Firmamento de Sangre (Fic Gore Apto para todos) Frigida noche de tenues velos purpuras; noche de frios vientos arremolinados, copas quebradas de freznos y polvadera cristalina que levantaba del suelo. Noche de cuerpos sobre campos santos, tirados por sus vidas apesar de ser simples cadaveres a medio devorar por los gusanos que temblenques y con frio se escabullian entre las escapulas y vertebras de los paladines desvalientes. Lejano y perdido, inmiscuido entre nubarrones espesos de una niebla con holor a muerte estaba un castillo de edad media, un palacio de robles entradas y rocas enmoesidas al final de un sendero de pinos corrompidos por la diosa muerte y sus engendros diablos que danzaban entre cuerpo y cuerpo terminando de vaciarles el alma. Mas cerca de esa estructura medieval un grito que rasgaba los cielos, tan fuerte y profundo, lleno de clemencia y sufrimiento se escuchaba; venia de mas dentro del recinto, vania del suelo. Parecia como si el mismisimo campo santo estubiera gritando por perdon y clemencia, era un grito desoyador. 'Padre mio...que te he hecho!....' Retumbaba en las afueras y golpeaba contra la espesura del humo en niebla. Paraba de ratos y lentamente se transformaba en un ronco gemido femenino, uno mas fuerte que el otro. Nuevamente destazando el cielo y agrietando la tierra. Tierra donde los mismos sucubos y nefertis corrian con su madre muerte del miedo que producia. 'ahhhh!....PADRE!......' Retumbo nuevamente el cielo seguido de un quejumbroso zumbido a panal de avejas. Era una cancion de amor para los agudos sentidos de la diosa muerte que sosteniendo una lanza lamia prohibidamente de la punta endebida en sangre como si estubiera extaseandose por tales sonidos melodicos. '....padre santo....he de profanarte?...es mi precio por degradar tu nombre....?' Esa voz femenina paraba sus quejidos, ahora resonando mas tranquila pero agotada. Dejando que el ojo espectante de la diosa de la muerte entrase al recinto para deleitarse con la escena que terminaba de aconteser, tan solo esperando la ultima estocada para robarse ese cuerpo joven y placenteramente suculento. Entro lentamente y paso por los pasillos de farolas de madera que alumbraban con tenues fogatas de vida centella, tan estrechos como en picada seguia bajando a lo que parecia una tumba de reyes, una sala de represion, una prision tan asquerosa como inmunda. Una puerta separaba el ojo de la muerte de la escena explisita que rocorria pasillos y rompia cielos. Estaba excitada la mismisima muerte, olfateaba a la distancia un suculento aroma a muerte, a carne, a perdicion. Asi por eso entro de lleno haciendo aparicion frente a los que tenian acciones retumbantes sobre el firmamento. En ese instante un gozo intimo recorrio en escozor el cuerpo material de la diosa al ver la escena. A lo lejos un hombre de ropas reales a medio poner, desnudo en su pelvis parecia que llevaba a cabo el placer carnal deseado, al otro, entre grilletes; estaba la razon de su excitacion. Era una rubia muchacha de veinti tantos años, estaba embarazada, ahora reia mezquina como su señor le maltrataba por profanar palabras. El ojo asi la miraba, estaba desmembrada, colgando su cuerpo de grilletes bajo un baño de su propia sangre, el cuerpo desnudo de alguien que daria a luz estaba. Lo raro era que seguia con vida, tal parece que suerte tenia...suerte?...se reia la muerte, era el sufrimiento en vida, el sentir como cada parte del cuerpo de la joven era desprendido para quedar a su merced, hasta el momento de dar a luz ese fruto de lo prohibido de otro fulano, tan solo para que ambos terminaran en las garras de la misma muerte. Era simplemente un espectaculo de sentarse a regocijar y esperar. El hombre miro el ojo y despota blabuceo. 'Asi que la misma muerte me sigue por mis actos?...acaso tan divertido es que descuartice a mi mujer por haberme traicionado con otro?...' Le dijo dandose la vuelta para esta a la muerte. Era verdad..al final el hombre la habia violado antes de de mancillarla, que acto mas repugnante se dijo para si mismo la muerte, no pensaba en la putrida mente del ser humano. Su regocijo por enfado habia modificado... Su regocijo por enfado habia modificado.Esa mirada ciclope sobre ambos lenta, pausada y quejumbrante con lentos destajos de rojo lujubre empezaba a modificarce en un agata de iris felino, como el ojo de Helion, periplo de la ruina, de un color rojizo oscuro y flamas naranjas adornando el contorno del iris ahora se postraba fiera ante ambos seres. - Ignorancia humana, pestilente y radiente de putrefaccion...les hemos dado un lugar donde habitar y morir en nuestras manos con placer y lujuria, podeis llevar el mal pero nunca la infima luz de la felacion a un ser cercano a la muerte, solo ideas utopicas en un mundo retorcido adornan vuestras mentes...podras ver lo que para tales personajes el infierno mas profundo les regala...- Anuncio la diosa muerte desvaneciendo su cuerpo fuera del castillo asi mismo con sus neferti y diablos, parecia haber cambiado su estado apasivo placentro pues materializaba cuerpo dentro de la camara mortuoria. Era una doncella de negras vestiduras y velos violacios, ojos tan aperlados como incandecentes, cabellera lacia la cual tocaba su cintura color negra caucacica. De grilletes en sus muñecas y piernas, una lanza en mano que transformaba en una lujuriosa Hoz de cristalino filo. El noble a medio vestir le miraba lloroso de rostro palido, tastabillaba caminando hacia atras acercandose al cuerpo mutilado de su sirvienta, la cual ironica esbozaba una peculiar sonrisa como invitando a la diosa de los muertos a tomar lugar y cartas en la noche de sangre. - Vienes por nosotros?...- Le pregunto esta a medio suspirar ya sin sentido alguno de sus miembros destazados, solamente podia ladear su cabeza a lados para mirarse como estaba, sus brazos cortados a los lados derramando esa sangre caliente de su cuerpo, sus piernas del mismo modo y macabramente sus pechos del mismo modo terminados. Solo esperaba la llamada de la diosa muerte, pues sabia que no habia obrado mal en este mundo, y solo se esperaba por esta. Se le quedo mirando alegre como invitandole aun mas, sus piernas trataba de mover sin sintido solamente sacudiendo ese vastago que quedaba de retazo humano zafandose de grilletes para caer sobre el mar de sangre. La diosa muerte miro divertida y sonrio cuan ironica para la mujer que tendida en su mar postraba una mezquina mueca de salvacion. Tanto los diablillos como los neferti se pusieron por detras de la dama muerte y le tomaron del vestido como si fuera una dama por casarce, tan solo para empezar a caminar a lentos pasos hacia los presentes levantando su guadaña de plata. - Hahaha...humanos, controvertidos, inescrupulosos, pedantes y sujetos de putrefaccion....ahora me deleitare con sus entrañas....- Anuncio la diosa muerte como periplo a lo que pasaria. .....Un rotundo silencio tras palabras empezo a circundar la sala mortuoria en donde los tres protagonistas empezaban a fundirse con el ambiente creado, suaves brisas de las respiraciones de los demonios se sentia como lenguas del mismisimo infierno que azoraban las almas de los humanos que se esperaban por su juicio divino a manos de la delicada e irresistible deidad de los difuntos. Solamente el ruido de las respiraciones de todos, sumado a un chipoteo de patas de insectos aracnidos que se dedicaban a comer de sus presas eran ambiente para la escena. Paso en ese tiempo cuan estaticos minutos, estaba congelada la imagen de cada uno de los actores, y solo se esperaba porque el reloj de la vida quebrantara en llanto infernal. - Sus cuerpos, almas y esencias...son mios...por ideocincracia del destino una eternidad en la fauces del infierno alimentando con sus entrañas a los cancerveros estaran....tan solo hasta que sus huesos magulldos y calcinados terminen de ser combustibles para los Ifrit desdichados....- Protesto la deidad rompiendo el silencio reinante con una voz calmada y dulce, una sonora melodia de sus labios frios de color ceniza que dejaba penetrar los oidos del unico ser con conciencia restante, puesto que la embarazada desmembrada pendia ahogandose en su propia sangre a causa del reflujo gastro intestinal que era acrecentado por la amputacion de sus miembros. -...hahaha....mira a quien lastimabas..que destino tan triste terminar asi con un hijo en su bientre....- Desvanecio en el aire apareciendo entre ambos sujetos. Su mirada infernal enfocaba cambiada sobre la desvaliente mujer la cual con la punta de la guadaña plata la ladeo quedando boca arriba, notando que aun podia respirar entrecortado. Giro suavemente su mirada para el noble que estaba detras y sonrio ironicamente mostrando sus colmillos que por primera ves se le conocian en la escena; un lustre sombrio le atendio su palida tez acrecento sonrisa con ambas manos ladeando la guadaña para dejarla con el filo sobre la piel de esta comenzando a atraera para ella misma el arma que comenzaba a abrir el bientre de la mujer. Un suave suspiro como perdiendo la vida empezaba a brotar de la dama amputada sintiendo el frio filo de navaja cual bisturi sobre la piel que escarbaba. La dama muerte sonriente y pudiente seguia moviendo hacia ella el arma al tiempo que olfateaba el dulce carmin de sangre que brotaba por el tajo que incrustado varios centimetros tajeaba piel y habria dejando que con pasmosa lentitud los organos vitales de ella empezaran a salir siendo espectaculo de gritos y holores. - Pero que es esto?.... - Dijo sorprendida deteniendo su movimiento casi al termino del corte que dejaba sobre el bientre de esta que ya derramaba sobre laguna de sangre sus viceras calientes mas un saco que voluptuoso estaba. - ....asi que tienes en tus viceras un fruto del placer consumado....- Le dijo para el cuerpo que tirado sobre sangre ya no respondia, un cuerpo de mirada cesgada y fria, que no daba respiracion alguna. Asi la diosa muerte suspiro holgazana y tomo su hoz con una mano golpeando el mango contra el suelo de piedra para limpiar las impuresas; se sacudio vibrante la guadaña bajo la mirada atonita del hombre que del temor no sentia su cuerpo, se mostraba rendido ante lo que esta hiciera. Por lo que la dama muerte no inmuto en tomar una vida tan putrida, solo alzo la mano suelta y chasqueo sus dedos para que sus subditos encargases de tal escoria Muerte has creado ahora muerte sentiras, todos los seres que por repudio has maltratado, ahora los sentiras en carne propia al ver como cada uno de ellos un trozo de tu cuerpo robara... - Se deleitaba la deidad de los muertos al entrecerrar sus orbes satanicas dejando que el cuerpo del noble sucumbiera ante la avanzada de los diablos y nefertis que trepaban por su cuerpo como alimanias. No le presto mucha atencion puesto que acostumbrada a los lamentos eternos de los difuntos al sentir como sus carnes rebanaban los esbirros de ella frente a sus ojos estaba, solamente una delicada sonrisa mezquina al escuchar los verbos de suplica y las frases entre cortadas del dolor esbozaba, ya persivia el holor dulce y atrapante de las entrañas del fulano que perecian siendo deboradas por las bocas de fuegos de los esbirros de satanas, sus viceras magulladas, destazadas y finamente caladas por dientes que habian probado carnes de todo tipo, perdiendo lentamente la vida del hombre bajo mas de media decena de trabajadores diabolicos que solo dejaban las ropas tiradas de este sobre el mar de desechos mutilados en sangre. Asi estubo la escena por varios minutos sin moverse la deidad. Lujuriosa y maquiavelica de orbes infierno cerradas, respiraba friamente el calor emanado por cuerpos tirados desangrados y mutilados; mientras una farola, una sola dentro de la lujubre camara mortuoria le daba la luz necesaria para convertirse en una parada de seduccion, extasis y prohibicion solo para ella y nadie mas. Una ves el cuerpo del hombre habia sido completamente deshecho y la mujer ya habia dado los ultimos suspiros de su garganta carqueja de sangre ahogada, de cuerpo mutilado y vientre abierto aireando sus viceras putridas que se recalentaban con el brio del piso y empezaban la lenta descomposicion. Atendio al feto de esta que todavia por arte y obra de vida seguia latente. Era extraño, un niño traido a la vida entre tanta muerte y depravacion, un retoño de no se sabe quien pero que ante tanta masacre y degradacion habia aun seguido en pie...seria que la encarnacion del mismo mal encerraba a ese niño...o tal ves niña?. - Eres algo especial...porque no has fallecido bajo mi manto de placer?...- Dijo la dama oscura bajando con su guadaña de plata hasta esa bolsa tumultosa de liquido aseptico desprendiendola para que el recien nacido saliera a la vista. Era una pequeña de palido aspecto como si fuera engendrada de un vampiro de alto rango. Ojos ceniza rasgados suavemente y un quejido digno de prestarle atencion. La damisela de la muerte golpeo la guadaña contra el suelo y la elevo rodeandola de un miton negro como si fuera un trofeo de guerra despues de un periplo sanguinolento. - Parece ser que el instinto satanico aunque humanos sean, recide en menor o mayor magnitud entre ustedes los mortales, un intinto que los lleva a la peor de las perdiciones asi como a la mayor de las lujurias, en este caso el limite fue el de engendrar un ser que no pertenece entre ustedes...y cuan maquiavelica postura, han terminado honrando el nombre del infierno sacrificando sus cuerpos para la resurreccion de esta demonio. Tan solo les agradezco por este momento de diversion, y ahora, por el presente que no esperaba...- Les dijo la diosa muerte con el bebe en manos para desaparecerce ante los cuerpos fallecidos. Dejando una noche de caceria, lujuria y placer por detras, luna entre nubarrones de turbulencia, y un aroma a sangre, una noche en el firmamento que parecia destinada para el nacimiento de una nueva hija del infierno, aunque por ironica sea la situacion, de madre humana...
