No me hables de amor Si no has hecho daño No me hables de amor Si tu pasadizo es estrecho Si no has sido fruto De un engaño maltrecho. La ropa es liviana ahí Donde la luz se refleja No hay jardín para esa flor La persigo como un colibrí Pero aún se aleja Se aleja, se disuelve En el aire, más no vuelve ¡Ay, que dolor! ¡Qué desaire! Su corazón envuelve para mí Pero en el umbral, su escarcha Desaparece y fuera de sí La oscuridad entumece Sus ojos, sus manos Me pide que no cese Entre tanto, quisiera marcarla Para saber a donde va Me pide que no cese De buscarla, entre el arrabal. No me hables de amor Si a quien amas Te ama, y se aman Se amaron Y se amarán. Tus ojos mentían los lunes Cuando me pedías que el martes No me quedara como los miércoles A esperarte para que el jueves Nos escapáramos hasta el viernes. No me hables de amor Sino haz dudado de seguir Porque temes con clamor Que aquello que osas perseguir Te dispare por la espalda Con un arma bajo la falda Sin honor, sin derecho Y como un amigo te deje Maltrecho, un hereje De un amor traicionero Que buscaste tú Pero ahora sólo es Un cero. En arriesgarse yace la belleza El fruto, el colibrí, la flor La fábula y su moraleja Que saber de amor No es sinónimo de fortuna Las desdichas y el deshonor Forman la persona y, la luna Expectante del tenor Enlaza el sentimiento que una A dos enamorados que de amor Más le han llorado a la bruma.
No podría decir que el que ama y no ha sufrido no puede hablar de amor. Ése hablará de su amor desde su perspectiva, una muy buena, en cambio la contraparte, aunque ha sufrido mucho a causa del amor, hablará de este con los altibajos que ha tenido. Aquí lo interesante es notar que a pesar de todo lo que al parecer a padecido el protagonista, sigue creyendo en el amor. Todas las vivencias dan forma a la persona y dependerá de cada quien cómo se verá afectado por esas experiencias. Aprenderá para bien o para mal. Es muy interesante tu composición. Saludos.