En una cama de dos plazas. Tú duermes del lado derecho y el del izquierdo. Cuando hacen el amor el duerme del lado izquierdo y tu sobre su pecho. Cuando el recibe el recado de volver a la guerra, te acuestas del lado derecho y te quedas viendo el lado izquierdo, creyendo verlo, hasta caer dormida. Cuando vomitas cada mañana, te dan antojos y se te atrasa el periodo, te haces una prueba de embarazo ¡Felicidades estas embarazada! Con un mes dijo el doctor. Cuando tocan el timbre de aquella casa soñada cuando niña, abres y un militar uniformado con una triste mirada esta en el pórtico de la casita lo haces entrar. Cuando te entrega una carta donde dice que el a muerto, rompes en llanto. Llegado el funeral, la mujer del militar es fuerte, y sencilla; es dejada frente a la tumba de uno de los miles de héroes del país, recibiendo las condolencias. Cuando llega a casa, sube a su habitación, se quita los tacones, el velo, negro, zarcillos, toda prenda fastidiosa, quedando en una pequeña bata blanca. Camina hacia la cama y se acuesta del lado izquierdo apretando fuertemente la almohada, inhalando su olor, quedando dormida. Porque ella es la mujer de un militar y no va a morir, ella vivirá por el y por el recuerdo que dejo en su interior. Cuando crezca contara a su hijo las grandes hazañas de su padre.
He quedado algo triste después de leer tu historia. ¿supongo eso significa que te ha quedado bien? Gracias por publicarla
Hola! Buen relato, a mí me ha gustado mucho y créeme que lo he leído con suma atención, saboreando cada uno de los pequeños párrafos que componen tu obra. De un tema convencional para los relatos, extraes el jugo de lo verdaderamente intenso, que es el inequívoco sufrimiento de los inocentes, los que realmente tienen que pagar caro las desgracias que solamente proporciona a borbotones las guerras. ¡Pobre mujer! El marido que tanto amaba ha desaparecido de este mundo, y no por otra cosa más que por seguir órdenes ciegas. Afortunadamente ha sembrado una semilla que seguramente germinará en un gran hombre que estará orgulloso de su padre, claro que sí : ) Gran relato, y extraordinario análisis de los sentimientos de aquellos a quien, desgraciadamente, nada les importan a los poderosos. Saludos.