Felicidad inconcebida

Tema en 'Fanfics Abandonados de Inuyasha Ranma y Rinne' iniciado por sessxrin, 19 Junio 2009.

  1.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

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    Felicidad inconcebida

    bueno esto es un SessxRin como pareja principal, y Inuxkago, como pareja secundaria y talvez un poco de sanxmiro, otravez llegue yo con otro de mis ff, espero que les guste y me corrijan :)
    I CAPITULO
    Aún no había salido de su asombro y felicidad, la pequeña Rin Kuchiki se iba por unos meses a Tokio – Japón, pero aún no entendía el porque de eso.
    - pero… ¿por qué me voy a Tokio? –la pequeña Rin aún seguía confundida
    - porque tu padre y yo, nos vamos a Europa a hacer unos negocios y nos demoramos unos meses, y en esos meses vamos a estar muy ocupados y no tendremos tiempo para ti, y por sobre todo no podremos dejarte sola allá en Europa –dijo la madre de Rin
    - y además Myoga se va ir por un tiempo a su tierra natal, Tokio, y pues como él te cuida, entonces te va a llevar con él ¿entendiste? –interfirió el padre de Rin
    - ahhh ya entendí, listo, cuando me voy
    - mañana mismo nos vamos –habló Myoga, un señor de edad, medio calvo, bajito, con bigote, que acaba de entrar a la discusión
    - ¡nana! –gritó Rin al ver que su “nana” había entrado
    - cuantas veces te he dicho que no me digas “nana” ¡porqué no soy mujer! –dijo el Myoga mientras alzaba con dificultad a la niña de diez años

    El peli-plateado bajaba las escaleras con pereza y desgano, mientras atrás de él, venía casi trotando el hermano menor de él.
    - Viejo, ¿para que nos llamaste? –habló el menor de los hermanos
    - Mas respeto a tu padre Inuyasha –interfirió el mayor de los hermanos
    - No me molestes Sesshoumaru, que ya casi se termina el día
    - ¡silencio! –gritó el padre de los dos jóvenes de trece y once años, que automáticamente se callaron- los llame para avisarles que mañana va a venir Myoga
    - ¡La pulga Myoga! –exclamo con felicidad Inuyasha- tengo algunas cuentas pendientes con esa pulga –hablo con tono maléfico
    - Solo para eso me interrumpiste –dijo el mayor del los hermanos
    - No solo para eso, sino también para informarles que Inuyasha va estar en el colegio donde se encuentra Sesshoumaru
    - ¡qué! –exclamo molesto el menor de los jóvenes- ¡viejo ahora tendré que aguantarme a ese tonto en el colegio!
    - Cual tonto idiota –dijo Sesshoumaru mientras le lanzaba un solo puño en la cara y “asesinaba” a su padre con la mirada
    - ¡que te pasa idiota! –dijo Inuyasha mientras se sobaba el cachete donde había sido golpeado
    - Yo no quiero estudiar con ese tonto –dijo Sesshoumaru molesto
    - Te guste o no, Inuyasha va a estudiar en tu colegio, discusión cerrada –termino de hablar InuNo Taisho

    Sesshoumaru volvió a mirar mal a su padre, y después a Inuyasha y se dirigió claramente molesto a su cuarto.
    Inuyasha que tampoco le agradaba la idea de verlo en el colegio, también le dedico una marida de rencor a su padre y se dirigió a su cuarto.
    - ¿Qué hare con estos muchachos? –habló para si mismo el padre de los Taisho
    - déjalos amor, están jóvenes todavía, tú mismo conoces como son Inuyasha y Sesshoumaru, no he visto ningún día en que se lleven bien, todavía son unos niños, le dan rabieta por todo –dijo Izayoi, mientras lo abrazaba por la espalda; ella había estado observando la escena de su esposo con su hijo e hijastro
    - algún día aprenderán a llevarse bien –dijo con nostalgia el padre de los dos jóvenes mientras terminaba de tomar su taza de café



    A la mañana siguiente, en Los Ángeles – EE.UU, se encontraba una pequeña niña nerviosa porque dentro de unas pocas horas, se despediría de sus padres y se iría con su “nana” a Japón.

    - Nana, ¿Cómo es Japón? –preguntó la niña con curiosidad
    - Primero que todo ¡deja de decirme nana! –la niña puso los ojos en blanco- segundo, ¿tú padre nunca te ha contado sobre Japón?
    - No, solo me ha contado que yo naci allá y que al otro día se volvieron para acá, y eso es todo
    - Mmm pues yo naci allá, y pues es una ciudad hermosa, llena de historia y cultura, se me hace extraño que tu padre nunca te contara nada de su tierra natal, ya que él es japonés
    - Wuaoo me muero por verla, pero recuerda también que mi madre es americana y me ha enseñado mas cosas de acá

    En ese momento llegaron los padres de Rin a despedirse de ella, con un fuerte abrazo y besos por parte de Rin a su madre y a su padre

    - Los quiero mucho papi y mami –Rin se despidió, porque en ese momento anunciaron el vuelo de los Ángeles a Japón.
    - Nosotros te amamos mucho mi amor –se despidió su madre
    - Cuídala bien Myoga –le dijo el señor Kuchiki a Myoga en el oído
    - Tranquilo, no le va a pasar nada

    Rin cogió sus maletas y la mano de su nana y se dirigieron al avión.
    Ya en el avión la pequeña Rin no paraba de hablar.

    - Nana ¿Dónde nos vamos a quedar?
    - En la casa de un viejo amigo mío, que también conoce a tus padres, nos quedaremos con su esposa y sus hijos, que muy amablemente nos van a acoger en su casa –el señor tomo aire, ya que sabia que la niña no se iba a callar en las próximas cuatro horas- dime Rin ¿tú no sabes hablar japonés?
    - Yo no sé hablar japonés, solo ingles –Rin miró por la ventanilla y se volteó para preguntar- ¿nana tu si sabes hablar japonés?

    El señor Myoga que ya se estaba empezando a relajarse, puso sus ojos en blanco y respondió sin ganas

    - Si Rin –el viejo volvió a respirar- me puedes hacer un favor Rin
    - Si nana –respondió la niña contenta
    - Será que te puedes callar las próximas cuatro horas
    - Mmmm no tengo nada mas que hacer, esto es aburridor –la niña se cruzo de brazos
    - Duérmete
    - No tengo sueño
    - *hay me quedan unas largas y torturosas cuatro horas* -pensaba el anciano al pensar todas las preguntas que le haría Rin.

    Por obra de magia, la pequeña Rin se había quedado dormida del aburrimiento, así se pasaron rápidamente las cuatro largas horas.

    - ¡nana levántate! –Rin movía al pobre señor, para que se levantara
    - ¿Que quieres Rin? –pregunto con molestia Myoga
    - ¡Que ya llegamos!
    - Tan rápido
    - Obvio, porque te quedaste dormido todas las horas, y yo me levante hace quince minutos

    El señor Myoga y la pequeña Rin, bajaron el avión y se dirigieron inmediatamente a la casa de los Taisho, mientras iban en el taxi, Rin, no paraba hablar y preguntar por lo que veía, para suerte de Myoga llegaron rápido a la casa.
    Rin bajo emocionada del taxi, mientras Myoga le pagaba al taxista, y alcanzaba a Rin.

    - ¿Cuál es la casa nana? –pregunto la niña confundida
    - Esta que ves al frente tuyo – señalando la casa de dos pisos, con una terraza enorme, y grandes puertas, rejas y enormes árboles.
    - Pero esto no es una casa, es una mansión, digna de un Rey, no es como el apartamento que tenemos en los Ángeles.
    - No Rin, mejor timbremos

    Inmediatamente después de timbrar y reconocer quien era el que timbraba, se abrió la reja que estaba al frente de ellos, y subieron por un camino hasta llegar a la puerta principal.


    nota: pues el apellido Kuchiki lo saque del anime de BLEACH y pues porque rima con el nombre ypues soy mala para los apellidos, espero que no sea ninguna complicasion
     
  2.  
    Hikari Azura

    Hikari Azura Usuario común

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    Re: Felicidad inconcebida

    hola!!
    mmmm que te podre decir...ah bueno que edad tiene rin? diez o cinco años..¬¬
    si ella va a secundaria ..es demasiado chica para ir en ella. es un punt de vista ya que se comporta como una niña inmadura...por otra parte no tengo dudas.es solo ese pequeño problemita...si corrigen un poco eso, daras un cambio al fic y sera mas interesante. pero de todad maneras tu fic es prometeror asi que estare aqui, esperando tu continuacion. asi que nos estamos leyendo pronto.
    bsss. sesshogriss.
     
  3.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

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    Re: Felicidad inconcebida

    pues voy a aclarar, Rin tiene 10 años y se comporta como una niña inmadura (recordemos que hasta ahora tiene diez años) y es muy consentida, por eso se comporta asi, yo nunca dije que Rin fuera a secundaria, solo Sesshoumaru e Inuyasha si van a secundaria, solo que Inuyasha, que me equivoque tiene 11 años y va a cumplir 12 no se porque coloque diez años, ahorita mismo corrijo, de todos modos gracias por comentar
     
  4.  
    Asurama

    Asurama Usuario popular

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    Re: Felicidad inconcebida

    Emh.....
    Llegó la pesadilla del foro de rumiko Takahashi.
    A ver por dónde empezamos...
    Me parece que las cosas fueron un poco rápido. Ni siquiera describiste bien a los personajes o, al menos, el lugar en dónde estaban, no hay detalle de nada, las decisiones se toman a los golpes sin porqué ni para qué...
    Ve lento, que ya sabes que todo mundo no tiene tu imaginación, así que tienes que pintárnoslo todo con palabras como si fuéramos unos mocosos brutos que no entienden nada, je. Entonces comprenderemos tu punto de vista y, de paso, la historia queda más larga. Ya sabes que pos aúí nadie te apresura.

    Fíjate bien el las mayúsculas al inicio de las oraciones, ten cuidado con los errores de tipeo, la ortografía y no inventes palabras.
    no me convenció el final del capítulo y no me llamó tanto la atención. Quizás hiciste a los personajes algo fuera de lugar. Aunque sea un UA, debes evitar el OoC. lo digo, por ejemplo, por la forma en que pusiste a Inu-chan, haciéndolo ver como un niño caprichoso.

    No era mi intención ser animal, ya sabes, como todos en el foro, que soy bien ácida
    Estaré leyéndote.
    Saludos.
    Luchy.
     
  5.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

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    Re: Felicidad inconcebida

    II CAPITULO

    - ¡Hola Myoga! –saludo el señor InuNo Taisho con un fuerte abrazo a su fiel servidor y amigo
    - ¡hola InuNo! Tiempo sin verte –el señor Myoga correspondió al abrazo
    - Y me imagino que es la pequeña Rin –interrumpió el abrazo Izayoi
    - Si esa es la hija del señor Kuchiki –dijo Myoga sobándole la cabeza a Rin

    La niña no tenia ni idea de lo que hablaban, ya que estaban hablando en japonés, por eso los miraba como raros, tratando de adivinar con sus gestos lo que decían

    - ¿Porque no saluda? –pregunto Izayoi, porque le pareció grosero que la niña no hubiera saludado
    - Ah, perdón –dijo Myoga- es que ella solo habla ingles –saluda Rin- le dijo Myoga a la niña en su idioma
    - Hello, my name is Rin, nice to meet you (hola mi nombre es Rin, gusto en conocerlos) –saludo Rin
    - hola Rin, yo soy Izayoi y él es mi esposo InuNo Taisho –dijo señalando a su esposo- gusto en conocerte –saludo y se presento Izayoi en el idioma de Rin
    - ¡sabe hablar ingles! –exclamo Rin
    - Si, aquí toda la familia Taisho sabe hablar ingles –dijo con una sonrisa- pero sigan, no se queden hay parados

    Tan pronto entraron Rin quedo mas que sorprendida, la casa o mansión era mas hermosa e intimidante por dentro, era con techos altos, con grandes ventanales, y hermosos candelabros, al frente de ella había una escalera que al final, se alcanzaba a ver una habitación con una grande puerta, a la izquierda de ella había un comedor grande y espacioso digno de un rey, y al frente de está, se encontraba la cocina, que tenia una gran ventana y se alcanzaba a ver un gran jardín, a la derecha de Rin, se encontraba una puerta grande de madera, se encontraba entreabierta, y se alcanzaba a ver grandes sillones, se imaginaba que era la sala de estar, lo que había en esa mansión era como del pasado, se imaginaba Rin que esa casa debía de tener varios pero muchos años, por la estructura y estética de la casa, Rin tenia dos palabras para clasificarla “enorme y hermosa”, porque todo lo que había allí era grande, y todo era bellísimo.

    - Wuaoo su casa en inmensa y hermosa –dijo Rin sorprendida por lo que veía
    - Gracias, esta casa le ha pertenecido a la familia Taisho por generaciones –dijo InuNo Taisho
    - Solo viven ustedes dos en esta enorme casa –dijo Rin
    - No, también nuestros hijos Sesshoumaru e Inuyasha –dijo Izayoi
    - ¡Sesshoumaru e Inuyasha bajen! –grito el señor InuNo Taisho

    E inmediatamente salieron de dos polos opuestos de la casa, dos jóvenes, que desde lejos parecían iguales, pero mas de cerca, Rin se dio cuenta, que uno era mas grande y con una cara de hielo, mientras el otro era un poco mas bajo pero tenia cara de “no me molesten”.

    El mayor de los dos jóvenes, traía puesto una capucha de mangas largas gris, y un pantalón de mezclilla negro entubado y unos convers grises. Tenía el cabello plateado, con unos hermosos e intimidantes ojos ámbar, su rostro era de facciones delicadas, parecía un ángel.

    El otro, traía puesto una buso rojo de mangas largas, un pantalón de mezclilla negro entubado, y en para los pies, traía puesto unos convers rojos. Su cabello plateado le llegaba hasta su espalda, sus ojos eran como dorados y sus facciones eran duras.
    A Rin le impresionaba el parecido de ambos, pero también se podía aprecias las diferenciad de ambos.

    - ¡pulga Myoga! –grito Inuyasha al ver Myoga ahí parado, Inuyasha fue donde Myoga y roza su puño sobre la cabeza de esté- me debes unas - Myoga
    - ¡más respeto a tus mayores Inuyasha! –dijo Myoga quitándose de encima el puño de Inuyasha y frotándose esa parte de su calva cabeza

    Rin seguía observando por segunda vez como una rara, no entendía lo que decía Inuyasha, solo había entendido el Myoga

    - Inuyasha deja de molestar a Myoga y presta atención –e inmediatamente Inuyasha se hiso al lado de Sesshoumaru- les quiero presentar a la invitada de Myoga, Rin –señalo el señor InuNo Taisho a Rin, esta pensaba que tal vez estarían hablando de ella- la hija única de los Kuchiki
    - Yo soy Inuyasha –saludo el de buso rojo
    - Yo soy Sesshoumaru –saludo el de la capucha

    Rin aun seguía confundida, de lo único que había entendido de lo que había escuchado era el “Kuchiki” el “Rin” y el “Sesshoumaru e Inuyasha”

    - Niña que paso, se te comieron la lengua los ratones jaja –dijo Inuyasha al ver que Rin tenia una cara de confundida y no decía nada
    - ¡Inuyasha! Rin no sabe hablar japonés –dijo su madre
    - Perdón –se disculpo Inuyasha
    - Rin saluda –le dijo Myoga a Rin
    - Ah, sorry, i am Rin Kuchiki, nice to meet you (ah, perdón, yo soy Rin Kuchiki, gusto en conocerlos) –dijo Rin con una gran sonrisa
    - I am Inuyasha (yo soy Inuyasha)
    - I am Sesshoumaru (yo soy Sesshoumaru)

    Ahora si había entendido lo que habían dicho antes, se habían presentado, en esos meses que le quedaban en Japón, iba a ponerse a estudiar japonés.

    - Oh, nana estos meses tienes que enseñarme japonés, no quiero seguir escuchando sin entender ni un rábano, y además no quiero seguir pareciendo una tonta –dijo Rin, mientras se cruzaba de brazos y miraba a los ojos a Myoga
    - Ok, Rin
    - dinos Rin, ¿Cuántos años tienes? –pregunto Izayoi
    - yo tengo diez años

    Sesshoumaru se sorprendió, la niña la había parecido una consentida y caprichosa, pensaba que tenia cinco o siete años, pero diez, si que era algo exagerado, no se comportaba de acuerdo a su edad, no podía creer que esta “niña” era hija de un señor tan respetado como los Kuchiki, lo había conocido y era un señor educado y respetuoso, no se podía creer que esa “mocosa” era su hija y no pudo evitar decir unas duras y crueles palabras.

    - Niña, madura un poco, no te comportes como una niña de cinco años, sal de esa burbuja de cristal, y deja de ser tan aniñada e infantil –Sesshoumaru se iba a retirar pero antes de hacerlo dijo- y deja de decirle “nana” a Myoga, es solo tu niñero –Sesshoumaru se retiro y subió por las escaleras que lo dirigían a su habitación.

    Rin se encontraba como en estado de “shock”, se sentía como una hormiga en medio de todos, nunca nadie le había dicho todo eso, nunca pensó que se veía como una infantil y aniñada, y que venga un joven al que no conoce a fondo a decirle todo eso; pero en algo tenia razón, ella vivía en una burbuja creada por sus padres y por ella misma, sus ojos comenzaron a humedecerse y salió corriendo de ahí, no sabia para donde cogía, solo quería escapar, paso por la cocina y se encontró la puerta que daba al jardín, siguió sin mirar y se sentó debajo de un árbol a llorar.

    Adentro en la casa, todos seguían confundidos y extrañados por la actitud de Sesshoumaru, pues él nunca había dicho tal cosa delante de una persona que apenas conoce.

    - Discúlpame Myoga, no sé que le paso a Sesshoumaru –dijo InuNo Taisho
    - Tranquilo, no debes pedir disculpas, y menos a mi, el que dijo eso fue Sesshoumaru, y se lo dijo a Rin, no a mi
    - *pobrecita, Sesshoumaru además de ser un idiota, también es un insensible* -pensaba Inuyasha, después comenzó a caminar en dirección de la cocina
    - A donde vas jovencito –dijo InuNo Taisho
    - A ver donde esta la niña, de seguro debe de estar llorando- Inuyasha siguió caminando, hasta pasar la puerta que daba al jardín
    - al menos ahora Rin dejara de ser tan consentida y se comportara de acuerdo a su edad, alguien debía decírselo –dijo Myoga
    - si, pero Sesshoumaru no era el indicado

    Inuyasha pasó por la puerta del jardín, y pudo ver a la niña sentada llorando, y no soportaba ver una mujer llorando y menos a una niña, camino y se acerco a Rin, se agacho en frente de ella para poder verla y hablar con ella

    - deberías dejar de llorar –dijo Inuyasha

    Rin abrió los ojos y lo vio bien de cerca, se veía tan diferente, tan dulce, con sus manos froto sus ojos y los abrió.

    - Perdón
    - No te disculpes, deberías dejar de malgastar tus lagrimas por palabras y menos por lo que dijo Sesshoumaru
    - Si, pero…no...puedo...dejar de llorar
    - Tranquila –Inuyasha le seco las lagrimas de Rin, era débil al ver un niña llorar- ¿Por qué lloras tanto por lo que dijo el idiota ese?
    - Porque…todo lo que dijo…-Rin miro para abajo- es verdad, yo vivo en una burbuja de cristal, ajena a lo que pasa o deje de pasar a mi alrededor –por la mejilla de Rin pasaron dos lagrimas

    Inuyasha sabia que si seguía hablando del tema, ella seguiría llorando, así que decidió hablar de algo que él veía, le gustaba a las mujeres

    - ¿Te gustan las flores? –preguntó Inuyasha

    El rostro de Rin se ilumino

    - ¡si, me encantan! Amo las flores –exclamo Rin
    - Aunque no lo creas este jardín es inmenso, y mas adentro hay un montón de rosas y flores, te encantaran –dijo Inuyasha- ¿quieres ir? –pregunto Inuyasha mientras se paraba y ofrecía su mano al de la niña
    - ¡si! –Rin recibió gustosa la mano de Inuyasha

    Y tal como lo había dicho Inuyasha, el jardín era inmenso, enseguida donde había estado sentada, había un camino, ambos caminaron por ese lugar, aunque lo que había pasado en la casa fue muy doloroso para ella, parece que se había olvidado de todo eso al hablar con Inuyasha, a pesar de la apariencia era un joven muy dulce como persona cuando la ocasión lo apetecía, y el solo nombrar las flores, parece que su día no fue tan feo, de ese día tan feo que había tenido, algo dulce había salido de ese problema, estaba teniendo un día agridulce.

    nota: espero que les haya gustado, trate de describir bien los personajes y la situacion, perdon por dejar a Sessho tan malo, pero eso queria hacer xD, espero que sigan leyendo mi fic y les siga gustando, gracias a lube que siempre me aconseja en mis fics, ¿que haria sin lube? no lo se ni quiero saberlo xD y a sesshogriss por leer mi fic, nos leemos
    sessxrin
     
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    Felicidad inconcebida
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    Re: Felicidad inconcebida

    II CAPITULO "AGRIDULCE"

    - ¡Hola Myoga! –saludo el señor InuNo Taisho con un fuerte abrazo a su fiel servidor y amigo
    - ¡hola InuNo! Tiempo sin verte –el señor Myoga correspondió al abrazo
    - Y me imagino que es la pequeña Rin –interrumpió el abrazo Izayoi
    - Si esa es la hija del señor Kuchiki –dijo Myoga sobándole la cabeza a Rin

    La niña no tenia ni idea de lo que hablaban, ya que estaban hablando en japonés, por eso los miraba como raros, tratando de adivinar con sus gestos lo que decían

    - ¿Porque no saluda? –pregunto Izayoi, porque le pareció grosero que la niña no hubiera saludado
    - Ah, perdón –dijo Myoga- es que ella solo habla ingles –saluda Rin- le dijo Myoga a la niña en su idioma
    - Hello, my name is Rin, nice to meet you (hola mi nombre es Rin, gusto en conocerlos) –saludo Rin
    - hola Rin, yo soy Izayoi y él es mi esposo InuNo Taisho –dijo señalando a su esposo- gusto en conocerte –saludo y se presento Izayoi en el idioma de Rin
    - ¡sabe hablar ingles! –exclamo Rin
    - Si, aquí toda la familia Taisho sabe hablar ingles –dijo con una sonrisa- pero sigan, no se queden hay parados

    Tan pronto entraron Rin quedo mas que sorprendida, la casa o mansión era mas hermosa e intimidante por dentro, era con techos altos, con grandes ventanales, y hermosos candelabros, al frente de ella había una escalera que al final, se alcanzaba a ver una habitación con una grande puerta, a la izquierda de ella había un comedor grande y espacioso digno de un rey, y al frente de está, se encontraba la cocina, que tenia una gran ventana y se alcanzaba a ver un gran jardín, a la derecha de Rin, se encontraba una puerta grande de madera, se encontraba entreabierta, y se alcanzaba a ver grandes sillones, se imaginaba que era la sala de estar, lo que había en esa mansión era como del pasado, se imaginaba Rin que esa casa debía de tener varios pero muchos años, por la estructura y estética de la casa, Rin tenia dos palabras para clasificarla “enorme y hermosa”, porque todo lo que había allí era grande, y todo era bellísimo.

    - Wuaoo su casa en inmensa y hermosa –dijo Rin sorprendida por lo que veía
    - Gracias, esta casa le ha pertenecido a la familia Taisho por generaciones –dijo InuNo Taisho
    - Solo viven ustedes dos en esta enorme casa –dijo Rin
    - No, también nuestros hijos Sesshoumaru e Inuyasha –dijo Izayoi
    - ¡Sesshoumaru e Inuyasha bajen! –grito el señor InuNo Taisho

    E inmediatamente salieron de dos polos opuestos de la casa, dos jóvenes, que desde lejos parecían iguales, pero mas de cerca, Rin se dio cuenta, que uno era mas grande y con una cara de hielo, mientras el otro era un poco mas bajo pero tenia cara de “no me molesten”.

    El mayor de los dos jóvenes, traía puesto una capucha de mangas largas gris, y un pantalón de mezclilla negro entubado y unos convers grises. Tenía el cabello plateado, con unos hermosos e intimidantes ojos ámbar, su rostro era de facciones delicadas, parecía un ángel.

    El otro, traía puesto una buso rojo de mangas largas, un pantalón de mezclilla negro entubado, y en para los pies, traía puesto unos convers rojos. Su cabello plateado le llegaba hasta su espalda, sus ojos eran como dorados y sus facciones eran duras.
    A Rin le impresionaba el parecido de ambos, pero también se podía aprecias las diferenciad de ambos.

    - ¡pulga Myoga! –grito Inuyasha al ver Myoga ahí parado, Inuyasha fue donde Myoga y roza su puño sobre la cabeza de esté- me debes unas Myoga
    - ¡más respeto a tus mayores Inuyasha! –dijo Myoga quitándose de encima el puño de Inuyasha y frotándose esa parte de su calva cabeza

    Rin seguía observando por segunda vez como una rara, no entendía lo que decía Inuyasha, solo había entendido el Myoga

    - Inuyasha deja de molestar a Myoga y presta atención –e inmediatamente Inuyasha se hiso al lado de Sesshoumaru- les quiero presentar a la invitada de Myoga, Rin –señalo el señor InuNo Taisho a Rin, esta pensaba que tal vez estarían hablando de ella- la hija única de los Kuchiki
    - Yo soy Inuyasha –saludo el de buso rojo
    - Yo soy Sesshoumaru –saludo el de la capucha

    Rin aun seguía confundida, de lo único que había entendido de lo que había escuchado era el “Kuchiki” el “Rin” y el “Sesshoumaru e Inuyasha”

    - Niña que paso, se te comieron la lengua los ratones jaja –dijo Inuyasha al ver que Rin tenia una cara de confundida y no decía nada
    - ¡Inuyasha! Rin no sabe hablar japonés –dijo su madre
    - Perdón –se disculpo Inuyasha
    - Rin saluda –le dijo Myoga a Rin
    - Ah, sorry, i am Rin Kuchiki, nice to meet you (ah, perdón, yo soy Rin Kuchiki, gusto en conocerlos) –dijo Rin con una gran sonrisa
    - I am Inuyasha (yo soy Inuyasha)
    - I am Sesshoumaru (yo soy Sesshoumaru)

    Ahora si había entendido lo que habían dicho antes, se habían presentado, en esos meses que le quedaban en Japón, iba a ponerse a estudiar japonés.

    - Oh, nana estos meses tienes que enseñarme japonés, no quiero seguir escuchando sin entender ni un rábano, y además no quiero seguir pareciendo una tonta –dijo Rin, mientras se cruzaba de brazos y miraba a los ojos a Myoga
    - Ok, Rin
    - dinos Rin, ¿Cuántos años tienes? –pregunto Izayoi
    - yo tengo diez años

    Sesshoumaru se sorprendió, la niña la había parecido una consentida y caprichosa, pensaba que tenia cinco o siete años, pero diez, si que era algo exagerado, no se comportaba de acuerdo a su edad, no podía creer que esta “niña” era hija de un señor tan respetado como los Kuchiki, lo había conocido y era un señor educado y respetuoso, no se podía creer que esa “mocosa” era su hija y no pudo evitar decir unas duras y crueles palabras.

    - Niña, madura un poco, no te comportes como una niña de cinco años, sal de esa burbuja de cristal, y deja de ser tan aniñada e infantil –Sesshoumaru se iba a retirar pero antes de hacerlo dijo- y deja de decirle “nana” a Myoga, es solo tu niñero –Sesshoumaru se retiro y subió por las escaleras que lo dirigían a su habitación.

    Rin se encontraba como en estado de “shock”, se sentía como una hormiga en medio de todos, nunca nadie le había dicho todo eso, nunca pensó que se veía como una infantil y aniñada, y que venga un joven al que no conoce a fondo a decirle todo eso; pero en algo tenia razón, ella vivía en una burbuja creada por sus padres y por ella misma, sus ojos comenzaron a humedecerse y salió corriendo de ahí, no sabia para donde cogía, solo quería escapar, paso por la cocina y se encontró la puerta que daba al jardín, siguió sin mirar y se sentó debajo de un árbol a llorar.

    Adentro en la casa, todos seguían confundidos y extrañados por la actitud de Sesshoumaru, pues él nunca había dicho tal cosa delante de una persona que apenas conoce.

    - Discúlpame Myoga, no sé que le paso a Sesshoumaru –dijo InuNo Taisho
    - Tranquilo, no debes pedir disculpas, y menos a mi, el que dijo eso fue Sesshoumaru, y se lo dijo a Rin
    - *pobrecita, Sesshoumaru además de ser un idiota, también es un insensible* -pensaba Inuyasha, después comenzó a caminar en dirección de la cocina
    - A donde vas jovencito –dijo InuNo Taisho
    - A ver donde esta la niña, de seguro debe de estar llorando- Inuyasha siguió caminando, hasta pasar la puerta que daba al jardín
    - al menos ahora Rin dejara de ser tan consentida y se comportara de acuerdo a su edad, alguien debía decírselo –dijo Myoga
    - si, pero Sesshoumaru no era el indicado

    Inuyasha pasó por la puerta del jardín, y pudo ver a la niña sentada llorando, y no soportaba ver una mujer llorando y menos a una niña, camino y se acerco a Rin, se agacho en frente de ella para poder verla y hablar con ella

    - deberías dejar de llorar –dijo Inuyasha

    Rin abrió los ojos y lo vio bien de cerca, se veía tan diferente, tan dulce, con sus manos froto sus ojos y los abrió.

    - Perdón
    - No te disculpes, deberías dejar de malgastar tus lagrimas por palabras y menos por lo que dijo Sesshoumaru
    - Si, pero…no...puedo...dejar de llorar
    - Tranquila –Inuyasha le seco las lagrimas de Rin, era débil al ver un niña llorar- ¿Por qué lloras tanto por lo que dijo el idiota ese?
    - Porque…todo lo que dijo…-Rin miro para abajo- es verdad, yo vivo en una burbuja de cristal, ajena a lo que pasa o deje de pasar a mi alrededor –por la mejilla de Rin pasaron dos lagrimas

    Inuyasha sabia que si seguía hablando del tema, ella seguiría llorando, así que decidió hablar de algo que él creía le gustaba a las mujeres

    - ¿Te gustan las flores? –preguntó Inuyasha

    El rostro de Rin se ilumino

    - ¡si, me encantan! Amo las flores –exclamo Rin
    - Aunque no lo creas este jardín es inmenso, y mas adentro hay un montón de rosas y flores, te encantaran –dijo Inuyasha- ¿quieres ir? –pregunto Inuyasha mientras se paraba y ofrecía su mano al de la niña
    - ¡si! –Rin recibió gustosa la mano de Inuyasha

    Y tal como lo había dicho Inuyasha, el jardín era inmenso, enseguida donde había estado sentada, había un camino, ambos caminaron por ese lugar, aunque lo que había pasado en la casa fue muy doloroso para ella, parece que se había olvidado de todo eso al hablar con Inuyasha, a pesar de la apariencia era un joven muy dulce como persona cuando la ocasión lo apetecía, y el solo nombrar las flores, parece que su día no fue tan feo, de ese día tan feo que había tenido, algo dulce había salido de ese problema, estaba teniendo un día agridulce.



    nota: espero que les haya gustado, trate de describir bien los personajes y la situacion, perdon por dejar a Sessho tan malo, pero eso queria hacer xD, espero que sigan leyendo mi fic y les siga gustando, gracias a lube que siempre me aconseja en mis fics, ¿que haria sin lube? no lo se ni quiero saberlo xD y a sesshogriss por leer mi fic, nos leemos
    sessxrin
     
  7.  
    AkoNomura

    AkoNomura Guest

    Re: Felicidad inconcebida

    hola~!

    como estas? espero que bien.

    aquí llegó Ako para postear este lindo fanfic

    si que Rin es consentida y aniñada, aunque me pareció extraño que unos padres dejen viajar a su hija a un país que no conoce y sola con su "nana" por mucha confianza que le tengan, pero en fin, esa es la trama, de algún modo debían llegar a japón y conocer al príncipe de hielo.

    ponerse a llorar por algo así, si yo fuese ella lo sigo y le aclaro sus verdades, supongo que ahora la misión de Rin es demostrarle lo contrario a Sesshoumaru.

    que lindo que se comportó Inuyasha, me agradó eso, se nota que es un chico de gran corazón.

    trata de describir más las cosas, su distribución, colores, pensamiento de los personajes hacia ellos, hacer comparaciones, etc. recuerda que no podemos meternos en tu mente y ver como te lo imaginas.

    nos leemos!

    ETO TI!
     
  8.  
    Asurama

    Asurama Usuario popular

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    Re: Felicidad inconcebida

    Ako-chan, no es por meterme, pero esos consejos ya se los di yo y creo que los comprenció muy bien. De hecho, las descripciones de este capítulo me gustaron. Al menos pude "ver" la casa en mi mente, y también a los personajes, sus expresiones.
    Lo que sí te aconcejaría es que ordenes un poco las ideas cuando haces las descripciones. También es bueno que no repitas tanto las cosas
    Para este problema, existe el uso de sinónimos.

    Recuerda cuidar los signos de puntuación, la acentuación de las palabras. Lee un par de veces para colocar bien las pausas. El diccionario y la herramienta "corrección" de Word no muerden y son buenos amigos de nosotros, los escritores.
    Cuida las mayúsculas en los nombres propios y al inicio de las oraciones.
    También te olvidas al uso de signos de exclamación e interrogación. Por el contrario, usas muy bien la cursiva como recurso.

    ¿Recuerdas cómo se escriben los guiones de diálogo?
    Alt + - del teclado numérico

    El capítulo se ve un poco más extenso y ahora sí me atrapó. Estás haciendo un muy buen trabajo.

    Ahora, sobre la historia, me da gracia cómo Rin no sabe nada de japonés y no entiende ni "j". Me gusta cómo Myouga la hace saludar. Pobre!
    al principio, Inuyasha también la trató algo mal, pero en seguida le tomó cariño.
    Sesshoumaru, impeclable. Me parece unsa buena descripción de cómo es su carácter desde afuera. aunque no puedo negar que, de pronto, fue algo bestia con Rin al tratarla así sin conocerla. Excelente, eres la que más respetó el momento en que estos dos se conocieron en el manga.
    No veo OoC como en el capi anterior. Está muy bien. :)
    Me gustó incluso el final. Avanzas muy bien. Sigue así!!!!!

    Luchy estará leyéndote.
     
  9.  
    zayreth

    zayreth Usuario común

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    Re: Felicidad inconcebida

    waw Rin como niña malcriada y consentida je je, por fin pude pasarme bueno me gusta mucho la
    trama que llevas je je si sacaste a Sesshomaru muy malvado pero va a corde a su personalidad je je
    pero porque se comporto asi??? beuno yo creo que deberias separar un poco mas los parrafos etc..
    tambien crei ver algunas fañtas de tíldes je je y que lindo fus Inuyasha con Rin je je me gusto mucho
    los capitulos je je espero y lo continues pronto sayonara
     
  10.  
    Hikari Azura

    Hikari Azura Usuario común

    Piscis
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    Escritora
    Re: Felicidad inconcebida

    holaaaa!!!!
    ya llege ( wuaja wuaja wuaja)...
    I want to speak about a few slightly important things...^////^
    ...( pensando) bueno la verdad si hay algunas errores ... pero por lo visto lubecita-chan y ako-chan ya te han marcados
    tu errores... y/o dado tansiquiera un pequeño consejo...es bueno y no te lo tomes mal..pero fue buena la continuacion aun asi con con los errores.
    bueno la verdad me sorprendio que izayoi hablara ingles, pero que lastima que rin no el japones (¬¬ entiendo como se sentira ya me ha pasado con la familia de mi amigo que solo hablan frances) es algo intolerable el no te puedan entender o no les entiendas...
    bueno la otra que grosero fue sesshomaru..aunque asi fuera su personalidad, yo si fuera rin iria tras de el y le diria That you have against my stupid?
    y por otra parte fue muy lindo la atencion que le dio inuyasha a rin.
    pero bueno asi que me estare pasando por aqui cada v es que actualises. asi que ...

    nous nous voyons tout de suite, un adieu!!!!!!!!! ^.^

    kiss tu fiel lectora sesshogriss
     
  11.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

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    Felicidad inconcebida
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    Re: Felicidad inconcebida

    III CAPITULO

    Caminaba por el camino de piedras que conducía al bello jardín, la verdad, lo que había dicho Inuyasha era cierto, el lugar se componía de varios árboles grandes y varias flores silvestres alrededor, al terminar el camino, se encontró de que esté se dividida en dos, tomando diferentes rumbos que al final llegaban a encontrarse formando un circulo.
    En el centro del circulo se encontraba una fuente, era una estatua de una mujer mirando al cielo, y de los pies de está, salía agua, formando así unas hermosas y pequeñas cascadas, y en el suelo, alrededor de la fuente, habían rosas, flores, de diferentes colores, formando un arco iris para los ojos de Rin.

    - Esté es una de las partes del gran jardín de Sakura –dijo Inuyasha
    - Wuao es relajante y…pacifico –decía Rin mientras se arrodillaba enfrente de las flores a olerlas a cada una- sabes...en los Ángeles no encuentras esta tranquilidad y esta belleza que veo y siento aquí
    - Feh, es lo mismo –daño Inuyasha la conversación sacando a luz su personalidad caracterizada
    - ¿Cuántos años tienes? –pregunto Rin con curiosidad mientras seguía con su “trabajo”
    - Once años –dijo despreocupado
    - ¡¿Once años?! –pregunto y exclamo Rin sorprendida –te comportas muy diferente, un poco maduro, no creía que tuvieras esa edad
    - Eso es porque te comportas infantil –dijo sin meditar lo que había dicho

    Rin sabia que lo que había dicho era verdad, pero todavía le dolía oírlo de la boca de alguien, miro al cielo y pensó en todas las veces que se había comportado de esa manera, sinceramente ella no quería crecer, no quería tener las mismas responsabilidades de sus padres, por eso se encerraba en su burbuja de cristal, para aislarse y pensar en nunca crecer, ella tenia miedo de tener el futuro de todo humano y enfrentarse con la realidad de muchas personas.

    Inuyasha al observar a Rin y darse cuenta de que en su rostro reflejaba tristeza y nostalgia, se dio cuenta de lo que había dicho no era lo mejor, otra vez había metido “la pata” y que si seguía así iba a lograr a ayudar a lo que dijo Sesshoumaru y bajarle mas el autoestima a Rin

    - ¿Nunca has sentido miedo? –pregunto Rin mirando directamente a los ojos dorados de Inuyasha
    - ¿Miedo de que? –respondió con otra pregunta
    - De tener el final de siempre de toda persona, de pasar por lo mismo y no vivir una vida feliz
    - ¿Tienes miedo de sufrir? –dijo Inu
    - Si –observo otra vez el cielo y después volvió a mirar a Inu- Por eso me comporto así

    Inuyasha medito lo que había dicho Rin, y entendía lo quiso dar a entender, y comprendió que en el fondo Rin a pesar de su edad y de su comportamiento era muy realista.

    - Voy a prometerme que voy a romper mi burbuja de cristal
    - ¿Te dejaras de comportar como una aniñada?
    - ¡Si!
    - ¿Dejaras de sentir miedo?
    - No, dije que dejare de comportarme infantilmente y aniñada pero nunca dije que dejare de sentir miedo
    - Ahhh, pero te propongo algo –dijo Inuyasha- esta estatua que ves aquí –dijo mientras señalaba la estatua que se encontraba en la fuente- mi padre un día me dijo que tenia vida, ¡claro! Yo no le creo, pero en tal caso me dijo que ayuda mucho a las personas, deberías hacer la promesa y botar un moneda en la fuente, para que esta te ayude
    - ¡Que gran idea Inuyasha! –dijo feliz Rin

    Rin se acomodo al frente de la fuente y pensó

    - *prometo que de ahora en adelante dejare de comportarme como una niña infantil y aniñada para comportarme de acuerdo a mi edad* -prometió Rin y se paro para terminar de hacer su promesa, busco en sus bolsillos pero no encontraba ninguna moneda- Inuyasha, ¿tienes alguna moneda que me prestes? –pregunto Rin
    - Si, creo –Inuyasha busco en los bolsillos de su pantalón hasta que encontró una, la saco y se la dio a Rin
    - ¿De que es? –pregunto Rin
    - De cinco Yenes
    - Ahhh ya

    Cogió la moneda con su mano derecha, se dio la espalda y cuando iba a botarla, se acordó de algo

    - ¿Inuyasha?
    - Que quieres ahora
    - ¿Como se llama la estatua?
    - Mmm, creo que se llama Sakura
    - Gracias

    Se acomodo otra vez dándole la espalda a la fuente y pensó
    - *señora Sakura por favor ayúdame en a cumplir mi promesa y a no decaer* -e inmediatamente arrojo la moneda por su lado derecho- ¡ya lo hice! –dijo contenta Rin
    - Bueno, ya que hiciste tú promesa, ¡nos podemos ir! –en todo el rato Inuyasha estuvo parado y ya se estaba comenzando a cansar
    - ¡si!

    Se devolvieron por el mismo camino y salieron del jardín, cuando iban a entrar por la puerta que daba a la cocina, Rin se acordó de algo y en un ataque sorpresa abrazo a Inuyasha

    - Gracias –dijo Rin

    Inuyasha sorprendido por lo que había dicho Rin, reacciono y dijo

    - Feh, no fue nada –dijo mientras devolvía el abrazo

    En ese principio de tarde, Rin se había ganado un nuevo y gran amigo

    Entraron por la puerta, Inuyasha cogió por otro camino para dirigirse a su habitación,Rin, en cambio se puso a buscar a Myoga.

    - ¡Myoga donde estas! –decía Rin fuertemente, buscan por los pasillos de la mansión
    - Aquí estoy –dijo Myoga mientras le colocaba una mano en el hombro derecho de Rin
    - ¡grito fuertemente!
    - ¿Qué te pasa niña?, ¿Por qué gritaste?
    - Porque me asustaste
    - Jajaja
    - Deja de reírte, que tal si me hubiera dando un infarto
    - Hay Rin deja de ser tan dramática –dijo mientras de ponía serio- ¿para que me buscabas?
    - Es que me cogió sueño, ¿Dónde voy a dormir?
    - Ahh eso, sígueme, yo te mostrare tu cuarto

    Se devolvieron del lugar donde estaban, para volver a la entrada principal, subieron la escalera que se encontraba ahí, ya arriba, era como un balcón, a la derecha de Rin, al fondo, se encontraba una entrada en forma de arco que daba a un salón, y a la izquierda de ella al fondo, también se encontraba con la misma entrada, que daba a otro salon.

    Myoga la guio por el lado derecho de ella, mientras caminaba se dio cuenta que en la pared habían varios retratos, cuadros, de una mujer con un niño en sus brazos y otros retratos a los cuales no puso atención porque estaba caminando, llegaron a la entrada en forma de arco, pero antes había dos puertas, dos habitaciones, se dio cuenta que la habitación que el salon que estaba ahí era una biblioteca, a la cual después miraría con mas cuidado.

    De las dos puertas que se encontraba antes de la entrada en forma de arco, Myoga abrió la que estaba mas cerca a la biblioteca.

    - Esta es tu habitación –dijo mientras prendía la luz

    La habitación no era muy grande, era de un color morado claro con un tono de morado mas oscuro, en el centro, había una cama pequeña, exacta para ella, a cada lado de la cama habían chifonieres, el que estaba al lado izquierdo tenia una lámpara.

    Rin entro, al lado izquierdo de ella había un tocador, no muy grande, se veía antiguo y perfecto para ella, al frente de la cama había un armario, también de hace muchos años, pero hermoso, y para completar al lado izquierdo de la habitación, había una ventana, con unas cortinas blancas.

    - ¿Que te parece la habitación? –pregunto Myoga
    - Es...es...perfecta, no necesita nada –se voltio y miro a Myoga- es la habitación de mis sueños jaja
    - Bueno, tú puedes desempacar y te puedes dormir, ya sin mas me voy
    - Espera Myoga
    - ¿Qué quieres?
    - ¿De quien es la habitación de al lado?
    - De Sesshoumaru
    - Gracias

    Myoga salió de la habitación, dejando a una Rin preocupada y con sueño, pero antes de dormirse, tenía que arreglar algo con su nuevo “vecino”, no quería tener rencor con nadie.

    Salió de la habitación, y se hiso al frente de la puerta de al lado, respiro hondo y golpeo.
    Abrieron la puerta y se encontró con el guapo joven que la hizo llorar

    -¿Qué quieres? –pregunto Sesshoumaru, mientras dejaba la puerta medio cerrada, y colocaba su brazo izquierdo en el marco de la puerta, así Rin no podía ver el interior de la habitación.

    - Que...quería saber si podríamos...llevarnos...bien –dijo Rin, intimidada por la mirada del joven Sesshoumaru
    - Mira niña, mientras no me hables y no te metas con mis cosas, no tengo problema –dijo mientras cerraba la puerta y dejaba a una Rin muy confundida
    - *bueno, al menos lo intente* -pensaba Rin, mientras se devolvía a su habitación, cerraba la puerta y se acostaba en la cama- ¿Qué hice yo para ganarme la bronca de este niño? –dijo para si misma Rin, mientras cerraba sus ojos y se quedaba dormida.

    Habían pasado cinco horas desde que Rin se quedo dormida y esta parecía que iba a seguir derecho

    - ¡Rin! Levántate –decía Myoga mientras movía a Rin
    - Ahh, déjame dormir, otro poquito mas –decía Rin mientras se cambiaba de posición y se colocaba una almohada encima
    - ¡Levántate Rin! –dijo Myoga mientras le quitaba la almohada que tenia encima- Rin ya es hora de comer

    Se levanto de golpe, como si hubiera tenido una pesadilla

    - Ya, tan temprano, ¿Qué hora es? –pregunto mientras buscaba por todas partes un reloj
    - Son las siete y media de la noche, dormiste cinco horas ¡cinco horas!
    - Ya me levanto –Rin se levanto y se frotaba los ojos, mientras se paraba y se miraba en el espejo que se encontraba en el tocador, se arreglo su mechón de cabello, que siempre se hacia y hace al lado derecho de su cabeza y se arreglaba su espelucado capul.

    Salió de la habitación y bajo por las escaleras, se encontró a toda la familia Taisho sentada en el comedor que se encontraba al frente de la cocina, la mesa del comedor era ovalada, cuatro sillas a cada costado de la mesa, una silla en el frente de la mesa y otra para el otro frente.

    En silla más grande de la mesa, la que se encontraba al frente de la mesa y daba la espalda a la entrada principal, estaba sentado el señor InuNo Taisho, al lado derecho de él, en una de las sillas del costado de la mesa se encontraba Sesshoumaru, al lado izquierdo de InuNo y al frente de Sesshoumaru se encontraba Inuyasha sentado, al frente de InuNo Taisho se encontraba la señora Izayoi.

    Rin fue guiada por Myoga a que se sentara al lado de Inuyasha, Mientras Myoga se sentaba al lado de ella.

    - Rin casi que no despiertas –dijo Inuyasha
    - Pareces la bella durmiente –dijo Izayoi
    - Perdón, tenia mucho sueño –decía Rin, mientras cogía el tenedor y comenzaba a comer
    - ¿Vas a comenzar a estudiar? –pregunto Izayoi
    - Si, voy a estudiar japonés en estos meses
    - Entonces te tienen que conseguir un colegio
    - No, gracias, yo siempre he estudiado en mi casa
    - Si, el señor Kuchiki no permite que estudie en otro colegio –interrumpió Myoga mientras miraba a InuNo, y este le devolvía la mirada como queriendo devolver el mensaje

    Ahora entendía Inuyasha todo lo que le había dicho Rin, y el comportamiento de esta.
    Aunque Sesshoumaru hacia de que estaba ajeno a la conversación, ponía cuidado a todo lo que decían, en una parte entendía al señor Kuchiki, pero se negaba a excusar el comportamiento de Rin por ese motivo.

    Y así paso la cena, con otra palabra de Izayoi y Rin, tranquila y silenciosa, era la primavera vez que Rin pasaba una cena así, siempre hablaba harto, pero las ganas se le opacaban al estar en esa situación.

    Cuando todos terminaron la cena, cada un recogió su plato, excepto InuNo Taisho, esté se dirigió a su habitación, Sesshoumaru se encerró en el de él, Inuyasha también hiso lo mismo, Izayoi se que quedo en la cocina, Myoga se dirigió al baño y Rin se fue a dormir.

    Subió las escaleras pesadamente, tenía mucha hambre y cuando la calmaba, le daba mucho sueño y cansancio, llego a su habitación, se quito su pantalón, y se quedo en puros cacheteros, se quito su blusa, y se puso una de seda blanca que se encontraba en su maleta, y se acostó a dormir.

    Se movía por toda la cama, se quito la cobija de encima, se seguía moviendo, no podía dormir, se levanto de la cama y busco un reloj que le había restado Myoga, eran exactamente las tres en punto de la mañana, siempre, desde que tenia memoria, se le quitaba el sueño a esa hora, camino hasta la puerta y prendió la luz que se encontraba en la pared; se sobo los ojos y abrió la puerta, todo se encontraba oscuro, solo se alcanzaba a ver la luz de la luna que entraba por las ventanas de la mansión.
    Cerró los ojos y comenzó a caminar guiándose por las paredes, siempre le había tenido miedo a la oscuridad, su imaginación era muy grande, se imaginaba cosas que no estaban ahí, por eso cerraba los ojos.

    Encontró el pasamano de las escaleras, y comenzó a caminar con cuidado de no caerse; cuando había bajado cada uno de los escalones, siguió su búsqueda por las paredes para encontrar la luz, pero de repente se encendió.
    Asustada se acurruco y tapo su rostro, esperando que lo que fuera que estuviese ahí, le hiciera algo.

    - Rin, tranquila, soy yo Myoga
    - ¡Myoga! Me pegaste un susto ¿Qué haces despierto a esta hora?
    - Ayudándote, te conozco desde que eras una bebe, y se que siempre te levantas a esta hora a tomarte algo caliente para poder volver a dormir.
    Y como se que le tienes miedo a la oscuridad, supuse que tendrías problema de encontrar la luz
    - ¡Gracias, que haría sin ti! –dijo Rin alegre de que fuera Myoga y no un monstruo de su imaginación

    Rin se paro y se sentó en unas de las sillas de la cocina, mientras Myoga le calentaba leche.

    - Myoga, ¿desde hace cuanto conoces a la familia Taisho? –pregunto con curiosidad Rin
    - Uff desde hace mucho tiempo ¿Por qué preguntas?
    - Porque quiero saber porque Sesshoumaru es así
    - ¿como?
    - Tan frio, cruel, y egoísta conmigo
    - Hay Rin, Sesshoumaru es así, con todo el mundo, es peor con otras personas, esa es la personalidad de él, no le des importancia
    - Es así con todo el mundo, hasta con su madre la señora Izayoi
    - Izayoi no es la madre de Sesshoumaru
    - ¡¿Qué?! –dijo Rin sorprendida
    - Shhh no hagas ruido, la madre Sesshoumaru ya murió, él es solo hijo de InuNo y no era así con su mamá, Sesshoumaru tomo esa personalidad de frio, cruel y despiadado desde que su padre se casó con Izayoi

    Rin iba analizando todo lo que le decía Myoga, con razón se comportaba así, cualquiera respondería de esa manera, o al menos eso pensaba ella, ver que su padre se case con otra persona, eso dolería mucho.

    - Mira Rin acá esta tú leche –dijo Myoga mientras le pasaba un baso de leche caliente
    - Gracias

    Rin se tomaba cada gota de la leche mientras pensaba como la hubiera pasado Sesshoumaru

    - ¿Y como se llamaba su madre?
    - Se llamaba Sakura

    Rin casi se atragante con la leche al escuchar el nombre

    - La señora Sakura es la estatua que esta en el jardín
    - Si, cuando murió Sakura, InuNo mando hacer esa estatua en su nombre
    - ¿Y el jardín también?
    - No, el jardín ya estaba cuando ella se encontraba viva, sino que ella lo cuido y lo mantenía, por eso InuNo le puso Sakura

    Ahora comprendía todo, el porque el nombre de la estatua y el jardín, ahora estaba segurísima de que ella le ayudaría y le daba mas curiosidad de conocer mas a fondo a Sesshoumaru, iba a conseguir acercarse mas a él y conocer como es en verdad en el fondo, ya había conocido una parte de Inuyasha en su interior, tenia intriga de saber que descubriría en esta persona, lo iba a conseguir, Rin Kuchiki iba a ser una de las personas mas importante para Sesshoumaru, ya se lo había propuesto ella misma como un reto.

    - Bueno Rin, ya es hora de irse a dormir
    - Si, ya me comenzó a dar sueño otra vez –se paro de la silla, le dio una abrazo a Myoga y un “gracias”, subió las escaleras y se encerró, apago la luz y se metió en su cama.
    Y cerró sus ojos de una vez, dormía plácidamente, gracias a la leche, dormía sin pesadillas y se preparaba para despertar y vivir otro nuevo día, pero esta vez tenia otros planes en mente, conocer a Sesshoumaru a fondo.
     
  12.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

    Virgo
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    Felicidad inconcebida
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    8
     
    Palabras:
    4
    Re: Felicidad inconcebida

    ________________________________________
     
  13.  
    Hikari Azura

    Hikari Azura Usuario común

    Piscis
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    Re: Felicidad inconcebida

    hola!!!
    yo aqui de nuevo..bueno esta ves estubo bien la continuacion...para mi punto de vista o sino es que ya estoy ciega..no encontre errores. te felicito.. bueno como no tengo mis lentes ya que los mande a ajustar es aumento...
    me gusto..asi que espero que le heches mas ganas con la proxima actualizacion ( en buen sentido) asi que nos veremos luego...
    bessos.
    sesshogriss
     
  14.  
    AkoNomura

    AkoNomura Guest

    Re: Felicidad inconcebida

    hola! perdón la tardanza ¿me extrañaste?

    al fin se ve por donde se encaminará esta historia, creo que vislumbro mas o menos como Rin se ganará poquito a poco el frío corazón de Sesshoumaru

    Rin es demasiado adorable

    ya sabemos mas o menos por que Sesshoumaru es como es.

    espero que lo continúes pronto

    nos leemos

    ETO TI!
     
  15.  
    Asurama

    Asurama Usuario popular

    Cáncer
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    Escritora
    Re: Felicidad inconcebida



    Tu forma de escribir es hermosa, me enamoré de este jardín :)

    Fue muy bonito cómo Inu llevó a Rin al jardín y la asombrada reacción de ella

    Oye… Inuyasha sí que es un experto en tirar los momentos perfectos al subsuelo. Sin duda, siempre lo haremos parecer torpe al pobre ;)
    Pobre Rin, todos la tachan de infantil (hasta Inu es un poco más maduro) ¡hora de madurar!
    ¿Sabes qué? Yo también soy así, incluso eso de no querer crecer y no tener responsabilidades, pero alguien no se cansa de decirme que es imposible detener el paso del tiempo y que tenemos que fluir con él... Que no te extrañe encontrarte con una frase así en mi próximo capítulo de Agartha.
    Me has descrito bien… este tipo de fic me gusta.

    Inuyasha tiene un gran sentido de la amabilidad y la empatía, me gusta que se preocupe por Rin-chan. Disfruté mucho de la conversación de ambos, lo sabes. Es bueno conseguir amistades cuando llegas de pronto y sin aviso a un sitio no conocido. El gran apoyo para la adaptación. Eso lo has dibujado muy bien
    Ella es inmadura y realista a la vez… y yo que pensaba que la paradoja no existía (¿recuerdas?)
    Lo que no puedo creer es el súbito interés que le surgió por el muchacho.

    Su habitación —y qué buena habitación— junto a la de Sesshoumaru… ya me entró la pica… Y pobre, toda nerviosa… ¿quién de nosotros no estaría así en la misma situación, frente a él?
    Yo también me despierto a la madrugada… y luego me cuesta horrores levantarme antes del medio día ¿sabes que también le temo a la oscuridad? (me imagino a Samara o… algo peor que mejor no digo qué es)

    Sigues siendo un poco redundante al escribir cosas del tipo “caminaron por el camino…”. Tuviste un par de errores ortográficos, como cuando escribiste “se hiso frente a la puerta”. Te faltaron algunas tildes, aún así, estás teniendo un mejor manejo de los signos de puntuación, sigue practicando.
     
  16.  
    sessxrin

    sessxrin Fanático

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    Re: Felicidad inconcebida

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    sessxrin

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    Re: Felicidad inconcebida

    IV CAPITULO "EL ÁNGEL SALVADOR"

    La luz comenzaba a infiltrarse por la ventana, pegando directamente en su rostro adormecido, e hizo que abriera sus ojos, molesta por la interrupción del sueño dio media vuelta para quedar de espaldas a la ventana, pero ya era imposible, el sueño se le había ido, froto sus ojos y se paro de la cama.
    Se paro y busco por todos lados un short, pero no lo encontraba, supuso que todavía no había desempacado su maleta, así que la busco, la encontró en una esquina de su habitación, abrió la maleta y saco uno de sus shorts, amarillo, y se froto de nuevo los ojos.
    Se miro en el espejo del pequeño tocador, se veía espantosa, para su punto de vista, se recogió el cabello en una coleta y salió disparada para el baño. Lo había visto ayer, se encontraba en la otra esquina del otro salón; entro, abrió el grifo y el agua fría comenzó a salir de ahí, se lavo la cara, quitándose cada rastro del sueño que se notaba en su rostro, se seco el rostro con una toalla y salió de ahí.
    Bajo por las escaleras para dirigirse a la cocina, no sabia exactamente que hora es, pero no debía ser temprano, así que imagino que al menos Myoga y la señora Izayoi debían encontrase ya despiertos.
    - Buenos días –saludo Rin al encontrarse Izayoi en la cocina y a Myoga también allí.
    - Buenos días Rin –saludaron los dos al unisonó
    - ¿Como amaneciste? –pregunto con su dulce y agradable voz la señora Izayoi
    - Bien, gracias –respondió mientras se sentaba en una de las sillas
    - ¿Qué quieres desayunar? –pregunto Myoga
    - Un cuenco de cereales, por favor

    Mientras Myoga sacaba de la alacena una caja de cereales y lo servía dentro de un plato hondo, Rin miraba por todas partes, tratando de encontrar a los jóvenes hijos Taisho.

    - Sesshoumaru salió temprano e Inuyasha aun sigue dormido –dijo Izayoi adivinando los pensamientos de Rin y que esta le pusiera atención
    - Oh
    - Mira Rin acá esta tus cereales –dijo Myoga mientras le colocaba al frente de Rin, un plato lleno hasta el borde de leche y cereal
    - Gracias

    Comía lentamente, no tenía ganas de comer, pero sabía que necesitaba fuerzas para comenzar el día. Ahora que lo pensaba detenidamente, no tenia nada especial que hacer en su segundo día en Tokio, pero quería hacer algo, no quería desperdiciar sus días sentada viendo TV, no quería pasarla aburrida y además quería comenzar a reconciliar las cosas con el joven mayor de los Taisho, quería conocerlo mas a fondo.

    - ¿Qué hora es? –pregunto Rin
    - Son las diez de la mañana –respondió Myoga
    - Tan tarde, se me paso el sueño
    - A ti siempre se te pasa el sueño
    Ella le hiso una mueca.
    Una pequeña risa se alcanzo a oír, era de la señora Izayoi que no puedo evitar la risa al recordarle a su hijo Inuyasha

    - Buenos días –saludo Inuyasha mientras arrastraba – literalmente– sus pies
    - Buenos días –saludaron todos los habitantes que se encontraban en la cocina
    - Hasta que por fin despertaste –dijo Izayoi a Inuyasha
    - Keh, siempre me levanto a esta hora
    - Bueno al menos no es el único dormilón por aquí –dijo Izayoi refiriéndose a Rin–bueno joven Inuyasha me hace el favor ahoritica va y riega agua a las flores –dijo cambiando de tema
    - ¿y porque yo?
    - Porque yo lo digo, ahora apúrele y termine de desayunar para hacer su tarea jovencito

    Se alcanza a escuchar refunfuñar a Inuyasha mientras se sentaba en una de las sillas de la cocina
    La mañana se paso rápidamente, mientras que en la tarde se le hizo eterna, parecía que el tiempo se hubiera detenido y que las manecillas del reloj se hubieran parado o simplemente el aburrimiento ya estaba haciendo efecto sobre ella.
    Esperaba con ansias que llegara la noche, quería hacer algo especial o al menos que su “niñero” como decía Sesshoumaru la sacara de esa gigantesca y aburrida mansión. Y no era que le molestara estar allí, pues amaba el jardín de la mansión, pero simplemente quedarse sentada mientras veía como Inuyasha se divertía con su amigo en el salón de arriba y Sesshoumaru se iba a no se donde, le entraba unas ganas de gritar del aburrimiento que sentía que fluía por todo su ser.
    Y pensando en Inuyasha, se dio cuenta de que este la pasaba bien con su amigo arriba, no recordaba el nombre de este, pensó que tal vez subiría haber si de pronto la invitaran a pasar y hablar un rato con ellos.
    Subió por las escaleras y se dirigió al lado opuesto de la biblioteca –que se encontraba al lado de su habitación temporal– subía sin muchas ganas cada escalón de la hermosa escalera, estaba un poco apenada, no quería llegar así como si nada a interrumpir lo que ella creía una charla entre amigos, pero no tenia nada que hacer, era eso o morirse –literalmente– del aburrimiento.
    Llego al grande salón, donde tuvo que pasar por la mañana para llegar al baño, la sala era un pequeño gimnasio, que se imaginaba utilizaba los jóvenes Taisho, pero allí no se encontraba absolutamente nadie, desilusionada se devolvió y cuando se dirigía a las escaleras oyó un poco de ruido que provenía cerca de la habitación continua al pequeño gimnasio, la puerta de la habitación se encontraba entreabierta, supuso que era de Inuyasha, por los letreros que se encontraban pegados en la puerta de este, apenada y aburrida quiso entrar, pero antes de que lo hiciera se detuvo por un comentario de que hiso el amigo de Inuyasha.
    - ¿Quién era la niña que se encontraba abajo?
    - Ah, es Rin Kuchiki
    E inmediatamente el rostro del joven demostró una demostrable sorpresa

    - *Oh, es especial* -pensaba el joven mientras formulaba otra pregunta- pero… ¿Por qué se encontraba tan aburrida? –pregunto el joven
    - Pero porque tanta insistencia en saber sobre Rin ¿acaso te gusto?
    - Como crees, solo simple curiosidad
    - Feh, cualquiera se pondría aburrido estando acá, y con Sesshoumaru peor
    - ¿Qué tiene que ver Sesshoumaru?
    - Hay pues como la ha tratado lo mas de bien –dijo sarcásticamente
    - ¿La trata mal?
    - La trato horrible en su primer día acá, yo creo que Sesshoumaru le tiene fastidio o algo así
    - Pobre…me lo imagino –murmuro el joven
    - Keh, pero ya basta de hablar de Rin y Sesshoumaru, Miroku viniste hacer otra cosa o que
    - Ya, tranquilo Inuyasha

    Rin que se encontraba del otro lado de la puerta se sentía horrible, había escuchado cada palabra de los jóvenes, nunca creyó que le produjera fastidio a una persona que apenas conoce, se arrepintió de haber estado escuchando conversaciones ajenas, ahora tenia otro remordimiento que sacarse, no quería seguir viviendo esos días al lado de un joven que la odia. Triste y aburrida se dirigió a su habitación, camino lentamente, no se imaginaba lo que había oído, llego a su pieza y entro, como resultado de aquel comentario que hiso Inuyasha, se acostó en la cama y espero aquel sueño la dominara.

    El sueño se había ido, procuro no dormir mucho, ya que después tendría que levantarse mas temprano, se levanto de su cama, y se soltó el cabello y se hiso un colita al lado derecho de su cabeza, salió de la habitación y bajo por las escaleras, para llegar a la cocina.
    - Myoga, quiero salir –dijo Rin mientras bajaba las escaleras
    - ¿A donde? –pregunto Myoga
    - No se, lo único que quiero es salir de aquí
    - Si quieres Rin, te llevamos a una feria, no esta muy lejos de aquí –dijo Izayoi
    - ¡Que bien! Quiero ir ya –decía mientras saltaba a la cocina, en puros brincos
    - Bueno, vamos ya –dijo Izayoi mientras salía de la cocina

    Rin seguía a Izayoi para todos lados, tenía unas grandes ganas de salir de ese encierro. Izayoi salió por la puerta principal seguido de Myoga y Rin, era la primera vez que había salido de esa mansión, al frente de la entrada había un carro BMW Z4, de color negro con vidrios polarizados, se imaginaba que debían de tener esa clase de lujos, si tenían una mansión gigantesca, debían de tener eso.

    Entraron en el auto, Myoga manejaba, mientras que la señora Izayoi se encontraba en el asiento del co-piloto y Rin se hacia en la parte de atrás.

    Pasaban por varios edificios, casas, centros, en todo el recorrido, Rin admiraba la belleza de la ciudad por la noche, si New York es la ciudad que nunca duerme, Tokio nunca para, habían letreros por todas partes, era un sin fin de luces en medio de la oscuridad de la noche, hasta que llegaron, era un lugar “verde”, era un espacio en medio de la ciudad, donde había solo la hermosa naturaleza y parques, y como lo dijo la señora Izayoi, era una feria, con juegos mecánicos, paseos, y todo lo que concurre en ella; se estacionaron y bajaron.

    Rin disfrutaba de todo lo que veía allí, era le sueño de toda niña, se montaba en todo juegos mecánicos que encontraba y no hacia nada mas que comer, sobre todo algodones de dulce y piruletas redondas de colores, cualquiera que pasara y la viera pensaría, ¿como esa niña no esta gorda comiendo tanto dulce?

    Habían pasado unas horas y Rin no paraba, él pobre Myoga estaba mas que cansado y la señora Izayoi trataba de seguirle el ritmo a Rin.

    - Parece que nos vamos a demorar mas de lo planeado –dijo suspirando Myoga mientras se sentaba en un banco- ojala Inu Taisho no se valla arrancar el cabello de la preocupación sabiendo que no estas en la casa
    Izayoi abrió los ojos, sorprendida y preocupada
    - Se me paso decirle a Inu Taisho que saldría –dijo preocupada Izayoi
    - Ya quedo calvo –suspiraba Myoga
    - Hay que llamarlo –Izayoi volteo a mirar a buscar a Rin y la llamo- querida, me haces un favor
    - Si
    - ¿Puedes ir al auto y traerme el móvil? Es que se me quedo en el auto
    - Claro

    La niña salió corriendo, llego a la salida de la feria y salió, se suponía que el carro debería de estar a la vuelta de la esquina, camino, tratando de no perderse, aun en medio de tanta gente, tenia miedo de no encontrar el camino. Y tal como lo suponía, se había perdido, no sabia a que horas lo había hecho, pero término en unas calles oscuras y poco habitadas.

    *¡Perfecto! Es el mejor momento y lugar para perderse* -pensaba sarcásticamente Rin
    Camino derecho y alcanzo a divisar un “claro” se alcanzaba a ver la luz, así que ya estaba al menos cerca de salir de esas calles oscuras, faltaba poco, hasta que de una de las esquinas, diviso un hombre que acababa de salir de una tienda.
    Pensó pasar desapercibida, pero no funciono el tipo tan pronto la vio, comenzó a sonreír, como si acabara de encontrar comida en medio de un desierto.
    Su intuición le advirtió que ese tipo era peligroso, dio media vuelta horrorizada para regresar, sentía como las manos se le enfriaban y las piernas le temblaban del miedo. Disimuladamente miraba para atrás y todavía el tipo iba detrás de ella con una sonrisa en la cara

    Caminaba rápidamente, más bien trotaba, quería alejarse lo más que podía de ese tipos alcanzo a divisar otro claro, felicidad sintió, pero el tipo comenzó a caminar mas rápido, con miedo comenzó a correr, pero esta vez, cogió otro camino. Error, era un callejón sin salida, ahora si que estaba mas que asustada.
    Dio media vuelta y el tipo la miraba como a una presa, camino lentamente hacia ella, horrorizada, callo sentada y metió su cabeza en medio de las rodillas, esperando el dolor o algo parecido.
    Pero nada, levanto un poco su cabeza y abrió un ojo, sorpresa la que se llevo, creía ver en frente de sus ojos a un ángel.

    El tipo que la perseguía ya no estaba y en cambio se encontraba en frente de ella, unos orbes dorados que le devolvieron la tranquilidad.

    - Sess...Sesshoumaru –tartamudeaba Rin
    - ¿Ten encuentras bien? –pregunto con su voz fría pero un poco amable
    - Si...gracias...-se levanto, un poco aturdida, todavía sus piernas temblaban- ¿Que...estas haciendo ...aqui?
    - Después te lo diré –dijo mientras observaba por todos lados- vamos de aquí, que este lugar es peligroso
    - Si –dijo mientras asentía la cabeza.

    El joven salió de callejón, mientras ella iba detrás de él, todavía estaba anonadada, y tenia tantas preguntas en la cabeza, como, ¿Dónde se encontraba el tipo-acosador?, ¿en que momento llego Sesshoumaru?, ¿Cómo sabia donde se encontraba ella? Y por supuesto ¿Qué hacia Sesshoumaru a estas horas en medio de unos callejones?, la cabeza se le iba a explotar con tantas preguntas, por ahora, se encontraba aliviada y contenta de que el miedo se halla pasado, le debía mucho a Sesshoumaru, si él no hubiera llegado a tiempo, ni se imaginaba lo que le haría ese tipo.

    Se sentía muy agradecía con Sesshoumaru, haría todo lo posible por devolverle el favor y ahora, mas que nunca estaba interesada, en aquel ángel misterioso de orbes dorados y profundas que la salvo.


    notas: gomen gomen!!! de verdad!!!perdon por demorarme tanto, pero es que no tenia ni una pizca de inspiracion y el tiempo no me alcanzaba. perdon por el Ooc en ciertas escenas y personajes, si lo hay porfavor corrigenme, para no volverlo a cometer. mmm gracias a los que todavia se toman la molestia de leer mi ff, se que el principio es un poco aburrido, y la historia tambien, pero esto es como un "prologo", todavia no comienza el ff de verdad, gracias a todos por leer, gracias de verdad.
    sessxrin
     

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