Hace tiempo me encontré con este arco argumentan antes de que Steve cediera el manto del Capitan, la verdad es una de las mejores historias que he leído. Por el día de las madres, hice un pequeño relato que entenderan cuando lo lean por que va para este día, espero les guste. Steve Rogers respiraba agitado presionando los dientes en un vano intento de aminorar el ardor y dolor de su pecho por la herida que se extendía él acurrucando protectoramente a un niño que lo miraba aterrado por su herida, pues en los páramos de la dimensión Z donde habitaban los más retorcidos sueños y deseos de un hombre demente era inclemente, ningún día había sido tan duro como ese, las mutaciones de Zola estaban decidido a acabarlos. El niño en sus brazos era el vástago de Armin Zola, su enemigo en esa dimensión, lo había salvado de ser consumido por la misma oscuridad y locura, ahora era lo más importante para el Capitán. Escuchó un sollozo y Steve abrió los ojos preocupado por el pequeño luego de comenzar a dormitar, tendría unos 4 años el niño y este mundo era demasiado para él. —¿Te lastimaron? ¿te duele algo? —preguntó el soldado mientras le retiraba a mata de pelo del rostro iluminado por la hoguera frente a ellos. —No, yo…yo siento…—musitó el pequeño derramando lágrimas por sus mejillas llenas de hollín. —¿Por qué lo sientes? —preguntó Steve extrañado. — Por hacerte débil— susurró el niño ocultando su rostro avergonzado. —¿Pero de que estás hablando amiguito? Tu…. —¡El protegerme te hace débil! Recuerdo tus cuentos de lo que hacías antes de venir aquí, lo fuerte que eras, lo invencible que eras, nunca te hirieron y ahora…—su voz se quebró y no pudo seguir. El Capitán América sonrió pasivamente y lo miró de nuevo meneando la cabeza, el chico era duro y era lo que menos podía esperarse de un niño criado en un mundo tan hostil y por un hosco soldado como él. Más sin embargo detectaba algo más, era inevitable, instintivo, los niños ven a sus padres imponentes y verlos heridos les rompe el corazón y él era su padre. —Te equivocas— respondió al fin pues algo había venido a su mente con el ultimo pensamiento, un recuerdo que creía perdido—Tener alguien a quien cuidar y por preocuparte te la mayor fuerza de todas, eso me lo enseño alguien que me hizo quien soy. El niño lo miró boquiabierto tratando de imaginar cuál de los superhumanos había sido su mentor de el hombre que representaba justicia, bondad, libertad y fortaleza. — Fue mi mamá, ella me enseñó a hacer lo correcto en mi vida, por ella intento ser un buen padre para mí, ella fue el impulso que llevó a creer que tenía la fuerza para ser algo más, tú haces fuerte amiguito y espero lograr lo mismo contigo— el niño sonrió tranquilo y cerró los ojos acurrucándose. Steve Rogers dirigió su mirada al cielo como si esperara encontrar alguien en él. Entre las estrellas se formó la imagen de su madre frente a él. Años cuando era un niño, lo protegía con su cuerpo, deteniendo con las manos la mano brutal de su padre que buscaba azotarlo con un cinturón recibiendo ella el golpe en el antebrazo, decidida sin un gramo de dolor, obteniendo fuerza sobrenatural no solo para expulsarlo hasta la puerta si no para luchar con el machismo de la época que le dictaba obediencia ciega ante cualquier trato. El Capitán América encontró en esta acción su camino para convertirse en un héroe, en símbolo, en vengador y ahora un buen padre.
Hola gracias por invitarme. Es una historia bien presente para la fecha del día de las madres hace una semana, esto demuestra que la figura materna es tan importante para cualquier ser humano, incluso todos los niños creerían que los héroes de marvel lucen invencibles pues no es así, dentro de este mundo de ficción todos son igual de humanos y todos tenemos enseñanzas de nuestra madre y sabemos como valorarla. Muy buena la enseñanza y el ejemplo en esta historia.
Me encanta como el Capitán describe tan bien lo que es ser un héroe, el proteger a otros a costa del dolor propio, bien infundido por los valores y el recuerdo del amor maternal que recibió. Es muy emotivo.
Y es que al final las madres son los más importantes para los niños, y no tan niños. Por supuesto, no siempre es así, pero en la mayoría de los casos, las madres siempre han sido y serán lo más importante para una persona. Nos dan la vida y nos cuidan con todo su ser, lo dan todo para que crezcamos felices y seamos buenas personas, lo que una madre sufre por su hijo no está escrito. El hecho de que hayas hecho un escrito en su honor me parece genial, sobre todo basado en este mundo. Como ya han dicho por ahí, parece que los superhéroes son invencibles y no dudan en ningún momento, pero también han sido niños, también han tenido o tienen una madre (o no, pero eso ya depende) a la que aprecian y que los ha hecho ser quienes son, buenas personas que protegen a los débiles, como ellas siempre han hecho con ellos. Y me parece muy lindo, de verdad. Quizás sea yo una niña de mamá y por eso me emociono tanto con el día de la madre y con apreciarlas, pero bueno. Y pues nada, el escrito es simple pero tierno. Llegamos a descubrir un poco más del pasado de este superhéroe gracias a un niño y nos damos cuenta como no todo es sencillo, ni siquiera para ellos. Temática interesante y fácil lectura, felicidades. ¡Sigue así!
