"Calle de Jóvenes" Cap. 1 - Amanecer Eterno.

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por XVaneRubiX, 8 Octubre 2014.

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    XVaneRubiX

    XVaneRubiX Iniciado

    Géminis
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    6 Octubre 2014
    Mensajes:
    2
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    Escritora
    Título:
    "Calle de Jóvenes" Cap. 1 - Amanecer Eterno.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Comedia
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1411
    Aún recuerdo todo, aún recuerdo perfectamente todo, como mis actos me llevaron a la situación en la que me encuentro ahora, si tan solo pudiera volver al pasado para cambiar mi futuro, pero tenía miedo de que muchas cosas no pasaran, por esa razón les quiero contar mi historia, yo Britani Santos, no me arrepiento de hacerlo, después de todo… “La felicidad se gana con hechos no con palabras”

    Todo comenzó hace mucho tiempo, yo apenas tenía 16 años desde la muerte de mi madre “Michell Salcedo”, quien murió en un accidente de tránsito hace 10 años, desde ese entonces vivo con mi padre en una pequeña ciudad no muy social, mi padre trabaja mucho, solamente lo puedo ver una o dos veces a la semana, que por cierto se llama Fernando.

    Un día tomamos la decisión de mudarnos a otra ciudad por causas de trabajo de mi padre, no tuve más remedio que aceptar mudarnos solo por él, después de todo… Es lo único que me queda en este mundo….

    Pasamos horas y horas en el avión, hasta que por fin pude ver por una de las ventanillas del avión el hermoso paisaje de tierras, rodeado por el cálido mar azul; al llegar mi padre y yo nos sentamos en una de las cafeterías del aeropuerto, tuvimos una pequeña charla.

    - Qué te parece el lugar – Dijo mi padre con una expresión muy feliz.

    - Está bien, y… ¿Cómo se llama la residencia?

    - “Blind Street” Es un lugar bonito para comenzar otra vez – Me dijo mientras leía un periódico.

    - ¿Blind Street? Eso sería… Calle Ciega ¿porque se llama así?

    - No sé, pero no hay que preocuparse por eso, solo hay que preocuparse por la mudanza y tu instituto nuevo, ¿ok? – Me miro con una expresión seria.

    - Vale…

    - Además… De seguro conoces a tu futuro novio – Mi expresión fue tan repentina que hice que mi café se callera encima de mí.

    - ¿¿¿¡¡¡Pero Que!!!???

    - Vamos Britani… No te pongas asi que solo era una broma… - Dijo mi padre aguantando la risa.

    En fin, en ese momento me sorprendió mucho el nombre de la residencia, ya que todos los días no se escuchan nombres así, luego de un rato tomamos un taxi hasta nuestra nueva casa, al llegar note que eran casas grandes, y los vecinos tenían cara de ser muy educados, mi padre me señalo la casa en donde íbamos a vivir, era grande al igual que las demás, cuando entramos a la casa note que a pesar de verse por fuera grande, por dentro era mucho más grande de lo normal.

    - ¿Por qué no das una vuelta mientras el camión de la mudanza trae las cosas?

    - No sé, no conozco mucho este lugar, y tal vez me puedo perder…

    - No te preocupes, los vecinos te pueden ayudar, y los policías pasan toda la noche por las calles – Dijo con mucha seguridad.

    - Si tú lo dices…

    Salí a caminar un rato para conocer el lugar, era bonito pero a la vez aburrido, vi policías vigilando toda la zona de “Blind Street”, niños con trajes muy cotidianos y mujeres y hombres vestidos con ropa de alta calidad, a lo lejos vi una casa con luces de colores y globos de fiestas, era normal que todos notaran eso, bueno, específicamente era la única casa con luces de colores que se notaba en la calle…

    Me acerque un poco para ver sobre que trataba, pero alguien toco mi hombro, y al voltearme vi a un chico de pelo negro al igual que sus ojos.

    - ¿Te has perdido? - Me dijo con una sonrisa en la cara.

    - No, solo pasaba por aquí.

    - Nunca te he visto antes, ¿eres la nueva familia que se mudó a la casa 220, no?

    - Si… Me llamo Brita-… - No llegue a terminar de decir mi nombre a causa de que el chico se agacho, agarro mi mano y la beso tiernamente como un caballero.

    - Bienvenida a “Blind Street” – Me dijo mientras me llevo a la casa donde estaban haciendo la fiesta.

    - ¡¡Es-Espera!! ¡¡A donde me llevas!! Nadie de la fiesta me conoce y pueden verme como una extraña – Dije con un aspecto algo colorada.

    - No te preocupes por si no te conocen, después de todo… Es mi fiesta – Agarro mi mano más fuerte y me llevo corriendo.

    Al entrar todos me miraron, y para más completar los nervios, el chico desconocido les grito a todos:

    - ¡¡Oigan todos!! ¡¡Esta es la nueva vecina de la casa 220, por favor sean amables con ella!! – El grito se escuchó por fuera de la casa también.

    - ¿Quién se cree que es? – ¿Porque está aquí? – Que chica tan rara – susurraron algunos.

    - (Porque demonios dijo eso, todos pensaran que soy la propia niña mimada) – Cuando esta soltó la mano del chico salió corriendo de la casa – (¿Porque tiene que pasarme esto a mí? Acabo de llegar y ya todos piensan mal de mí, todo ha sido culpa de ese chico, nunca debí de haberle dejado agarrar mi mano) – Pensé.

    En un momento pare de correr, y fue cuando me di cuenta de que estaba perdida en medio de la nada, ya que estaba fuera de la residencia donde vivía, como no sabía a donde ir, no tuve más remedio que preguntarles a las personas donde quedaba la residencia, había un señor mayor en la carretera, me le acerque y le pregunte.

    - Disculpe, ¿no sabe dónde queda la residencia “Blind Street”?

    - Hola preciosa, ¿te has perdido? – Dijo con un tono de algo mareado, y olía mucho a alcohol – No te preocupes, ven y te enseñare cosas divertidas – Me agarro del brazo muy fuertemente.

    - ¡Oye! ¡¡Suéltame!! – Pensaba que nadie me iba a salvar o ayudar, ya que estábamos en medio de la nada y no pasaba ningún carro, pero casualmente, un chico moreno en una moto nos vio y se acercó.

    - ¡¡Basta suéltala!! ¡¡ella te dijo que la soltaras!! – Agarro el señor y lo golpeo muy fuerte – ¡Cooorreeee! – Me dijo mientras agarro mi mano y me llevo corriendo a su moto, me monte en ella y el chico me llevo hacia otro lugar.

    - ¿Te encuentras bien?

    - Si… Gracias por salvarme.

    - No hay de qué.

    Fuimos hacia donde el viento nos llevara, era genial como sentía ese aire fresco en mi cara, sin darme cuenta ya estaba amaneciendo, vi frente de mis ojos el hermoso paisaje del amanecer, era genial todos esos colores mesclados entre sí, formando ese hermoso sentimiento de calor y dulzura.

    - Y… ¿En dónde vives? – Me pregunto.

    - En “Blind Street”, estaba corriendo y sin darme cuenta a donde iba me perdí.

    - Y de la loquera que te pego ¿sete ocurrió la idea de preguntarle a un señor mayor a estas horas? Eres la única chica que conozco que hace eso, ¿sabes?

    - Pues no fue mi culpa que habría llegado a ese lugar, si no fuera… Si no fuera… ¡¡POR UN TAL CHICO!!

    - Vale, Vale… Pero no me rompas los tímpanos.

    El chico comenzó a reírse después de contarle la loca historia de cómo llegue a esa carretera, prácticamente nunca en mi vida me había pasado algo así, siempre estaba en mi casa aburrida y sola, podía ver a mis amigos de la escuela pero nunca los invitaba a mi casa anterior; Llegamos a mi casa y no había nadie en las calles, ni siquiera un policía.

    - Gracias por traerme a mi casa, no sé cómo pagártelo (Y mi papa diciendo que pasaban policías toda la noche…) – Pensé.

    - Podrías empezar prometiéndome que no volverás a correr sin ver hacia donde, eso parece de niñas locas… Como tu....

    - Ok, ok te lo prome… ¡¿Que acabas de decir?!

    - Lo que acabas de escuchar, niña loca, jajajajajajajajajajaja.

    - ¡¡¡Eres un…!!! – El chico arranco su moto y se fue rápido, mientras a la vez estaba muerto de la risa.

    Entre a mi casa, y mi padre estaba durmiendo en su cuarto, como no sabía qué hacer, me fui a dormir también, cerré mis ojos y comencé a recordar todo lo que me ha pasado.

    Oye madre… ¿Los cuentos de hadas pueden pasar en la vida real? Creo que a mí me está pasando… He visto a muchos Jóvenes en este lugar ¿Por qué esta calle se llama “Blind Street”? Y por qué no… ¿Calle de Jóvenes?...
     
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