Cállate Un nuevo día de invierno llegaba a la vida de las tres sobrevivientes del apocalipsis zombis en la que se encontraban, Anna ya se encontraba un poco mejor de aquel incidente que había sufrido hace pocos días y las había llevado a descansar en una parte de la ciudad que se encontraba en ruinas. Y aunque el ambiente de las dos chicas se había mantenido relativamente bien, tal vez porque ya ninguna se debía algún favor o tal vez se debía a que el frío y la nieve que ocultaba grandes cantidades de secretos que podían hacerles daño las obligaba a mantenerse alerta. Petra por su parte disfrutaba la paz que reinaba, aunque tenía que admitir que ya se había acostumbrado a la pelea de las chicas, nunca estaba demás unos momentos donde sólo se sintiera la tranquilidad y pudiera escuchar todo lo que la naturaleza pudiera ofrecerle. Lamentablemente esa paz no duró mucho más tiempo. Anna se había percatado que la pequeña Petra no estaba cerca, usualmente hacían guardia juntas porque a Sinon le seguía agradando la idea de hacer la guardia sola y aunque Anna no era la mejor compañera para hablar, escuchaba atentamente a Petra y cuando sentía que la conversación podía verse cortada, soltaba alguna palabra para que la pequeña se animara a seguir hablando. Pero hoy, por alguna razón no había sido así, y eso le intrigaba bastante. Así que, para la mala suerte de Sinon, Anna terminó acudiendo con ella esta vez sin intención de molestar, tan siquiera no mucho. Los sigilosos pasos de Anna terminaron colocándola justo detrás de su compañera y sin decir nada, extendió su brazo hasta que uno de sus dedos tocaron el hombro de Sinon, quien casi como reflejo ya había tomado su vara de metal para eliminar a cualquier zombie que se atreviera a tocarla. —¿Qué haces tú aquí? —gruñó la peliazul mientras guardaba su confiable arma, por ahora no la utilizaría contra ella. —¿No es obvio? Montaré guardia contigo nuevamente —bromeó la rubia con una sonrisa oculta detrás de su bufanda roja, Sinon sólo pudo poner los ojos en blanco, quizás la idea de usar la vara contra ella no era mala idea después de todo. —, ahora en serio… ha habido mucha actividad de los zombies no muy lejos de aquí y es hora de empezar a movernos. Sinon calló por un momento, quizás fuera una de las ideas más coherentes que Anna pudo hacerle y ya se veía en buen estado, lo cual aseguraba que ya no sería una molestia en su andar por la ciudad. —Esta bien. Llama a Petra y seguimos con nuestro camino. —¿Petra no está contigo? —Si lo estuviera, no te hubiera pedido que la llamaras. En ese instante Anna pudo sentir como su corazón se helaba, ¿y si Petra se había perdido y esa era la causa del alboroto de los caminantes? ¿Y si esa gente extraña con capuchas se la había llevado? ¿Y si ese chico extraño se la había llevado para que ella aceptara sus extrañas propuestas? —Tenemos que buscarla —sin decir absolutamente nada, Anna se agachó para tomar las cosas de Sinon lo más rápido posible y se las arrojó, no debían perder tiempo, si algo le pasaba no se lo perdonaría.. no quería perder a nadie de sus acompañantes. —Anna, si algo le hubiera pasado lo hubiéramos visto. —Dijo con gran tranquilidad en su voz, no es que no le preocupaba, al contrario..ella creía en su capacidad, además Petra había logrado sobrevivir sin ellas y ahora no sería diferente. —¡Eso no lo puedes saber! —Sinon abrió un poco más sus ojos por la sorpresa, nunca la había visto así de desesperada, estaba acostumbrada a una Anna tranquila y bastante molesta, pero el verla tan alterada y ansiosa era nuevo para ella. Mientras tanto, Anna quería creer lo que había dicho su compañera pero.. su experiencia en lugares catastróficos le había enseñado que cuando las personas desaparecían del grupo, significaba que ya no estaban con ellos y por ende.. ya serían como cualquier otro zombie. —¿Qué no lo puedo saber? —preguntó con disgusto, pero antes de que pudiera agregar otra cosa, Anna nuevamente había vuelto a interrumpirla. —¡Exacto! ¡Tú…! Esta vez, Sinon fue la que no dejó continuar a su compañera, había agotado su paciencia. Ella no podía creer la poca fe que le tenía a Petra, las tres eran sobrevivientes y ya llevaban un buen tiempo aprendiendo más y más cosas con las que podían defenderse y había comprobado cómo la pequeña niña había hecho un gran cambio en todos los aspectos que tenia que cubrir para sobrevivir un poco más en el caso de que no se encontraran ellas. Y allí inició el desastre, ambas chicas comenzaron a atacar los puntos de vista que tenía cada una y un par de cosas más que se les pasaba por la cabeza para ganar la discusión iniciada. Y después de un par de minutos, la rubia decidió ceder. Quizás las cosas no eran las mismas y eran sus pensamientos paranoicos lo que la hacían intentar mantener a Petra en una zona segura e imaginar lo peor en esta clase de situaciones. —Calla —pidió ya en un tono más calmado, si ya había aceptado que su compañera estaba bien, no tenía caso seguir la discusión para intentar molestarla. Pero para su mala suerte, la mala elección de sus palabras sólo habían logrado que Sinon se alterara más. —En serio, Sinon, calla. —volvió a pedir esta vez elevando un poco más su tono de voz para superar el tono de su compañera, pero nuevamente no hubo diferencia. Si Anna no podía elegir las palabras indicadas para que Sinon callara y además, no admitiría con sus propias palabras que la peliazul estaba en lo cierto para acabar la discusión, había otras formas para hacerla callar. Sin pensárselo mucho, bajo su bufanda para dejar en descubierto sus labios y en un sigiloso y rápido movimiento, tomó la bufanda azul de Sinon y la atrajo hacia ella para unir sus labios con los suyos. La unión quizás duró más de lo que había planeado, pero si había logrado hacerlo no dejaría que tan solo fueran un par de escasos segundos, pero al separarse Sinon ya no había seguido la discusión, tan solo balbuceaba un par de cosas que Anna no lograba entender y de cierta forma eso le alegraba, con eso el momento capturado sería algo bastante agradable que recordar. Y sin más, con la compostura de nuevo en ella decidió añadir algo rápido con una gran sonrisa de satisfacción escondida en su bufanda antes de irse. —Estaré esperando a Petra por este lado, luego nos iremos. Contenido oculto @Liza White, esto sería una pequeña continuación de lo que escribiste tu y.. no se si este bien en plan general y.. ojala les guste a los que lo lean, no me maten (? *huye*
