Long-fic de Inuyasha - La Hija del Caos

Re: La Hija del Caos

Gracias por todo el apoyo chicas y aquí traigo el siguiente capítulo. :)

En la casa de Kagome vemos a un joven despertándose tranquilamente con los primeros rayos del día. Keikun se vistió y cogió sui katana y se dirigió a la habitación de Kagome.

Keikun: “Vamos a ver si puede detectar mi presencia y el peligro aún estando dormida”

Sin más dilación Keikun se aventuró a atacar a Kagome con la katana pero antes de que el arma la tocase, ella levantó una mano y paró el ataque cerrando su mano alrededor de la katana. En ese momento Kagome abrió los ojos y Keikun se asombró por lo que vio.

Los ojos de la joven ya no eran de un cálido marrón sino que ahora eran rojos como la sangre, pero antes de que pudiera fijarse bien Kagome parpadeó y sus ojos volvieron a su marrón original.

Kagome: ¡¿Se puede saber que estás haciendo en mi habitación a estas horas de la mañana?!

Keikun: Bueno yo intentaba averiguar si podías esquivar mi ataque y veo que lo has logrado.

Kagome en ese momento se fijó en su mano y vio que tenía fuertemente agarrada la katana de Keikun, enseguida la soltó y comprobó que tenía una herida en la palma de la mano, pero lo que los sorprendió a ambos era que la herida se empezaba a cerrar, curándose así casi al instante.

Keikun: ¿Qué has hecho?

Kagome: No lo sé, de repente sentí un agradable calor en la palma de la mano y ésta se curó.

Keikun: Deben de ser tus poderes de diosa, que gracias a todos los entrenamientos se está empezando a manifestar.

Después de esto ambos continuaron con el entrenamiento y así fueron pasando los días y luego las semanas. Kagome estaba agotada ya había entrenado con tantas personas Keya y su magia blanca, Keikun y sus armas, Alia y sus hechizos de protección, Orphen y su magia negra, eran tantos.

Pasaron los años y Kagome se convirtió en una joven muy hermosa además de fuerte, a sus 18 años había conseguido un enorme poder.

La profecía pronto empezaría y ella tendría que volver al Sengoku, tenía muchas ganas de ver a Sango, Shippo, Miroku, Kirara e Inuyasha. Inuyasha.......durante estos años no había pensado en él, claro que tampoco le había dado tiempo con todos los entrenamientos.

La joven se despidió de su familia y se dirigió al pozo, iba vestida con un traje negro con un dragón dorado que se enroscaba desde la falda del vestido hasta su pecho, quedando la cabeza del dragón justo en ellos. El vestido tenía una abertura que le llegaba al muslo en su pierna derecha, dejando entrever dos sai firmemente sujetas al muslo mediante una cinta, en su cintura por el lado izquierdo se veía una larga katana. En sus muñecas, cuello y cintura estaban los amplificadores de poder, con cadenas plateadas y la gema púrpura.

Kagome: Ya es hora de que vuelva al Sengoku y cumpla con la profecía.
Entonces un aura dorada surgió alrededor de la joven y se lanzó al pozo, como no poseía los fragmentos de la perla tenía que recurrir a sus poderes de diosa para poder cruzar el pozo.

Al llegar al otro lado la joven observó todo a su alrededor, nada había cambiado, todo seguía igual que cuando ella lo dejó, de pronto oyó una voz ya conocida para ella.

??????: Kagome, hija.........

Kagome: ¡Madre cuanto tiempo hacía que no te escuchaba!

Diosa: Lo sé hija pero es que hay problemas en el infierno.

Kagome: ¿Qué ocurre?

Diosa: Los demonios y demás criaturas malvadas ya no obedecen mis órdenes, saben que yo ya no soy la Reina del infierno.

Kagome: Claro como me diste parte de tu poder a mí...........

Diosa: Exacto ahora creen que tú eres su señora.

Kagome: ¿Qué?

Diosa: Sí hija ahora eres tú la reina del infierno y todas las criaturas que habitan en él te obedecerán, pero cuidado el cielo mandará a sus mejores hombres y mujeres para derrotarte y por fin que reine la luz, pero ya sabes que si la luz o la oscuridad llegan a vencer el equilibrio desaparecerá y todo como lo conocemos desaparecerá también. Ahora me tengo que marchar, mucha suerte hija.

Kagome: Gracias madre.

Y sin más Kagome se dirigió al bosque comenzando así la profecía.



Espero que os guste :)

 

Re: La Hija del Caos

Muchas gracias por el apoyo amiga, lo siento pero no podré poner continuación hasta mañana o el lunes :) , me alegro de que os guste el fanfic.

 

Re: La Hija del Caos

Bienvenida a mi fic bloodykisses me alegro de que te guste ^_^

Ahora viene una mala noticia y una buena:

Mala noticia: No me he podido pasar antes porque el ordenador se me estropeó y tuve que formatearlo.

Buena noticia: La continuación de este fic la tenía guardada desde antes, por eso podré poner continuación en este fanfic, en el otro no porque se me borró pero la pondré dentro de poco.

Continuación​

Kagome se introdujo en el bosque y se dirigió a la casa de la anciana Kaede, la echaba mucho de menos. Al llegar la joven vio a una niña siendo atacada por un yokai, entonces Kagome sin dudarlo fue a salvar a la niña.

Kagome: Luz que te ocultas en el fuego concéntrate en mis manos y toma forma.

De la mano izquierda de la joven surgió un arco de fuego y de la mano derecha una flecha de fuego.

Kagome: ¡Arco y flecha de fuego!

La muchacha lanzó una flecha de fuego al youkai que le dio en el pecho, entonces el fuego de la flecha se extendió por todo el cuerpo del youkai y lo quemó por completo. Kagome se acercó a la niña y vio que estaba llorando.

Kagome: Ya está ya pasó todo, no tienes de qué preocuparte.

Niña: Muchas gracias señorita.

Kagome: ¿Dónde está tu madre?

Niña: Está cuidando de la anciana Kaede.

Kagome: ¿Cuidándola?

Niña: Sí, se ha puesto malita y mi mamá la cuida porque sabe mucho de plantas medicinales.

Kagome: ¿Sabes si hay alguien con ella?

Niña: Sí una exterminadora y un monje muy raro.

Kagome: Muy bien vamos con ellos.

Kagome y la niña se fueron a la cabaña de la anciana Kaede y entraron, allí la joven vio a Sango y Miroku, lo extraño era que no habían cambiado mucho. En el centro de la cabaña estaba acostada Kaede con una mujer a su lado.

Sango: ¿Quién eres tú?

Kagome: Menuda bienvenida,¿es así como le das la bienvenida a una vieja amiga?

Sango: ¿Kagome eres tú?

Kagome: Claro que soy yo he cambiado pero tampoco tanto.

Miroku: Señorita Kagome que bien le sentó el cambio.

Kagome: Nise te ocurra tocarme Miroku, que te he echado de menos pero no a tus manos.

Sango se levantó y abrazó a Kagome.

Sango: Me alegro de que hayas vuelto amiga.

Miroku: Yo también me alegro de que volviese señorita.

Sango: Espera a que Shippo te vea fue a recoger unas plantas que le encargó la sanadora.

Kagome: ¿Qué es lo que le pasa a Kaede?

Sango: Aún no lo sabemos pero está muy mal.

En ese momento entró Shippo corriendo y con lágrimas en los ojos, dio un salto y se abrazó al cuello de Kagome.

Shippo: Kagome has vuelto, te olí desde lejos y corrí, sabía que eras tú.
Kagome: Pero que grande y guapo estás Shippo.

Después de tantos abrazos y alegrías Kagome fue hasta Kaede y poniendo una mano en su cabeza y ota en su corazón cerró los ojos concentrándose. Al poco tiempo Kagome abrió los ojos y una luz blanca rodeó a Kaede, cuando la luz se extinguió, Kaede abrió los ojos y se levantó.

Shippo: Kagome la curó.

Kagome: ¿Se encuentra mejor Kaede?

Kaede: si ya estoy mejor, veo que tus poderes de sacerdotisa se han vuelto más fuertes.

Kagome: “Si ella supiera que no es precisamente de sacerdotisa el poder que poseo ahora”

Kaede: Pero noto que has cambiado en algo……. ¿y esas armas?

Kagome: Ah! Bueno es que se manejar algunos tipos de armas “todas en realidad pero no quiero contarles nada a ellos por ahora”. He venido a por la perla.

Sango: Bueno Inuyasha y Kikyo no han logrado encontrar muchos fragmentos ya que desde que te fuiste Naraku se ha vuelto más poderoso.




Espero que os guste y muchas gracias por todo el apoyo que me dais ^_^

 

Re: La Hija del Caos

Tranquila, tranquila que ya se verá el enfrentamiento entre Kagome y Kikyo, sólo espera un poco. Me alegro de que te guste el fic creo que mañana pondré la continuación o si no pues el jueves ya veré ^_^ gracias por el apoyo.

 

Re: La Hija del Caos

Aquí traigo la continuación para ver si se anima esto un poco.



Kagome: Así que Naraku se ha vuelto más poderoso.

Sango: Sí ¿qué vas a hacer ahora amiga?

Kagome: Bueno tengo pensado viajar sola y encontrar los fragmentos que quedan.

Miroku: ¡¿Viajarás sola?!

Kagome: Sí, así avanzaré más rápido y conseguiré los fragmentos antes.

Shippo: Nosotros podríamos acompañarte.

Kagome: No hace falta vosotros seguid viajando con Inuyasha y Kikyo que yo iré sola.

Miroku: ¿Pero no es muy arriesgado?

Kagome: Tranquilo que no lo será “estoy entrenada para enfrentarme a cualquier cosa y súmale a eso que soy una diosa, aunque eso no se lo voy a decir”.

Sango: Está bien pero ten mucho cuidado amiga.

Kagome: No te preocupes lo tendré.

Kagome salió de la cabaña de Kaede y se dirigió al bosque, a partir de ahora viajaría sola así no tendría que dar explicaciones sobre sus nuevos poderes a nadie. No llevaba caminando mucho tiempo cuando divisó a lo lejos a un yokai con uno de los fragmentos de la perla. Se acercó a él muy sigilosamente y se colocó a su lado, sin esperarselo el yokai arremetió contra ella con un veneno pero Kagome lo esquivó y atacó al yokai con la katana, gracias a su entrenamiento con Keikun se podía mover muy rápido con las armas. Mató alyokai y recogió el fragmento de la perla, entonces descubrió que no había estado sola sino que alguien la estaba vigilando. Y así era Inuyasha y Kikyo estaban observándola desde muy cerca.

Inuyasha: “No puede ser es Kagome lo siento en su olor es ella aunque ha cambiado algo”

Kikyo: “¿Quién es esa mujer?”

Kikyo sintió el poder que emanaba de la joven y supo que era muy poderosa, ella había llegado allí guiada por el poder del fragmento de la perla, pero al llegar se encontró con una mujer fuera de lo común y de extraordinario poder.



Espero que ops guste y que esto se anime.

 

Re: La Hija del Caos

Me alegro de que te gustase la continuación amiga kro gm, Kikyo por ahora no reconoce a Kag pero en el próximo capítulo pelearán ;) entre ellas.

 

Re: La Hija del Caos

Bienvenidas al fic *@iko_n@t* y Marginot, me alegra de que os guste, gracias por todo vuestro apoyo chicas y pasaba para decir que mañana pongo la continuación.

Marginot: Intentaré poner las continuaciones más seguido, gracias por el apoyo.

Hasta Pronto.

 

Re: La Hija del Caos

Bienvenida al fic kitas, no te preocupes que todos tenemos errores ^_^ aquí os dejo la continuación, espero que os guste:

CAPITULO​

Kagome observó a Inuyasha llegar con Kikyo hasta donde estaba ella.

Inuyasha: ¿Kagome eres tú?

Kagome: Hola Inuyasha.

Kikyo: “Esta es Kagome esa niña que era mi reencarnación, pero no puede ser siento que posee más poder que antes” Dame el fragmento que acabas de conseguir.

Kagome: Vamos Kikyo ni pienses que te lo voy a dar, estoy aquí para reunir todos los fragmentos de la perla.

Kikyo: Entonces si no me lo das por las buenas me lo darás por las malas.

Kagome: Que sea por las malas entonces.

Inuyasha no se movía estaba impactado por ver de nuevo a Kagome y al mismo tiempo no se creía lo que estaba pasando con las dos mujeres.

Mientras tanto Kagome y Kikyo se estaban mirando fijamente. Kikyo preparó rápidamente una flecha cargada de energía pura y positiva y sin esperar mucho se la lanzó a Kagome directamente al corazón. Inuyasha reaccionó en ese momento y corrió para impedir que la flecha la dañase, pero antes de llegar se quedó sorprendido por lo que vio.

La flecha estaba suspendida en el aire ante el corazón de Kagome, la joven no se había movido simplemente había parado la flecha con sus poderes psíquicos. Entonces la flecha se dio la vuelta y apuntó hacia el corazón de Kikyo.

Kikyo se asustó no se podía creer lo que estaba ocurriendo, la flecha que había lanzado se había parado y ahora la apuntaba a ella, entonces se asustó al comprobar que Kagome estaba sonriendo.

Kagome: Que rápido vamos a acabar con esto Kikyo.

Kikyo: No puede ser tú eres mi reencarnación, yo soy más fuerte que tú.

Kagome: ¡Nunca más te atrevas a decir que soy tu reencarnación me oíste! Si no quieres acabar mal, yo no soy la reencarnación de nadie simplemente soy Kagome.
Kikyo: Siempre serás la segunda y lo sabes.

Inuyasha: Ya basta Kikyo.

Kikyo: Que pasa Inuyasha ahora la vas a proteger.

Kagome: Yo no necesito que nadie me proteja ya soy mayorcita. Pero bueno dónde estábamos, ¡ah! si con la flecha.

Inuyasha: No irás a lanzarla ¿verdad?

Kagome: No lo se.

Kikyo: Es muy cobarde seguro que no lo hará.

Kagome: Como se nota que no me conoces Kikyo.

Entonces la flecha salió disparada y le dio a Kikyo en la pierna, ésta gritó de dolor e Inuyasha fue a ver que tal estaba.

Kagome: Tranquilo Inuyasha que no he dañado ninguna parte vital.

Kikyo: ¡Como te has atrevido!

Kagome: Primero que si soy cobarde y ahora que como es que me atreví, no te ofendas pero aclárate un poco antes de hablar.

Inuyasha no lo pudo evitar y le salió una sonrisa.

Kikyo: ¡Inuyasha como te puedes reír en un momento como este!

Inuyasha: “No puedo evitarlo, estoy tan contento de volver a ver a Kagome”

Kikyo preparó otra flecha pero esta vez Kagome también había preparado otra.

Kagome: Vamos a comprobar quién de las dos es más fuerte.

Kikyo: Está bien vamos allá.

Kikyo lanzó su flecha y Kagome también, ambas flechas colisionaron y cada una intentaba seguir su trayectoria pero la otra se lo impedía.

Kagome: Ahora verás la diferencia entre tu inútil ataque y el mío. Aquel corazón puro que se vuelva impuro, aquella energía positiva que se vuelva negativa ¡Cambio de esencia!

La flecha de Kagome cambió su color blanco por un color tan oscuro como la noche, que acabó con la energía positiva de la flecha de Kikyo y siguió su camino, directa a Kikyo, la flecha dio en el hombro derecho de Kikyo y ésta sin poder mantenerse más en pie se cayó al suelo.