"Fragmento de diario de un corazón roto"

Tema en 'Fanfics Abandonados de Naruto' iniciado por MelodiaVal, 26 Agosto 2009.

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    MelodiaVal

    MelodiaVal Noctambula

    Tauro
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    "Fragmento de diario de un corazón roto"
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    "Fragmento de diario de un corazón roto"

    Hola pues... hoy andaba un poco triste por algo que paso hace poco, menos de dos meses así que se me ocurrió escribir este One-shot, no tengo mucho que decir pero esto va dedicado a mi tia (no era mi tia en realidad pero la keria incluso mas que a mi verdadera tia) que en paz descanse y que espero que Dios se apiade de ella, de sus hijas que quedaron en este mundo y que sepa que hacer con ella 2 que se quedaron el idiota del padre que era papa de otras chicas y que su amante amenazo a mi tia que la iba a matar y provoco que ella se prenda fuego!!!, perdon, me saco de quisio, estoy rabiosa, bue, dejen su opinion y sayo
    Ruriko-sama

    “Fragmento de diario de un corazón roto”



    Querido diario:
    Disculpa si hace mucho que no escribo, hoy es 13/08, hace exactamente un mes que ocurro la tragedia más grande y notoria en toda Konoha: la muerte de mí amado Naruto. A nadie se le pasaría por la cabeza que todo esto comenzó paseando perros…
    Kiba-kun me encargo que paseara a Akamaru, yo lo lleve junto con otros perros que Tsunade me encargo en una misión (últimamente no ocurría nada interesante, así que debíamos hacer misiones de nivel D). Caminaba distraída pensando en el chico rubio de ojos azules que tanto me hace soñar, pensaba y pensaba hasta que Akamaru me ladró, desvié la mirada y choque con alguien. Me disculpé rápidamente y esa persona me tendió una mano para ayudarme a levantarme. Al pararme, me encontré cara a cara con Naruto. Me puse nerviosa y creería yo que un poco roja, pero extraña e involuntariamente hable y le pedí si por favor me acompañaba a llevar a los perros a pasear un rato. El titubeó un poco y se puso un poco rojo, no le di importancia ya que pensé que seria por el accidente, al final, dijo que si. Fuimos caminando, yo iba callada, un poco sonrojada y escuchando atentamente mil cosas que me comentaba Naruto sobre su viaje con Jiraiya, ese sannin pervertido que se encargo de entrenarlo, seguimos caminando y luego nos metimos en bosque. Comenzó a oscurecer y debíamos regresar, ya se había hecho muy tarde y no teníamos idea de que hora era, probablemente Tsunade ya habría mandado a alguien a buscarnos y Kiba-kun estaría preocupado por Akamaru, así que decidimos retomar nuestro curso hacia Konoha. Íbamos caminando y de repente Naruto se detiene, yo le pregunto que sucede y le sacudo suavemente un poco el hombro, hasta que reacciona y grita “¡abajo!” empujándome a un costado y recibiendo un kunai en su hombro. Yo me aterro, quiero ir a ayudarlo pero una voz hace que me detenga. Esa voz la reconocería donde fuera, era Pain, el líder de la organización criminal Akatsuki. Lo recordaba perfectamente ya que una vez los vi en el bosque con un shinobi de la lluvia muerto y me amenazaron con matarme si llegaba a decir alo de ese desafortunado encuentro. A duras penas oí como decían algo sobre que ya no estaban tras del kyuubi y que ahora podían matar a los zorros por los problemas que les habían causado sin problemas, yo no entendí absolutamente nada pero lo siguiente que pude ver fue como un ninja que parecía tener una gran planta en la cabeza, le clavaba un kunai en la pierna, comenzaron a atacarlo con todo lo que tenían, Naruto se trataba de defender pero no podia contra tantos, así que sin resistir mas esa horrible imagen, me levante y fui corriendo hacia ellos mientras les lanzaba una shuriken y hería a uno de cabello blanco y una extraña hoz con un kunai, de repente, uno de ellos, uno de cabello rubio, me tomó por detrás mientras otro que parecía un espantoso pez gigante, me colocó su espada en el cuello, creo que era el monstruo de la aldea oculta en la neblina. Un joven poseedor del sharingan comenzó a hablarme, pero yo no prestaba atención, solo miraba lo herido que se encontraba Naruto, hasta que cuando se estaba despidiendo y al parecer me iban a matar, un kunai le da en el brazo a el joven rubio de atrás mió y me suelta, eran Sakura y Sasuke, su novio, quien en cierto momento se fue con Orochimaru y fue considerado un traidor, pero que ahora enmendó sus errores y regreso con nosotros. Yo fui corriendo en dirección a Naruto junto con Sakura y lo comenzamos a revisar, hasta que un Akatsuki toma del brazo a Sakura-chan y la arroja a un costado violentamente quebrándoselo, se dirigió hacia mi y yo cerré los ojos por temor, pero no sentí nada, al abrir los ojos unas gotas tibias y rojas cayeron sobre mi rostro, era Naruto quien se coloco encima mió recibiendo un kunai en el corazón que debía ser mió, con la poca fuerza que le quedaba, Naruto se las arreglo para asesina a ese tipo con una shuriken, para luego, caer rendido al suelo. Me acerque a el llorando desesperadamente y gritando su nombre, le toque un poco la herida, me di cuenta de que era algo de lo que no podría escapar. Hundí mi rostro en mis manos y comencé a llorar, cuando una mano alza mi rostro y me seca una lágrima, era Naruto quien me decia que no llorara, ya que me veía mas bonita sonriendo, yo no entendía por que rayos decia esas cosas, solo rogaba porque no muriera y el me dijo que no tenia nada en este mundo, solo una cosa que quería hacer hace mucho, tomo mi rostro entre mis manos y me dijo “te amo”. Aun seguia llorando pero ya ni sabía si era de pena o felicidad; me daba lo mismo. Lo abrase y acuné su cabeza en mi regazo, me quite la campera y despedazándola toda comencé a impar sus heridas desesperadamente, pero su mano, me detuvo, me tomo del rostro y me beso, yo aun con lagrimas, cerré los ojos y le correspondí, seguido de eso, fue el quien cerró los ojos, para no volverlos a abrir. Hoy a la mañana, fuimos con Sakura al cementerio a visitar a Naruto y Sasuke, ya que el también había muerto en un intento de proteger a Sakura, dejamos una rosa cada una en cada tumba, las de Sakura fueron rojas y las mías, negras. Sakura quedo con una lesión permanece en el brazo izquierdo y el mal recuerdo de ese día gris, y yo, con nada mas que el triste recuerdo de la sangre de Naruto escurriendo por mis dedos, no me he vuelto a lavar la cara ya siento su sangre, el sabor amargo de mis lagrimas que se filtraban por la comisura de mis labios sin que yo pudiera evitarlo, y el dulce recuerdo de nuestro primer y ultimo beso, hasta hoy en día me arden los labios por aquella experiencia. Tengo la esperanza de que algún día pueda volver a estar con el y de que el no se olvide de mi, puesto que por mi parte, jamás olvidare al ninja numero uno en sorprender a la gente, el ninja cabeza hueca que robó mi corazón, mi muy amado, Naruto.
     
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