es el mio propio, congelado en un país cálido."

"Atención," dijo uno de los guardias, "La temperatura esta por bajar a los sesenta grados bajo cero, por favor... empiecen a rezar."

Todos empezaron a mirar hacia la Meca y a arrodillarse, James también lo hizo pero sin mirar hacia la Meca.

Imperio Ruso

"Los termómetros siguen bajando," se quejo un oficial ruso, "Estamos por llegar a los noventa por debajo."

"¿Que hacemos?" pregunto Vladimir.

"Rezar," dijo la joven que vendía periódicos.

"Parece lo adecuado," dijo el oficial, "Si nos informaron correctamente, en una hora la temperatura será de ciento veinte bajo cero."

La gente entro en pánico, intentando quemar más libros y más estatuas para mantener el calor. Vladimir abrazo a Nikita y a Sasha.

"Los quiero mucho," dijo Vladimir.

Jedivato de Egipto

Tras finalizar el rezo, la gente empezo a acurrucarse, empezó a quemar cosas para mantener el calor, y James solo empezó a cantar en voz baja.

"Jingle Bells, Jingle Bells, Jingle all the way... oh what fun it is to ride on a one horse slay, ¡Hey!"

Entonces, tanto James como Vladimir pensaron, en medio de todo ese caos, "Ojala que el este bien."

El frio pronto llego, y toda protesta acabo.


EL CAIRO
1886
0 PERSONAS
-60°C / -76°F

MOSCÚ
1886
0 PERSONAS
-120°C / -184°F