Harry Potter Surgerum

Tengo un apk genial que se llama Ideas para escribir, es un lanzador de ideas y la verdad es genial, este two-shot es resultado, mañana pongo el siguiente :D.




Esa sería la única vez que Hermione acudiría al despacho de Dumbledore, la profesora Mcgonagall había susurrado la contraseña y ella se encontraba tan confundida y un tanto temerosa, intentando averiguar la razón por la cual la habían llamado. Su mente estaba con Harry, su amigo destrozado ahora que había perdido a su padrino con que el soñaba vivir y quería tanto.

El grifo pétreo comenzó a girar, como ella a ascender y entonces aparecieron los cuadros de antiguos directores observándolo y se sobresaltó al escuchar al Fawkwes aleteando sus alas escarlatas.

—Señorita Granger bienvenida—la saludo el director con una sonrisa pasiva mientras al mismo gesto le hacía un gesto amable a la profesora para que se retirara.

Sus ojos la observaron por debajo de sus gafas de media luna y le indicó que tomara asiento.

—Señor nosotros, yo lamento haber sido tan imprudentes, de lo contrario en el ministerio…

El director de Hogwarts levantó su mano para indicarle que se detuviera y ella lo hizo.

—Realmente ha sido un tanto impetuoso todo el plan que ha ideado, así es sé que fue idea suya, el que Harry les enseñara a todos ustedes a defenderse, ha sido una verdadera maravilla han podido enfrentar magos terribles y para infortunio de nosotros, no será la última vez.

Dumbledore había adivinado y contestado varias coestiones y preguntas que giraban por su cabeza, ella lo observó anonadada.

—Me temo no tener el tiempo suficiente, pero no sabemos si contemos con él, hay algo que tiene hacer para mí—sonrió amigablemente y ofreció unos caramelos rojos que parecían dar saltitos.

El corazón de la chica latió rápido mientras escuchaba y con justa razón. Lo que se le iba proponer era algo tal vez mucho más peligroso que lo el propio Harry había enfrentado ocasiones anteriores.

—C-claro señor, lo que necesite—balbuceó la chica intentando tranquilizarse.

—Excelente, espero que siga manteniendo esa opinión luego que explique lo que hará, sepa que no lo pediría la Orden, si no fuera completamente necesario y entenderemos si se niega. —esto último lo dijo serio y mientras tomaba algo de su bolsillo se acercó a explicarle.

Los ojos de la chica se abrieron, se mordió el labio y su piel se erizó con cada palabra que le decía Dumbledore, presionó los puños y pensó en sus amigos, su lealtad.

—¿Esta seguro señor? —preguntó Hermione— ¿está seguro que yo puedo hacerlo?.

Dumbledore extendió su puño cerrado hacia ella abrió sus manos el pequeño objeto calló entre ellas.

—Dos giros bastaran, no creo que tenga que recordarle las reglas, todos sus profesores me hablan de su prodigiosa memoria. —le indicó el director— Se que podrá.

 

Bueno al final se alargó mucho pero me gustó mucho como quedó jeje

Parte 2:

Hermione tuvo que abrir más los ojos en lo que estos se acostumbraban a la luz, una figura pasó corriendo a toda velocidad al lado de ella y tuvo que cubrirse la boca al ver de quien se trataba.

<<—No ser visto— repitió una voz en su cabeza.>>

No recordaba haber estado jamás tan nerviosa, cualquier deber y examen no se comparaba ni un poco a esto, otras tres figuras pasaron y se dio cuenta que era el instante exacto para actuar.

Sintiendo su respiración entre cortada se resistía a ser cegada por el brillo que destellaba a sus lados, tenía que hacerlo en un momento exacto.

Nadie sabía que había ocurrido con la última persona que fue vista mientras viajaba en el tiempo, pero de las pocas notas que Hermione pudo encontrar solo unos indicios que habían implicado que los gira-tiempos estuvieran a punto de ser prohibidos y dichos registros solo estuvieran en la sección prohibida.

—Realmente no quiero averiguarlo—se susurró a si misma mientras miraba hacia el umbral que se habría frente a ella.

Resonó un silbido por su oído un “experliarmus” estuvo a punto de impactarla, ella se agacho asustada mientras sintió su corazón en el cuello.

—Eodemus Pell…—susurró la chica y de la varita surgió una niebla suave y oscura, ella miró hacia abajo y se vio que era del mismo color que el departamento de misterios.

El hechizo desvanecedor lo había usado en Harry para sacarlo de la casa de sus tíos la Orden, ahora serviría para algo que en esos momentos había sido insólito para los más experimentados.

Este pensamiento la emocionó y la aterró al mismo tiempo dependía tanto de lo que lograra en esa misión y solo ella era la que era la única que podía hacerlo.

Miró hacia el cielo el enfrentamiento entre el las luces fugaces y las nieblas oscuras de los mortífagos.

—La orden llegó…es momento…—musitó y corrió hacia el lugar donde tenía que estar. —Cada paso, cada aspecto tenía ser exacto— declaró nerviosa.

—¡Así se hace James! —escuchó exclamar a Sirius dirigiéndose a Harry jovial—¡ No te detengas! ¡Estamos por derrotarlo!.

Harry lo miraba sonriendo, no recordaba haberlo visto así de feliz jamás. No pudo evitar sentir melancolía.

Una segunda figura surgía unos metros lejos de ellos, esa figura tortuosa y enloquecida, solo podía ser Bellatrix Lestrange. Levantaba su mano lazando un hechizo.

—¡Protego! —exclama Harry Potter leyéndole el pensamiento.

—¡Harry, sujeta bien la profecía, toma a Neville y corre! —gritó Sirius, y fue al encuentro de Bellatrix. Harry no vio lo que pasó a continuación, pero ante su vista apareció Kingsley que aunque se tambaleaba, estaba peleando con Rookwood.

Lanzaban un hechizo tras otro contrarrestándose se miró a sí misma no muy lejos, su corazón le latía con fuerza, presionó su varita levantándola ocurriría en cualquier momento.

Observó el velo atreves del arco y le hizo sentir escalofríos al sentir que la llamaba, Harry y Luna le habían dicho que escuchaban voces dentro de él y que siempre había existido. La chica presionó los labios y corrió a toda velocidad levantó su varita y pronunció claramente.

—¡Miregius! —exclamó Hermione dirigiendo su varita a Sirius.

El cuerpo de este pareció dividirse como la vista doble que se produce al ver algo muy de cercas. La chica en fracciones de segundo uno segundo floreo a la varita mientras se acercaba.

Segundos después Bellatrix Lestrange veía desaparecer al animago por aquel espectral velo al igual que todos incluyendo a Harry Potter.


*************************************

Hermione se vio desaparecer a sí misma en el pasillo mientras Mcgonagall la guiaba a través del grifo de piedra, el sobresalto que le había producido todo aún no le permitía recuperarse del todo, pero entre el agotamiento se asomaba una sonrisa llena de satisfacción, lo había logrado.

Respiró y sintió cierta opresión en el pecho al pensar que nadie nunca lo sabría, para la mayoría ese era un día lleno de tristeza.

Cuando subía el último escalón escuchó un ladrido y al asomarse por la ventana vio a un enorme perro negro alejarse por los jardines de Hogwarts corriendo a toda velocidad.

<<Las cosas están por cambiar demasiado señorita Granger, no hay otra forma en que sea libre, no hay otra forma de asegurarnos que Harry siga con vida>>.

Resonaron en su cabeza las palabras de Dumbledore.


***********************************************
Una hora antes

Sirius Black comenzaba a recuperar su color natural, casi se había visto tentado actuar cuando Voldemort arrinconó a Harry y se disponía a matarlo, pero Hermione le explicó que Dumbledore llegaría a salvarlo, que podía confiar en eso.

Minutos después apareció pero desde donde se encontraban solo podían supone lo que ocurría.

—¿Entonces yo hubiera muerto? —preguntó Black cabizbajo. — terminé confiándome demasiado…¡Harry!, ¿Cómo lo tomó?....

—Él…Sirirus…si pudiera ser distinto…—dijo Hermione mientras se le cortaba la voz.

Él esbozó una sonrisa pasiva, sabía perfectamente que no había otro camino.

—Dumbledore siempre ha sido un hombre sabio, he aprendido a no desconfiar de sus planes, si me creen muerto, el ministerio y Voldemort dejaban de buscarme—miró al piso y sus ojos se cristalizaron— Que forma de conseguir mi libertad…

Hermione le dio una palmada también a punto de llorar.

—Serás el guardián de Harry, uno insospechable…tal vez en algún momento…—Hermione no quiso terminar la frase.

—Tal vez al final de todo esto pueda volver, ojala lo entienda—la miró intentando esbozar una sonrisa. —¿Cómo lo lograste? —preguntó con cierto entusiasmo renovado.

—¿Salvarte? —preguntó Hermione sonriendo un poco, inevitablemente se sentía orgullosa de su desempeño—Miregius

—¡¿El hechizo duplicador?!

—Y Aresto Momentum.. —lo miró un poco sonrojada—dijo Dumbledore que sería la única capaz de aprenderlos con rapidez, él pensó en esto desde que supo que había sido un “Petrificus Totalus” el que te había lanzado Bellatrix y fue el velo lo que te había matado.


—Te lo dije una vez, eres realmente la bruja más maravillosa de tu edad.

*********************************

Se cuenta que algunas ocasiones algunas de sus amigos y James Sirius escapa con la capa de padre heredada por su abuelo a jugar con un enorme perro negro en las cercanías de Hogsmeade, espera con ansias el verano de su primer año, para contárselo a su padre.