Una historia cuenta que hubo un cuarto rey mago que también visitó el portal del nacimiento, pero se resagó y llegó tarde. Se dice que uno de esos pastores de yeso que rodean el portal le dio una mala dirección y lo extravió, mandandolo por otro camino. Aquel pastos de yeso seguro tenía el cerebro de cal, o tenía alguna mala intención. Este cuarto rey mago no traía oro, cienso o mirra; su ofrenda era un paquete de galletas. Es por esto que se le conoce como el cuarto rey mago que llegó tarde o el "rey mago de las galletas". La tradición es regalar y comer muchas galletas en estos días; y si alguién llega tarde a algún lugar, todo se puede disculpar si la persona llega con una caja de galletas como ofrenda.