~Vettel Karma~

Re: [Original] ~Vettel Karma~

Viernes

Las Dunkelmeer se reunían de una por una, recuperándose del atentado de los lobos; que segundos atrás combatían contra ellas. La McClain se encontraba en el suelo, aún dormida por el hechizo y tan blanda como una pluma. A su lado estaba Antonella, quien la cuidaba con fastidio, no era de su agrado estar con esa chica. Elizabeth miro a todas sus primas/hermanas chequeando que no faltara nadie pero, velozmente busco con la mirada a Alysa que no lograba encontrarla.

— ¿Dónde está, Alysa?—preguntó Beth mirando a sus primas/hermanas, las demás observaron el lugar para luego responder que no sabían.

—No nos preocupemos por ella, sabe cuidarse sola. Reunámonos con los chicos—comentó Lorraine lista para empezar su marcha.

— ¿Qué haremos con ella?—preguntó Antonella mientras le daba un pequeño puntapié a Allisson, quien aún dormía en el suelo.

—Por mí que se quedé—comentó Lilith cruzada de brazos—, así no molestara a mi hermano.

—Está bien, yo la llevo, de todos modos no pesa nada—Leelu se acercó a la McClain y la alzo con facilidad.
Las chicas empezaron a caminar por aquel bosque, todas en grupo para no perderse. El tema de conversación era lo sucedido con los lobos.

—Pobres lobos—comentó Rumiko con tristeza—, creo que nos pasamos en atacarlos.

— ¿Pobres? Si intentaron matarnos, eran lo mínimo que se merecían—dijo Elizabeth molesta por el comentario de Rumiko, la segunda agacho la mirada y metió las manos en los bolsillos.

—Son seres agradables, pero algo le hicieron para que nos atacara—habló Leelu con Allisson en los brazos.

—Hay por Dios, son seres repugnantes, peludos, asquerosos—comentó la peli púrpura retocando su cabello.

—Claro, como en dos ocasiones fuiste vos la damisela en apuros—burló Camila son su tono de fuerza.

—Cállate ordinaria, no tengo la culpa de que se fijen en mí.

—Es que siempre se fijan en la más débil, Antonella—dijo Beth con una sonrisa de lado, siempre tendría un comentario para fastidiar a sus primas.

—Porque no se callan todas y pensamos en como revertir el hechizo sobre Allisson—comentó Lorraine fastidiada por las discusiones de las chicas.
Lililh, por suerte se sabía el hechizo que había usado Alysa sobre Allisson, así que lo revirtió para que ésta volviera a su peso normal antes de llegar hacía los chicos, donde se empezaban a realizar preguntas.

Elizabeth no duró en preguntar si habían visto pasar a Alysa, Adam se molesto por la pregunta pero respondió lo del mensaje que le había enviado, por otra parte Ethan se preocupo al ver a su hermana inconsciente en brazos de Leelu, algunos de los Dunkelmeer sabia lo que había pasado, solo eran discretos con los demás que habían allí, como los Priest.

— ¿Qué le ocurrió a mi hermana?—preguntó Ethan alterado mientras corría hacía Leelu, que había colocado a la McClain en el suelo. Las chicas rápidamente pensaron en alguna escusa para decirle a Ethan, hasta que Leelu habló.

—Se desmayo porque….porque no comió chocolate.

— ¿Chocolate?—dijeron las Dunkelmeer al unisonó mientras miraban a Leelu.

—No sé te ocurrió una mejor idea—Lililh se había cruzado de brazos mientras hablaba irónicamente.
La McClain estaba despertando del hechizo, su cabeza daba vueltas por todos lados, estaba confundida y aturdida, no sabía lo que había sucedido, rápidamente verifico si su cuaderno de nota estaba en la cartera que llevaba, allí se encontraba todo intacto.

—Oh Sebastián no sé que me paso—la chica se agarro del brazo del joven mientras pegaba su rostro al pecho de él. Antonella se estaba colocando celosa y desvió la mirada a otro lugar. Lilith difundió con la mirada a Allisson, mientras ésta se hacía la inocente del lugar.

—Será mejor irnos—comentó Shamuel acercándose a su hermana, antes de que Isaac lo hiciera, la chica sólo frunció el ceño por el ataque de celos de su hermano, mientras telepáticamente le advertía a Isaac que se retirará.

—Yo mejor me voy—Adam guardo su teléfono y se despidió de todos junto con Isaac que solamente se despidió de Elizabeth captando la mirada de los demás. Giovanni también se retiro mirando a todos por encima del hombro, como era de costumbre se creía el mejor. En cambio Naru se despidió de uno por uno, al igual que Marcos y ambos se fueron juntos.

—Que estúpida salida, yo me mejor me largo de este lugar—habló Dietrich yéndose sin despedirse de nadie, más adelante lo esperaba su hermano. Los McClain aún estaban con los Dunkelmeer, Ethan trataba de hablar con Elizabeth mientras Shamuel se lo permitía discretamente, preferiría que estuviera con él, que con Isaac, ya que le había dado mala espina. Elizabeth fastidiada ignoraba al McClain y no duraba segundos en tirar indirectas para que él y su hermana se fueran.

—Nos vemos pronto Sebastián. Cuídate—Allisson le dio un beso cálido en la mejilla del joven, un tanto cerca de los labios. Antonella cerró el puño con fuerza mientras en su mente maldecía a la McClain. Ambos hermanos se retiraron del lugar dejando solamente a la familia Dunkelmeer.

—Solamente les diremos que unos lobos nos ataco—dijo rápidamente Lorraine sin tantos rodeos, los chicos se limitaron a no preguntar. Todos se montaron en los carros como iban de venida. Cuando llegaron a la mansión nadie se dio cuenta de la presencia de Alysa junto al lobo grande blanco, todos pasaron directos a sus recamaras, las chicas estaban cansadas.

—Maldita Allisson—decía Antonella mientras cerraba la puerta de su cuarto con brusquedad y se lanzaba en su cama—. Más bonita no puedo ser—se dijo así misma mientras miraba su reflejo en el espejo del techo.

***​

​

Por los pasillos del segundo piso Sebastián se encontró con Lorraine, quien se encontraba en pijamas. Era su oportunidad para preguntarle acerca de Matthew, no quería parecer celoso ni nada por el estilo, tampoco quería quedarse con esa duda toda la noche.

—Sweetie, que curioso como te llama ese chico—comentó Bastian rascando su cabeza.

—Algún problema, es solamente un amigo, nada más—respondió Lorraine con una sonrisa picara

—No para nada, solamente que tus amigos son mis amigos—dijo Bastian—Demonios porque dije eso—pensó mientras desviaba la mirada.

—Mira hablamos luego, yo me voy a dormir—Lorraine se retiró dejando como un idiota a Sebastián, antes de que el chico se fuera, Antonella lo jalo del brazo, atrayéndolo hacía su cuerpo.
—Estuvo bien la salida de hoy—comentó Antonella jugando con su cabello.

—Eh, sí supongo que sí. Me divertí mucho—respondió Sebastián.

—Pero para la próxima salida quisiera que fuéramos solo nosotros, solos, sin más nadie—Antonella se iba acercando a Bastian, incomodando un poco al chico.

—Tenlo presente, luego tendremos una salida a solas—dijo para luego darle un beso en la frente y retirarse a su recamara. Antonella sólo se mordió los labios y se fue a su cuarto contenta.

***​

​

Sábado

Al día siguiente todos se dirigieron a la cocina, cada uno tomaba asiento en su respetivo puesto mientras Camila iba al refrigerador y habría la nevera. Todos quedaron aturdidos por el horrible grito que había pegado Camila, y salieron hacía donde se encontraba la chica.

—Hay pero que ordinaria, hasta cuando esos horribles gritos—se quejó Antonella tapándose los odios.

—Esto se merece pegar el grito al cielo, miren la nevera—dijo Camila abriendo las dos puertas, todos se quedaron sorprendidos al ver que se encontraba vacío, sin ninguna especia de comida, carne, salsas, etc.

—Oh no, somos pobres—dijo Antonella con trauma.

—No seas estúpida—comentó Elizabeth chequeando el suelo—, alguien robo la comida del refrigerador.

—Tienes razón, hasta las huellas las dejaron—Shamuel empezó a seguir los pedazos de sucios que habían en el suelo, que indicaban un lugar, todos seguían a Shamuel.

—Quiere decir que se metieron ladrones a la mansión—decía Leelu agarrada del brazo de Rumiko.

—No creo que nadie tenga ánimos de robar a una familia de brujos—comentó Lorraine siguiendo a Shamuel.

—Y donde está la abuela—preguntó Sebastián, junto con los demás.

—Crees que si la abuela sabría estuviéramos nosotros aquí, habría juicio de comida—dijo Lilith.
Cuando se dieron cuenta los rastros de comida daban hacía el jardín, todos salieron junto a Shamuel que iba adelante, cuando llegaron a la escena del crimen, pudieron visualizar que en un árbol grande se encontraba Alysa durmiendo con un hombre de contextura musculosa, que tenía la ropa rasgada, casi semi-desnudo.

—Oh my god—exclamó Antonella llevándose las manos a la boca.

—Oh por Dios—dijo Shamuel con los ojos como platos.

—No lo puedo creer jijiji—comentó Elizabeth aguantando la risa.

— ¡Que asco!—exclamaron Rumiko y Camila viendo la escena.

—No perdió el tiempo la princesita—comentó Lorraine cruzada de brazos.

—Sin comentarios—dijo Sebastián….continuara….

Bueno lamento haber tardado, pero aquí está la conty, no sabía que colocar, gracias por tu ayuda Tsukihiki al igual que a Artic.

 

Re: [Original] ~Vettel Karma~

Silencio, dulce y desesperante. ¿Y cómo no? Si volverse en menos de un minuto el centro de atención en aquella familia no era algo que se considerará enteramente “bueno”. Alysa tomó aire para decir algo a su favor, pero la voz divertida de Beth la dejó con la palabra en boca.

—¿Y…? ¿Cómo estuvo?

—¡Beth! —medio mundo la reprendió

Así pues, la historia del porque terminó en aquel árbol junto a… aquel chico se remontó a la historia de su pequeña aventura montada en aquel lobo y la posibilidad, bastante lógica cabe decir, de que ambos seres fueran el mismo personaje por así decirlo. Las miradas continuaron pegadas al par, al menos Murtagh dio gracias cuando los Dunkelmeer viraron la vista a la puerta, más el aura amenazante que se alzaba lo hizo desistir de la idea de que aquello era un suceso de suerte.

Los jóvenes se mantuvieron quietos, expectantes ante la figura de su abuela, los ojos de la anciana escudriñaron a cada uno de sus nietos y aún más al joven licántropo. Bastó una seña para que todos se adentraran hasta el principal lugar de reuniones: el comedor. Cada uno se sentó en sus típicos puestos, excepto Alysa y el lobo; quienes fueron llamados a la oficina de la matriarca.

—Están muertos —murmuró Lorraine, asentimiento involuntario.

Dentro de la oficina de Lirio la atmosfera no era menos estresante. La abuela escribió un par de líneas en una libretita antes de que fijar la vista en el interesante par.

—Alysa —llamó, la aludida se tensó ligeramente— sabes que no puedes traer mascotas a la casa.
Murtagh parpadeó, ¿se refería a él? La Menor se encontraba en igual posición.

—Pero…

—Shh —Lirio apuntó con el bolígrafo al albino, que se sintió amenazado por ese simple gesto— ya veo —nuevamente anotó una línea en la hoja— sé cual es tú problema.

Dicho aquello ordenó a su familiar salir del lugar, no sin antes ordenarle arreglar todo el desastre para antes de dormir. La chica se limitó a asentir y salir de allí, algo inquieta por el destino que le depararía a su nuevo amigo; nada bueno era estar solo con la matriarca. Lirio se aseguró de que su descendiente estuviera lejos, pese a saber que no la vería más que cumpliendo su castigo; por esta vez no sería tan dura, solo por traerle un “espécimen” interesante.

—¿Sabe cuál es? —ella asintió, no era de extrañar, la lógica era útil al resolver que esa persona era una bruja bastante experta— ¿puede…? —los ojos de la anciana se le clavaron, obligándolo a cortar el resto de la cuestión. Al parecer nada resultaría tan fácil, se lo esperaba.

—Hay una condición: deberás servir a esta familia hasta el día que deshaga ese hechizo.

Oh, bien… aquello sonó demasiado.

—¿De qué habla?

Alysa se encontraba realizando su labor, bajó la atenta mirada del resto de la familia. Por suerte sus madres aún no hacían acto de aparición, imaginarse que habría pasado si tan solo ellas hubieran visto la misma escena que sus hermanas y primos… no, difícil concebir. Beth no dejaba de cuchichear algo con Lorraine, y eso la molestaba, podía imaginar la larga tortura que le esperaba por el incidente.

Una exclamación ahogada, proveniente de la oficina de la abuela, captó la atención de todos. En un segundo se acercaron, precavidos por si acaso. Justo a la entrada se encontraban el “lobo”, y Lirio. Esta última con un misterioso brillo en los ojos, que nada gusto a sus nietos. Con el bastón le dio un golpecito al albino, justo en la espinilla. Este se guardó el comentario con esfuerzo.

—Habla.

—Yo… de ahora en adelante viviré aquí… soy Murtagh —decidió cortar allí.

Tras un largo silenció los mayores de la familia lograron articular una simple pregunta:

—¿Q-Que?

—Así es, será la “mascota-sirviente”. Cuídenlo bien.

Y dicho aquello Lirio volvió a adentrarse en su oficina, más tarde daría detalles. Los mayores del Alto se limitaron a mirarse, intercambiando de ese modo más de un pensamiento; que en sí se resumía a dos palabras: ¡¿qué demonios?!

No era para menos, desde cuando un ser… ¿humano? Bien, lo que fuera, se volvía una mascota. Simplemente inaceptable, pero la abuela razones tendría y preguntarle o reclamarle eran opciones que escapaban de las manos de todos los que habitaban ese lugar. Alysa volvió al trabajo, esta vez socorrida por “Mur”; el resto se limitó a murmurar sobre la extraña decisión de la abuela. Quizá nada bueno les traería, ¿quién sabe? La matriarca no era de las personas que se tomaban las cosas a la ligera, algo tramaba y probablemente nada bueno sucedería para sus nietos.




No es muy larga pero... espero que sirva [?]

Gracias Artic! Por la idea.

 

Re: [Original] ~Vettel Karma~

Hola chang@s vengo a dejarles el capi sorry por la espera o__o
Rumiko veía al “chico-lobo” con curiosidad, corrió a su habitación y regreso rápidamente con un collar de perro mirando a la “mascota-sirviente” con una sonrisa maliciosa que aterrorizo a Leelu, Rumiko le coloco un collar de púas y una cadena y lo jalo.

-¡quiero ser la primera en jugar con el! –Dijo emocionada y la flama de su ojo ardía con mayor intensidad, pero Leelu aun la miraba con algo de espanto-

-¿de que hablas con “Jugar”? –Pregunto Antonella de brazos cruzados-

Rumiko da un rápido vistazo hacia la oficina de la abuela con malas intenciones y jala al “pobre” chico con ella, también llevándose a Leelu del brazo corriendo hacia la oficina.

-¿A donde va?-pregunto Camila-

-De seguro a molestar a la abuela –contesto Antonella- como siempre…

-Voy con ella, talvez llegue a necesitar nuestra ayuda –sugirió Alysa-

-No, déjala eso es su problema y me imagino que por costumbre sabrá como arreglárselas –Expreso Antonella de mala manera para retirarse del lugar-

Cerca de la oficina Rumiko estaba cociéndole “algo” a varios muñecos vudú, Leelu la observaba con curiosidad pero temblorosa, sabia que como siempre ella planeaba algo malo contra de la anciana y que esta podría meterla en un grabe aprieto y sobre todo con lo aterradora que podía ser la abuela al enojarse.

-Rumiko, por favor ¿Qué te a hecho la señora? –Pregunto nerviosa-

-Esa mujer siempre los castiga de mala manera cuando cometen un simple error, ¡y es tan fastidiosa! –dijo apretando los dientes-

-Pues no creo que te castigase de mala manera o peor si la siguieras molestando, ¿no crees? –le murmuro a Rumiko quien volteo la mirada para llevarse al joven Murtagh arrastrado por el suelo de la cadena, pero este toma la cadena y talonea para que esta le libere.

-¡yo tampoco quiero meterme en problemas! –exclama-

Rumiko solo voltea a verlo y la flama en su ojo crece que pareciera que incendiara su rostro, dando un aire de terror para ambos jóvenes, esta solo aprieta ligeramente la cadena para después soltarla. La pelinegra se le veía alo enfadada y voltea instintivamente para ver la puerta de la oficia de Lirio pero ve que no estaba, podría estar en el vivero por lo cual esta solo deja una “caja de regalo”, en eso esta se va por la ventana y decide descansar en el tronco de árbol mas cercano para meditar.

Por su parte Leelu y el joven Murtagh quedaron solos en el pasillo, Murtagh estaba algo confundido y Leelu se le veía preocupada por lo que tomo al joven de la cadena y corre hacia fuera.

-¿¡pero por que de la cadena!? –exclamo el joven “lobo” al ser asfixiado-

Leelu se consigue de sorpresa con Lirio quien se dirigía a su oficina, Leelu quedo petrificada (literalmente) e intento pensar rápido, esta trataba de evitar que fuese a su oficina tratando de hablar con ella pero lo que hacia era enojar a la vieja mujer, quien la pasa de largo para ir a su oficina.

-¡Ho, no! –Exclama Leelu siguiendo a la vieja jalando a Murtagh nuevamente-

-Me siento como un muñeco vudú…-suspiro el pobre joven, quien al voltear ve la oficina llena de muñecos vudú- y hablando de eso…

Leelu solo se oculto detrás de la puerta y podía escuchar los gritos de enojo de Lirio dentro de la habitación.

-¿¡Que es esto? –grita enojada Lirio-

-Vieja… Vieja… -repetían todos los muñecos en coro-

-Solo alguien en esta familia…-dijo con la venita- ¡Rumiko! –grito enfadada a mas no poder-

Después de controlar toda esa “invasión de muñecos” esta reúne a toda la familia en la sala y nota que faltaba la que parecía “la invitada de honor”.

-¿Dónde esta? –pregunto seriamente-

Leelu solo temblaba sentada en una de las sillas de madera, el resto solo se miraban algo desconcertado y con un miedo atroz a la vieja, ya que cuando esta se enfada con alguien es lo peor que le puede suceder al culpable de su enfado.

-No repetiré mas, ¿Dónde esta Rumiko? –dijo en un tonó mas alto-

-Se-señora, no sabemos donde esta –contesto nerviosa Alysa- no la hemos visto mas desde la llegada de Murtagh y ¡ah! –es interrumpida por que la mujer golpea el suelo con su bastón-

-Tienen tres días para buscarla, o si no los castigare a todos y a ti también Murtagh –decidió la vieja Lirio quien se retiro de la sala-

Los familiares estaban preocupados y de inmediato empezaron a buscar a la pelinegra, pero por parte de esta había escapado de casa, pero no muy lejos, solo lo suficiente para no ser encontrada, esta decide pasar la noche en el bosque, pero cada paso que daba por este escuchaba otros detrás y al voltear una sombra la tapa.

 

Re: [Original] ~Vettel Karma~

Por permiso de Artica, pongo la conti que debo. Así ya no estará tan vacia esta ronda xD

***********
Sebastián se rindió rápidamente a la busqueda. Estaba más preocupado por los exámenes que vendrían, debía mantener su promedio a cualquier costo, era parte de su reputación. Además su hermano, hermanas y primas, serían más que suficientes para encontrarla. Aun así, no lograba imaginar como a alguien en su sano juicio se le cruzara por la cabeza hacer enojar a la abuela.

-¡Ah~! Ser castigado por culpa de la niña más boba del universo. A veces me pregunto si esa niña realmente tiene cerebro –
-¿Te refieres a tu primita Rumiko? –escuchó una voz femenina conocida venir desde el interior de la habitación.
-¿Allison? ¿A que hora tu…? –abrió de golpe la puerta pero en el interior no había nadie. Observó con más detenimiento pero más parecía que aquella voz que escuchó hace unos segundos, no era más que una alucinación.
-¡Acá arriba! –guió la voz hasta que la mirada de Bastian se topó con la mitad de Allison pasando a través de la pequeña ventila de la habitación.
-All ¿qué haces? –preguntó con un dejo de incredulidad en su tono.
-¿Qué no es obvio? Ayúdame a entrar, creo que me atoré~ –dijo la joven castaña mientras intentaba zafarse.

Una risita se le escapó al de orbes zafiros. No podía creer que la chica fuera capaz de llegar tan lejos.

-¡No te rías y ayúdame! ¡Esto lo hago por ti! No lo olvides
-¿Por mí?
-Cállate o le diré a todos lo que sientes por Lore.
-¡Allisson!
-¡Sólo ayúdame y rápido!

Sin otra opción el castaño se empeño en zafar a la chica de la pequeña ventila. Acercó una silla para estar a la altura y así tomarla de los brazos para halarla hacia dentro.

-¿Cómo pensaste en entrar así? Si estas tan gorda.
-¡EN TU VIDA ME DICES GORDA DE NUEVO Y TE JURO QUE DESEARAS ESTAR MUERTO!
-No te enojes, es verdad –antes de que Allison pudiera contestarle, la chica logró liberarse, pero ante la fuerza, Bastian perdió el equilibrio cayendo, y junto con él a la castaña.
-Menos mal que caí en un Basbas tan suavecito.
-Bá-ja-te –dijo el castaño con el poco aire que le quedaba.

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Minutos después… Sebastián puso al tanto de lo que para el momento, Alisson ya sabía algo, no obstante actuaba como si no lo supiera hasta comprender la situación y así poder manipular la información.

-Así que Rumiko huyó… -inquirió en tono burlon
-¿Sabes algo al respecto?
-Tal vez sí, tal vez no –lo ojos de la chica brillaron
-Allison, no hay tiempo que perder, es mi cuello y mi tiempo libre lo que está en juego.
-No está mal que aprendas a hacer las labores del hogar -alegó y recibió una mirada de molestia por parte del castaño-. Sebastián, sabes que un chico tan guapo como tú…-comenzó a jugar con el cuello de la camisa- tiene más de un truco bajo la manga -.

Dicho esto la castaña acercó sus labios hasta los de Bastian y suavemente los rozó. Suficiente para hacer que el joven Dunkelmeer cediera, entrecerrando los ojos y preparándose para un beso posiblemente más profundo. Y así fue, aunque no como el chico lo esperaba, tan sólo la chica presionó un poco más sus labios a quien era su "enamorado conveniente". Pero el flash de su camara hizo que el pequeño Dunkelmer, se alejara de ella.

-¿Qué haces?
-¡Mira! ¡Seguro que con esto Anto-chan se infartara! –dijo victoriosa la joven, mientras mostraba al chico la fotografía que había tomado del beso.
-Devuélveme eso –gruñó junto con un vano intento de arrebatarle la cámara.
-Me pregunto que cara podría Rain si viera esto.

La mirada enfada del chico era una de las pocas cosas que Allison disfrutaba, pocas veces había tenido la oportunidad de hacerlo enfadar en serio.

-Está bien, mi querido Bastian, te ayudaré con el caso de tu prima desaparecida. Pero a cabio necesito que me ayudes con algo para mi investigación.
-¿Que cosa? –preguntó inocente, sin saber los extremos a los que la chica podría ser capaz de llegar en esa clase de situaciones.

La McClain se inclinó hasta el oído del castaño y murmuró varias cosas, que hicieron que de inmediato el rostro de Sebastián se pusiera rojo como tomate. Se alejó de ella enseguida observándola con cierto dejo de sorpresa y vergüenza.

-¡Nunca! –negó con firmeza. De ninguna manera aceptaría participar el la obra de teatro para niños, que el grupo de caridad de la escuela al que asistían estaba organizando, y mucho menos con el ridículo disfraz de conejo. ¿Qué haría si Rain lo viera así? ¿Qué haría si alguien de la familia lo viera así?
-Entonces busca a Rumi-chan por tu cuenta. Tal vez, alguien más en esta casa tenga las suficientes agallas para poder hacerme ese favor -contestó indignada sin razón aparente.

Solo existía una razón para que ella le pidiera algo así. Seguro cambió información con alguien que organizaba aquello, y como pago iba a hacer que él, Sebastián Dunkelmeer, participara. Todo tenía sentido y con ello la determinada decisión del castaño. Pero antes de que pudiera decir o hacer algo más, un grito aterrorizado los alertó.

Tanto Bastian como Allison salieron de la habitación para ayudar a la dueña de aquella ”llamada de auxilio”. Cuando entonces se toparon con que Leelu estaba en el suelo, Murtagh a un lado igualmente tendido y Shammy ayudando a la infortunada bruja a levantarse.

-¿Qué fue lo que ocurrió? –preguntó Alisson al trío, parecía que Bastian estaba muy ocupado asesinando a Leelu por acercarse demasiado a su hermano, como para hacer la pregunta por sí solo.

 

Re: [Original] ~Vettel Karma~

—¡Rumiko!—grita tétricamente Casper sobre la chica haciéndola saltar—Jeje ¡te sorprendí!

—Si le cuentas a alguien…

—Bueno, pues ya no es un secreto—agrega el fantasma y la pelinegra puede notar que el resto de sus hermanas la observan de forma severa.

—Deberías estar muy consciente de que no pensamos pagar por tus infantilerías—inicia Camila cruzándose de brazos.

—¡Si! Tienes que aprender a ser responsable de tus actos, molestar a la abuela no es la cosa más inteligente que puedas hacer—agrega Antonella—¿Qué no entiendes que NUNCA podrás ganarle?

—No lo hago para ganarle nada a esa vieja—se defiende Rumiko.

—¿Entonces? No entiendo porque tanto odio, si la abuela es la que compra tu cosas, nos provee de un hogar, comida y mantiene unida a nuestra familia, de no ser por ella, las del menor Dunkelmeer hace mucho que hubiéramos salido de la cada—intenta convencerla Leelu pero sólo causa lo contrario pues su hermana le dirige la peor de las miradas de desprecio.

—¡¿No me digas que a ti también te compraron?! Creí que eras diferente Leelu…

—¿Compraron?— Alysa levanta una ceja al escuchar el reclamo de su hermana.

—Esa vieja puede ser tan detestable y todos ustedes no hacen más que lamerle las botas, no puedo creer que sean tan…

—¡Basta!—Habla por fin la mayor de las hermanas. Rain muestra una expresión severa, más que nada de autoridad la cual ha ganado tanto por su habilidad como por sus casi siempre certeros argumentos—Cuando tengas la edad suficiente para mantenerte y no hacer este tipo de tonterías, puedes irte de casa, mientras, tienes que seguir las reglas, todos lo hacemos. Somos una familia de tradiciones, somos BRUJAS Rumiko, si la abuela lo deseará, estarías a más de 20 metros bajo tierra.

—Chicas… necesitamos regresar, ya casi es hora de la cena—Todas asienten, hasta una no muy resignada Rumiko. Casper se había mantenido en silencio durante todo ese tiempo para no incomodar aun más a su amiga.

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Como es típico, después de la cena todos los miembros de la familia se dirigen a la puerta de la oficina de la matriarca. Lo único diferente es el nombre del licántropo en las casillas de tareas. Para beneficio de los inquilinos, este último toma el lugar de muchos de ellos a lo largo de la semana. Pero esa no es la única novedad, la abuela ha dejado tres notas anexas al calendario, en cada una se describe una tarea y los miembros de la familia que involucrados.

[FONT=&quot]Mansión Marth[/FONT]
[FONT=&quot] Vieja mansión a las afueras del sur de la ciudad. Cliente: Augusto Marth, hombre de economía media-alta. Su familia fue expulsada de su propia casa por sus “antepasados”. Descripción: exorcizar todas las almas en pena, los integrantes de la familia han identificado a 4 diferentes entes; un anciano, una mujer y dos niños. Mansión de tres pisos, sótano y ático. Nota: revisar el jardín[/FONT]
[FONT=&quot]-Sebastián[/FONT]
[FONT=&quot]-Shamuel[/FONT]
[FONT=&quot]-Lilith[/FONT]
[FONT=&quot]-Leelu[/FONT]
[FONT=&quot]-Rumiko[/FONT]

[FONT=&quot]Amanda Sheiler[/FONT]
[FONT=&quot]Cliente: Amanda Sheiler. Descripción: en busca de un nuevo esposo, como candidato tiene en la mira al político Roy McClain. Nota: discreción… suena fácil pero no quiero que fallen.[/FONT]
[FONT=&quot]-Elizabeth[/FONT]
[FONT=&quot]-Camila[/FONT]
[FONT=&quot]-Antonella[/FONT]

[FONT=&quot]Familia Scott [/FONT]
[FONT=&quot] Clientes: Pareja Scott, su hija no ha vuelto ha hablar desde que perdieron a su mascota. Descripción: Su adorable mascota “Dulce”, hurón blanco, desapareció hace una semana a causa de un descuido de la madre. Nota: tendrán que indagar en lugares inimaginables. [/FONT]
[FONT=&quot]-Lorraine[/FONT]
[FONT=&quot]-Alysa[/FONT]
[FONT=&quot]-Murtagh[/FONT]

—¡Exorcismo! ¡Y de por lo menos 4 entes! No es genial —Rumiko salta sobre Leelu emocionada por su tarea, en cambio, su hermana no parece tan exaltada, aunque la idea de ir con Shamuel tampoco la desalienta en lo absoluto.

—Beth…—Lilith le dedica una mirada rápida a su hermana pues es la única de la familia de los Altos que no irá a la mansión Marth.

—No hay problema, imagino que la abuela designó las actividades de acuerdo a nuestras habilidades—A pesar de haberlo pensado así, hubiera deseado otro equipo.

—Entonces podemos cambiar a Leelu por ti, ella también sabe vudú—agrega Antonella pues no le agradó el tono que usó su prima.

—¿Ah?

—Si, sino quieres estar con nosotras, otro miembro de la familia puede ocupar tu lugar.

Una pequeña pero voluminosa vena surge en la frente de la alto Dunkelmeer pero antes de que pueda lanzarse hacía sus primas, Orona, su tía, la abraza por la espalda mostrando la ya típica sonrisa de eterna alegría en su rostro.

—Yo se que lo harán bien chicas, su abuela les dio a todos un trabajo equilibrado y espero que todos lo cumplan antes de una semana o los clientes no estarán muy contentos.

Beth suspira aun en el abrazo/obligado de su tía. Aunque en las instrucciones no hay más detalles, los jóvenes Dunkelmeer saben que deben comenzar lo antes posible con sus respectivas misiones.
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D= Conti... es muy corto y raro y no muy rlz... pero ando en finales y traté de darle algo de dirección xP algo así. Durante las misiones, la abuela quitará el sello de la segunda habilidad de sus ramas, =3 así que pueden poner como van desarrollando dicha habilidad.

8^^8 Dudas y eso por aquí o en el grupo.

 

Re: [Original] ~Vettel Karma~

Hola.
Traigo la conti, con este ffc siempre estoy inspirada D:

Misión: Amanda Sheiler busca novio.

Estaban todos en el garaje listos para irse; el grupo que se dirigía a buscar el hurón se subieron al coche de Lorraine, la cual no pudo decirle que no a Murtagh que se subió ilusionado al asiento del conductor; el grupo que se dirigiría a la mansión se subió al coche de Elizabeth con Shamuel conduciendo.

Una vez que se fueron, no sin que antes Lilith intentara hacer que su hermana mayor fuera con ellos, Camila no pudo detener las ganas de preguntar:

-¿Por qué se van ellos en tu coche y nosotras en el de Shamuel?- preguntó intrigada.

- Por el simple hecho de que resultaría muy raro ver mi coche en la casa de los McClain cuando vayamos- respondió Beth mientras arrancaba el coche.

Tras unos 20 minutos ya habían llegado a la casa de Amanda Sheiler. Camila y Antonella decidieron interrogar a su prima, había venido sin rechistar y, aún más raro, sin molestarlas.

-¿ Por qué estas tan tranquila, o sea tu no quieres venir con nosotras y no has dicho nada?- preguntó Antonella respaldada por Camila.

-Simplemente por que comprendo a la abuela, hiendo vosotras dos tiene que mandar a alguien con ellas que dirija y que se ocupe de hacer las cosas bien. Porque si solo vais vosotras seguro que esto sería un desastre- las respondió con una sonrisa para luego dirigirse a la puerta de la mansión, dejando a ambas Dunkelmeer enfadadas.

Tras tres timbrazos, la misma Amanda Sheiler salió a recibirlas y, tras hablar un rato con ella de forma informal y descubrir lo bien que se llevaba con la Dunkelmeer más pequeña, se dirigió al tema principal.

-Espero que consigáis que Roy McClain caiga rendido ante mi la próxima vez que le vea, no dudo para nada de vuestra capacidad para hacerlo, sólo os pido eso: haced que se enamore perdidamente de mi-dijo con una sonrisa, si no la hubieran escuchado,
cualquiera pensaría que lo que esa mujer estaba diciendo era donar dinero a la caridad.

Las Dunkelmeer asintieron, se levantaron y se despidieron de ella, tras prometerla que el trabajo estaría cumplido en poco tiempo.

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Sólo les quedaban alrededor de 100 metros para llegar a las puertas de la casa McClain pero, antes de llegar, Beth paró el coche y se dirigió a sus dos primas.

- Camila acompañaras a Antonella a la casa y diréis que venís a entregar a Allisson unos apuntes ya que Bastian no puede ir porque esta en la tienda, cuando entréis, alejadles lo más posible del despacho de su padre. Como escusa, Antonella tirara algo que este lejos del despacho y cuando os halláis alejado lo suficiente, Camila me dirá por telepatía que entre. Me colaré en el despacho, echaré la poción y os diré por la telepatía de Camila que volváis, luego, desde el coche le haremos vudú para que se beba la poción y se dirija a donde esta Amanda ¿entendido?- les explicó Beth.

Las dos Dunkelmeer asintieron, tenía pensado quejarse de algo, pero el plan de su prima no tenía ningún fallo aparente.

Llamaron dos veces al timbre y unos de los sirvientes de la casa les abrió.

-¿Qué desean?-preguntó cordialmente.

-Vengo a entregarle estos apuntes a Allisson-le respondió Antonella con una sonrisa.

El mayordomo dudó durante unos instante, pero luego recordó que Allisson había faltado unas horas a clase porque fue a hacerse unos análisis. La McClain le había dicho que un chico llamado Sebastián vendría a entregárselos.

- Perdone, pero la señorita especificó que un chico llamado Sebastián vendría a entregárselo-les dijo.

Antonella no podía creer que esa niña les estuviera poniendo las cosas tan difíciles, cuando la encontrara…

-Somos sus primas, venimos nosotras porque él esta trabajando en la tienda y no podía venir-le explicó Camila, ganándose el aprobado del mayordomo, que las guió hasta donde estaban ambos McClain.

Ambos se sorprendieron de ver a las dos Dunkelmeer hasta que Camila les contó la escusa mientras Antonella encontró una escalera fuera de la mansión que cumplía los requisitos: estaba lejos y hacía el suficiente ruido como para llamar su atención.

El estruendo de la escalera alerto a todos, sobretodo por el grito humano que la siguió.

Camila miró acusadoramente a Antonella.

-Ups- susurró, no se había fijado en la persona que estaba usándola- Vamos a ver que ha pasado, ha sonado muy fuerte, alguien puede haberse hecho daño…-comentó preocupada detonando sus dotes de actriz.

Camila aprovechó ese momento para notificarle a su prima que entrara.

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Beth se coló por la ventana que daba a la lavandería, cogió un traje de sirvienta y miró detenidamente el vestido.

-Es por una misión, a situaciones desesperadas medidas desesperadas, no me queda otra…”- pensó y, tras tragar saliva, se cambió.

Salió de la lavandería con una bandeja, una taza de café y unas galletas, se acercó disimuladamente a la puerta del despacho y, tras abrirla, entró en ella.

Un enorme despacho de madera la recibió, las estantería que cubrían la pared estaban llenas de libros. Un enorme escritorio cubierto de papeles perfectamente organizados y, como no, con una enorme silla negra de cuero.

Beth dejó la bandeja y sacó del bolsillo del traje un funda, al abrirla, había varias de sus pociones y, entre ellas, la poción que antes de salir habían preparado ella y Camila. Echó 7 gotas que eran las necesarias para que la poción surgiera efecto en poco tiempo, después cogió la bandeja, abrió la ventana y salió.

Se dirigió por el jardín trasero a la salida y se llevó una gran sorpresa al ver a Antonella y Camila acompañadas de los McClain, tres sirvientes y el mayordomo. Se dio la vuelta discretamente intentando no llamar la atención de nadie, dispuesta a irse corriendo.

-!Oye, ven tú también a ayudar!-la voz del McClain la gritaba y unas ganas de darse la vuelta y dejarle inconsciente casi la dominaron, casi.

Por el rabillo del ojo vio a Antonella sorprenderse y a Camila apunto de estallar en risas por ver a su prima vestida de sirvienta.

-Señor, esa chica no es ninguna de vuestras empleadas-le dijo a Ethan el mayordomo.

Justo en ese momento Camila se acercó casi corriendo a su prima junto con Antonella diciéndoles una vaga escusa: nosotras la interrogaremos.
　
-!Qué haces aquí!-le gritó Camila, haciendo que la del Alto se enfadara.

-¿Qué que hago aquí? No me habías dicho nada de que ibais al jardín es tu culpa niña- respondió Beth, estaba empezando a enfadarse y eso no era bueno para ellas.

-!No discutáis hay cosas más importantes, como que los McClain se acercan!-gritó también Antonella.

-¿Elizabeth?-preguntó Allisson intentando no reírse y a la vez desconcertada, tenía dos grandes preguntas ¿Qué hacía Elizabeth en su jardín vestida de sirvienta? Y , sobre todo ¿Dónde estaba su cámara?

Ethan, al verla, no pudo contener las ganas de reír, en verdad era una muy buen sorpresa encontrársela y más así, aunque sus risas cesaron tras recibir una mirada que mataría a cualquiera de la Dunkelmeer.

Antonella se giró y comenzó a zarandear a su prima pidiéndola explicaciones y, en uno de esos movimientos, uno de los frascos de pociones salió volando por los aires, atravesando el cristal de una pequeño mausoleo y, seguramente, rompiéndose.

Beth sacó rápidamente el estuche de las pociones fijándose en la que faltaba, su piel se torno más pálida de lo normal, agachó la cabeza ocultando sus ojos.

-Mierda- soltó Camila de golpe, poniéndose detrás de la McClain con una sonrisa. Su prima se enfadaba sobretodo con su hermana, eso sería muy divertido.

-Antonella cariño, ven aquí un momento- dijo con voz melosa la morena, mientras sonreía “encantadoramente” y abrazaba a su prima “querida”.

Antonella tragó saliva, esperando que algún milagro la salvará de esa Beth que,
comportándose tan amable, daba más miedo de lo normal.

Y, como si alguien la hubiera escuchado, algo aparto la atención de ella, aunque no fue sabía si era un milagro, sólo sabía que era: zombies.

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Espero que les haya gustado, si hay algo mal me avisas ArticA, igual si no entienden algo. Si hay faltas ya sabes, no me apetece releerla xD

Como sé que lo he dejado díficil y tengo algunas ideas sobre como continuaría, Heather ( ya que Hiki tiene que escribir sobre su per) si quieres que te ayude para planear la conti y explicarte algunas cosas que no comento en esta conti y serían importantes para la otra, estoy a tu entera disposión :) Es para que se te haga más fácil.

Bye :3