Cosas del destino

​

Bueno aquí con una nueva historia de tragedia y amor gracias al destino, espero que les guste.

​

Cosas del destino​

—¿Me querrás para siempre? Y ¿nunca me dejaras? —me pregunto la pelirroja con sus ojos aguamarina todos ilusionados.

—Claro eres la única chica con la que quiero estar y nunca, nunca te dejare por que te amo demasiado —le conteste, pero después sabría que esas eran palabras muy grandes para chicos de 10 años y que el destino nos tenia preparada una muy mala jugada.

—¿En serio?, ¿me lo prometes?, prométeme que nunca te separaras de mi y que seré a la única que vas a amar —me decía que se lo prometiera con los ojos vidriosos apunto de romper en llanto por la emoción.

—Te lo prometo, nunca me separare de ti y serás a la única que voy a amar el resto de mi vida, si estas tu conmigo no necesito nada mas —le hice la promesa sin saber lo que el cruel destino nos deparaba.

Una semana después de que nos hiciéramos esa promesa, llego sin avisar a mi casa, yo estaba en el jardín contemplando las aborregadas nubes tratando de encontrarle figuras a las nubes, de repente escuche pasos, gire la cabeza para ver quien se acercaba y ahí estaba mi linda pelirroja con sus ojos aguamarina rojos de tanto llorar, no se por que pero en ese momento tuve un mal presentimiento sabia que algo malo estaba por pasar.

—Nicolás, tengo algo muy importante que decirte —dijo entre sollozos, esas palabras no aliviaban mis malos presentimientos, al contrario los avivaba.

—Claro, hay que pasar a la sala para estar mas cómodos y me cuentas que es lo que tienes que decirme —la invite a pasar mientras la tomaba de la mano y le dedicaba una sonrisa de todo estará bien.

Caminamos hasta la sala que consistía de tres sillones de color negro, y muy cómodos, nos sentamos en unos de ellos y me prepare para escuchar lo que ella me tenía que decir.

—Bueno lo que tengo que decirte es que…ya no podremos estar juntos, lo siento enserio quería cumplir la promesa pero no podrá ser, creo que lo mejor es que me retire, te amo tanto —me explico entre sollozos, sus palabras me habían dejado en shock, tanto así que no pude detenerla en el momento en que se marcho de mi casa.

Poco después supe que se había mudado a Europa, mas exactamente a España por cuestiones del trabajo de su padre, el cual era ejecutivo de una compañía muy importante de vinos y fue elegido para ser parte de la sucursal en España.

Me sentía devastado, como era posible que un día antes nos hubiéramos jurado amor eterno y al otro ella me dejara, siempre pensé que el destino era muy cruel pero nunca me imagine que lo viviría en carne propia.

Nueve años después​

Como ya era costumbre me despertaba en mi habitación, una hora antes de lo planeado gracias a esa pesadilla que tenía frecuente mente, siempre soñaba lo mismo, Bianca con sus ojos azules llenos de lagrimas por la noticia que me había dicho, siempre acababa en la misma parte ella saliendo de mi casa y al cerrarse la puerta despertaba.

—¿Pensando otra vez en ella?, nunca cambias verdad, desde que te conozco cada vez que te despiertas tienes la misma cara de tristeza —pregunto niky, el es mi gato desde que llegue a España.

—Claro, tengo la misma cara por que siempre sueño lo mismo, no es fácil soñar el día en que perdiste a tu amada una y otra vez, es mejor que me apure si quiero llegar temprano para buscar mi nuevo horario de clases —conteste al tiempo que me levantaba de la cama dispuesto a prepararme para ir a la universidad.

Una vez listo salí de casa para dirigirme a la facultad, actualmente vivo en Madrid España aquí es donde estoy haciendo mis estudios universitarios, estudio la licenciatura de literatura, mi sueño es ser un gran escritor.

Cuando llegue a la universidad, me dispuse a buscar mi nuevo horario de clase ya que hoy empezaba el nuevo semestre, ya con mi horario en mano me dispuse a ir a mi primera clase, al llegar el salón solo había una chica que nunca antes había visto, tenia el cabello color naranja hasta los hombros y de un rostro muy bello, como estaba tan ensimismada escribiendo unas cosas en su libreta decidí no molestar, de todos modos nunca se me había dado bien hablar con chicas después del “trágico día”, tome asiento justo dos bancas hacia atrás de la chica y espere a que el profesor llegara.

Con el paso de los minutos el salón se iba llenando de alumnos, hasta que al final cuando llego el profesor había unos 20 alumnos en el salón.

—Buenos días, bienvenidos a historia de la literatura V, yo soy José Villareal y seré su profesor este semestre, empezaremos la clases por presentarnos —abrió la clases con esa frase tan recurrente de los profesores, Poco a poco nos fuimos presentando, hasta que llego el turno de la chica nueva.

—Bueno mi nombre es Bianca Castañeda y este es mi primer semestre en esta escuela, me acabo de se transferida, espero levarme bien con todos —se presento la chica nueva.

que para mi ya no era nueva, puesto que se llamaba igual que mi amada y era exactamente igual a ella, ¿esto era obra del cruel destino que la acercaba a mi para después volverla a alejar?, de eso no estaba seguro pero de lo que si, era que tenia que acercarme a ella de nuevo.

Continuara.