Harry observaba el álbum que le regaló Hagrid antes de irse en el tren de regreso a casa de sus tíos, las fotos se movían y podía ver sus sonrisas, su felicidad, una felicidad que él nunca podría tener con ellos debido a que fueron asesinados. También tenía fotos de Hermione y Ron, le sonreían y le hacían sonreír a este. Los echaba mucho de menos a todos, pero al menos, el ver sus fotos siempre le alegraba el día.
Siempre me ha dado cosita éste tema. Harry pasó muchos años en soledad, y él está dispuesto a dar su vida por sus amigos, porque después de saber lo que es tener a alguien que se preocupe por ti, ¿cómo lo dejas ir?
Esto es demasiado adorable y triste al mismo tiempo. Siempre me dió curiosidad como sobrellevaba esto Harry teniendo en cuenta a su familia, a sus tíos que seguro quemaron las fotos que les quedaban de los Potter -e incluso nunca tuvieron alguna-. Como vivía sin saber la verdadera historia de sus padres, sin conocerlos como algo más que un simple nombre dicho con odio. Sin duda esas fotos deben haber sido algo a lo que aferrarse cuando se sintiera perdido, algo a lo que hablarle cuando el mundo pareciera caerse encima suyo y con quién compartir momentos importantes en su vida. Ahora tenía algo con lo que recordarlos en todo momento. Bello~