Academia de baile.

Tema en 'Fanfics Abandonados de Inuyasha Ranma y Rinne' iniciado por rakel_fuenla, 9 Abril 2007.

?

¿Qué tal esta el fic? ^.^

  1. Muy bien ^.^

    100.0%
  2. Regular o.o

    0 voto(s)
    0.0%
  3. Mal ò.ó

    0 voto(s)
    0.0%
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    rakel_fuenla

    rakel_fuenla Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    22752
    Re: *academia De Baile*

    Episodio 41: Juegos y muchos besos: Hallowen: 3ª Parte.

    Kagome: aunque no lo creas, soy muy observadora, bueno y se puede saber de que conoces tu a Kikio?
    Inuyasha: uf, de mucho, la conocí cuando tenía dieciséis años, mi historia con ella es muy larga de contar, y considero que ahora no es ni el momento ni el lugar.
    Kagome: Qué?? Me vas a dejar con la intriga?
    Inuyasha: si. ^.^
    Kagome: serás… un momento, y como es que no os habláis??, no se supone que fuisteis amigos?? Además he visto que ella te mira algo mal, y en las clases te trata fatal.
    Inuyasha: aunque no lo creas, fuimos mucho más que amigos, pero por mí culpa, como siempre, todo acabó mal, ella casi…, fastidie todo, pero no tengo ganas de seguir hablando de Kikio.
    Kagome: ya lo veo …
    Inuyasha: el que ves?
    Kagome: Kikio fue tu primer amor, ella se enamoro de otro y te dejo!

    Inuyasha: (riéndose) si todo hubiera sido como eso!, no, no fue así, pero por el momento no te lo voy a contar, el día que te encuentres descansando sobre mi pecho y me digas que me quieres te lo contaré, pero, como al parecer todavía queda mucho para eso, no lo sabrás!
    Kagome: (un poco sonrojada) Inuyasha!!!!!!
    Inuyasha: Jajaja, anda vamos a bailar que hasta las cinco tenemos tiempo.

    La noche transcurrió entre bailes, risas, bromas y sustos, sin ta siquiera darse cuenta, la casa se fue desalojando hasta que solo quedaron nueve personas allí; Inuyasha, Kagome, Sango, Miroku, Lin, Shessoumaru, Hoyo, Kouga y Ayame.

    Cuando todos iban a empezar a recoger aquella casa, Sango y Miroku los obligaron a que se sentaran en círculo.
    Shessoumaru: (sentándose al lado de Lin) Y se puede saber para que son estas chorradas?
    Sango: (sentándose entre medias de Kagome y el hueco de Miroku) ahora lo veréis.
    Cuando Miroku vino y se sentó, puso detrás suya varias botellas.
    Miroku: (sentándose) muy bien, seguramente que algunos de vosotros habréis jugado a esto antes, para los que no, os lo explico.
    Shessoumaru: y por qué motivo tenemos que jugar?
    Sango: es para conocernos todos mejor y para pasar un buen rato.

    Miroku: bien, se llama ”El juego de la verdad”, y como su propio nombre indica consiste en decir la verdad, se formula una pregunta y hay que ser sinceros, pero, no solo hay que serlo, si no que si es verdad, hay que beber un trago de Ron. (Sacando una botella de detrás de su espalda)
    Sango: bien pues, quien quiere ser el primero?
    Miroku: nadie? Esta bien, yo empezaré, verdad que todos los aquí presentes estamos enamorados? Bua, eso no tiene gracia, seguramente sea así, mejor, ¿Verdad que todos los aquí presentes estáis enamorados de alguien que se encuentra aquí? Glun! (bebiendo un poco de ron) si no lo estáis, no bebáis de la botella, y como ya he dicho, hay que ser sincero, sino no servirá de nada!
    Miroku pasa la botella a Sango.
    Sango: no sabía que estuvieses enamorado Miroku, precisamente tú? Me pregunto de quién? Bien, pues he de confesar que yo también. Glun!
    La botella pasa a manos de Kagome, ésta mira la botella, luego a Inuyasha, otra vez a la botella y por último bebe, aunque muy poco de ella.
    Kagome: (con cara rara) esto esta malísimo!
    Inuyasha: (quitándola la botella) anda trae, tú no sabes beber.
    Éste mira a Kagome muy seriamente y después da un buen trago de dicha botella, se la pasa a Lin, su compañera de al lado, ésta mira a Shessoumaru y después da un trago.
    La botella pasa ahora a manos de Shessoumaru, éste mira muy seriamente a Lin y bebe. Después pasa la botella a Hoyo, el cual, muy sonrojado da un gran trago a la botella y mira atentamente a Kagome.
    Hoyo pasa la botella a Kouga y este dedica unas palabras.
    Kouga: se respira amor en el ambiente eh! Jaja, pues os confesaré que yo también estoy enamorado de una de las damiselas que se encuentra en este circulo, eso si, no diré quien es.
    El chico da un trago, mira a Kagome y discretamente le guiña un ojo.
    Ayame: (quitándole la botella a Kouga) que rule, que rule! Glun! Te quiero! Al chico presente que aquí se encuentre! Jajajaja.

    La botella vuelve a su primer propietario.
    Miroku: (cogiendo la botella a Ayame) Bueno, bueno, esto se va poniendo serio, algo mas picante, ¿Verdad que todos los aquí presentes ya no sois vírgenes? El primer trago!! Glun!!!
    Sango: (cogiendo la botella de Miroku) ¿Cómo se te ocurre hacer semejante pregunta, pervertido?
    Miroku: (acercándose al oído se Sango) eso significa que aún eres virgen? No te preocupes, tiene remedio!
    Sango: (Plaff) Pervertido! Toma Kagome la botella!
    Sango entrega la botella a manos de Kagome.
    Kagome: (roja) yo…
    Kagome iba a beber de aquella botella, pero antes de que lo hiciera, Inuyasha se la había quitado de la mano.
    Inuyasha: anda trae! Esta claro que eres virgen, tonta! (Da un trago)
    Éste pasa la bebida a Lin, ella la mira detenidamente y después se la pasa a Shessoumaru.
    Lin: (dándosela a Shessoumaru) A quien quiero engañar?
    Shessoumaru: (con risa cínica y sin pronunciar palabra) Glun!
    Hoyo: (cogiendo la botella de Shessoumaru) bueno pues, yo… (Sonrojado) toma Kouga. (Pasándole la botella)
    Kouga: (riéndose) Jajaja, no me digas que eres virgen?
    Inuyasha: (girándole desde el otro extremo) y tú? Yo pensaba que también lo eras?
    Kouga: pues resulta ser que no!
    Iba a dar un sorbo pero antes de que así fuera Miroku habló en alto.
    Miroku: recordad que hay que ser sinceros ^.^
    Kouga: ¬¬ Miroku!!! Anda toma Ayame!
    Inuyasha: Jajaja, el que se burlaba de Hoyo, lo sabía, tú también lo eres!
    Kouga: Idiota!!!!
    Ayame: (bebiendo un buen trago) Basta ya los dos!
    Kouga: (sonrojado) Ayame, no me digas que tú?
    Ayame: si, y qué? (Pasa la botella a Miroku)


    Después de una hora jugando a lo mismo, Miroku decidió cambiar de juego, algunos estaban muy sonrojados, no por las confesiones, en parte, si no por la cantidad de alcohol que ya habían tomado. Después de haberse bebido cinco botellas, el nivel de alcohol en sangre de algunos, hacía que empezaran a marearse.
    Miroku: (riéndose) Jajaja, es que no aguantáis en alcohol? Bueno, pues eso lo solucionamos ahora mismo, vamos a jugar al “Juego de la botella”
    Todos: más alcohol no Miroku!!!!!!!!!!!
    Miroku: tranquilos, este juego es de mis preferidos, y no tiene bebida, solo utilizaremos la botella vacía.
    Inuyasha: no será lo que yo estoy pensando no? ¬¬
    Miroku: (riéndose) SI!!!! bien, el juego consiste en que se gira la botella en el suelo, y en la persona en la que pare hay que darle un beso, Jajaja, da igual si es chico o chica tiene que ser un beso en la boca, vosotros decidís si tiene que ser con lengua o sin ella.
    Sango: Miroku!!!!!!!!!!! òó
    Miroku: Jajaja, era broma, bien, quien empieza?? Nadie?? Pues yo mismo!!
    Miroku pone la botella en medio, la hace gira y después de unos segundos, la botella se para en Kagome.
    Kagome: yo???
    Miroku: amiga!!!!! Siempre he deseado darte un beso, y que mejor ocasión que esta?
    Kagome: no Miroku, yo no juego!!!!!!!!!
    Miroku: lo siento, pero una vez que se empieza no se puede volver atrás!
    Kagome: esta bien…
    Miroku llega hasta donde Kagome, ésta se hecha hacia atrás, pero, Miroku es más rápido y acerca sus labios asta los de Kagome, ésta por suerte se agacha un poco y Miroku acaba dándola un beso en la barbilla.
    Kagome: no pensabas que me iba a dejar no?
    Miroku: (moviendo las manos) lástima, me hubiera gustado uno de tornillo.
    Inuyasha: (dando un puñetazo a Miroku en la cabeza) Miroku!!!!!!!!
    Miroku: u.u Ya sabes que yo siempre bromeo, bueno ahora te toca a ti Sango.
    Sango: (roja) yo?? Esta bien.
    Sango hace girar la botella y esta se acaba parando entre medias de Miroku y Ayame, ella la mueve un poquito y dice.
    Ayame: estaba claro que es Miroku el que tiene que besarte Sango!!!!!
    Sango: òó Esta me la pagas!!!!!!
    Miroku: ^.^ Sango, no sabía que nuestro primer beso fuera a ser así!
    Sango: >.< Hay!!!
    Miroku se acerca a Sango, evidentemente ella se hecha hacía atrás, Miroku pasa su mano por la estrecha cintura de ella y después se acerca hasta sus labios, cuando aún no los ha besado le lanza una hermosa mirada, ella se sonroja y cierra los ojos, a cambio, él roza sus labios con ternura y después le da un pequeño beso en la mejilla.
    Todos: O.O Que bonito!!!!!!!! Que bonito!!!!!!! Que bonito!!!!!!
    Sango: (roja) Mi… ro…ku…
    Miroku: (se acerca a su oído) mi primer beso con tigo no quiero que sea en público.
    Sango: (aún más roja) >< Miroku!!!!!!!!!!!
    Kagome: (riéndose) en cima que no se ha aprovechado de ti!!!!!!! Bueno, a mí ya no me toca, como ya me han besado!!!!!!!
    Inuyasha: a no, le toca a todos, tu turno Kagome!!!!!!!!

    Ella hace girar la botella y ante su gran sorpresa la botella deja de girar y se para en frente de Shessoumaru.
    Shessoumaru: no pienses que me voy a dejar besar por ti!!!!!!!!!
    Miroku: Jajaja, así son las reglas, Kagome tienes que besar a Shessoumaru!!!!!!
    Kagome: No!!!!!!!! No puedo besarle, lo siento pero no!!!!!!!!

    Sango: se siente, yo no quería besar a este pervertido y mira lo que me ha tocado hacer!!!
    Kagome: he dicho que no y es que no!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    Shessoumaru: (se acerca asta ella) Niñata!
    Rápidamente Shessoumaru coge la mano de Kagome y la atrae hacia él, después la da un pequeño beso en la mejilla y regresa a su sitio.
    Kagome: (rozándose la mejilla) Shessou… maru
    Inuyasha: (a punto de matar a su hermano) ME TOCA!!!!!!!!!!!!!!!!! >.<
    Inuyasha gira la botella y esta se para enfrente de Kagome.
    Kagome: No!!!!!!!! A mi ya no me podéis besar mas!
    Inuyasha: (levantando una ceja) a no?
    Inuyasha la da un ligero golpe que hace que Kagome se eche hacia atrás, después se acerca hasta sus labios y la besa hasta el punto de que consigue rozar su lengua, hubiera seguido si no llega a ser porque al abrir sus ojos se da cuenta de que todos, absolutamente todos estaban mirándolos con la boca abierta.
    Inuyasha: (sonrojado) Y se puede saber que miráis tanto? Solo ha sido un beso!!!!!!
    Miroku: (silbando) Bravo!!!!!!! El primer beso con lengua de la noche!!!!!! Bravo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    Kagome: (roja) Inu…
    Lin: bien, me toca!!!!!!!!!!!
    Lin gira la botella y ésta se acaba parando en frente de Ayame.
    Lin: Ah no!!!!!! A mi no me van estos rollos!!!!!!!!
    Ayame: (riéndose) Pues a mí menos!!!!!!!!
    Inuyasha: las reglas son las reglas!
    A regañadientes Lin se acerca hasta donde esta Ayame y después la da un pequeño pico en la parte superior del labio.
    Lin: (sonrojada) estáis a gusto?
    Miroku: si!!!!!!!!!!!

    El siguiente en hacer girar la botella es Shessoumaru, para su suerte, la botella se había parado en frente de Lin, ahora si que le iba a demostrar lo que era un beso de verdad, mejor que el de su hermano, claro que si!
    Lin: Shesso…
    Shessoumaru rodea a Lin con sus brazos, se acerca hasta ella, pasa su lengua por los labios de la chica y después los besa cálidamente, esta así un rato hasta que la chica abre la boca para intentar respirar y él introduce su lengua en la boca de la joven.
    Todos: (silbando) Que bonito!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    Inuyasha: ¬¬ Que la vas a asfixiar!!!!!
    Shessoumaru: (separándose de Lin) Siguiente.
    Lin: (aún temblando y roja a más no poder) ah… Sexymaru…
    Hoyo gira la botella y esta se para enfrente de Kagome.
    Kagome: No!!!!!!!!!!! Me niego a que me besen más!
    Hoyo: Ka… go…me
    Sango: Ahh, las normas son las normas!!!!!!!
    Hoyo se acerca hasta ella, temblando y muy sonrojado la da un ligero beso.
    Hoyo: (en su oído) Lo siento Kagome.
    Kagome: no importa Hoyo, solo es un juego.
    Inuyasha: (con ojos de furia) con que solo es un juego?? òó
    Kagome: tranquilo Inuyasha ^.^
    Miroku: tú turno Kouga!
    Kouga gira la botella y esta se para en frente de Sango.
    Sango: no por dios!! Con uno ya he tenido suficiente.
    Kagome: (imitando a Sango) las normas son las normas.
    Kouga: esta me la pagareis todos, especialmente tú Miroku!
    Miroku: yo?
    Kouga: si no hubieras dicho nada de este juego!!!!!!!
    Miroku: Oye que a mí no me hace ninguna gracias que le des un beso a Sango!!!!
    Sango: (sonrojada) Mi.. roku…
    Miroku: vamos, que no creo que a ella le gusta que le besen.
    Kouga se acerca hasta Sango, cierra los ojos y sin tan siquiera quererlo, le besa en los labios, después se separa de ella y vuelve a su sitio tan rojo como un tomate.
    Sango: (pensando) Besa mejor Miroku.
    Ayame: (morada de la envidia al no haber sido besada por Kouga) me toca.
    Ella hace girar la botella y para su gran sorpresa, esta se para en la persona que ella quería, Kouga.
    Kouga: Otra vez???
    Kagome: pues imagínate a mí que ya me han besado cuatro veces!!!!!!
    Ayame llega hasta Kouga, le sopla un poco en el oído y después de un sonrojo por parte de ambos, se abrazan y se besan tiernamente, después se miran y se vuelven a besar.
    Miroku: (aplaudiendo y silbando) Bravo! Pero con uno era suficiente, menos mal que no te gustaba Kouga, si llega a gustarte!!!!!!!
    Kouga: òó Miroku!!!!!!!!
    Sango: (mirando su reloj) Pero bueno, si son las siete de la mañana!!!!!!!! Vamos, menos jueguecitos y ayudarme a recoger todo este lío.
    Todos: Si!!!!!!!!

    A las nueve de la mañana y después de recoger todo y volver a ponerse sus ropas normales, regresan todos juntos a la Academia Takahashi, pero, manteniendo aún todas las diversiones vividas en aquel lugar, desde los juegos más inusuales y los besos más sensuales y provocativos hasta las confesiones que nunca creían poder escuchar, todo ello en una casa que por unas horas se había convertido en una verdadera mansión encantada.

    Continuara…





    Episodio 42: La mirada a través de un cristal.

    Los días pasan y apenas somos capaces de verlo, tanto, que ahora que por fin tenemos vacaciones, es cuando más nos damos cuenta de lo mucho que extrañamos a nuestros más allegados, personas, que en realidad no tienen ningún vínculo de sangre o familiar que nos una a ellos, pero, que realmente queremos y que sin darnos cuenta, cada día nos vamos familiarizando más con ellos, es ahora, cuando en plenas vacaciones navideñas Inuyasha echaba en falta a Kagome, a Miroku, a Sango, e incluso a todos aquellos personajes que, aunque a simple vista no tuvieran nada que ver con él, ahora pasaban por su mente mientras observaba el desprendimiento de los copos de nieve, desde el más alto cielo, precipitándose contra la ventana de su habitación.

    Después de la cena de Nochebuena, en Hon Kong, con toda la familia de su madre, habían regresado a Tokio, para la gran fiesta de Nochevieja, a él personalmente no le interesaba lo más mínimo una gran fiesta en la que no conocía a nadie, y en la que, seguramente muchas de sus primas y amigas de sus padres intentarían bailar con él, chicas que, para su gusto bailaban fatal y que no tenían comparación con Kagome.

    Era ahora, cuando los recuerdos de aquella chica pasaban por su mente, entrelazándose con todas aquellas palabras que le dijo, palabras que le hicieron daño, palabras que, simplemente dolieron.

    Flash Back…. (Un mes antes)

    Después de la fiesta de Hallowen, cada uno volvió a su rutina, esforzándose en todos sus bailes y estudiando todos sus pasos.
    En los últimos días antes de las vacaciones de Navidad, cada uno se encontraba descansando, Sango y Miroku se habían marchado a comprar algún que otro recuerdo para sus familiares, que si bien eran pocos también representaban mucho para ellos.
    Inuyasha como era de esperar estaba en aquel árbol místico al que acudía cada vez más, para reflexionar en sus ramas, al cabo de un rato escuchó la voz de Kagome.
    Inuyasha: (bajando del árbol) ¿Qué quieres?
    Kagome: Yo… ¿Sabes dónde están estos dos?
    Inuyasha: si, pero eso también lo sabes tú, ahora dime, ¿Cual es el verdadero motivo por el que has venido?
    Kagome: ha decir verdad no lo sé, imaginaba que estarías en este árbol, estos días te noto distante, apenas hablas y cada vez acudes con mayor frecuencia al Goshinboku. No se cuales son tus perturbaciones pero, sé que las tienes.
    Inuyasha: al parecer sabes mucho de mí no?
    Kagome: puede ser, (sentándose en el suelo) aunque no lo se todo.
    Inuyasha: dime, que sientes por mí?
    Kagome: (con una sonrisa sarcástica) pues, ya lo sabes.
    Inuyasha: no, no lo sé.
    Kagome: respeto, amistad, y un profundo cariño.
    Inuyasha: eso es todo?
    Kagome: si Inuyasha, eso es todo, que querías que te dijera?
    Inuyasha: la verdad…

    Kagome: pues te lo acabo de decir.
    Inuyasha: ahí otro?
    Kagome: otro que?
    Inuyasha: eres tonta o te lo haces.
    Kagome: (levantándose de golpe) ¿Cómo?
    Inuyasha: ya me has oído
    Kagome: muy bien, vengo aquí para hablar un rato con tigo y tú me empiezas a hacer preguntas absurdas y encima me insultas!
    Inuyasha: yo no te he insultado simplemente te he preguntado de manera muy sutil lo que en realidad sientes por mí, dime Kagome, estas enamorada de mí?
    Kagome: yo… a que vienen estas preguntas ahora?
    Inuyasha: vienen, a que nuestra amistad se han enfriado, lo he intentado por todos los medios, te hago reír y que te sientas a gusto con migo, pero por lo que veo, lo único que consigo es gastar el tiempo.

    Kagome: ha si que eso es lo que piensas no?, que si no te digo que te quiero o algo similar te alejaras de mí?
    Inuyasha: sabes que no.
    Kagome: pues a veces no lo parece Inuyasha.
    Inuyasha: es que no lo entiendes?
    Kagome: no, no te entiendo!!

    Inuyasha: quiero saber lo que sientes por mí antes de las Navidades, recuerda que te dije que ahora íbamos a ser amigos, pero no quiero ser siempre amigo tuyo, quiero ser algo más.
    Kagome: recuerda que también te dije que no me pidieras que confiara en ti de la noche a la mañana.
    Inuyasha: vamos Kagome, nos conocemos desde hace dos años y tú sigues pensando en lo que ocurrió aquella noche en la que sigues pensando lo que no era, acaso no te he demostrado que no es así?
    Kagome: si pero…

    Inuyasha: pero que Kagome? siempre hay un pero entre tu y yo que no nos deja seguir adelante, no te pido que te abraces y me beses, solo te digo que resuelvas las dudas que tengas y que después me las comuniques, no sigas revolviendo la mierda del pasado!!!!!
    Kagome: (con ojos llorosos) para mí es una mierda importante!!!!!!!! El hecho de que no confíe en ti ni en nadie se debe a que hace mucho pase por grandes calamidades, y sabes que? La pase completamente sola!!!!!! Te deseo unas Felices Fiestas con toda tu familia!!!!!! Yo me marcho pasado mañana a ver a mi madre, adiós!!!!!!!!!!!

    Fin del Flash Back…. (Presente)




    Aún recordaba a Kagome mientras se levantaba rápidamente del suelo y posteriormente se marchaba.

    Apenas sin darse cuenta pensó en sus amigos, en sus dos grandes amigos, tenía entendido que Miroku había regresado a Hamchin [Yo: recordad que me lo inventé ^.^], su ciudad natal, con su tío y hubiera permanecido allí, si no fuera porque su “gran tío” se había casado y ahora estaba en el Caribe de Luna de miel, todavía recordaba la voz que había puesto Miroku al relatarle todo aquello por el teléfono, pero, todavía recordaba mejor, cuando Miroku le reveló todo lo que tenía planeado, “Me iré con Sango”, había dicho, y por un momento pensó que era una broma, pero, después de revelarle lo que en verdad sentía por ella y, de contarle que no pensaba dejarla sola con su hermano y su tía en unas fechas tan señaladas, pasó de ser una broma a una inmensa realidad, tenía planeado haberle ofrecido que viniera a su casa para celebrar las Navidades para no pasarlas solo, pero después de aquella confesión le había quedado muy claro que Miroku no pensaba dejar pasar la oportunidad de estar con Sango en esos momentos.
    Días más tarde su amigo volvió a llamarle, pero, esta vez desde la casa de Sango en China, después de un risa por su parte, Miroku le contó que la tía de Sango había fallecido recientemente y que iban a pasar las fiestas solos, su hermano y ella en aquella inmensa casa, así que después de que consiguiera convencer a Sango y presentarse como su novio ante el hermano de ésta, decidió llamarle, claro, que aún tenía la marca del bofetón de Sango en la cara después de haberse inventado el noviazgo. “Hay Miroku, cuando cambiaras” como respuesta obtuvo que “nunca” aún así el ya lo sabía.

    Después habló con Sango, ya que estaba allí, aprovechó para darle el pésame y Felicitarle las fiestas. “No le soporto >.<” Había dicho ella, pero, a su entender se llevaban bastante bien, ahora se daba cuenta de que durante ese tiempo, sus amigos se habían unido más que nunca y aunque, ha simple vista no habían cambiando nada, ya que ambos seguían discutiendo y Miroku seguía propasándose con ella y ésta le propinaba los mismos golpes, parecían distintos, por lo que se daba cuenta, Miroku tocaba cada vez menos a Sango, pero, fijándose más, comprendía que a este le encantaba hacerla de rabiar y mejor si se sonrojaba, y en cuanto a Sango, por lo que le había contado Kagome, no le gustaba golpearlo y si lo hacía no era con la misma intensidad que antes. En conclusión, aquellos dos acabarían juntos, tarde o temprano pero lo acabarían haciendo, “Ojala que les vaya mejor que a Kagome y que a mí” pensó, después de hablar un rato con ella y momentos después de que ésta le echara la reprimenda por haber hecho llorar a Kagome, un momento Kagome llorando? “Pues claro, ¿no lo sabías? Eres más tonto, no entiendes que se siente mal?, no solo por ti, si no por lo que me contó es porque su madre se encontraba peor, entiende que Kagome esta pasando un mal momento y para colmo, tu intentas ahogarla con ese tipo de preguntas” había dicho Sango, que tonto había sido, ahora entendía el motivo por el que ella quería estar allí, simplemente quería tomar el aire, olvidarse de todo y charlar tranquilamente con él, y él a cambio que hacía? La atosigaba con preguntas absurdas que no corrían riesgo.

    Cuando acabo de charlar con Sango se encontraba aún peor, y ese era el motivo, por el cual pasaba muchos de sus días de “Vacaciones” observando tras el cristal de su habitación todo lo que ocurría.
    Ha decir verdad no había nada que ver, desde aquella habitación solo se divisaba el gran jardín, cubierto ahora de nieve, y alguna que otra casa a lo lejos, algo insignificante comparado con los grandes paisajes que se podían ver desde la Academia de Baile.
    La voz de su madre llamándolo lo sacó de sus pensamientos.
    Inuyasha: dime?
    Izayoi: en que piensas? O mejor dicho en quien?
    Inuyasha: cómo?
    Izayoi: a mí no me engañas, desde que has regresado de la Academia pareces otro, no prácticas las artes marciales con tu padre o con tu hermano, no bailas, pareces distante, sumido en tus más remotos pensamientos y la mayor parte del tiempo lo pasas aquí encerrado como si vieras algo interesante en el jardín que, obviamente no ves o no encuentras, piensas en ella no?
    Inuyasha: (sonrojado) no, mama.

    Izayoi: hay, el día que te sinceres con migo haré una fiesta, acaso crees que no lo sé?, dime, que os ha pasado?, os habéis peleado?, tenía entendido que ahora volvíais a ser amigos, sé que habéis estado un año sin hablaros, pero tú no habías perdido la esperanza, dime, la has perdido ahora?
    Inuyasha: sé puede saber como sabes tú todo eso? O.o
    Izayoi: a decir verdad se más cosas de las que tu mismo te asombrarías, pero, puedes confiar en mí y decirme lo que te ha sucedido con Kagome.

    Inuyasha: si mama, hemos discutido y, una vez más todo ha sido por mí culpa, Sango me ha contado que su madre esta peor, Kagome había estado rara en estos últimos días pero aún así se esforzaba por que nadie lo notara, ni yo mismo me di cuenta, la interrogue con preguntas absurdas y sin saber por qué ella se cabreo y se fue, ahora, se que no se encontraba bien y que ha decir verdad me estaba gritando que le ayudara, que intentara comprenderla, pero, como es propio de mí, no escuche sus gritos y la trate mal…
    Izayoi: y?
    Inuyasha: como que y?
    Izayoi: (riéndose) estás así porque Kagome y tú habéis tenido una peleilla? Hijo, ojala todos los problemas fueran como ese! (abrazando a su hijo)
    Inuyasha: (sonrojado) mama, no me aplastes!
    Izayoi: (sonriendo) Inu, ya eres mayorcito para decidir lo que quieres hacer, pero, acaso quieres empezar mal el año con Kagome?, aún estamos a tiempo de borrar nuestros errores. Llámala, habla con ella, pero, haz lo posible por pedirla perdón.
    Inuyasha: gracias mama.
    Izayoi: (dándole un beso en la mejilla) no hay de que, y ya sabes, ten fe en ti mismo, (saliendo por la puerta) ah, dentro de media hora estará la comida y no quiero que te retrases!

    A escasos tres días de Nochevieja, no podía parar de recordarla, lo que se suponía que era “la gran fiesta del año” se estaba convirtiendo en un martirio para él, el hecho de que el año fuera ha acabar así con Kagome le oprimía el pecho y le hacia sentir tremendamente mal.
    De pronto el pensamiento de su madre inundó su cabeza, “Aún tenemos tiempo de borrar nuestros errores”, era cierto, ¿Por qué no? ¿Por qué no borrar esos errores?
    Sin previo aviso se levantó de la cama, definitivamente la próxima vez que tuviera algún problema hablaría con su madre en vez de tirarse horas enteras mirando a la nada y sumiéndose en su desdicha.
    Bajo las escaleras lo más rápido que pudo, para su sorpresa su familia estaba en el sofá, viendo lo que parecía ser algún tipo de concurso.
    Inutashio: hijo, pasa algo?
    Inuyasha: (acercándose a ellos) yo…

    Shessoumaru: habla ya que no tenemos todo el día.
    Inuyasha: (armándose de valentía) Me voy a ver a Kagome!

    Continuara…..





    Episodio 43º: Una mala llegada y un cerezo.

    Bajo las escaleras lo más rápido que pudo, para su sorpresa su familia estaba en el sofá, viendo lo que parecía ser algún tipo de concurso.
    Inutashio: hijo, pasa algo?
    Inuyasha: (acercándose a ellos) yo…

    Shessoumaru: habla ya que no tenemos todo el día.
    Inuyasha: (armándose de valentía) Me voy a ver a Kagome!
    Izayoi: Cómo?
    Shessoumaru: (riéndose sarcásticamente) que bonito, ahora resulta ser que mi medio hermano es un idiota romántico.

    Inuyasha: por lo menos yo no asfixio a nadie!
    Shessoumaru: (levantándose) como has dicho?
    Inuyasha: ya lo has oído, y además, no tengo tiempo para perderlo con tigo, ya lo habéis oído, tengo que ir en busca de Kagome.


    Después de aquella confesión, subió a su cuarto, y después de media hora volvió a bajar para despedirse de su familia.
    Inuyasha: (mirando a su madre) No os preocupéis por mí, además, volveré pronto, has sido tú la que me has ayudado a tomar esta decisión mama.
    Izayoi: (dándole un beso en la mejilla) si, y creo que la próxima vez me callare, bueno, ya sabes lo que tienes que hacer, así que ánimo y hasta el año que viene, jajajaja!
    Inuyasha: si, que tengáis una buena entrada de año y hasta dentro de una semana!!!
    Inutashio: (abrazando a su hijo) lo mismo te decimos, y ya puedes tratar bien a esa chica!!!!
    Inuyasha: (sonrojado) lo haré!! Hasta pronto!!

    Después de la despedida, Inuyasha se fue caminando hasta la parada de tren correspondiente, sabía que Kagome vivía algo lejos de Tokio, concretamente en Haiku, un pueblo apartado de la capital y a dos horas de esta misma.
    Cogió el ferry correspondiente y nada más que con una gran bolsa de equipaje en mano, partió hacia dicho destino.

    Después de dos horas llegó a dicho pueblo, aunque para serlo, según Inuyasha, estaba muy avanzado, era similar a la zona en la que él vivía, solo que, simplemente no existían grandes rascacielos y con ello el ruido y la polución disminuía.
    Al cabo de media hora y después de preguntar a más de cuatro personas por la casa Higurashi, llego hasta lo que parecía ser un gran templo, por lo que sabía Kagome vivía rodeada de árboles y especialmente al lado de uno de ellos, un gran cerezo, que ahora, completo de nieve parecía mas imponente de lo que en su día se lo había descrito la chica.

    Con cierto miedo al no saber con lo que se iba a encontrar, subió todos los peldaños, que no eran pocos, en dirección al templo, una vez arriba descubrió que la nieve abundaba por todas partes, incluso en la puerta llegaba hasta más arriba de los tobillos, suplicando que por favor hubiera alguien en aquella casa y con algo de miedo llamó a la puerta.
    Al cabo de unos segundos una señora que rondaba los cuarenta años, estatura mediana y con unos rasgos similares a los de Kagome abrió la puerta.
    …: Buenas tardes, que desea?
    Inuyasha: verá, me llamo Inuyasha Tashio, soy un… amigo de su hija de la Academia Takahashi, disculpe mi atrevimiento, pero, esta ella en casa?
    …: Ah, no, lo siento, mi hija esta trabajando, pero, en menos de una hora regresa, por lo que veo vienes desde lejos, ¿Me equivoco?

    Inuyasha: (sonriendo) No señora Higurashi, no se equivoca, vengo desde el centro de la capital de Tokio.
    S.H: madre mía!, desde tan lejos?? No te quedes ahí muchacho, pasa por favor, si lo deseas puedes esperar a mi hija mientras tomas un chocolate caliente.
    Inuyasha: en otras circunstancias rechazaría su oferta, pero, a decir verdad estoy helado, muchas gracias y repito, disculpe el venir de esta forma.
    S.H: Oh, no te preocupes, seguro que mi hija se alegrara de verte. (Abriendo más la puerta)
    Inuyasha: (pasando a dentro) de eso, no estoy seguro, vera, ella y yo somos amigos, pero, antes de despedirnos, discutimos, todo fue mi culpa y sinceramente, no quería acabar el año de semejante forma con ella, por eso, tome la decisión de venir y pedirla disculpas.
    S.H: un gesto honorable por tu parte, ahora entiendo el motivo por el cual Kagome andaba distante, distraída e incluso retardada, se había pelado con tigo. (Yendo a la cocina y preparando el chocolate)
    Inuyasha: (siguiéndole) ah, no lo sabía…
    S.H: si, no te preocupes deja el abrigo ahí fuera, en el perchero y siéntate en el salón, ahora mismo voy, en cuanto caliente esto.
    Inuyasha: no es necesario Señora Higurashi.
    S.H: Oh, claro que si! enseguida voy, debes de estar cansado.
    Inuyasha: esta bien.

    Unos segundos más tarde, la madre de Kagome e Inuyasha estaban hablando mientras ambos tomaban un chocolate caliente y unas galletas, por lo general, para Inuyasha el mero hecho de hablar con una persona que no conocía de nada, solía resultar muy difícil además de que para él era frustrante, pero, con aquella mujer era distinto, podía hablar con esa señora de como si la conociera de toda la vida, por raro que pareciese era con la primera persona con la que podía hablar sin que se le secara la garganta o sin que se pusiera nervioso, algo que para él parecía ser imposible.

    Hablaron de aquella casa, un templo para ser exactos, que pertenecía a los Higurashi desde siempre, había sido remodelado cientos de veces y por ese motivo duraba tanto, Inuyasha preguntó por el hermano de Kagome y su madre le contó que éste, se había marchado el día de antes al pueblo de sus tíos y que Kagome y ella tenían pensado partir al día siguiente para pasar allí la Nochevieja.
    Por supuesto y como no, charlaron sobre Kagome, Inuyasha le contó que era la mejor bailarina de los últimos bailes modernos en mucho tiempo, su madre estuvo atenta a todo lo que decía el chico, y después de un rato así, alguien abrió con las llaves la casa, y se adentro hasta llegar al salón.
    Kagome: Ya estoy aquí!
    La chica palideció de pronto al encontrase con Inuyasha allí.
    Inuyasha: ho… hola.
    Kagome: òó Se puede saber que haces aquí??
    Inuyasha: siento el haberme presentado así, sin llamarte, pero, debido a que no me cogías el teléfono esta fue mi única opción.
    Kagome: y no se te ocurre otra cosa que presentarte en mi casa??
    S.H: ^.^ Hija, no te agobies tanto, te salen unas arrugas muy feas cuando te enfadas, además, piensa que el chico se ha esforzado por venir hasta aquí, que eso ya es mucho, no te preocupes joven, Kagome se calmará, además tu amigo, eh, como se llamaba, Inuyasha, eso, si! se quedará a dormir esta noche, y mañana estoy segura de que hablareis más calmados.
    Inuyasha: no! No es necesario!
    S.H: claro que si, tu no te preocupes por nada, ya me encargó yo de todo, sería una descortesía obligarte a marcharte hasta la capital a estas horas.
    Inuyasha: la verdad, es que son las ocho, y no sé si habrá trenes en dirección a la capital a estas horas.
    S.H: por eso mismo, mañana podreis hablar tranquilos.
    Inuyasha: de verdad, no hace falta.
    S.H: claro que si, además no es molestia, bueno, no te preocupes, dormirás en la cama de Shota, ahora no esta, así que no habrá problemas, bueno chicos, os dejo solos, acabo de recordar que tenía que ir al mercado, así que me voy deprisa antes de que me cierren, hasta luego, ah y portaros bien!.
    Tras el sonido de la puerta al cerrarse, y después de que a ambos se les pasara el sonrojo, intentaron hablar.
    Kagome: òó Se puede saber que intentas?
    Inuyasha: ya te he dicho que nada, solo quería…
    Kagome: solo querías?
    Inuyasha: (mirando hacia abajo) nada, te lo diré mañana, además te noto realmente cansada, y eso? No sabía que trabajaras.
    Kagome: pues para que te des cuenta que no todos somos hijos de papá!
    Inuyasha: oye, que mis padres anden bien económicamente no significa que yo sea un niño de papá. (Sarcásticamente)
    Kagome: pues si!!!!!! Ò.Ó
    Inuyasha: pues no, ahora dime, que es lo que te sucede?
    Kagome: y por qué tendría que contártelo a ti?

    Inuyasha: porque se suponía que somos amigos.
    Kagome: (mirando hacia otro lado) Tu lo has dicho, se suponía, pero no!! Tú y yo no somos nada!!!!
    Inuyasha: se puede saber que te pasa, no te he hecho nada y me tratas tan mal?
    Kagome: te trato como me da la gana, te lo dije una vez y te lo vuelvo a repetir, NO TE METAS EN MI VIDA!!!!
    Inuyasha: me meto en lo que quiero!!!
    Kagome: estoy harta, harta de que me trates como tú quieras…
    Inuyasha: (cortándola) tú lo has dicho, como yo quiera! (levantando la voz)
    Kagome: pues no!!!!! Para ti no significo nada no?
    Inuyasha: cómo?
    Kagome: para ti simplemente soy un objeto e usar y tirar no? Cuyo único objetivo es intentar seducir, ligar, engatusar y tal vez… algo más no?

    Inuyasha: (cabreado por las palabras de la chica) PUES SI!!!!!!!!!!!!!!! Sabes que? No me importas, no me importas lo más mínimo, te detesto, (refunfuñando) maldita mocosa!!!!!!!!!
    Kagome: (con ojos vidriosos) Cómo? Es eso lo que me consideras no?? Pues menos mal que me lo has recordado, para ti solo soy una niñita no? Pues quieres que te diga lo que eres tú para mí?
    Inuyasha: si!!!

    Kagome: UN MALDITO HÍBRIDO QUE SE ASUSTA DEL MUNDO POR SER ANORMAL!!!!!!!!!!!!!!!!!
    Inuyasha: (con ojos vidriosos) Ka…gome…(con voz cortada)

    Kagome giró la cabeza y ocultó su mirada en su flequillo, antes de que pudiera decir nada, Inuyasha había salido por la puerta, para sorpresa de ella no había dado un portazo ni nada similar, todo lo contrarío, había cerrado la puerta delicadamente, algo que para ella resultaba aún peor, si hubiera dado un portado, significaría que Inuyasha estaba enfadado, pero al no hacerlo, supo claramente que estaba dolido.
    No pudo resistirlo más y con los ojos bañados en lágrimas, la joven se lanzó al sofá para llorar desesperadamente, estaba dolida, se sentía mal, fatal consigo misma, no sabía como había sido capaz de decir aquellas palabras a Inuyasha, él, aquel chico que se había portado tan bien con ella, no bien, sino excelentemente bien, nadie, nunca en la vida, alguien le había hecho sentir feliz, por así decirlo, por eso estaba enfadada con ella misma, agarro el cojín y lloro todo lo que sus ojos le permitieron.

    Mientras en un árbol, aquel chico por el cual lloraba, se tapaba las manos y, subido en lo más alto de aquel imponente cerezo, lloraba, acompañando al tiempo, que, dejando caer algunos copos de nieve, ocultaban los llantos del joven, aún así, no sentía frío, no sentía nada salvo un inmenso dolor proveniente de su pecho, era la segunda vez que le hacían daño, pero, ahora resulta peor, aún peor, la primera vez que lloro por amor, había sido porque toda la culpa recaía en él, pero, ahora sabía que no, se sentía participe de aquella disputa, pero no del todo, esa chica no tenía que haberlo tratado de ese modo y al hacerlo consiguió darse cuenta de su dura y cruda realidad, estaba solo , completamente solo, no había nadie en el mundo que fuera como él, y precisamente el mundo era lo que él más temía, el desprecio el rechazo, el dolor de sentirse solo, aquello de lo que estaba ya muy acostumbrado, todos esos sentimientos que durante mucho habían permanecido sepultados, y que volvieron a flote nada más oír las hirientes palabras de Kagome.

    Permaneció allí durante mucho, no sabía por cuanto, solo cuando noto que todos sus músculos estaban engarrotados debido al frío decidió bajar e intentar entrar, al hacerlo, encontró a la Señora Higurashi en un vago intento por coger a su hija del sofá.
    Inuyasha: Señora, que hace?
    S.H: Ah, eres tú, te he estado buscando, pero no te he encontrado, como se te ocurre, me has dado un susto terrible, habéis discutido no?

    Inuyasha: (bajando la mirada) si señora…
    S.H: y te parece normal desaparecer de este modo? Son las cuatro de la mañana, volví a las nueve y créeme que casi me muero al encontrar a Kagome llorando y a ti al no verte!
    Inuyasha: lo siento machismo…(bajando la cabeza)
    S.H: esta bien, (intentando coger a Kagome)
    Inuyasha: deje, usted no esta en condiciones de cogerla.
    S.H: (mirando enternecedoramente a Inuyasha) gra…cias, súbela a su habitación por favor.
    Guiado por la Señora Higurashi, Inuyasha llevó a la chica hasta su cuarto, la madre de esta se marcho e Inuyasha la deposito con sumo cuidado para no despertarla sobre su cama.
    Inuyasha: (tapándola con una manta) después de lo que me has dicho y aún así no puedo dejar de pensar en ti, (acariciándole la cara) me has hecho daño Kagome, pero, de igual modo, solo puedo decirte un te quiero…(con ojos vidriosos) ya no se si me quieres o no, empiezo a tener mis dudas, dudas que creo que tú más que yo posees, pero, hasta que no las resuelvas no creo que estés en condiciones de decirme nada, ya no se que pensar, lo único que soy capaz de ver, es que tu eres la persona más importante para mí, eres la única persona que necesito ver todos los días, la única con la que puedo ser simplemente yo, descansa y por favor, recapacita. (Dejando caer varias lágrimas)
    Inuyasha: (rozando sus labios) sueña conmigo ángel…

    Al salir se encontró con algo que no esperaba encontrarse, la madre de Kagome lo miraba muy atentamente mientas muchas lágrimas caían por su rostro.
    Inuyasha: (limpiándose las lágrimas) yo…

    Continuara…




    Episodio 44º: Un amor único: “Lo siento”

    Al salir se encontró con algo que no esperaba encontrarse, la madre de Kagome lo miraba muy atentamente mientas muchas lágrimas caían por su rostro.
    Inuyasha: (limpiándose las lágrimas) yo…
    S.H: ante mí no tienes que disimular joven, te confesaré que nunca antes había escuchado palabras tan hermosas, y menos de un hombre… si te has sincerado de ese modo creyendo que estabas solo en esa habitación, has de saber que te considero una gran persona, nunca creí que alguien pudiera amar a mi hija de semejante modo, gracias y lo siento, no se porque Kagome no te hace caso, mañana hablaré con ella…
    Inuyasha: (sonrojado) No señora Higurashi, no es necesario, mañana si usted me lo permite, después de desayunar me marchare, pensaba hacerlo ahora pero estoy realmente cansado y me duele todo.
    SH: por supuesto que si, pero, te pido que esta noche pienses en lo que os ha pasado, te pido disculpas en su nombre…
    Inuyasha: esta bien, pero gracias de todos modos…
    S.H: joven, antes de marcharte me gustaría pedirte un favor.
    Inuyasha: dígame pues.
    S.H: me gustaría que os reconciliarais, si, pero, si no fuese así, te pido que por favor cuides de ella, aunque nunca os volváis ha hablar, aunque os llevéis fatal, cuando yo no este aquí, no se quien cuidará de ella y… me gustaría que fueses tú, por favor, con que la mires desde lejos, con que la observe un momento y sepas que esta bien yo seré feliz, solo te pido eso.
    Inuyasha: esta bien, además, no creo que pueda dejar de hablarla… la quiero mucho… (Sonrojado)
    SH: lo sé, gracias ah y una cosa más. ^.^
    Inuyasha: si?
    S.H: buenas noches!
    Inuyasha: buenas noches Señora Higurashi.


    * * *
    A la mañana siguiente, una chica despertaba de lo que precisamente no había sido un sueño reconfortador, al despertar una dura imagen paso por su cabeza, ella insultando de forma muy cruel a una persona que quería mucho.
    Aún así, abrió la ventana, hizo su cama, se vistió y bajo a la cocina.
    Tenía pensado pasar al servicio, pero, cuando estaba dispuesta a hacerlo, oyó el grifo del agua y creyó que era su madre, una vez en la cocina se encontró con una sorpresa, el desayuno preparado y una nota sobre este que decía.

    Buenos días hija!!!
    Seguramente estas algo dubitativa, pero te haré recordar, ayer discutiste con Inuyasha, un chico que después de haber estado llorando encima del cerezo por ti y pasando mucho frío, te cogió en brazos, te llevo a tu habitación y te tapo, y aún no conforme con esto, te dedico las palabras más tiernas que mis oídos han escuchado jamás, “te quiero” “me has hecho daño”, esas entre muchas otras fueron nombradas por él.
    Se ha levantado hace poco, le he ofrecido el desayuno y ahora probablemente se este duchando, pero, la pregunta que pasa por tu cabeza en estos momentos es: ¿Dónde estás?
    Pues bien, como teníamos pensado marcharnos tú y yo con tus tíos, he decidido irme yo sola, no te preocupes por mí, estaré bien, solo espero que hagáis las paces, Kagome por favor, recapacita, él te quiere mucho y he podido notar esta mañana en sus ojeras que no ha dormido nada, me gustaría decirte todo esto en persona, pero debido a que si lo hubiera hecho no me habrías dejado marchar, me he visto obligada a irme sin previo aviso.
    Él no sabe nada, aunque me gustaría ver su cara cuando se lo digas. ^.^
    Ahora de verdad, pídele disculpas, estoy segura de que te perdonará, recuerdo que tú y yo hablamos de él hace tiempo y me dijiste que lo querías, ya no? Estoy segura de que sigues enamorada de él, por eso mismo DISFRUTA!!!!!!!!! La juventud no es para siempre, estas en la flor de la vida, deja de ser tan metódica y ordenada, desmelénate y haz lo tengas que hacer!!! Por una vez en tu vida improvisa!! Corre y dile lo que sientes por él!
    Ejem ejem, volviendo a la normalidad, te informo que volveré el día de reyes, es decir, vais a estar seis días solos, hay mucha comida, ya sabes, prepara todo lo que quieras, espero que te lo pases muy bien, ah, Feliz Año y ya sabes, el día seis regreso con tu hermano.

    MUCHOS BESOS DE TU MADRE

    PD: Haber lo que haceis pillines. ^.^

    Cuando acabo de leer la carta se tuvo que sentar para no acabar desmayada en el suelo, de verdad su madre podía ser así? Alucinante, sabía que su madre era muy directa pero tanto?? Le había dicho que disfrutara, que hiciera todo lo que tenía que hacer, a que se refería? En todo caso tenía razón, se había portado muy mal con Inuyasha, así que después de tranquilizarse un poco, se armó de valor y subió corriendo al cuarto de baño, abrió la puerta de golpe y se encontró con Inuyasha, de una forma que resultaba muy difícil declararse.
    Éste se encontraba tapado con una toalla, desde la cintura hasta la mitad de la rodilla, empapado en agua y peinándose.
    Inuyasha: (rojo a más no poder) Se puede saber que haces??? Òó
    Kagome: >< Yo no pretendía… vamos que no quería abrir la puerta, bueno sí, ha no… (Roja) Inuyasha…
    Kagome se puso de rodillas y después.
    Kagome: LO SIENTO!! PERDONAME POR FAVOR… nunca en mi vida me había sentido tan mal, por favor, por favor, lo siento muchísimo, de verdad, todo lo que te dije, lo hice porque estaba cabreada con un amigo, me había peleado con él y por eso había venido enfurecida, luego te encuentro en mi casa y… LO SIENTO!!! No es verdad lo que te dije, de verdad que no, eres mi mejor amigo y… (Aún más roja y con ojos vidriosos) por primera vez en mi vida haré caso a mi madre… Inuyasha, sigo enamorada de ti! TE QUIERO! Te quiero, te quiero, me gustas mucho, si hubieras sido moreno me hubiera enamorado de ti igual, pero, (empieza a llorar) con el pelo blanco y con esos ojos miel me derrites cada vez que me miras, te lo dije una vez, me encantan tus orejas, me gusta que seas un híbrido, esa mezcla es lo que más me gusta de ti! No sé si te asustas del mundo, pero, a mí sí me da miedo! Por eso, te pido perdón, lo siento y siento haberte hecho daño.
    Inuyasha: (llorando) Ka…gome…
    Kagome: lo siento de todo corazón Inu…(mirándole fijamente a los ojos)

    Inuyasha le dedicó una tierna mirada y sin previo aviso, se agacho para estar a su altura y le abrazó cariñosamente.
    Inuyasha: (en su oído) ¿Cómo no iba a perdonarte?
    Kagome se abrazo más a él y sin poder evitarlo lloró con más intensidad sobre el hombro de Inuyasha.
    Inuyasha: (en su oído) shuuuu, tranquila, ya pasó.
    Kagome: (limpiándose las lágrimas) gracias…
    Inuyasha: puedo besarte?
    Kagome: como?
    Inuyasha: que si puedo besarte?
    Kagome: NO! òó, quiero besarte yo. ^.^
    Y acabando la frase, Kagome abrazo a Inuyasha, se acerco hasta su oído, y diciéndole un “te quiero” juntó sus labios con los de Inuyasha, labios que para ella, ahora sabían a la mismísima miel, cálidos, suaves y realmente dulces.
    Inuyasha: (abrazándola) me habías asustado.
    Kagome: (sonrojada) y te asustaré más veces.
    Inuyasha: espero que no, oye, como es que has cambiado de opinión?
    Kagome: pues la verdad es que ha sido mi madre.
    Inuyasha: (sonrojado) tu madre?
    Kagome: jejeje, te has puesto colorado! Si ha sido ella.
    Inuyasha: ¬¬ Pues no soy el único.
    Kagome: vale ya… me voy ha sonrojar aún más.
    Inuyasha: oye, te has dado cuenta que has entrado en el cuarto de baño, te has declarado, pero que yo sigo con una mini toalla?
    Kagome: (mirándole de arriba a bajo) si…
    Inuyasha: (rojo) Kagome!!!
    Kagome: jajaja, si, lo siento, no tendría que haber entrado así, anda, te dejo para que te cambies, no quiero que te resfríes.
    Inuyasha: esta bien, gracias.

    Mientras Inuyasha se vestía Kagome aprovecho para desayunar, al cabo de un rato éste bajó.
    Inuyasha: oye, donde esta tu madre?
    Kagome: (recogiendo su desayuno) pues… cuando te lo diga, no me vas a creer…
    Inuyasha: pues dímelo, a ver si me lo creo o no.
    Kagome: no, mejor que te lo diga ella. (Dándole la nota a Inuyasha)

    Kagome observaba atentamente al chico, éste se puso rojo, después amarillo, del amarillo paso a un azul verdoso, después al morado y para acabar como empezó rojo a más no poder.
    Inuyasha: (respirando entrecortadamente) Todo eso ha sido capaz de escribir en un momento??
    Kagome: >< Si, así es mi madre.
    Inuyasha: ya lo creo, primero dice esas cosas sobre mí, después te invita a que disfrutes de la vida, luego nos deja solos seis días!!!!!!!! Y por último y no menos importante nos dice algo así como “cuidado con lo que haceis pillines” Estás segura de que tu madre no tiene ningún parentesco con Miroku?
    Kagome: (riéndose) a veces creo que si lo tiene!
    Inuyasha: pues yo lo confirmo!
    Kagome: jajaja, oye, me puedes volver a relatar el discurso de anoche, según tengo entendido hiciste de llorar a mi madre no?
    Inuyasha: yo, no, eso fue entre tu subconsciente y yo.
    Kagome: (acercándose a él) anda, por favor…
    Inuyasha: pues no!
    Kagome: jo! Que malo eres!
    Inuyasha: soy de lo peor, bueno y, (mirándole seductoramente) que vamos ha hacer en estos seis días tu y yo solos? (abrazándola por detrás)
    Kagome: (sonrojada) pues nada, simplemente convivir, no pienses mal!
    Inuyasha: (besándola el cuello) yo no soy el que pienso mal, eres tu la que piensas que yo pienso mal!
    Kagome: *.* No me líes más!
    Inuyasha: esta bien!
    Kagome: bueno, has hecho la cama de Shota?
    Inuyasha: ^.^ Si!

    Kagome: y yo la mía, pues me iré a duchar!
    Inuyasha: esta bien…
    Kagome: Inu, ¬¬ no pienses que me voy ha acostar con tigo por el mero hecho de estar solos!
    Inuyasha: (sonrojado) >< Yo no pensaba eso!
    Kagome: si, si, seguro.

    Kagome se fue a la ducha, después de un gran baño, se tapó con una toalla y se fue hasta su cuarto para cambiarse de ropa, nada más abrir, se encontró con alguien que no esperaba encontrarse allí.
    Kagome: Se puede saber que haces aquí? Òó
    Inuyasha: ¬¬ Solo quería verte con la toalla, tu me has visto a mí con menos ropa, así que no te quejes! (acercándose a ella)
    Kagome: quieto ahí! No des un solo paso más!
    Inuyasha: (avanzando hacia ella) y si lo hago que??
    Kagome: pienso gritar!!! >< (Llegando hasta la pared)
    Inuyasha: (pasando sus manos por la cintura de Kagome) te asustas fácilmente! ^.^
    Kagome: >< serás!
    Inuyasha: (besándola) sabes…
    Kagome: que?
    Inuyasha: hueles tremendamente bien… (Rozándole la piel con las manos)
    Kagome: (colorada) no me digas esas cosas.
    Inuyasha: (soplándola en el oído) te lo digo porque es verdad.
    Kagome: (con el corazón en la garganta) Inu…
    Inuyasha: nunca te lo había dicho, pero eres la primera chica a parte de mi madre que empezó a llamarme “Inu”, hacía tiempo que no te lo oía decir…
    Kagome: acaso no te gusta?
    Inuyasha: si me lo dice otra persona, puede, pero viniendo de tus labios es un regalo del cielo.

    Kagome: siempre me haces sonrojar…
    Inuyasha: (sensualmente) a lo mejor es porque me gusta verte toda rojita por mí…
    Kagome: (abrazándose a él) sigo sin saber el motivo por el que estas enamorado de mí…
    Inuyasha: simplemente porque eres tú!
    Kagome: ya, pero yo soy demasiada poca cosa para ti Inuyasha…
    Inuyasha: y que te hace pensar que yo soy demasiada cosa?
    Kagome: (riéndose) simplemente porque lo sé.

    Inuyasha: (abrazándose a la chica) vale, te diré mis motivos, eres la primera chica que se preocupa por mí sin importarle en lo más mínimo lo que a ella le pueda pasar, eres dulce, cariñosa, a pesar de todo lo que te ha pasado en la vida, siempre sonríes, yo siempre he pensado que para que el mundo no se meta en mi vida debes de ser peor que ellos, durante mucho tiempo me metí de lleno en ese personaje, frío, borde, antipático, pero, llegaste tu y me enseñaste todo lo contrario, tu sonrisa, tu mirada llena de preocupación por los demás, tu baile, tu pasión, (riéndose) todos tus sonrojos, y, para no engañarte, me gustaste demasiado cuando baile con tigo, eres la primera chica que se ha resistido a mis encantos el primer día, aunque te has rendido después, aún así, yo no veo que te hayas rendido a mis pies, simplemente te has enamorado de mí, al igual que yo he caído ante ti, me gusta todo de ti, si es cierto que cambiaria tu mal genio ><, créeme cuando te digo que pegas fuerte, demasiado fuerte, pero, todo ello solo ha sido fruto de nuestras tonterías, aún así, te quiero, me gusta todo de ti, todo y me gustas Kagome, simplemente por ser tú.
    Kagome: (con lágrimas en los ojos) ahora entiendo cuando mi madre lloraba al escuchar tus palabras, gracias por fijarte en mi Inu, gracias, nunca pararé de agradecerte las miles de cosas que has hecho por mí.
    Inuyasha: no es para tanto…
    Iba a continuar, pero, no tuvo tiempo, Kagome había llegado hasta sus labios antes de que este hubiera pronunciado palabra.
    Se besaron así, cálidamente, sin frustraciones, sin ruido, sin nadie que los interrumpiera, un amor único y a la vez igual, un amor limpio, puro como el agua de un manantial, ambos se fundieron en aquel apasionado beso, beso que hasta el próximo capítulo no sabremos si seguirá…

    Continuara………





    Episodio 45º: Contigo aprendí… que es mejor sonreír.

    Inuyasha besaba cada vez más a Kagome, sin darse cuenta, fue dejando caer su mano hasta que llegó a la zona en la que terminaba su espalda, un simple roce e hizo que la chica se sobresaltara.
    Kagome: para!
    Inuyasha: jeje, lo siento, no pretendía.
    Kagome: (abrazándose a él) lo sé, pero no, no estoy preparada Inu, me encantaría tumbarme en esa cama y dejarme llevar por un mar de caricias, pero, tiemblo cuando me rozas, me acongoja semejante idea, lo sient…
    Inuyasha: (besándola) no tienes porque pedirme perdón, solo cuando tú quieras, ¿recuerdas?, solo cuando estés realmente preparada dímelo, estaré encantado de pasar la noche con tigo de la mejor manera.
    Kagome: (sonrojada) gracias por comprenderme.
    Inuyasha: no me las tienes que dar, te quiero, y quiero que tu primera vez “real” sea especial.
    Kagome: como que mi primera vez?, es una duda que tengo desde hace tiempo, recuerdo que en la fiesta de Hallowen me quitaste la botella cuando estaba apunto de declarar que no era virgen. Achu!! (Estornudando)
    Inuyasha: ahora mismo te lo digo, pero, primero vístete, no quiero que te quedes en cama durante estos días por haberte acatarrado.
    Kagome: esta bien.

    Inuyasha se fue a la habitación de Shota, no tenía nada que hacer, así que se dedicó ha contemplar la gran vista que aquel templo le permitía obtener de aquel gran pueblo.
    Al cabo de un rato, una arreglada Kagome entró en la habitación.
    Kagome: (mirándole) Algo interesante?
    Inuyasha: a decir verdad no, pero, siempre se puede observar, no?
    Kagome: (sentándose en la cama de su hermano) si…

    Inuyasha: sé que te sietes frustrada, lo entiendo, pero, en el momento menos inesperado llegará, mientras, sé tu misma y olvídate de todo, imagínate que estamos de vacaciones, los dos solos, que mejor no? (sentándose a su lado)
    Kagome: si…

    Inuyasha: si, pero a ti te gustaría algo más no?
    Kagome: sabes que si, me gustaría poder seguir, ya te lo he dicho, dejarme llevar, pero, cuando tengo ese pensamiento, horribles imágenes acuden ha mi cabeza y el miedo me paraliza.
    Inuyasha: pues… deja de mirar.
    Kagome: ¿Cómo?
    Inuyasha: simple, esas imágenes te atormentan, acuden a ti, pero, la cosa es muy fácil, no tienes porque olvidar, es más, no creo que nunca olvides semejante atrocidad, pero, si puedes pensar en cosas mejores.
    Kagome: cosas mejores?
    Inuyasha: si, cuando ha sido tu mejor momento?

    Kagome: pues…(algo triste) creo que no tengo mejor momento…
    Inuyasha: no es posible, tiene que haber algo en tu vida que haya sido único!
    Kagome: creo que ha habido demasiadas cosas, una de las más significativas fue una frase como “no puedo vivir sin tu sonrisa” “te quiero desde el primer día en que baile con tigo” , de verdad, nunca creí que pudieras ser capaz de decirme aquellas palabras en el Hospital, me emocionaste Inu…
    Inuyasha: (sonrojado) gra…cias, pero, me asustaste demasiado, aún así, todo lo que te dije era verdad, me gustas desde que me plantaste cara en aquel baile, aún así, no creo que un “te quiero” cuando estabas apunto de suicidarte fuera tu mejor momento.
    Kagome: (algo triste) sí, pero no tengo un momento único, como tú has dicho.
    Inuyasha: siempre puedes crear uno…
    Kagome: (sonrojada) Inu…
    Inuyasha: no me refería a eso, te apetece bailar?
    Kagome: cómo?

    Inuyasha: que si quieres bailar?
    Kagome: esta bien…

    Inuyasha: espera un momento en esta habitación, cuando te llame bajas vale?
    Kagome: si…


    Inuyasha bajo las escaleras hasta que llegó al salón y al cabo de diez minutos éste llamo a la chica para que bajara.
    De lo que Kagome no tenía ni idea, era, de lo que había creado Inuyasha, las luces estaban más cálidas que de costumbre, y era, porque ese don Juan, había puesto pañuelos rojos encima de las lámparas, además todos los muebles estaban apartados para que hubiera espacio en el centro del salón, una melodiosa canción estaba empezando a sonar en la cadena de música e Inuyasha estaba en el centro esperando a que ella llegara.
    Kagome: (reprimiendo un gran asombro) que es todo esto?
    Inuyasha: se trata de tu momento único, o mejor dicho, de nuestro momento único. ^.^

    Kagome: (pasando sus manos por el cuello del chico) Inu…
    Inuyasha: (cogiéndole de la cintura) esta canción se titula “Contigo aprendí” y, ¿A que no adivinas de quien es?
    Kagome: Luís Miguel!
    Inuyasha: correcto, sabía que te iba a gustar, así que la próxima vez que te pregunte espero que por lo menos me cites este momento.

    Kagome: (sonriendo) lo prometo!
    Inuyasha: así me gusta.

    Ambos empezaron a bailar este precioso bolero, un baile que, haciendo hincapié en él, sabremos que se trata del baile de los enamorados, un baile muy llamativo para este momento.
    Con pasos lentos y muy pegados van bailando la perfecta melodía, una melodía que si bien no tiene muchos movimientos agitados lo tiene en la pasión que hay que expresar en unos pasos lentos y precisos. La canción relata la verdadera historia de un hombre enamorado de una joven que, viviendo de ilusiones es feliz, aun siendo éstas claras imaginaciones y pensamientos con emoción, pero carentes de realidad, aún así, en esta pareja poca realidad era poca, Inuyasha abraza a la joven y la atrae hacia él para besarla, algo que como el mismo cantante dice “como te abrazaré, cuanto te besare”, Kagome sin poder evitarlo se sonroja pero no queriendo separarse de ese beso sigue profundizando y matizando en él, al compás de la melodía van girando muy despacio, las palabras “te morderé los labios” inundan el salón y para no contrariar con la canción, Inuyasha da un pequeño mordisco en los labios de Kagome, ésta se aferra más a su cuello y lo besa tranquilamente.
    Inuyasha: (en el oído de Kagome) y bien?
    Kagome: No rompas un momento como este (besándole en el cuello)
    Inuyasha: si…
    Apenas sin darse cuenta Inuyasha empieza a cantar la canción, no se le escuchaba ya que la música y la voz del cantante eran mayores que la de él, pero, de todas formas lo gesticulaba como tal.
    En el estribillo Inuyasha hace que Kagome de varias vueltas y acabe de espaldas a él, mientras éste posa sus manos sobre su vientre.
    Inuyasha: (soplándole en la oreja) aprendí, que la semana tiene más de siete días, hacer mayores mis contadas alegrías y a ser dichoso yo con tigo aprendí. Contigo aprendí, a ver la luz del otro lado de la luna, con tigo aprendí que tu presencia no la cambio por ninguna, aprendí que puede un beso ser más dulce y más profundo, que puedo irme mañana mismo de este mundo, las cosas buenas ya conti las viví y…
    Y apunto de terminar la canción Kagome vuelve a girar y se pone frente a Inuyasha, éste con una cálida sonrisa acaba cantando.
    Inuyasha: (acercándose a Kagome)… y contigo aprendí, que yo nací, el… día… en que, TE CONOCÍ….

    Él, como todo galán hace que la chica se deje caer en sus brazos hacía atrás mientras éste sujetándola la besa suavemente.
    Kagome: (seguía besándose) Inu…
    Inuyasha: (va subiendo con ella poco a poco) y ahora que me dices?
    Kagome: que eres encantador y aunque no lo reconozcas muy romántico.
    Inuyasha: gracias!
    Kagome: seguimos bailando? (guiñándole un ojo)
    Inuyasha: por supuesto que si!

    Siguieron así durante el resto de la mañana, después prepararon la comida y para descansar un rato después de comer, se sentaron en el sofá a ver la TV.
    Inuyasha no pudo reprimir un bostezo, debido al cansancio y teniendo en cuenta que apenas había pegado ojo en toda la noche sin tan si quiera darse cuenta se fue tumbando cada vez más en el sofá.
    Kagome: Inu, te estas durmiendo?
    Inuyasha: ¬¬ No.

    Kagome: túmbate!
    Inuyasha: cómo?
    Kagome: es una oren túmbate en el sofá. “.”
    Inuyasha viendo las pocas soluciones posibles ante una orden de Kagome accedió a dicha petición, se quito las zapatillas y se recostó en el sofá.
    Kagome: puedo? (mirándole atentamente)
    Inuyasha: (cogiéndola de la cintura y tumbándola encima de él) no tienes que pedirme permiso.
    Kagome: (sonrojada) lo siento.
    Inuyasha: el que?
    Kagome: apenas has dormido no?

    Inuyasha: (apagando la TV) pues ha decir verdad no he dormido.
    Kagome: ¿Y por qué no lo haces ahora?
    Inuyasha: si me miras fijamente no seré capaz de hacerlo.
    Kagome: y que hay de malo en que te mire?
    Inuyasha: no me gusta que me observen tan detenidamente! ><
    Kagome: si lo hago es porque eres realmente guapo y creo que solo una vez te he visto dormido. (Mordiéndole la oreja)
    Inuyasha: (sonrojado) y que habría que ver en mí si estoy dormido?
    Kagome: uf, aunque no lo creas mucho, dormidos es cuando más nos relajamos, no gesticulamos y la cara al igual que todo nuestro cuerpo esta tranquilo y sosegado, nunca te había visto tranquilo y con una cara angelical…

    Inuyasha: yo angelical?
    Kagome: si tú!
    Inuyasha: pues no me lo imaginaba.
    Kagome: oye, todavía no me has contestado a mi pregunta
    Inuyasha: que pregunta?
    Kagome: en la fiesta de Hallowen, según tú me consideras virgen por qué?

    Inuyasha: (con una sonrisa sarcástica) porque lo eres. ¬¬
    Kagome: Inu, que más me gustaría a mí, pero no… (sonrojada)
    Inuyasha: esta bien, te lo explicaré, para mí, la primera vez es entregar no solo “pureza” como todo cursi suele decir, sino compartir algo más, algo mutuo y especial, no solo físico si no también psíquico, cuando dos personas se quieren, acaban compartiendo no solo su cuerpo si no también de forma menos directa su mente, por eso la primera vez es algo que suele ser recordada, y no precisamente porque haya sido la mejor noche de tu vida, no, porque debido a la inexperiencia y otros factores la cosa se complica, pero, por suerte el amor, que generalmente si es de los primeros suele ser el más limpio acaba salvando aquella noche de un seguro desastre.
    En resumen, cuando tu primera vez fue forzada, en tu mente no había ningún sentimiento de amor ni nada similar, sino todo lo contrario, frustraciones, odio, terror son palabras que definirían el pensamiento de tu mente en aquellos momentos. Esta claro que físicamente no eres virgen, pero, en mente careces de todos estos sentimientos, amor, deseo, posesión, todo esto no ha sido experimentado en tu mente y si tu mente no ha sentido esto es porque la información que tu cuerpo manda tampoco son estos sentimientos, siendo así que nunca has experimentado el deseo, el amor pasional y el dominio que se puede llegar a tener de la otra persona. Queda que, cuado a una persona le hacen semejante barbarie, no conforme con sentirse mal, en su mente intenta inculcarse las ideas de que enamorarse es malo, tener relaciones con otra persona es horrible, pero, en realidad lo que esta intentando es convencerse así mismo de todas estas ideas para razonar de alguna manera la tragedia sucedida. Todo ello sería independiente en cada uno de nosotros, puesto que cada uno tiene una serie de perjuicios y de criterios que son distintos y particulares de cada uno (conciencia). Tú misma te has intentado suicidar, te has mostrado diferente a los demás, ocultándote y encerrándote en un mundo a parte, sumida en tus preámbulos y perjuicios. Por todo ello, creo que es lógico tener miedo y aún más difícil resulta la idea de intentar probar algo que para ti ha sido horrible, pero, ¿Qué hay fácil en la vida? Si todo fuera fácil, este mundo no existiría porque no tendría complicación alguna, y son esas complicaciones las que hacen que en determinados ocasiones podamos tener miedo, además de complicaciones también hay beneficios como lo pueden ser el casarse, tener hijos y ese tipo de cosas que la sociedad establece como “buenas”, como te estarás dando cuenta me estoy dando una clara reflexión ética sobre la vida.
    Kagome: O.O desde cuando sabes tu tanto?
    Inuyasha: desde toda la vida, aunque no lo creas, paso la mayor parte del tiempo observando, estudiando minuciosamente a la sociedad en la que nos encontramos y después de mucho observar, simplemente saco teorías, deduzco y razono.

    Kagome: (besándole) ^.^ No sabía que tuviera un novio tan listo!

    Ante aquella palabra “novio” Inuyasha no pudo reprimir una cara de asombro, era la primera vez que tenía a Kagome encima suya y que ésta estaba totalmente relajada, sin ninguna frustración por estar encima de él, ni nada similar, era ahora, cuando razonadamente y en secreto descubría que entre ellos no se podrían encontrar mejor, tal vez sí, pero claramente habían subido un peldaño en su relación y por nada del mundo quería estropear ese momento.
    Kagome: Inuyasha?, Inuyasha?
    Inuya: em, ah si, dime.
    Kagome otra vez absorto en tus pensamientos?
    Inuyasha: no.

    Kagome: si claro, lo que tú digas. ¬¬
    Inuyasha: bueno, intenta dormirte.
    Kagome: no.
    Inuyasha: por qué no?
    Kagome: no me dormiré hasta que me cuentes tu amorío con Kikio.

    Inuyasha: (triste) no.
    Kagome: por fis, me dijiste que el día que estuviera encima tuya, diciéndote un “te quiero” me lo contarías, así que te quiero!
    Inuyasha: sabes, tienes mucho morro, no te contaré nada, es algo demasiado íntimo para mí, y nadie salvo ella y yo sabemos lo que en realidad pasó.
    Kagome: nunca se lo has confesado a nadie?
    Inuyasha: no.
    Kagome: y por que no empiezas ha sincerarte con migo?
    Inuyasha: (pensando) sabes, creo que no estaría nada mal, pero, has de prometerme una cosa.
    Kagome: dime?
    Inuyasha: prométeme que después de que escuches todo lo que tengo que contarte no te cabrearás con migo.

    Kagome: por qué tendría que enfadarme?
    Inuyasha: enfadarte no, pero, conociéndote seguro que te pones celosa o algo similar y además prométeme que después trataras a Kikio como siempre, como a una profesora más entendido??
    Kagome: prometido, pero cuenta que me estoy impacientando.

    Inuyasha: ¬¬ Esta bien.

    Todo comienza…………..


    Continuará………………………..









    Episodio 46º: Una historia: Kikio, mi primer amor.

    Kagome: prometido, pero cuenta que me estoy impacientando.
    Inuyasha: ¬¬ Esta bien.

    Todo comienza en una cálida noche, muy calurosa, demasiado para una persona fría como yo solía ser por aquellos tiempos. Con una simple mirada hacía que cualquiera que estuviera cerca no le gustara mi presencia y se acababa marchando, ¿antipático?, mucho, pero yo me consideraría solitario, siempre lo he dicho, la soledad ha sido mi mejor amiga durante años, quizás no la mejor pero si la única.
    Si hubiera tenido alguna opción seguramente no me hubiera encontrado en aquella fiesta, los espacios pequeños y con mucha gente no eran precisamente de mi agrado y menos si esas “gentes” lo único que tenían en común con migo era que podían respirar, por lo demás éramos personas demasiado diferentes, tanto, que a mis dieciséis años de por aquel entonces, lo único que encontraba meramente “entretenido” por así decirlo se trataba de la música que solían poner en aquellos ambientes, ambientes inhóspitos de ricachones que lo mejor que tenían que hacer para gastar sus fortunas era crear grandes fiestas mientras enseñaban sus grandes mansiones, joyas y demás utensilios que yo consideraba de lo más ordinario.
    Resumiendo, personas hipócritas sin humildad alguna y que se pavoneaban delante de todos los de su misma calaña, por lo general, a mis padres no les interesaban lo más mínimo este tipo de eventos por así llamarlos, pero, debido a que era el cumpleaños de uno de los componentes de la familia que organizaba la fiesta, y éstos insistieron en que fuéramos al final por simple cortesía mis padres quedaron en ir.
    Y allí me encontraba, solo, sumido en un mundo de necedades mientras gente falsa se contaban los “grandes infortunios” que una vida como la suya podía tener.
    Como había dicho, lo único interesante que podría encontrar allí, era la música, música que no precisamente encajaba en mis gustos, lenta, tranquila, melodiosa, con pequeños acordes, toda una contrariedad a los míos, pero, que como se solía decir “una vez al año, no hace daño”, por eso me encontraba ahora asomado en el balcón, despojándome de todos aquellos sentimientos que una sinuosa melodía me transmitía, no sabía como explicarlo, paz, tranquilidad… Esto era lo que encontraba en aquella música, siempre había llevado una vida extraña, no era mala, pero tampoco se podía decir que era buena, por eso, ahora me encontraba a gusto, por primera vez me estaba relajado y esto era lo más alucinante, yo no solía relajarme ni cuando dormía, y todo esto me lo transmitía un piano que seguramente, tocado por unas manos prodigiosas me compadecían y calmaban mi angustia y soledad.
    Una idea sucumbió mi mente, tenía que saber el nombre de aquel prodigio de la música, así que guiándome por unas melodiosas notas fui llegando hasta encontrarme con un piano, me acerque hasta allí y cual fue mi sorpresa al descubrir a una mujer tocando tales melodías, no es que fuera una mujer, sino que ésta solo aparentaba veinte años o quizás menos, tal frialdad en su maduro rostro podría asombrar a cualquiera, tan tremenda pasión al ver sus dedos sobre el piano, era símbolo de que lo amaba, su cara lo decía todo, aquella joven era “feliz” mientras estuviera allí sentada.
    La melodía termino y para mi desagrado los creadores de la fiesta y propietarios de la mansión, llegaron hasta mí acompañados de mis padres.
    Inutashio: Inuyasha hijo, te estábamos buscando.
    Inuyasha: aquí me tenéis, que queríais?
    Izayoi: Inu, no seas descortés y saluda a la familia Mashatori.

    Inuyasha: (fingiendo una aprobación) disculpen mi descortesía, encantado.
    Sr. Mashatori: No te preocupes.
    Inutashio: por cierto, has felicitado ya a la hija de los Mashatori?
    Inuyasha: no padre, no he tenido el gusto de conocerla.
    Sra. Mashatori: Pues no te aremos esperar más, Kikio, ven aquí querida.

    Ahora si que estaba anonadado, aquella joven, la pianista era Kikio Mashatori.
    Kikio: (con un inclinamiento de cabeza) Encantada.
    Inuyasha: lo mismo digo, por cierto, cuantos cumple?
    Kikio: (secamente) diecisiete.

    Sra. Mashatori: hija, porque no vais los dos al balcón a charlar.
    Kikio: esta bien madre.
    Aún sin palabras la seguí hasta llegar fuera, una vez allí, su rostro de formalidad y seriedad pasó a uno mas normal pero manteniendo la frialdad.
    Kikio: (sentándose en un banco) ah, que aburrimiento.
    Inuyasha: (mirándola fijamente) considera su cumpleaños un aburrimiento?
    Kikio: (con una fría mirada) acaso piensas que la fiesta es divertida?? Ah, no me llames de usted por favor, solo son diecisiete años.
    Inuyasha: (comprendiéndola) pues sinceramente es un auténtico martirio, para ser sincero no hubiera venido si no me hubieran obligado claro esta, lo único que puedo aguantar de este tipo de fiestas de la “alta aristrocraia” suele ser la música.
    Kikio: y has soportado la mía?
    Inuyasha: pues sí, no sabía que la hija de la familia Mashatori tocara también el piano, si me he acercado antes, era porque quería descubrir el rostro de aquellas notas.

    Kikio: y te ha gustado?
    Inuyasha: se podría decir que sí, tocas excelentemente bien y, como he podido notar, disfrutas tocando no?
    Kikio: si, es lo único en mi vida que encuentro interesante, aunque me somete demasiado, llevo desde los cinco años tocando, tres horas diarias cuando era pequeña, luego pasaron a ser cinco y ahora son seis, demasiadas para mí, pero, como dicen mis padres “no es suficiente con ser buena, tienes que ser la mejor”, por eso me veo obligada a casi una tortura diaria en una causa que me gusta, sí, pero que exige demasiado compromiso.

    Inuyasha: a sí que te obligan no?
    Kikio: así es, y a que te dedicas, emm…

    Inuyasha: Inuyasha, estoy acabando mis estudios, solo me queda un año, después no se lo que haré, mis padres quieren que vaya a la universidad y que siga estudiando, pero sinceramente no se si eso es lo que quiero.
    Kikio: y bien, que es lo que quieres?
    Inuyasha: eso, no lo sé…
    Kikio: pues es fácil, que te gusta?
    Inuyasha: que me gusta? (pensando) eso lo tengo claro, adoro el baile, no me consideres “rarito por esto”, llevo muchos años estudiando todos los bailes, latinos, estándar y sin duda los que más me gustan, lo nuevos bailes, hip-hop, reggeton, estilos que, por ser demasiado nuevos la gente los considera de raros, demasiado extraños.

    Kikio: así que eres bailarín, pues no esta nada mal, sabes, a mí también me gusta bailar, y te diré que he aprendido los bailes más clásicos desde pequeña, me han hecho aprenderlos, y, aún así lo que más me gusta no son precisamente dichos bailes, aunque no te lo creas, cada dos días acudo a casa de un amigo que me enseña Regge y hip-hop, a escondidas de mis padres claro esta, tan solo llevo un mes y la verdad es que me gusta mucho, pero, aún así no requiero el valor necesario para confesar tal secreto a mis anticuados padres.
    Inuyasha: vaya vaya, así que la pianista nos ha salido rebelde, quien lo diría, con ese vestido tan elegante.
    Kikio: no me juzgues por mis formas, sino por como soy. (Secamente)
    Inuyasha: yo no te he juzgado, simplemente he dicho la verdad, esta claro que no tienes valor suficiente para confesar a tus padres tu más bien secreto, pero, si lo tienes para escaparte y bailar?
    Kikio: me gusta la música, adoro el arte, soy artista! Pero, estas palabras jamás han de ser escuchadas por ellos.

    Inuyasha: y como sabes que yo te seré fiel y no se lo contaré?
    Kikio: desgraciadamente eso no puedo saberlo, he bajado la guardia y he decidido confiar en alguien que ni si quiera conozco.

    Inuyasha: débil tal vez? (sarcásticamente)
    Kikio: (levantándose) Confiada tal vez, pero débil nunca…
    Inuyasha: no te preocupes, no les diré nada.
    Kikio: (mirándole fijamente) ¿Por qué?
    Inuyasha: no encuentro motivo alguno por el que yo tenga que hablar de conversaciones privadas con personas que no conozco.
    Kikio: (marchándose) gracias…
    Inuyasha: (observando las estrellas) no hay de que…

    Desde aquel día descubrí cuan secretas y misteriosas podéis llegar a ser las mujeres, me anticipé creyendo que nunca más volvería a ver a aquella chica, pero, me equivoqué.
    Un día, viniendo de casa de Miroku, me encontré con aquella chica, sola, vagando en la más remota soledad de la noche, apoyada en un árbol y mirando al cielo sin un punto fijo que ver en él.
    Inuyasha: (acercándose a ella) hola?
    Kikio: (mirándole fríamente) que haces aquí?
    Inuyasha: pues a decir verdad nada, me íba a mi casa cuando te he visto aquí parada.

    Kikio: (limpiándose las lágrimas) pues entonces continúa con tu camino.
    Inuyasha: lo haría, pero resulta ser que tengo una cosa que se llama conciencia y que me perseguirá durante toda la vida si te dejo y te pasa algo.
    Kikio: si me sucediera algo, a nadie le importaría y menos a ti que no me conoces.
    Inuyasha: cierto, pero esta en la naturaleza de todo humano los remordimientos, así que no me dejas más opción que ayudarte, no son horas de que camines tu sola por aquí.
    Kikio: me da igual!!! (Gritando)
    Inuyasha: Ki.…kio
    Kikio: (llorando y gritando) me da igual lo que me pase!!!!!!!!!! Me da igual todo!!!!!!!!!!!!! No le importo a nadie!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    No se lo que me paso, debilidad tal vez? Compasión? Seguramente…
    Sin quererlo le abracé, la estreche entre mis brazos, me di cuenta que llevaba allí durante mucho, lo sentí porque se desmayó en mis brazos, no sabía lo que hacer, pero si tenía claro que no podía dejarla allí. Así que cargandola en brazos la llevé hasta mi apartamento, un estudio nuevo y algo pequeño en el que vivía mientras acababa mis estudios.

    Durmió durante toda la noche en mi cama, tapada con una manta, yo me quedé dormido en el sofá y a la mañana siguiente me desperté pronto para verla. Y allí estaba, tranquila, serena y durmiendo relajadamente. Al cabo de un rato se despertó, como era lógico se asusto.
    Kikio: que ha pasado?
    Inuyasha: anoche te desmayaste y te traje aquí.

    Kikio: me has traído a tu casa?
    Inuyasha: si, no pensabas que te iba a dejar en la calle?
    Kikio: no se donde hubiera estado mejor, en la calle o en la cama de un completo extraño.

    Inuyasha: pues teniendo en cuenta que te desmayaste, creo que aquí.
    Kikio: bueno, y que quieres que te diga? Y si me has intentado violar?
    Inuyasha: no me hagas de reír, yo? Acostarme con tigo?
    Kikio: (sonrojada) serás…
    Inuyasha: no tienes de que preocuparte, no soy esa clase de chicos, te doy mi palabra de que has dormido tranquilamente toda la noche, bueno, y porqué llorabas?
    Kikio: (levantándose) no tengo porque darte explicaciones.

    Inuyasha: cierto, pero teniendo en cuenta que te he ayudado me podrías contar el por qué de tus lamentos?
    Kikio: pues resulta ser que no, no acostumbro ha hablar con desconocidos sobre mi vida, gracias y hasta pronto.

    Inuyasha: mira, haremos una cosa, he preparado el desayuno, tómatelo y después te marchas vale?
    Kikio: (dubitativamente) yo… esta bien.


    Mientras desayunábamos me contó todo lo sucedido, resultaba ser que aquella chica había discutido con sus padres, ellos se habían enterado de sus huidas para irse a bailar con un amigo, me contó que les había dicho toda la verdad, que ya estaba harta de tanto piano y que no tenía planes futuros con él, éstos inevitablemente se enfadaron aún más y la castigaron, incluso su madre le dio una bofetada. Ahora entendía lo que aquella chica necesitaba, cariño, estaba falta de sentimientos, ella misma reflejaba la frialdad de su corazón, no tenía amigos, solo uno y ya no podía verle. Con un simple café y un poco de cariño yo había conseguido sacar de su corazón todos aquellos impunes recuerdos, empezó a llorar, y aquella debilidad mía se hacia notatória en aquel momento, de forma que la volví ha abrazar.
    Por primera vez en mucho tiempo, sentía compasión por alguien, estaba acostumbrado a que todos a mi alrededor no me importaran lo más mínimo, pero, al ver a aquella chica dura, fría, rota y desolada por tanto dolor, me vi a mi mismo, un chico antipático y sin sentimientos pero que en el fondo si tenía corazón.
    Finalmente la acompañé hasta su casa, resultaba ser que sus padres no se habían dado cuenta de su escapada, me miraron mal, tremendamente mal pero ante sus miradas carecientes de honor, yo les hablé de todo lo que aquella chica estaba sufriendo. ¿Y por qué?. Simplemente porque ellos, no podían ver la realidad, no podían desperdiciar unos minutos de su inaguantable ritmo de vida para fijarse en su hija.

    Al cabo de unos días Kikio vino a mi casa llorando y diciéndome que se había marchado, no podía vivir con sus padres, no si estos no eran capaces de ver su sufrimiento, estaba harta de todo y como no lo aguantaba más optó por irse.
    Ante mi duro corazón la dejé quedarse en mi casa, solo por unos días hasta que consiguiera un trabajo con el que poder pagarse un piso...

    Con el paso de los días, me di cuenta de que no quería que se fuera, sin darme cuenta había dejado que ella no solo viviera en mi casa, sino que además había entrado en mi corazón y yo no quería que se fuera, cada día nos llevábamos mejor, aunque ambos éramos muy fríos, con paciencia y cariño acabamos entendiéndonos y pudimos convivir, tanto que un día llegó a casa después del trabajo, como solía hacer pero con un periódico en la mano y con una mirada un tanto “distinta”.
    Inuyasha: que te pasa?
    Kikio: he encontrado un piso, cerca de aquí y como ya he reunido el dinero suficiente pues, lo compraré…

    Inuyasha: entonces, no deberías estar contenta?
    Kikio: si…

    Inuyasha: y, cual es el problema?
    Kikio: el problema es que no se si quiero irme…
    Inuyasha: Ki…kio

    Kikio: sé que estoy en una casa que no es la mía, solo estoy aquí como “ocupa” pero aún así…
    Inuyasha: (cortándola) yo tampoco quiero que te vayas!
    Kikio: Inuyasha… yo, me has ayudado mucho, nunca antes había tenido una relación así con un chico, yo… yo… creo que…
    Inuyasha: (sonrojado) no te vayas, no cuando eres lo único que me hace sentirme bien.
    Kikio: (abrazándose a él) te quiero…
    Inuyasha: (besándola) y yo a ti…

    Desde aquel momento me di cuenta de lo mucha que la quería, Kikio se mudó definitivamente a mi casa, aunque yo solo tenía diecisiete años, vivía con una chica en mi casa. Algo extraño para personas tan jóvenes, aún así, ambos seguíamos queriéndonos en secreto de todo el mundo.
    Kikio y yo practicábamos los bailes todos los días, rápidamente pude notar que era perfecta en bailes clásicos, lo intentaba con los nuevos bailes pero lo clásico era lo suyo, me enseñó mucho acerca de dichos bailes y yo a ella.
    Era tanto su amor hacia el Vals o el Quickstep, que acabo apuntándose a la “Academia Takahashi”, su afán por bailar fue lo que hizo que me sincerara ante mis padres, se lo tomaron relativamente bien, ya que les hubiera gustado que yo siguiera con mis estudios, pero no fue así.

    Cada día que pasaba avanzábamos más en nuestra relación, con ella fue mi primer beso, mi primera vez, todo…
    Llegamos a ganar el segundo premio en Fox-trot, muchos decían que hacíamos muy buena pareja, pero nosotros manteníamos nuestro amor en silencio, en la intimidad.
    Cada día ensayábamos más y más, no parábamos, seis horas diarias. Y fue precisamente ese ímpetu de ser los mejores, de ser los ganadores que dejamos de sentir amor, pasión por el baile para pensar en los malos pasos que hacía uno u otro

    Un día, en la final de bailes estándar, ante mas de mil personas, Kikio tropezó y ambos caímos al suelo, evidentemente nos descalificaron.
    Llegó a ser tanto mi genio por no haber ganado, que salí corriendo, Kikio me siguió, la lluvia empezó a caer, ella no paraba de disculparse con migo, pero yo no la escuchaba, una bestia se apoderaba de mí, no podía, no quería y no sabía como dominarla, pero si recordaba que llevaba varios días tomándome unas pastillas para poder aguantar ese ritmo, no eran exactamente drogas pero cada vez me encontraba peor.
    Lo recuerdo muy bien, aquellos nefastos sucesos acuden a mi mente y pueblan mis ilusiones con dolor y rencor. Sin saber muy bien porqué, me transforme en un monstruo, una criatura nacida del mal, mis garras crecieron al igual que lo hicieron mis músculos, orejas y pelo, mis ojos se inyectaron de sangre y lo único que pasaba por mi cabeza en esos momentos era la palabra matar. No se por que me siguió hasta aquel bosque, si no lo hubiera hecho, tal vez ahora nos hablaríamos, pero, el caso fue que arremetí contra ella, la herí, le mordí, le rompí varios huesos y casi le destrozo una pierna.
    ¿Y mientras mi yo interno que hacia? Nada, llorar de angustia y desesperación, no tenía control sobre mí, aún no conforme con eso, la intenté matar, si, lo intenté, pero en el oportuno momento de que iba ha hacerlo ella me miró a los ojos y apunto de desmayarse me dijo “te quiero”.
    Creo que aún recuerdo aquel sonido, el sonido de mi corazón al romperse, al quebrase, al partirse en mil pedazos que creía nunca más podría reparar.
    Volví a la realidad con Kikio en mis brazos, como pudo la llevé a un Hospital, su vida dependía de un hilo muy frágil y casi roto.
    Los médicos la dieron por muerta, su corazón seguía latiendo pero su mente estaba perdida en su subconsciente, resulto que tenía muchas costillas rotas, magulladuras y especialmente una pierna rota, quizás nunca más volviera a bailar, y todo por mi culpa.
    A pesar de todo, yo acudía todos los días, le hablaba, le pedía perdón y de pronto, un día en el que yo había perdido toda esperanza, despertó.
    Al verme empezó a gritar y a llorar.

    Desde entonces, Kikio no volvió a ser la misma, su mirada paso a perderse en el rencor, la frialdad, con migo fue una chica muy diferente a la actual, intente por mil maneras hablarle, pero ella no quiso.
    Ambos seguíamos en la Academia, pero ella nunca pudo volver ni volverá a bailar como lo había hecho en sus mejores tiempos, ahora se dedica a ser profesora de baile, este ha sido su último año como alumna, se podía haber ido si hubiera querido, pero, no pudo, no sabiendo que no la cogerán en ningún sitio teniendo semejante lesión en su pierna, por eso ha decidido quedarse en la penumbra, apartarse de todo y simplemente vivir una vida tranquila.
    Si ahora ha encontrado amor, calidez en Naraku, me alegro, simplemente le deseo que vuelva a ser la que era antes.


    Continuará………….


     
  2.  
    kag-mdi

    kag-mdi Entusiasta

    Piscis
    Miembro desde:
    17 Noviembre 2006
    Mensajes:
    122
    Re: *academia De Baile*

    wiii ya te acercas a donde se quedo,de todas maneras no me ha importado volver a leerme todo otra vez.
    sobretodo lo del hospital,es lo que mas me gusta jeje

    sigue con las contis!!!!
     
  3.  
    rakel_fuenla

    rakel_fuenla Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    0
    Re: *academia De Baile*

    BUENAS NOCHES!!!!!!!!!!!!
    Lo siento, dije que pondría la conti el martes y así hubiera sido de no ser debido a que Cemzoo tardó horas y horas en subir los capítulos , entendedme no quiero poner el capi 50 hasta no tener todos hasta el 49.
    Además ayer me tuve que ir al dentista y no me podía tirar tanto tiempo en el ordena.
    Pero como os habreís dado cuenta hoy si, no se si es que habría menos gente pero he tardado menos, así que por hoy ya esta bien.
    Hos pido mil perdones pero mañana ya estará la conti, los cuatro episodios que me quedan por poner y la conti.
    Muchisímas gracias a todas y hasta mañana.
    Gracias!!!!!!!!!!!!

     
  4.  
    rakel_fuenla

    rakel_fuenla Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    19633
    Re: *academia De Baile*

    Episodio 45º: Contigo aprendí… que es mejor sonreír.

    Inuyasha besaba cada vez más a Kagome, sin darse cuenta, fue dejando caer su mano hasta que llegó a la zona en la que terminaba su espalda, un simple roce e hizo que la chica se sobresaltara.
    Kagome: para!
    Inuyasha: jeje, lo siento, no pretendía.
    Kagome: (abrazándose a él) lo sé, pero no, no estoy preparada Inu, me encantaría tumbarme en esa cama y dejarme llevar por un mar de caricias, pero, tiemblo cuando me rozas, me acongoja semejante idea, lo sient…
    Inuyasha: (besándola) no tienes porque pedirme perdón, solo cuando tú quieras, ¿recuerdas?, solo cuando estés realmente preparada dímelo, estaré encantado de pasar la noche con tigo de la mejor manera.
    Kagome: (sonrojada) gracias por comprenderme.
    Inuyasha: no me las tienes que dar, te quiero, y quiero que tu primera vez “real” sea especial.
    Kagome: como que mi primera vez?, es una duda que tengo desde hace tiempo, recuerdo que en la fiesta de Hallowen me quitaste la botella cuando estaba apunto de declarar que no era virgen. Achu!! (Estornudando)
    Inuyasha: ahora mismo te lo digo, pero, primero vístete, no quiero que te quedes en cama durante estos días por haberte acatarrado.
    Kagome: esta bien.

    Inuyasha se fue a la habitación de Shota, no tenía nada que hacer, así que se dedicó ha contemplar la gran vista que aquel templo le permitía obtener de aquel gran pueblo.
    Al cabo de un rato, una arreglada Kagome entró en la habitación.
    Kagome: (mirándole) Algo interesante?
    Inuyasha: a decir verdad no, pero, siempre se puede observar, no?
    Kagome: (sentándose en la cama de su hermano) si…

    Inuyasha: sé que te sietes frustrada, lo entiendo, pero, en el momento menos inesperado llegará, mientras, sé tu misma y olvídate de todo, imagínate que estamos de vacaciones, los dos solos, que mejor no? (sentándose a su lado)
    Kagome: si…

    Inuyasha: si, pero a ti te gustaría algo más no?
    Kagome: sabes que si, me gustaría poder seguir, ya te lo he dicho, dejarme llevar, pero, cuando tengo ese pensamiento, horribles imágenes acuden ha mi cabeza y el miedo me paraliza.
    Inuyasha: pues… deja de mirar.
    Kagome: ¿Cómo?
    Inuyasha: simple, esas imágenes te atormentan, acuden a ti, pero, la cosa es muy fácil, no tienes porque olvidar, es más, no creo que nunca olvides semejante atrocidad, pero, si puedes pensar en cosas mejores.
    Kagome: cosas mejores?
    Inuyasha: si, cuando ha sido tu mejor momento?

    Kagome: pues…(algo triste) creo que no tengo mejor momento…
    Inuyasha: no es posible, tiene que haber algo en tu vida que haya sido único!
    Kagome: creo que ha habido demasiadas cosas, una de las más significativas fue una frase como “no puedo vivir sin tu sonrisa” “te quiero desde el primer día en que baile con tigo” , de verdad, nunca creí que pudieras ser capaz de decirme aquellas palabras en el Hospital, me emocionaste Inu…
    Inuyasha: (sonrojado) gra…cias, pero, me asustaste demasiado, aún así, todo lo que te dije era verdad, me gustas desde que me plantaste cara en aquel baile, aún así, no creo que un “te quiero” cuando estabas apunto de suicidarte fuera tu mejor momento.
    Kagome: (algo triste) sí, pero no tengo un momento único, como tú has dicho.
    Inuyasha: siempre puedes crear uno…
    Kagome: (sonrojada) Inu…
    Inuyasha: no me refería a eso, te apetece bailar?
    Kagome: cómo?

    Inuyasha: que si quieres bailar?
    Kagome: esta bien…

    Inuyasha: espera un momento en esta habitación, cuando te llame bajas vale?
    Kagome: si…


    Inuyasha bajo las escaleras hasta que llegó al salón y al cabo de diez minutos éste llamo a la chica para que bajara.
    De lo que Kagome no tenía ni idea, era, de lo que había creado Inuyasha, las luces estaban más cálidas que de costumbre, y era, porque ese don Juan, había puesto pañuelos rojos encima de las lámparas, además todos los muebles estaban apartados para que hubiera espacio en el centro del salón, una melodiosa canción estaba empezando a sonar en la cadena de música e Inuyasha estaba en el centro esperando a que ella llegara.
    Kagome: (reprimiendo un gran asombro) que es todo esto?
    Inuyasha: se trata de tu momento único, o mejor dicho, de nuestro momento único. ^.^

    Kagome: (pasando sus manos por el cuello del chico) Inu…
    Inuyasha: (cogiéndole de la cintura) esta canción se titula “Contigo aprendí” y, ¿A que no adivinas de quien es?
    Kagome: Luís Miguel!
    Inuyasha: correcto, sabía que te iba a gustar, así que la próxima vez que te pregunte espero que por lo menos me cites este momento.

    Kagome: (sonriendo) lo prometo!
    Inuyasha: así me gusta.

    Ambos empezaron a bailar este precioso bolero, un baile que, haciendo hincapié en él, sabremos que se trata del baile de los enamorados, un baile muy llamativo para este momento.
    Con pasos lentos y muy pegados van bailando la perfecta melodía, una melodía que si bien no tiene muchos movimientos agitados lo tiene en la pasión que hay que expresar en unos pasos lentos y precisos. La canción relata la verdadera historia de un hombre enamorado de una joven que, viviendo de ilusiones es feliz, aun siendo éstas claras imaginaciones y pensamientos con emoción, pero carentes de realidad, aún así, en esta pareja poca realidad era poca, Inuyasha abraza a la joven y la atrae hacia él para besarla, algo que como el mismo cantante dice “como te abrazaré, cuanto te besare”, Kagome sin poder evitarlo se sonroja pero no queriendo separarse de ese beso sigue profundizando y matizando en él, al compás de la melodía van girando muy despacio, las palabras “te morderé los labios” inundan el salón y para no contrariar con la canción, Inuyasha da un pequeño mordisco en los labios de Kagome, ésta se aferra más a su cuello y lo besa tranquilamente.
    Inuyasha: (en el oído de Kagome) y bien?
    Kagome: No rompas un momento como este (besándole en el cuello)
    Inuyasha: si…
    Apenas sin darse cuenta Inuyasha empieza a cantar la canción, no se le escuchaba ya que la música y la voz del cantante eran mayores que la de él, pero, de todas formas lo gesticulaba como tal.
    En el estribillo Inuyasha hace que Kagome de varias vueltas y acabe de espaldas a él, mientras éste posa sus manos sobre su vientre.
    Inuyasha: (soplándole en la oreja) aprendí, que la semana tiene más de siete días, hacer mayores mis contadas alegrías y a ser dichoso yo con tigo aprendí. Contigo aprendí, a ver la luz del otro lado de la luna, con tigo aprendí que tu presencia no la cambio por ninguna, aprendí que puede un beso ser más dulce y más profundo, que puedo irme mañana mismo de este mundo, las cosas buenas ya conti las viví y…
    Y apunto de terminar la canción Kagome vuelve a girar y se pone frente a Inuyasha, éste con una cálida sonrisa acaba cantando.
    Inuyasha: (acercándose a Kagome)… y contigo aprendí, que yo nací, el… día… en que, TE CONOCÍ….

    Él, como todo galán hace que la chica se deje caer en sus brazos hacía atrás mientras éste sujetándola la besa suavemente.
    Kagome: (seguía besándose) Inu…
    Inuyasha: (va subiendo con ella poco a poco) y ahora que me dices?
    Kagome: que eres encantador y aunque no lo reconozcas muy romántico.
    Inuyasha: gracias!
    Kagome: seguimos bailando? (guiñándole un ojo)
    Inuyasha: por supuesto que si!

    Siguieron así durante el resto de la mañana, después prepararon la comida y para descansar un rato después de comer, se sentaron en el sofá a ver la TV.
    Inuyasha no pudo reprimir un bostezo, debido al cansancio y teniendo en cuenta que apenas había pegado ojo en toda la noche sin tan si quiera darse cuenta se fue tumbando cada vez más en el sofá.
    Kagome: Inu, te estas durmiendo?
    Inuyasha: ¬¬ No.

    Kagome: túmbate!
    Inuyasha: cómo?
    Kagome: es una oren túmbate en el sofá. “.”
    Inuyasha viendo las pocas soluciones posibles ante una orden de Kagome accedió a dicha petición, se quito las zapatillas y se recostó en el sofá.
    Kagome: puedo? (mirándole atentamente)
    Inuyasha: (cogiéndola de la cintura y tumbándola encima de él) no tienes que pedirme permiso.
    Kagome: (sonrojada) lo siento.
    Inuyasha: el que?
    Kagome: apenas has dormido no?

    Inuyasha: (apagando la TV) pues ha decir verdad no he dormido.
    Kagome: ¿Y por qué no lo haces ahora?
    Inuyasha: si me miras fijamente no seré capaz de hacerlo.
    Kagome: y que hay de malo en que te mire?
    Inuyasha: no me gusta que me observen tan detenidamente! ><
    Kagome: si lo hago es porque eres realmente guapo y creo que solo una vez te he visto dormido. (Mordiéndole la oreja)
    Inuyasha: (sonrojado) y que habría que ver en mí si estoy dormido?
    Kagome: uf, aunque no lo creas mucho, dormidos es cuando más nos relajamos, no gesticulamos y la cara al igual que todo nuestro cuerpo esta tranquilo y sosegado, nunca te había visto tranquilo y con una cara angelical…

    Inuyasha: yo angelical?
    Kagome: si tú!
    Inuyasha: pues no me lo imaginaba.
    Kagome: oye, todavía no me has contestado a mi pregunta
    Inuyasha: que pregunta?
    Kagome: en la fiesta de Hallowen, según tú me consideras virgen por qué?

    Inuyasha: (con una sonrisa sarcástica) porque lo eres. ¬¬
    Kagome: Inu, que más me gustaría a mí, pero no… (sonrojada)
    Inuyasha: esta bien, te lo explicaré, para mí, la primera vez es entregar no solo “pureza” como todo cursi suele decir, sino compartir algo más, algo mutuo y especial, no solo físico si no también psíquico, cuando dos personas se quieren, acaban compartiendo no solo su cuerpo si no también de forma menos directa su mente, por eso la primera vez es algo que suele ser recordada, y no precisamente porque haya sido la mejor noche de tu vida, no, porque debido a la inexperiencia y otros factores la cosa se complica, pero, por suerte el amor, que generalmente si es de los primeros suele ser el más limpio acaba salvando aquella noche de un seguro desastre.
    En resumen, cuando tu primera vez fue forzada, en tu mente no había ningún sentimiento de amor ni nada similar, sino todo lo contrario, frustraciones, odio, terror son palabras que definirían el pensamiento de tu mente en aquellos momentos. Esta claro que físicamente no eres virgen, pero, en mente careces de todos estos sentimientos, amor, deseo, posesión, todo esto no ha sido experimentado en tu mente y si tu mente no ha sentido esto es porque la información que tu cuerpo manda tampoco son estos sentimientos, siendo así que nunca has experimentado el deseo, el amor pasional y el dominio que se puede llegar a tener de la otra persona. Queda que, cuado a una persona le hacen semejante barbarie, no conforme con sentirse mal, en su mente intenta inculcarse las ideas de que enamorarse es malo, tener relaciones con otra persona es horrible, pero, en realidad lo que esta intentando es convencerse así mismo de todas estas ideas para razonar de alguna manera la tragedia sucedida. Todo ello sería independiente en cada uno de nosotros, puesto que cada uno tiene una serie de perjuicios y de criterios que son distintos y particulares de cada uno (conciencia). Tú misma te has intentado suicidar, te has mostrado diferente a los demás, ocultándote y encerrándote en un mundo a parte, sumida en tus preámbulos y perjuicios. Por todo ello, creo que es lógico tener miedo y aún más difícil resulta la idea de intentar probar algo que para ti ha sido horrible, pero, ¿Qué hay fácil en la vida? Si todo fuera fácil, este mundo no existiría porque no tendría complicación alguna, y son esas complicaciones las que hacen que en determinados ocasiones podamos tener miedo, además de complicaciones también hay beneficios como lo pueden ser el casarse, tener hijos y ese tipo de cosas que la sociedad establece como “buenas”, como te estarás dando cuenta me estoy dando una clara reflexión ética sobre la vida.
    Kagome: O.O desde cuando sabes tu tanto?
    Inuyasha: desde toda la vida, aunque no lo creas, paso la mayor parte del tiempo observando, estudiando minuciosamente a la sociedad en la que nos encontramos y después de mucho observar, simplemente saco teorías, deduzco y razono.

    Kagome: (besándole) ^.^ No sabía que tuviera un novio tan listo!

    Ante aquella palabra “novio” Inuyasha no pudo reprimir una cara de asombro, era la primera vez que tenía a Kagome encima suya y que ésta estaba totalmente relajada, sin ninguna frustración por estar encima de él, ni nada similar, era ahora, cuando razonadamente y en secreto descubría que entre ellos no se podrían encontrar mejor, tal vez sí, pero claramente habían subido un peldaño en su relación y por nada del mundo quería estropear ese momento.
    Kagome: Inuyasha?, Inuyasha?
    Inuya: em, ah si, dime.
    Kagome otra vez absorto en tus pensamientos?
    Inuyasha: no.

    Kagome: si claro, lo que tú digas. ¬¬
    Inuyasha: bueno, intenta dormirte.
    Kagome: no.
    Inuyasha: por qué no?
    Kagome: no me dormiré hasta que me cuentes tu amorío con Kikio.

    Inuyasha: (triste) no.
    Kagome: por fis, me dijiste que el día que estuviera encima tuya, diciéndote un “te quiero” me lo contarías, así que te quiero!
    Inuyasha: sabes, tienes mucho morro, no te contaré nada, es algo demasiado íntimo para mí, y nadie salvo ella y yo sabemos lo que en realidad pasó.
    Kagome: nunca se lo has confesado a nadie?
    Inuyasha: no.
    Kagome: y por que no empiezas ha sincerarte con migo?
    Inuyasha: (pensando) sabes, creo que no estaría nada mal, pero, has de prometerme una cosa.
    Kagome: dime?
    Inuyasha: prométeme que después de que escuches todo lo que tengo que contarte no te cabrearás con migo.

    Kagome: por qué tendría que enfadarme?
    Inuyasha: enfadarte no, pero, conociéndote seguro que te pones celosa o algo similar y además prométeme que después trataras a Kikio como siempre, como a una profesora más entendido??
    Kagome: prometido, pero cuenta que me estoy impacientando.

    Inuyasha: ¬¬ Esta bien.

    Todo comienza…………..


    Continuará………………………..




    Episodio 46º: Una historia: Kikio, mi primer amor.

    Kagome: prometido, pero cuenta que me estoy impacientando.
    Inuyasha: ¬¬ Esta bien.

    Todo comienza en una cálida noche, muy calurosa, demasiado para una persona fría como yo solía ser por aquellos tiempos. Con una simple mirada hacía que cualquiera que estuviera cerca no le gustara mi presencia y se acababa marchando, ¿antipático?, mucho, pero yo me consideraría solitario, siempre lo he dicho, la soledad ha sido mi mejor amiga durante años, quizás no la mejor pero si la única.
    Si hubiera tenido alguna opción seguramente no me hubiera encontrado en aquella fiesta, los espacios pequeños y con mucha gente no eran precisamente de mi agrado y menos si esas “gentes” lo único que tenían en común con migo era que podían respirar, por lo demás éramos personas demasiado diferentes, tanto, que a mis dieciséis años de por aquel entonces, lo único que encontraba meramente “entretenido” por así decirlo se trataba de la música que solían poner en aquellos ambientes, ambientes inhóspitos de ricachones que lo mejor que tenían que hacer para gastar sus fortunas era crear grandes fiestas mientras enseñaban sus grandes mansiones, joyas y demás utensilios que yo consideraba de lo más ordinario.
    Resumiendo, personas hipócritas sin humildad alguna y que se pavoneaban delante de todos los de su misma calaña, por lo general, a mis padres no les interesaban lo más mínimo este tipo de eventos por así llamarlos, pero, debido a que era el cumpleaños de uno de los componentes de la familia que organizaba la fiesta, y éstos insistieron en que fuéramos al final por simple cortesía mis padres quedaron en ir.
    Y allí me encontraba, solo, sumido en un mundo de necedades mientras gente falsa se contaban los “grandes infortunios” que una vida como la suya podía tener.
    Como había dicho, lo único interesante que podría encontrar allí, era la música, música que no precisamente encajaba en mis gustos, lenta, tranquila, melodiosa, con pequeños acordes, toda una contrariedad a los míos, pero, que como se solía decir “una vez al año, no hace daño”, por eso me encontraba ahora asomado en el balcón, despojándome de todos aquellos sentimientos que una sinuosa melodía me transmitía, no sabía como explicarlo, paz, tranquilidad… Esto era lo que encontraba en aquella música, siempre había llevado una vida extraña, no era mala, pero tampoco se podía decir que era buena, por eso, ahora me encontraba a gusto, por primera vez me estaba relajado y esto era lo más alucinante, yo no solía relajarme ni cuando dormía, y todo esto me lo transmitía un piano que seguramente, tocado por unas manos prodigiosas me compadecían y calmaban mi angustia y soledad.
    Una idea sucumbió mi mente, tenía que saber el nombre de aquel prodigio de la música, así que guiándome por unas melodiosas notas fui llegando hasta encontrarme con un piano, me acerque hasta allí y cual fue mi sorpresa al descubrir a una mujer tocando tales melodías, no es que fuera una mujer, sino que ésta solo aparentaba veinte años o quizás menos, tal frialdad en su maduro rostro podría asombrar a cualquiera, tan tremenda pasión al ver sus dedos sobre el piano, era símbolo de que lo amaba, su cara lo decía todo, aquella joven era “feliz” mientras estuviera allí sentada.
    La melodía termino y para mi desagrado los creadores de la fiesta y propietarios de la mansión, llegaron hasta mí acompañados de mis padres.
    Inutashio: Inuyasha hijo, te estábamos buscando.
    Inuyasha: aquí me tenéis, que queríais?
    Izayoi: Inu, no seas descortés y saluda a la familia Mashatori.

    Inuyasha: (fingiendo una aprobación) disculpen mi descortesía, encantado.
    Sr. Mashatori: No te preocupes.
    Inutashio: por cierto, has felicitado ya a la hija de los Mashatori?
    Inuyasha: no padre, no he tenido el gusto de conocerla.
    Sra. Mashatori: Pues no te aremos esperar más, Kikio, ven aquí querida.

    Ahora si que estaba anonadado, aquella joven, la pianista era Kikio Mashatori.
    Kikio: (con un inclinamiento de cabeza) Encantada.
    Inuyasha: lo mismo digo, por cierto, cuantos cumple?
    Kikio: (secamente) diecisiete.

    Sra. Mashatori: hija, porque no vais los dos al balcón a charlar.
    Kikio: esta bien madre.
    Aún sin palabras la seguí hasta llegar fuera, una vez allí, su rostro de formalidad y seriedad pasó a uno mas normal pero manteniendo la frialdad.
    Kikio: (sentándose en un banco) ah, que aburrimiento.
    Inuyasha: (mirándola fijamente) considera su cumpleaños un aburrimiento?
    Kikio: (con una fría mirada) acaso piensas que la fiesta es divertida?? Ah, no me llames de usted por favor, solo son diecisiete años.
    Inuyasha: (comprendiéndola) pues sinceramente es un auténtico martirio, para ser sincero no hubiera venido si no me hubieran obligado claro esta, lo único que puedo aguantar de este tipo de fiestas de la “alta aristrocraia” suele ser la música.
    Kikio: y has soportado la mía?
    Inuyasha: pues sí, no sabía que la hija de la familia Mashatori tocara también el piano, si me he acercado antes, era porque quería descubrir el rostro de aquellas notas.

    Kikio: y te ha gustado?
    Inuyasha: se podría decir que sí, tocas excelentemente bien y, como he podido notar, disfrutas tocando no?
    Kikio: si, es lo único en mi vida que encuentro interesante, aunque me somete demasiado, llevo desde los cinco años tocando, tres horas diarias cuando era pequeña, luego pasaron a ser cinco y ahora son seis, demasiadas para mí, pero, como dicen mis padres “no es suficiente con ser buena, tienes que ser la mejor”, por eso me veo obligada a casi una tortura diaria en una causa que me gusta, sí, pero que exige demasiado compromiso.

    Inuyasha: a sí que te obligan no?
    Kikio: así es, y a que te dedicas, emm…

    Inuyasha: Inuyasha, estoy acabando mis estudios, solo me queda un año, después no se lo que haré, mis padres quieren que vaya a la universidad y que siga estudiando, pero sinceramente no se si eso es lo que quiero.
    Kikio: y bien, que es lo que quieres?
    Inuyasha: eso, no lo sé…
    Kikio: pues es fácil, que te gusta?
    Inuyasha: que me gusta? (pensando) eso lo tengo claro, adoro el baile, no me consideres “rarito por esto”, llevo muchos años estudiando todos los bailes, latinos, estándar y sin duda los que más me gustan, lo nuevos bailes, hip-hop, reggeton, estilos que, por ser demasiado nuevos la gente los considera de raros, demasiado extraños.

    Kikio: así que eres bailarín, pues no esta nada mal, sabes, a mí también me gusta bailar, y te diré que he aprendido los bailes más clásicos desde pequeña, me han hecho aprenderlos, y, aún así lo que más me gusta no son precisamente dichos bailes, aunque no te lo creas, cada dos días acudo a casa de un amigo que me enseña Regge y hip-hop, a escondidas de mis padres claro esta, tan solo llevo un mes y la verdad es que me gusta mucho, pero, aún así no requiero el valor necesario para confesar tal secreto a mis anticuados padres.
    Inuyasha: vaya vaya, así que la pianista nos ha salido rebelde, quien lo diría, con ese vestido tan elegante.
    Kikio: no me juzgues por mis formas, sino por como soy. (Secamente)
    Inuyasha: yo no te he juzgado, simplemente he dicho la verdad, esta claro que no tienes valor suficiente para confesar a tus padres tu más bien secreto, pero, si lo tienes para escaparte y bailar?
    Kikio: me gusta la música, adoro el arte, soy artista! Pero, estas palabras jamás han de ser escuchadas por ellos.

    Inuyasha: y como sabes que yo te seré fiel y no se lo contaré?
    Kikio: desgraciadamente eso no puedo saberlo, he bajado la guardia y he decidido confiar en alguien que ni si quiera conozco.

    Inuyasha: débil tal vez? (sarcásticamente)
    Kikio: (levantándose) Confiada tal vez, pero débil nunca…
    Inuyasha: no te preocupes, no les diré nada.
    Kikio: (mirándole fijamente) ¿Por qué?
    Inuyasha: no encuentro motivo alguno por el que yo tenga que hablar de conversaciones privadas con personas que no conozco.
    Kikio: (marchándose) gracias…
    Inuyasha: (observando las estrellas) no hay de que…

    Desde aquel día descubrí cuan secretas y misteriosas podéis llegar a ser las mujeres, me anticipé creyendo que nunca más volvería a ver a aquella chica, pero, me equivoqué.
    Un día, viniendo de casa de Miroku, me encontré con aquella chica, sola, vagando en la más remota soledad de la noche, apoyada en un árbol y mirando al cielo sin un punto fijo que ver en él.
    Inuyasha: (acercándose a ella) hola?
    Kikio: (mirándole fríamente) que haces aquí?
    Inuyasha: pues a decir verdad nada, me íba a mi casa cuando te he visto aquí parada.

    Kikio: (limpiándose las lágrimas) pues entonces continúa con tu camino.
    Inuyasha: lo haría, pero resulta ser que tengo una cosa que se llama conciencia y que me perseguirá durante toda la vida si te dejo y te pasa algo.
    Kikio: si me sucediera algo, a nadie le importaría y menos a ti que no me conoces.
    Inuyasha: cierto, pero esta en la naturaleza de todo humano los remordimientos, así que no me dejas más opción que ayudarte, no son horas de que camines tu sola por aquí.
    Kikio: me da igual!!! (Gritando)
    Inuyasha: Ki.…kio
    Kikio: (llorando y gritando) me da igual lo que me pase!!!!!!!!!! Me da igual todo!!!!!!!!!!!!! No le importo a nadie!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    No se lo que me paso, debilidad tal vez? Compasión? Seguramente…
    Sin quererlo le abracé, la estreche entre mis brazos, me di cuenta que llevaba allí durante mucho, lo sentí porque se desmayó en mis brazos, no sabía lo que hacer, pero si tenía claro que no podía dejarla allí. Así que cargandola en brazos la llevé hasta mi apartamento, un estudio nuevo y algo pequeño en el que vivía mientras acababa mis estudios.

    Durmió durante toda la noche en mi cama, tapada con una manta, yo me quedé dormido en el sofá y a la mañana siguiente me desperté pronto para verla. Y allí estaba, tranquila, serena y durmiendo relajadamente. Al cabo de un rato se despertó, como era lógico se asusto.
    Kikio: que ha pasado?
    Inuyasha: anoche te desmayaste y te traje aquí.

    Kikio: me has traído a tu casa?
    Inuyasha: si, no pensabas que te iba a dejar en la calle?
    Kikio: no se donde hubiera estado mejor, en la calle o en la cama de un completo extraño.

    Inuyasha: pues teniendo en cuenta que te desmayaste, creo que aquí.
    Kikio: bueno, y que quieres que te diga? Y si me has intentado violar?
    Inuyasha: no me hagas de reír, yo? Acostarme con tigo?
    Kikio: (sonrojada) serás…
    Inuyasha: no tienes de que preocuparte, no soy esa clase de chicos, te doy mi palabra de que has dormido tranquilamente toda la noche, bueno, y porqué llorabas?
    Kikio: (levantándose) no tengo porque darte explicaciones.

    Inuyasha: cierto, pero teniendo en cuenta que te he ayudado me podrías contar el por qué de tus lamentos?
    Kikio: pues resulta ser que no, no acostumbro ha hablar con desconocidos sobre mi vida, gracias y hasta pronto.

    Inuyasha: mira, haremos una cosa, he preparado el desayuno, tómatelo y después te marchas vale?
    Kikio: (dubitativamente) yo… esta bien.


    Mientras desayunábamos me contó todo lo sucedido, resultaba ser que aquella chica había discutido con sus padres, ellos se habían enterado de sus huidas para irse a bailar con un amigo, me contó que les había dicho toda la verdad, que ya estaba harta de tanto piano y que no tenía planes futuros con él, éstos inevitablemente se enfadaron aún más y la castigaron, incluso su madre le dio una bofetada. Ahora entendía lo que aquella chica necesitaba, cariño, estaba falta de sentimientos, ella misma reflejaba la frialdad de su corazón, no tenía amigos, solo uno y ya no podía verle. Con un simple café y un poco de cariño yo había conseguido sacar de su corazón todos aquellos impunes recuerdos, empezó a llorar, y aquella debilidad mía se hacia notatória en aquel momento, de forma que la volví ha abrazar.
    Por primera vez en mucho tiempo, sentía compasión por alguien, estaba acostumbrado a que todos a mi alrededor no me importaran lo más mínimo, pero, al ver a aquella chica dura, fría, rota y desolada por tanto dolor, me vi a mi mismo, un chico antipático y sin sentimientos pero que en el fondo si tenía corazón.
    Finalmente la acompañé hasta su casa, resultaba ser que sus padres no se habían dado cuenta de su escapada, me miraron mal, tremendamente mal pero ante sus miradas carecientes de honor, yo les hablé de todo lo que aquella chica estaba sufriendo. ¿Y por qué?. Simplemente porque ellos, no podían ver la realidad, no podían desperdiciar unos minutos de su inaguantable ritmo de vida para fijarse en su hija.

    Al cabo de unos días Kikio vino a mi casa llorando y diciéndome que se había marchado, no podía vivir con sus padres, no si estos no eran capaces de ver su sufrimiento, estaba harta de todo y como no lo aguantaba más optó por irse.
    Ante mi duro corazón la dejé quedarse en mi casa, solo por unos días hasta que consiguiera un trabajo con el que poder pagarse un piso...

    Con el paso de los días, me di cuenta de que no quería que se fuera, sin darme cuenta había dejado que ella no solo viviera en mi casa, sino que además había entrado en mi corazón y yo no quería que se fuera, cada día nos llevábamos mejor, aunque ambos éramos muy fríos, con paciencia y cariño acabamos entendiéndonos y pudimos convivir, tanto que un día llegó a casa después del trabajo, como solía hacer pero con un periódico en la mano y con una mirada un tanto “distinta”.
    Inuyasha: que te pasa?
    Kikio: he encontrado un piso, cerca de aquí y como ya he reunido el dinero suficiente pues, lo compraré…

    Inuyasha: entonces, no deberías estar contenta?
    Kikio: si…

    Inuyasha: y, cual es el problema?
    Kikio: el problema es que no se si quiero irme…
    Inuyasha: Ki…kio

    Kikio: sé que estoy en una casa que no es la mía, solo estoy aquí como “ocupa” pero aún así…
    Inuyasha: (cortándola) yo tampoco quiero que te vayas!
    Kikio: Inuyasha… yo, me has ayudado mucho, nunca antes había tenido una relación así con un chico, yo… yo… creo que…
    Inuyasha: (sonrojado) no te vayas, no cuando eres lo único que me hace sentirme bien.
    Kikio: (abrazándose a él) te quiero…
    Inuyasha: (besándola) y yo a ti…

    Desde aquel momento me di cuenta de lo mucha que la quería, Kikio se mudó definitivamente a mi casa, aunque yo solo tenía diecisiete años, vivía con una chica en mi casa. Algo extraño para personas tan jóvenes, aún así, ambos seguíamos queriéndonos en secreto de todo el mundo.
    Kikio y yo practicábamos los bailes todos los días, rápidamente pude notar que era perfecta en bailes clásicos, lo intentaba con los nuevos bailes pero lo clásico era lo suyo, me enseñó mucho acerca de dichos bailes y yo a ella.
    Era tanto su amor hacia el Vals o el Quickstep, que acabo apuntándose a la “Academia Takahashi”, su afán por bailar fue lo que hizo que me sincerara ante mis padres, se lo tomaron relativamente bien, ya que les hubiera gustado que yo siguiera con mis estudios, pero no fue así.

    Cada día que pasaba avanzábamos más en nuestra relación, con ella fue mi primer beso, mi primera vez, todo…
    Llegamos a ganar el segundo premio en Fox-trot, muchos decían que hacíamos muy buena pareja, pero nosotros manteníamos nuestro amor en silencio, en la intimidad.
    Cada día ensayábamos más y más, no parábamos, seis horas diarias. Y fue precisamente ese ímpetu de ser los mejores, de ser los ganadores que dejamos de sentir amor, pasión por el baile para pensar en los malos pasos que hacía uno u otro

    Un día, en la final de bailes estándar, ante mas de mil personas, Kikio tropezó y ambos caímos al suelo, evidentemente nos descalificaron.
    Llegó a ser tanto mi genio por no haber ganado, que salí corriendo, Kikio me siguió, la lluvia empezó a caer, ella no paraba de disculparse con migo, pero yo no la escuchaba, una bestia se apoderaba de mí, no podía, no quería y no sabía como dominarla, pero si recordaba que llevaba varios días tomándome unas pastillas para poder aguantar ese ritmo, no eran exactamente drogas pero cada vez me encontraba peor.
    Lo recuerdo muy bien, aquellos nefastos sucesos acuden a mi mente y pueblan mis ilusiones con dolor y rencor. Sin saber muy bien porqué, me transforme en un monstruo, una criatura nacida del mal, mis garras crecieron al igual que lo hicieron mis músculos, orejas y pelo, mis ojos se inyectaron de sangre y lo único que pasaba por mi cabeza en esos momentos era la palabra matar. No se por que me siguió hasta aquel bosque, si no lo hubiera hecho, tal vez ahora nos hablaríamos, pero, el caso fue que arremetí contra ella, la herí, le mordí, le rompí varios huesos y casi le destrozo una pierna.
    ¿Y mientras mi yo interno que hacia? Nada, llorar de angustia y desesperación, no tenía control sobre mí, aún no conforme con eso, la intenté matar, si, lo intenté, pero en el oportuno momento de que iba ha hacerlo ella me miró a los ojos y apunto de desmayarse me dijo “te quiero”.
    Creo que aún recuerdo aquel sonido, el sonido de mi corazón al romperse, al quebrase, al partirse en mil pedazos que creía nunca más podría reparar.
    Volví a la realidad con Kikio en mis brazos, como pudo la llevé a un Hospital, su vida dependía de un hilo muy frágil y casi roto.
    Los médicos la dieron por muerta, su corazón seguía latiendo pero su mente estaba perdida en su subconsciente, resulto que tenía muchas costillas rotas, magulladuras y especialmente una pierna rota, quizás nunca más volviera a bailar, y todo por mi culpa.
    A pesar de todo, yo acudía todos los días, le hablaba, le pedía perdón y de pronto, un día en el que yo había perdido toda esperanza, despertó.
    Al verme empezó a gritar y a llorar.

    Desde entonces, Kikio no volvió a ser la misma, su mirada paso a perderse en el rencor, la frialdad, con migo fue una chica muy diferente a la actual, intente por mil maneras hablarle, pero ella no quiso.
    Ambos seguíamos en la Academia, pero ella nunca pudo volver ni volverá a bailar como lo había hecho en sus mejores tiempos, ahora se dedica a ser profesora de baile, este ha sido su último año como alumna, se podía haber ido si hubiera querido, pero, no pudo, no sabiendo que no la cogerán en ningún sitio teniendo semejante lesión en su pierna, por eso ha decidido quedarse en la penumbra, apartarse de todo y simplemente vivir una vida tranquila.
    Si ahora ha encontrado amor, calidez en Naraku, me alegro, simplemente le deseo que vuelva a ser la que era antes.


    Continuará………….



    Episodio 47º: El día de Nochevieja

    Inuyasha respiró hondo e intento volver a la realidad, había relatado su mayor secreto, algo que nunca antes hubiera podido hacer.
    Reparó en Kagome, ella tenía una cara increíblemente de asombro, tenía lágrimas en los ojos, estaba sonrojada pero aún así una minúscula sonrisa se dibuja en su rostro.
    Inuyasha: lo siento, no pretendía.
    Kagome: (abrazándose a él) no digas nada…
    Inuyasha no sabía que pensar o que decir, ¿Estaría cabreada? ¿Desilusionada tal vez? No se atrevía a cuestionarla. Al cabo de un rato la chica por fin articulo palabra.
    Kagome: no sabía que ocultarás un pasado así, ahora entiendo el dolor de Kikio... y el tuyo… ¿Nunca le contaste lo de tu familia no?
    Inuyasha: no…
    Kagome: lo siento yo, estoy realmente conmovida, gracias…
    Inuyasha: ¿Por?
    Kagome: por abrirme tu corazón, se lo mucho que te cuesta, por eso es un gesto muy valiente de tu parte en contarme tal dramática relación.
    Inuyasha: lo fue, pero, ¿Sabes una cosa?
    Kagome: dime.
    Inuyasha: Cuando creía que nunca más sería capaz de olvidarla, que nunca podría volver a enamorarme, llegaste tú, hasta el momento nadie sabía nada, llegó un día que no aguante más y se lo conté todo a Miroku, él me ayudo, sin él no se que hubiera hecho, pero aún así, nunca me había sincerado tanto. Aunque no te lo creas he utilizado a cientos de mujeres, las he besado y las he enamorado, puedes pensar lo que quieras, pero nunca me he acostado con ninguna…
    Kagome: ¿Cómo? Yo pensaba que tú…
    Inuyasha: ya lo sabía, después de lo de Kikio, he besado y bailado con muchas mujeres, mujeres que yo denominaba “de una vez”, un baile de una noche y de ninguna más, no puesto que se podría enamorar de mi y yo no de ellas, de todos modos no he tenido la suficiente confianza para compartir mi cuerpo con una extraña, después de Kikio no ha habido ninguna otra Kagome.
    Kagome: la noche en que nos conocimos yo íba a ser una “mujer de una sola noche” no?
    Inuyasha: si, por si no lo sabías, hice una apuesta con Miroku.

    Kagome: òó Una apuesta?
    Inuyasha: si, yo le dije que era un galán, todo un conquistador cuando bailaba, asi que el me retó a que me acercara a unas chicas que estaban al lado de nosotros, que eligiera a una y que cuando acabara la canción la tendría rendida a mis pies.

    Kagome: no me lo puedo creer, para ti solo fui una apuesta?
    Inuyasha: déjame acabar, como te imaginas perdí la apuesta, aquella chica me plantó cara y juré que me iba a vengar. Lo que no imaginaba es que después esa chica iba a ser mi compañera de cuarto, mi pareja de baile y que me iba a ayudar tanto.
    Kagome: que hubiera pasado si no hubiéramos ido a la misma escuela?
    Inuyasha: no lo sé, a lo mejor hubiéramos coincidido otra noche en aquel antro y no sé…, no creo que tú me hubieras permitido que te besara no?
    Kagome: tenlo por seguro.
    Inuyasha: no lo sé, eso es algo que nunca hubiera podido planificar.
    Kagome: doy las gracias de que seamos compañeros!
    Inuyasha: yo también.
    Kagome: bueno, teniendo en cuenta que son las ocho de la noche, no creo que podamos dormirnos ya no?
    Inuyasha: ^.^ No.
    Kagome: y que se supone que podemos hacer?
    Inuyasha: lo que tú quieras… ^.^
    Kagome: siempre pensando en lo mismo!
    Inuyasha: comprende que llevo mucho tiempo sin nada Kagome!
    Kagome: ¬¬ Mira que eres!
    Inuyasha: tranquila, todavía no quiero acostarme contigo.
    Kagome: No hay quien te entienda!
    Inuyasha: (en su oído) sabes, cuanto más espere peor será la espera, pero mejor serán tus gritos y gemidos por esa noche.
    Kagome: Inu!! ><
    Inuyasha: (besándola en el cuello) pienso… matarte de placer Kagome…
    Kagome: (levantándose) será mejor que me valla ha hacer la cena!!!! ><
    Inuyasha: (abanicándose con las manos) creo que será lo mejor!!!

    La noche transcurrió tranquila, ambos cenaron y cada uno se fue a sus respectivos cuartos, no sin antes despedirse con un fulgurante beso…
    Inuyasha: (besándola en el pasillo) si quieres, podemos seguir en tu cuarto.
    Kagome: (separándose de él) no será necesario, hasta mañana!!!!
    Inuyasha: (sonriendo) buenas noches…

    A la mañana siguiente Inuyasha se levantó, se dio una ducha y pensando que Kagome aún dormía, llego a la cocina con la idea de prepararle el desayuno. Claro, esa era la idea, lo que no pensaba encontrarse allí, era a Kagome cocinando, el agua hirviendo, el aceite chisporroteando en la sartén, el horno, todo, estaba cocinando de todo.
    Inuyasha: *.* Se puede saber que haces?
    Kagome: (mirando el horno) por si no lo sabías hoy es Noche Vieja!
    Inuyasha: (con la boca abierta) es verdad, no me había acordado de nada!
    Kagome: me he levantado pronto para cocinar, luego tenemos que irnos a comprar ropa!
    Inuyasha: a comprar ropa?
    Kagome: hombre claro! No pensarás empezar un nuevo año así?
    Inuyasha: (mirándose de arriba a bajo) que hay de malo en mis vaqueros?
    Kagome: que no son la ropa apropiada para semejante acontecimiento!
    Inuyasha: pero si solo vamos a ser dos!

    Kagome: pues resulta ser que no, he invitado a Sango y Miroku!
    Inuyasha: O.O que???
    Kagome: es por que nosotros solos no hubiéramos podido comernos tanta comida, así que a disfrutar!
    Inuyasha: esta bien, has desayunado?

    Kagome: pues a decir verdad no…
    Inuyasha: cocinando toda la mañana y sin nada en el estómago?
    Kagome: >< que quieres, estaba ocupada!
    Inuyasha: eso si que no, donde tienes un delantal?
    Kagome: un delantal?
    Inuyasha: es que no quiero mancharme la ropa sabes?
    Kagome: (dándole uno) aquí tienes.
    Inuyasha: gracias, mientras tu cocinas, yo te ayudo a limpiar la casa y a prepara todo vale?
    Kagome: O.O Va…le…
    Inuyasha: por cierto, no te he dado los buenos días!
    Kagome: no importa, aún así buenos días!
    Inuyasha: esa no es mi forma de darte los buenos días. ¬¬
    Kagome: a no?
    Inuyasha: (besándola) esta si es mi forma.
    Kagome: O.O am.
    Inuyasha: muy bien, a trabajar!!!!!!!!!

    El resto de la mañana se pasó increíblemente rápido, limpiaron la casa, comieron, prepararon la comida, colocaron algún que otro adorno, la mesa.
    Todo estaba muy limpio y ordenado, sin contar con que ambos acababan de llegar de compras.
    Inuyasha: muy bien, son las siete, Sango y Miroku llegarán sobre las nueve, así que lo mejor será que nos arreglemos.
    Kagome: si, ^.^, yo voy primero a la ducha, vale?
    Inuyasha: ¬¬ No estoy de acuerdo, lo mejor sería que nos bañáramos juntos, así ahorraríamos agua.

    Kagome: >< No!!!!
    Inuyasha: (acercándose a ella) tranquila, era broma.
    Kagome: ya lo se, siempre eres así con todas?
    Inuyasha: (besándola el cuello) solo con tigo.
    Kagome: (sonrojada) pues nada, sigue así, adiós!!!

    Kagome subió corriendo las escaleras, definitivamente ese chico era encantador, su perfecto cuerpo, su pelo, esas orejas y lo mejor, los ojos, esos ojos tan profundos e indecisos que al clavar en ella su mirada le hacían parecer tan frágil como un cristal, claro, que siempre estaban sus brazos para no quebrarse.
    Ahora se daba cuenta del calor que sentía cada vez que aquellos ojos se clavaban en ella, o cada vez que le besaba o simplemente cuando le abrazaba.
    En cualquier caso, estaba enamorada, era imposible sacarlo de su mente, aunque no quisiera, cada vez se acaloraba más al verle, simplemente un roce y hasta el último de su pelo se estremecía y sucumbía ante él.
    Incluso ahora, cubierta en la más cálida agua, acudía a su mente, y de que forma, con tan solo una toalla y mojado!!!, Dios, ¿Era posible que lo deseara? ¿Deseaba estar de esa forma con Inuyasha? No lo sabía o tal vez no quería reconocerlo, pero si ahora Inuyasha hubiera estado dándola un masaje en la espalda sería la mujer más feliz del mundo. Aún así, en su cabeza siempre había algo de temor, no sabía si pudiera llegar a tanto con él, eso si, por primera vez pensó en que era hora de intentarlo.

    Llegó hasta su habitación, se puso un pantalón negro, un top rojo y una chaqueta a juego con el top y con unos zapatos de punta del mimo color, se maquilló y se rizo el pelo, después simplemente bajó a esperar a Inuyasha.

    Al cabo de media hora su pretendiente bajó, y de que forma!!! Llevaba un pantalón negro, una camisa color miel y una corbata marrón a juego con los zapatos.
    Inuyasha: (llegando hasta ella) y bien??
    Kagome: (sonrojada) estás muy guapo!!! ><
    Inuyasha: (acercándose a ella) gracias!!! Tú siempre lo estás.
    Kagome: (separándose) bien, será mejor que empecemos a sacar la comida.
    Inuyasha: Esta bien ¬¬

    Pasados unos minutos, otra pareja apareció por la puerta.
    Kagome: (abriéndola puerta) Chicos!!!!!!!!!!!!!!!!
    Sango: hola Kagome!!!!!!!!!

    Miroku: hola pareja!!!
    Inuyasha: (apareciendo por detrás de la puerta) Miroku! ¬¬
    Kagome: (sonrojada) no os quedéis en la puerta, pasad.

    Al quitarse el abrigo, Sango dejó mostrar un fino vestido de color verde hasta la rodilla con mangas acampanadas, un pañuelo atado al cuello en rojo y unas botas del mismo color.
    Miroku llevaba n pantalón azul marino, con una camisa verde y corbata roja.
    Kagome: ^.^ Chicos, estáis guapísimo!!!!!!!!!!
    Sango y Miroku: >< gracias!!!!!!!!!
    Miroku: bueno, bueno, así que os habéis quedado aquí varios días solos???
    Inuyasha: no me quiero ni imaginar lo que estás pensando!
    Miroku: “Piensa mal y acertarás”, seguro que no habéis hecho nada???
    Sango: (sonrojada) Miroku, esas cosas no se preguntan!!!!!!
    Miroku: sí… sí…
    Kagome: Miroku!!!!!!!!!
    Miroku: esta bien, ya me cayo.
    Inuyasha: vamos ha cenar!!!
    Todos: si!!!!!!!!!

    La velada transcurrió normal, una magnífica cena preparada por Kagome, risas, sonrojos e insinuaciones no faltaron, champán, fuegos ratifícales, en fin, todo en la típica noche de fin de año.
    Después de la cena los cuatro se fueron a bailar, a un Karaoke, más baile, bebida.
    Lo mejor para semejante acontecimiento y sobre las seis de la mañana y después de una perfecta noche, cada uno decidió marcharse a dormir a su casa.
    Inuyasha: (abriendo la puerta) nos lo hemos pasado genial!!!
    Kagome: (algo sonrojada) si!!
    Inuyasha: (subiendo con ella de la mano) que te pasa?
    Kagome: nada, es solo que estoy algo mareada.
    Inuyasha: y eso?
    Kagome: debe de ser por el alcohol, pero no te preocupes, dormiré un poco y mañana se me pasará.
    Inuyasha: estás segura??
    Kagome: si.
    Inuyasha: (besándola) muy bien, hasta mañana.
    Kagome: (roja) hasta mañana…

    Continuara…..



    Episodio 48º: El calor de una noche…: Kagome

    Ya han pasado dos días, ahora, a dos de Enero, y realmente sigo sin saber lo que me pasa, ¿Por qué no puedo estar cerca de él? Cada vez voy a peor, me sonrojo con solo mirarle, me acaloro con un roce, y creo que él se empieza a sentir mal. Le comprendo, cree que no quiero que me bese o que me toque, pero la realidad es otra, la verdad es que me excita…
    ¿Un momento, me excita? No puede ser, me lo estaré imaginando? ¿Pero, como es posible que anoche haya tenido ese sueño? Un sueño en el que le veía, si, le veía tal y como Dios lo trajo al mundo. NO!!!!!!!!!! Esto no puede seguir así, tengo que superarlo, tengo que ser capaz de aguantarle la mirada, de enfriarme!! Lo mejor será que bajé a preparar el desayuno.
    Un momento, que es ese olor?? Huele ah, huele ah… pan recién hecho????
    Bajé hasta la cocina y…
    Inuyasha: Buenos días Kagome!! (Llegando hasta ella con una bandeja)
    Kagome: +.+ (sonrojada) Buenos días!!!
    Inuyasha: Que te pasa? Porque tan sonrojada a estás horas??
    Kagome: >< Por nada!!! Por nada!!!
    Inuyasha: (sirviéndola el desayuno) no sé porqué, pero no te creo nada, lo mejor será que desayunemos.
    Kagome: si, por cierto, desde cuando sabes cocinar?
    Inuyasha: (moviendo el café) yo?? Desde toda la vida.

    Kagome: am. (Bajando la mirada)
    Inuyasha: (serio) Kagome, ¿Qué es lo que te pasa?
    Kagome: nada!
    Inuyasha: te pasa algo y no me lo quieres contar! Cada vez que me arrimo te sonrojas, tiemblas y no me dejas besarte!
    Kagome: ya te he dicho que no me pasa nada!
    Inuyasha: ¬¬ Si tú lo dices…
    Kagome: y cambiando de tema, tenemos que ir al centro comercial!
    Inuyasha: que!!! O.o
    Kagome: lo que oyes, tenemos que comprar los regalos para Reyes, prepárate por que pasaremos todo el día comprando!
    Inuyasha: no por favor!
    Kagome: si!!!

    Y así toda la mañana, recorriendo tiendas y más tiendas. Si alguien me pregunta por mi hobby? Sin lugar a dudas hubiera respondido COMPRAR!!!
    Y con quien mejor si tengo a un novio guapo y fuerte que cargue las bolsas!! Comimos en un restaurante sencillo y muy bonito, por la tarde después de envolver todos los regalos y casi anocheciendo llegamos a casa.

    Kagome: (guardando los regalos) por fin!!
    Inuyasha: (tumbándose en el sofá) Has comprado media tienda!!
    Kagome: que pasa?? Es que necesitaba regalos para todos!!
    Inuyasha: si, excusas!! Me has cargado con todas las bolsas.
    Kagome: míralo por el lado bueno, así has hecho algo de deporte. (Riéndose)
    Inuyasha: >< Pues yo no le veo la gracia!
    Kagome: no te preocupes, ahora mismo te preparo una exquisita cena para que recuperes fuerzas!!!
    Inuyasha: vale!! O.O

    Después de la cena, subí al servicio y decidí darme una ducha, al igual que Inuyasha yo también estaba algo cansada, el ir de aquí para allá hacia que me dolieran las piernas, pero, no dejaría que él lo supiera.
    Salí del baño envuelta en dos toallas, una en el cuerpo y otra en la mano mientras me secaba el pelo.
    Si hubiera sabido lo que estaba apunto de suceder, seguramente me habría quedado en el baño eternamente.
    Caminaba por el pasillo directa a mi habitación cuando…
    Inuyasha se acercó a mí, me sonrojé rápidamente e intenté mirar hacia otro lado pero aquellos ojos me llamaban a gritos, nuestros brazos se rozaron, y en menos de tres segundos y con un solo tirón me había quedado sin toalla de espaldas a él.
    ¿Qué hacía, gritaba, le pegaba por haberme quitado la toalla o simplemente corría?
    Kagome: (tapándose) òó Inuyasha!!!!!!!!!!!!!!!
    Inuyasha: (seguía de espaldas) tranquila…no te he visto nada…
    Kagome: y entonces?
    Inuyasha: me gusta dejar a una mujer desnuda de una manera tan sumamente sutil.
    Kagome: devuélveme la toalla!!!
    Inuyasha: (girándose) no…
    Kagome: (sonrojada) he dicho que me la des!!!
    Inuyasha: (acercándose hasta ella) porque tendría que hacerlo?
    Kagome: (roja) Inu…


    Nunca olvidaré aquella escena, Inuyasha llegó hasta mí, me tapó con la toalla mientras me abrazaba, aquellos brazos rodearon mi cuerpo y llegaron a juntarse en mi ombligo, apoyo su cabeza en mi hombro y simplemente me susurró.
    Inuyasha: (dándola un beso en la mejilla) lo siento, pero, es que no he podido resistirme, además no pensabas que te dejaría pasar delante de mí como si nada no?
    Kagome: (temblando) Inu…

    Algo aún peor sucedió después, Inuyasha se poso delante de mí y me dio un beso en la frente, todo mi cuerpo empezó a temblar y sin quererlo mi toalla se cayo al suelo…
    Pensaba que me miraría de arriba a bajo, pero, todo lo contrario, no dejó de mirarme a los ojos ni un segundo, se volvió ha abrazar a mí para no verme y siguió susurrando.
    Inuyasha: (besándola en el cuello) te quiero…

    Por primera vez en mi vida sentí el verdadero significado de la palabra amor, ¿Cómo era posible que con solo un abrazo estuviera ardiendo? No lo podía creer, sentía como todo mi cuerpo se estremecía, ¿Acaso estaba caliente? Sí y mil veces sí, estaba empapada no solo del agua de la ducha, si no… Dios estaba excitada!! No era posible,¿Yo?. Esa chica dura que no se dejaba intimidar por nada ni por nadie, mis pezones se notaban más que nunca, y peor aún… Inuyasha estaba pegado a ellos.
    Inuyasha: (mirándola a los ojos) ¬¬ Qué te pasa?
    Kagome: (roja) Nada!!!!
    Inuyasha: (en su oído) y que pasaría si me aparto y te veo desnuda?
    Kagome: (abrazándose más a él) no lo hagas por favor!!
    Inuyasha: (besándola en el cuello) Ka... gome…

    No quería separarme de él, no solo por lo bien que me encontraba así, si no porque si lo hacia, me vería desnuda y… excitada.
    Inuyasha: (en su oído) ¿Qué te pasa Kagome? Llevas varios días muy rara, no muestras signos de estar enamorada de mí, ¿Acaso he hecho algo? No se, si es así lo siento…
    Kagome: (sonrojada) No…
    Inuyasha: (mirándole a los ojos) ¿Entonces, Por qué te comportas así? Me esquivas en cada momento!
    Kagome: (abrazándose a él) Lo que pasa es… es… que te quiero demasiado Inu!!!!!!!
    Inuyasha: (sonrojado) No te entiendo Kagome…
    Kagome: pues es muy fácil Inuyasha…
    Inuyasha: Kagome, ¿Acaso quieres?
    Kagome: no lo sé, lo único que me pasa es que cada vez que estoy cerca de ti, tengo demasiado calor. (Roja)
    Inuyasha: (sonriendo) Sabes? Hay una manera de acabar con el calor. ¬¬
    Kagome: (temblando) yo no se si puedo…
    Inuyasha: pero, ¿Por qué no intentarlo? Dime Kagome, quieres dormir con migo???

    Ante aquella pregunta millones de imágenes y de frases vinieron a mi cabeza, empezando por mi madre, diciéndome que me rebelara, que me soltara la melena y me dejara llevar, Shessoumaru, aunque no lo quisiera ahora recordaba cuando me había dicho algo así como “Vive por ti”, mis amigos y las mil veces que me dieron ánimos y por último él, aquel chico que aún deseándolo él más que yo, había sido tan sumamente caballeroso como para preguntarme si quería hacer el amor con él.
    Después de unos segundos solo pude responder…
    Kagome: si… (Roja)
    Inuyasha: (sonrojado) segura??
    Kagome: si Inuyasha, pero solo con una condición.
    Inuyasha: cual?
    Kagome: (temblando) no me hagas daño por favor… no quiero sentir lo que aquella vez…
    Inuyasha: (abrazándola) eso nunca, prometo que va a ser la mejor noche de tu vida…
    Kagome: (sonrojada) gracias…
    Lo que pasó después lo recordaré eternamente, lo guardaré en el fondo de mi corazón cerrado al vacío y con solo una llave, ¿El portador de ella?… Inuyasha.
    Jamás olvidaré cuando me tapó con la toalla, me cogió entre sus brazos y aún sonrojado me llevó hasta mi habitación.
    Me tumbo en mi cama, él encima y con su mirada en mis ojos empezó a besarme.
    Inuyasha: te quiero Kagome…
    Kagome: y yo a ti…
    Pasamos mucho tiempo así, sus labios posados en los míos, nuestras lenguas mezcladas y aunque no quisiera reconocerlo, cada vez tenía más calor…
    De pronto empezó a besar mi cuello, mientras lo hacia no paraba de tranquilizarme, me besaba el cuello con pasión.
    Siguió así, bajando hasta que se encontró con la toalla al empiece de mi pecho. Mirándome a los ojos posó su mano en la toalla, delicadamente y con una hábil caricia la tiró al suelo. No podía creerlo, me tenía desnuda, enfrente, un solo un vistazo y me hubiera visto hasta los pies desnuda, pero, en cambio no dejó de mirarme a los ojos, no hasta que yo le bese.
    Después empezó a besar mi pecho, delicadamente, solo rozándolos, y ya empezaba a temblar.
    Me tranquilizó cuando volvió a mi oído y susurró.
    Inuyasha: no te voy ha hacer nada. Cuando tú digas basta yo me pararé y dormiré a tu lado entendido?
    Kagome: sí.
    Ahora tenía la tranquilidad de poder parar, sabía que era verdad, con que le dijera que parara el lo haría y se quedaría a mi lado, pero, la pregunta era, ¿Quería yo que parara? Definitivamente no, no cuando ahora realmente me sentía bien, estaba besando mis pezones, simplemente los mojaba con su saliva y eso para mi corazón era un hermoso signo de que Inuyasha no se quería aprovechar de mí, no, me habría tumbado sobre la cama y simplemente me habría hecho el amor a lo bestia, no, me besaba y no paraba de hacerlo mientras seguía diciéndome lo mucho que me quería.
    Fue descendiendo hasta llegar a mi ombligo, seguía besándome, dejando rastros de amor por todo mi cuerpo, y ahora que temblaba al pensar que me iba a, que iba a…
    Todo lo contrario, volvió a besarme, y mientras lo hacía se fue quitando la camisa, después los pantalones y… no, eso no se lo quito.
    Volvió a besar mis pechos, solo que esta vez se permitió el lujo de poner sus manos sobre ellos, fue bajando hasta debajo del ombligo y después siguió bajando.
    Solo que tomo un atajo, posó sus labios en mi cadera derecha y fue bajando hasta mis pies. Emprendió el camino de subida por mi pierna izquierda, solo que esta vez lo hacia por su cara interna, de forma que llego hasta cierta zona que para mi era sagrada. Volvió a mirarme y una vez más volví a ponerme roja.
    Inuyasha: tranquila…
    Su voz sonaba tan cálida y tan dulce que me relajé, de tal modo que sin apenas darme cuenta había llegado a mí… a mí…
    Kagome: Inuyasha no!! Hay no!!

    No me escuchaba o no quería hacerlo, pero si lo hubiera hecho seguramente todo hubiera acabado y él sabía perfectamente que yo no quería acabar.
    Simplemente cerré un poco mis piernas para que no lo hiciera, pero lo hizo, lo hizo!!!!!! Empezó a besar… No podía creerlo, mientras lo besaba mi cuerpo se curvaba más y para colmo estaba ardiendo.
    Seguía así, besándolo, de pronto lo rozó con su lengua. ¡¡Dios, había rozado mi clítoris con su lengua!! Ante tal acto no pude reprimir un gemido, uno detrás de otro porque ahora ya no solo lo rozaba, sino que lo lamía y lo aprisionaba entre sus dientes. Estaba realmente excitada, demasiado…
    Se limpió y volvió a subir hasta mis labios.
    Inuyasha: se que te gusta…
    Kagome: Inu… (Roja)
    Mientras me besaba pude notar como su mano bajó hasta allí, ahora era su dedo el que tocaba mi punto débil, y como punto débil que era no opuso resistencia alguna, es más, se dejó tocar, y aún no conforme con eso, mis piernas se abrieron para dejar que su dedo entrará en mí.
    De ese modo mientras me besaba, y movía sus dedos en mí, se acercó hasta mi oído.
    Inuyasha: quieres que siga?

    Sin pensármelo dos veces le besé, esta vez con pasión, mucha pasión, de tal modo que él descifro mi manera de decirle, de rogarle que siguiera.
    Ahora estábamos completamente desnudos, se había puesto encima de mí y jugaba con mi lengua.
    Pude notar que al igual que yo estaba excitado, su parte erótica había crecido, y cada vez que me besaba lo hacía más. Baje un poco la mirada y lo descubrí, por primera vez, vi a Inuyasha desnudo. Un Inuyasha que se excitaba con solo verme a mí disfrutar, si eso no era amor, no sabía lo que era.
    Posó sus manos sobre las mías, me volvió a besar y una última mirada, una mirada que no se si alguna vez volveré a ver...
    ¿Realmente puede alguien ejercer tanto dominio sobre una persona? En mi opinión sí, simplemente me miraba, dejaba que mi aliento se juntará con el de él, olía a menta y a colonia, un aroma masculino que me embriagaba y me sometía bajo su control, aún mirándome fue introduciéndose en mí, ¿Doler? Si, me dolía mientras lo hacía, grite, pero no sabía si era de dolor o de felicidad.
    Cundo enteramente le pertenecía seguía mirándome, no había parado de hacerlo en ningún momento, mis ojos, ahora bañados en lágrimas, fueron testigos de la mirada de Inuyasha, una mirada que para mi sorpresa estaba igual que la mía, húmeda.

    Inuyasha: (besándola) ya ha pasado lo peor.

    Aún después de haber entrado en mí, tuvo la valentía y la caballerosidad de tranquilizarme, no pude pero me abrace a él, y lloré.
    No tenía ni idea de cómo podía describir aquella sensación, era más, mucho más que felicidad, me sentía tan bien, en aquellos momentos sentía como todo mi cuerpo se tranquilizaba, una paz que todavía no llegaría.
    Inuyasha me besó, dando así comienzo a mis gemidos.
    Gemidos del más infinito placer, entraba y salía de mí de un modo tan ecuánime y sencillo que parecíamos uno, y era porque en realidad era así, nuestras almas habían abandonado nuestros cuerpos para volar por el paraíso.
    Le sentí, por primera vez sentí que Inuyasha me amaba, me amaba de verdad, y si estaba ahora con migo era porque me quería.
    Cada vez íbamos más rápido, y digo íbamos porque ahora era yo la que me aferraba a su espalda y lo besaba con pasión.
    Sin tan siquiera darme cuenta estaba encima de él, besándole el cuello, y de que forma!!! Le había hecho un moratón con mi lengua.
    Me había puesto roja y él solo me miraba.
    Inuyasha: no pares ahora por favor…

    Volvió a ponerse encima y a seguir, ahora estaba totalmente curvada y de mi boca solo salían gritos y gemidos, él por su parte también gemía, y mientras me besaba con pasión nuestros cuerpos cada vez tenían más calor, no parábamos, nos movimos más y más rápido, bebiendo, respirando el uno del otro al mismo tiempo. Estaba empapada en sudor, y cuando creía que me iba a romper se acercó a mí y ahora me mordía los labios!!!.
    Empecé a sentir tanto calor que algo dentro de mí se estaba derritiendo.
    Kagome: no… puedo… más!!!!!
    Grite, pero el no me hizo caso, mientras algo me llenaba por dentro y parecía como si un Volcán estuviera estallando el seguía, hasta el punto en que casi me desmayo. Casi, porque en ese mismo instante, ambos gritamos al unísono, bebiendo el éxtasis que todavía quedaba.
    Inuyasha cayó en cima mía, empapado al igual que yo y respirando entrecortadamente, se acerco hasta mi rostro y tal y como habíamos empezado susurró.
    Inuyasha: te quiero…

    Después se durmió, no se si se desmayó debido al increíble esfuerzo que había hecho, pero, yo tampoco aguante mucho más, nos tapamos con la sábana, me abrace a él y con una infinita sonrisa caí en el mejor sueño reparador de toda mi vida.

    Continuara….





    Episodio 49º: Una mañana y un viaje.

    La luz se filtraba entre los finos bisillos de la habitación, para llegar y abrir, unos ojos tan dulces como la misma miel.
    El joven despierta para encontrarse con la chica más bonita que llenaba su corazón, ella aún dormía.
    Se quedó así, abrazado a ella, fijándose en sus delicadas facciones, sus ojos, aún cerrados, sus mejillas, que incluso dormidas y después de haber hecho un deseo con tanta pasión, todavía tenían aquel tono rosado, y lo que a él más le gustaba, sus labios, tan finos y sensuales como un pedazo de manzana madura, que dan ganas de morder.
    Del mismo modo que navega una góndola por Venecia se deslizaban los ojos del chico por la esbelta figura de la joven, como tenía calor estaba destapada, de este modo, dejaba ver muchos de sus encantos, que la noche anterior le habían fascinado aún mas.
    Posándose en cada curva, en cada ondulación, sus pechos, ¡Y que pechos!, redondos y firmes cual dos deseosos encantos, sus caderas, anchas y como a el le gustaban, su estrecha cintura, en la que siempre tenía puesta una mano, sus piernas, finas y delicadas pero que se habían agarrado bien en la noche del más puro amor.
    Volvió a subir la vista para mirar aquella parte que le había hecho sentir tantas cosas en una noche muy romántica, aún con ello, no pudo evitar el que un cierto rubor subiera por sus mejillas, siguió subiendo, por su ombligo y por su vientre, el cual había besado y lamido ante las estrellas, por eso mismo, se veían restos de pequeños mordiscos que se tornaban de un tono morado.
    En ese momento pensó, que no tendría que haberla hecho aquello, pero la sola idea de pensar en lo de anoche, hizo que sus mejillas se tornaran de un rosa pardo.
    Llego hasta su cuello, y al igual que en el vientre de la chica, observo un gran moratón, que permanecía vacilante ante la blanca piel de la joven.
    Volvió a mirar el rostro de la que ahora era toda una mujer, tuvo ganas de despertarla, pero, dormía tan placidamente y con aquella sonrisa tan cálida y dulce que no pudo hacerlo.

    Miró el despertador y se dio cuenta de lo tarde que era, pero, ¿Qué prisas tenían? A decir verdad ninguna, por ello permaneció así durante un tiempo, mirando, observando y deleitándose con lo que aquella chica mostraba a los ojos del joven.

    Pasó una hora hasta que sus ojos despertaron.
    Inuyasha: (besándola) Buenos días.
    La chica le correspondió, después se miró de arriba abajo y al darse cuenta de que estaba desnuda y encima de Inuyasha se tapó con la sábana.
    Inuyasha: (riéndose) anoche no te tapaste.
    Kagome: (roja) a…anoche fue distinto.
    Inuyasha: me pregunto de que color se pondrían tus mejillas si te digo que llevo un buen rato observándote, así, desnuda…
    Kagome: (roja como nunca lo había estado)
    Inuyasha: (la quita la sábana) jajaja.
    Kagome: (se cubre los pechos con las manos) como te atreves?
    Inuyasha: (se pone encima de ella y la besa) te quiero …
    Kagome: (sonrojada) no me vengas con esas ahora …
    Inuyasha: quiero hacerte mía…otra…vez… (Se abraza a ella)
    Kagome: pe…ro…
    Inuyasha: reconoce que te gustó (la mira finamente)
    Kagome: yo… (Aparta la mirada)
    Inuyasha: (la coge del mentón y hace que le mire a los ojos) dime, que sentiste?
    Kagome: (roja) pues, no me gustó…
    Inuyasha: que!! ><
    Kagome: me encanto! ^.^ (besándole)
    Inuyasha: o.o
    Kagome: (le da la vuelta y se pone encima de él) sabes, ahora quiero ser yo… (sonrojada)
    Inuyasha: (rojo al verla encima suya desnuda) cla …cla…cla..claro ..
    Kagome: (se abraza a él) es broma, y ahora quien se sonroja eh?
    Inuyasha: (la besa el cuello) no puedo resistirlo, cada vez que te tengo tan cerca, tengo, necesito besarte, con ello solo consigo excitarme de una manera que no te imaginas …
    Kagome: (ardiendo de calor) Inu …
    Inuyasha: (la muerde el cuello) te quiero tanto Kagome…
    Kagome: ahh, y yo a ti…
    Inuyasha: (la besa)
    Kagome: gracias…
    Inuyasha: (para de besarla) Por qué?
    Kagome: (con ojos vidriosos) Porque sabías cual era mi mayor miedo, y aún así, has conseguido que acabe con él y de la mejor manera, reconozco que me dolió si…, pero volvería a soportar aquel leve dolor por pasar la magnífica noche que he pasado con tigo… (Sonriendo)

    Inuyasha: (la abraza) no he sido yo … hemos sido los dos …
    Kagome: (abrazándole) no te separes nunca más de mí por favor…
    Inuyasha: nunca lo haré, te lo prometo.
    Kagome: de todo corazón gracias…
    Inuyasha: (besándola) sabes?
    Kagome: que?
    Inuyasha: creo que nunca me había sentido tan bien.

    Kagome: no te creo, ni siquiera con Kikio?
    Inuyasha: la verdad con ella fue mi primera vez, una auténtica ruina por ser precisamente la primera, pero, después mejoró, aún así creo que el estar ahora así, abrazado a ti, conociendo todos nuestros miedos y sin ningún secreto…, por un lado me asusta.

    Kagome: te asusta?
    Inuyasha: si, el no saber lo que va a pasar, el hecho de que alguien me conozca del modo en el que me conoces tú, no se, siempre me gusta tenerlo todo planificado, pero…

    Kagome: pero en el amor ninguna planificación sale bien.
    Inuyasha: cierto, aún así, no me arrepiento de que conozcas todos mis secretos, eres la única que sabe todo, todo acerca de mi y la única en la que confío.
    Kagome: ^.^ gracias por confiar en mí, bueno, a decir verdad tú no sabes todo acerca de mí. (Incorporándose)
    Inuyasha: ¬¬ no??
    Kagome: (levantándose con la sábana) no, nunca te he dicho que tengo un amante!
    Inuyasha: ¬¬ seguro?
    Kagome: si ^.^, estoy enamoradísima de él y dentro de unas horas nos vamos a casar.
    Inuyasha: (riéndose) de veras? ¬¬
    Kagome: si!

    Inuyasha: (sonriendo) pues me temo que no te voy a poder dejar ir a esa boda.
    Kagome: no?
    Inuyasha: no, además tienes cosas más importantes que hacer.

    Kagome: como que?
    Inuyasha: (levantándose) por ejemplo ducharte con tu novio.

    Kagome: (sonrojada) que???
    Inuyasha: (acercándose a Kagome) si, te lo he propuesto varias veces y te has negado, pero después de hoy, espero que no te vuelvas a negar, además te daré un masaje!
    Kagome: ya te he dicho que no puedo, me tengo que casar!!

    Inuyasha: pues yo te lavo!!!!!!!!!!!
    El chico se acerco hasta Kagome, la cogió en brazos y la llevo hasta la bañera entre gritos y chillidos. Una vez en el baño y con el agua caliente todo se transformo a una romántica mañana de una pareja de enamorados que, después de una increíble noche de amor estaban pasando por sus mejores momentos ahora que estaban tranquilos y sin ninguna preocupación.

    Después de la ducha y de una magnifica comida, la pareja de tórtolos se sentó en el sofá.
    Inuyasha: sabes que quedan tres días para que tu madre y tu hermano regresen?
    Kagome: (sonrojada) es verdad, y después otra vez a la rutina de la Academia. >.<

    Inuyasha: no quieres volver?
    Kagome: por un lado si, pero por otro me encuentro tan bien aquí contigo que no me apetece volver.
    Inuyasha: tengo una idea!
    Kagome: dime. *.*
    Inuyasha: organicemos una escapada!!
    Kagome: como???
    Inuyasha: lo que oyes, porque no nos vamos estos dos días que quedan a algún sitio?
    Kagome: y se puede saber a dónde?

    Inuyasha: a Hanabishait!!!!!!!!!
    Kagome: Cómo???
    Inuyasha: es un puerto de montaña, allí mis padres tienen una pequeña casita para seis personas, esta muy bien, podemos llamar a Sango y a Miroku, además así descansamos un poco antes de volver a la Academia.
    Kagome: no lo se, cuanto se tarda en ir?
    Inuyasha: pues si nos vamos mañana temprano unas cuatro horas en tren, pero, te puedo asegurar que te gustaría, además podemos alquilar unos esquís y así te enseño a patinar.

    Kagome: y quien te ha dicho que me tienes que enseñar?? ¬¬
    Inuyasha: francamente, no creo que sepas patinar.
    Kagome. Pues para tu información si sé!!!!! Y además, soy una de las mejores!!!!!
    Inuyasha: pues mejor aún, estaremos allí cuatro días, aunque tu madre venga dentro de tres, todavía no empieza la Academia.
    Kagome: bueno… la idea de irnos a esquiar me gusta.
    Inuyasha: y a que esperamos???????
    Kagome: esta bien, acepto!!!!!!!!! Ahora mismo voy a preparar la comida y la ropa para llevarnos!!!!!
    Inuyasha: muy bien, y yo llamaré a Sango y a Miroku!!!!!!!!!



    * * * * * * *


    Y es así como llegamos a Hanabishait, un copioso espacio en el que el deporte, la tranquilidad y la naturaleza se reúnen para formar un lugar tan frío como en el que se encuentran.
    Después de las insoportables cuatro horas de tren, habían llegado a dicho destino, ahora estaban desempaquetando las cosas, todas en una gran casa, muy amplia y aunque sin muchos lujos lo suficientemente apartada como para disfrutar ya no solo de los paisajes que un lugar como aquel mostraba sino la tranquilidad y el aire que se podía respirar.
    En definitiva, un lugar único y singular que solo unos pocos privilegiados podían disfrutar.
    Cuando acabaron de colocar todo y después de disfrutar de una cuantiosa comida, se vistieron con los “ropajes” más apropiados para disfrutar de lo que verdaderamente era el paisaje, la nieve, una nieve sólida que sería primordial para que dichos sean los personajes pudieran descender por las innumerables laderas de las montañas y esquiar.

    Así acaba la mañana, cuando después de caídas, risas, tortazos y como no gran momentos para recordar ambas parejas llegan a la cabaña nombrada con anterioridad y toman pues, la decisión de acudir a unos baños termales que se encontraban muy cerca de donde la cabaña estaba.
    Unas aguas naturales y cálidas sumergidas en la nieve incitaban a toda persona que allí fuera a por lo menos bañarse en aquel pecado de los Dioses por un momento.
    Ahora dos amigas se sumergían en aquellos baños de placer para relajarse y charlar sobre el magnífico día.
    Kagome: (mojándose) hay que gusto Sango.
    Sango: (metiéndose) ya lo creo, nunca estaré lo suficientemente agradecida a Inuyasha por haber tenido la alucinante idea de traernos hasta aquí.
    Kagome: ya lo creo Sango, además como es tarde todo el mundo se ha ido a dormir y estamos solos!
    Sango: es verdad, además estamos muy apartados del hotel donde reside todo el mundo.
    Kagome: es verdad, por cierto, ¿Cómo va tu relación con Miroku?
    Sango: pues no va, aunque me lo he pasado muy bien con él durante estos días, no me atrevo a decirle nada.
    Kagome: ¿Por qué no?
    Sango: Porque no quiero romper mi amistad con él, un momento que hago yo hablando de estos temas con tigo?
    Kagome: pues sencillamente porque sé que estas muy enamorada de él.
    Sango: (sonrojada) lo cierto es que me gusta, pero, temo al rechazo y más si se que él esta cada día con una, me utilizaría para una sola vez y me dejaría después.
    Kagome: pues yo no creo que sea así, además desde que esta con tigo, no ha salido con nadie, Inu me ha dicho eso, que Miroku esta cambiando y si eso es cierto lo que le hace cambiar eres tú.
    Sango: tal vez sea así, pero, no se…
    Kagome: en todo caso lo único que puedes y debes hacer es confesarte, y que mejor momento que este?
    Sango: como??
    Kagome: tú espera y verás.

    La joven se marcho envuelta en una toalla para aparecer después con el joven del que estaban hablando.
    Kagome: (empujando a Miroku dentro del agua) Kagome!!!!!!!!
    Sango: (roja) se puede saber porque lo has traído??
    Kagome: ^.^ para que le digas todo lo que me has dicho a mi hace un momento, bueno os dejo!!!!!!

    Miroku: (sonrojado) espera Kagome!!!!!!!!!

    Pero ante las palabras de Miroku, la chica ya se había marchado hacia el lugar de donde había traído al chico. Ahora esta se marchaba hacia allí con Inuyasha.
    Kagome: (metiéndose en el agua) hay el amor…
    Inuyasha: O.O Kagome!!
    Kagome: (riéndose) que pasa? Acaso no quieres ver a tu novia?? ¬¬
    Inuyasha: (acercándose a ella) todo lo contrario, además desde que hemos llegado no he podido estar ni un minuto a solas contigo, por cierto le has dicho algo de lo nuestro a estos dos??
    Kagome: no, y tú?
    Inuyasha: tampoco, pero, no crees que deberíamos decírselo?
    Kagome: (abrazándose a él) si, mañana lo haremos, pero ahora, porque no disfrutamos de esta tranquilidad?

    Inuyasha: (besándola) si, me gusta estar así contigo, ha sido buena idea venir verdad?
    Kagome: (besándole) si…, tu crees que acabarán juntos?

    Inuyasha: yo creo que si, Miroku esta enamorado de Sango y por lo que me has contado ella también, en todo caso eso se lo dejo a su libre decisión, mientras, nosotros disfrutemos de nosotros vale?
    Kagome: si ^.^


    Mientras, en el otro lado de las termas, la pareja actual se encontraba distanciada, cada uno en un lado de las paredes nevadas, ambos sonrojados no paraban de mirarse, miradas que incitaban a abrazarse pero que en ningún caso se oía palabra alguna por ambos.
    Nada hasta que alguien decidió romper el hielo….

    Continuara…..

     
  5.  
    sabe y rebe

    sabe y rebe Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    43
    Re: *academia De Baile*

    HOLA!
    Por leer todas las contis no hemos hecho los dbres,
    bueno qdan muy bonitos en blanco je,je,je...
    En fin pensabamos ya habrias puesto la conti
    50 pero habrá q sperar 1 poco más.Staremos
    pendients chao!
     
  6.  
    Sessh-Angie

    Sessh-Angie Entusiasta

    Sagitario
    Miembro desde:
    31 Diciembre 2006
    Mensajes:
    198
    Pluma de
    Escritora
    Re: *academia De Baile*

    hello
    estrellita *si es q aun existen en tu fic* reportandose
    mi encanto volver a leer tu fic
    es tan lindo
    antes te lo dije como 50 veces
    hablando de 50??
    wii ya va a haber conty
    siiii
    soy feliz
    pasando despues de mucho time
    xq toy con las clases
    y bueno tu me entiendes
    me despido
    y espero conty
    bye!!
     
  7.  
    dulce_kenial

    dulce_kenial Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    67
    Re: *academia De Baile*

    hola rakel!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    me encanta tu fic y tu manera de escribier enserio , y no manches que lindo es inuyasha me gustaria encontrar a alguien asi cuando sea mas grande *.* me encanta es super lindo jeje bueno bye porcierto pon conty pronto quiero saber que pasa no seas malita bye te cuidas jeje
     
  8.  
    rakel_fuenla

    rakel_fuenla Guest

    Re: *academia De Baile*

    Buenas noches!
    No se porque pero después de eso que he puesto (espero que os guste...) he copiado la conti, pero no ha salido, lo siento pensaba que ya estaba puesta. Ahora sí, aquí os dejo.


    "ACADEMIA DE BAILE"

    Episodio 50º: Confesiones acaloradas…

    Mientras, en el otro lado de las termas, la pareja actual se encontraba distanciada, cada uno en un lado de las paredes nevadas, ambos sonrojados no paraban de mirarse, miradas que incitaban a abrazarse pero que en ningún caso se oía palabra alguna por parte ambos.
    Nada hasta que alguien decidió romper el hielo….
    Miroku: Sango, lo siento, no es que quisiera venir, Kagome me ha liado.
    Sango: (sonrojada) si claro, que te ha dicho, ¿Qué haríamos algo aquí?
    Miroku: pues no, nos había dicho que te habías desmayado, he venido corriendo y cuando me he dado cuenta de que estabas bien me he dado la vuelta, ella me ha empujado aquí dentro, una vez más lo siento…
    Sango: ah, no lo sabía, perdóname tú. o//o
    Miroku: no importa, pero estás bien no?
    Sango: si, gracias.
    Miroku: entonces me marcho.
    El chico se tapo con la pequeña toalla y cuando estaba apunto de marcharse, alguien se lo impidió.
    Sango: >< esto, yo…
    Miroku: (acercándose a ella) Sango, que quieres?
    Sango: es algo importante, pero, no me atrevo…
    Miroku: ha pasado algo?
    Sango: No, bueno si, hay, no sé… ><
    Miroku: (metiéndose en el agua) en todo caso, no esta tan mal el estar aquí contigo no?
    Sango: no o//o

    Miroku: pues entonces, durante nuestra instancia aquí, descansemos y aprovechemos el lugar.
    Sango: si.
    Miroku: sabes, nunca he estado en un lugar tan bonito como este.
    Sango: (mojándose) ni yo.
    Miroku: y menos con semejante belleza a mi lado.
    Sango: o//o Miroku…
    Miroku: ja, no te sonrojes pero es cierto, llevo observándote desde hace un rato y así, empapada y sonrojada estás más guapa que nunca.
    Sango: o////////o Miroku!!
    Miroku: (riéndose) no es malo ser sincero.
    Sango: si lo es, cuando lo utilizas para sonrojar a cualquiera! ><
    Miroku: (acercándose a ella) tú no eres cualquiera…
    Sango: si lo soy! òó
    Miroku: (abrazándole) ¿acaso me has visto abrazar a alguien así?, ¿preocuparme de el modo en que lo hago por alguien?, ¿mirar a “una cualquiera así”? o simplemente, ¿Quererte como te quiero a tí?
    Sango: (girando la cabeza) yo…
    Miroku: dime Sango, ¿Qué sientes cuando estás abrazada a mí?
    Sango: yo… 0/////0 no…

    Miroku posó su mano en la mejilla de la chica, al mismo tiempo, ella empezó a temblar.
    Miroku: (rozándole los labios) te quiero a ti Sango… a ninguna otra… (Sonrojado)
    Sango: (roja) Miroku… demuéstrame que me quieres.
    Miroku: o.o cómo?
    Sango: que si es cierto que estás enamorado de mí, demuéstramelo!
    Miroku: >< y que quieres que haga por ti?
    Sango: no lo se, pero si quieres tocarme, solo podrás hacerlo mientras olvides a todas!
    Miroku: eso es pedir demasiado.
    Sango: eso es lo que hay, lo tomas o lo dejas!, y ahora me marcho, creo que me estoy mareando.
    Miroku: yo te acompaño, no quisiera que te sucediera nada.

    Sango se levantó rápidamente, y al hacerlo, debido al gran contraste de temperaturas se tambaleó un poco.
    Miroku: (sujetándola) Sango, estás bien?
    Sango: (sonrojada) si, ya te he dicho que me estaba mareando.
    Miroku: no puedes estar mucho tiempo aquí, vamos, nuestros albornoces están ahí.
    Sango: si.
    Salieron de aquella exuberante terma caliente, se pusieron los albornoces y en unos minutos llegaron a la terma de sus amigos.
    Sango: (sonrojada) Kagome???
    Kagome: (separándose de Inuyasha) sii??? ><
    Miroku: no me lo puedo creer, desde cuando vosotros dos os besáis así??
    Inuyasha: Miroku, cállate!!!
    Kagome: veréis, Inuyasha y yo somos novios… (Sonrojada)
    Sango: no me digas?? ¬¬ y cuando pensabais decírnoslo??
    Kagome: mañana, mañana lo íbamos ha hacer.
    Miroku: mañana ibais ha hacer qué?
    Inuyasha: (sonrojado) Miroku ò.ó
    Miroku: es broma, me alegro por vosotros dos, pero la próxima vez que estéis a punto de acostaros aquí decirlo!!!!!!!
    Inuyasha: (cabreado) no estábamos haciendo nada!
    Miroku: si, si, bueno, no os preocupéis, además Sango y yo ya nos íbamos.
    Sango: (aún sonrojada) sí, es cierto, nos vamos a cenar luego nos vemos.

    Esta inverosímil pareja desapareció corriendo entre la nieve.
    Inuyasha: (acercándose a Kagome) No me puedo creer que todavía no se hayan declarado.
    Kagome: yo tampoco, pero creo que todavía queda mucho viaje…
    Inuyasha: es cierto…

    Mientras, en el interior de la cabaña….
    Miroku: pasa al vestuario, cámbiate tú primero, mientras prepararé la cena.
    Sango: esta bien.

    Después de la riquísima cena preparada por Miroku, se vistieron y decidieron ir a pasear.
    Miroku: (poniéndose el abrigo) vámonos!
    Sango: esta bien, pero no vayamos muy lejos,
    Miroku: acaso no confías en mí?
    Sango: esta claro que no!
    Miroku: eres mala.
    Sango: es broma, es de noche y podemos perdernos.
    Miroku: mientras este yo aquí no pasará nada.

    Ambos decidieron sentarse a observar las estrellas.
    Sango: (separándose de Miroku) sabes, no creí que algún día iba a estar así contigo.
    Miroku: así cómo?
    Sango: relajada, sin ninguna preocupación mirándo las estrellas.

    Miroku: (abrazándola) eso significa que me quieres.
    Sango: (sonrojada) que te hace pensar eso?
    Miroku: (cogiéndola de la mano) tú sonrojo y el hecho de que cuado estoy cerca de ti tiembles.
    Sango: (aún más roja) eso no es motivo suficiente, si me quieres olvida a las otras.
    Miroku: Sango, sabes que no hay otras desde hace mucho, me he enamorado de ti…
    Sango: (roja) no se…
    Miroku: por favor, sé mi novia, nunca me habrás oído pedírselo a nadie con semejante seriedad.
    Sango: y eso es acaso un ejemplo de amor?
    Miroku: para ti, que es un ejemplo de amor?
    Sango: no lo se, lo que si se es que las personas normales no van pidiendo hijos a cualquier joven que ven.
    Miroku: si hubiera sido normal no te hubieras enamorado de mí.
    Sango: pues no!!!!!!!!!

    Sin previo aviso, Miroku beso a Sango, ésta intentó darle un tortazo pero el agarro su mano y la llevo hasta su pecho.
    Cuando se separaron, Sango estaba extremadamente roja y Miroku con cierto rubor en las mejillas.
    Sango: (levantándose de golpe) no se porqué pero no quiero pegarte, me duele hacerlo…
    Miroku: San…go

    Después de una cálida mirada, Sango volvió a la cabaña, una vez allí se encontró con Kagome e Inuyasha.

    Kagome: Sango?
    Sango: ya estoy aquí, Miroku ahora viene.
    Inuyasha: estás bien?
    Sango: (bajando la mirada) si.

    Kagome: que ha pasado ahora?
    Sango: me… me…
    Inuyasha: puedes decirlo delante de mí, ese tonto mañana me lo contará todo.
    Sango: (abrazándose a su amiga) me ha besado…
    Inuyasha: (riéndose) y que hay de malo en eso?
    Kagome: (abrazando a Sango) òó Cállate!
    Inuyasha: u.u Si. Sango, no te preocupes, Miroku no te quiere hacer daño, se que te quiere, no te diría esto si no fuese así, pero creo que te quiere de verdad, lleva más de cuatro meses sin salir con ninguna chica, te fue a buscar en navidad y de hecho salíais mucho a bailar.
    Sango: lo se, pero no se si puedo confiar en él.
    Kagome: creo que Inuyasha tiene razón, además a ti te gusta, dale un voto de confianza.
    Sango: (sonrojándose) esta bien, mañana se lo diré, muchas gracias.
    Kagome: no hay de que.
    Inuyasha: lo mismo digo!
    Sango: (sentándose) gracias, de veras, a los dos. Bueno, será mejor que os valláis a dormir mañana hay una competición.
    Inuyasha: una competición??
    Sango: si, veréis Miroku nos ha apuntado a los cuatro a una competición, dura dos días, mañana por la mañana empieza y pasado acaba, tenemos que conseguir llegar hasta el pueblo de al lado, tenemos mapas y más cosas.
    Inuyasha: y con el permiso de quien nos ha apuntado?
    Sango: pues como te estarás dando cuenta no lo ha consultado, de todas formas creo que andar un poco estará bien.
    Kagome: tienes razón, entonces, Miroku y tú estaréis juntos no? Me refiero a la competición…
    Sango: si, la pareja ganadora obtendrá un viaje al Caribe.
    Kagome: en serio??? 0.0
    Sango: Sí.
    Kagome: entonces Inu más te vale que ganemos.
    Inuyasha: esta bien…><
    Kagome: bueno pues nos vamos a dormir vale, hasta mañana Sango.
    Sango: hasta mañana pillines…
    Kagome: no pienses nada raro eh!
    Sango: no, no ¬¬
    Kagome: a ver que haces tu eh!!!
    Sango: esperaré a Miroku y después me iré a dormir!
    Inuyasha: vale, pero ten cuidado con ese pervertido!
    Sango: lo tendré!!
    Inuyasha hasta mañana!
    Sango: hasta mañana!

    Pasada media hora, Miroku entra en el salón de aquella pequeña caballa, una vez allí se encuentra con Sango, ésta tomaba un té caliente.
    Miroku: San.. go
    Sango: buenas, te estaba esperando…
    Miroku: gracias, pero no era necesario.
    Sango: (sirviéndole un té) si lo era, tengo que hablar contigo.
    Miroku: de veras?
    Sango: (sonrojada) sí…
    Miroku: (sentándose) bien, pues dime.
    Sango: eh decidido darte un voto de confianza…
    Miroku: que?
    Sango: espera… déjame terminar, yo… la verdad es que… llevo enamo No!
    Miroku: Sango, estás bien?
    Sango: si, lo que te quería decir es que a partir de ahora tienes toda mi confianza, creeré lo que me digas…. Si me dices algo acerca de una chica, aceptaré tus explicaciones, por eso te pido que no me hagas daño Miroku, no me engañes ni te intentes aprovechar de mí, si descubro que me has engañado no te volveré a dirigir la palabra en lo que me resta de vida, lo has entendido?
    Miroku: (tragando saliva) si!

    Sango: (sonrojada) eso espero…
    Miroku: y se puede saber el motivo por el cual has cambiado de opinión.
    Sango: digamos que le tienes que dar las gracias a tu amigo Inuyasha
    Miroku: lo haré, y ya que estamos me vas a revelar algún día tus sentimientos?
    Sango: tal vez, algún día cuando menos te lo esperes te diré lo que en verdad opino sobre ti.

    Miroku: definitivamente me vas ha hacer sufrir…
    Sango: no te creas, ese día esta más cerca de lo que te imaginas.
    Miroku: más te vale!
    Sango: si, si!, no te preocupes, bueno, será mejor que nos vayamos a dormir, mañana tenemos que andar mucho.
    Miroku: tienes razón, pero antes…
    Sango: qué?

    Miroku se acerco hasta Sango, ella asustada retrocedió y cuando menos se lo esperaba, Miroku le abrazó.
    Sango: (sonrojada) se puede saber que estás haciendo?
    Miroku: (susurrándole) gracias.

    Sango: no hay de que, pero suéltame!
    Miroku beso el cuello de Sango y cuando estaba apunto de acercarse a sus labios, subió hasta su frente y le besó.
    Miroku: (levantándose) hasta mañana!
    Sango: (sonrojada) hasta… mañana…

    Y después de tan acalorados sentimientos, la noche termina.

    Continuara…:o
    MUCHAS GRACIAS A TODOS Y HASTA PRONTO!!!!!!!!
     
  9.  
    Sessh-Angie

    Sessh-Angie Entusiasta

    Sagitario
    Miembro desde:
    31 Diciembre 2006
    Mensajes:
    198
    Pluma de
    Escritora
    Re: *academia De Baile*

    kiaaaaaaaaaaaa amiguita
    q linda conty
    y y y miroku >///< no pensé q podía ser así
    aquí estoy yo reportandome
    y kiaaaaaa
    soy la primera en responder
    te quedó muy linda y super sweet la conty
    bueno espero la sgte!!!
    nos vemos!!!
    bye!!
     
  10.  
    sabe y rebe

    sabe y rebe Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    39
    Re: *academia De Baile*

    HOLA!
    Al fin la tan sperada conti 50.
    Nos a enkntadado,q rico s
    Miroku.Nos enkntó y ya no
    podmos aguantar las ganas
    d leer la próxima conti.Chao
    y ponla pronto.Bss
     
  11.  
    Gisela Coron

    Gisela Coron Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    61
    Re: *academia De Baile*

    hola raquel me encanto el acpitulo 50, lo estube esperando y pro fin lo pude leer584555 siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii
    me fascino estubo muy lindo, re tierno miroku hay q lindo seria q existan chikos asi como inu y miroku XD, peor bueno al menos los puedo leer en tu fic espero q pongas la cponty muy pornto amix, besossayonara
     
  12.  
    gene

    gene Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    46
    Re: *academia De Baile*

    Hola!!!!
    acabo de leer tu ff
    me encanto!!!!
    y queria saber cuando salen:
    • el lindo de Koga
    • la despistada de Ayame
    • Lin... no se q dicir de ella y
    • el tarado de pollo... digo Hoyo..
    Besos chao siguelo pronto
     
  13.  
    sabe y rebe

    sabe y rebe Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    55
    Re: *academia De Baile*

    HOLA!
    REBE:Bueno veniamos para suplikrt q pongas la conti pronto.
    SABE:Si q nos hemos qdado intrigadas,no podmos dormir.ToTToTToT
    REBE:Eres malvada eso no se hace,ToTno,es broma,pero eso NO SE HACE.*perverso*
    SABE:Bueno staremos pendientes.
    REBE:MUY pendientes.*perverso**perverso*
    R/S:Chao!
     
  14.  
    Marìa_aome

    Marìa_aome Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    126
    Re: *academia De Baile*

    Woooolaaaaas!!!!!!^^
    amiga!!! aqui ta una de tus estrellitas xD...solo me pasaba a ver si estaba la conti y para que sepas que seguire posteando hasta que se acabe el fic *-* espero que publiques otro pronto *.* ya que la verdad escribes muy pero muy bien...eres una de mi escritora favorita y pos el fic es mi favorito *-* eso ya lo sabes xD ya que te lo repito siempre que posteo xD...sugerencias? pos la verdad no tengo ninguno ^^ porque tu fic esta fantasticamente fantastico xD de verdad...te felicito amiga eres una gran escritora ^^ quiero que sepas que cuentas siempre conmigo...muchos besitos y cuidate muchu!!! te kero mucho con demasiado y bastante xD jajaja adius!!
     
  15.  
    rakel_fuenla

    rakel_fuenla Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    3841
    Re: *academia De Baile*

    HOLA WAPISIMAS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    Me alegra ver que más gente va leyendo mi fic, creía que os habíais olvidado de mí...:llorar:
    No os preocupeís, es una simple broma, me alegra saber que hay muchas personas que lo leen, pero la pregunta es???
    Como es posible que solo las chicas lean la mayoría de los fics???
    A decir verdad, creo que se debe a que el mío es una cursilada, pero bueno, tampoco iba a crear un fic de kit-boxing, jeje...
    En resumen, muchas gracias por leer el fic. Siento haberos hecho esperar y espero que a cambio disfruteís con este capítulo.


    "ACADEMIA DE BAILE"

    Episodio 51º: Accidente entre las nieves.

    El día empezó nublado, pero a medida que avanzaban el sol acabó saliendo, convirtiendo así el día en uno caluroso.
    Después de caminar 10 kilómetros, decidieron parar para comer.
    Kagome: >< Miroku, maldita la hora en la que nos apuntaste!
    Miroku: oye, oye! Que yo lo he hecho para pasar un buen rato con mis amigos.
    Kagome: y donde ves tu el buen rato caminando durante dos días? (gritando)
    Miroku. No sé, creí que sería una buena experiencia.
    Inuyasha: calma!!!! Haya paz!
    Miroku: es ella!
    Inuyasha: si, es cierto, pero que más da, porque discutáis nada va a cambiar.
    Sango: tiene razón, lo hecho, hecho esta.
    Kagome: (sentándose encima de una roca) esta bien, bueno, será mejor que comamos algo no?
    Inuyasha: si!


    Las horas pasaron y entre algunas quejas y lamentos, llegaron hasta una de las colinas más empinadas.
    Todos sabían que tenían que tener cuidado, pero, por desafortunios de la vida, Miroku tropezó con un tronco oculto entre la nieve, cayó al suelo e intentó levantarse.
    Inuyasha: (ayudándole) estás bien?
    Miroku: >< si… ah!!!
    Inuyasha: puedes andar?
    Miroku: si…
    Miroku intentó apoyar el pie, pero claramente se dio cuenta de que le era imposible dar un paso al frente.
    Sango: pues tu cara dice todo lo contrario.
    Miroku: no os preocupéis, mirad, a menos de cinco kilómetros hay una de las muchas cabañas de socorro, vosotros continuad...
    Inuyasha: y piensas que te dejaremos solo?
    Miroku: de verdad, no me importa, mira yo puedo caminar, llegaré allí y os esperaré hasta mañana por la tarde, esas cabañas están especializadas para estos casos de emergencia, tu mejor que nadie sabes que hay muchas y están muy bien repartidas.

    Inuyasha: lo sé, pero de todas formas te acompaño.
    Miroku: no, si lo haces seréis descalificados.
    Inuyasha: y a mí que más me da!
    Miroku: si os retrasáis no ganareis!
    Kagome: de verdad Miroku, que me da igual el viaje.
    Miroku: venga, marchaos!
    Sango: no! tu y yo ya estamos descalificados, recuerda que es por parejas, si tu no regresas yo tampoco, así que me quedo contigo entendido?
    Inuyasha: seguro Sango?
    Sango: si, no os preocupéis por nosotros, mañana nos vemos vale?
    Kagome: si!
    Sango: ánimo y ganad por nosotros eh!

    Inuyasha: >< vale, hasta mañana!!

    Después de que Inuyasha y Kagome desaparecieran entre la nieve.
    Miroku: (sentándose en el suelo) no tenías que haber hecho eso!
    Sango: el que?
    Miroku: ofrecerte a quedarte conmigo!
    Sango: si lo es, además no me apetecía caminar más, que hay de malo en que te quiera ayudar?
    Miroku: nada…

    Sango: bien, pues hacia dónde se va a esa cabaña de refugio?
    Miroku: (señalando hacia el norte) por allí…
    Sango: vamos, puedes caminar?
    Miroku: (levantándose) si!

    Miroku apoyo el pie, dio un pequeño paso pero rápidamente se tuvo que apoyar en el suelo para no caerse.
    Sango: (ayudándole a levantarse) eres un tonto, no puedes caminar y aún así pensabas caminar cinco kilómetros solo?
    Miroku: no quería preocuparos…

    Sango cogió a Miroku de la cintura, pasó uno de sus brazos por su hombro y sujetándole bien le ayudó a caminar.
    Miroku: Sango de verdad, no es necesario…
    Sango: (sonrojada) apóyate en mí, si plantas el pie te dolerá más…
    Miroku: de verdad, peso mucho y no quiero que te hagas daño!
    Sango: pues me da igual! ò.ó te agarras a mí y punto!
    Miroku: esta bien…><

    Después de media hora caminando, los dos se sentaron sobre unas rocas para descansar.
    Sango: (respirando forzosamente) cuan…to…queda Miroku?
    Miroku: pues una media hora como mínimo, lo ves, estás exhausta!
    Sango: (sonriendo) no te preocupes por mí, además esto no es nada.
    Miroku: si lo es, mira ya puedo andar, si quieres ve tú delante y yo te sigo.
    Sango: (levantándose) si, y que más?? Anda, levántate y como no te agarres a mí te tiro colina abajo y no te ayudo a subir.
    Miroku: (agarrándose a Sango) Lo siento…
    Sango: (caminando) el que?
    Miroku: (sonrojado) todo lo…que te he hecho
    Sango: y que me has hecho?
    Miroku: pues el que va a ser! El que siempre te manoseo, te toco el culo y tú siempre te portas bien conmigo, en vez de dejarme por ahí tirado, me cargas encima y me llevas con lo que peso.
    Sango. (Roja) bueno, eso será porque en todo caso no me caes mal, además eres mi amigo no?
    Miroku: (bajando la mirada) amigo no?
    Sango: ^.^ Qué más quieres ser?
    Miroku: no nada…
    Sango: anda vamos, que ya esta empezando a helar.

    Al cabo de una hora la extraña pareja consiguió llegar al final a la pequeña cabaña, que, para ser pequeña no parecía estar tan mal, tenía una gran cama, una estufa, madera, un botiquín enorme, comida para por lo menos una semana, cazos, mantas, algo de ropa y demás utensilios, incluso un pequeño cuarto de baño.
    Después de descansar y de que Sango vendara el pie de Miroku, encendió la estufa y preparó algo de cena.
    Miroku: (acabando de comer) estaba riquísimo Sango.
    Sango: gracias, aunque por la forma en la que e lo comías se podía deducir.
    Miroku: oye, voy a cambiarme vale, ahora vengo.
    Sango: vale, mientras yo recojo esto.
    Miroku pasó al servicio, se cambió de ropa y al cabo de un rato salió.
    Miroku: vaya, tú también te has cambiado.
    Sango: claro, no pensabas que me iba a quedar con el abrigo durante todo el rato no?, Ahora ya hace más calor y se está mejor.
    Miroku: (sentándose en la cama) si…
    Sango: Miroku te pasa algo?
    Miroku: a mí? No me pasa nada…
    Sango: pues yo diría que sí, llevas muy raro desde hace unos días, aunque ya puestos eres raro…
    Miroku. Eres un poco mala no?
    Sango: ^.^ Si.
    Miroku: la verdad es que… me preguntaba cuando me piensas contestar a mi pregunta??
    Sango: que pregunta?
    Miroku: a la de que si querías ser mi novia?
    Sango: (sonrojada) ah, eso, pues francamente…
    Miroku: vamos Sango, no te hagas de rogar, sabes que no estoy con nadie, que llevo mucho tiempo sin estar con una chica y que te quiero solamente a ti!
    Sango: y lo sé! (levantándose de le silla)
    Miroku. Entonces?
    Sango: es que no lo entiendes??
    Miroku. Entender el que? (incorporándose de la cama)
    Sango: siempre te he visto cortejando a muchas, incluso yo misma me he visto sometida a tus carantoñas!

    Miroku: lo entiendo, soy un mujeriego sin remedio pero nunca antes me había pasado esto con nadie!
    Sango: (acercándose a él) y como se que eso es cierto??
    Miroku: (aun más cerca de Sango) pues…
    Sango: lo ves, como se que no es una de tus carantoñas para llevarme a la cama?
    Miroku: te digo que no!

    Sango: y yo no se si creerte!
    Miroku: maldita sea, pues créeme!!!!!!!
    Miroku cogió a Sango de la cintura y del cuello la atrajo hacia él y se hecho hacía atrás rozando sus labios, cuando cayeron sobre la cama él no podía parar de besarla.
    Miroku: (mirándola) me crees ahora?
    Sango: (roja) …

    La chica se levanto increíblemente sonrojada y aún estando descalza abrió la puerta y salió corriendo, por este incidente Miroku maldijo una y otra vez el hecho de no poder salir corriendo detrás de ella.


    * * * * *


    Después de una hora y con el corazón en vilo, alguien llamó a la puerta, cual fue la sorpresa para Miroku, que la misma joven que había desaparecido entre la nieve aparecía hora ante él, mojada, empapada, temblando cual pequeño animal ante el ogro de las nieves,
    Sango: (estornudando) lo… siento…
    Miroku: rápido pasa.

    Rápidamente Miroku metió a Sango en la bañera e incluso todavía con ropa puso el grifo del agua caliente.
    Mientras intentaba calmarla consiguió dejarla en ropa interior, después la tapó con varias toallas y la llevo frente a la estufa de leña para que se calentara.
    Miroku: (dándose la vuelta) quítate la ropa que te queda, sino te pondrás peor de lo que ya estás.
    Sango por primera vez hizo caso a Miroku y sin pensárselo dos veces accedió a tal petición, además él estaba de espaldas a Sango.
    Miroku: (sentándose en el suelo para no caerse) estas mejor?
    Sango: (temblando) si…
    Miroku: espera, te traeré unas mantas.
    El chico como pudo trajo algo de ropa y mantas, le quito las toallas ahora húmedas y esperó a que Sango se vistiera.
    Sango: (castañeándole los dientes) puedes darte la vuelta.
    Miroku: (acercándose a ella) puedo?
    Sango: si.
    Miroku tapó a Sango con una manta, después le abrazó y se tapo también él con la segunda manta.
    Miroku: (abrazándola) si es que, a quien se le ocurre salir así despavorida y descalza, con una capa fina!
    Sango: (agarrándose a él) solo… se… me…ocurre… a… mí…
    Miroku: (besándola la frente) shuuuu, no hables, además todavía tienes los labios morados del frío y estás muy pálida.
    Sango: si…

    Después de media hora Sango consiguió entrar en calor.
    Sango: gracias Miroku.
    Miroku: no hay de que.
    Sango: (incorporándose un poco) será mejor que te acuestes, yo me quedare aquí.
    Miroku: a no, eso si que no, tu te vas a dormir ahora mismo conmigo.
    Sango: (sonrojada) Mir…
    Miroku: (Levantándose del suelo) no pienses mal! A dormir!!!!!!
    Sango: en ese caso…

    Ambos se metieron en la cama, los dos mirando hacia el lado derecho y Sango dando la espalda a Miroku.
    Sango: (temblando) tengo frío.
    Miroku: (tapándola con otra manta) espera a que entres en calor un rato más.
    Sango: de acuerdo.
    Miroku. Ya estás mejor?
    Sango: (temblando) s….si…

    Rápidamente Miroku se acerco a Sango, la cogió de la cintura pasando su mano por el ombligo de la chica, se abrazo a ella.
    Sango: (roja) que haces!!!!!!!!
    Miroku: no pienses mal, pero solo intento darte calor!
    Sango: pero no me abraces!
    Miroku: lo ves, ya he conseguido ponerte caliente.
    Sango: (roja) …
    Miroku: (sonrojado) lo siento…
    Miroku estaba quitando la mano del estómago de Sango cuando ésta se aferro a ella.
    Sango: (roja) me gusta tu calor…
    Miroku: esta bien, durmamos así…

    Cuando por fin ambos consiguieron conciliar el sueño, un ruido en mitad de la noche hizo que ambos se despertaran, Sango se asomó a la calle y resultó ser un simple conejo que había chocado contra la puerta.
    Regreso a su cama pero al igual que Miroku no podía dormirse, sucedía ser que el dios Eros había empezado a despertar en aquella remota cabaña de entre las nieves.

    Continuara……………

    ¿Ha que no os lo esperábais eh? Bueno, algunas sí, puesto que ya comenté mi idea, pero la pregunta del millón es.... ¿Quién es el dios Eros?
    Jajajaja, no lo revelaré, pero estoy segura de que muchas ya lo sabreís...

    Gracias y hasta el próximo capítulo de "ACADEMIA DE BAILE", NO OS LO PERDAÍS!!!!!!!!!!!!!!!1
    BESOS Y MUCHAS GRACIAS!!!!



     
  16.  
    Marìa_aome

    Marìa_aome Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    121
    Re: *academia De Baile*

    Woooooolaaaaaaas!!!!!!!^^
    amiga!!!!!!!!!!!!!!!1te quedo fantastica la contiiiiiiiiiiii!!!!!!!!u el dios Eros *¬* ya quiero verlo *-*...jajajajajajajaja xDy seeeeeh! estoy de acuerdo con sabe y rebe no pueco creer que a los chicos les parezca mas "maduro" jugar un estupido juego de spiderman que leer un maravilloso fic como este ay dios mido en donde tendran la cabeza estos chicos? *¬* aunque yo ya se...xD jajajajaja....weno....de verdad que me encanto!!!!!!!ninguna sugerencia ya que todo esta genial!!!!! lemon *¬* eso si es lo que quiero!!!!lemon de miroku y sango pero shaaaaaaa!!!!!waaaaa!!! vamos quiero ver al dios Eros alzado y activo *.* ajajajajajajajaja...sabes que cuentas al maximo conmigo amiga ^^ besitos y cuidate muchooO!!!!!!
     
  17.  
    Sessh-Angie

    Sessh-Angie Entusiasta

    Sagitario
    Miembro desde:
    31 Diciembre 2006
    Mensajes:
    198
    Pluma de
    Escritora
    Re: *academia De Baile*

    wuuuuuuuuuuuuuu
    estrellita reportandosé xDxDxD
    un poco tarde
    pero ya dicen más vale tarde q nunca
    xDxDxD
    nee un besote y kiaaaaaaaa
    q linda la conty
    ahmm el dios eros u-u me encantan los dioses griegos
    será xq mi carrera tiene q ver con la historia
    me encanta todo eso
    U_U mi quiere conty!!!!!
    y ahora
    nee tendré q esperar
    pero mou
    mi quiere conty!!!
    raquelita espero pongas conty
    bye!!
     
  18.  
    Gisela Coron

    Gisela Coron Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    141
    Re: *academia De Baile*

    hayyyyyyyyyyyyyyyyyyyy pero q nino capituloalegria
    me fascino
    q tierno muy lindo
    me encanta esa parejita, espero q sanguito se decida
    pobre miroku lo ta haciendo sufrir... jajaja89743
    çpues biene spero q inu y kag ganen la carrera
    y tb q haya un lemon de sango y miroku he??'encanta
    bueno raquel nos vemso amix:P sayonara
     
  19.  
    lostsoul_nic

    lostsoul_nic Guest

    Título:
    Academia de baile.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Fantasía
    Total de capítulos:
    64
     
    Palabras:
    74
    Re: *academia De Baile*

    WoW!!!! ke lindo es miroku me encantaria
    tener un novio como miroku o inu
    me gusta mucho tu fic spero ke lo
    continues pronto es muy bonito,
    lindo, interesante, mmm jejeje ya me
    pase pero es ke me gusta mucho!!!!
    serare la conti!!! bye
    _nice_
     
  20.  
    Kiara

    Kiara Usuario común

    Libra
    Miembro desde:
    16 Octubre 2006
    Mensajes:
    287
    Re: *academia De Baile*

    rakelllllllllllllllllllllllllll rakelita de mi alma y de mi corazon!!!meses!!!!! meses me has tenido con la incertidumbre en el cuerpo!!!!!!! pero menos mal k por fin hay capi, y, doble racion xD!!!1



    simplemente, k voy a decir k no t haya dixo ya, vamos, contis propias de mi autora favorita como dios manda

    de veras, hexaba en falta tu buena form de escribir...

    y, por supuesto nunca dejare de decirte k tienes k escribir un libro, cuando seas mayor escribe un libro, de verdad, yo t copraria miles d ejemplares xD



    a partir d ahora posteare mas wapisima y por ultimo, la frase k nunca puede faltar en un post:


    kiero mas conti


    bss, tu fan 1º cris xD
     
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso