Amnesia

Amnesia

Hola a todos amigos, despues de todas las historias de St Tail, Ranma e Inuyasha he ido a caer a el rubro de los de Tsubasa RC qe debo reconocer me ha fascinado, aqui les traigo una nueva historia llamada Amnesia que es un Universo Alterno, espero y les guste.

Shian shen

Mimi chan

_______________________________________________​

Todos los personajes de la serie Tsubasa Reservoir Chronicle son propiedad del grupo CLAMP hago esto sin fin de lucro, por ello no cometo ningún delito, aclarado esto aquí vamos.​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

AMNESIA​

Por Mimi chan​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

​

Prologo:​

Flor del Destino​

La joven de cabello corto y castaño se removía inquieta en su cama, a luz de la luna llena que aun llenaba con un tenue brillo la habitación entera, haciéndose poco a poco más opaca, a medida que el día alcanzaba a las horas, el reloj despertador marcaba las 4:39 a.m., tenia de nuevo uno de esos sueños, sus ojos cerrados brincaban bajo sus parpados cerrados.

Era un lugar hermoso el viento corría con suavidad por el campo verde, las risas de muchos niños se oían en el aire, algunos fuegos artificiales y el aroma dulce del azuzar batida y del pastel se impregnaba en el aire.

- Ven, ven – decía la niña corriendo en un parque con un divertido traje de ratona que lucia muy tierno, - no te quedes atrás lobito.
- Esperare Sakura, por favor.

El chico detrás de ella con sus brillantes ojos marrones corría de tras de ella. Venia de un traje verde que parecía más un uniforme que un traje, después de un poco tiempo la lograba alcanzar y los dos rodaron por el verde pasto mientras reían era feliz, era tan, tan feliz.

- Lobito… - dijo la chica tendida a su lado y lo volteo a ver de pronto él ya no era un niño, ni ella tampoco, eran dos jóvenes, él lucia como chico de 15 o 16 años, delgado y atlético, sus ojos seguían siendo los mismos de un caoba profundo y casi seductor. – nosotros siempre estaremos juntos ¿verdad?
- Si, siempre pequeño cerezo. – el chico alargo su mano y sostuvo su mejilla.- siempre.
- Daisuki…

Ella cerró los ojos, y dejo que él se acercara esperado una recompensa que tanto ansiaba, su aliento estaba tan cerca, casi podía sentirlo sobre sus labios.

PIPIPI PIPIPI PIPIPI​

Sakura abrió de pronto los ojos, gruño por el mal despertar, su cabeza quedo vacía en medio segundo, tanteo a un lado en el buró, busco el reloj hasta que lo rozo y lo tiro al piso y dejo de sonar, ella enterró su rostro en la almohada una vez más volvió a cerrar los ojos, dejo que el cremoso aroma del suavizarte le llenara la nariz, “solo 5 minutos más…”

30 minutos después…

- Oh no, no puede ser, no puede ser.

La joven corría por toda la habitación buscando un zapato extraviado, era imposible, su primer día en el instituto y ella iba a llegar tarde por quedarse dormida, era imposible. Encontró por fin el zapato extraviado y tomo su portafolios y corrió fuera de la casa bajando por las escaleras del edificio donde vivía.

- Sakura chan ya te vas. – una mujer de largo cabello rojo salio por su puerta con una taza de café en las manos.
- Si Kahou sama es tarde, es tarde. – dijo sin dejar de correr.
- Dios, no debiste siquiera desayunar. – Kahou se asomo por el filo de las escaleras par verla bajar las escaleras.
- Nos vemos en la tarde. – grito y salio a la calle dando un portazo en la puerta de entrada.

Salio a la luz del día, en la calle llego apenas a la esquina y el autobús que la acercaba al instituto pasó, ella hizo la parada y el bus se detuvo en la parada, ella subió, un pequeño escalofrió la recorrió al subir pero como siempre solo lo ignoró y pasó a sentarse al primer asiento desocupado que halló.

Una vez segura en su asiento tuvo un viejo recuerdo que era casi una obsesión, al subir a cualquier tipo de transporte, una especie de fobia delicadamente controlada que tenía al subir a un autobús, relacionada con ese recuerdo, su primer recuerdo.

------------------------------------Flash Back ------------------------------------​

​

El autobús iba a prisa, la lluvia caía a raudales, era una escena un poco atemorizante, un rayo se escucho a lo lejos y la lluvia arrecio más.

Una joven venia mirando el parabrisas mientras la lluvia lo golpeaba, sintiéndose nerviosa, le había tocado ir en el primer asiento y veía nerviosa como el conductor cabeceaba constantemente, no, eso no estaba bien, ya eran muchos sus nervios por un viaje tan largo en medio de una tormenta como esa y ahora que ese hombre estuviera apunto de dormirse la asustaba, cerró sus ojos y se recargó en su asiento, solo debía dejar de sentirse nervioso, seguro nada pasaría.

Pero pensar eso fue como conjurar a la desgracia, no tuvo la oportunidad de volver a abrir los ojos.

Era curiosos como un desastre que organizándolo te tomaría varios minutos cuando la naturaleza lo realizaba le tomaba solo dos segundo.

Un rayo sonó de nuevo y golpeo el piso muy cerca de ellos, esto espanto al conductor que salto en su lugar y perdió el agarre del volante, este se puso a girar sin control el agua en la carretera venció a la tracción de las llantas del autobús, la chica adelante apenas y tuvo tiempo para sentir cualquier cosa o para poder reaccionar, solo sintió el vértigo de que el autobús era golpeado contra algo y como los sentidos, cada uno se lleno de golpe embotándola de un estimulo, los oídos de llenaron del sonido de los tubos retorciéndose, la gente gritando, los vidrios rompiéndose por el estruendo rompiendo su delicada piel, la presión en el pecho, la asfixia de no poder moverse, y la sangre corriendo por un de sus piernas, y el aroma a humo llenándola por completo, la boca se amargó en un minuto por la súbita descarga de adrenalina y después de eso, voces, sirenas y nada más, no hubo nada más hasta que abrió los ojos.

Y justo cuando abrió sus ojos es como si todo hubiera cambiado.

La joven abrió los ojos y miro a su alrededor, no sabía donde estaba, solo vio las paredes blancas sobre su cabeza, volteo y vio aparatos, pulso y respiración en las ondas de las maquinas marcadas con un ritmo constante, volteo al otro lado y nada, no había más que una sabana blanca que la separaba de otro paciente, volvió a cerrar los ojos, y trato de levantarse pero no lo logro.

- Espera niña, espera… - una enfermera se acerco a prisa a ella y la detuvo – no te levantes te harás daño.

La chica e contra de su voluntad obedeció y se recostó de nuevo en la camilla fría. Reacciono de sus vendajes en ese momento, un brazo en un yeso y un vendaje en una pierna además de en la cabeza.

- Que bueno que has reaccionado, dijo la enfermera tomando su pulso manualmente - nos tenías muy asustados sabes.
- ¿Que me paso? – la chica lucia de verdad desconcertada.
- El autobús donde viajabas choco, al parecer en una curva perdió el agarre por la lluvia y el conductor no pudo manejarlo, se estrellaron contra otro autobús, hubo muchos heridos, pero tú resultaste muy seriamente lastimada, temimos que no despertaras.
- ¿Cuanto tiempo llevo aquí?
- Un mes. – dijo calmada.
- ¿Un mes?-un mes repitió alterada la chica de ojos esmeralda.
- Si, estuviste en coma, la mayoría de los pacientes de ese accidente ya han sido llevados a casa pero no tú, acabas de reaccionar en todo un mes.
- No lo puedo creer – dijo llevándose una mano al pecho - En coma…
- Si, en coma tuviste una contusión cerebral muy severa, temimos que no pudieras reaccionar.
- ¿Cual es su nombre? – dijo tratando de reconocerla.
- Oh, mi nombre es Kahou Mysuki, - dijo con una dulce sonrisa la mujer de cabello castaño y ojos cándidos - he sido tu enfermera todo este último mes.
- Muchas gracias Mysuki sama.
- Oh llámame solo Kahou.
- Gracias por cuidarme Kahou sama.
- ¿Quieres que llamemos a alguien que pueda recogerte? – dijo contenta que alguien por fin pudiera recoger a la joven que había tenido la atención de varios jóvenes doctores desde que estaba allí – ¿Cuál es tu nombre?
- Yo soy…

Fue cuando supo que algo andaba muy mal con ella, trato de recordar su número, su dirección, el nombre de sus padres, lo que fuera, pero su cabeza estaba vacía, completamente vacía.

- ¿Qué pasa niña?, ¿estas bien? - pregunto Kahou al ver a la desconcertada chica e la cama delante de ella.
- Yo… - su mirada esmeralda era un poema al desconcierto - no se cual es mi nombre…

------------------------------------ End Flash Back ------------------------------------​

​

Desde ese día habían pasado ya 8 años, acostumbrarse estar sola y a no tener recuerdos había sido muy difícil, había pasado por una depresión muy severa al no poder recordar nada de ella, solo algunas piezas de su memoria que aparecían en sus sueños y que si no se concentraba en ellas al despertar se perdían de nuevo, como las de esa mañana, estaba casi segura de que había tenido un recuerdo importante lo sentía por dentro, pero al despertar tan abruptamente se había perdido.

Se llevó una mano al escote y saco un colgante de su pecho, lo único que conservaba de su identidad, era un pequeño guardapelo con forma de corazón, que era lo único que habían podido recuperar de sus pertenencias, todo lo demás se había quemado o perdido, ni credenciales, ni equipaje, nada, absolutamente nada, por ello no había podido rastrear quien era ella, solo esto, que tenía colgado al cuello y de alguna manera se había mantenido intacto. Adentro tenía un minúscula flor color de rosa, seca, y un grabado, un nombre, “Sakura”, era el nombre de la flor dentro del guardapelo, pero ella supo que también era su nombre, solo su nombre, nada más… al menos ya era algo.

Por suerte en realidad nunca estuvo sola del todo, al menos eso era una ventaja, la enfermera que la había cuidado durante su estancia en el hospital se había apiadado de ella y la había ayudado a instalarse y a conseguir un trabajo en el hospital, por un tiempo estuvo bien, pero ella descubrió que no era la medicina lo que la apasionaba, sino la historia, cada vez que pasaba por las librerías se quedaba algunos minutos viendo los libros, muchos títulos de historia le parecían muy familiares, una vez había encontrado un libro del viejo reino del país de Clow y su corazón había saltado sin remedio y se vio obligada a comprar el libro que devoro con un placer sin igual, todas las lecciones expuestas en el libro las aprendió casi de memoria, y supo en ese momento que ella conocía de eso, ella sabía de historia, después de un tiempo decidió empezar a estudiar.

Eso había sido otro reto, pues no se podía matricular en ningún escuela sin apellidos ni un lugar de procedencia, en ese momento su vecina Kahou había salido en su auxilio de nuevo, ella tenia algunos amigos que sabían de leyes y había logrado que ella obtuviera una acta de identidad después de poder explicar su situación así había obtenido un nombre completo.

Sakura Hanasaki.

El doble significado de su apellido no paso ignorante para ella, era casi intencional… con ese nombre había logrado tomar los cursos correspondieres a secundaria y preparatoria que en un lapso de 6 meses había cubierto los exámenes pertinentes y había logrado entrar a la universidad, y estudiar un carrera en historia, había mantenido su trabajo en el hospital hasta terminar la carrera, sus profesores apenas terminada su carrera la habían recomendado a los mejores colegios como la mejor profesora de historia que pudieran conseguir y así había logrado poder acomodarse en el instituto Satori, uno de los más importantes en toda la región de Kyoto.

Cuando Sakura advirtió que había llegado a la parada cerca del instituto toco el timbre y el autobús se detuvo y ella bajo corriendo rumbo al vestíbulo, entro corriendo con alumnos de la escuela que no dejaron pasar la oportunidad de recorrer con la mirada a la joven que corría en su misma dirección.

Sakura tenía aproximadamente 24 años, una figura estilizada y discreta, un cabello entre castaño y rojizo a la altura de sus hombros, que solo con la tez tan blanca de ella y los impresionantes ojos verdes que poseía podría verse bien. Y una sonrisa que irradiaba una luz que solo una persona bendita poseía, cada lugar que había pisado había dejado como una estela de luz, como si un ángel blanco hubiera pasado por ese lugar y hubiera dejado una estela de brillantes plumas blancas a su paso, tenia cierto aire de niña que ni a su edad podía borrarse. Y el porte de una princesa aun en su sencillo traje sastre.

Ella dejo las miradas de los jóvenes del instituto posarse sobre ella, mientras caminaba a la oficina del director. Llego saludo a la secretaria y entró a la oficina.

- Hanasaki san. – saludo con simpatía en director de la escuela, un hombre maduro peor con porte elegante, solo algunas canas pintaban su cabello
- lamento la hora director. –Sakura se empezó a disculpar al ver la hora debía estar allí desde hacia 15 minutos.
- Oh no se preocupe por ese jovencita, su primera clase empezara hasta las 10 de la mañana, ahora los jóvenes están escuchando una platica con un arqueólogo en el auditorio, estoy muy complacido, el joven ha armado una serie de convenciones sobre la historia mítica del Japón y ha escogido esta escuela al azar para poder dar su platica.
- En serio, que agradable coincidencia.
- Si, gusta venir conmigo yo iba para allá, parece ser una platica muy interesante
- Claro, seria un placer – dijo la chica y siguió al director – y ¿De que tema es?
- Oh, de los mitos de las ruinas del país de Clow.

Sakura esbozo una sonrisa enorme, su tema de Historia favorito y con un arqueólogo. Camino a buen paso con el director al auditorio como una niña que ira a recoger su regalo de navidad y entro, la sala estaba en silencio y a oscuras para la presentación, Sakura solo vio de reojo la figura delgada del arqueólogo moviéndose al lado de las reproducciones luminosas, las imágenes de el antiguo castillo enterrado en la arena estaban expuestas sobre una pantalla, ampliadas por un cañón, que venía de una computadora portátil, Sakura consumió con la mirada las fotografías que se exponían, muchas eran apenas conocidas para ella.

- Las leyendas aun cuentan las historias de la vieja monarquía del país de Clow, que había una princesa que fue despojada de un extraño poder, que era capaz de dominar al mundo entero que no podía controlar, un hechicero hizo un conjuro para que la princesa perdiera ese poder en varios fragmentos, que se esparcieron por las dimensiones en forma de plumas, así la princesa y un guardián fueron de dimensión en dimensión para recuperar las plumas de la princesa.

Las chicas suspiraban por la historia y por el que la estaba contando, mientras los chicos sin remedio se vieron atraídos por las fotografías y lo impresionante que lucían las ruinas, ella sin embargo solo escuchaba con atención, abstraída en sus propias conjeturas sobre el país de Clow.

- Así, la princesa viajo con su guardián, las leyendas dicen que la princesa y el guardián desde niños habían estado enamorados y que al terminar el viaje, pudieron profesarse su amor y fueron muy felices.

Un suspiro generalizado salio de todos cuando un grabado de una princesa en un traje blanco y su guardián con una capa verde oscuro tomando a la princesa de la mano inclinado delante de ella.

Sakura suspiro también ante el lindo grabado, después la presentación se quedo en negro y se termino, las luces se encendieron y la plática se dio por terminada, el director dejo a la chica en uno de los pasillos que dividían los asientos, todos los alumnos se pararon para vitorear al expositor y ella solo los siguió.

- Muchas gracias por su exposición. – el director subió a la tarima y le extendió la mano, el joven arqueólogo se la recibió.
- Ha sido un placer director Kamiya. – dijo de la forma más educada.
- Por favor, chicos un aplauso más fuerte para el joven Lee Syaoran.

Solo cuando el director dijo el nombre del joven arqueólogo fue que Sakura lo volteo a ver, se quedo allí clavando su mirada agua marina en sus ojos marrones, lo recorrió de arriba abajo, el arqueólogo vestía un pantalón color marrón claro y una sencilla camiseta sin mangas negra y botas del mismo color, era casi el cliché de un arqueólogo en su traje de trabajo, pero a pesar de eso era un hombre extremadamente apuesto, sus ojos, sus dos ojos marrones eran lo que más destacaban en él, era una mezcla de tristeza y misterio que solo pocas personas en su vida había poseído y no con tanta intensidad.

Y de pronto paso algo…

El joven arqueólogo la miro, y ella sintió un escalofrió por la mirada tan intensa en ella la miro con una enorme carga de desconcierto y casi temor que la corrió de arriba a abajo.

Los alumnos se acercaron a él robado su mirada de ella para poder pedirle autógrafos, el firmo un par de libretas a prisa queriendo liberarse de ellos con rapidez, el director fue quien salio al quite por él, y mando a todos los alumnos a su clase. Sakura se acerco también un vez que todos los alumnos se fueron, un cierto sentimiento de pesar le llenó el pecho a medida que se acercaba al joven pero no se detuvo, no tenia por que hacerlo, él nunca dejo sus ojos de los de ella, así llego a su lado.

- Lee san, le quiero presentar a nuestra nueva profesora, sin duda la mejor en su categoría, a salido con las más impresionantes calificaciones en su carrera – el director empezó a presentarla, ella solo lo miro con cierta inquietud, sus ojos, Dios sus ojos no la dejaban de mirar.

Antes de que la presentación terminara el celular del académico sonó y se disculpo para poder contestar, ellos dos se quedaron a solas.

- Lo lamento – dijo de pronto el joven – no sabía que estabas aquí, de haber sabido nunca hubiera venido – Sakura lo miro con asombro, él la conocía – lo siento mucho Sakura.
- Tu… - dijo en medio de un estupor.
- Se que prometí que no te volvería a buscar pero te aseguro que no ha sido mi intención, - el joven atribuyo su estupor a su molestia y siguió disculpándose, era lo mínimo que le debía - no se me ocurrió que un día salieras de Tomoeda, pero supongo que tú también querrías volar.

El chico levanto una mochila del piso y se la monto en el hombro dándole la espalda.

- Mi asistente recogerá todo, no te preocupes, no tienes que verme más, me voy.

Sakura no pudo reaccionar un par de segundos mientras él se movió de su lugar, él la conocía, él sabía quien era ella.

- Espera – dijo literalmente gritando y él de detuvo pero siguió dándole la espalda - tú… ¿tú me conoces?
- ¿Que…? – el joven volteo y vio los ojos llenos de ansiedad de la joven detrás de él.
- ¿Tú sabes quien soy verdad? – dijo tratando de que sus palabras no le ganaran en la carrera por querer salir de su boca.
- Sakura por favor, no es gracioso sabes muy bien que tu y yo…
- Por favor no te vayas – dijo acercándose a él y sosteniéndolo de la punta de la mochila – te lo juro estoy hablando en serio.
- Por supuesto que se quien eres Sakura, y también se lo que nos dijimos la ultima vez que nos vimos, por eso mismo ahora me voy.
- Espera por favor no te puedes ir
- Sakura que pasa…
- Yo… se que esto es completamente ridículo pero debes creerme, te lo juro por Kami sama, yo… yo no se quien soy.
- ¿Qué? – dijo empezando a parecer preocupado.
- Yo… perdí la memoria hace 5 años, eres la primera persona que veo que sabe quien soy yo, por favor, no te vayas, - dijo en tono simplemente suplicante – tú eres mi única esperanza.

Syaoran dejo caer su mochila al suelo y la volteó a ver de lleno, sus ojos mostraban la mayor preocupación que nadie en 5 años había tenido en ella, y se sintió instantáneamente aliviada.

- De verdad… Sakura, - dijo el chico de ojos marrones aun incrédulo - no estas bromeando.
- Te lo juro.
- Es que…

El hombre detrás de ellos golpeo ligeramente el hombro de la joven y los dos prestaron atención al instante como si de pronto hubieran sido jalados a la realidad.

- Ya veo que Hanasaki san se ha presentado a si misma, es nuestra nueva profesora de historia, hizo una tesis muy interesante sobre el tema de lo que usted acaba de exponer, seguro podrían intercambiar un montón de opiniones entre si. – dijo con simpatía sin poder advertir los rostros desencajados de los dos jóvenes
- Si… - respondió solo ella mecánicamente.
- Hanasaki san, su clase no tarda en empezar, ¿le gustaría quedarse verla Lee?
- Si – dijo ahora no dispuesto a alejarse de Sakura.
- Gracias… - los ojos de Sakura brillaron en alivio, él se quedaría - Syaoran.

Syaoran sintió un calor indescriptible en el alma en ese justo momento.

------------------------------------Flash Back ------------------------------------​

​

PLAT​

El golpe se oyó en la habitación entera, una lagrima callo al piso después del ruido, el chico delante de una igualmente joven llorosa de ojos esmeralda había dejado caer la lagrima después del golpe en su mejilla, no de dolor, al menos no físico, si no de vergüenza.

- Nunca jamás quiero volver a verte lee Syaoran, - la chica lloraba pero llena de furia - haré de cuenta que no te he conocido, no se como voy a arrancarte de mi corazón pero lo haré, te lo juro.
- Sakura por favor, -su voz era por completo suplicante - déjame decir…
- ¿Qué? – ella estaba por completo a la defensiva - ¿Qué me puedes decir que repare algo de lo que has hecho lee Syaoran?, desde el día de hoy estas muerto para mi, lo entiendes, muerto, no quiero volver verte en lo que me reste de vida, y si me tienes un mínimo de respeto me dejaras tranquila para siempre, no voy a siquiera mencionar tu nombre.

Después de eso dio un portazo y cerro la puerta de su casa en la cara del chico.

------------------------------------ End Flash Back ------------------------------------​

​

- Joven Lee – el director lo llamo sacándolo de su trance mientras ya tenia a la joven del brazo - síganos por favor.
- Si… - respondió mecánicamente y los siguió.

Syaoran tomo su mochila de nuevo y siguió al director y a la joven de ojos esmeralda a su salón… la delicada mujer de traje negro y zapatos altos, caminando casi nerviosamente, de todas las veces que había imaginado un nuevo encuentro con Sakura Kinomoto este nunca había pasado por su cabeza.

​

Fin prologo.​

20 de Septiembre de 2006​

2:04am.​

​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

​

Nota: hola aquí voy de nuevo este es un universo alterno que se me ocurrió hace algún tiempo, pero que no lo pude adaptar con la otra serie que quería intentarlo, por ello quizás al leer esta historia y leer la otra historia que estoy llevando con una temática parecida les resulte familiar. La otra historia se llama Geisha de Inuyasha, pero no se preocupen, la temática de esta historia será distinta, ahora que he conocido un poco más de la serie de Tsubasa Reservoir Chronicle y me he enamorado de ella, especialmente de Syaoran jeje, me he animado a hacerlo aquí por la misma naturaleza de la historia y de la fantástica historia de CLAMP que tiene mucho que ver con la idea que yo había hecho.

Se que no es tan regular hacer universos alternos con Tsubasa RC como lo es con Sakura CC pero, yo no puedo, creo que ellos son muy chicos para esta historia, por eso estoy feliz de poder ver con otros ojos ahora a un Syaoran adolescente jeje.

Bueno aqui el primer capitulo, es una serie muy cortita pero espero y les guste, no olviden dejar algun mensaje.​

​

Mimi chan​

 

Re: Amnesia

la verdad esta chido pero quiero saber donde descargo los capitulos? nunca los he visto pero me gusto tu fic me gusto espero que continues pronto

matte ne

 

Re: Amnesia

No te preocupes, yo vendre a postear tan a menudo como pueda los nuevos capitulos, son muy poquitos, solo tenme un poco de paciencia.

Mimi chan​

 

Re: Amnesia

no es por nada pero he leido este fic en alguna parte..donde habrá sido...?
Bueno, da igual, me gustó mucho!!
Continualo

Saludos!

 

Re: Amnesia

hola a todos de nuevo, perdon por la tardanza pero he tenido un par de problemitas con mi conexion de internet que no me dejaron venir por un ratito, pero me alegra la buena respuesta que la historia ha tenido.

Pami: jeje o reconosco, el problema mas usual con mis fics son mis horrores de dedo jeje tratare de mejorar.

_Marioly_: pues si, la verdad la otra cuenta esta desaparecida en accion, perdi la contrseña y el correo donde la tenia guardada, y como tenia algo de premura por un desagradable suseso con una de mis historias hice una nueva, pero le hechare ganas para que sea tan buena como la que ya tenia.

Sakura_anime: bueno, si eres seguidora de los fics de Tsubasa RC creo que si ya lo leiste, lo tengo publicado en FF.net y en mision anime, pero aun asi aqui lo pongo en este foro tambien

Gracias por todos sus comentarios, ahora aqui vamos con la actualizacion,.

Mimi chan​

 

Re: Amnesia

Todos los personajes de la serie Tsubasa Reservoir Chronicle son propiedad del grupo CLAMP hago esto sin fin de lucro, por ello no cometo ningún delito, aclarado esto aquí vamos.​

​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-: ​

AMNESIA​

Por Mimi chan​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-: ​

​

Capitulo 1: ​

​

Un café.​

Sakura apenas y había puesto atención en las clases que había dado, la presencia del joven arqueólogo en una de las esquinas del recinto no la había dejado sin efecto, solo deseaba poder hablar con él, respiro tranquila y se dijo que si había podido esperar 8 años podía esperar 80 minutos.

La clase por fin termino, pidió disculpas a todos excusando que no se sentía muy bien y así todos empezaron a salir del salón, incluyéndolos a los dos, una vez afuera ella lo detuvo.

- Espérame aquí por favor, solo debo ir a hablar con el director y podremos irnos esta bien
- Si
- ¿Me esperaras?
- Claro que si Sakura.
- Gracias.

Diciendo esto ultimo salio corriendo por el pasillo rumbo a la oficina del director, allí le dijo que debía irse ahora, que era un asunto muy importante y el director al verla tan descompuesta la dejo ir, Sakura salio de nuevo corriendo a su salón, no supo ni se entero que se reuniría con Syaoran enseguida, parecía poco apropiado, pero no le importaba en ese momento, llegó al pasillo del salón y de pronto su corazón brinco, “no por favor, no” él ya no estaba allí, entro a prisa para verlo frente a su escritorio cerrando su portafolios.

- Pensé que sería buena idea que viniera por tus cosas.

Ella solo sonrió, casi había creído que no estaría mas allí al haber salido a la dirección había imaginado que el joven arqueólogo se iría y que perdería su pista para siempre, había pasado un susto enorme.

- Por un momento pensé que no te encontraría aquí. – dijo sin poder evitarlo.
- No podía irme así como así, - dijo él muy seriamente - nunca te haría algo así Sakura.
- Podemos… podemos ir a algún otro lugar por favor, - su amabilidad y su forma de ser con ella de verdad la turbaban. - creo que tengo un montón de cosas que preguntarte.
- Claro sakura.

El joven se colgó de nuevo la mochila al hombro, fue primero a hablar con su asistente y después de despedirse se dirigió con ella fuera de la escuela.

Una vez afuera llegaron a una sencilla cafetería no muy alejada del instituto, pidieron un par de cafés y se sentaron en una mesa alejada del barullo que había en el lugar. Durante los primeros minutos ninguno de los dos supo exactamente que decir, sobre todo él, que había imaginado que nunca mas tendría la oportunidad de hablar con esta chica frente a frente con tal tranquilidad.

- ¿Cuál es mi apellido? – dijo de pronto ella.
- Ah – Syaoran se sorprendió un poco cuando la chica hizo esa pregunta – ¿Es en serio Sakura? ¿De verdad no tienes recuerdos?
- Es verdad, antes solo quiero saber eso por favor. – dijo casi como una suplica.
- Kinomoto – dijo finalmente convencido.
- Kinomoto, - repitió solo para ella misma - nunca he escuchado ese apellido por aquí y busque en todos los registros posibles de población y nunca lo escuche.
- Bueno tu familia no es netamente japonesa, tu padre tiene ancestros que venían desde China, no existe mucha de tu familia en Japón, - empezó a explicar el arqueólogo - hasta donde yo se toda tu vida has vivido… - se corrigió a si mismo - habías vivido en el distrito de Tomoeda, en Tokio.
- Tokio. – repitió para sui misma.
- Si, Tokio.
- Pero yo no viaje de Tokio, - empezó a hacer conjeturas dentro de su cabeza - yo venia desde Kobe.
- Sakura – Syaoran iba a decir algo mas cuando el tendero se acerco en ese momento y puso las tazas de café, pregunto sino se ofrecía nada más y se retiro Syaoran reinicio. – escucha en este punto estoy tan confundido como tú ¿Qué paso? ¿Qué haces aquí? ¿Cómo perdiste la memoria?
- Yo… - como poder explicar algo que ella misma no acaba de entender era tan complicado - no lo se, - dijo sinceramente - la verdad no se a que vine a Kyoto… hace 8 años, venia en un transporte, este tuvo un choque y desde entonces he perdido todos mis recuerdos, los médicos me dijeron que había golpeado cierta parte en mi cabeza, que había causado que todos mis recuerdos quedaran estancados, he hecho lo imposible, he ido a terapias pero nada, no he podido recuperar nada desde entonces, muchas cosas que sabía aun las se, pero solo cosas practicas, a usar algunos instrumentos, soy muy buena en la maquina de escribir por ejemplo.
- Si lo se. – dijo de pronto recordando las noche en vela que pasaban documentos de las investigaciones de su padre solo para poder leer las primero.
- Y en historia, de alguna manera leo algo y todo aparece ante mí como si ya lo supiera de memoria.
- Lo se. – dijo mientras veía la imagen de la chica abstraída en un libro, prácticamente en cualquier lugar.
- Dime Syaoran – Syaoran se desconcertaba un poco cada vez que ella mencionaba su nombre, su promesa la había tenido muy presente desde que la había visto la ultima vez – ¿Quién soy yo?, ¿Desde cuando me conoces?
- Yo… - no, imposible decirle la verdadera naturaleza de su relación ahora - yo te conozco desde que éramos niños, somos antiguos amigos de la infancia, desde que tenía como 6 años, yo llegue a vivir a Tomoeda, tu padre es uno de los mejores profesores de historia en la universidad de Tokio.
- ¿De verdad? – dijo asombrada.
- Si, es la verdad, me hubiera encantado hacer mi preparación con él pero… - se retuvo de nuevo - bueno eso no importa, tu padre es un profesor en la universidad de Tokio, su nombre es Fujitaka kinomoto.
- Fujitaka - repitió suave y dulcemente y después lo volteo a ver ansiosa - ¿Y mi madre?
- Tu madre… - sus ojos marrones se llenaron de humo, y ella lo notó.- el nombre de tu madre era Nadeshiko, ella murió cuando tú eras un bebé – la mirada de Sakura perdió la mitad de su brillo así que él se apresuro a decir – y tienes dos hermanos, el mayor de de… - Syaoran hizo la suma mental de la edad de él ahora, no lo había visto en 8 años, - debe de tener ahora 27 años se llama Touya y otro mas chico llamado Yukito que debe tener justo ahora 25, - suspiro pesadamente solo al pensarlo - Dios debió desquiciarse de por si ya estaba loco por ti.

Sakura se llevo una mano al pecho y presionó el camafeo que colgaba de el, a Syaoran se le hizo un hueco en el estomago cuando vio lo que tenía colgado al cuello, Sakura apenas y podía contener sus lagrimas.

- Tengo dos hermanos, - dijo mientras sus ojos se volvían cristalinos y ella se lo oculto - Dios mió.
- Y deben estar locos desde que te perdiste. – dijo sin poderse detener.
- ¿Y tú? – dijo secándose los ojos rápido.
- Yo no sabía que estuvieras perdida Sakura - dijo con algo que ella solo pudo denominar como pasión en su voz – sino, hubiera movido cada piedra del planeta para poder encontrarte.
- ¿Tan buenos amigos éramos? – dijo mientras un sonrojo se pintaba en su rostro.
- Los mejores. – dijo mirándola con una expresión profunda.

Syaoran sintió de pronto un poco de tristeza, toda su infancia juntos, los juegos, las aventuras, el cariño, la confianza y la atracción que hubieran sentido alguna vez ya no significaban nada para ella, al menos le consolaba saber que todo el dolor que le había causado también ya no eran nada en su vida.

- Yo tuve que hacer un viaje en cuanto comenzó la universidad y no había sabido de ti en años.
- ¿Nunca llamaste a casa? - dijo algo confundida - ¿Nada?
- Tú y yo… - al agacho un poco el rostro y vio su reflejo en el fondo negro de la taza de café - no terminamos nuestra… amistad, en los mejores términos.
- ¿Que fue lo que paso? – dijo con autentica curiosidad.
- No creo que sea el mejor momento para hablar de eso - dijo volteándola a ver, no tenía el valor de decírselo - no es una historia agradable.
- Ya veo.
- También tienes una prima llamada Tomoyo que te adora, - dijo cambiando el tono del relato - eran como hermanas, siempre te defendió y te protegió y viceversa.
- Era entonces una persona muy amada. – dijo con una sonrisa.
- Lo eres.

Sus ojos marrones se posaron en sus esmeraldas hasta que ella se agacho sonrojada de nuevo, Dios tenía una mirada tan intensa. Sakura sacudió su cabeza y rió feliz en ese momento, Syaoran vio a los ojos a la joven que había conocido hace años de nuevo.

- Así que Sakura Kinomoto – dijo como reafirmándolo para ella misma.
- Así es, Sakura Kinomoto, me desconcerté un poco cuando el director te llamo Hanasaki.
- Bueno yo tomé ese apellido para seguir desenvolviéndome, - empezó a explicar - durante años estuve investigando de donde venía pero no halle nada, al principio no pude hacer gran cosa, por que estaba tan perdida que apenas podía hacer lo básico, comer, dormir, trabajar un poco, cuando fui recuperándome poco a poco fue tarde, tarde casi un año en empezar a investigar de donde había venido, te sorprendería la cantidad de jóvenes de mi edad que están desaparecidas por todo Japón y yo, ni siquiera tenía un nombre para poder empezar. - Dijo y una expresión triste se coló en ella de nuevo.
- No te preocupes – dijo y alargó su mano tomando la de ella, quiso retirarse cuando notó su impulso pero ella no lo dejó, lo sostuvo también – ahora yo estoy contigo Sakura, nada te pasara, te daría un numero o algo de tu casa pero ahora no tengo nada, después de… del problema que tuvimos tú y yo, tu padre cambio el numero y me fue imposible conseguir el nuevo.
- ¿Tan malo fue? – dijo mas desconcertada que antes.
- Si. – dijo con pesar.
- Oye – dijo y puso su otra mano sobre la de él – éramos buenos amigos, lo que haya sido no pudo ser de verdad tan malo, ¿Cierto? - dijo con animo para poder infundirlo en él - podemos empezar de nuevo, es mas – dijo y lanzó una dulce sonrisa – ya ni siquiera me acuerdo jaja.
- Gracias - dijo apretando sus manos y ella miro sus manos con una sonrisa aun – he esperado años por poderte oír decir eso.
- Me alegra que seamos amigos de nuevo entonces. – dijo con sinceridad – Ahaaa me ha dado hambre.

Syaoran sonrió, a pesar de todo Sakura no dejaba de ser nunca ella misma, le parecía tan difícil creer que de verdad no tuviera ningún recuerdo, seguía siendo tanto como ella misma. Sakura se animó de nuevo y llamó a un mesero, el chico raudo se acerco a la atractiva joven que pidió dos tartas de queso y volvió a la plática.

- Pero cuéntame algo, lo que sea de verdad, me gustaría saber no se por ejemplo como nos conocimos, algo por el estilo.
- Sigues adorando ese pastel cierto. – dijo como respuesta a su petición.
- ¿Tú lo sabías también?
- Si, lo has pedido en tu cumpleaños desde los tres y cada vez que salíamos a tomar algo lo buscabas.

Sakura sonrió de nuevo y el mesero se acercó con los dos pasteles, le cerró un ojo a la joven y se retiró, la chica tan distraída como siempre siquiera lo notó y empezó a comer el pastel con deleite.

- Nosotros nos conocimos por que al igual que yo, mi padre era arqueólogo, murió hace dos años. – dijo con algo de tristeza.
- Cuanto lo siento Syaoran. – dijo con autentico pesar la chica.
- No te preocupes estoy bien ya, me he acostumbrado a vagar por todo Japón con su trabajo, - dijo dejando a la chica mas tranquila - mi padre le tenía mucho respeto al tuyo, habían sido compañeros en su tiempo de estudio y al enviudar decidió vivir en Tomoeda, nunca estaba en casa pero como le tenía mucha confianza a tu papá siempre yo estaba en tu casa, podría decirse que nos criamos mas que como solo amigos como dos hermanos, estudiamos juntos, y con la influencia de tu padre, era obvio que nosotros también nos veríamos influenciados por la pasión a la historia, yo soñaba con las grandes estatuas y las ruinas de China y tu…
- Yo con las del reino de Clow –completo su relato
- ¿Lo recuerdas? – dijo emocionado.
- No - dijo ella agachando un poco el rostro, los ojos de él de verdad le turbaban - solo que la parte que siempre me ha gustado mas de la historia ha sido esa, siempre corro a la librería cuando se que ha salido un trabajo nuevo por pequeño que sea.
- Siempre hacías lo mismo, cualquier articulo sobre el reino de Clow te volvía loca, me tenias horas pegado en las computadoras para poderte buscar una foto o algo por el estilo.
- De verdad, me parece increíble que sepas tantas cosas de mí.
- Pasamos la mayor parte de nuestras vidas juntos, Sakura.

Sakura se recogió y guardo silencio, Syaoran le quiso dar tiempo a procesar todo lo que le había dicho, cuando se dio cuenta de lo que en realidad pasaba, las líneas cristalinas bajaban por su rostro fino.

- Sakura… - dijo preocupado
- Yo… yo no logro recordarte – dijo llevándose una mano a la cabeza y presiono su cien, era doloroso. – de verdad quiero recordarte y no puedo Syaoran.
- Tómalo con calma – dijo y sin pensarlo mucho se acerco a ella, puso la silla a un lado de ella y puso una mano en sus hombros – recordaras todo Sakura. – “y quizás ya no quieras volver a verme”

La chica sin previo aviso se arrojó a su pecho y lloró desconsolada, el camarero se acercó a ver si todo estaba bien, fue extraño de pronto que la chica que había entrado con una alegre sonrisa muy a menudo en ese local ahora estuviera llorando, cuando Syaoran le dijo que si, que solo lloraba se alejo de nuevo, ella lloró largos minutos en su hombro sin parar, él solo atinó a rodear su espalda y dejarla desahogarse y susurrarle tiernamente al oído que ahora todo estaba bien.

Después de un par de minutos logro calmarse, tomó un sorbo del café frió y dejo el azúcar hacer su trabajo, después solo se relajo y se retrajo tímidamente. Syaoran extraño en ese momento a la Sakura que solo se quedaría allí, que no buscaba por ningún motivo alejarse, la que era a veces como una pieza de si mismo por libre voluntad, la retirada fue tan fría.

- Tengo miedo, de no poder recordarte Syaoran, eres como mi hermano ya lo dijiste y no recuerdo nada de ti. – dijo cuando recupero toda su voz.

Syaoran se sintió aun mas vació después de esto, quizás era solo la retribución por lo que él había hecho, la manera que el destino le había dado la posibilidad de cumplir la promesa que le había hecho antes de decirle adiós, olvidarlo para siempre.

- No digas eso Sakura, vas a recordar, te lo aseguro, - dijo con convicción - volverás a tu vida y serás tan feliz como debiste ser todo este tiempo, yo te llevare a casa.
- Pero mi casa esta aquí.

Dijo de pronto. En un momento la vida que había tenido durante 8 años se estaba transformando en una nueva, se sintió algo asustada ante este pensamiento.

- Pero tu familia debe estar loca por querer encontrarte Sakura, debes volver.
- Yo…acabo de conseguir mi trabajo aquí y…
- Déjamelo a mi, esta bien, yo arreglare todo aquí y luego volveré contigo a Tokio, debes volver al menos para que sepan que estas bien, de acuerdo princesa

Sakura subió la mirada, ese nombre, ese nombre dicho de esa forma, eso le recordaba algo, el fondo de su corazón se calentó al oírlo.

- Si - dijo y le dedico una sonrisa - gracias Syaoran.
- Solo déjame moverme y arreglar un par de cosas, hablare con el director y diré que aplace tu asignatura un mes, si deseas regresar creo que será tiempo suficiente.
- Pero…
- Mi padre era amigo de la mitad del campo académico de Japón, con un poco de suerte de este director también, no te preocupes.

Sakura sonrió tímidamente, tomó el resto de su café frió, después de eso, Syaoran pagó la cuenta y salieron del lugar.

- ¿Te llevo a casa? – le preguntó.
- Yo… no tengo una casa, vivo en una casa de huéspedes.
- Te llevo a descansar entonces, creo que ha sido un día muy agitado princesa, quizás ya para mañana tenga todo solucionado así que sería bueno que hicieras una maleta.
- Si así lo haré.
- Vamos iremos por mi auto, creo que lo deje en el estacionamiento del colegio.
- Si.

La chica de traje sastre siguió al joven arqueólogo, había algo muy natural al estar con él, seguro era verdad, era extraño todo ese tiempo estando sola, cada persona que se había atravesado en su camino, en especial cada hico que había intentado conquistarla los alejaba sin meditarlo temerosa, pero este chico, en ningún momento había siquiera pensado que le dijera mentiras, le creía.

En un impulso se acerco a él y lo tomó de la mano, el chico la volteó a ver ligeramente y se sonrojó, pero no por ello la soltó, si, era calido, muy calido, era una sensación tan familiar, como él le había dicho, como si fueran hermanos.

- Porque no me imagine un auto diferente – dijo la chica y lo soltó, avanzo sin que él le dijera siquiera si era o no al correcto – eres un cliché de arqueólogo Syaoran.
- Bueno, no lo puedo negar – dijo sonriendo al ver por un segundo la chispa de Sakura en sus ojos.

Era un jeep todo terreno color verde, digno de un arqueólogo como él, ella dejó su portafolio en la parte de atrás y se sentó buscando en la guantera de él antes de que pudiera detenerla, la primera cosa que hallo fue una foto, el se quedo parado a un lado de la puerta del volante cuando vio a la chica mirar esa fotografía.

Eran ellos dos, ella vestida de un traje de ratona y el en un traje ceremonial chino que su padre le había regalado de su ultimo viaje cuando se había negado a disfrazarse para una fiesta cuando los dos eran niños.

Sakura miró la fotografía con ternura, una pieza de su pasado estaba allí ante sus ojos y el joven de ojos color tierra que la acaba de encontrar estaba en ella, tocó la fotografía con las manos solo para asegurarse que era real, lo era, muy real.

- ¿Tienes mas fotografías? – pregunto al chico que por fin estaba sentado a su lado arrancando el auto.
- Si, en mi hotel, tengo algunas de cuando teníamos 16 años.
- ¿Me las enseñarías?
- Pero…
- Podemos posponer nuestro viaje un día más verdad, de verdad, no me gustaría volver a casa con la cabeza vacía.
- Ven a cenar conmigo entonces. – dijo sonriente el chico
- Si – dijo con una enorme sonrisa - Solo llévame a casa de Kahou me cambiare y saldremos esta bien.
- Si.

Así el chico emprendió camino, ella le dio las instrucciones para llegar a la casa de Kahou y en 15 minutos llegaron, ambos bajaron y entraron a la casa. Subieron por unas largas escaleras tres pisos mas arriba y Sakura se detuvo a tocar una puerta, Syaoran se pregunto si viviría con alguien quizás la mujer que había dicho que se llamaba Kahou.

- Kahou sama, ya regrese - anuncio antes de que se abriera la puerta.
- Oh Sakura chan que bueno – dijo al mujer saliendo esta vez con una bola de arroz en la mano, al verla allí de pie con el apuesto chico de ojos castaños quedo sorprendida, era el primer chico que Sakura llevaba a casa y pregunto con curiosidad. – y tu amigo ¿Quién es?
- Kahou sama soy tan afortunada – dijo y a prisa fue a abrazar a la mujer de largo cabello – el es Lee Syaoran, él me conoce.

Kahou no recogió la información hasta que ella le alcanzó la fotografía que no había querido soltar y Kahou la vio también y casi brinco sobre el chico en un abrazo.

- Oh Syaoran, no sabes la bendición que has traído, ¿Tú la conoces?, ¿A su familia?, ¿Tiene papas?, ¿Hermanos?, ¿Qué estudiaba?, ¿Su mama como esta?, ¿Comía tanto como ahora?, ¿Eres su amigo?, ¿Eras su novio?, ¿Qué eran ustedes?, ¿La conoces desde mucho?, ¿Cuántos años tenían cuando se conocieron?, ¿Por qué esta vestida de ratona y no de murciélago?, ¿Qué es ese traje chino? ¿Tú eres chino?, ¿Por qué vistes tan raro?

Syaoran casi se mareo ante tantas preguntas juntas mientras Sakura subía las escaleras.

- Kahou sama ¿Puede quedarse Syaoran contigo en lo que yo me cambio de ropa?
- Oh claro Sakura chan así podré hacerle algunas preguntas.
- Gracias – dijo y miro a Syaoran que apenas volvían sus 5 sentidos correctamente – no me tardare Syaoran.
- Si – dijo mirándola cuando empezaba a subir las escaleras - Aquí espero princesa.

La chica subió una fila de escaleras mas y la vio abrir una puerta y entrar, era increíble como es que había hallado a Sakura de nuevo, un solo pensamiento lo recorrió, aun no sabía que e lo que pasaría, pero si ella recordaba a o no, él no la dejaría ir de nuevo.

Fin capitulo 1
21 de septiembre de 2006
11: 19 p.m.

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

Notas de autor: bueno ya estamos entrando en materia, estoy segura que todos se mueren de la curiosidad por saber que paso entre Sakura y Syaoran en el pasado verdad, pues los dejare con la curiosidad solo un poco mas

Bueno, me despido, si les ha gustado este capitulo espero me lo hagan saber por medio de un mensaje, vale, nos v4mos en la prixima actualizacion.

Mimi chan

​

 

Re: Amnesia

Hola:saludar: ¡¡¡

Por fin la acabe de leer y ¿sabes que...? !me encanto¡, muy buena continuación, pero lo que me tiene intrigada fue lo que Shaoran le hizo a Sakura ¿Deberas fue tan grave lo que él hizo para que no le creyera a Sakura tan facilmente que no sabia nada de su pasado?.


BYE Y SIGUE ASI¡¡¡:rosa: :labios: :flor:

 

Re: Amnesia

Oh lamento mucho la demora, es que he estado un poco alejada de el mundo de el internet snif snif y no habia podido vernir, pero aqui vengo de nuevo, me alegra la buena respuesta que ha tenido esta historia me alegra que els guste mucho.

gracias por sus comentarios, aqui dejo una pequeña respuesta:

_Marioly_: ah bueno más te vale he pero ya que conoces como va la historia shhh guardameloc omo un secreto, quien sabe quiza me anime a hacer un comentado epilogo y lo veas aquí primer, todo puede pasar jeje. Gracias por tu mensaje.

$â|<µrâ & £i:: pues para enterarte tendrás que quedarte a leer el fic jojo pero te va a agustar te lo aseguro, la historia esta muy romántica, vale la pena leerla Gracias por tu mensaje.

Pami: aquí seguro los hayas ya no tuve mucho tiempo para corregir esos errores jeje, pero espero que en sustancia la historia te este gustando, gracias por tus comentarios.

Sakura_1995: gracias por el comentario me halaga mucho que creas que es el mejor, pronto pondré la historia completa en misión anime junto con otras actualizaciones, solo tengamos paciencia vale. Gracias por tu mensaje.

bueno vamos por el siguiente capitulo.

Tata

Mimi chan​

 

Re: Amnesia

Todos los personajes de la serie Tsubasa Reservoir Chronicle son propiedad del grupo CLAMP hago esto sin fin de lucro, por ello no cometo ningún delito, aclarado esto aquí vamos.​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

AMNESIA​

Por Mimi chan​

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

​

Capitulo 2:​

​

Cena en casa de un extraño.​

​

Después de que ella bajo arreglada de su apartamento con dificultad se lograron despedir de Kahou salieron de allí y fueron a un hotel en el centro de la cuidad, donde se hospedaba Syaoran en lo que estaba en ese pueblo.

Ambos chicos subieron a la habitación a pesar de que en la recepción les dieron una mirada poco aprobatoria. Así llegaron a la habitación y entraron juntos, la habitación era un desorden en papeles y libros desordenados por todas partes, la mesa del recibidor estaba llena de mapas cartográficos y archivos en grades carpetas. El se apresuro a quitarlo todo de la mesa apenado, ella solo retiro una de las carpetas y se sentó en un sillón.

- No se por que pero me lo imaginaba así, - dijo y él la volteo a ver, se veía tan tranquila en medio de todo el desorden, como si estuviera acostumbrada a el… en un momento lo había estado después de todo, él siempre había sido así - no te preocupes, pides algo al cuarto, no se tú, pero yo me muero de hambre.
- Claro – dijo dándose por vencido y dejo lo que acomodaba bajo la divertida mirada de Sakura.

El joven empezó a buscar el teléfono entre todos los papeles y ante la entretenida mirada de su acompañante lo halló después de 5 min. Volteo a ver apenado a la chica que estaba haciendo un esfuerzo sobre humano para no soltarse a carcajadas

- Buenas noches, si quisiera ordenar algo de cenar a la habitación – escucho a la recepcionista – bien entonces por favor suba el cerdo agridulce, arroz y algo de sopa miso – Sakura lo vio algo desdeñosa – Oh no, olvide lo se la sopa que sean tallarines fritos.

Colgó y volteó a su acompañante con un suave sonrojo, que lo miraba con una mirada sorprendida, sus amplios ojos esmeraldas brillaban de sorpresa.

- Casi olvido que detestas la sopa miso - dijo y se rascó tras la nuca despreocupado, y le ladeó la mirada - no te preocupes ya comí el arroz y no es dulce, te gustara.

Sakura lo miro casi con ternura y sonrió feliz mientras el chico aun recogía los papeles por allí dispersos.

- Todavía lo recuerdas, han pasado 5 años y aun recuerdas todo eso – dijo y el chico detuvo lo que estaba haciendo, ella no se sentía incomoda después de todo, ella sabía que su vida era así, o al menos si no lo sabía, lo seguía sintiendo.
- Sobre ti no hubiera podido olvidar nada Sakura – dijo sin mirarla directamente.
- Y… - la chica bajo la mirada sonrojada, su corazón latía muy rápido, nadie conocía tanto de ella como el extraño delante de ella, estaba emocionada y desconcertada al mismo tiempo – y dime ¿Me enseñaras esas fotos?
- Claro – dijo casi dando un salto, había olvidado la razón por la que ella había venido a cenar con él – las traeré espera aquí.

Sakura vio al chico alejarse de esa habitación, el chico entro en la recamara y ella se dedico a observar su espacio por un momento, ella se sentía gusto a pesar de que el desorden la solía poner un poco nerviosa este no, se sentía casi confortable entre el aroma de tinta nueva y papel reciclado, algo por dentro le decía que esto era parte de lo que el era, había una ambiente que era acogedor, se sintió emocionada al reconocer su primer sensación conocida en mucho tiempo. El chico salio después de un minuto, con un álbum de fotos.

- Aquí esta – dijo y le paso el álbum sentándose a su lado.
- ¿Siempre viajas con el? – pregunto ella con simplicidad.
- Siempre, es mi mejor amuleto – dijo con una sonrisa sincera sin mirarla, ella lo agradeció, un sonrojo se había extendido por todas sus mejillas.

Sakura miró el álbum en sus piernas, el color negro en las pastas y no se atrevía a abrirlo encima de sus piernas, suspiro alto y lo abrió, la primera foto que vio fue…

La chica se llevo una mano al rostro y rió detrás de ella, esa foto, la foto de la ratona y el chico de traje verde, allí estaba, ese recuerdo que aparecía en sus sueños allí estaba.

- He soñado muchas veces este momento, ¿Qué paso aquí? – dijo ansiosamente - dime por favor.
- Si – dijo mirando con una sonrisa la foto – yo acaba de llegar a Tomoeda, era la primera reunión a la que iba, al parecer fui un completo extraño para todos pero no para ti, solo nos habíamos visto aun vez cuando mi papá fue a tu casa a saludar a tu papá, pero esa tarde la pasaste todo el tiempo conmigo, fue como si nos conociéramos de toda la vida, fue muy divertido, desde entonces te volviste como mi hermana mayor.
- De verdad – dijo enternecida.
- Si – dijo el chico mirando la foto en sus piernas con una simple sonrisa.

Sakura miro con más cariño la foto quiso recordar, de verdad que se esforzó pero su mente estaba completamente vacía, nada, sacudió su cabeza y siguió mirando las fotos, todas las fotos eran de ellos dos, de niños, en traje de primaria y según iba pasando las paginas más crecían en ellas, y poco a poco de hacían adolescentes, las ultimas fotos eran de ellos dos en uniformes de secundaria, tan juntos, tan íntimos entre ellos, pero eso era normal, como él decía ellos eran como hermanos.

Al terminar las fotos, las lágrimas en sus ojos empezaban a bajar.

- Sakura… - dijo viéndola con pesar. – ¿Estás bien?
- No hay nada, - dijo tratando de detener a las lagrimas sin remedio - no hay nada en mi cabeza Syaoran ¿Por qué?
- No te preocupes – dijo y la atrajo sobre su pecho - todo regresara poco a poco.

Ella se dejo recargar en su pecho con calma, se sentía tan a gusto allí, tan tranquila y se calmo poco a poco, sintió como él la rodeaba en sus brazos y sintió algo que en todos esos años sola no había sentido, mucho mas que el sentimiento de alguien que la concia, alguien que de verdad la quería, Syaoran la quería y se lo decía solo con un abrazo.

TOC TOC​

Syaoran casi maldijo al escuchar la puerta, seguro era el servicio de habitación, se sentía tan feliz al tener a la delicada chica en sus brazos después se tanto tiempo a pesar de la dolorosa situación, la alejó con cuidado y abrió la puerta para que el servicio pasara, el chico con la comida pasó y dejó las cajas con comida y después de recibir la propina se retiró.

- Espero y aun tengas hambre Princesa.
- Si – dijo más aliviada la chica y contenta por el mote que él le daba – mucha, trajeron té.
- Si, toma, - dijo tomando una de las tazas y llenándola, la acerco a donde ella estaba - lo dulce te hará mucho bien.

Ambos chicos se sentaron a comer lo que les había mandado, en silencio, había pasado algo muy raro en ese momento y ninguno de los dos quiso ponerse a discutir el que había hecho y por que, eso ya vendría después.

- Cuéntame mas Syaoran quisiera saber todo lo que puedas decirme – dijo después de haber terminado toda la comida.
- En realidad no se que decir. – dijo dando los últimos sorbos a su taza de té.
- Lo que sea, - insistió ella - será importante.
- Tuvimos una infancia muy feliz, de alguna manera hasta que yo no llegue a Tomoeda no tenía ningún recuerdo… persistente, había viajado con mi padre por tantos lugares que no había tenido suficiente tiempo para tener ningún amigo dijo recordando a su padre – aunque no me puedo quejar, todo con él fue muy divertido pasamos por una cantidad impresionante de aventuras, pero no puedo negar que llega a Tomoeda fue lo mejor.
- ¿Por qué?
- Por que te conocí a ti.

Sakura no se esperaba una respuesta así, Syaoran era tan sincero y tan franco que la desconcertaba un poco, él provecho para juntar los trastos sucios y ponerlos fuera del cuarto, cuando pasara el servicio se los llevaría y no los interrumpiría de nuevo. Regreso a ver la chica que seguía en la misma posición que la había dejado.

- A ti todo el mundo te amaba, - reanudo él y ella lo volteo a ver, con el suave rojo en su cara - tenías esa forma de ser que hacía que todas las personas quisieran estar contigo, de alguna manera tienes una sonrisa… que calienta el corazón de las personas.
- Nunca me habían dicho algo tan lindo – dijo ella de nuevo agachando el rostro.
- Pero así es, tu sonrisa es… - alguna vez su padre había dicho eso él no había podido estar mas de acuerdo - como la primavera.

La chica bajo la vista sonrojada, Syaoran era todo el tiempo tan dulce, como había ella podido alguna vez estar molesta con un chico tan dulce, ¿Por qué?, no se podía imaginar algo que hubiera hecho ese chico tan bueno para que hasta la palabra se hubieran retirado, para que ella en un momento le hubiera pedido que no se acercara de nuevo a ella.

- Syaoran, ¿Qué fue tan malo como para que ya no nos habláramos?, aun sin mis recuerdos yo me siento tan feliz de que estés aquí, no he tenido esta sensación nunca con nadie – dijo y lo volteo a ver, el chico tenia la expresión en la mirada de ternura tan grande y al mismo tiempo una huella enorme de melancolía – se que a pesar de que no te recuerdo, te quiero mucho.
- Tu… - su corazón salto en ese momento, había pensado que nunca volvería a escucharla decir eso

Como responder a esa pregunta, de una forma en la que no hiciera que en lugar de conservar ese cariño lo odiara, no quería nunca mas eso, había sido tan duro que ella lo hubiera odiado, había sido una tortura los últimos años.

- No puedo decírtelo, - dijo seriamente - no es el momento.
- Yo… - quiso ella insistir
- Ahora lo importante es que vayamos a casa, que tú veas a tu familia y que sepan que estas bien, eso es lo mas importante, te prometo que cuando lo hayas hecho yo te diré que fue lo que paso, pero primero quiero que estés a salvo en casa, ¿Está bien Princesa?
- Esta bien - dijo dándose por vencida, lo mas seguro es que él tuviera razón - Syaoran.

La chica miro el reloj en su muñeca, eran cerca de las 1 de la madrugada, como podía ser que el tiempo hubiera pasado tan rápido.

- ¡Cielos es muy tarde! – dijo casi saltando del sillón donde estaba sentada.
- Cierto, no me di cuenta de la hora – dijo sorprendido también - ¿estas cansada?
- No mucho – dijo mientras un bostezo la delataba.
- Es muy tarde creo que hasta para llevarte a casa, no es seguro andar en la calle.
- Puedo tomar un taxi si no quieres llevarme – dijo frunciendo el seño
- No, no se trata de eso – dijo reprimiendo una risa ella no había cambiado en nada. - Si quieres puedes quedarte aquí, descansa en mi habitación.
- Pero… - ella quería reclamar, eso no era correcto.
- Te aseguro que estas completamente a salvo - dijo él con seriedad – nunca te faltaría al respeto, nada pasara.

Sakura lo pensó por un momento, la verdad andar por la calles a esa hora y mas en un vehiculo como el de él, en el que era completamente fácil que alguien mal intencionado les diera un susto de muerte no era una idea seductora, y además quería estar con él, tanto como pudiera, pero eso no seria algo que le dijera.

- Está bien.
- Esta al fondo – dijo él señalando la habitación en la que antes había entrado – esta un poco desordenado pero...
- No importa – dijo ella yendo a su lado y se acercó, puso un beso en su mejilla y lo volteó a ver, él tenia los ojos cerrados - Gracias Syaoran, hasta mañana
- Hasta mañana. – dijo en un susurro con los ojos ente abiertos

Syaoran vio a la chica ir hacía la habitación abrir y cerrar la puerta de madera después, se tocó la mejilla y soltó un hondo suspiro, un escalofrío lo recorrió, y se pregunto por un par de minutos si no estaría en realidad soñado “Sakura…”

Sakura al entrar halló un desorden parecido al que había estado en la sala de estar, papeles y fólder tirados por todos lado, la maleta de viaje que tenia tirada a la mitad de la cama y su maleta mas que estaba en una esquina con ropa de vestir, ella recorrió la habitación antes de dormir tratando de recordar al muchacho que estaba en la sala, no había nada que la hiciera recordar, había pasado 5 años después de todo, el seguramente había cambiado mucho en todo ese tiempo era de esperarse.

Decidida a dormir por fin quito la mochila de la cama y al moverla pudo ver debajo de la mochila una foto, una foto que seguro Syaoran no le había querido enseñar, peleo un par de minutos entre verla o no pues estaba de cabeza, pero la curiosidad fue mucha, la levantó y la miró, eran ellos, pero… estaban abrazados, y no era un abrazo normal, ella lo tenía por la espalda fuertemente abrazado mientras descansaba su cabeza en su hombro, él la miraba aun a esa corta distancia y ambos parecían tan felices así de cerca, la mirada que se dedicaban, era mucho mas allá que la que un par de amigos se dedicaría.

Seria posible… seria posible que ella y Syaoran hubieran llegado a ser más que amigos.

Dejó la foto dentro de la maleta y se recostó, las almohadas tenían un lejano perfume a arena tibia y húmeda, un aroma que le traía un recuerdo agradable y profundamente conocido, arrullada por este aroma se quedo dormida.

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

Después de las 3:00 a.m. un chico está inclinado sobre la puerta de una habitación, un metro lo separa de la cama donde la joven de cabellos castaños esta dormida, respirando suavemente abrazando la almohada de un lado.

Había hecho un par de llamadas en cuanto ella se había retirado, había despertado a algunas personas pero quería averiguar cosas antes de emprender el viaje. En la escuela donde daba clases Sakura, como supuso el director y su padre había sido amigos, y se había dado la autorización, de todos modos la asignatura que daba sakura era nueva y bien podían retrazarla un mes mas si era urgente lo que ella debía resolver, había llamado a Tomoeda con los amigos que había dejado allá aunque eran pocos y le había asegurado que el profesor Fujitaka seguía viviendo allí. Todo era cuestión hoy de ir a Tomoeda y llevar a Sakura a casa, y después… después él tendría que decirle la verdad.

La verdad…

Cuando sakura y Syaoran habían cumplido los 14 años, podía decirse que eran los mejores amigos del mundo, ella era una chica que atraía todas las miradas por su ángel, su alegría, su entusiasmo, se entregaba con todo a todo lo que hacía, bríllate como una estrella, mientras él por su parte no se quedaba atrás, las chicas se veían irremediablemente atraídas por ese aire de misterio y de seriedad del chico de hermosos ojos castaños, pero con la pubertad se habían desatado también los deseos de los dos, sin darse cuenta la cercanía, la convivencia diaria, la ternura que uno por el otro se tenían, se había convertido en amor, los dos se habían enamorado secretamente uno del otro, y un día, casi por error se dieron un beso y se hicieron novios.

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-: Flash Back:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

- Syaoran, Syaoran – gritaba una chica en medio de la gente que salía con maletas en mano.
- ¿Sakura?

El joven de ojos castaños busco entre la gente, y la vio allí, vestida aun con el uniforme de la escuela, sin importar mucho soltó las maletas y corrió donde estaba ella, su padre solo lo vio con una simple sonrisa y recogió sus maletas. El joven no tardo en llegar a un lado de ella y ella con los brazos abiertos lo recibió, se hundieron en un abrazo calido durante lo que pareció una eternidad.

- Te extrañe tanto Syaoran – dijo sinceramente ella y empezó a llorar.
- Yo también Sakura – dijo igual sin intención de soltarla – la expedición fue mas larga de lo que imagine de haberlo sabido no hubiera ido, duro casi todo el verano.
- Pero ya estas aquí – dijo ella con alegría.

Syaoran la volteó a ver y vio que lloraba, tomó su rostro entre sus manos y empezó a limpiar sus lágrimas, ella se sonrojó pero él no la soltó, durante un momento muy largo sus ojos se conectaron y supieron con el corazón la verdadera razón por la que se habían extrañado tanto.

- No llores Princesa
- Para ti es fácil decirlo Lobito – dijo frunciendo el seño – tú te fuiste a correr aventuras y me quede aquí sola a esperarte.
- Hablas como aun verdadera princesa de cuentos esperando a un príncipe
- Tonto.

Quiso darle un golpe en el pecho pero alguien a su espalda en medio de tanta gente la empujó y fue a caer con todo su cuerpo contra él, él la sostuvo para no déjala caer y antes de darse cuenta como, sus rostros quedaron juntos y sus labios se rozaron, él no tomo una segunda oportunidad y le robó un beso que ella correspondió cuando salio del estupor de la sorpresa. El beso duro muy poco los dos apenados por tanta gente a su alrededor y el papá de él tan cerca, los dos se miraron sorprendidos y alegres.

- No volveré a ir a ningún lado Princesa, al menos no sin ti.
- Syaoran.

:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-: End Flash Back:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:-:​

Después de eso todo había sido maravilloso por un año entero, ellos se adoraban, pero un día, sin mas una chica llego desde China, demasiado empecinada, demasiado, hermosa, demasiado insistente, Lee Mei Ling era prima de Syaoran, ella le había dicho que estaba enamorada de él, nunca creyó posible ninguno de los dos que ella en realidad estuviera enamorado de él pero lo estaba, desde que tenía memoria. Cuando eran pequeños había vivido juntos un tiempo en China en los constantes viajes de el papa de Syaoran, y se había tratado, ella era una niña que desde la cuna había obtenido todo lo que quería y se había encaprichado con él por eso el día menos pensado llego a Tomoeda con toda la intención de pasar una temporada en la casa de su primo.

Él no se sentía a gusto con la chica en su casa, era demasiado liberal, demasiado necia, y muy hermosa. Sakura había notado cambios sutiles en su novio y por más que había insistido en que era lo que pasaba él nunca tenia una respuesta.

Un día un conjunto de factores dispersos hizo ella los encontrara a solas escondidos en un lugar de la escuela dándose un beso, se negó a recibir ninguna explicación. Le negó el derecho de la duda.

Ese día, él y su prima había quedado platicando, ella se le había confesado su amor y le había dicho que volvería a China muy pronto, pero que no quería hacerlo por que estaba muy enamorada de él, Syaoran le dijo que estaba enamorado de Sakura, que la amaba, que lamentaba no poder corresponder sus sentimientos, su prima solo le pidió un beso, y él no tuvo el valor de negárselo, pero jamás imagino que Sakura pudiera verlos.

Después de eso trato por todos los medios hablar con ella pero ella se negó todo el tiempo, Mei Ling se fue a casa, pero eso no cambio nada, después de un mes, de que ella se negara a hablar con él se dio por vencido, le dijo a su padre si podía seguir viajando con él, contrariado y confundido vio la verdadera desesperación del joven en sus ojos y se lo permitió.

Solo un año después al ir a China Mei Ling le había confesado la verdad.

Ella había ido con Sakura y la había envenenado había creado todo un circo para poder engañarla y hacerle creer que ellos estaban juntos, pero su fe era ciega con él, había fabricado fotos, cartas, llamadas por teléfono, todo, y ella no lo aceptaba, había llegado hasta el punto de armar la pantomima de que aquel beso, solo para ella, tenía demasiadas pruebas en su contra, Mei Ling había tenido la idea errada de que él iría a ella si dejaba a Sakura por eso lo había hecho, se había equivocado, jamás imagino que él no sentía nada por ella y que se iría incluso mas lejos después de destruir esa relación.

Syaoran entendió todo entonces, ella estaba plenamente convencida de que ellos dos se entendían, tenía pruebas de todo, falsas pero eran pruebas de todo, y jamás le creería de nuevo, así que jamás volvió, ella le había pedido la ultima vez que no la volviera a buscar, que ella seria feliz si lograba olvidarlo y él le permitió la felicidad a costa de la suya propia.

Pero jamás se imagino que esto es lo que realmente había pasado, jamás imagino que ella estuviera en estas condiciones, prefería saberla a salvo que sufriendo por su presencia, así que jamás se volvió a acercar a Tomoeda, y cuando un día había intentado llamar, el padre de Sakura le dijo que ella jamás volvería a hablar con él, y había cambiado el numero un poco después.

Nunca entendió el sentido literal de las palabras “Ella jamás volverá a hablar contigo”

Él se movió despacio junto a la chica dormida que lucía aun en sueños una suntuosa sonrisa, como había deseado verla de nuevo, cuanto había querido verla decirle toda la verdad pero ahora, como explicarle nada, como podía decirle cualquier cosa, no con su mente confundida y perdida, primero debía llevarla a casa, ponerla a salvo de todos, incluso de si mismo, si después de ir a casa y ella escuchara la historia quería perdonarlo, que así fuera, si no… mientras estuviera a salvo estaba bien.

- Princesa… - dijo y dejo vagar sus dedos en la curva de su mentón – te prometo que pase lo que pase, yo te devolveré tus recuerdos.

Sakura sonrió mas ampliamente al escuchar la voz del chico en medio de sus sueños, él se recostó a su lado, y espero a su lado a que el amanecer volviera.

Fin capitulo 2​

19 de octubre de 2006​

5: 45 p.m.​

​

__________________​

​

​

​

Por ahora es todo, espero que la historia este siendo de su agrado, no olviden dejar algun mensaje. ​

​

​

​

Mimi chan​

​