Fifth Wish:Dieta. Cada año es lo mismo, cada año es igual, me propongo una meta, pero por alguna razón me es imposible de cumplir. Es difícil, quiero bajar de peso… ese es mi verdadero deseo. El hecho de ser gordita, marranita, llenita, cerdita, o como quieran decirle, es un impedimento para muchas cosas que quiero hacer en la vida. Quiero verme en el espejo y decir: “¡Hey! Que chula te ves”, pero es imposible cuando veo una bola gigante frente a mí: 130 kilos, eso es lo que peso yo, tengo un sobrepeso de 74 kilos. Los doctores me han regañado, mi familia me ha regañado, mis amigos también y sé que tienen razón, pero… ¿¡Qué puedo hacer!? ¿¡Ejercicio!? Ja, si pudiera. Apenas puedo sostener mi peso y en cuanto empiezo a correr me hiperventilo, y siento que me ahogo; también me cuesta sostener mi peso en una bicicleta; y si intento hacer cardio, siento que me desmayo. Lo sé, que patética sueno cuando digo todo esto, suenan a puras excusas. Pero es la verdad, al final sólo me queda reorganizar mi dieta. Voy con el nutriólogo, y trato de comer lo que me indica, pero cuando llegan esas fechas festivas, algo se apodera de mí y no puedo dejar de comer. Me digo a mí misma que eso se acabará, que voy a medirme más, por mi bien. ¡Estoy harta de esto! Estoy harta de verme, de sentirme así… ¡Yo debo cambiar! Y ese es mi propósito de este año, y lo voy a intentar. Amo a mi familia, y quiero que me vean bien. Nada de que: “Otro año pasará”, porque es ahora cuando sucederá.
