D. Gray Man [Longfic] Destino Entre Dimensiones.

Tema en 'Fanfics de Anime y Manga' iniciado por Maria Luna Contrera, 21 Febrero 2016.

  1.  
    Maria Luna Contrera

    Maria Luna Contrera Maria Luna Contrera

    Escorpión
    Miembro desde:
    21 Febrero 2016
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    Pluma de
    Escritora
    Título:
    [Longfic] Destino Entre Dimensiones.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    5
     
    Palabras:
    2854
    Es una Historia Basada en el Anime de D Gray Man, Espero les guste.

    Sinopsis: Descubrir nuevos universos siempre ha sido, uno de los grandes sueños del ser humano. ¿Pero qué ocurre cuando las cosas salen mal con aquellos deseos?, ¿Estarían dispuestos a dejar todo tu pasado para entregar tu fe en un futuro inexistente? Road Kamelot pone en duda los pensamientos de tres chicas, cuando sus planes de "diversión" se salen completamente de control, llevándolas a su mundo, haciendo que tomen caminos que pueden cambiar tanto la balanza de la guerra, como el resto de sus vidas futuras.



    ¿Alguna vez se han preguntado, si existen otros mundos aparte del nuestro?, que quizás, ¿no todo es como aparenta ser?; En este vasto y redondo mundo lleno de opiniones existen una gran variedad de teorías infinitas, hipótesis y estudios que demuestran ciertas anomalías a lo largo de la historia de la tierra, y del universo, las cuales verifican en su gran mayoría que no estamos solos en el mundo, que incluso, nosotros podemos crear vida a partir de una idea, una base, una teoría.

    ¿A que quiero llegar con todo esto?, pues simple, que no todo en la vida es lo que aparenta ser. La solo idea de unir, encontrar y descubrir nuevos mundos, nuevas hipótesis, nuevas teorías e incluso viajar entre ellos de forma paralela, es un sueño de todo ser humano, que desde nuestra creación hemos deseado tener el control de poder realizar actividades fuera de nuestra capacidad. Pero inclusive, teniendo el conocimiento mental y físico para realizarlo, solo una pequeña parte de la población terráquea puede saber que hay más allá de lo que nuestros ojos pueden ver, personas que nacieron con el don de tener "poderes" capacidades únicas fuera del contexto humano.

    Debido a esto, muchas de estas personas son consideradas profetas, o santos, quienes que con su don ayudan a todo aquel que requiera de sus servicios. Allen Walker era una de esas personas únicas escogidas por el universo, la tierra, por un "Dios”, el cual su deber desde su nacimiento era destruir el mal que habitaba el universo, o mejor dicho "Su" universo; Lastima que a pesar de todo lo dicho, solo sean teorías y que esa persona de la cual se habla solo sea una simple historia de ficción creada por una mujer con los mismo sueños e imaginación que toda persona desea materializar. Ser únicos en la vida. Pero quien sabe, tal vez quizás, el destino sea caprichoso, puede que aquel "Dios" en el que creemos sea apiade y nos muestre parte de su vasto y extenso poder sobre nosotros.


    "The Black Orden, es una organización especializada en destruir demonios creados por el conde del milenio, el cual su sueño el destruir la tierra junto a la familia noah, súper personas que representan el pecado original de noeh. Por otra parte, los Exorcistas, como son llamados los residentes de la Orden oscura, son aquellas personas las cuales poseen un poder único capaz de destruir los demonios creados por el conde, debido a que es un poder otorgado por un "Dios" para salvar la tierra, un poder que solo los elegidos por la " Innocencia" pueden controlar, y con el salvar al mundo de la destrucción y la oscuridad."


    La chica suspira, mientras dejaba de leer el contenido encontrado en la parte de atrás de la envoltura del CD. Sus ojos, comenzaron a observar el televisor de "42" pulgadas el cual se encontraba en la sala, donde se reproducía una batalla entre un peliblanco y un gordo panzón, debajo de ellos se encontraban los subtítulos en español donde traducía lo que decían en su idioma original. María Luna Contrera, era una joven universitaria de descendencia española, que vive en Inglaterra junto a su madre, se encontraba cursando el primer semestre de la carrera de diseño; Era una hermosa joven de largo cabello negro ondulado hasta más abajo de la cadera, de ojos grises, piel blanca y labios rojos, largas pestañas negras que hacían juego con el color de su iris, un cuerpo bien proporcionado sin llegar hacer exagerado, y una mente única a la hora de trabajar. María luna para tener 18 años, era de carácter dulce, hiperactiva, extrovertida e incluso de un corazón muy dulce; Su madre Layla Contrera la había enseñado de esa manera, quien a pesar de nunca estar en casa por su trabajo, hacia todo lo posible por pasar tiempo con su adorada hija.

    Por otra parte, la pelinegra no quitaba su vista de aquel televisor, ya que en ese momento era su fuente de entretenimiento, que para muy a su pesar, cada día se convertía en su obsesión, no solo por aquel dibujo, o la trama de aquella historia sino por cierto personaje nippon que la tenía encantada desde que había conocido el anime. Estiro sus largas y blancas piernas por el sofá acomodándose en una mejor posición, debido a que quería estar cómoda en su preciado momento de seguir admirando la serie, pero fue interrumpido por el timbre de aquella gran casa de dos pisos, moderna y con decoración vanguardista la cual estaba al tope de la última tecnología y moda de la época. Con mucha pereza, la oji-gris se levantó de aquel sillón de cuero negro, y camino por el pasillo que daba hasta la puerta, para poder abrirla y encontrarse con dos chicas.

    Ambas jóvenes al ser recibidas por la oji-gris sonríen de manera cálida, otorgándole un fuerte abrazo a su pelinegra amiga, quien está al recibir aquel acto de cariño por parte de las jóvenes les corresponde de igual manera. Gabriela Gómez, es una pelirroja de cabello liso el cual llegaba por debajo de la cadera al igual que su amiga pelinegra, era de descendencia rusa, hermosos ojos gris plata, piel ligeramente rosa, y cuerpo de muy buena contextura, se encontraba vestida de una camisa de cuadros rojos, un pantalón de cuero y tacones de encaje rojo ligeramente altos dándole un porte de modelo de revista. Gabriela al igual que su amiga pelinegra tenía 18 años, estaba en la universidad y se encontraba cursando la carrera de publicidad; Una joven muy inteligente a pesar de tener una familia problemática, su carácter es de una persona calmada, quien piensa las cosas primero, justa y de una ternura única de aquella joven pelirroja, haciéndola la más madura del grupo.

    Lila Rodríguez, es la tercera integrante de este grupo tan peculiar, ella era de descendencia 100% inglesa por lo cual lograba tener una fisonomía limpia y estética, es una adorable rubia de cabello corto ondulado con mechas marrones el cual llegaba un poco por debajo de los hombros, de piel levemente bronceada, ojos color esmeralda, largas pestañas y un cuerpo de contextura delgado pero bien proporcionado; La joven rubia, era la más pequeña del grupo, contaba con la edad de 15 años, pero al ser tan inteligente ya había acabado la Secundaria y ahora se encontraba cursando la carrera de turismo, en la misma casa de estudios que sus amigas, tiene un carácter muy extrovertido, algo impulsiva, muy creativa y debes en cuando algo problemática ya que mete a sus amigas en ciertos problemas debido a su conducta, haciendo que ambas tengan que vigilarla constantemente. Se encontraba vestida con short de jean, pantimedias de diseño abstracto, converse de color dorado y un suéter holgado que contenía un diseño roquero de color negro.

    Una vez terminado el abrazo grupal de las chicas, la joven pelinegra las invito a pasar a su casa, cerrando la puerta de entrada mientras sus amigas comenzaban a caminar al living donde hacía cinco minutos se encontraba la oji-gris mirando aquella serie de anime. Ambas al llegar e instalarse en uno de los grande sillones de aquella sala observaron aquel gran televisor en medio de la habitación, donde el programa o CD que reproducía se encontraba en pausa en una parte bastante interesante, ya que era un batalla que se estaba llevando a cabo dentro de la serie, sin más ambas chicas rieron, eran conscientes de la obsesión de su amiga por aquello, no la criticaban puesto que para suerte de la pelinegra, aquellas dos también ambiraban la serie, no tanto como ella pero si lo suficiente como para entender la razón de su admiración.

    Al poco rato de que las chicas se acomodaran en el salón, llega luna atravesando el lumbral de la habitación, para encontrarse a sus dos amigas muy bien acomodadas observando el gran televisor, esperando a que ella se dignara a aparecer dentro de aquella sala muy bien acomodada.

    - Por lo que veo, me esperan para que le quite la pausa a la serie, ¿verdad?- sonríe la pelinegra cruzada de brazos mientras ambiraba el rostro de aquellas chicas-

    - La pelirroja ríe con algo de picardía mientras acomoda un poco su cabello para responder de manera suave - como sabrás..., cuando se trata de D Gray Man, es imposible no dejar de verlo.

    -Además sabes bien, que Gaby muere y se desvive por su afeminado albino -comenta con maldad la rubia, quien tampoco despegaba la mirada del televisor-

    -Bueno tampoco es que tú te puedas salvar mucho querida lila, Gabriela estará loca por Allen pero tu das la vida por alguien que no puedes amar -repica maría luna, quien camina hasta el sofá para acomodarse sin dejar de verla-

    -Para mí triste desgracia, pero no me daré por vencida, ese pelirrojo será mío...algún día...algún día -Termina la oración con una risa sádica, digna de una loca sacada de un manicomio-

    -Creo que tienes serios problemas mentales, ¿cómo es posible que terminara la secundaria primero que nosotras? -pregunta con curiosidad hacia la pelirroja, la cual miraba a la rubia con preocupación ante su risa sádica-

    - Las mejores mentes están locas, es lo único que puedo decirte querida luna -responde con sabiduría hacia su amiga pelinegra- además que, esa es su forma de demostrar sus sentimientos y expresarse, al igual que tú tienes tu manera y yo la mía.

    -No tienes por qué lanzar una explicación tan lógica Gabriela, yo estoy consciente que lila está más loca que tú y yo -riendo con ternura- y bien, supongo que no vinieron hasta aquí para hablar de los problemas mentales de lila, ¿cierto?.

    -En realidad si, vinimos por eso luna, veras eh tenido pesadillas bastante concurrentes donde un loco maniaco me perseguía con una banana y ...-la rubia comienza a contar una descabellada historia mientras es ignorada por sus dos amigas-

    -La pelirroja suspira mientras deja que lila cuente su descabella y extraña historia sacada de su muy creativa imaginación- Como sabrás, hay una feria cerca de aquí, queríamos ver si paseábamos un rato contigo a despejarnos antes que comience la temporada de exámenes y proyectos.

    -Bueno, no estaría mal salir un rato de casa, ya no sé cuántas veces me eh visto el mismo CD de la serie.

    -No me extraña eso de ti para nada, deberías estar estudiando en vez de estar mirando un anime que ya te has visto más de 5 veces -observa fijamente a la pelinegra- aunque no importa mucho, por algo tienes buenas notas..

    -Es mi fuente de inspiración, no critiques -hace un tierno puchero, mientras se levanta del sillón de un salto- bueno, iré a cambiarme entonces, no creo que tarde mucho.

    -Está bien, aquí esperamos -sonríe dulcemente la pelirroja mientras detrás de ella aún se escuchaba la descabellada historia de la rubia, la cual había pasado de bananas parlantes a unicornios al final de un arcoíris-

    La pelinegra procedió a retirarse de la sala, para subir las escaleras que la llevaban a su habitación, un gran cuarto decorado de manera vintage, muy de la época victoriana, salía por completo del estilo de decoración de toda la casa pero así le gustaba a la pelinegra. Abrió su armario decorado de madera azul flores de color plata en ramificaciones de color verde oscuro y claro en modelado de hierro 3D; Comenzó a elegir la ropa que utilizaría para la feria, debía ser algo sencillo y cómodo puesto que se encontraban un gran variedad de atracciones las cuales seguramente subirían debido a la hiperactividad de su amiga rubia; Con rapidez eligió, un pantalón blue jeans rasgados en los muslos, unas converse hasta las rodillas de color negro, un body negro que dejaba ver su espalda y un suéter amarrado a su cintura de color turquesa, amarro su largo cabello en una cola alta y tomo un bolso con sus cosas. Antes de salir, se observó en el espejo y sonrió con suavidad, con delicadeza se maquillo un poco los labios y los ojos para resaltar su color y sin más ordeno las cosas cerrando la puerta de su habitación para comenzar a bajar las escaleras.


    Gabriela mientras esperaba a que su amiga pelinegra se cambiara, tomo el control del televisor y quito la pausa que detenía el transcurrir del capítulo, al hacerlo, lila quien se encontraba todavía contando aquella historia se acomodó a su lado para observar también aquel capitulo que la había embelesado desde que llegaron a la casa. La pelirroja observaba cada movimiento de aquellos dibujos, sin dejar de ambirar al peliblanco protagonista, lila al darse cuenta del embelesamiento de su amiga comenzó a molestarla un poco.

    - Hay Gaby, estas tan loca por Allen que se está volviendo una enfermedad -ríe con maldad, y nota que su amiga se sonroja toda volviéndose tímida-

    -Basta lila, es lo único que me queda después de todo...gracias a él, los problemas de la casa son más pasables que antes -suspira con tristeza, sin dejar de ver la tv-

    -¿Qué tan mal, está tu abuela ahora?, ¿Por qué esta tan obsesionada a que te hagas esos exámenes de sangre? -la mira fijamente- Gabriela, según la historia nadie sobrevivió a la masacre, es imposible mires por donde lo mires que tu abuela sea descendiente directa de la dinastía.

    -La pelirroja lanza un pequeño suspiro, mientras su vista no se despegaba del tv, y con leve sutileza respondió- Lose, pero hay cosas que ella dice que me hacen dudar, cosas como lo que hacía día a día, los trajes, las joyas, incluso las manías de cada integrante de la familia...solo por eso siento que tiene un poco de razón...Es por ello que, me realice el análisis de ADN la semana pasada y ayer retire los resultados del análisis de sangre.

    -¿y?, ¿que salió?

    -No lo abrí, lo hare, cuando me sienta preparada para hacerlo, por ahora no quiero saber nada sobre ese papel...no hasta que mi mente sienta que es capaz de recibir el duro golpe que me espera, sea bueno o malo.

    -Entonces, yo estaré allí para apoyarte y estoy segura que luna también lo estará, así seas una simple chica o tengas sangre azul -abraza con fuerza a la pelirroja- y estoy segura que si Allen existiera diría lo mismo amiga.

    -Gracias lila -corresponde el abrazo con fuerza-

    - Pero miren no más, duro 5 minutos cambiándome y ya están mirando la serie sin mí, son un peligro para la sociedad -se escucha una risa desde el lumbral, donde se encontraba una ya vestida luna cruzada de brazos observando cómo sus amigas miraban el capítulo que ella había dejado en pausa-

    -Ya te lo dije luna, cuando se trata de mi dulce albino, no hay timidez que valga -se levanta Gabriela, quien apaga el tv al ver a su amiga ya vestida- ¿Lista?

    -Nací lista querida -ríe, mientras ve a lila - ¿ya terminaste de contar tu descabellada historia?

    -Algún día hare que las escuchen por completo, solo hacen que me sienta ignorada -dice con dramatismo, mientras limpia sus lágrimas falsas frente a ellas- a veces pienso que no me quieren.

    -Te amamos, pero se nos hace tarde para subir a las atracciones de la feria -empuja a la rubia hacia la puerta, mientras luna terminaba de apagar todo en la casa, ya que se encontraba sola, de nuevo, debido a que su madre estaba a las afueras trabajando, así que podría llegar a la hora que quisiera siempre y cuando avisara, cosa que la chica ya había hecho en su habitación

    Una vez afuera de la casa, la pelinegra termina de cerrar todo y las tres chicas comienzan su andar hacia la feria en el centro de la ciudad de Londres, donde allí las esperaba una gran sorpresa, una a la cual cambiaría por completo la vida de las tres, por que como había dicho en un principio nada es lo que se ve, todo tiene un porqué y un para que, la vida era caprichosa y le gustaba jugar con el destino de las personas, sobre todo si se trataba de aquellas que tenían su destino marcado, no solo en este universo, sino en los demás, donde esas personas lograban un cambio tan significativo que solían ser importantes en cada parte de las dimensiones subyacentes del mundo. Aquel "dios" después de tantos años mostraría una parte se su gran poder, el poder que lo hacía único y el cual tenía un "plan" perfecto para todo.





    Continuara...
     
    Última edición: 11 Julio 2020
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    Hola, primero que nada bienvenida a FFL, agradecemos que hayas escogido este foro como sede para tus publicaciones y de a poco verás que somos más que un espacio para colgar fics y somos más una comunidad de gente con gustos por leer, escribir, cositas orientales, etc.

    La verdad es que D. Gray Man es de esos animes que siempre digo que voy a ver pero pasan mil cosas y nada más no he podido revisar a pesar de que me llama la atención, pero apuesto a que hay bastantes más fans por aquí escondidos.

    Lo que sí es que por reglamento cuando uno abre un tema para publicar su historia es para... bueno, colgar la historia en sí, por lo que es necesario que edites ya que lo que tienes no cuenta como prólogo sino como summary o reseña de tu historia. Veo que ya te asignaron a @arya como orientadora, si tienes más dudas al respecto, puedes consultarlo con ella.
     
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    Maria Luna Contrera

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    [Longfic] Destino Entre Dimensiones.
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    Capítulo II

    La Puerta de Road



    Londres - Inglaterra-

    Siglo IXX

    Mansión Kamelot


    Calor, era lo que se sentía dentro de aquella gran habitación, la cual se encontraba en completo silencio, puesto que los residentes que allí se encontraban realizando sus respectivas actividades, uno de ellos era Tiky Mikk un adinerado conde de buen estatus, cuya apariencia oscilaba entre los 25 a 28 años de edad, parte de la familia noah y residente del pecado de la lujuria; Poseía un gran atractivo, en el cual utilizaba para seducir a sus víctimas y conseguir todo lo que quería, su largo cabello ondulado recogido en una media cola, piel blanquecina y de ojos negros como la noche era lo que presentaba ante el mundo, y la sociedad, esa era su identidad falsa, pero cuando se encontraba haciendo su "deber" sus características físicas cambiaban de manera radical a una fisonomía de piel oscura, ojos dorados, su largo cabello suelto y alborotado que llegaba hasta los hombros y siete estrellas de 4 puntas que adornaban su frente lo cual hacia que fuera identificado como un descendiente de la familia noah.


    El joven azabache se encontraba recostado sobre un sofá de terciopelo rojo, en el cual se ubicaba frente aquella gran chimenea, quien era la responsable del calor que se sentía en toda la habitación, debido pues que era su lugar favorito para leer un buen libro cuando no tenía actividades por realizar ; Una pequeña colilla de cigarro se desprendió de su boca dando a entender lo que se había consumido en aquel momento, puesto que se encontraba muy concentrado en su lectura, aprovechaba la poca paz que había en aquella mansión y tenía que sacarle todo el provecho que pudiera antes que se volviera un caos como era muy a menudo.


    Cosa que no duro mucho tiempo, de la puerta de aquella habitación entra con gran estruendo una niña que de apariencia muy juvenil, su edad no debía pasar de los 10 u 12 años, de cabello corto entre negro y azul oscuro, ojos azul índigo y piel nívea, se encontraba vestida con una falda de color azul marino, una camisa de vestir con decorado en volantes, medias largas con rayas en horizontal rosa y negras, de ultimo zapatos de estilo loli gothic de color negro. Aquella niña era la primogénita de los dueños de la mansión donde se encontraban, Road Kamelot la noeh residente del pecado de los sueños, al igual que su tío Tiky su apariencia era meramente falsa ya que su color de ojos y piel cambiaban al momento de utilizar su poder; Road es la más pequeña de todos los noah, pero es la que posee un gran poder, incluso más que el conde. La joven kamelot, al detectar a su tío sentado en aquel sofá inmediatamente corre para caerle encima, desconcentrado al morocho de su profunda lectura.


    - ¡Tiky! - grita feliz la joven- que bueno que estas aquí, ya me encontraba muy aburrida y sola.


    - Road...pesas - responde con dificultad el joven conde, quien intentaba quitarse de manera educada a su dulce sobrina-


    - Lo siento - Hace un tierno puchero, mientras se baja de regazo de su muy adolorido tío- Tiky, vamos a jugar, ¿sí? Últimamente todo está muy callado y no tengo nada con que divertirme~


    - Sabes bien que tenemos órdenes de no hacer nada, hace poco tuvimos una batalla donde hubieron muchas bajas, el milenario no quiere correr más riesgos, Incluso hasta tu saliste mal herida road - comenta seriamente, volviendo su vista a la lectura de su preciado libro-


    - Eso ya lo sé~ pero ya han pasado muchos días y los exorcistas volvieron a sus actividades regulares, ¡no es justo!, yo quiero ver a mi Allen - hace un puchero, mientras se sienta en forma de flor de loto con los brazos cruzados en el piso de la habitación-


    - El morocho lanza un largo suspiro y deja de leer su tan preciado libro para ver a su sobrina- ¿Por qué no buscas que hacer por allí?, puedes viajar entre dimensiones quizás encuentres algo entretenido con que distraerte, así pasas el rato mientras al milenario se le pasa su depresión.


    -La peliazul inclina levemente la cabeza hacia atrás para verlo desde una perspectiva distinta- Papa no me deja viajar sola, al menos que sean órdenes del milenario, ¿me quieres acompañar?, estoy segura que mientras estés conmigo papa estará feliz


    -Levanta una ceja, mientras pensaba en como librarse de aquella situación, pero era algo imposible puesto que si dejaba a road irse sola sabría bien que su hermano sheryl no se lo perdonaría, además que conociendo a la pequeña era mejor mantenerla vigilada, quien sabe que cosas se le podrían ocurrir- Esta bien, iré contigo solo porque tu padre es muy sobre protector y me puede reclamar el hecho de que te allá dejado ir sola entre dimensiones.


    -¡Perfecto!, no esperemos más entonces...-Salta de un brinco para después con su poder crear una puerta dimensional, la cual salía del piso postrándose en todo en medio de la habitación- estoy segura que al milenario le gustara que le traiga nuevos juguetes - sonríe de manera sádica-


    - Solo, intentemos no meternos en problemas -suspira de manera cansada, mientras se levanta del sofá y tira a la chimenea lo que quedaba del cigarro en sus labios-


    Londres -Inglaterra-

    Junio 14-2015

    Actualidad

    Centro de Londres- 3:30 pm


    La tarde estaba fresca, movida y llena de vigor, globos, luces, comida y atracciones era lo que se visualizaba en aquella agitada feria donde se encontraban un sin fin de personajes exóticos los cuales llamaban la atención de todos aquellos transeúntes que buscaban un poco de entretenimiento aquella tarde tan colorida. Nuestras tres protagonistas recién habían llegado al sitio, maravillándose de todas cosas que allí se encontraban, impresionando sobre todo a la más pequeña del grupo, la cual no aguanto sus impulsos infantiles y comenzó a correr por la calle mirando todos los stan's de juegos y comida que estaba a lo largo de la avenida; Ante la reacción de la rubia , María luna y Gabriela comenzaron a seguirla a paso rápido, para no perderla de vista pues conociendo a la pequeña, podría meterlas en un problema apenas alejaran la mirada de ella.


    Por su parte, lila admiraba todo lo que se encontraba a su alrededor, comprando todo lo que podía en cada tienda ambulante, entre sus compras estaban los dulces, haciendo que la chica tuviera más energías, logrando solamente cansar a sus amigas que la perseguían con rapidez por todos lados; La rubia no encontraba cabida a todo lo que veía, pues pocas veces podía de disfrutar de festividades como esas, ya que tenía una familia muy estricta , cosa que le impedía gozar a tope todo aquello que debía vivir una joven de su edad, por esas razones sus dos amigas muchas veces dejaban que se comportara como tal, debido a que de esa forma podía saciar todo aquello que se le había negado de niña.


    -Lila, no vayas tan rápido por favor...nosotras también queremos disfrutar de la feria -dice una cansada pelirroja, quien ya la había perseguido por casi media feria, junto a su pelinegra amiga-


    -La rubia se detiene al escuchar la queja de su amiga, mirando el estado en el que ambas se encontraban, y se dio cuenta que tanto como Gabriela como luna estaban cansadas y con la respiración agitada- oh...lo siento es que no me pude aguantar, ustedes saben que adoro salir a ferias -sonríe de manera divertida mientras de sus labios saca su lengua rosada de manera cómica-


    - Entendemos eso querida amiga, pero nosotras también queremos divertirnos, así que intentemos hacerlo juntas, ¿sí?, te aseguro que será más divertido de esa manera - Mira a su rubia amiga, y mientras comienza a recuperar la respiración que hacía pocos minutos había perdido, toma la cola que sujetaba su largo cabello negro para acomodarlo ya que estaba revuelto- entonces, ¿A qué atracción les gustaría ir?


    - Lila y Gabriela se miran entre sí, sonriendo de forma cómplice volteando de nuevo a ver a la pelinegra quien esperaba una respuesta de ambas, la cual fue contestada de manera inmediata- ¡Montaña Rusa!


    Sin perder más tiempo, las tres chicas caminaron de manera rápida para llegar a la fascinante atracción la cual se encontraba a un extremo de la feria, pasaron entre las personas con agilidad debida que era algo que disfrutaban jóvenes, niños y adultos. Mientras las jóvenes se dirigían a su fuente de diversión, en el otro extremo de la feria aparecía una puerta en forma de corazón, decorada como un tablero de ajedrez, de cuadros rojo y negro, las orillas de esta contenían una tonalidad de color oro, y en la intersección del corazón se encontraba una corona de rey; De aquella puerta, salieron Road y Tiky, con sus apariencias falsas, el morocho por su parte se encontraba vestido con un pantalón negro de vestir, su típica camisa de seda blanca abierta hasta el segundo botón dejando ver su pecho, su cabello negro alborotado y su típico cigarro el cual había encendido de camino a aquella dimensión y que ahora consumía con lentitud mientras miraba la fiesta frente a él.


    - Parece que vinimos en buen momento... ¿En qué dimensión estamos? Y ¿Que época?-mientras quita el cigarro de su boca para expulsar el humo de sus labios esperando la respuesta de su sobrina-


    - Con sutileza la pequeña kamelot quita la chupeta de sus labios, que se encontraba saboreando desde que salió de aquella gran mansión, y con diversión casi tétrica respondió- Estamos en Londres, en el año 2015, y esta dimensión es la "realidad", aquí nosotros somos simples personajes de ficción de una serie japonesa, transmitida en el año 2011 y que pronto tendrá continuación en el 2016 -ríe mordiendo la paleta- de aquí es de donde el conde saca la mayoría de sus akumas, hay tantas muertes y guerras a diario que es imposible no tomar semejante oportunidad.


    - Oh...interesante, así que, ¿Supongo que venimos por unos cuantos akumas, no es así? -sin dejar de mirar a la pequeña, quien no quitaba su risa maniática-


    -Veremos, primero quiero comer algunos dulces, cuando caiga la noche comenzara la diversión - Empieza a caminar hacia la feria mientras el morocho la seguía en silencio, esperando ver cual serían los planes de aquella pequeña noah- por cierto, si te piden fotos, acepta puesto que como somos personajes de ficción el estar vestidos así es significado de que estamos disfrazados de nosotros mismo, digamos que somos "Cosplayers" en este mundo, así que no te impresiones si de repente te reconocen.


    -Bueno, intentare adaptarme a la situación entonces, pero no prometo no dejar de divertirme también -ríe de manera sádica para luego ambos perderse entre la multitud del lugar.


    -Créeme, aquí encontraras una gran variedad de diversión y victimas tan interesantes que no querrás irte nunca de este mundo paralelo -Muerde la paleta, rompiéndola en mil pedazos dulces, mientras su rostro cambia al de una sádica, asustando algunos transeúntes que allí se encontraban- ¿Seguimos?


    -Por su puesto...


    Ambos noah, comenzaron hacer un recorrido por el lugar y así buscar la diversión de la cual road tanto hablaba, eso podría significar algo bueno o algo malo, pero si alguien conocía muy bien a la chica, era de esperarse que fuera algo no muy bueno y antes de que eso pasara era mejor aprovechar la oportunidad que se presentaba sobre todo si se tenían presas tan fáciles sin que ningún exorcista entrometido interviniera.

    Por otra parte, poco después que las chicas subieran a la montaña rusa, fueron al carrusel donde las tres se encontraban consumiendo palomitas de maíz, disfrutando que el juego realizara su habitual recorrido, puesto que conversaban muy amenamente.


    -Ha sido una tarde bastante entretenida -comenta de manera divertida la pequeña rubia-


    - Y eso que aún no termina -sonríe de manera dulce Gabriela, quien miraba a su pequeña amiga rubia- saben, si este fuera el mundo de D Gray Man, me gustaría salir a un sitio como este junto con Allen, aunque sea como amigos...


    -La pelinegra, observa fijamente a su amiga pelirroja encontrándose con una mirada soñadora ante lo recién dicho por la susodicha, y de manera cálida le sonríe- A mí también me gustaría, pero obviamente con Kanda...pero creo que es un poco más difícil considerando su actitud


    - Daa~ ustedes y sus dramas amorosos, si yo estuviera frente al pelirrojo le diría todo lo que siento y si no le gusta, bueno, al menos lo intente, pero uno jamás debe quedarse con las ganas -responde la rubia con sabia ¿sabiduría?, de una niña de 15 años-


    - No es tan fácil así, decirlo suena sencillo, hacerlo es el verdadero reto -suspira la pelinegra mirando a la multitud rodeando el divertido juego- cuando sabes cómo es la persona, piensas en todas las posibilidades de respuesta, tanto buenas como malas, es por eso que es tan difícil decirle a alguien que te gusta.


    -Gabriela observa la mirada perdida de luna ante la explicación que le daba a lila sobre las declaraciones, ya que ella sabía todos los rechazos que había sufrido en su infancia, porque antes de ser así de hermosa como era, ella en aquellos tiempos tenía un aspecto de una chica normal, mal arreglada y con mucha timidez, ahora esa pequeña niña era una flor que ahora todos deseaban, pero que ella ahora nadie deseaba a su lado- María, te parece que después de terminar aquí, ¿vayamos a un juego de tiros?, A ver si logramos ganar algunos premios.


    -La pelinegra asiente suavemente quitando su mirada melancólica y llenándose de brillo de nuevo ante la idea de aquella pelirroja- Ya verás que ganaremos aunque sea un peluche, aunque me conformaría con cualquier cosa.


    -Lila sabia parte del pasado de la pelinegra puesto que se lo había contado apenas se había graduado de secundaria, y al igual que Gabriela entendía por qué le costaba tanto muchas veces entablar una conversación con el chico que le gustase en ese momento, aunque ella fuera muy extrovertida, esa era una de su más grande debilidades, lanza un suspiro y voltea a ver a las personas que rodeaban el juego y se da cuenta de dos personas muy peculiares - ¡Hey!, ¡chicas miren! -señala de manera espontánea, a los individuos que se encontraban cosplayados de los personajes de Tiky y Road-


    -Ambas chicas voltean al escuchar la expresión de la rubia menor, y al voltear la mirada se encuentran con aquellas personas las cuales lila señalaba con tanto fervor- No sabía que se podía venir con disfraz a la feria, de haberlo sabido hubiera sacado mi traje de exorcista -bufa con molestia la pelinegra-


    -Gabriela ríe ante el comentario de la chica, y al sentir el detener de la atracción comienza a bajarse junto a sus dos amigas, quienes se encontraban ansiosas por tomarse fotos con dichos individuos- Todos lo sabemos luna, aunque déjame decirte algo, para ser unos simples disfraces están muy bien hechos, o tienen muy buen físico, o su maquillaje es profesional. -mira de manera dudosa a los "Cosplayers" que en ese momento se encontraban tomándose fotos con otras personas-


    -¡Eso no importa, hay que aprovechar! -Grita con euforia la rubia, quien al llegar a dichos personajes, jala de manera suave al morocho mayor, quien queda impresionado de la fuerza de la chica- ¿Podrías tomarte una foto con nosotras? -pregunta de manera infantil y con brillos en los ojos-


    -De manera educada, digna de un conde aristocrático toma la mano de lila con suavidad dándole un suave beso en su dorso lanzando una coqueta sonrisa a la chica- Como decirle que no, a una hermosa flor como tú -observa fijamente a la rubia quien se sonroja al sentir el beso en su mano; Debía admitir que le gustaba de sobre manera aquella situación en la que se encontraba, apenas había entrado a la feria muchas chicas habían pedido su foto, fanáticas de susodicho anime o no, se encontraba rodeado de muchas presas apetecibles que estaba más que seguro que al conde le gustaría akumatizar-


    -Vaya realmente se mete en el personaje, ¿no es así luna? -mira fijamente a su amiga, quien no apartaba la vista del joven morocho, quien ahora posaba junto con lila en aquella sesión de fotos improvisada-


    - Si no fuera porque son personajes de ficción, realmente te diría que son los originales, sus características físicas son muy parecidas como para ser simples cosplayers o de que se trate de maquillaje profesional -cruzada de brazos, y con una ceja levemente arqueada hacia arriba-


    - ¿Verdad que si?, Te lo dije, aunque a mí me parece que están muy bien hechos, considerando que seguro les llevo tiempo y trabajo realizarlo, pero si pones a ver desde una perspectiva distinta, no se ve como si fuera maquillaje -Vuelve a detallar fijamente a los dos personajes, quienes ahora posaban de manera junta con la rubia- de igual forma, yo quiero mi foto con ellos -saca su teléfono sonriente-


    - ¿Acaso yo dije que no me tomaría fotos con ellos?, ¡estás loca, es una oportunidad única! -ríe suavemente, mientras se hacer de igual manera hacia ambos personajes-


    -Esa es la actitud- Responde con felicidad, y con paso lento se acerca primero al moreno, pues luna había ido primero con road, al igual que lila que ya había terminado si sesión con el morocho, con algo de timidez se posa frente al chico - ¿Me podrías regalar una foto contigo?


    -Tiky quien se encontraba mirando a otro lado, escucha la dulce voz de la pelirroja, y se voltea para contestarle de la misma manera que había hecho con la rubia, pero al ver a Gabriela su aliento se congelo, su cigarro que se encontraba en sus labios ahora estaba en el piso, mientras su mente pensaba y analizaba , ¿Cómo es, que podía existir criatura tan hermosa en esa dimensión?, con la poca cordura que le quedaba pues se había quedado prendido en su mirada grisácea, contesto- Para ti, hermosa pelirroja todas las fotos que tu desees. -sonríe de manera coqueta y toma la mano de la chica besándola con toda la suavidad y ternura que se podía, como si de una rosa se tratara-


    - Gabriela, al ver la primera reacción del chico, se preocupó pues había tardado en contestarle, pero al verlo de nuevo tan educado y coqueto como antes se tranquilizó, sonriendo de manera dulce para el al sentir el beso en su mano, ella respondió un poco roja por aquella acción - Muchas gracias entonces, debo acotar que le queda muy bien el cosplay joven.


    -El morocho sonríe al ver la acción de la chica, quedando más interesado en ella, al escuchar lo que salía de sus carnosos labios sonrió- Muchas gracias, digamos que soy, un gran fanático de la serie, y este es mi personaje favorito, por lo cual intento hacerlo lo mejor posible, y dime una belleza como tú, ¿También es fanática a la serie? -le pregunta sin rodeos, mientras tomaba la foto-


    -La joven pelirroja lo ve al escuchar lo que preguntaba a su persona, bajo el teléfono una vez que ya estuvo realizada la foto y le volvió a responder con educación- Me encanta, es mi obsesión, al igual que el de mis amigas...digamos que es nuestra pequeña droga, tenemos algunos amores platónicos allí -dice sonroja al recordar a cierto albino protagonista-


    -Oh, ya veo, Entonces realmente yo espero ser uno de esos amores platónicos -toma de nuevo suavemente la mano de la pelirroja besando su dorso, levanta la mirada para verla fijamente a esos hermosos ojos grises- yo, realmente espero que nuestros caminos vuelvan a cruzarse pelirroja, me tengo que retirar, mi sobrina espera por mí.


    Gabriela siente sus blancas mejillas arder ante el coqueteo del chico hacia su persona, ve como lentamente este camina hacia la otra chica donde aún se encontraba con sus dos amigas, ella realmente esperaba volver a encontrarlo pues pocas veces se sentía atraída por alguien, además que si lo pensaba un poco ya estaba en edad de conseguir un novio y dejar de estar pensando en fantasías infantiles de estar enamorada de un personaje de ficción, aunque se tratara del gran Allen Walker ella tendría que muy pronto seguir con su vida, si tan solo le hubiera preguntado el nombre. De manera rápida camino hacia donde estaban sus dos amigas para tomar su correspondiente foto con la Kamelot menor, una vez que terminaron con ambos las chicas procedieron a dirigirse a su próximo objetivo que era la " La casa de los Espejos".


    Con las Familia Noah.


    Poco después del encuentro con las tres chicas, los dos noah se detienen dentro de una tienda de suvenir donde road comienza a comprar algunos dulces, mientras el noah mayor seguía pensando en aquella pelirroja que lo había encantado, realmente no había visto mortal más hermosa en todos sus años de vida, ni siquiera en la aristocracia existía belleza tan única como ella, sinceramente odiaba en aquel momento que esa rosa tan única solo viviera en este mundo, y de venir a verla era imposible puesto que ella lo veía como un hombre disfrazado de un personaje de "ficción" además que tenía un deber con el conde, no debía desviar su convicción por una chica por muy hermosa que esta fuera.


    La kamelot menor, se da cuenta de la mirada perdida de su tío, pues desde que había visto a la chica pelirroja de hace un rato había quedado prendando en su belleza, con burla muerde con fuerza la paleta que consumía llamando la atención del morocho quien prendía otro cigarro mientras esperaba que la pequeña terminara de realizar sus compras, observándola y dándose cuenta de la sonrisa socarrona que adornaba en sus labios.


    -¿En qué piensas? -botando el humo de sus labios con delicadeza-


    -Pienso en tu sorpresiva atracción hacia la chica de hace un rato -mirándolo de reojo, y de una bolsa saca otra paleta de color rosa la cual mete en su boca- casi pareciera que te enamoraste de ella...


    - Ríe, mientras echa de manera coqueta su cabello hacia atrás, mientras observa cómo la tarde caía y el crespúsculo se posaba en el cielo de Londres- ¿Qué cosas dices?, no mentiré que la chica es hermosa, y debo admitir que bellezas como esa no la encuentras en todos lados, lástima que pertenezca a este mundo y que yo sea un ser inmortal y sobre todas las cosas un "Villano" así que lo mejor es olvidar y seguir.


    -Road, se queda mirándolo seriamente dejando de consumir aquel caramelo que tanto le fascinaba, con lentitud voltea la mirada para observar a la multitud que ahora había en la feria pues con el caer de la noche más personas se acercaban a aquella fiesta, y con un ligero susurro termina aquella conversación con el mayor- Llego la hora tikky.


    -El morocho simplemente asiente, esperando que aquella chica no estuviera en ese momento en la feria, pues dentro de poco comenzaría una masacre que ni el mismo podría detener-


    Casa de los espejos - 8:30 pm-


    Las chicas después de haberse tomado aquella sección de fotos con los cosplayers, entraron a la casa de los espejos donde estuvieron perdidas por casi una hora, puesto que lila se había puesto a hacer algunas travesuras, haciendo que las tres se separaran por caminos distintos, perdiéndose por completo en la atracción. Entre gritos, y llamadas telefónicas fue como lograron llegar a un punto de intersección donde los caminos se separaban y allí se encontraba el letrero donde indicaba el camino de salida, de esa manera tomar el rumbo fuera de aquel gran laberinto de confección.


    -Si vuelves a hacer que nos perdamos de nuevo lila, juro por dios y todos los santos existentes que no me hago responsable de mis actos - Bufa con un tierno puchero la pelinegra, pues era la más cansada del grupo debido que fue quien más corrió por todo el laberinto buscándolas-


    - la joven rubia reía de manera socarrona haciendo que se escuchara por todo el lugar- ¡Hay vamos no fue tan malo! , ¿O sí?, yo me divertí bastante -sacándole la lengua a la chica de manera cómica mientras le guiñaba el ojo- ¿Tu qué dices Gabriela?


    - Pienso que deberíamos salir, y comer algo...se hizo bastante tarde por tu travesura pequeña lila -sonríe de manera dulce, acariciando el cabello de la chica- y por favor, te suplico que no nos vuelvas a hacer correr de esa manera otra vez, pudimos quedar atrapadas más tiempo.


    - Esta bien, prometo que no volverá a pasar, que aburridas son -realiza un pequeño puchero mientras acepta con felicidad las caricias de la pelirroja-


    Al cabo de unos minutos, las chicas de encontraban ya casi en la salida de la atracción, cuando de repente se escuchan gritos y explosiones, un estruendo hace temblar la tierra haciendo que varios espejos cerca se de ellas se rompieran en mil pedazos. Asustadas sin saber que pasaba, el trio de chicas se miraba entre sí, sin saber qué hacer, pus los gritos y explosiones cada vez eran más fuertes.


    -La pelinegra, era quien más cerca de la salida se encontraba, observo de reojo a sus amigas y con clara determinación exclamo- Yo saldré de primero, quédate con lila aquí dentro, sé que no es el lugar más seguro, pero al menos si es algún ataque, aquí no las encontraran -Impone la pelinegra, quien se alistaba para salir a ver qué era lo que estaba sucediendo afuera, pues si llegaba a pasar algo, ella sería la afectada y no ellas, en ese momento su lado sobre protector se encontraba a flor de piel-



    -¡No! -Exclama lila de manera molesta mientras las ve a ambas- saldremos todas a ver qué es lo que está pasando, no pienso permitir que por ser menor ustedes me protejan, si vamos a salir lo haremos todas, considero que separarnos en esta situación es una mala idea.


    - Lila tiene razón luna, por más que me cueste admitirlo, si nos separamos podría ser peor es mejor que salgamos todas juntas, de esa manera podremos escapar más fácil en caso de que se complique la situación -observa a su amiga pelinegra, pues sabía que ella prefería ir sola, pero no la dejarían, pues que siempre daba la cara por el grupo en situaciones complicadas como esa, y esta vez no se lo permitiría-


    -De acuerdo, si algo nos enseñó el Anime es crear una buena estrategia así que chicas piensen en que haríamos en esta trama de la historia, quizás de esa manera nos ayude a salir de este caos -Acota de manera firme, mientras ve como ambas entran en "personaje" - Nada de heroísmo, ¿Entendieron?


    - Si -Responde ambas de manera pareja-


    Sin esperar mucho, las chicas salen de la atracción para encontrarse con la más horrible de las imágenes, y sobre todas las cosas ver algo que jamás pensaron ver en toda su vida, frente a ellas se encontraba todo el lugar destruido siendo devorado por las llamas abrasadoras, las personas corrían por todo el lugar, mientras otras tenían el cuerpo lleno de estrellas negras y luego se desvanecían hechos polvo; El cielo nocturno era invadido por maquinas redondas, de muchos cañones y horrible forma, que lanzaban municiones a las personas que allí se encontraban volviendo el lugar un caos, encima de esas máquinas, dos figuras se podían apreciar pero al ser una noche tan oscura, pues la luna no se encontraba en el firmamento dejando todo aún más negro, no se podían ver, impidiendo saber quiénes eran los culpables de tal masacre.


    Puerta de Road - Minutos antes del ataque, 7:30 pm-



    Al poco rato de que road terminara de consumir sus preciados dulces, ambos noah se encontraban de nuevo en el otro extremo de la feria donde nadie podía verlos, frente aquella puerta Inter-dimensional, que ahora se encontraba abierta de par a par, mostrando un portal negro del cual comenzaban a salir Akumas de nivel 1 a grandes cantidades que rodeaban a los dos, quienes ahora habían abandonado su falsa apariencia mostrando su piel oscura , ojos dorados y las 7 características estrellas de su frente. Road reía a múltiples carcajadas al ver la cantidad de akumas que ahora se encontraban a su alrededor, sus ojos dorados destellaban maldad pura al saber todo lo que ocurriría en tan solo unos instantes, su corazón bombeaba su sangre por todo su cuerpo de manera rápida, quien sentía el placer a flor de piel.


    Por su parte , Tiky también se encontraba ansioso, pocas veces había disfrutado de una buena matanza como la que iba a ocurrir en tan solo unos instantes, y no era para menos desde que habían llegado los exorcistas, siempre estorbaban en su diversión, pero en aquel momento no había nadie que pudiera defender a esas personas inocentes; Al igual que la kamelot menor, su mente se nublo al pensar en toda aquella sangre derramándose por el piso, en contar la gran cantidad de víctimas y nuevos akumas que le llevaría al conde quien seguro se alegraría al ver tal cantidad de almas envenenadas, no podía esperar más, con agilidad se montó sobre uno de los akumas quien al sentir a su amo voló hasta el cielo, Road repitió la misma acción llenado aquel firmamento negro de todos aquellos akumas esperando ordenes de atacar.


    -Road reía de manera estruendosa, regocijándose al ver a todas aquellas personas indefensas caminar, inocentes ajenos a lo que pronto pasaría- Que placer, ver tantas almas y saber que podrás disfrutar de una buena masacre productiva, ¿No es así, Tiky?


    - Botaba el humo restante de aquel cigarro de sus labios, desechando la colilla lejos de el- Si, me divertiré como hacía años que no podía hacerlo, así que basta de parloteo, y más acción, ¡Akumas, destruyan, maten y destrocen todo el lugar, que no quede una sola alma viva, maten y maten para que puedan evolucionar! - Y sin contra tiempo, aquella masacre empezó-


    Salida de la Casa de los Espejos -8:45 pm-


    Luna y sus amigas buscaban un explicación lógica y que no estuviera fuera de contexto para tratar de explicar el por qué había akumas en aquella feria, y no parecía que fuera algún tipo de rodaje, o alucinación, pues estaba más que claro que eran 100% reales, los muertos hechos polvo frente a ellas muy bien lo demostraban, y sobre todas las cosa que era lo peor del caso, no existían exorcistas que pudieran eliminar aquellas maquinas, aunque en ese punto creer en un milagro parecía lo más lógico. Con destreza, las tres chicas empezaron a correr entre las tiendas intentado no ser vistas por aquellas criaturas, sus respiraciones eran agitadas, el miedo se visualizaba en sus ojos pero debían ser fuertes si querían sobrevivir en ese momento.


    - ¡¿Que manera lógica hay para explicar la presencia de akumas en este lugar?! - preguntaba Gabriela quien corría entre la multitud, mientras observaba a María y a lila buscando alguna explicación-


    - Créeme que si lo supiera, no estaría aquí corriendo por salvar nuestras vidas Gabriela- responde con sarcasmo la pelinegra quien se escondía dentro de una tienda de peluches junto con ellas-


    -! Oye, no seas cruel!, sé que la situación no es exactamente la indicada para pensar en esas cosas pero seguramente hay un lado positivo de todo esto y una clara explicación del porque estamos siendo atacados por maquinas que solo salen en una serie de anime - ríe de manera dudosa, buscando en su amplia mente alguna manera de explicar lo ocurrido quedando con la misma respuesta que hace rato "no había forma lógica de explicarlo"-



    -Lila, dudo mucho que encuentres algo positivo de esta situación -responde la pelirroja quien miraba por encima del mostrador, tratando de visualizar algún akuma cerca de ellas para poder escapar en caso de que fuera necesario, pues dudaba que se quedaran allí escondidas hasta que todo aquello pasara-


    -Solo digo que hay una esperanza de que aparezcan al menos un exorcista, si existen los akumas, por lo menos una persona sincronizada con la inocencia tiene que haber -Decía la rubia quien se acomodaba mejor en su escondite, pues para ella era mejor estar allí y no salir-


    -Y si la hay, seguramente ni siquiera lo sabe, es más dudo un poco que conozca incluso la serie o que este aquí en Londres, en este exacto momento y situación -Sisea María luna un poco cohibida por no saber qué hacer, pues aun habían muchos akumas afuera como para salir de aquel escondite- ¿Cómo demonios vamos a salir de aquí?, hay demasiados akumas alrededor -mira a Gabriela buscando ayuda-


    -No lo sé, está un poco difícil, hay como unos 5 a 10 rodeando el lugar, y aun se escuchan tiros a lo lejos -mira a la pelinegra, pensando también en cómo salir- Lo mejor sería es que esperemos aquí hasta que todo esto termine, o por lo menos hasta que podamos salir de este lugar.


    -No creo que sea buena idea Gabriela, estamos en medio de un campo minado, sin armas, ni nada con que defendernos de ellos, además que existe la posibilidad de que suban de nivel y será peor pues pueden encontrarnos más fácil de esa manera.


    -No había pensado en esa posibilidad, había olvidado por completo que subían de nivel -muerde suavemente su pulgar, mientras en su mente pasaban mil y un posibilidades de salir de allí- demonios...realmente necesitamos alguien que nos ayude a salir de aquí.


    -Chicas, no es por querer apresurarlas ni nada por el estilo pero... ¡Un akuma de acerca! -grita la rubia al ver que una de esas máquinas se acercaba a toda velocidad hacia ellas, pues habían sido descubiertas por la horrenda criatura-


    Sin perder el tiempo, las tres saltaron por encima del mostrador para empezar a correr de manera desesperada. La máquina por su parte comenzó a lanzar tiros hacia las chicas, quienes de manera ágil esquivaban los ataques, aunque muchas veces les costaba, pues obviamente no estaban entrenadas ni capacitadas para enfrentar ese tipo de situaciones. Mientras las jóvenes corrían, se escuchaba la risa maniática de road en el oscuro firmamento, ya que disfrutaba el caos que estaba creando en aquella feria. Tiky por su parte, se divertía de una forma algo diferente, pues agarraba a las personas y traspasaba su pecho para explotarles el corazón y ver como las demás personas huían horrorizadas ante su vista.


    Destrucción, caos, gritos, alarmas de patrullas, disparos y explosiones, todo eso se encontraba en ese lugar, personas echas polvo, otras tiradas en el piso sin órganos internos, y risas de una psicópata se escuchaba a los lejos juntos con los disparos. Las tres chicas se sentían agobiadas, pues a todo lugar que miraban se encontraba un akuma cerca, sentían que con cada minuto que pasaba esas máquinas se multiplicaban destruyendo con más fervor el centro de Londres. La kamelot menor, admiraba el lugar casi desolado, sintiendo más ganas de destruir el lugar, pero antes de que ella pudiera seguir con su diversión, observo a lo lejos a la pelirroja junto con sus dos amigas corriendo por salvar sus vidas; Busco por los alrededores a Tiky, pero no lo encontró así que ella al no ver el morocho, tomo la iniciativa de atacarlas, ordenado al akuma donde se encontraba posada que fuera hasta donde sus presas se encontraban.


    Pov Gabriela


    Una vez que salimos de aquella tienda de peluches, corrimos con todo lo que daban nuestras piernas, pero la salida se hacía cada vez más lejos, las tres ya nos encontrábamos sin aliento y completamente cansadas de esquivar los ataques, mi ropa ya estaba rasgada de tanto rodar por el suelo, al igual que la de lila y María, tenía varias cortaduras y rasguños en todo mi cuerpo, aunque no me importaba agradecía de sobre manera que a ninguna nos allá tocado una bala envenenada, de hacerlo moriríamos en cuestión de segundos; Observe a lo lejos, otro escondite donde podríamos descansar por lo menos unos segundos, pero antes de que pudiéramos llegar a ese lugar, un akuma se atravesó frente a nosotras, y encima de él estaba nada más y nada menos que aquella "cosplayer" que hacia el papel de road, pero ahora su apariencia era la de una verdadera noah, fue allí donde las tres entramos en razón...ellos no eran cosplayer's, eran los verdaderos Tiky y Road, estuvimos corriendo peligro desde siempre, solo que ahora, el frio aliento de la muerte se posaba en nuestras nucas, y lo peor del caso es que luna y yo siempre tuvimos razón, que ellos eran los originales y no simples personas.


    - Road Kamelot -masculle con suavidad, al detenerme bruscamente por la repentina aparición del akuma, María y lila había hecho lo mismo al ver que la chica con que se habían tomados las fotos era la original noah-


    - La Original, y no un simple cosplayer como dicen en esta dimisión -ríe de manera sádica, bajándose con elegancia del akuma donde se encontraba antes puesta- ¿Quién iba a decir, que sobrevivirían a la masacre?, ¿eh? Me impresionan chicas, no todos pueden vivir para contar que huyeron de los grandes Tiky Mikk y mi persona junto con un ejército de akumas, debería recompensarlas ¿saben?.


    - ¿Que quiere, una noah como tú en esta dimensión?, ¿No te basta con destruir la tuya, como para que vengas a destrozar la nuestras? -Escuche a María preguntarle a la ojidorada mientras con suavidad retrocedía un poco-


    - Pues si supieras que no, en esta dimensión hay mucha más diversión, además que no hay molestos exorcistas que vengan a interrumpir mi entretenimiento y la del conde -se acercaba hacia nosotras, mientras ordenaba a aquellas maquinas rodearnos a las tres- ¿Que debería hacer con ustedes?, ¿Saben algo? Ustedes me cayeron bien, además que cierta pelirroja dejo atolondrado a tío Tiky. -me miró fijamente-


    -Abrí los ojos con sorpresa, sintiendo mis mejillas arder lentamente, era imposible, aunque en ese momento todo era posible, lo que ella decía, pero si me ponía a recordar lo que había pasado más temprano ese día, tenía algo de razón, tikky no dejaba de verme - Yo, no tenía ninguna intención de enamorarlo, simplemente fui amable con él, ya que creía que era un simple chico muy bien cosplayado del noah del placer.


    -Pues ahora sabemos que no era un simple cosplay Gabriela -me mira de reojo mi rubia amiga, quien también se encontraba un poco incrédula a lo que pasaba en ese momento- ¿Que harás con nosotras kamelot?, habla de una vez mi paciencia es muy corta.


    -Yo que tú, revisaría nuevamente en la posición en la que me encuentro, rubia -masculla de mala gana la chica, quien su cara cambio a una más seria al sentir el insulto de la pequeña lila-


    -Lila basta, no la provoques, recuerda que estamos rodeadas por akumas y por sobre todas las cosas, en frente de una noah, así que por favor te pido que te comportes -regaña luna a lila, quien apretaba las manos con impotencia, y no era para menos, estábamos entre la espada y la pared-


    -Eso es, escucha a tu amiga cariño, es lo mejor que puedes hacer -reía, mientras acariciaba uno de los akumas como si de una mascota se tratara- ¡Ya sé qué hacer con ustedes! -exclama feliz, acercándose a nosotras con brusquedad y fuerza toma del cuello a la pequeña lila, asfixiándola pero sin llegar a matarla- ¡Juguemos realidad o reto!, yo hare las preguntas y si ustedes responden bien las dejare ir, si responde mal o mienten, iré quitándole miembro por miembro a su amiga -ríe sádicamente-


    -¡¡LILA!!-gritamos luna y yo al mismo tiempo, al ver como la chica tomaba a la pequeña, con brusquedad, impotencia, eso era lo que yo sentía y sabía bien que luna se sentía de la misma forma, escuchamos como ella reía con maldad mientras proponía su tétrico juego- ¿Cómo sabremos que no harás trampa?


    -Yo nunca hago trampa -me observa con seriedad mientras jugaba con el cuello de lila quien intentaba respirar y salir de las garras de ella, pero le resultaba imposible se notaba en su mirada que hacia un esfuerzo grande- Primera pregunta, ¿Cuánto es 2 + 2?


    - ¿Es enserio? -preguntaba con molestia María luna, quien tenía las manos rojas de tanto apretarlas por sentirse débil ante aquella noah- Es 4 Road...


    -La noah hace una "X" con sus dos brazos, ya que de un momento a otro había dejado a lila amarrada a un Stan que se encontraba medianamente destruido, puesto que la coloco en forma de cruz mientras dos akumas le apuntaban- Error, es incorrecto niña, la respuesta correcta es Pez, bien ¿Que quitare primero?, ¿Los ojos?, ¿Los brazos? O.... ¿Tu asquerosa lengua falta de respeto? -rodeo a lila de sus velas, y lanzo una contra la pierna de ella haciéndola gritar de extremo dolor-


    -¡Maldita bruja, quita tus manos de mi amiga! -grito María con molestia y acto seguido la vi encima de la kamelot intentando ahorcarla pero esta simplemente reía ante aquella acción que era completamente inútil, ya que una simple humana no la dañaría eso lo sabía a la perfección; Observe como también agarraba con fuerza a María y la lanzaba a mis pies- Maldita...-responde con dificultad, al tiempo que la ayudaba a reincorporarse del piso-


    -Deberías portarte bien -mientras se arreglaba la blusa y de nuevo lanzaba otra vela a la piel de lila, y de nuevo otro grito se escuchaba en todo el lugar mientras sus lágrimas salían por el inmenso dolor que sentía, sus mejillas se encontraban rosadas de tanto gritar- Porque puedo terminar esto de manera rápida.- Amenaza cruelmente a María-


    -Jamás ganaras kamelot, aunque muera créeme que de igual forma en tu mundo sufrirás un cruel destino, uno en el cual no escaparás bastarda y ese día aunque tarde reiré porque sabré que morirás lenta y cruelmente -Con una pequeña risa socarrona, lila le decía a road todas sus verdades, sin importarle su integridad en ese momento, cosa que era de esperarse de ella y al escucharla, me llene de valor-


    -Es cierto kamelot, aunque nosotras perezcamos aquí frente a ti, alguien en tu mundo se prepara para ver rodar tu cabeza y espero de todo corazón que esa persona sea Allen, para que te duela más ver a aquella persona que tanto aprecias destruirte lentamente -mi voz era fría, cortante mientras escupía aquel veneno por mi boca, detallando la mirada de molestia de la menor, quien caminaba hasta quedar frente de mi-


    -Eso lo veremos...te quería entregar como tributo a Tikky pero ahora solo llevare tu cadáver -Road nos rodea a las tres con sus velas empezando a lanzarlas sobre María y mi persona- Aunque si sobrevives, tal vez si te lleve viva.


    Al terminar la conversación, luna y yo sentimos aquellas velas atravesar nuestras ropa, Y rasgar nuestras piel, lentamente retrocedíamos y hacíamos todo lo humanamente posible por esquivar todas las velas que podíamos; Lila gritaba al vernos mal heridas, teníamos algunos cortes profundos que requerían atención inmediata, pero no eran tan urgentes como los de mi rubia amiga, quien intentaba por todos los medios posible huir de esa situación y ayudarnos, mire de reojo a maría luna y note que era quien más daño estaba recibiendo, puesto que intentaba desviar las velas que se dirigían a mí, llore de impotencia y lance un grito tan fuerte que desgarro mis cuerdas vocales y ante la desesperación tome lo primero que en mis manos se encontraba cerca, un látigo de cuero negro.


    Pov Maria luna


    Era increíble, tratar de entender todo lo que había pasado ese día, era demasiada información que procesar, su persona aun no caía en cuenta que se encontraba frente a Road Kamelot y rodeada de akumas a punto de ser masacrada por ellos, aun si mente buscaba algo, tan solo una pequeña fracción de lógica que pudiera explicar toda esa situación, pero en ese momento estaba en shock , su mente estaba en blanco, no podía pensar en nada más que sobrevivir ante aquello, pero ella estaba más que segura que había algo que se le estaba escapando, algo que explicaría eso a la perfección, pero después pensaría en eso, por ajora su cuerpo herido intentaba de todas las formas posibles esquivar cada una de las velas de la noah menor, mientras observaba de reojo como su pelirroja amiga tomaba un látigo de cuero del piso; ¿Para qué lo usaría?, no estaba segura , pero de lo que si estaba segura, es que si iban a morir...lo harían con integridad.


    Tan rápido como ella termino aquel ultimo pensamiento, observo como Gabriela desenlazaba aquel gran látigo pesado, y como inmediatamente se lanzaba sobre los akumas que rodeaban a lila, haciendo amarres alrededor de los cañones de los akumas jalándolos con fuerza haciéndolos tambalear y chocar entre sí para distraerlos, para así de esa manera sacar a lila de aquellos amarres; Rápidamente, road quien me estaba atacando en ese momento pues había desviado la vista de Gabriela por unos instantes, lo que le permito hacer eso, se dio cuenta de lo que estaba pasando, molestándose más, en su rostro se notaba que no le agradaba lo que estaba pasando. Me dejo a un lado, y con rapidez se dirigió hasta donde se encontraba Gabriela, para quien sabe que hacerle, pero no se lo iba a permitir, con la poca fuerza que tenía la jale de uno de sus brazos lanzándola hacia unos árboles aprovechando para ir hasta donde se encontraba mi pelirroja amiga.


    -¡Gabriela! -grite con fuerza, llegando hasta donde ella se encontraba, reincorporando la respiración que había perdido al jalar a la kamelot hace unos instantes- ¿Estás bien?


    -¡María! -respondió preocupada, ya que había culminado de vendar las heridas de lila, la cual estaba en el piso intentado levantarse para estar junto a nosotras- No sé qué paso, ¡Te lo juro!, sentí un impulso y tome lo primero que vi entre mis manos para empezar a atacar, no pretendía complicar más las cosas -mascullaba preocupada por las acciones que recién había tomado-


    - Eso no importa ahora, lo importante es que pudiste desviar a la amenaza, tenemos que irnos antes que road regrese y los akumas también -Dije con determinación mientras tomaba a lila entre mis brazos, pues las heridas estaban muy profundas como para que se pudiera levantar sola-


    - Luna tiene razón, vámonos antes que la loca esa regrese -masculla lila con dolor, mientras tomaba mis brazos suavemente levantándose con algo de dificultad- Es mejor estar lejos, ya después pensaremos en todo lo que acaba de pasar -me jalaba para irnos, y yo obedecía, de la misma manera que lo hacía Gabriela, pero antes que pudiéramos tan solo avanzar una bala intercedió nuestro camino, haciéndonos voltear para ver que allí estaba ella de nuevo junto con las maquinas- Bruja...


    -¿A dónde creen que se dirigen?, tienen muchas agallas como para atacarme, pero no se preocupen la fiesta recién empieza -Comienza a lanzarnos más de sus velas, haciéndonos esquivar como podíamos, pero muchas de ellas rozaban nuestros cuerpos, ya cansados y heridos, sin contar que yo llevaba sobre mí a lila herida complicándome más la situación, Gabriela al darse cuenta de eso, corre frente de mí y de nuevo con aquel látigo comienza a atacar a la noah.


    -¡Gabriela! -gritamos lila y yo al mismo tiempo al ver la osadía con la que atacaba, y yo tampoco me quedaría atrás, como pude deje a lila en un lugar seguro, y corrí hasta donde se encontraba mi pelirroja amiga, tome unas cadenas que se encontraban cerca comenzando a lanzarlas hacia la noah -¡ Toma esto bruja!


    -La noah al notar, que ambas nos lanzamos contra ella detiene los ataques con sus manos y con su fuerza súper humana alza nuestros frágiles cuerpos haciendo que rodemos de nuevo por aquél piso lleno de escombros, ganándonos más heridas y moretones- ¿En serio creen que podrán vencerme simplemente con un látigo y una cadena?, no me hagan reír, son simples humanas sin ningún poder así que no se esfuercen y mueran...-Reía con aquella fuerza haciéndose escuchar por todo el lugar- Ojala Tiky pudiera ver esto .


    -Maldita bruja -Dije con esfuerzo, al cabo que volvía a levantar mi cuerpo, al igual que Gabriela quien no se daba por vencida, apretando con fuerza aquellas cadenas en mis manos, volví a posicionarme para atacar y corrí junto con mi pelirroja amiga de nuevo hacia donde se encontraba la noah - ¡JAMAS GANARAS KAMELOT, ASI TENGAMOS QUE SACRIFICARNOS POR UNA GUERRA QUE NO NOS INCUMBE!. -Grite con odio-


    -¡ESTO VA POR TODOS LOS EXORCISTA QUE MURIERON Y TODOS LOS EXORCISTA QUE MATASTE BRUJA! -grita Gabriela con fuerza también, mientras ambos ataques se encontraban entre sí atacando al mismo tiempo, pero al igual que en el ataque anterior, fue detenido como si nada, siendo lanzadas de nuevo por los aires-


    -Que patéticas...-responde road, con claro cansancio ante nuestros intentos de atacarla-


    Lila, quien observaba todo a los lejos mantenía aquella mirada fija en sus amigas quienes habían todo lo posible por detener a la noah menor, pero sin tener éxito alguno, sin embargo ella tampoco tenía intenciones de quedarse atrás ante aquella oportunidad, y con desesperación busco entre los escombros algo que pudiera ayudarla, encontrando una Escopeta de dardos, de aquellas que se utilizaba en los puestos para ganar premios, sabía que no sería útil contra ellos, pero al menos algo podría hacer, como pudo quito las balas de plástico y la recargo con pequeñas piedras, apuntando hacia la peliazul, esperando el momento en el que sus amigas volvieran a atacar.


    De nuevo en el piso, sentía que mi cuerpo no iba a poder más, cada hueso, órgano, ligamento entre otros estaban que colapsaban, mi vista se nublaba ante la pérdida de sangre de mis heridas, mire de reojo a Gabriela quien se volvía a levantar, sus piernas temblaban, su cabello estaba desordenado, de su frente salía un pequeño hilo de sangre al igual que de sus labios, su ropa estaba rasgada dejando ver las heridas punzo penetrantes de las velas de road, en fin su estado era igual al mío, pero algo estaba claro, ninguna de las dos queríamos rendirnos en aquel momento. Con determinación, volví a levantarme de aquel piso, y conjunto a Gabriela volvimos a atacar a la kamelot.


    -¡TOMA ESTO KAMELOT! -gritamos al mismo tiempo, que dábamos un salto para llegarle mejor-


    -No funcionara -decía con arrogancia, mientras nos esperaba con aquellas velas listas para penetrar nuestra piel-


    A lo lejos se escuchó una secuela de disparos, pero no se sabía de dónde venían, cuando estuvimos a centímetros de la noah menor, un serie de piedras comenzaron a atacarla, desviando su atención de nosotras, siendo el momento perfecto para que Gabriela y yo pudiéramos darle con toda nuestra fuerza, tirando al piso lleno de escombros con la cara volteada y marcada por las cadenas y el látigo de cuero. Ambas retrocedimos un poco al verla tirada en el piso, esperando que se levantara; Por mi parte buscaba con la mirada de donde habían salido aquellas piedras, pero no encontré nada pues mi mente se ocupada demasiado en ver la reacción de la kamelot.


    Lila por otra parte sonrió al darse cuenta que le había dado a aquella noah, haciendo que sus amigas pudieran atacarla tirándola en el frio piso con una leves heridas, pero lo suficiente como para dejar inconsciente a un humano cualquiera, el problema era es que ella no era un humano normal, así que observo como ambas retrocedían esperando que la chica reaccionara de alguna manera, pero el tiempo pasaba volviéndose largos minutos en donde no daba rastros de signos vitales, y eso era preocupante de igual forma nada podían hacer solo esperar que ella reaccionara, pues escapar no era una opción seguían rodeadas de akumas, esperando ordenes de la inconsciente chica.


    Una ráfaga de viento rozo nuestros frágiles cuerpos, y antes de que pudiéramos decir algo al respecto por la tardanza de la chica, 4 de aquellas punzantes velas ya las teníamos incrustadas en nuestro cuerpo haciéndonos caer a Gabriela y a mí al piso, nuestros gritos no se hicieron de esperar ante el dolor de las heridas. Road se encontraba muy molesta, se notaba en su morada perdida, la seriedad en su rostro y la sed de sangre que ella emanaba era agobiadora, supe en aquel momento que no viviríamos para contar eso, pero yo en ningún momento me arrepentiría de mis actos y estoy segura que las demás tampoco, suspire largo, suave y con dolor intente reincorporarme, pero era imposible estaba cansada, no podía más, solo quedaba esperar el golpe final.



    -Se arrepentirán de todo lo que hicieron, y por sobre todas las cosas, su arrogancia malditas humanas, espero que estén listas para morir...porque no saldrán de aquí con vida -susurra con molestia, mientras sus ojos destilaban odio puro, sus manos se movían con desesperación. Sin pensarlo dos veces la chica rodeo a las tres de nuevo con todas las velas que podían y con todos lo akumas a su disposición, sin tardan un segundo más, dio la orden de disparo, pero algo paso, aquellos ataques nunca llegaron.


    Nunca pensé terminar de aquella manera, mire a Gabriela quien estaba tan herida como yo, se encontraba tan débil que apenas podía ver a la chica frente a ella, observaba como aquellas armas estaban incrustadas en su piel, impidiéndole hacer movimiento alguno, su cara de frustración se notaba a lenguas, y no era para menos pues yo me sentía de aquella misma forma, apreté mis manos y como pude intente tomar las mano de Gabriela para darle fuerza en aquel momento, yo solo pedía en aquel momento que lila no viera lo que la noah menor nos haría, pues no deseábamos darle otro trauma a su juventud. Gabriela tomo mi mano apretándola con fuerza, esperando el golpe final, cerramos nuestros ojos.


    Pov Narrador


    Antes de que road pudiera dar el golpe final a aquellas tres chicas, la puerta inter-Dimensional que unía ese mundo con el otro se abrió de golpe, haciendo aparecer tres pequeñas luces de color verde las cuales viajaron rápidamente hasta encontrar a las jóvenes, fueron envueltas por una coraza cristalina impidiendo el ataque de la noah menor quien quedo impactada al ver como aquellos tres cristales protegían a las susodichas. No se podía ver lo que había dentro pues un humo de color verde claro impedía ver a las chicas dentro de aquel ataúd de cristal; Road mordía sus labios preocupada pues sabía que donde ellas se encontraban no eran simples cristales, nunca llego a imaginar que hubieran personas que pudieran sincronizarse con la inocencia en aquella dimisión, si dejaba que vivieran el conde se molestaría, y no sería para menos pues la balanza de los exorcista estaría de nuevo al favor de ellos, tenía que impedirlo.


    Road se preparaba para atacar con todo lo que tenía junto a los akumas alrededor, que habían aumentado su cantidad precisamente para destruir aquellos cristales, pero al momento que road daba la orden de ejecución 4 figuras envueltas en destellos verde salieron de aquellos grandes cristales, y con una agilidad increíble destrozaron todos los akumas que se encontraban cerca, incluidos los que no estaban también, dejando a la noah menor boca abierta ante lo que estaba presenciando. Una vez que las figuras hubieron eliminado todo akuma cerca y lejos, se elevaron por el aire conjunto a los grandes cristales, y con velocidad luz traspasaron en firmamento negro hasta llegar a la puerta de road donde cruzaron desapareciendo de la vista de la Kamelot.


    Tiky quien se encontraba del otro lado de la feria ya destruida, tiro lo que quedaba del cigarro restante para ver a todos los akumas ser destruidos por unas extrañas figuras, para luego desaparecer por la puerta de road de manera veloz sin que él pudiera reaccionar o hacer algo al respecto, pero de algo estaba muy seguro esas figuras y esos cristales que recién habían desaparecido, era innocencia, y al parecer había encontrado a sus portadores en este mundo, eso al conde no le iba a gustar, puesto que su pequeña travesura de viajar para destruir otros mundo había terminado dándole ventaja a los exorcistas en su mundo, así que por el momento era mejor retirarse, fue hasta donde se encontraba road, quien mordía sus labios con molestia sin dejar de ver la puerta por la que recién habían pasado aquellos cristales.


    - ¿Tu sabes que paso? -preguntaba Tiky curioso pues se veía que la kamelot menor sabía algo que el no-


    - No...pero por el momento es mejor que nos vayamos antes que el conde se dé cuenta de los que hicimos - Miente la chica, mientras en su mente pensaba en como remediar aquella situación, con paso lento abrió su puerta y la traspaso para desaparecer dejando a Tiky solo-


    - Vaya parece ser, que las cosas se pondrán más interesantes a partir de ahora -levanta su mirada hacia en oscuro firmamento mientras escuchaba el sonido de las ambulancia, policías, ect ect y antes de que pudieran encontrarlo traspaso la puerta para desaparecer al igual que road, solo que esta vez la puerta desapareció en frio piso nocturno sin dejar evidencias de que alguna vez, ellos estuvieron allí.


    Continuara...
     
    Última edición: 11 Julio 2020
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    Pues a mí me encanta tu fic <3

    ¡¿Las chicas Fueron enviadas al mundo de D gray-man?! ¡¡Me muero por saber que pasa!!

    Pero hablemos de la ortografía, faltas no vi muchas, lo que sí Maria te "comes" (por decirlo así xD) muchas tildes te daré un ejemplo arriba en el fic dice "mama" debería ser "mamá" en donde utilizaste bien "mama" fue en el "cáncer de mama" lo mismo pasa aquí

    -Jajá SIP! Fue hermoso maría, cada día me enamoro mas de el –sonrojada-
    Mas de "el" va con tilde

    Estas utilizando el guión corto, esta bien pero a veces confunde al lector, y no queremos que eso suceda ¿no?
    terecomiendo que utilices el guión largo (—) en vez de ello, confía en mí quedará mejor. Te daré un ejemplo:

    — No sabemos si es una trampa, pero sería nuestra única salida, ¡¡María no hay que pensarlo mucho!!— decía Gaby mientras miraba como los akumas comenzaban a prepararse para matarlas.

    Y también debes utilizar de forma ordenada los signos, te daré un ejemplo:

    -Que hacemos maría?! Estamos en graves problemas! –Mencionaba lila-

    Debería ser:

    —¡¿Qué hacemos María?! ¡Estamos en graves problemas!–Mencionaba Lila preocupada—

    Y recuerda que cada nombre al principio siempre va con mayúscula: maría es María, lila es Lila. En fin eso es todo lo que he notado...

    Pero que esto no te desanime Maria, todos pasamos por esto cuando empezamos... pero, poco a poco vamos mejorando y te apuesto a que ni te darás cuenta cuando seas tú quien este dándole consejos a otra persona para que aquella persona equis vaya mejorando.

    Espero la continuación de tu fic que me dejo metida desde el prólogo <3

    Besos... :3
     
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    Maria Luna Contrera

    Maria Luna Contrera Maria Luna Contrera

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    [Longfic] Destino Entre Dimensiones.
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    Drama
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    Capitulo III

    Dimensiones y Confusiones


    Pov Lila



    Desperté lentamente, mientras intentaba enfocar mi vista totalmente nublada, no me acordaba de nada, puesto que lo último que recordaba era la risa sádica de road mientras esperábamos que nos matara, después de eso un destello verde apareció frente a nosotras, y mis pensamientos se nublaron quedando en la nada; Con poca fuerza mire a mi alrededor y lo único que visualizaba era una espesa neblina que cubría todo, intente levantarme pero no podía mi cuerpo se encontraba completamente adolorido, las heridas se sentían más vivas que nunca, no tenía idea de cuanta sangre había perdido, me encontraba terriblemente débil, tenía que salir de allí y buscar a mis dos acompañantes, quienes se encontraban fuera de mi alcance.


    Con la poca fuerza que me quedaba, me impulse hacia delante para levantarme de aquel frio piso, pero al hacerlo mis manos chocaron con algo de textura vidriosa, pase mis manos por toda aquella lamina de cristal, dándome cuenta que estaba encerrada en una especie de ataúd cubierto de la neblina antes mencionada, la cual no me dejaba ver lo que había afuera, intente con todas mi fuerzas golpear aquel cristal con mis puños a ver si podía romperlo o al menos agrietarlo, pero por más que lo intentaba el ataúd no daba signos de siquiera tambalearse, suspire de frustración, pues ya no me quedaban fuerzas para seguir, y como mi último aliento grite con fuerza.


    -¡¡SEA LO QUE SEAS SACAME DE AQUI, TENGO QUE BUSCAR A MIS AMIGAS, ASI QUE SUELTAME!!...-grite con todo el aire que mis pulmones daban en aquel momento, instantáneamente en cuanto mi voz se silenció aquel ataúd se abrió dejándome libre pero tirada en el piso; Volví a mirar a mi alrededor y me di cuenta que ya no nos encontrábamos en la feria, si no que ahora estábamos en otro lugar, frente a mi estaban los dos ataúdes donde supuse que estarían Gabriela y María, suspire aliviada al saber que ellas dos estaban medianamente bien.

    Frio y oscuridad era lo que sentía a mi alrededor, la hierba debajo de mi estaba húmeda como recién regada, había mucha más neblina en el exterior que la que me cubría dentro de aquel ataúd, mi cuerpo temblaba por la falta de calor y al frio que hacía, me di cuenta que estábamos como en una especie de isla, y en medio de esta se encontraba una catedral muy grande, por la ubicación se notaba que no se habían dado cuenta de nuestra presencia pues estábamos dentro del bosque oscuro y espeso; Con paciencia me arrastre hasta donde estaban los dos ataúdes con las chicas adentro, me sostuve de ellos logrando ponerme de pie y poder ver dentro de ellos verificando que fueran ellas, confirmando con mis propios ojos que sus cuerpos se encontraban dentro.


    Con mis piernas temblando fui en busca de alguien quien pudiera ayudarnos dentro de aquel edificio, aunque si lo veía desde una perspectiva diferente aquella gran catedral tenia cierto parecido con la segunda sede de la orden oscura, pero realmente no le di mucha importancia pues tenía cosas más importantes en que pensar, y no estar soñando con tonterías, debía sacar a mis dos acompañantes de aquellas cosas que las tenían aprisionada. Llegue hasta la entrada encontrándome con una cantidad impresionante de lo que parecían ser murciélagos revoloteando, la soledad se hacía presente, y la neblina era mucho más espesas en esa parte de aquella edificación; Volví a mirar a mis alrededores en busca de alguien cercano a quien pudiera pedir auxilio, pero silencio era lo único que había, adolorida camine hasta la puerta sintiendo como la sangre se desbordaba de aquellas heridas profundas. Una vez que estuve frente a la gran puerta de madera, me recargue suavemente sobre ella dejando caer todo el peso de mi cuerpo sobre esta hasta llegar al piso, necesitaba descansar, hacer todo aquel recorrido había agotado todas las fuerzas que me quedaban.


    La siguiente en despertar fue María, quien se encontraba confundida, puesto que no veía nada a su alrededor, sus ojos al igual que había pasado con lila estaban cubiertos por una extraña neblina, poniéndola más nerviosa de lo normal, intento varias veces salir de lo que la tenía prisionera pero simplemente no encontraba manera ni forma de hacer tambalear o agrietar el ataúd de cristal, mientras luna hacia eso una débil Gabriela estaba despertando también encontrándose con el mismo panorama que su dos acompañantes antes mencionadas y con la poca fuerza que tenía intento salir de allí al igual que lo estaba haciendo María, ninguna de las dos se había dado cuenta que se encontraban juntas y mucho menos atrapadas en el mismo problema, por con siguiente siguieron concentradas en su labor pues por su mente lo único que pasaba era una rubia de ojos verdes.


    Al poco rato ambas chicas dejaron de intentar salir, puesto que les resultaba imposible hacerlo, su cuerpo no estaba del todo sano como para seguir, habían perdido demasiada sangre sus ojos desvariaban ante la falta de aquel líquido vital, lo único que les quedaba era esperar a que alguien las rescatara a ambas, y después buscar a las demás y por sobre todas las cosas rogar de que Road no estuviera allí, o en el peor de los casos que todo esto fuera parte de sus planes.


    Por otro lado, tras haber descansado unos minutos en la puerta de aquella catedral, lila recupero sus pocas fuerzas, y con ellas volteo su cuerpo con suavidad tocando con sus nudillos cubiertos de sangre, aquella puerta imponente que al momento de ser tocada se escuchó en todo el establecimiento el toque leve de la chica gracias al eco natural que había en el lugar; Pocos minutos pasaron cuando fue abierta la puerta de madera haciendo que el cuerpo de la chica callera con fuerza en el piso frio de porcelana dejando boqui-abierta a todos los residentes del lugar.


    Sentí cuando abrieron aquella puerta que de seguro era pesada, y tan pronto estuvo unos centímetros de abertura caí al frio piso del lugar, fue un golpe duro, me lastime la cabeza con tal fuerza que sentí como salía un poco más de sangre , llenando parte de este, escuches algunos sonidos y murmullos intente levantarme pero alguien me lo impidió, con fuerza tome la mano enguantada de la persona que me tenía, y suavemente masculle.


    - A...Auxilio, f...fuimos atacadas por una noah, yo y mis dos amigas estamos gravemente heridas, logre salir de aquel ataúd de cristal, pero mis acompañantes no, y están perdiendo muchas sangre, por favor ayúdenos -respiraba con fuerza tratando de enfocar mi vista, había olvidado por completo que las personas de mi mundo no sabían que era una noah, seguro me tomarían por loca, pero no importaba quería ayuda y la necesitaba pronto.


    - ¿En qué parte están tus amigas?, enseguida te ayudaremos, ¿Cómo te llamas? -Dijo la persona que me sostenía.


    -Escuche una voz muy familiar, una voz que sabía había escuchado en alguna otra parte, apreté la mano de la persona que sostenía mi débil cuerpo y enfoque mi vista con algo de sobresfuerzo y me encontré con un pelirrojo que tenía un parche en su ojo derecho mientras sonreía- Lavi....Bookman -susurre con suavidad y observe como su único orbe descubierto se abría impresionado.


    -¿Quién eres, y como sabes quién soy? -preguntaba curioso, y no era para menos pues una chica que jamás había visto en su vida sabía su nombre, quien era y por sobre todo aparecía herida frente a la puerta de la Orden Oscura-


    -Lavi, tendrás que preguntarle después, tenemos que conseguir a las otras dos acompañantes de la chica y ayudarlas antes de que mueran, luego las interrogaremos -Regaño otra persona al chico pelirrojo, y al escuchar su voz pude identificar que se trataba del Bookman mayor- Muy bien, dime ¿Dónde se encuentran tus acompañantes?


    - En el bosque, están atrapadas en lo que parecen ser dos ataúdes de cristal, yo me encontraba dentro de uno de ellos también, pero logre salir y poder venir aquí a buscar de su ayuda -hablaba pausada y débil mente, tome un respiro y seguí hablando- la noah que nos ataco fue Road Kamelot, puesto que Tiky mikk no apareció por ningún lado, el también la acompañaba -levante la vista encontrándome con la de bookman-


    -Bien, Allen, Kanda y Lenalee vayan a buscar a las chicas y tráiganlas aquí, no perdamos tiempo, tenemos que informarle a komui sobre esto, ¿Entendieron? -Ordeno-


    -¡Si, bookman! -respondieron el albino y la china, pues estaba tan débil que no me había dado cuenta de la presencia de ellos-


    -Tks, que fastidio, esto no es nuestro problema -escuche la voz aunque algo lejana de kanda, quien bufaba molesto por la orden del mayor-


    -Si una noah las ataco, algo deben tener para que estén aquí, así que no pierdan más tiempo -reclamo el panda, vaya para estar tan débil, aún seguía con mi humor negro pero ya no aguantaba mis ojos se cerraban-


    -Tengo sueño -dije con suavidad-


    - ¡Espera, no vayas a dormirte, oye! - fue lo último que escuche antes de caer desmayada en los brazos de bookman jr y perderme en los brazos de Morfeo, por lo menos sabía que estábamos en buenas manos-


    End Pov Lila



    Pov Narrador


    La joven rubia que había tomado lavi entre sus brazos cayo rendida ante el cansancio y las heridas, todos los que se encontraban en la puerta quedaron impresionados cuando aquella joven apareció de pronto en las instalaciones de la orden, la habían vigilado desde que los golems detectaron su presencia unos 10 mts antes de llegar a la puerta de al frente, todos pensaban que era un enemigo por su repentina aparición, pero cuando toco la puerta contando lo que le había pasado, llegaron a una conclusión de que era una simple chica más, hasta que dijo el nombre de lavi, pero al encontrarse tan débil no duro mucho despierta, pidió ayuda para ella y sus acompañantes, los cuales allen, kanda y lenalee salieron por órdenes del bookman a buscarlas dentro del bosque frente a la edificación, por otra parte, el pelirrojo estaba camino a la enfermería con el cuerpo de la desmayada chica, tenía muchas cosas que preguntarle, había cosas que no estaban muy claras y entre ellas era la procedencia de aquellas forasteras.


    Por otra parte, mientras lavi llevaba a la inconsciente chica a la sala de enfermeras, Allen, Kanda y Lenalee se encontraban caminando por el bosque en búsqueda de las dos chicas que faltaban, que por lo que le había dicho la rubia, estaban dentro de unos ataúdes de cristal, y se encontraban muy heridas, pero la interrogante era ¿Por qué road las había metido en un ataúd de cristal y luego dejarlas frente a la nueva orden?, ¿Que estaba planeando el millenario? , en eso pensaba Allen quien no debajo de ver hacia los lados, lenalee por su parte visualizaba cada parte del bosque en búsqueda de las chicas, de no encontrarlas utilizaría su inocencia, puesto significaría que el bando enemigo las encontró.


    - ¡Hey, moyashi! -masculla con fuerza kanda haciendo una leve seña con la cabeza a allen-


    - ¡QUE ES ALLEN, BAKANDA! -grita al albino con todas sus fuerzas y cara de poco amigos al escuchar aquel horrible sobrenombre- ¿Qué quieres?


    -¡Tks, como sea! Mira hacia delante, hay dos destellos verdes cerca del risco -comenta cabreado el japonés-


    -¿Destellos verdes?, ¿Serán los ataúdes? Allen -mira lenalee al peliblanco quien activaba su inocencia para acercarse con lentitud-


    - Es lo más probable, de seguro allí se encuentran las dos amigas de la chica, tenemos que sacarlas de allí rápido y tratar las heridas... -Responde el chico a la china quien no dejaba de verlo, esperando su respuesta-


    -Como sea, apúrense o nos mataran a todos aquí por su ineptitud -Pasa por el lado del albino, el japones molesto con mugen ya activa, y al llegar frente a los que parecían ser aquellos destellos verdes quedo congelado- tiene que ser una broma...


    -¡Oye, kanda, espéranos imbécil! -gritaba allen quien al llegar y estar al lado del nippones quedo congelado de igual forma- Esos, no son ataúdes de cristal...


    - Inocencia -murmuro una recién llegada lenalee al ver aquel gran cristal donde alguna vez también estuvo cautiva por su inocencia, observo manchas de sangre en el interior de estos, y como aquella extraña neblina cubría el cuerpo de las chicas- ¿Cómo es posible?


    -No lo sé, pero sea como sea tenemos que sacarlas de allí -responde el peliblanco-


    20 Minutos Antes


    Gabriela y luna habían estado un buen rato tratando de salir de aquel ataúd de cristal sin éxito alguno, ambas se encontraban ya muy cansadas, parte de su sangre estaba manchando el cristal, resignadas decidieron esperar que en algún momento alguien fuera a salvarlas, y de no ser así al menos morirían intentándolo, como pudieron ambas se recostaron de las paredes, volviendo a reanudar todo lo que había pasado tan solo hace unos segundos en la feria, aun no podían creer que Road Kamelot existiera al igual que Tiky Mikk era algo un poco increíble, pero eso solo podía significar que todos los demás existían, solo que no tenían idea de que el conde de milenio podía viajar entre dimensiones gracias a la ayuda de road, eso explicaba muchas veces la cantidad tan grande de akumas que este poseía, también significaba que las demás dimensiones, mundos entre otros se encontraban en total peligro, pues si al millenario le provocaba podía invadir todos aquellos universos y crear un caos lo suficientemente grande como para que todo deje de existir logrando así su objetivo de los 3 días de obscuridad que en la biblia tanto mencionaba, de una u otra forma tenían que avisarle a los exorcistas e impedir aquella catástrofe, pero...¿Cómo hacerlo?, ¿Cómo comunicarse a una dimensión donde solo road podía entrar y salir de esta a voluntad?, ninguna de ellas podía arriesgarse en intentar volver a buscar a la chica y entrar de manera obligatoria a su mundo, ¿Pero quién les aseguraba que no morirían en el intento?, muchas interrogantes y pensamientos pasaban por sus cabezas en aquel momento que no era el indicado, no sabían dónde estaba y menos aún si estaban vivas, ya que todo simplemente podía ser una ilusión de su alma.


    Sus pensamientos fueron interrumpidos por varias voces provenientes del exterior, unas las cuales se les hacían tremendamente familiar, cosa que parecía imposible, al menos que se encontraran en la casa de la pelinegra pero estaban casi seguras que no era así, con algo de dificultad ambas jóvenes cautivas intentaron apartar la cortina de humo que impedía su visión hacia el exterior; Lo primero que vieron al poder tener visión de donde se encontraban era que las dos estaban juntas, una al lado de la otra, suspiraron aliviadas de poder saber que estaban bien, ahora solo falta su rubia amiga. Lo segundo en que pudieron ver fue algo que las dejo fuera de base, frente a ellas se encontraban tres personalidades muy bien conocidas por ellas.


    -Yuu Kanda -mascullo con sorpresa la pelinegra al ver frente a ella la persona a quien más le tenía admiración, no podía creer que aquel hombre se encontrara posado frente su persona, de reojo miro a su pelirroja amiga quien estaba en el mismo estado de shock que ella-


    -Allen Walker, Lenalee lee -susurro aquella hermosa chica, pues frente a su persona se posado con esa elegancia que muy bien lo caracterizaba, el dueño de todas sus fantasías, sus mejillas blancas comenzaron a adquirir una leve tonalidad sonrosada, puesto que no podía ocultar sus sentimientos ante aquel personaje; También quedó impresionada al ver a la china allí posada, rezaba muy dentro de ella que el chico no pudiera ver como babeaba por él, creo que esa sería una de las virtudes de que estuviera encerrada en aquella prisión de cristal.


    Aquellos tres exorcistas quienes recién habían llegado al lugar, observaron dos figura dentro del ataúd, se podía medio visualizar el contorno de aquellas dos jóvenes que había descrito la chica anterior, los tres se miraron entre si puesto que no sabían una forma de cómo sacarlas de ese lugar, puesto que la única exorcista que sabía sobre eso era la china allí presente y por la expresión de su rostro, se notaba que no tenía idea alguna de que era lo que pasaba; Lenalee por su parte, intentaba recordar el cómo había logrado escapar de su ataúd de cristal aquella vez en Edo, pero tenía vagos recuerdos, en aquel momento su cuerpo estaba destruido por haber sobrepasado la sincronización de su inocencia, debía pensar en una solución pero mientras ella lo hacia Kanda y Allen rodeaban los cristales buscando manera de sacarlas de allí y de esa manera tratar las heridas que por lo que se observaba aquellas manchas de sangre que pintaban el cristal, tenían que ser profundas y si lo que la rubia había comentado cuando llego a la puerta de la orden era verdad, debían tratarlas con rapidez antes que perdieran más sangre de la que pudieran recuperar.


    Momento Actual


    Cada uno se encontraba sumido en sus propios pensamientos, puesto que mientras las chicas buscaban alguna manera lógica del como existía aquel mundo y sus habitantes, los exorcista determinaban algún método que ellos conocieran para lograr sacarlas de allí; La residentes de la otra dimensión no paraban de babear al verse frente a sus grandes ídolos de aquella serie que tanto admiraban, mientras que Gabriela adquiría un ligero tono sonrosado en aquellas mejillas blancas, María luna por su parte no dejaba de observa aquellos ojos rasgados del japonés frente al ataúd, ¿Cómo le iban a explicar a ellos de dónde venían? Y del como ellas lo conocían, ¿Cómo reaccionarían a su persona? ¿Las tomarían de enemigas o aliadas? Muchas preguntas y pocas respuestas.


    Allen y kanda rodeaban ambos cristales, podían fijarse que la visión dentro de este era muy poca, pues los cuerpos de las chicas estaban cubiertos por una neblina, que más bien parecía que estuvieran siendo sincronizadas, o de que alguna forma sus cuerpos entraron en alguna especie de invernacion, ¿Cómo demonios iban a sacar a las dos chicas de aquella prisión hecha de inocencia?. Los pensamientos de los dos generales fueron interrumpidos por un pequeño grito de la china detrás de ellos, captando su atención por completo.


    - ¿Te encuentras bien lenalee? -pregunta un preocupado inglés, quien se acercaba a la chica- ¿Paso algo?


    -¡Ya recuerdo! -grita feliz la chica que se acerca al ataúd- cuando yo quede atrapada en mi inocencia, fue porque ella me protegía de morir, al igual que está pasando con ellas dos, su inocencia las está protegiendo, cuando el cristal sienta que están en un lugar seguro, inmediatamente podrán liberarse -sonríe de manera dulce hacia el albino-


    -Aja, ¿Y cómo explicas que la rubia pudiera salir sin problemas? -pregunta kanda, quien no quitaba la vista de aquellos cristales-


    -No lo sé...te recuerdo que cada inocencia es un mundo, kanda -masculla con suavidad la china quien se acerca a ambos ataúdes, tocando a ambos con sus suaves manos- Quizás hay que hacer que entre en confianza con nosotros...


    -¿Y cómo haremos eso lenalee?, jamás le eh hablado a mi inocencia y mucho menos a una ajena -pregunta curioso el albino- no digo que sea imposible, solo que sería extraño hablarle a algo que no tiene vida.


    - Es allí donde te equivocas portador de la Clow cronw...


    De aquellos dos cristales, aparecen dos figuras, de contextura delgada, de un tamaño pequeño como la de un niño y cubiertos por un resplandor verde que impedía ver con más detalles sus cuerpos, notaron como se posaban de manera protectora frente a los ataúdes, verificando el estado de sus ahora usuarias, ante la mirada atónita de los exorcistas, puesto que las residentes solo podían ver las caras de impresión de los chicos, no sabían lo que estaba pasando allí afuera.


    -¿Qué demonios.....? -lanza kanda al ver aquellas dos figuras salidas de los cristales- ¿Quién demonios son ustedes?


    -Somos las inocencias de estas dos chicas, portador de mugen -menciona una de las inocencia frente a los exorcistas- como podrán ver, fuimos activadas ante los deseos de protección de sus corazones.


    - ¿Deseos de protección?, ¿Te refieres a sus deseos más profundos frente a la dificultad? -pregunta allen, quien tampoco despegaba su vista de aquellas personalidades-


    -Así es, por eso cuando estuvieron a punto de matarlas las protegimos -responde el otro ente-y las trajimos aquí, para que las enseñen a cómo utilizarnos.


    -Pues, hicieron bien...pero ahora lo que necesitamos es que las saquen de su prisión para poder curar sus heridas - sonríe el albino, quien se acercaba suavemente con la mano extendida hacia aquellas dos criaturas-


    -La inocencia se le queda mirando fijamente al joven albino, quien tenía intenciones de ir en paz con ella, toma suavemente su mano y con ello dice una última frase- Gabriela Gómez, es el nombre de la chica, yo soy su inocencia Roses Of Blood espero que volvamos a vernos portador de Clown crown -Desaparece en una nube, después de tomar la mano del chico; En ese preciso momento se abre el ataúd dejando libre a la chica frente al albino, esta se encontraba dormida y se podrían apreciar sus heridas graves, Allen la toma suavemente cargándola como princesa, detallándola de arriba a abajo, quedando impresionado con la extrema belleza que la chica poseía, jamás en su vida había visto un cabello tan rojo como el de ella-


    -Bien, ya tenemos a una, falta la otra...-ve a sus otros dos acompañantes-


    -Lenalee se acerca al otro ataúd con la mano extendida- Necesitamos curar las heridas de tu usaría, te prometo que la cuidaremos muy bien -sonríe con esa dulzura característica-


    -Tranquila, sé que estará en buenas manos con ustedes...María Luna Contrera es el nombre de mi usuaria, yo soy su inocencia Divided chains espero que nos volvamos a encontrar portadora de Dark Boots -se inclina suavemente y toma la mano de la chica pero antes de desaparecer ve a kanda- Portador de mugen, a partir de este momento tu destino esta sellado...-una vez que termino aquella frase desaparece en una nube de humo dejando a kanda algo ido por el comentario; Lenalee al ver como aquella prisión se abría tomo a la chica con rapidez al ver que también se encontraba desmayada.


    -Bien, ya las tenemos, volvamos a la orden antes que sus heridas empeoren -sonríe lenalee-


    -Tks, al menos no creo que sean inútiles -camina frente a los dos chicos para perderse en la oscuridad del bosque, mientras era seguido por el albino y la china-



    1 Semana después

    Black Orden

    Sala de enfermeras 10:50 am

    Junio 21-Siglo IXX



    Había pasado una semana, desde que las chicas llegaron a la orden, siendo atendidas a tiempo completo por la enfermera en jefe y sus ayudantes, la gran mayoría de sus heridas se encontraban en un mejor estado a comparación a como estaban anteriormente, eran visitadas constantemente por los miembros de la orden, para verificar su estado de salud, puesto que aunque había pasado una semana y sus heridas mejorando las jóvenes chicas aun no despertaban de su letargo, su estado era muy débil, debido a la cantidad de sangre que habían perdido en su batalla con la Noah del sueño. Komui eran quien se encontraba más interesado por el estado de las jóvenes y por sobre todas las cosas debía preguntarles cómo fue que llegaron a la orden, también quería saber sobre sus Inocencias, necesitaba disipar aquellas dudas, antes de que el vaticano se metiera en el asunto, tenía que protegerlas de que fueran objetos experimentales, ya que las tres al igual que lenalee podrían contener una sincronización de tipo cristal con las denominadas inocencias las cuales se presentaron frente a sus exorcistas.


    Por otro lado, aquellas viajeras podrían ser usuarias de la Inocencia "Corazón", y ser objetivos del conde, y si era de esa manera tenían más razones para protegerlas de la familia de los noah incluso del mismo Secretario Lverrie, puesto que si lo conocían bien podrían hacer experimentos con las chicas, no solo por contener esa inocencia, si no por llegar de manera única, la otra posibilidad también erradicaba en que fueran unas simples inocencias de tipo cristal, las cuales estaban protegiendo a sus usuarias como había pasado con lenalee anteriormente; Estos y muchos más pensamientos eran los que pasaban por la mente de Komui Lee, puesto que desde que habían llegado aquellas chicas estaba preocupado y no solo el, incluidos estaban los exorcistas. Esa misma mañana, del 21 de Junio despertó de primero en aquella gran sala de enfermeras la rubia menor, quien para alivio de las residentes esta se encontraba mucho mejor.


    Pov Lila​



    Había despertado un poco aturdida, ya que no sabía dónde me encontraba, lo único que podía ver a mi alrededor eran paredes blancas, y un intenso olor a medicina, supuse que me encontraba en un hospital, o clínica; Como pude me levante de aquella camilla para poder visualizar mejor en donde estaba ubicada, note que Gabriela y María estaban frente de mí, siendo tratadas al igual que yo, tenían vendajes y una vía que pasaba los nutrientes necesarios para sus cuerpos para que se pudieran recuperar de aquellas heridas, suspire de alivio al saber que nos encontrábamos bien, pero ¿Cómo fue que llegaron allí? Tenía recuerdos muy borrosos de lo que había sucedido, lo último que vi antes de perder la conciencia fue a un pelirrojo, uno que conocía a la perfección ...¡Ya recordaba!, ese era Lavi quien la había salvado, ¿Pero cómo demonios había llegado a encontrarse con él?, se supone que estaban en una feria, con Road y Tiky, ¿Acaso, las llevarían a su universo?, de ser así, ¿Que ganarían trayéndolas a un mundo como este?, mis pensamientos eran muy variados, pero se vieron interrumpidos cuando una de las enfermeras apareció en la habitación.


    - Despertaste, que alivio...-sonríe la chica- Tu heridas eran muy profundas y perdiste mucha sangre, gracias a dios pudimos intervenirte a tiempo.


    - La observe fijamente mientras esta revisaba mis vendajes y la solución que pasaba por mi brazo- ¿Cuánto tiempo dormí?, ¿Dónde estoy? -pregunte curiosa-


    - Te encuentras en la Orden Oscura, llegaste a nuestra puerta hace una semana pidiendo ayuda para ti y tus acompañantes, pues habían sido atacadas por uno de los integrantes de la familia noah - terminaba de hablar llenando lo que parecía ser un informe- El joven Lavi fue quien te trajo aquí...


    - Espera un momento, ¿¡Tenemos aquí una semana?!, -caí en cuenta lo que había dicho la chica tan solo unos segundos atrás- ¿Lavi?, ¿Te refieres al aprendiz de bookman, el que tiene un parche en el ojo, risueño y de un carácter alegre?, ¿Estamos hablando del mismo chico?


    -Pues sí, esa misma señorita Rodríguez -me sonríe con extrema dulzura- viene todos los días, junto con el joven Walker y la señorita lee a verlas a ustedes, estaban muy preocupados por su salud. - termina de completar el informe médico, pero lo que más me dejo en estado de shock, era que aquella enfermera sabia mi apellido, ¿Cómo era eso posible?


    -Puedo preguntar...¿Cómo es que sabe mi apellido?, no recuerdo habérselos dicho, ¿O sí?, al menos que lo dijera de manera inconsciente -pregunto un poco curiosa, sin dejar de ver el rostro de aquella chica que me atendía -


    - En el bolso que traías, tenías una especie de tarjeta pequeña la cual rezaba tu nombre, apellido y fecha de nacimiento, es por eso que conozco tu apellido, al igual que el de las señoritas Gómez y Contreras -señala con la mirada a mis dos amigas frente a mí- le diré a komui que venga a verte dentro de poco, quiere hacerte una serie de preguntas, ¿De acuerdo? -me advierte suavemente terminando de realizar su rutina-


    -Asentí suavemente mientras observaba como la chica se retiraba de la sala de enfermeras, lance un suspiro y con una suave voz llame a mis amigas para saber si se encontraban despierta o aun inconscientes- María ...Gabriela...-Nada ninguna de las dos hacia alguna señal, tal vez me tocaba esperar-


    End Pov Lila


    Pov Gabriela



    Sentía mi cuerpo pesado, intente moverme un poco para poder saber dónde estaba, puesto que lo único que recordaba era ver a cierto albino frente a mi hablando con otras dos personas que conocía a la perfección, después de eso mis ojos se cerraron y no supe más nada, sino que ahora me encontraba en algún lugar, pero no sabría describir donde ya que mis parpados aún estaban muy pesados como para abrirse, tenía que hacer un esfuerzo sobre todo por lo que había pasado, no debía tener la guardia baja; Con dificultad abrí lentamente mis orbes mientras buscaba enfocar mi mirada grisácea, cuando logre realizar aquella acción me di cuenta que me encontraba dentro de una habitación de color blanca, también pude sentir un inmenso olor a medicina, muy característico de un hospital, me removí entre las sabanas que me cubrían descubriendo que también tenía una vía pasando por mi brazo, estaba vendada en lo que parecían ser aquellas heridas punzo penetrante otorgadas por la Noah del sueño, Road.


    Estaba completamente perdida, ¿Qué era lo que había ocurrido? ¿Acaso era un sueño?, tal vez pero el estar vendada y dentro de un hospital me hacía creer que todo fue muy real; Debía llamar a mi abuela y comentarle donde me encontraba para que viniera por mí, pero antes que todo...¿Dónde estaban lila y María?...¡Cierto, lila!, teníamos que encontrarla, también a María, seguro su estado era similar al mío. Me levante de golpe de la camilla sintiendo mis huesos crujir, lance un pequeño gemido de dolor, estando en esa condición no podría ir a buscar a mis dos amigas, suspire de frustración, de repente una voz conocida capto mi atención.


    - No te apresures, Gabriela...estamos bien.


    -Levante suavemente mi mirada grisácea y para mi alivio frente a mí se encontraba en la otra camilla de aquella habitación lila, quien estaba igualmente vendada de pies a cabeza- Lila...estas bien -susurre-


    - Pues obvio, ¿Acaso crees que moriría tan rápido y fácilmente, Gómez? - Dice con aquella risa tan característica de su personalidad hiperactiva-


    -Obviamente no querida Rodríguez -vuelvo a realizar aquel gesto dulce mientras mis labios se curvean suavemente mostrando un sonrisa de tranquilidad, con lentitud volteo la mirada para observar mejor la habitación y al hacerlo me encuentro a María profundamente dormida siendo atendida de la misma manera que lila y yo, ante eso surge una pregunta- ¿Cómo fue que llegamos aquí? -digo con voz alta-


    -Te lo resumo -miro fijamente a lila quien se prepara para decirme que era lo que había pasado mientras estábamos inconscientes- Las tres fuimos atrapadas en lo que parecía ser tres ataúdes de cristal yo me las arregle e ingenie para poder salir, pero no sabía cómo sacarlas de allí, así que fui por ayuda, llegue hasta la puerta de una gran institución, ante la debilidad hice lo posible para tocar la puerta esperando ser escuchada por los residentes del lugar, puesto que apenas se escuchaba el golpe de mis nudillos ensangrentados, pero gracias a dios , las personas dentro del establecimiento pudieron escucharme y abrieron las puertas, explique lo que estaba ocurriendo, no sabía con exactitud a quien le estaba explicando lo que decía, hasta que un anciano hablo, y curiosamente pude reconocer su voz conjunto a las demás, resulta que la persona estaba sosteniéndome era nada más y nada menos que lavi, fue allí donde mi brillante mente termino de irse por el caño, al igual que mi lógica, pero no todo termina allí, todo fue peor cuando pude notar que Bookman le había ordenado a Allen, Kanda y Lenalee que fueran por ustedes, después de que el "panda" dio aquella orden, no supe más nada, todo se volvió oscuro supongo que me desmaye, hasta hace poco que me levante y fui atendida por una de las enfermeras de aquí, me dijo que Komui vendría a hacernos unas preguntas más tarde...eso es todo lo que paso -Termina aquel relato, que parecía más un fanfic que una realidad, por mi parte no dejaba de verla fijamente buscando algún síndrome de locura en ella, pero no lo había, era imposible que fuera otra de sus historias inventadas-


    - ¿Me estás diciendo que estamos en el mundo de D Gray-Man?, lila - Preguntó esperando alguna respuesta negativa-


    - Pues por los aires que soplan y por todo lo que ha ocurrido, si...estamos dentro del universo de D Gray-man -responde con seriedad, solo característica de ella cuando algo era verdad-


    - Eso quiere decir, ¿Que no fueron ideas mías cuando vi a allen fuera del ataúd estando yo atrapada? -susurre un poco incrédula por la situación-


    - No, no fueron ideas tuyas, ese era Allen Walker el único y original, créeme que estoy en las mismas que tú, sé que road maneja los universos paralelos a su antojo pero, ¿De qué sirve habernos traído hasta aquí?, no tiene mucho sentido - responde con inquietud, buscando alguna respuesta -


    -Tal vez no fue road lila, quizás paso algo como por ejemplo esos ataúdes de cristal que salieron de la nada, y donde quedamos atrapadas, ¿Cómo fue que terminamos allí dentro?, que yo recuerde lo último que ocurrió en nuestro mundo era que ella estaba por darnos el golpe final - susurre con suavidad, mientras pasaba mis manos por los vendajes de mi cuerpo- Esos ataúdes, fueron quienes no salvaron la vida, y por lo visto también los que nos trajeron aquí.


    - Si pero, ¿Con que propósito lo harán?, no veo razón ni necesidad de traer a tres chicas de otra dimensión hasta aquí, no seriamos de utilidad en nada gabriela, recuerda que en este lugar están en medio de una guerra, donde solo los elegidos pueden participar, y estoy segura de que no somos parte de ellos -bufa algo molesta e incómoda por la situación- Solo seriamos un gran estorbo.


    -No estoy muy segura de eso lila -Una tercera voz resuena en toda la habitación captando la atención de ambas-


    - ¡María! - Gritamos lila y yo al mismo tiempo, al ver nuestra pelinegra amiga reincorporarse en la cama al igual que nosotras-


    End Pov Gabriela



    Pov Maria Luna



    Voces, era lo que escuchaba aunque algo lejanas, podía reconocerlas pero me encontraba muy débil en aquel momento como para poder levantarme, debía hacerlo, ya que necesitaba respuestas de todo lo que había pasado en ese momento, ya que lo último que recordaba en mi memoria, era a allen, kanda y lenalee hablándonos o eso parecía, después de eso todo se volvió completamente oscuro; Con mucho esfuerzo y dificultad comencé a moverme sobre la cama, y justo en aquel momento que mis sentidos estaban volviendo en sí, lila estaba explicando todo lo que paso mientras estuvimos inconsciente a gabriela, que para mí alivio se encontraba bien. Fue allí donde recapitule todo en mi mente puesto que curiosamente estaba observando aquel capitulo en la casa, lo que nosotras estábamos llamando "Ataúdes de cristal" era nada más y nada menos que la famosa inocencia, y no cualquier tipo, ya que se había presentado en su forma cristal, una de las más nuevas e incomprendidas, solo una persona en la orden la tenía, o bueno mejor dicho dos, los cuales eran Lenalee y Kanda; Todo apuntaba a que nosotras éramos compatibles, aunque era algo muy ilógico, ¿Tres chicas de una dimensión distinta sincronizadas con una magia divina? , parecía más una broma que una realidad, de igual forma debíamos ser revisadas por la guardiana de las inocencias Hevrasca, era ella quien tenía el juicio final de todo aquel caos. Cuando lila hubo terminado su explicación, fue cuando hable llamando su atención.


    -No estoy muy segura de eso lila - resonó mi débil voz por toda aquella habitación-


    - ¡María! -exclamaron con alegría mis dos acompañantes al fijarse que me encontraba en perfecto estado, o al menos parte de este-


    -Hola chicas -sonrió suavemente- que bueno verlas, sobre todo después de todo aquello que pasamos


    -Sí, es gratificante saber, que todas estamos bien, y vivas después de lo que ocurrió -sonrió feliz lila, mostrando sus hilera de perfectos dientes blancos y radiantes-


    -Muy cierto -comenta gaby con su característica timidez y dulzura- por cierto, ¿A qué te referías, con que no estabas segura de lo que había dicho? -preguntó retomando el tema que habíamos olvidado-


    -Pues...que aquellos ataúdes de cristal que menciono lila, no son cualquier cosa, eso que nos mantenía prisioneras es inocencia, ¿Acaso no lo recuerdas, gabriela? -le respondo y al mismo tiempo lanzo aquella pregunta-


    -Ahora que lo mencionas, tienes razón, había olvidado que la inocencia tenia aquella forma, entre todo lo que paso, no tuve tiempo de analizar a mi alrededor y menos lo que me tenía cautiva -comenta con suavidad, tomando su barbilla mientras hablaba-


    - ¡Cierto! ¿Cómo pude ser tan imbécil y no darme cuenta de aquello? -grita lila molesta, quien cruzaba los brazos al darse cuenta de su pequeño error - Demonios...tanto cerebro y cuando más lo necesitas no sirve para media mierda...


    - Lila por favor, el vocabulario -regaña suavemente Gabriela a la más pequeña del grupo- Además no tienes por qué culparte, con todo lo que ocurrió apenas pudiste tener fuerza para pedir ayuda, incluso yo aún proceso en la situación en la que estamos, no todos los días te enteras que Road Kamelot y Tiky Mikk existen .


    -Gabriela tiene razón lila, no tienes por qué culparte...son solo cosas que pasan y más estando tu vida en peligro -sonrió dulcemente al verla realizar un tierno puchero-


    - Bien, dejando eso de un lado...¿Significa que somos compatibles con la inocencia? - pregunta directamente sin más la pequeña-


    - Es una posibilidad, tendríamos que ser examinadas por la guardiana -respondo con seriedad, mirando a mi alrededor detallando cada cosa que se cruzaba en mi mirada- por cierto...¿Se dieron cuenta que estamos en la Black Orden, y respirando el mismo aire que nuestros ídolos verdad? -lanzo aquel comentario ramdon-


    Silencio, fue lo que se presenció en aquella gran sala, después de que había hecho mi comentario, sabía que eran despistadas pero no pensé que para tanto, ¿Enserio esos dos seres no se habían dado cuenta que nos encontrábamos donde siempre soñamos estar?, reí al saber que tenía dos amigas bastante caídas del árbol, las volví a observar fijamente para ver sus reacciones haciéndome reí mucho más que antes; Gabriela estaba adquiriendo un color más rojo que su cabello en sus mejillas mientras que por otro lado, lila tapaba suavemente su rostro, supongo yo que recordando que estuvo a centímetros del Bookman Jr, yo tampoco me quede atrás, jugaba suavemente con mis manos al recordar aquellos hermosos ojos rasgados que tenía Kanda, era un sueño hecho realidad, pero como todo tenía un final, y la interrogante ante eso era...¿Cuál sería el desenlace de esta historia?.


    Después de lo ocurrido los comentarios fueron tan altos que llamamos la atención de los residentes de la sala de enfermeras, quienes al vernos despiertas a mí y a Gabriela procedieron a realizarnos un chequeo médico, así como habían hecho con lila anteriormente, una vez que culminaron este y verificaron nuestro estado de salud, fueron inmediatamente a informar al Supervisor Komui, quien aún no bajaba de su oficina; Sabíamos a la perfección que todo aquello era para interrogarnos y preguntar qué era lo que había ocurrido con nosotras, y por su puesto parte de esas preguntas serian referente a la inocencia donde estuvimos atrapadas al llegar.


    Al poco rato, apareció por el lumbral de la puerta el Supervisor quien mostraba un característico golpe con forma de bota, ya me hacía más o menos las idea de lo que paso en aquella oficina, detrás de el para nuestra sorpresa se encontraban los cuatro exorcista más característicos de la orden oscura, Allen Walker, Lavi, Lenalee lee y por último el malhumorado Yuu Kanda, que como era natural mostraba un humor no muy agradable, los cinco procedieron a posicionarse en distintas partes de la sala, Komui tomo asiento en medio de las tres camillas mientras que por otro lado, lenalee se posaba junto a allen y lavi quienes estaban a unos paso del chino mayor, por su puesto kanda recostado en una pared alejado del grupo, y no voy a mentir...se veía de maravilla, tenía que controlar mis impulso de hacer alguna idiotez en aquel momento, mordía suavemente mis labios para contenerme, por otra parte Gabriela jugaba con sus dedos debajo de la sabanas, mirando de reojo al peliblanco y lila simplemente era lila, adoraba a lavi pero sabía controlar sus sentimientos mejor que nosotras dos, ¿Irónico, no? La más pequeña del grupo mantenía mejor a raya sus hormonas que las dos mayores; Dejando eso aun lado, una vez que todos se posicionaron, el joven supervisor comenzó a hablar.



    End Pov Maria Luna



    Pov Narrador

    Al llegar el grupo de exorcista, cada uno detallaba a su manera a las extrañas visitantes, ya que en la forma que aparecieron fue un poco extraña, y por sobre todo necesitaban eliminar las dudas que fueran enemigas, aun por lo que contaban de que fueron atacadas por la familia noah, también por las extrañas inocencias quienes se presentaron frente a los exorcistas alegando estar sincronizadas con ellas, habían muchas razones por las cuales no dejaban de mirarlas su sola presencia era un misterio para todos los de la organización. El supervisor carraspeo su garganta con suavidad, llamando la atención de todos los presentes para empezar a hablarles.


    -Muy bien, ya que todos los involucrados del incidente estamos presentes, sería bueno que nos presentemos para entablar confianza, ¿De acuerdo?, Empezare yo primero...Soy Komui Lee, tengo 28 años y soy Jefe supervisor de la Orden Oscura Central, es un placer y gusto tenerlas aquí presente señoritas -Sonríe con un calidad sonrisa, sin dejar la seriedad del momento, aunque la patada en su cara no lo ayudaba mucho en ese momento-


    -Un placer, mi nombre es Lila Rodríguez, tengo 15 años de edad, voy a la universidad y estudio turismo -se inclina suavemente sonriendo con alegría, mientras observaba de reojo al joven pelirrojo que se encontraba observándola detalladamente de igual forma-


    -Buenas noches, mi nombre es Gabriela Gómez, tengo 18 años, y al igual que lila estoy en la universidad cursando la carrera de Publicidad, es un gusto estar aquí frente a ustedes -responde con ternura, mientras pasa una mecho de cabello por su oreja, mostrando levemente su sonrojo el cual hacia que se viera tierna, captando la atención de cierto peliblanco-


    - Soy Maria Luna Contrera, tengo 18 años al igual que gabriela, estoy en la universidad y curso la carrera de Diseño Gráfico, es un honor tenerlos al frente, también me siento agradecida por habernos ayudado y mis dos acompañantes seguro comparten el mismo sentimiento que yo -observa a todos los presentes, inclinándose con suavidad, sin dejar de ver al supervisor quien emitía un aura de completa confianza como era de costumbre-


    -El gusto es de todos nosotros, no tienen por qué agradecer la ayuda, somos una organización que protege a la humanidad está en nuestro deber -le responde a maría con firmeza pero sin dejar aquel lado amable- Bueno, ya que se culminaron las presentaciones, me gustaría saber ¿Cómo fue que terminaron en este lugar tan apartado de la civilización? Como verán no es sencillo llegar hasta aquí, podrán ver que es un centro militar, así que está bastante oculto. -Comenta mientras coloca sus manos entrelazadas frente a su cara esperando la respuesta de las viajeras- Quisiéramos cerciorarnos que no son nuestras enemigas o parte de ellos.


    -No se preocupe, no somos parte de la familiar noah, y si sabemos quiénes son, sabemos dónde estamos, quienes son ustedes entre otras cosas, lo único que no podemos explicar es el cómo llegamos hasta aquí joven lee -Responde Gabriela seriamente como si fuera una reunión ejecutiva-


    -Como vera, no somos simples chicas, venimos de otro lado, para ser más específicas de otra dimisión adversa a esta, por esa razón conocemos a la perfección todo lo que ocurre aquí, lo único que se escapa de nuestras manos es el propósito de nuestra estancia en este lugar -Explica María al supervisor-


    - Lo único que podemos decir con certeza, de toda esta situación, es que fuimos atacadas en nuestro mundo por road y tiky, bueno más por la primera que por el segundo, ya que no hizo presencia alguna, de igual manera intentamos mantenerlos a raya sabiendo que no teníamos las capacidades para hacerlo, road aprovecho esa debilidad de nosotras para acorralarnos y darnos el golpe final, pero antes de eso una luz verde cegó nuestros ojos o en mi caso paso eso, y terminamos encerradas en los ataúdes y frente a la Organización - resume de manera rápida lila, quien estaba cruzada de brazos de manera seria-


    - Me cuesta cree un poco que no son de aquí, pero dado que los poderes de Road son fuertes y únicos, es creíble en cierto modo su historia, lo que no entiendo es ¿Que hacia road en una dimensión distinta? , lo otro es...¿Como saben ustedes tanto sobre nosotros?, por lo que dijeron, es extraño que tenga conocimiento de este lugar. -Alza la ceja sin dejar de mirar a las tres chicas, esperando que contestarán sus dudas e inquietudes-


    -Lo de Road lo desconocemos completamente, aunque tenemos una ligera idea, pero no estamos muy segura sobre eso - Le responde la rubia al chino-


    - Por otro lado, nuestro conocimiento no es que sea del todo perfecto, tenemos limitantes, digamos que sabemos cómo tal lo básico de cada cosa, y lo poco que conocen ustedes, aunque hay ciertas cosas que sabemos más que otras, realmente me gustaría compartir la información, pero no estoy segura que sea buena idea, podríamos alterar el orden de las cosas - coloca su mano en su barbilla pensando seriamente sin decirle o no al chino todo lo que ellas saben-


    - No es buena idea, Gabriela, el alterar el espacio tiempo puede traer consecuencias futuras, o poner la balanza hacia el lado del enemigo, es mejor no decir nada por el bien de todos - Riñe María luna a su amiga, al verla dudar sobre eso- Espero entienda que solo queremos mantenerlos a salvo, incluida nosotras, por ahora solo queremos concentrarnos en como volver a casa.


    - Bien, es mejor que mantengamos esto en secreto del resto, podría ser perjudicial si es como lo dicen ustedes -komui relaja su expresión al saber que tenía información que podía ser necesaria en el futuro, era mejor no presionarlas a hablar por ahora- bien, con el tema de su regreso creo que será complicado por el momento, primero que nada debemos confirmar que no son portadoras de inocencia, por lo que ocurrió allá afuera es mejor salir de dudas, después de eso verificaremos cómo hacer para que vuelvan.


    - Dudo un poco nuestra compatibilidad, pero de ser lo haremos todo lo posible para ayudarlos a combatir en esta guerra -sonríe la pelirroja con ternura-


    - ¡Tks!, esto es ridículo, aparte de que saben demasiado, planeas reclutarlas a la organización, ¿Que carajos pueden hacer tres niñas que no saben defenderse solas? -Riñe kanda con molestia hacia el supervisor-


    - Kanda, basta...ellas no tienen la culpa de haber sido arrastradas hasta aquí, por lo menos están dispuestas a luchar en una guerra a la cual no pertenecen, creo que los injusto somos nosotros al tratar de obligarlas a quedarse -responde lenalee ante la riña del japonés, quien al verla se calma un poco-


    - Tienes razón Lena, pero no quita el hecho de que siguen teniendo conocimiento sobre nosotros y nuestro enemigos, en cualquier momento pueden pasarse de bando si lo desean - responde un preocupado lavi ante la situación que se presenta- llega hasta ser sospechoso todo esto...


    - Lavi, ellas misma acaban de aclarar que su conocimiento es limitado, además por lo que veo no creo que tengan intenciones de unirse al conde, ya que intentaron proteger su mundo sin importarles sus vidas, no creo que unas enemigas hagan tal cosa - Defiende allen a las chicas de las acusaciones del japonés y el bookman Jr-


    - Créanme cuando decimos que nuestra Fe está en la orden y no en el conde chicos -observa María luna a los exorcistas presentes- de ser compatibles, lucharemos a su lado hombro a hombro, no queremos que el conde gane le guerra y que nuestro mundo también se vea afectado por ello.


    - Bueno, dejemos descansar a las chicas, ustedes tiene misiones que realizar e inocencias que buscar...mañana hablaremos mejor ya es tarde -sonríe el supervisor bajando toda aquella tención-


    -De acuerdo -Responden todos menos kanda, y empiezan a retirarse de la habitación dejando a komui solo con las chicas-


    - Yo realmente, quisiera que no fueran parte de esta guerra, tan solo son una niñas y sobre todo no tienen por qué hacerlo, si no son de aquí...¿Por qué arriesgarse por personas que no conocen? -murmura al chino hacia las tres viajeras-


    - Porque es de humanos ayudar a otros, hoy por ti...mañana por nosotras, tómalo como agradecimiento por salvar nuestras vidas joven lee -sonríe suavemente Gabriela- porque la inocencia que ustedes tanto odian, salvo a estas tres forasteras.


    - Es nuestro pago, aunque lo hacemos más por gusto que por una simple obligación -comenta la pelinegra- así que no te preocupes, descansa y hablaremos de esto en la mañana... Pero no tan temprano, soy mala en las mañanas...


    - ¡Oh sí! ¡Eso es cierto!, es algo que no cambiara aunque viajemos al resto de universos paralelos -grita la rubia feliz, mientras muestra su blanca hilera de dientes-

    -El supervisor ríe ante las ocurrencias de las chicas, y se inclina suavemente- Gracias, de ante mano por venir a ayudarnos...


    -Ya te dije, esperemos a ver si somos de ayuda, no queremos que se decepcionen de nosotras -Mira tiernamente al supervisor, pues sabía todo lo que estaba pasando en aquel momento debía ser duro para el en este momento-


    -Tienes razón, descansen...hablaremos mañana, que pasen buenas noches -se despide cordialmente, algo completamente fuera de lugar de él, y pasa a retirarse de la habitación, dejando a las tres bajo el cuidado de las enfermeras del lugar-


    Después que todos se retiraron, las chicas procedieron a dormir, porque sabían que a partir de aquel momento las cosas se pondrían más interesantes, debían aprovechar al máximo su estadía en aquel lugar que habían estado soñando por años, y de ser compatibles completaría todos sus anhelos, así que sin prisa, procedieron a dormir en aquellas cómodas camas, esperando despertar y que nada de lo que había ocurrido fuera una ilusión...al parecer que fuera road a su mundo no fue tan malo después de todo.


    Continuara...
     
    Última edición: 11 Julio 2020
  6.  
    Maria Luna Contrera

    Maria Luna Contrera Maria Luna Contrera

    Escorpión
    Miembro desde:
    21 Febrero 2016
    Mensajes:
    7
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    [Longfic] Destino Entre Dimensiones.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    5
     
    Palabras:
    13402

    IV Capitulo

    Exorcistas y Buscadores

    Por órdenes de Una Inocencia


    Frio, era lo que se sentía en aquella enfermería, la cual a pesar de encontrarse ubicada debajo del nuevo cuartel, esa piedra que rodeaba la organización filtraba el fresco de la noche que transcurría logrando ambientar todas las habitaciones tanto arriba como debajo del enorme establecimiento, aunque también tenía que ver un poco con los ventiladores de techo, que ayudaban a mantener el ambiente frio y confortable. Dejando eso de un lado, las tres jóvenes viajeras se encontraban profundamente dormidas, o eso parecía observarse; María Luna era quien no podía conciliar aquel Morfeo en donde todos se encontraban sumidos en ese momento, obviamente quitando de antemano a los zombis que habitaban la Sección Científica, para ellos el sueño no existía y menos en tiempos de guerra.


    Pov Maria Luna

    Nada, era la tercera vez que intentaba dormir en la noche, había literalmente rodado en toda la camilla, que a pesar de estar cómoda, no incitaba aquel sueño necesario en mi cuerpo, mi mente se encontraba muy ocupada pensando en todos los acontecimientos que habían ocurrido el día de la feria, los sucesos, las acciones, las acciones....Todo. Volví a dirigir mi mirada a aquel reloj de pared que contaba las hora del mundo en el cual me encontraba "4:03 am", susurre hacia mis adentros, al darme cuenta que pronto amanecería y que el supervisor llegaría, resignada al saber que no podría conciliar el sueño, me levante de la camilla, no haría mal dar un paseo por los alrededores, tome mis respectivas cosas mientras mi mente seguía pensando en todo, muchos de aquellos pensamientos, me hacían dudar y no era para menos, me encontraba en el lugar menos improbable del mundo, junto a personas que jamás creí ver en mi vida. Llegue por un momento a dudar si me encontraba vivía, ya que todo transcurría como si se tratara de un sueño o un simple juego del subconsciente, pero no debía ser así, con todos los estudios que me habían realizado ya debería haber despertado de esta extraña "pesadilla" si se le puede llamar así, aunque cabía la posibilidad de que estuviera en coma...pero ¿Cómo saberlo?; Suspire, no podía hacer nada.


    Suspire, tome entre mis delicadas manos un suéter que se encontraba colgado en la cabecera de la cama, me coloque aquellas mullidas pantuflas de un lindo color azul, y con pasos lentos y suaves camine hasta llegar a la puerta de la habitación, rogando que ninguna enfermera me viera, o que la enfermera en jefe me cazara en el acto. Abrí con suavidad la puerta de madera, sin dejar de mirar a mis acompañantes quienes se encontraban profundamente dormida, y realmente no quería perturba su sueño, sin preámbulos termine de salir con éxito de la habitación llevándome una gran sorpresa de que afuera no había nadie, ni siquiera un alma. Apreté mas el abrigo en mi pecho para caminar un poco más, encontrándome con lo que se supone era la sala de esperas de nuestra sección, detalle aquellas paredes blanca, decoradas levemente con algunas líneas azules, el olor a medicamento salía a relucir en los estantes donde se encontraban las pequeñas botellas de Antibiótico, vitaminas entre otros que había utilizado en nosotras; También logre percatarme de que en medio de aquel cuarto estaban ubicadas unas diez sillas de hierro, debo suponer que para las visitas, y frente a ellas un escritorio blanco con anotaciones, sellos entre otros papeles... Detrás de aquel escritorio estaba lo que parecía ser unos casilleros, debía haber como unos 30 compartimientos de tamaño medio y del lado de este colgado una repisa donde estaban las llaves todos ellos. Camine un poco más hacia ellos, y logre observar que cada uno tenía un número y también los nombres de a quienes pertenecían.


    -Vaya, se deben tener mucha confianza como para dejar las llaves, y las pertenecías en un lugar donde hay tantos desconocidos...-masculle por debajo, mientras me posaba frente a ellos, leyendo solo algunos nombres, percatándome que el mío y el de mis amigas también se encontraban allí; Volteo a donde se encontraban las llaves y busque el número del que se supone era el mío, teniendo éxito en mi búsqueda de ella- N° 5, aquí esta, igual que el perfume channel.


    Sin más preámbulos, introduje la llave dentro del pequeño cerrojo logrando abrir así el compartimiento, mostrando lo que se suponía eran mis cosas o la gran mayoría de ellas, eche un vistazo rápido por encima a ver qué era lo que se encontraba dentro del casillero percatándome que las cosas estaban llenas de tierra, humedad, grama, vi también algunas cosas de Gabriela, y unas que otra de Lila. Introduje mi mano para buscar más a fondo consiguiendo el único utensilio con lo que podrías sobrevivir en mi mundo.


    -¡Mi teléfono! -exclame con clara alegría al ver aquel aparato entre mis manos, debía admitir que llegue a pensar que todo se había quedado en la otra dimensión, y que al llegar tendría que comprarme uno nuevo; Cosa que realmente no me hubiese gustado, adoraba mi teléfono, me lo había regalado mi madre cuando salto a la fama. Observe con detalle verificando que estuviera en perfecto estado, y sin un rasguño, Prendí mi Samsung Galaxy Note y me sorprendí al observar que tenía la batería full además que tenía muy buena señal. También, que el reloj se configuró al tiempo en el que nos encontrábamos, seguí revisando y no encontré nada fuera de lo normal, así que lo guarde en mi pantalón, cerré el casillero y coloque la llave donde iba, siguiendo mi camino.


    Exhale, y de mis labios salió aquel humo característico que hacia distinguir que el ambiente se encontraba frio, no era para menos, en estos tiempo Inglaterra era fría y lúgubre. Seguí caminando por los largos pasillos de la organización, logrando reconocer solo algunos cuartos, libreros, paisajes de los cuadros entre otros, también pude llegar a donde era la nueva oficina de komui, y donde estaban ubicados los científicos, como era de esperarse se escuchaban sus quejidos, chasquidos, insultos y por sobre todo un olor a basura que inundo mi nariz la cual tape inmediatamente con el suéter que cargaba puesto.


    Aun con la caminata, mis pensamientos estaban estancados con todo lo que habíamos vivido, intente calmarla un como pensando en otras cosas y fue en ese momento, frente las escaleras que llevaban al subterráneo donde me acorde de aquellos ojos negros afilados, de su cabello azul índigo amarrado en una cola perfectamente echa encima de su cabeza y su bien, pero que digo bien estructurado cuerpo de hombre.


    -Yuu Kanda -salió de mis labios, recordándome de la pared mientras apretaba el suéter con mis manos frías y temblorosas. ¿Cómo es, que se me había podido olvidar que aquel hombre que tanto deseaban mis sueños? , se encontraba frente a frente en el mismo techo, en el mismo lugar, bueno metafóricamente ya que estaba de misión, pero ustedes me entendieron. Sonreí, una sonrisa tonta pero era así, allí, en ese lugar donde me encontraba mirando al infinito recordando todo el, esperando o rogando que si todo salía bien, poder al menos acercarme lo suficiente a su persona, sinceramente no esperaba una comedia romántica, o lo típico que leía en los fics, sabía bien y a la perfección el carácter de ese hombre, cambiarlo sería como buscar una aguja en un pajal, así que me limitaría a tan solo ser una a llegada por que esperar algo más, era una vil mentira que ilusionaba mi mente y corazón, tenía que ser realista, además que en tiempo de guerra, no hay lugar para el amor.



    Fin Pov Maria Luna


    Sala de Enfermeras

    4:40 am Junio 22- Siglo IXX

    Pov Gabriela



    Me desperté en medio de la madrugada, al sentir la puerta de la habitación cerrarse, me levante mirando a los alrededores buscando quien había interrumpido mi sueño placentero, pero no se encontraba nadie, fije mi vista hacia las camas verificando que mis acompañantes se encontraban allí, y efectivamente, faltaba la pelinegra del grupo. Me reincorpore en la cama, sentándome mejor mientras pasaba las manos por mi cara quitando poco sueño que aún me quedaba, ya que estaba dudosa del por qué mi amiga había salido de aquella manera de la habitación, seguramente no podía conciliar el sueño, no era nada nuevo, siempre le pasaba cuando estaba nerviosa o preocupada por alguna situación, por lo tanto imagino que fue a dar una vuelta para despejar su mente. Deje los pensamientos sobre María a un lado y me enfoque en terminar de despertarme, ya que era inútil volver a dormir, hasta el hambre se me había despertado así que busque lo necesario para lavar mi cara y después de asearme buscaría a la pelinegra más adelante, así podría estar un rato a solas.


    Tome los utensilios necesarios que me habían entregado las enfermeras y fui al baño dentro de la habitación, prendiendo las luces para tomar un merecida ducha ya que realmente la necesitaba, me sentía sucia, tenía el cabello echo un desastre, mi piel aún tenía marcas de barro, no soportaba verme en ese estado, así que empiezo a desvestirme tirando la ropa sucia en una esquina del baño, quedando completamente desnuda frente al espejo, detallando los múltiples vendajes de mi cuerpo, moretones, rasguños y varias heridas de aquella batalla en la cual nos vimos en vuelta las tres; Lance un largo suspiro, mientras acomodaba mi Vía de una manera que no se saliera del brazo y entre en la ducha abriendo la lluvia artificial quien invadió mi cuerpo de manera inmediata al sentí aquel líquido vital recórreme por todos lados, estaba tremendamente fría pero no me molestaba necesitaba relajarme en aquel momento, y seguí con la ducha, lavando mi piel de manera suave y delicada debido a los maltratada que esta se encontraba, y de la misma manera hice con mí cabello, el cual perfume con unas escancias de coco.


    Después de aquella larga ducha, Salí del baño secándome cada parte de mi húmedo cuerpo, mirándome así en el espejo aquel rostro rasguñado, cubierto de algunos moretones y mi labio levemente partido; Me veía completamente horrible necesitaba un poco de maquillaje para por lo menos cubrir las imperfecciones hasta que le recuperase, si mi abuela viera en el estado en el que me encuentro en este preciso momento le daría un infarto, quizás hasta dudaría un poco de que fuera su nieta. Reí, mi abuela era una gran mujer, la cual amaba y adoraba, pero había veces que tenía una imaginación bastante activa, y eh llegado a pensar que herede algo de eso, aunque estando en la situación en la que me encontraba quizás sus ideas que me estuvo planteando durante todo el verano no sonaran tan descabelladas después de todo.

    Tome mi ropa y la vi con un poco de molestia, odiaba usar el mismo conjunto tanto tiempo sin lavar, pero no tenía nada más que ponerme, así que con incomodidad me lo coloque arreglándome lo mejor que podía. Salí de aquel cuarto de baño, ingresando de nuevo a la habitación donde estaban las camillas, estire el paño en la cabecera de mi cama para que pudiera secarse y mire a mí alrededor buscando algo con que pudiera peinar mi cabello… Nada, no había absolutamente nada, solo unos cubiertos, utensilios de medicina, gasas entre otros. Suspire, tendría que hacer lo mismo que maría cuando no encontraba nada en alguna cada donde se quedaba, aunque más que fetiche de ella, lo había sacado de Disney, quizás vivir una infancia viendo aquellas películas te dejaba algo bueno a la final; Tome el tenedor que estaba encima de la mesa y lave suavemente quitándole toda la suciedad, una vez finalizada la tarea procedí a peinarme con él, desenredando mi largo cabello rojo y enmarañado, no era el mejor peine del mundo pero al menos era algo, prefería eso a no tener nada.


    Culmine por completo con mi aseo personal, a pesar de que todavía era temprano, pero al igual que mi amiga, dudaba un poco conciliar el sueño, y más estando tan sucia. Tome un suéter que habían dejado las enfermeras y salí de la habitación para ir en busca de mi encantadora amiga, encontrándome con lo que sería la sala de espera, me di cuenta de los casilleros al instante, y note los nombres de todas las personas que guardaban sus cosas allí, supuse que María busco sus pertenencias, así que haría exactamente lo mismo que ella. Ya después la buscaría con más calma.


    Fin Pov Gabriela


    Pov Narrador


    El viento soplaba con fuerza, aquel frio se colaba por debajo de las gruesas chaquetas de exorcistas, aquellos jóvenes quienes se encontraban mirando como pronto llegaba el amanecer frente a las ventanas del barco que los llevaba a su destino, los chicos se encontraban agotados habían tenido una batalla muy larga recuperando la última inocencia, prácticamente sus cuerpos pedían un merecido descanso después de lo ocurrido, además que les esperaban más problemas en casa, con el tema de las nuevas chicas que llegaron ya hace una semana y todo tenían curiosidad por ellas.


    El más joven del grupo, estaba en la popa del barco dejándose acariciar las cara con el gélido frio de la madrugada, aunque no pudiera ver nada por la espesa neblina que cubría los alrededor le servía para pensar todos los acontecimientos que habían estado pasando últimamente, las batallas, las perdidas, la nueva orden, el 14vo, entre otros. Pero lo que más hacia hincapié en sus pensamientos era aquella pelirroja que sostuvo en sus brazos, quizás tuviera escasos 18 años pero esa chica era lo más hermoso que había visto en mucho tiempo, quería llegar rápido para verla, conocer los secretos que ocultaba en sus ojos grises; Sonrió, nunca pensó verse en esa situación y menos después de todo lo que estaba ocurriendo.

    Lenalee quien estaba detrás del chico, pero en un lugar donde no le pegara tanto el frio, se había dado cuenta del cambio que había dado su albino amigo al ver a las viajeras llegar a la orden, aunque no sabía con exactitud quien era la que tenía acaparados los pensamientos de este. Sin embargo, quería ayudarle a salir de aquella cascara que desde hace 3 años se había encargado de mantener, con todos los problemas de la orden y los noah apenas tenía tiempo para el mismo y como su autoproclamada hermana mayor, debía preocuparse por él. Otro quien también no dejaba de pensar en las chicas era el pelirrojo pirata, pero no por razones amorosas, si no por cuestiones de Bookman, toda la información que escuchara y todo lo que pasara tenía que regístralo como si su vida dependiera de ello, puesto que podía ser lo que ganara o perdiera en esta guerra. Aunque pronto aquellos sentimientos de curiosidad y sus florecientes ganas de trabajar terminarían de una manera poco profesional, ya se vería después del pasar de los días.


    La embarcación estaba por llegar a su respectivo destino, y cada uno de los tripulantes del barco se preparaban para desalojarlo dentro de poco, volviendo todos los pensamientos que los estuvieron inhibiendo durante el transcurso del viaje de regreso a la Orden. Poco a poco empezaron a entrar a la zona donde se encontraba el puerto, y en eso los chicos notan una presencia la cual no sabían identificar como amiga o enemiga, y antes que alguien pudiera decir algo o realizar alguna acción, cierto Japonés salta del techo de barco atacando con mugen lo que hubiera al frente de manera ciega pues no veía del todo bien lo que estaba penetrando con mugen, solo pudo escuchar un intenso grito al instante que ataco.


    Fin Pov Narrador


    Pov María Luna

    Empecé a bajar aquellas escaleras oscuras, lo único que iluminaba el sendero eran las tenues llamas de las antorchas colocadas estratégicamente para que los residentes pudieran ver de alguna manera por donde iban. Apreté con fuerza el abrigo ya que con cada paso que daba el frio era más fuerte, mi cabello volaba por todos lados de manera descontrolada, debido al intenso viento que entraba, tanto así que las últimas antorchas del camino se encontraban apagadas. Pude divisar unas vez que llegue al final que era una clase de puerto, aunque bastante amplio, incluso más que el de la antigua Orden, quise detallar cada parte de este, puesto que cosas como esta aunque sean mínimas no aparecen ni de por casualidad en el manga, y realmente era un honor estar allí, con aquellas personas que admirábamos, camine un poco más hasta quedar al borde del puerto, la brisa marina estaba bastante agitada, y el frio te congelaba hasta los huesos. Afile mi mirada grisácea pudiendo divisar que se acercaba una embarcación directo hacia donde me encontraba, seguramente algún exorcista o buscadores llegando de la misión que se les había encomendado.


    Un pensamiento rápido paso por mi mente “¿A nosotras también nos mandarían esa clase de misiones?” claro, obviamente si éramos compatibles con las inocencia que después de lo que aclaramos en la enfermería no me quedaban más que dudas que las tres lo éramos, ¿Razones?, sencillas… Un ataúd de cristal no te protege solo por que seas bonito y ya, algún motivo debe tener para haber salvaguardado la vida de tres chicas completamente ajenas, estaba tan absorta en mis pensamientos que no me di cuenta que una presencia se acercaba a gran velocidad; Para cuando pude reaccionar los ultimo que vi fue el filo rojo de una espada, y los ojos negros de mi agresor, lo siguiente que sentí fue un dolor agudo, sangre y chasquido, mi siguiente acción fue gritar después de haber pasado el shock inicial.


    -¡AHHH! –Chille, cayendo al piso con mis manos cubiertas de sangre, mientras el dolor agudo inundaba todo mi ser-


    -¡Maldita seas, ¿Qué demonios haces aquí?! – Escuche de la voz de mi atacante, quien curiosamente conocía mejor que mi propia mano-


    -¿Qué demonios paso kanda, que fue lo que atacaste? – Pude oír como de la embarcación salía aquella otra voz, levante mi rostro adolorido confirmando mis sospechas de quien era- Ahora si la embarraste Bakanda…


    -¡Cállate maldito moyashi!, tu ven aquí – siento como me jala del brazo con fuerza poniéndome a la altura de él, notando sus ojos enfurecidos y llenos de ira- Te hice una maldita pregunta, ¡¿Qué demonios haces aquí?!.


    -Trague con fuerza para mirarlo, pero no podía con aquella mirada que destilaba odio, y amargura, su agarre era fuerte tanto que podía sentir los vendajes de mi brazos cubrirse de sangre nuevamente, y con un susurro bajo conteste- Me estas lastimando, suéltame –intente quitármelo de encima, pero lo único que logre fue que me sostuviera con más fuerza que antes-


    -Kanda, las estas lastimándola suéltala –hablo lenalee al ver la situación que se estaba presentado- hay que llevarla a la enfermería, está perdiendo sangre.


    -Yuu deberías llevarla, tú fuiste quien ataco sin pensar –esbozo lavi con una sonrisa, que de seguro que si no estuviera tan adolorida, clasificaría como coqueta.


    -¡Tks, cállense todos!, yo no la mande a estar de espía aquí, y menos a deambular a estas horas por la organización siendo una desconocida –me agarro con más fuerza, haciendo que soltara otro gemido de dolor-


    -B…basta por favor, me estas lastimando…Kanda –Suplique, mientras de mis ojos salían alguna lágrimas de dolor, por primera vez tuve miedo de ese hombre frente a mí, definitivamente lo que se muestra en la serie y en el manga no es nada comparado a su actitud al tenerlo al frente, incluso todos los fanfics que había leído en mi vida, sea yaoi, hetero, bixesual ect ect no le llegaban ni de refilón a lo que yo tenía frente a mí, al verdadero Yuu Kanda, el verdadero demonio en persona.


    -¡KANDA! –escuche a Allen gritar y tomar la muñeca con fuerza del japonés, apretándola lo suficiente para que pudiera dejar de lastimar mi brazos- ¡Detente!, ¿Acaso no vez que la estas lastimando imbécil?.


    -¡Tks!, Vete a la mierda moyashi –Sentí como me liberaba de su agarre, cayendo al piso como peso muerto, tomo sus cosas para irse, y desaparecer por las escaleras por las cuales yo había bajado tan solo hace algunos segundos-


    -¿Esta bien? –Sentí la mano suave de Allen tocar mi hombro, pero ante lo acontecido hace poco me aparte con miedo, mientras miraba a los tres temblando mientras pegaba mis manos ensangrentadas a mi pecho, mi respiración era agitada, y mordía mis labios con leve nerviosismo- Lo siento, él puede ser algo torpe con las personas nuevas, déjame que te lleve a la enfermería, ¿Si? –Se disculpó y luego lanzo aquella dulce sonrisa que lo caracterizaba haciéndome relajar-


    -Tranquila, Allen cuidara bien de ti…Lavi y yo entregaremos en informe a mi hermanos y nos reuniremos contigo en la enfermería –Hablo de manera pausada y dulce la china-


    -Cuídala bien Allen –Ríe lavi con algo de picardía-


    -¿Qué insinúas conejo idiota? –Bufo el albino, mientras me ayudaba a levantarme con suavidad del piso, y proceder a cargarme como princesa-


    -¡Oye, Espera!, ¿Qué está haciendo? Puedo caminar sin necesidad de esto – Me altere completamente ante la acción del albino, haciéndome sonrojar hasta la orejas-


    -Así será más fácil llevarte, además que tenemos que llegar con rapidez para que puedan atenderte, estás perdiendo mucha sangre – Me ve a los ojos, acomodándome mejor entre sus brazos-


    -Te voy a llenar de sangre el traje –susurre bajo- por favor bájame.


    -Tranquila, de todas maneras tenía que lavarlo, estoy cubierto de sangre de akumas, así que no tienes por qué preocuparte –Comenzó a correr pegándome más a su pecho, haciéndome sonrojar con más fuerza, eso era lo más cerca que había estado de un chico, y si bien dije que Kanda era un hombre sexy, Allen no se quedaba atrás, con sus hermoso cabellos platinados, su sonrisa dulce e infantil, y aquellos ojos plateados que derretían a cualquier mujer. Sentí si suave olor a menta que emanaba pegando mi cara en su cuello disfrutando del viaje. ¡Dios!, lo que daría Gabriela por estar así con el albino.


    Fin Pov María


    Pov Gabriela


    Me encontraba caminando por los pasillos de la orden, deleitándome con una chupeta que le había robado a lila que tenía entre sus cosas, que curiosamente se encontraba en lo que se suponía era mi casillero, también había conseguido mi teléfono el cual estaba completamente full de carga sin ningún rasguño cosa que me pareció raro a pesar de los eventos trascurridos. Observaba todo con suave cautela, detallando cada parte de la orden, cada cuadro, cada ladrillo, realmente era más hogareña que la otra que parecía una torre de alguna mala película de terror, el viento era fuerte y frio, se notaba que estábamos al borde de un acantilado pues un inmenso olor a agua marina invadió mi nariz; Realmente pensé que era agua dulce, pero como en el manga nunca especifican nada uno tenía que ingeniársela para imaginar los extras de cada página, pero bueno quizás con la nueva temporada podrían decir más de lo que ya se sabía.


    Degustaba con felicidad aquel dulce que pasaba entre mis labios y lengua, mientras que con la mirada buscaba a mi pelinegra amiga, a ver dónde se había metido, llegue hasta el final del pasillo encontrando lo que parecía una escalinata que iba hacia abajo, pero lo que daba era miedo de lo oscuro que se encontraba eso allí; Al momento que di la vuelta para retirarme del lugar, escuche un agudo grito logrando que un escalofríos recorriera mi espalda de lo espeluznante que fue. Quede fría en el lugar, estática, rezaba a todas las religiones que sabía que no fuera un fantasma o algo más…” ¿Un akuma? ¿Y si habían invadido la orden?” Pensaba con rapidez ante el miedo, Dios y yo allí, no morí en mi dimensión y por curiosa moriría frente a unas escalinatas que llevaban quien sabe a dónde, quizás Road nos había encontrado y venía a terminar el trabajo.


    En ese momento todos mis pensamientos fueron interrumpidos, cuando unas botas venían subiendo a toda velocidad, trague con fuerza para voltear y enfrentarme a lo que debía, si iba hacer exorcista tenía que ser más valiente y no tenerle miedo a cualquier tontería, bueno si es que era compatible, aunque por lo que había dicho María en la enfermería todos los hilos iban a que si lo éramos, pero sí de igual forma no lo era, una buscadora tampoco debía tener miedo cuando se debía enfrentar a los akumas solo con un escudo, apreté con fuerza la chupeta en mis labios y en ese momento aquellas antorchas iluminaron aun cabreado Kanda, quien al verme arrugo la nariz, obviamente de molestia; Suspire un poco de alivio al ver que era el, quien al darse cuenta de mi largo suspiro siguió de largo maldiciendo por debajo dejándome sola de nuevo en aquel lugar. Detalle su espalda, y su larga coleta, realmente si no fuera un hombre tan amargado muchas mujeres caerían rendido ante él, su belleza Japonesa es algo que no se consigue en muchos lugares, bueno para ser solo un dibujo inventado donde a todos los dibujaban buenmozo, pero verlo en vida real era otro nivel, es como detallar cada trazo de una manera única e inigualable. Ojala maría hubiera podido verlo, seguro la envidiaría.


    Pude escuchar el sonido de unas botas tocar el grueso pavimento, volví a dirigir mi mirada las escaleras encontrándome con una imagen que jamás en mi vida creí ver; Subiendo por aquellas escalinatas, apareció Allen, cargando lo que parecía ser mi mejor amiga, quien está cubierta de sangre, y parte de esta había manchado el rostro y uniforme de aquel albino, que aunque sonara algo Gore, se veía de un jodido atractivo de esa manera.


    -¿Gabriela? –Escuche a mi amiga pronunciar mi nombre haciéndome salir del trance y dejar de babear por el albino que la cargaba- ¿Qué haces aquí?


    -Venía a buscarte, sentí como saliste de la enfermería, te deje un rato pasear para luego ir por ti… me puedes explicar ¿Qué diablos paso contigo? ¡¿Por qué estas cubierta de sangre?! –comencé a gritar al darme cuenta que la sangre provenía de ella.


    -Emmm… tuve solo un pequeño accidente es todo –volteo el rostro, algo ocultaba-


    -¿Y me puedes explicar con lujo y detalle qué clase de herida hace que tengas semejantes cortadas en las palmas? –Cruzando los brazos esperando que me diera una buena explicación sobre lo ocurrido-


    -Me caí (?)


    -Bufe con molestia dirigí mi mirada al albino quien estuvo callado todo el rato- Habla, tienes 2 minutos antes que se me agote la poca paciencia que tengo.


    -¿¡¡EH?!! Yo , bueno etto… Pues si fue un accidente, lo que pasa es que veníamos de una misión y pues, veras estábamos cansados y bueno, ella estaba en el puerto y como no conocemos su presencia kanda…quizás se precipito un poco y ataco sin verificar quien era…y lastimo a María, aunque no sé cómo fue que le lastimo las manos, para cuando llegamos ella estaba ya así –Dijo sin poder mirarme a la cara en ningún momento –


    -Ese maldito cara de nazi –masculle molesta y cabreada- ¿¡Y tu pensabas no decirme que el bastardo ese te fue quien te hirió de esa manera!? ¿¡¡Qué diablos te pasa!!? ¡Fuera otro ya le hubieras volado los dientes de una patada! ¿Sabes qué?, olvídalo, vamos a la enfermería, pero esto no se quedara así, en cuanto me lo vuelva a cruzar le voy a decir hasta del mal el cual se va a morir.


    -¡Espera!, ¿Te encontraste con Kanda? –Pregunto mi pelinegra amiga sorprendida ante mi declaración e ignorando mis comentarios sobre ella.-


    -¡Pues obvio que me encontré con el cara de nazi ese!; Debo suponer que el grito de Sayona fue tuyo, y no es para menos, ¡mira cómo te dejo!, ¡Dios!, cuando lila se entere Troya va arder… -comienzo a caminar de regreso a la enfermería.


    -¡Ni se te ocurra decirle!


    Fin Pov Gabriela



    Pov Narrador


    -¿Cara de nazi?, ¿Qué se supone que era eso?, Esas chicas tenían unos términos bastante exóticos, esa nunca la había escuchado pero le quedaba muy bien el termino al bakanda –Rio por dentro el albino- Definitivamente esa pelirroja tenía carácter, había comenzado a sudar en frio cuando le pregunto sobre lo que había ocurrido allí abajo, su mirada era bastante penetrante, casi igual a la Lenalee cuando se molestaba –Pensó el chico, mientras era guiado por la pelirroja de regreso a las habitaciones, mientras aquellas dos chicas discutían sobre si decirle o no a la otra-


    Poco después de las discusión de ambas chicas, los tres llegaron a la enfermería donde poco a poco comenzaban a cambiar los turnos de los residente, quienes por cierto al ver al albino llegar con la pelinegra en ese estado todos se alarmaron y procedieron a atender a la chica, obviamente al inglés también solo para cerciorar de que todo se encontraba en orden; Como era de esperarse, la más pequeña del grupo seguía completamente dormida haciendo caso omiso de lo que pasaba a su alrededor, todos prefirieron dejarla descansar y hablar en otra habitación, donde las enfermeras atendían a la chica.


    Las manos de María eran una autentica carnicería, ambas palmas tenían una cortada de aproximadamente 5 centímetros de largo, 2 de ancho y 3 de profundidad, todas las enfermeras hacían todo lo que se encontraba en su alcance para poder cerrar aquellas heridas, que de haber sido un poco más profundas la hubiera dejado sin dedos. Allen miraba con detalle como la pelinegra se encontraba reprimiendo los gemidos de dolor al sentir las agujas de antibióticos, y las otras que unían los ligamentos, conjunto con la carne para cerrar aquel horror.


    -¿Cómo te sientes María? –Pregunta la pelirroja al ver a su compañera aguantar el dolor de las agujas y vendajes-


    -No te voy a mentir, duele como el diablo –suspira la oji gris mirando a su amiga- pero lo que realmente me preocupa es... Si podre dibujar de nuevo, a como lo veo, necesitaría una buena terapia. Me siento como Doc. Strange


    -Bueno si te sientes de esa manera, pues… ya sabes que debes pensar más allá –Comienza hacer la pelirroja movimientos raros y extraños- Abrir la mente, expandir tu conocimiento…


    -Gabriela….estas asustando a Allen…-ríe la pelinegra al ver a su amiga actuar como una lunática, sabía bien que ella podía ser una mujer madura, pero cuando se le zafaba el tornillo era peor que lila-


    -¡¿Eh?! , no pasa nada… más bien me resulta algo entretenido que a pesar de lo ocurrido te encuentres de un muy buen humor. Kanda me hizo lo mismo a que a ti cuando llegue a la organización y créeme cuando te digo que dejarte reparar la inocencia por un diablo como Komui es lo peor que puedes hacer –dice con una adorable sonrisa el albino, quien a pesar de estar interactuando con ellas por primera vez, se sentía bastante cómodo, ambas le hacían sentir en calma, además que muy dentro del pensaba que tenía un poco de culpa por lo que le había pasado a la morocha.


    -Bueno dejando eso de un lado, creo que no nos han presentado como es debido –comenta la pelirroja al ver al albino- Soy Gabriela Gómez, pero puedes llamarme Gaby, un placer…, gracias por traer a María hasta la enfermería. –Se inclina y le extiende la mano en forma de saludo-


    -Allen Walker, aunque creo que ya sabias la parte de mi nombre, puedes llamarme Allen, no hay por qué…seguramente pronto serán parte de esta gran familia –estrecha la mano con la chica sintiendo una corriente pasar atreves de ellos, haciendo que ambos tuvieran un escalofríos separándose de manera inmediata por la sensación- Disculpa, seguro debo tener estática.


    -No pasa nada –susurra un poco avergonzada-


    -Maria ríe al ver como ambos se apenan, realmente ambos se vean bien juntos. La chica vio al albino que estaba sentado frente a ella y procedió a presentarse también- Maria Luna Contrera, pero puedes decirme Luna, Mary, o como desees, es un placer… te diera la mano para que fuera más formal pero ya vez, Jack el destripador me vino a visitar –mostrándole sus ya vendadas manos-


    -Lo siento, cuando vea a kanda le diré que venga a disculparse por su actitud aunque lo más seguro es que me ignore.


    -No pasa nada, conozco su actitud lo suficientemente bien como para saber que no lo hará, no tienes por qué obligarlo, si no será peor Allen –mira al chico con una leve sonrisa triste- solo te pido que no le digas a nadie que él fue quien me hizo esto, no quiero que tenga problemas... por favor.

    -¡NI DE CHISTE!, ¡Komui se tiene que enterar lo que ese bastardo te hizo Luna! –Alza la voz una molesta Gabriela mirando a su amiga- ¡No te atrevas a defenderlo!


    -Gabriela, basta no voy a conseguir nada haciendo que Allen venga y lo obligue o que komui lo haga, lo que voy a lograr es que se moleste más o que me odie, y créeme que es lo menos que quiero en este momento.


    -Siento decirlo Gabriela pero Maria tiene razón, a mi también me molesta que el Bakanda la allá herido, pero tratar de convencerlo que se disculpe es como hablar con la pared. De igual forma le hare saber que lo que hizo está mal. –Las ve a ambas con determinación – aunque, tengo una leve curiosidad Luna… ¿Cómo fue que tus heridas están en las palmas, y no en otra parte del cuerpo?


    -Pues…


    Flash Back


    En el momento que los pensamientos de la pelinegra fueron interrumpidos, su reacción inmediata ante su atacante fue tomar el arma con la que pretendía lastimarla apretando con fuerza el filo de aquella Katana cortar su carne como un filete, quedando pegada a la pared mientras ella miraba al frente los ojos de su agresor quien no hacia cabida a lo que sus ojos veían; Puesto que la chica quien había confundido con algún Espía o un Atacante había detenido a su fiel Mugen con ambas mano, quedando ambos inmóviles por aquellos escasos segundos mirándose frente a frente.



    -Yuu Kanda… -susurro suavemente y bajo María, al ver aquel hombre frente a ella blandiendo su espada contra su persona-


    Aquel hombre se había quedado frio, al ver a esa mocosa como diría el detener su inocencia de una manera tan sencilla, eso era inaceptable y menos de alguien tan baja categoría como ella, después de todo solo era una más del montón de mujeres inútiles que conocía en la vida. Con fuerza jalo a mugen de las manos de la chica haciendo más profundas las heridas de la chica tumbándola en el suelo sin dejarla de mirar con aquel odio y molestia.

    -Que esto te enseñe, a no estar metida donde no te llaman, ¿Entendiste? –Escupe el chico, hacia la joven quien simplemente asiente después de haber gritado de dolor por la manera en que el retiro a Mugen de sus persona-


    Y antes de que la chica pudiera decir, o hacer algo, los demás tripulantes de la embarcación llegaron al puerto.



    Fin Flash Back


    -Y eso fue lo que paso –Termina de contar la chica-


    -Yo lo mato… -Gabriela dio la vuelta para ir en busca del japonés, pero antes que pudiera dar si quiera un solo paso, la pelinegra se le tira encima, impresionando al albino, quien inmediatamente se levanta a ayudarla- ¡SUELTAME LUNA!


    -¡LUNA! –Grita el chico debido a la impresión-


    -¡NO!, por favor tranquilízate sé que no fue el caballero más dulce del mundo pero al menos no fue tan duro – Intento convencer la chica a su amiga quien ardía en llamas- Por favor, te lo suplico, no avives más el fuego.


    -¡Es que, tu! –se voltea la pelirroja molesta y toma un respiro hondo para tratar de controlar sus animo- bien, bien…de acuerdo, no hace nada…pero si te vuelve a tocar un solo cabello lo destrozo…-Amenaza la pelirroja-


    -¡Gracias! –Sonríe la chica a su amiga y luego ve a Allen- tú tampoco vayas a hacer nada.


    -El albino suspira un poco ante la petición de la chica, pues ante la declaración de lo que había pasado realmente le dejo un mal sabor de boca. Pero se notaba a lengua que ella no deseaba meter al idiota en problemas así que simplemente asintiendo cayendo derrotado ante ella- De acuerdo, pero concuerdo con tu amiga, a la próxima no me contendré. –Mirando a la chica con aquella mirada de determinación.


    -Lo sé, y muchas gracias por eso Allen –Se inclina la chica agradecida por el comentario del albino.


    -Bueno chicas fue un placer estar con ustedes pero debo retirarme para descansar, pasare en la tarde a visitarlas un rato. Ambas deberías también intentar conciliar el sueño un poco más, aún es muy temprano para que anden por allí. ¿De acuerdo?


    -Está bien –dicen ambas al mismo tiempo, y ven como el chico se despide de ellas y procede a irse por la puerta por la que hace un rato había entrado.


    -Descansemos, ¿Te parece? –Ve a María-


    -Bien, me vendría bien dormir un poco –Bosteza antes el cansancio, ya que no había dormido nada durante toda la noche, y con todo lo ocurrido era mejor dormí aunque fuera tan solo unas pocas horas.


    Después de haber culminado de conversar con el albino de la organización, ambas proceden a recostarse cada quien en su respectiva cama para dejarse guiar por aquel sueño reparador que tanto necesitaban. El sol hizo su magnífica entrada por el firmamento azul, iluminando todo aquello que estuvo sumido en la oscuridad durante largas horas; haciendo abrir los ojos de los soñadores para que pudieran empezar un día nuevo o una aventura. Aunque para una inmensa minoría de personas esto solo significaba que otro día mas transcurriría en sus patéticas vida, y muchas de ellas se encontraban confinadas dentro de las Gran Estructura otorgada por el Vaticano, La Orden Oscura, y sus seres de sombras “La Sección de Ingenieros y Científicos” donde aquellas almas pareciera que fueran a dar su último aliento de vida.


    Pero a pesar de todo lo malo, siempre había algo que iluminaba sus oscuras y patéticas vidas, un hermoso Ángel que llegaba cada mañana a revisar que aquellas pobres almas aun siguieran con vida en las oficinas, obviamente proporcionándoles un suero especial que hacía que todos renovaran las energías necesarias para seguir haciendo un trabajo productivo y eficaz. Café, aquel liquido negro, endulzado y amargo que lograba volver loco a cualquiera por esa sustancia vital para el cuerpo, mente y alma. El olor del líquido primordial se encontraba servido en tazas de porcelana blanca, con los nombres grabados de cada uno de los integrantes de los presentes en la sección, siendo llevados en una hermosa charola de plata, y junto a ella la más joven de los exorcista, el tan “Famoso Ángel” de la organización…Lenalee Lee, quien todas las mañanas se encargaba de proporcionarles su ración diaria de aquella cafeína a ellos y su hermano, que seguramente debía estar durmiendo entre los papeles de su escritorio, los cuales nunca terminaban de acumularse.


    -¡Lenalee! –Escucha la hermosa peliverde quien en ese momento estaba entrando a la habitación, con las humeantes tazas- ¡Buenos días!, llegaron rápido de la última misión, ¿Cómo les fue? –Pregunta curioso el chico de anteojos, quien ya es conocido por todos, Johnny Gill-


    -¡Jhonny, buenos días para ti también!, si llegamos esta madrugada, lavi tuvo que haberte entregado el informe hace ya algunas horas, ¿no? –Curiosa mientras le lleva su respectiva taza de café-


    -Disculpa, seguro lo recibió el Jefe Reever, yo no me encontraba aquí, recién llego de la capital de hacer algunas compras –sonríe con cierta ternura, como la de un niño pequeño- que hablando de eso, cuando termines de llevarle el café a tu hermano ¿Podrias entregarle esto a las chicas? – Señala varias bolsas de muchos colores, tamaños y formas-


    -La peliverde queda impresionada ante la cantidad de paquetes que habían, contando solo por encima, debían haber unos 20 a 30 bolsas, y quien sabe cuántas cosas tenían dentro, que lo más seguro eran ropas, perfumes, joyería o quien sabe que para la estadía de las chicas en la organización; Pero hubiera preferido tener una tarde de chicas con ellas, pero como es de costumbre Johnny no se aguanta cuando hay visitas nuevas- Si, no hay ningún problema, yo se los hago llegar…Aunque ¿Es extraño que compraras ropa ya hecha?, regularmente eres tu quien confecciona todos los trajes.


    -¡No te preocupes! –Señala rápidamente en una esquina de la habitación varios rollos de telas, algunos de cuero negro y rojo, los demás de colores más claros, otros contenían estampado y así…hasta sumar una gran cantidad de estos- Komui me ordeno que me preparara para lo que fuera, así que eso hice – Lanza una sonrisa de oreja a oreja, mientras una extraña aura de flores, y corazones se podía apreciar alrededor de su pequeño cuerpo frágil.


    -Vaya, creo que exageraste tan solo un poco – Ríe algo nerviosa, pero muy dentro de ella sabía que las cosas seguramente se pondrían un poco más interesantes y requerían de todo el material que tuvieran en mano; Nadie sabía con qué podría salir su hermano mayor.-


    Una vez terminada su labor con los chicos, se dirigió a la oficina de su hermano, abriendo la puerta de aquella gran habitación encontrándose con el mismo desorden de todos los días, papeles y quien sabe que otra cantidad de cosas regadas por el suelo de lugar. Alzo la mirada un poco encontrándose con su hermano, encima del escritorio cubierto de documentos, y al parecer completamente dormido, seguramente no había revisado ni la cuarta mitad de aquella pila llena de escritos importantes; Suspiro, realmente no podía hacer nada al respecto, y prefería no hacerlo, desde que él había llegado a salvarla sus días en la orden habían dejado de ser tan oscuros, incluyendo a los demás también, realmente ese ambiente frio y lúgubre que alguna vez sintió en su infancia desapareció por completo ante la llegada de su hermano mayor aun no le había dicho la cantidad de cosas que había hecho para entrar en dicha institución, pero daba gracias todos los días de que el fuera el elegido entre tanto seguramente.


    Lentamente camino hacia el cuerpo inerte del peliazul, y con suavidad movió en el hombro despertando del Morfeo al hombre quien estaba encargado de la Rama Central. El joven chino empezó abrir sus orbes oscuros buscando con la mirada algo perdida a la persona quien había interrumpido su placido sueño, al instante reconoció a la única capaz de levantarlo sin necesidad de utilizar alguna vil mentira susurrada a su oído; Sonrió frente a él su pequeña hermana llevaba su taza de café con aquel dibujo de conejo horroroso que lo identificaba muy bien, como pudo salió de aquella montaña de basura para abrazar el cuerpo de la chica.


    -¡¡¡LENALEE!!! –Grita con una voz aguda como si de un niño pequeño se tratara-

    ¡Que bella mañana al encontrarme contigo!, ¿Cómo te fue? ¿A qué hora llegaste? ¿Está herida? ¿Quieres que te cuide?


    -Buenos días para ti también hermano, me alegra verte igual, nos fue bien pudimos recuperar la inocencia con éxito seguramente lavi te traerá el informe dentro de un rato, llegue esta madrugada junto a los chicos, no hermano fue un viaje tranquilo y no gracias no es necesario que me cuides –Respondió la china a cada una de las preguntas lanzas de manera abrupta hacia su persona, mientras limpiaba un poco el escritorio del chino para colocar su respectiva taza de café.

    -Joh… bueno, está bien entonces. –Infla sus mejillas de manera de berrinche, mientras toma su taza para degustar el líquido vital de la mañana- Delicioso como siempre.

    -Gracias –ve a su hermano sonriente- ¿Qué has pensado sobre las chicas hermano?

    -El chino lanza un largo suspiro, dejando suavemente la taza de nuevo sobre su escritorio, recostándose de su sillón rojo mientras ve a su hermana frente a él; ¿Qué podía pensar sobre eso?, jamás había tenido una situación de esas en sus manos, las cosas podrían salirse de control en cualquier momento, si es que ya no estaban fuera de ellas, no podía decirle a su superiores , no al menos que quisiera un suicidio por parte de los residentes de la orden, además que en su persona tampoco tenía muchas ganas de saber las decisiones del vaticano así que no esos estaba fuera de discusión. También estaba el otro tema del cómo habían llegado, todos estaban 100% seguros que las chicas eran compatibles, pero… ¿Qué pasaría si no lo fueran? ¿Que quizás solamente fueron voluntades de inocencia para cambiar algo en el destino?, aún tenía sus dudas incluso después de que allen y lenalee le dijeran lo que paso en aquel bosque su mente aun no lo procesaba, además que tenía que llevarlas esa día a ver a Hev…decisiones, decisiones…demasiadas para tan corto tiempo y tan para poca información. – Por el momento, solo seguir el protocolo y ya Lena, ya después veremos en el transcurso del día.

    -Está bien hermano –lo ve fijamente, al notar todas aquellos múltiples rostros que había colocado con tan solo hacerle esa pregunta, seguramente tenía muchas cosas pendientes y ese era un problema de proporciones gigantescas.

    Una vez culminada su respectiva visita con los de la sección científica, lenalee llevaba en sus manos aquellas grandes y pesadas bolsas para poder entregárselas a las chicas en la enfermería para que pudieran cambiarse, pero la tarea se le estaba haciendo algo imposible, aquellos paquetes eran extremadamente pesados, ni siquiera sabía que tantos materiales contenía adentro como para que pesaran de aquella manera tan abrumadora. Cada diez pasos tenía que detenerse para poder arreglarlas sobre su cuerpo, pues no encontraba el orden correcto ni una manera cómoda de cómo llevarlos, suspiro ni siquiera podía utilizar su inocencia para llegar más rápido podía romper o perder algo y sinceramente no quería que eso ocurriera.

    Fin Pov Narrador

    Pov Allen

    Diablos, y doblemente rayos, pensaba en esa palabra porque era educado pero literalmente estaba a punto de tirar todo por el barranco dios es que literalmente no podía dejar de pensar en esa pelirroja su estructura completa era el insomnio de sus noches, su presencia lo hacía temblar de tantas formas, jamás había tenía alguna reacción igual con alguien o algo que no fuera la comida, ni siquiera sabía cómo describir toda la adrenalina que recorría su espalda, cuello, nuca, piel todo. Se levantó molesto de aquella cama, ya que a esas alturas de la mañana ya no iba a poder conciliar sueño alguna, además tenía deberes que cumplir como para estar tirado en su habitación solo pensando en ella, se iba a volver loco o más de lo que ya se encontraba.

    Realice mi rutina mañanera como era de costumbre y salí de mi habitación directo al comedor donde pedí mi bandeja infinita de comida que contenían torres y torres de aquello que tanto me deleitaba se me hacía agua la boca de tan solo pensar en toda esa deliciosa comida que entraría en mi boca, porque sinceramente no existía mejor cocinero que Jerry, podía cocinar casi cualquier cosa y siempre estaba feliz con mi lista de supermercado. Soy su mejor cliente siempre me lo dice, poniéndome muy contento ya que yo también le tengo mucho aprecio. Me senté en mi respectiva mesa y rápidamente fui rodeado por todos mis compañeros obviamente exceptuando al Bakanda quien estaba al final de la habitación pero seguramente terminaríamos allí para joderle la paciencia como de costumbre y se ira con su mal humor de todos los días.

    Al final su desayuno termino siendo un desastre entre las peleas que tuvimos lavi, kanda y yo, sabía que aquello pasaría, el japonés se encontraba de un humor de diablo desde lo que paso en la mañana y no quería que lo molestasen incluso él sabía que el necesitaba su espacio para meditar sus cosas y acciones, fastidiándolo no lograría que aceptara a las chicas como tenían que ser; Aunque ya de por si era bastante raro que se comportara de aquella manera tan tosca con la pelinegra, pero era el nipones no podía esperar flores y estrellas de alguien tan seco y tan lleno de mal humor. Camine por el pasillo hasta encontrarme con cierto pequeñín que venía contento por lo que parece haber sido su misión.

    -¡THIMOTY! –grite al verlo, mientras le saludaba con la mano- ¿Cómo te fue?

    -Estaba de re chupete viejo, ¡los vencí súper rápido Tsukigami! –ríe socarronamente mirando hacia donde se encontraba su arma, la cual asentía felizmente por el trabajo bien logrado.

    -E…es allen –hago un puchero interno, definitivamente en aquel lugar preferían llamarme por cualquier otro apelativo que no fuera mi nombre real, sin contar que ya nadie me respetaba a pesar de tener ya 18 y ser un general. Suspire, simplemente no podía hacer nada en aquel momento- Me alegra saber que te fue bien entonces, a todas esta ¿Y Emilia? –Buscando a la susodicha rubia-

    -Probablemente me esté buscando…-comento aquel sinvergüenza, seguramente se le había escapado como otras veces, aunque no lo culpaba ella llegaba hacer un poco abrumadora pero tampoco es que el fuera un pan de dios. A pesar de tener 12 años seguía igual de travieso de cuando lo encontró, simplemente las cosas no cambiarían.

    -Bueno deberías regresar, sabes bien que se altera de sobre manera si no te encuentra rápidamente, no creo que quieras verla molesta –advierto mirando al chico frente a mi quien no oculta su descontento por tener que regresar con la rubia, pero derrotado acepta aquella realidad.

    -De acuerdo, pero no piense que es porque tú me lo ordenaste… ¡algún día también seré un general y te pateare el culo de anciano que tienen tú y el samurái afeminado! – comienza a correr por el pasillo y antes de desaparecer de mi vista me saca la lengua en como muestras de descontento. Sin darme chance de poder responder ante aquella ofensa lanzada hacia mi persona, pero en vez de enojarme me causa una sensación de felicidad, ese niño realmente se había integrado rápido a la organización después de su reclutamiento-

    Después de aquel encuentro, sigo mi caminata por el pasillo decidiendo si ir de una vez a la enfermería o ir a entrenar, pero consideraba que era muy temprano para aparecer por esos lares, suponiendo que aun las chicas se encontraban durmiendo. Mis pensamientos fueron interrumpidos por un pequeño quejido que provenía unos cuantos pasos hacia adelante, al cual rápidamente fue a verificar de quien se trataba llevándose una grata sorpresa.

    Fin Pov Allen

    Pov Narrador

    -¡Lenalee! –grito el albino con expresa sorpresa al encontrarse a la china sola por el pasillo rodeada de muchos paquetes de diferentes colores y formas.

    -¡Allen!, a dios gracias que apareciste, no sabía a quién llamar, o como contactarme con alguien, por favor necesito que me ayudes a llevar estos paquetes a la enfermerías –toma su brazo con desespero y haciendo uno de aquellos tiernos pucheros de los cuales ni el general Cross podía resistir-

    -Listo, no iba a poder salir de aquella trampa frente a él, sin más se dio por vencido y asintió dulcemente en ayudar la chica- Esta bien, déjame ayudarte con eso –sonríe como todo el caballero que es, y poco a poco comienza a tomar todas aquellas bolsas que tanto le costaba cargar a la chica.

    -¡Gracias Allen juro que te lo voy a recompensar muy bien! –abraza a su albino amigo con fuerza, o bueno con lo que le quedaba después de haber recorrido todo ese transcurso sola-

    Sin más, ambos exorcistas comenzaron su caminata hacia la sala de enfermeras que se encontraba casi en lo último de la orden, se había decidido que fuera de esa manera para que se pudieran evacuar a los enfermos o lesionados en caso de que volviera a ver una invasión dentro de la organización como la última vez, el vaticano no deseaba tener más bajas y el resto de los integrantes de esta tampoco deseaban volver a pasar por un evento tan traumático como eso de nuevo. La trayectoria se pasaba entre conversaciones de lo ocurrido en estos últimos días, sus misiones y cosas triviales para olvidar por completo el peso que ambos llevaban; Lenalee disfrutaba mucho la compañía de allen al igual que él la de ella puesto que tenían una muy linda conexión casi como la de unos hermanos, se ayudaban mutuamente, aunque obviamente era la china que llevaba la batuta.

    El transcurso del resto de viaje fue rápido, llegaron a la sala de enfermeras en diez minutos, pero antes que estor pudieran tan solo abrir la puerta de la habitación un estruendoso ruido se escuchó desde adentro y con ello que dicha estructura de madera se abrirá de golpe dándole de lleno al pobre albino, tirándolo al piso con todo y bolsas.

    -¡¡¡ALLEN!!! –Grita la china al ver al chico perder la conciencia en ese momento-


    Sala de Enfermeras

    10:20 am Junio 22



    Todos en el lugar quedaron en frio al ver al albino inconsciente en el piso de la enfermería, ninguna persona hacia acción alguna no sabían cómo afrontar la situación. La primera en acercarse para saber si el chico se encontraba bien fue la china quien al verlo respirar sintió un alivio, lo único que tenía era un enorme chichón en la cabeza debido al fuerte golpe pero nada que no se pudiera tratar. Las viajeras tenían un sinfín de expresiones al ver al alma más pura que conocían medio muerto en la puerta de la habitación, y todo por la rubia impulsiva y sus ganas de asesinar a cierto japonés.

    Ya habían transcurrido alrededor de 20 minutos y el chico aún seguía inconsciente pero ya no estaba en el piso, las chicas los había levantado y puesto sobre las camilla más cercana que era la de Gabriela dejándolo reposar hasta que despertarse, por lo tanto las jóvenes al ver que este no reaccionaba ante su silencio procedieron de conversar sobre algo tema del cual pudieran discutir y uno de ellos era la razón de por la cual lila había salió de manera tan brusca de la enfermería.

    -Parece que estará así un buen rato… -suspira la china y voltea a ver las a las chicas- ¿Qué paso exactamente antes que llegáramos? Las tres se veían muy alteradas

    -Disculpa –comento una apenada pelinegra quien no sabía dónde meter la cara ante lo ocurrido- Gabriela y yo le estábamos comentando a lila lo ocurrido esta madrugada con el General Kanda, pues… se molestó y llegaron justo en el momento en el que iba a ir según ella destrozarle la cara

    -Maldito bastardo ese… juro que no se saldrá de esta –bufa molesta la rubia mirando a la china- ¿Cómo pueden defender a una bestia como esa?

    -No lo defiendo, pero créeme que tendrá su debido castigo en cuanto le comente al supervisor –dice seria la peliverde a la pequeña- esta vez se pasó de la raya, y no se lo voy a permitir, no mientras este con vida.

    -Tampoco fue que cometió algo asesinato o algo por el estilo, no tiene que exagerar las cosas, solo fue una simple reacción a un ente desconocido –defiende la morocha mirando a las chicas- por favor, déjenlo pasar, no quiero problemas con él.

    -Si pero dicha reacción casi llega a la mutilación –bufa con leve molestia la pelirroja, aunque sabía que hablar con la chica era caso perdido. Cuando se trataba del japonés no habría nada ni nadie que la hiciera cambiar de opinión, lo defendería siempre justificándolo- aunque desde mi forma de pensar debería tener al menos alguna penitencia, por lo ocurrido… o una simple advertencia.

    -Gabriela tiene razón, deja que lenalee se lo reporte al complejo de hermana y que esta decida que hacer, tiene que tener alguna sanción por esto –cruzada de manos la rubia mientras dirige su mirada a la china-¿Verdad?

    -Eso es cierto, al menos con una advertencia estoy segura que él no volverá a cometer el mismo error dos veces, así que no te preocupes.

    -Si con eso están felices, está bien…pero realmente no quisiera meterme en problemas con él, su actitud realmente no es la de un ángel –suspira derrotada la morocha sabiendo de antemano que ninguna se quedaría tranquila ante aquel echo. Dirigió su mirada hasta donde se encontraba el albino inconsciente sintiéndose culpable de saber quién había recibido toda la ira de su rubia amiga, y no era para menos lila podía llegar hacer un demonio cuando se trataba de ellas. Observo con detalle que al lado de este había una gran cantidad de bolsas y le pico un poco la curiosidad del saber el contenido de todos los paquetes, aunque también le había parecido un poco extraño la presencia de aquellos dos exorcistas en tan tempranas horas de la mañana apareciendo frente a la habitación de ellas- A todas estas Lenalee… ¿Qué venían hacer tu y allen tan temprano por aquí?, se supone que todos nos reuniríamos en la tarde, no a estas horas.

    -¡Cierto!, casi se me olvida –se levanta de golpe y ve a las chicas- Johnny les mando ropa y algunas cosas para que estuvieran cómodas durante su estadía aquí, dijo que era mientras tanto verificaban en que rama iban a comenzar a trabajar a partir de ahora, ya después irán de compras conmigo o Miranda –le enseñas las múltiples bolsas de compras de boutiques, perfumerías, cosas de aseo personal etc., etc.-

    -¡GENIAL! -grita la más joven del grupo – ya me sentía como una vagabunda utilizando la misma ropa durante toda la semana

    -No puedo creer lo imprudente que puede llegar hacer lila –suspira derrotada la pelirroja al ver a la chica literalmente irse de chapuzón encima de las bolsas que había traído la china-

    -Es lila, jamás las vas a poder cambiar –ríe la morocha- muchas gracias por todo lenalee, realmente lamentamos ser una molestia en estos momentos tan críticos –se inclina levemente como señal de disculpa-

    -No pasa nada, somos familia hay que cuidarnos entre todos, además más de uno aquí está más que emocionado porque se unan a la orden. Están esperando los resultados de los análisis de hevrasca en la tarde, hay mucha expectativa de por medio

    -Vaya, y yo creí que la presión la había dejado en mi otro mundo con mi abuela, pero al parecer aquí también esperan muchas cosas increíbles sobre nosotras… -comenta la pelirroja-

    -¡PUES, HAY QUE CUMPLIRLAS SEÑORITAS, SOMOS LA ESPERANZA DE ESTA ORGANIZACIÓN!

    -Dudo un poco tu teoría pero dejare que seas feliz –ríe la morocha-

    -¡Dios, dame paciencia, porque si me das fuerza la mato! –suspira agotada la pelirroja ante el alborota armado dentro las habitación-

    Una hora más tarde, las chicas ya se encontraban completamente cambiadas con sus nuevas vestimentas elegidas exclusivamente por Johnny.

    Gabriela fue la primera en salir del baño mostrando su Outfit, el cual consistía con un mini-short de cuero negro, una suéter de color rojo de cuello tortuga y manga larga, panti-medias con diseño de rosas negras, y zapatillas de tacón cuña amarrados en el tobillo de color rojo de satín. Su cabello se encontraba sujeto en una cola alta de caballo la cual al final estaba tranzada siendo sujetada con una pequeña liga negra, en la liga superior estaba decorada con dos rosas de encaje dorador y negro, su flequillo estaba aún lado de su rostro dejando caer dos pequeño mechones de cabello para culminar su peinado. Estaba levemente maquillada con polvo, rubor en sus mejillas y brillo de labios rojo que hacia relucir su belleza natural.

    Lila fue la siguiente en culminar su Outfit también, consistía con un pantalón de Jean negro ajustado al cuerpo, una camisa de vestir de color verde esmeralda encima de esta una pequeña chaqueta de color negro con dos botones de color dorado, sus zapatillas sin tacón eran unas de color esmeralda de satín con una decoración encima en forma de lazo. Su cabello estaba completamente suelto, sujeto levemente a los lados con dos listones de encaje negro y verde; Tenía solo un poco de polvo en su rostro y brillo en los labios ya que ella prefería maquillarse para ocasiones especiales o eventos.

    María luna fue la última en salir debido el vendaje de sus manos, su Outfit se encontraba conformado con un vestido de escote corazón, el cual era sutilmente cubierto con una tela negra semi-transparente hasta el cuello dándole una forma de cuello tortuga pero con la espalda descubierta, en la cintura del vestido tenía una cinta que pasaba por toda su cintura de una tonalidad azul celeste desde allí la falda decencia hasta las rodillas en corte A en capas dándole la forma de una rosa. Su piernas estaban cubiertas por Panti-Medias del mismo color de la cinta del vestido pero a diferencia tenía un diseño de flores Victorianas como un hermoso tapiz, sus zapatos eran botines de cuero negro con tacón aguja abiertos en la punta dejando ver parte de las medias. El cabello al igual que el de Gabriela estaba sujeto en una cola alta dejando caer sus ondas libremente por su espalda y su flequillo de un lado del rostro con algunos mechones; Tenía poco maquillaje en el rostro y para culminar sus manos estaban cubiertas por guantes de cuero azul que protegían sus manos vendadas.

    -¡Woow luna!, ¿Podrás caminar con eso aquí? –pregunta Gabriela al verla echarse algo de perfume y arreglando las cosas que había elegido para ella-

    -He caminado en lugares peores, además son cómodos –ríe la chica son suavidad, mientras ve a sus amigas también arreglar sus cosas- además, creo que lenalee estaría de acuerdo conmigo en decir que no hay nada más genial que andar en tacones y fabulosa en plena guerra.

    -Bueno, personalmente preferiría un calzado cómodo, pero debido a mi inocencia no tengo esa opción…pero no te negare que caminar con tacones en plena guerra es realmente fabuloso –comenta la china, quien al terminar de contestar vuelve a ver a luna con curiosidad- ¿Tu, como sabes de mi…?

    -¿Lo dijimos no?, sabemos cosas que ustedes no se pueden ni imaginar –susurra Gabriela, sentándose a ver a lenalee-

    -Pero tranquila, nuestra fe está en la Orden, no los traicionaríamos por nada, ni por nadie, ¿Verdad Luna?

    -Muy cierto lila…no tienen por qué temer, si nuestro propósito es ayudar aquí, estaremos hasta que nuestra misión termine y regresemos a donde pertenecemos.

    -De acuerdo –esboza una sonrisa la peliverde, quien se levanta de la silla en la cual estuvo sentada todo el rato, lanza una pequeña mirada al reloj de la pared del cuarto notando que aún es muy temprano para ir con su hermano, pero realmente sentía muchísima curiosidad por saber los resultados de las chicas y estaba más que segura que ella también querrían ir a resolver ese tema de una vez; Por lo cual se los propone- ¿Les parece adelantar los análisis?

    Un suave silencio apareció dentro de la habitación ante lo expresado por la exorcista, las tres viajeras se miraron entre sí como buscando alguna respuesta ante aquello, no sería mala idea adelantarlo ellas estaban igual de curiosas que los demás por saber lo que diría la guardiana pero …¿Estarían listas para eso?, quizás sus mentes no dudaban en querer pertenecer en aquel mundo, pero … ¿Su corazón estaría de acuerdo ante tal elección tan importante?, había que recordar que una mala sincronización podía llevar a la muerte, o a la negación de la inocencia misma. Pero aun así lo deseaban, lo necesitaban, todo su cuerpo transpiraba emoción, miedo, deseo, éxtasis entre otros. ¿Cómo desperdiciar una oportunidad como esa?, solo pasaría una sola vez en la vida, aunque todo esto se tratara de un sueño, pero habría que intentarlo aunque sea por un momento.

    -Hagámoslo –sentencio la rubia mirando a sus dos acompañantes, quienes ante lo expresado por la chica, sus rostros fue de suma impresión- no tenemos nada que perder de igual manera

    -Lo dices tan fácil, pero creo que mi corazón se rompería en mil pedazos si no fuera Usuaria –suspira la pelinegra quien miraba la pantalla de su teléfono, la foto de aquel japonés que tanto adoraba-

    -Comprendo eso luna, pero lila tiene razón, no podemos estar aquí simplemente estorbando, tenemos que ser útiles de alguna manera, siendo portadoras o no portadoras, la idea es cambiar las reglas del juego y poner la balanza a favor de la orden, no en contra de ella

    -Está bien –suspira pesadamente apretando suavemente sus manos, mientras lentamente su mente caía en un mar de dudas- vayamos entonces

    -Entonces… ¿Qué estamos esperando?, vayamos a la oficina de mi hermano –sonríe la china quien se levanta de un golpe caminando hacia la puerta-

    -¿Qué hay de allen? –Pregunta la pelirroja preocupada al ver al chico quien aún no despertaba del golpe-

    -Déjalo allí tirado, no le va a pasar nada Gabriela…, al menos que quieras quedarte de enfermera personal para cuidar al dulce príncipe de la organización –Ríe lila con clara maldad, haciendo colorar a la pelirroja-

    -Eres cruel...Rodríguez, eres cruel…pero mi venganza será absoluta créeme.

    -Tranquila Gabriela, lila tiene razón allen estará bien aquí, además así podrá descansar un poco más, se veía cansando esta mañana –Masculla la china, ante la preocupación de la pelirroja del grupo, pero sin dejar de reír por dentro ante las declaraciones de las más joven por los comentarios hacia esta.

    Todas las chicas comenzaron su andar hacia la oficina del susodicho supervisor, o como las viajeras lo conocían “El complejo de hermana”, ¿Por qué lo llamaban así? Sencillo, tenía una seria obsesión por su hermana menor, la gran mayoría sabía por qué aquel trato tan toxico hacia esta, pero muchas veces llegaba hacer frustrante y fastidioso e incluso llegaba a meter en problemas a más de uno por las ocurrencias que pasaban por su mente al intentar sobreprotegerla de los hombres O “Pulpos” como el los llamaba. Las cuatro llegaron rápidamente al despacho del chino mayor, encontrándose con lo que siempre veían en la serie…Una gran habitación con muchos papeles y quien sabe que otra cantidad de cosas extraña; Lo curioso es que se encontraba despierto y trabajando, eso era nuevo y casi aterrador si hablamos de él.

    Komui se dio cuenta inmediatamente de las chicas apenas entraron a su despacho, expresando una sonrisa de oreja a oreja al ver a su pequeña hermana reunida con las viajeras, realmente para él era una imagen bastante agradable, poco veces tenían el placer de tener invitadas de las edad de los exorcista, tal vez podía ser bueno para ellos como para la orden, tener algo de diversión y diversidad para variar un poco lo negro de la guerra que se avecinaba.

    -¡¡¡LENALEE!!! –Grito el chino de emoción, soltando toda aquella ruma de documentos que estaba frente a él para adherirse a las piernas de la chica, apenándola con todos los presentes- ¿Volviste para acompañar la pobre alma de tu queridísimo hermano mayor?

    -No… vine por otra cosa hermano… ¿Podrías por favor soltarme? –suspira por debajo-

    -Joh…está bien, solo porque me lo pides –se levanta, dirigiendo su mirada a las chicas- supongo que ustedes vienen a acompañar a mi dulce hermanita…¿Verdad?

    -Venimos a ver a hevrasca –Suelta lila de una vez la bomba, dejando a un komui fuera de sí al escuchar la declaración de la rubia-

    -No creo que esa sea la forma de decirlo lila…lo dejaste un poco en shock –mira Gabriela al chino a quien no le salía palabra alguna por lo escuchado.

    -Sí, hay forma más dulce de decir eso…-se acerca la morocha al chino tocando suavemente su hombro, acción que logra que el chino toma su mano con fuerza como si quisiera que no lo dejara- komui…

    -¿Seguras?, una vez la decisión este tomada no podrán retractarse, y si son compatibles, no podrán regresar a su casa hasta que la guerra termine, eso podría tomar años, morirán incluso estando aquí atrapadas –Las observa con plena seriedad esperando que recapacitaran sobre el asunto-

    -¿Chicas? –Pregunta la china menor-

    -Yo no tengo nada que pensar, así que sigamos con esto –Camina la rubia hacia adelante tomando el brazo del chico- veras que acabaremos con esta guerra más rápido de lo que piensas

    -Gabriela miraba a todos, pero algo dentro de ella sabía que tenían que hacerlo debía confiar en que todo saldría bien, dudar no era una opción… y si su corazonada era verdadera saldría ganando de aquello, ¿Su abuela? No importaba mucho, ya estaba un poco loca, su madre estaba muerta, y su padre Ni siquiera sabía que existía, así que realmente no tenía nada que perder, al igual que lila su familia era disfuncional, adoraba a su abuela, pero quizás sería mejor para ella el pensar que no estaba con vida y así descansar el tiempo que le quedaba en este mundo.- Amo este lugar al igual que amor mi hogar, quiero cuidarlo y me enfrentare a todo para cuidarlo, no tengo absolutamente nada que pensar además, seré más útil aquí que en mi propio mundo.

    -No quería ser egoísta, pero literalmente Gabriel y Lila no tenían nada que perder, nadie las esperaba del otro lado, sus vidas no son las mejores del mundo, a comparación de ella, tenía una familia, unos padres de los cuales preocuparse, una vida que seguir apenas contaba con 18 años su vida podía seguir de manera tranquila ¿Qué pasaba si nunca volvían?, ¿Sus padres vivirán con el hecho de que su única hija está desaparecida y quizás hasta muerta?...Su corazón latía rápido, más eran las preguntas que las respuestas pero debía pensar rápido sobre el asunto, si ella se echaba para atrás sus acompañantes también lo harían, no quería arruinar quizás su única oportunidad de huir del mundo real- Tampoco yo, es nuestra única oportunidad de ser útiles así que vayamos al asunto … -Lanzo su primera sonrisa falsa desde hace ya mucho tiempo, sus labios mentían pero su corazón gritaba el no querer hacerlo.

    -El chino no se encontraba muy convencido por la declaración de las tres, pero no podía obligarlas a echarse para atrás, ya que era su propia decisión el intentar, solo quedaba rezar para que las cosas se dieran a la voluntad de su corazón y no a la de la inocencia; Se levantó del escritorio sacudiendo su uniforme y procedió a caminar hasta la puerta de salida bajo la mirada de las chicas- Bien, vayamos entonces, no perdamos más el tiempo.

    Cada una de las chicas empezó a caminar rumbo a donde se dirigía el Superviso, obvio que sumidas en sus propios pensamientos, pero ya no había tiempo de retornar. Pasado 40 minutos de un largo trayecto para llegar hasta la guardiana los 5 se colocaron frente a los que parecía ser una inmenso vacío oscuro y terrorífico; El ambiente era frio, se escuchaban los ecos de los pasos de todos logrando que la tensión fuera más pesada, Komui al ver que ya las tres se encontraban posicionadas en su respectivo puesto procede a llamar a la Guardiana de la Orden.

    -Bueno chicas, ya que están aquí les presento a la exorcista más vieja de la orden, Guardiana de las 109 inocencias del vaticano…Hevrasca –Una Enorme figura de tonos azules y verdes hace aparición donde antes había un lugar vacío, mirando fijamente a las tres viajeras, que no hacían crédito a lo que veían, en sus mentes lograron entender del porqué Allen se asustó cuando la vio por primera vez, es que esa cosa era ENORME.

    -Muy buenas Tardes, me alegra poder verlas y conocerlas finalmente sus inocencias no paran de hablar de ustedes y de lo maravillosas que son – mirando a las tres chicas y luego ve a komui y Lenalee- me alegra verlos también

    -Igualmente Hevrasca –sonríe con clara felicidad la chica al ver a su protectora.

    -Por lo que veo, ya analizaste los resultados de sincronización de cada una –comenta el chino al ver a la guardiana- ya no es necesario que me digas que son compatibles.

    -Komui…que sean compatibles, no quita el hecho que a la hora de la sincronización su cuerpo no aguante el poder de la inocencia –habla la Guardiana-

    -Tiene razón, no debemos confiarnos, por lo menos ya sabemos que somos compatibles con el cubo, ahora viene la parte realmente retadora –habla la pelirroja.

    -La sincronización…-suspira la pelinegra mirando a sus amigas- ¿Quién ira primero?

    -¡Ja! Es obvio que yo… -Camina la más pequeña del grupo hasta la barandilla de la plataforma sonriéndole a la Guardiana- bien, terminemos con esto…

    -¿Seguras? –mira komui a las mayores esperando que alguna de ellas hiciera retroceder a la chica para dejarla de ultima. Pero lo único que consigue es un suspiro de cansancio y un asentimiento por el atrevimiento de la rubia menor, logrando que una pequeña gota de sudor resbale por su nuca ante la reacción de las mayores.- Procede hev

    -De acuerdo komui

    La Guardiana toma a lila entre sus tentáculos, mientras de su gran cuerpo expulsa lo que es la inocencia de la chica, la cual comienza a colocársela dentro del cuerpo haciendo que toda la estructura anatómica de la rubia empiece a temblar ante el cambio de energía de este, su mente incluso empezaba a recordar todo aquello vivido en el pasado llegando al punto por el cual su sola existencia era necesaria para la energía que estaba recibiendo en ella., lentamente cada partícula de este comienza asimilar cada parte de la materia echa de inocencia alojando la inocencia de manera exitosa dentro de la chica sin que sufriera mucha daño tanto físico como mental debido a la buena sincronización que tenía con ella.

    -Lila Rodríguez, Tu inocencia se llama Twins of Fire puedes invocar cualquier arma de fuego que exista en ambos mundo, ¿a qué me refiero con esto? Tanto las armas creadas en esta dimensión con las de la tuya son factibles para que tu inocencia las copie a la perfección. Tu sincronización es del 73% deberás entrenar mucho si quieres llegar al 100% te deseo suerte en esta guerra y que dios y el vaticano te acompañe. –Termina de hablar la guardiana hacia el supervisor-

    -¡GENIAL! Me huelo a final de año como general –mirando a sus amigas con pose de heroína-

    -Yo considero que es la peor inocencia que la vida pudo haberle dado a la loca esta –suspira Gabriela derrotada, imaginando la cantidad de cosas que haría su amiga una vez que aprendiera a usar su inocencia.

    -Claro a la terrorista denle armas, ¿Qué es lo peor que puede llegar a pasar? –Mira luna a Gabriela entendiendo su cara de preocupación- supongo que tendremos que controlarla…

    -Ni lo dudes por un momento

    -¿Quién sigue? –Interrumpe el chino a las chicas quienes no dejaban de ver con preocupación la inocencia de la rubia, la cual estaba flotando en sus manos, debido que komui tenía te buscar una forma para la chica.

    -Yo –camino hacia la barandilla la pelirroja quien se inclina levemente para saludar a la mujer frente a ella- Un placer

    -Lo mismo digo…Empecemos

    Al igual que paso con la rubia menor, Hevrasca tomo a Gabriela entre sus grandes y largos tentáculos comenzando a expulsar la inocencia de la chica de su interior. Los pensamientos de Gabriela interrumpieron su cabeza de manera brusca recordando todo y cada uno de los momento vividos en su mundo, cada uno de aquellos desgarradores y doloroso momentos que sentía a piel viva quemándola, torturándola destrozando su ser pero haciéndola más fuerte logrando casi de manera inmediata el resultado de todo su sufrimiento…Una sincronización con el material del vaticano y de dios, La inocencia; Aunque fuera rápido el proceso de sincronización de la chica esta había tardado más que la rubia debido a colapso de todos sus pensamientos y emociones que la hacían dudar pero a la final logrando el objetivo.

    -Gabriela Gómez, tu inocencia se llama Roses Of Blood, es un látigo el cual te permite tomar el alma de los akumas convirtiéndola en rosas que se tornan del color de la sangre, para después ser destruidas liberando sus almas, Tu inocencia contiene más de una forma deberás liberarlas en tu proceso de aprendizaje, posees 69% de sincronización, entrena y serás grande al igual que tu poder, Que el vaticano y dios te ayuden y acompañen en esta guerra.

    -Muchas gracias –agradece la chica a la guardiana, dirigiéndose de nuevo a donde se encontraba su pelinegra amiga, no sin antes dejarle la inocencia a komui quien tomaba anotaciones de todo lo descrito por la enorme figura frente a él.

    -Supongo que utilizaras ropa de cuero ¿No?, Una pelirroja con un látigo es el fetiche de muchos en este mundo –ríe la pelinegra al ver la cara de molestia de su amiga por el comentario- Estoy que creo una película porno solo por esto

    -Uf Gabriela…si de esa forma vas conquistar a Allen, le tengo envidia –llega la rubia para abrazar a la pelirroja- creo que apoyare a luna con lo del video

    -Basta ustedes dos, no sean indecentes nos están escuchando…nadie aquí puede saber que nos gustan los chicos de la organización o estaremos en graves problemas.-susurra la pelirroja-

    -Muy tarde, realmente son malas susurrando entre si –ríe la china al ver a las tres sonrojarse por el comentario de esta- pero tranquilas, mantendré su secreto a salvo, pero después de esto deben decirme quienes son.

    -Eso es Extorción lenalee –susurran las tres-

    -Lamento interrumpir pero debemos proseguir… -sonríe el chino al verlas reunidas- María Luna eres las siguiente.

    -Está bien, pero por favor no me pongan nada porno como a Gabriela –ríe caminando a la barandilla quedando frente a hevrasca.

    -¡MARIA! –grita la pelirroja ante su comentario tan indecente.

    La guardiana tomo de la misma forma a la morocha como había hecho con la última dos anteriores, y comenzó a expulsar su correspondiente inocencia para que pudiera sincronizarse con ella implantándosela lentamente en su interior. María sintió un choque de pensamientos y emociones tan grandes que apenas podía controlarlos, su cuerpo se retorcía, y sudaba con todo lo que estaba sintiendo, el dolor era más grande de lo que llego a pensar, su mente no dejaba de pasar imágenes de su pasado y presente, su corazón lentamente estaba entrando en un estado de taquicardia, su piel estaba tres tonos más blanca de lo regular, su presión sanguina había bajando de manera casi radical siendo percibida por todos.

    -Hevrasca, ¿Qué está pasando? –Pregunto preocupado el chino al ver estado de la chica-

    -No puedo… komui… -lanzaba la enorme criatura.

    -¡¡¿QUE DIABLOS ESTA PASANDO?!! –Gritaba la pelirroja al ver como se retorcía su amiga entre los tentáculos de la guardiana-¡KOMUI!

    -¡KOMUI BAJA A MARIA DE ALLI¡ -grita lila quien corría a la barandilla con desespero-

    -¡LILA NO VAYAS! –Intenta detener la china-

    -¡HEVRASCA BAJALA! –Mira el supervisor a la criatura-

    Antes que la guardiana pudiera hacer algo más, suelta a la chica casi de manera desesperada pero logrando crear una pequeña explosión dentro del recinto haciendo volar a todos, dejando a la chica tirada en el pequeño balcón frente a ella mientras veía a la joven semi desmayada por la sincronización; Con la mirada busca al supervisor quien se encontraba tirado en una esquina lejana quien observaba la criatura preocupado esperando alguna aclaración por lo sucedido tan solo unos segundos antes, pero lo único que pudo escuchar fue…

    -Incompatible…

    Continuara...
     
    Última edición: 11 Julio 2020
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    Maria Luna Contrera

    Maria Luna Contrera Maria Luna Contrera

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    [Longfic] Destino Entre Dimensiones.
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    Capítulo X

    Un Día antes de la Tormenta



    Black Orden

    25 de Junio 9:30 am –Siglo IXX

    Jardín de Rosas- Lateral Derecho


    Habían transcurrido 3 días desde la visita de las viajeras con la guardiana de la orden, obteniendo sus respectivas recompensas por la lucha en su dimensión tan solo uno días atrás. Claro no todo había resultado color de rosa, desde aquel acontecimiento las cosas en la orden cambiaron de manera drástica, uno de los cambios que se presento fue que a partir de ese momento, fue que Lila y Gabriela eran aprendices del General Allen Walker, dejando al albino bastante sorprendido por la decisión del Supervisor aceptando casi de manera inmediata a la dos chicas, la otra era que María Luna era la aprendiz del General Yuu Kanda ¿Razones?, sencillas…su inocencia no era compatible con ella, ¿Era esto posible? No, jamás había pasado algo así desde los inicios de la creación y la guerra, no existía registro alguno sobre un caso como este; Tener inocencia y no ser compatible con ella, ¿Qué con llevo a esto?, que la chica fuera trasladada al Área de buscadores mientras buscaban la manera de que sincronizara con esta, mientras Kanda la entrenaría para despertar lo que hacía falta en un exorcista “determinación” o eso era lo que había dicho la inocencia de la chica a la guardiana.

    Estos eran algunos de los pensamientos de komui aquella mañana, quien curiosamente se encontraba a las afueras de su oficina observando detenidamente a la pelinegra sentada en el jardín de rosas de la orden, o uno de los tantos que había allí. Desde lo ocurrido yacía tres días, la joven no había dejando de ir a ese lugar, siempre se sentaba a solas lejos de sus dos amigas, quienes muchas veces intentaron animarla pero nada, quería permanecer lejos de las personas, lo único que llevaba cuando estaba en el lugar era una carpeta de Hojas blancas que había pedido en la Sección científica, una cartuchera que tenía en su casillero en la enfermería, y un extraño aparato parecido a un Golem pero más aplanado y con una mejor pantalla; María luna podía durar horas allí hasta caer la noche y regresar a su habitación sin consumir alimento alguno, y repetir el mismo proceso al día siguiente, realmente no la culpaba , debía ser decepcionante saber que eres negada por tu propia inocencia, y esto realmente le preocupaba.

    Flash Back

    -Incompatible…

    -¿Es una broma verdad? –Preguntaba lenalee quien se levantaba del piso toda adolorida, mientras que al mismo tiempo buscaba la mirada de su hermano mayor-

    - No

    -Eso es imposible, tu misma hiciste los análisis hevrasca, ¿¡Cómo va hacer incompatible?! –Miraba komui fijamente a la guardiana-

    - Su corazón y mente contienen tantas dudas que la sincronización no se pudo completar debidamente. No tiene la determinación para ser una exorcista komui –termino de hablar la enorme criatura-

    -¿Dudas? –Susurra lila- ¿María luna teniendo dudas sobre si vivir aquí?, creo que estas equivocada, creo que deberían volver a intentar

    -No considero que sea una buena idea lila… -ve a su amiga rubia quien ya estaba completamente recuperada de la pequeña explosión ocurrida al igual que maría-

    -Lila tiene razón, déjame intentarlo de nuevo komui –lo ve la pelinegra levantándose de un golpe para ir de nuevo donde la azulina criatura-

    - No… -menciona komui- Si sabes tanto sobre este mundo, ¿Estas consiente de lo que le pasa a las personas que fuerzan la sincronización?

    - Si pero

    -No, sin peros Luna, komui tiene razón, es suficiente por hoy, no debemos seguir arriesgándonos más –toma el hombro de la chica con fuerza- lo intentaremos después… ¿sí?

    -De acuerdo Gabriela –suspira la morocha mirando a hev- solo una pregunta… ¿Por qué me rechazo?

    - La guardiana la ver fijamente, y lentamente con uno de sus tentáculos toca su corazón- Perdiste la determinación que te trajo a este mundo, por la cual fuiste compatible desde un principio. Debes recuperarla, si no nunca podrás unirte a la inocencia y creme cuando te digo que estamos perdiendo una valiosa exorcista, porque una vez elegido el usuario no va a cambiar de dueño hasta que el cubo encuentre aunque sea una mínima posibilidad de compatibilidad hasta su muerte, así que te recomiendo que recuperes eso que perdiste y que dios y el vaticano te acompañen en esta Guerra –Termina-

    -Regresemos a la enfermería –sonríe la china menor, mientras komui lleva a todas de nuevo al ascensor para subirá a su oficina-

    Pasado los correspondientes 20 minutos, ya todos estaban de nuevo en la oficina del supervisor, esperando que diera las siguientes indicaciones a lo que iba a pasar a partir de ese momento, y también de lo que iba a ocurrir con la morocha quien no dejaba de pensar lo ocurrido allá abajo. El chino las observaba detenidamente a todas, como esperando alguna iluminación del cielo para poder decidir qué hacer, ya que no tenía ni idea de cómo proceder ante la situación frente a él; Lanzo un suave suspiro y comenzó a mover varios documentos en su desordenado escritorio bajo la mirada intrigante de las cuatro chicas.

    -De acuerdo, creo que comenzare a reubicarlas con sus respectivos maestros, o generales –comenta con suavidad mientras ve a las chicas- harán lo que todo exorcista debe hacer cuando entra, exámenes regulares, llenar una serie de informes entre otros, lenalee las guiara en eso, el Supervisor Reever y mi persona nos haremos cargo de la forma de que adquirirá su inocencia a partir de este momento, tardara unos días pero estarán listas para la siguiente batalla; Por otro lado aunque sus inocencias estén listas sus generales serán los que decidan si ustedes están capacitadas para ir a una misión, ellos me darán los informes correspondientes a sus avances como exorcistas. En cuanto a ti María Luna –Levanta la mirada detallando como su expresión se encontraba vacía y sin brillo, solo estaba allí esperando como robot instrucciones de su parte- Puedes ayudar en...

    -Quiero estar en la Sección de Enfermería, en mi juventud fui pasante de Enfermera…puedo ser de ayuda allí más que en otra Sección –interrumpió al chino-

    -María, ¿Esta segura?, además esas pasantías como tales fueron en secundaria, nada que ver con la verdadera carrera… -Ve Gabriela a la chica con una ceja alzada-

    -Oye, gracias a eso luna sabe sobre primeros auxilios, y a identificar un monto de cosas que ni tú, ni yo sabríamos que hacer –defiende la rubia mirando a komui- además seguramente le enseñaran allí…

    -Bueno si te sientes cómoda estando con el grupo de enfermeras no veo el por qué no… -sonríe suavemente lenalee- ¿Tu que dices Hermano?

    -No –hablo el chino, un poco serio, ganándose la atención de las cuatro chicas presentes- Comprendo que te sientas mal, y sobre todo destruida moralmente, pero no puedes huir de tu verdad Luna –se levanta tocando suavemente su hombro- eres necesaria, como tus amigas así que no te rindas… tu inocencia está allí abajo esperando por ti, demuéstrale que tienes lo necesario para ser una exorcista de elite ¿De acuerdo? –sonriendo suavemente-

    - Muy bien –lanza un suave suspiro, mirándolo por el rabillo de ojo- ¿Qué sugieres?

    - Esa es mi chica –sonríe con alegría como lo caracterizaba, y con paso lento regresa al escritorio- Serás buscadora

    -Debes estar bromeando….

    -No, no estoy bromeando Lila, quiero que María sea buscadora, necesita estar en alto riesgo para poder activar lo que su inocencia desea, y creme que nadie más que yo desearía que hubiera alguna mejor forma de despertar aquello que el cubo de sea, pero es así como puedes activar una sincronización casi perfecta

    -¿Cómo la de Allen?

    -¡Exacto!, Como la de… ¿Espera como sabes eso Gabriela? –ve el chino impresionado a la pelirroja-

    -Recuerda que sabemos algunas cosas Komui… -le recuerda lila al chino- No es mala idea, pero es bastante arriesgada y casi peligrosa

    -Hermano considero que es algo suicida… -lo ve su hermana menor- Allen tenia por lo menos su inocencia con él en ese momento, ella no tiene nada…

    -Tranquila hermanita, no estará sola… así como sus amigas tendrán generales…ella también tendrá uno

    -Por dios todos menos Cross Mariam –suplico la morocha el imaginar aquel hombre intentando entrenarla, solo veía un futuro lleno de Deudas-

    -Yuu Kanda

    Silencio General en la oficina

    -¿Es broma cierto?, Casi prefiero a Cross

    -No, no es broma quería luna…¿Quién mejor que Kanda para que active tu inocencia?, tiene determinación, conoce mejor que nadie los caprichos del cubo y como buen Segundo exorcista ya que estamos en estas, podrá ayudarte más que Allen o cualquier General de la orden.

    -Si Supervisor, todo muy bello y hermoso, casi parece un cuento de hadas, pero se le olvida un pequeño, pequeñísimo detalle –habla lila haciendo un gesto con las manos de símbolo del pequeño-

    -Kanda odia a los buscadores

    -Con el alma –Termina la oración Gabriela de Lenalee.

    -Moriré antes de que diga “Buenos días, Soy tu alumna buscadora un placer” –Dice irónicamente la morocha al recordar todo lo que había pasado en los primeros episodios del anime, sin contar su ya “Historia” con el chico tan solo unos días atrás-

    -Lo sé, pero no hay nadie mejor, y deberá entender la situación –suspira komui derrotado al recordar los múltiples suicidios cometidos por kanda hacia los buscadores- además, como tal eres una exorcista, no una buscadora, solo es temporal, no creo que se moleste

    -Lo hará –dicen en coro las cuatro chicas-

    -Intento ser positivo chicas

    -Es kanda, nada de él es positivo…Quitando su belleza casi divina –suspira la morocha- en otras circunstancias, estaría feliz… en estas, siento que estoy firmando un tratado con el diablo de la orden; Pero bueno nada que hacer, esperar que no me mate.

    -¿Belleza Divina?, ¿Te gusta kanda? –Pregunta el supervisor levantando la ceja curioso por la revelación-

    -No exactamente, pero debo admitir que es muy bien parecido a mi gusto –Su corazón latía con fuerza, sabía que la había casi cagado con el comentario- Así como Allen y Lavi lo son… considero a Kanda una de las pocas bellezas de la orden, y estoy segura que lenalee me da la razón

    -Emm, algo así –susurra bajo temiendo por la reacción de su hermano mayor-

    -¿¡¡QUEEEEEE?!! ¡¿TU TAMBIEN LENALEE?! –grita tumbando todos los documentos lanzándolos por los aires, mientras realizaba aquel típico berrinche del cual todos los de la orden estaban acostumbrados-

    Después de un largo berrinche propinado por el chino ante las declaraciones de su “Inocente” hermana, las chicas por fin pudieron salir culminar con la reunión dando los últimos detalles de su estadía en la orden por tiempo indefinido. Aquella fue la última vez que la morocha había sonreído a sus amigas y al supervisor, tan solo poco después, solo se encerró en su pensar y sentimientos, sentando en uno de los jardines que propinaba la orden.

    Fin Flash Back

    Komui lanzo un suave suspiro, logrando que una pequeña nube de humo se visualizara debido al frio del ambiente, a pesar de estar en verano, las mañanas solían ser extremadamente fresca, por lo tanto muchos usaban abrigos hasta que pasaba del mediodía donde aparecía aquel sol tan fuerte que parecía derretir todo a su alrededor. Lanzo nuevamente una mirada hacia la joven sentada entre los rosales, parecía absorta en sus pensamientos, dentro de poco debía volver a la oficina, pero no podía abandonarla tenía que esperar que alguna de sus amigas llegase, lo cual estaban tardando más de lo habitual. Casi inmediatamente como si las llamara aparecieron por el lumbral ambas amigas de la chica, quien seguramente volvía de realizarse los exámenes correspondientes.

    -Lamentamos la tardanza komui, tuvimos problemas con los últimos exámenes lila no quería colaborar –suspiraba derrotada la pelirroja, recuperando el aliento después de aquel largo trayecto-

    -Odio las agujas, y esa mujer tenía intenciones de hacerme sufrir con ella –Bufa molesta la rubia, cruzando sus brazos en forma de berrinche-

    -Tranquilas no se preocupen, me alegro que culminaran con sus exámenes –ve a ambas terminado de tomar su liquido negro vital- Supongo que les toca ustedes, vigilar…Solo une recomendación, hagan que se realice los exámenes, sé que es duro, pero estoy seguro que ella lograra ser una gran exorcista –sonríe con suavidad- todos pasan por tiempos difíciles, que el de ella sea desde un principio significa grandes proezas en un futuro próximo.

    -No tienes por qué agobiarte komui, no es la primera vez que pasa algo así, pero de igual forma, buscaremos la manera de subirle los ánimos –Expresa con gratitud la chica, ante la preocupación del chino mayor.

    -Créeme cuando vuelva a ser ella, desearas que este en ese estado de nuevo, la orden ser volverá un completo desastre, maría no es un pan de dios que digamos –exclama con fuerza la rubia-

    -Espero de todo corazón, que así sea, prefiero ver destruida la orden por los integrantes que por los mismos enemigos. Bien me retiro a la oficina, me comunican cualquier avance, con permiso –da una leve reverencia y se retira del lugar dejando a las dos chicas solas en el corredor-

    Ambas se acercan a su amiga, quien al notar la presencia de sus dos compañeras decide quitarse los audífonos dejando a un lado la música que escuchaba en ese momento, aparto hacia un lado la carpeta llena de bocetos que estaba en sus piernas y espero a que ellas se acomodaran respectivamente cerca de su persona; Las Jóvenes toman asiento a cada lado de la peligra mientras esta comenzaba a rebuscaba entre sus cosas algo de importancia de mucha importancia. Pasado algunos minutos de silencio esperando que la pelinegra culminara su acción o dijera algo de interés por fin emitió un ruido de sus cuerdas vocales.

    -Me costó un poco, pero al fin pude terminarlos, son diseños un poco fuera de lo que la orden está acostumbrada, pero valdrá la pena a la final –sonríe la oji-gris entregándole en a cada una de sus acompañantes un boceto-

    -¡Wow! María esta vez si te luciste, ¡Me fascina mi diseño, parezco una verdadera pistolera! –Grita lila contenta con el resultado que había logrado su mejor amiga, al ver el diseño de lo que sería su nuevo uniforme de Exorcista-

    -Me alegro que te guste lila, supuse que un diseño más simple serviría contando que tu inocencia es bastante destructiva… ¿Y qué dices de ti Gabriela? ¿Te gusto? –Pregunta curiosa la morocha esperando alguna reacción de la chica-

    -Pues no mentiré que realmente están fuera de lo que regularmente usa la orden oscura, pero el diseño me encanta, ¿Crees que Johnny lo acepte?, seremos las únicas que tendrán uniformes diferentes al resto…

    -Esa es la idea cariño –le guiña el ojo a la pelirroja- ambas tienen un trabajo por delante a partir de este momento…-levantándose de la banca señalándolas con sus manos un cubiertas de vendajes- Tienen que conquistar a los exorcistas más codiciados de la orden señoritas, y no permitiré que lo hagan en fachas comunes, así tenga que tomar el mando de los diseños de sus uniformes.

    -¿¡Jaaa?! ¡Pero Gabriela la tiene fácil!, yo debo intentar conquistar un idiota con problemas de personalidad –bufa la rubia- aparte que tiene ese estúpido legado…

    -Tampoco que es Allen sea fácil de enamorar lila…, creo que es el más inocente de los tres –levanta le ceja la pelirroja- considero a lavi un poco más listo en temas de romance que el mismo albino

    -Eso es cierto –suspira la morocha- por lo menos ustedes tienen hombres normales y no al demonio… -se sienta derrotada la pelinegra- Dejando a un lado sus romances “Imposibles” deberíamos recorrer la orden antes que los generales lleguen mañana, y así me acompaña a la Sección científica a entregar los bocetos para que esta semana tengas sus uniformes listo ¿Les parece?.

    -¡Por supuesto!, eso ni siquiera se debería preguntar –ríen las chicas, las cuales comenzaron su travesía por la orden oscura-

    La primera parada de las chicas fue la cafetería ¿Curioso, no es así?, para algunas personas seria casi uno de los últimos lugares en pisar, pero eso solo era factible cuando era una cocina normal y no una comandada por el gran cocinero Jerry, ese hombre es considerado un dios por Allen Walker; No era para menos, llenar aquel estomago abismal en menos de 45 minutos diarios era casi una odisea cosa que solo él podía lograr. Las viajeras se acercaron con clara rapidez a la ventanilla donde se encontraba regularmente aquel hombre de sexo dudoso y con sus resplandecientes sonrisas blancas llamaron su atención.

    -Pero bueno, ¿Qué bellezas se presentan en este día tan maravilloso?, ¿En qué puedo ayudar a tres hermosas damas hoy? –Bajando sus extravagantes lentes de color violeta para poder divisarlas bien- esperen un momento… ¿Son las chicas nuevas?

    -Así es… -asiente una muy emocionada lila al ser reconocido por el hombre- ¡Soy Lila Rodríguez un placer!

    -¡Hay pero que cosita tan tierna! –la abraza con fuerza como si le fuera a sacar el aire a la pobre rubia- ¿Y tú? ¿Cómo te llamas? –voltea a ver a la pelirroja-

    -Soy Gabriela Gómez, un placer Jerry –se inclina levemente casi por inercia, y de un momento a otro sintiendo el cálido abrazo del moreno-

    -¡Eres todo un encanto, y me fascina tu hermoso cabello rojo!, deberías venir un día para arreglártelo y hacerte unos peinados increíbles, aparte de ser un excelente chef soy un increíble estilista, puedes preguntarle a lenalee –le guiña el ojo a la chica haciéndola sonrojar por el comentario- bueno, tú eres la última pequeña… dime tu nombre. –Refiriéndose a la pelinegra-

    - Por supuesto, Mi nombre es María Luna Contrera un placer –Sonríe de manera cálida, sintiendo como también era abrazada por el hombre frente a ella.

    -¡Tienes unas increíbles y hermosos ojos! Todas son muy hermosas, casi nunca tenemos chicas tan guapas por aquí, todo está lleno de hombres, aunque debo admitir que la mayoría son bastante atractivos –ríe con algo de complicidad hacia las tres- y díganme, ¿En puedo serles útil? ¿Debo suponer que tienen hambre, no es así? ¿Qué les apetece? Pidan lo que sea yo hare sus sueños realidad.

    -Bueno ya que lo pones de esa manera, me gustaría degustar un delicioso Pie de limón, junto con un deliciosos frappe de limón y chocolate –Pide la rubia con sus relucientes ojos esmeraldinos-

    -Pues a mí me encantaría una rica torta tres leches con coco rallado por encima y una merengada de coco con chocolate, crema por encima y chispas de chocolate, quizás algunas galletas vendrían bien. Por favor –Dice con clara amabilidad la pelirroja.

    -Yo creo que me conformare con algo sencillo, un pastel de kilo de fresas con crema, un batido de fresas con galletas de chocolate, un yogurt con fresas en almibar y bueno quizás un helado de fresas y crema –Sonríe la pelinegra mientras era observada por sus dos acompañantes- ¿Qué?... ¿Dije algo malo?

    -¿Y eso es sencillo luna?, tienes un estomago sin fondo…

    -Creo que ya sé quién podrá hacerle la competencia al albino de la organización –ríe la pelirroja y voltea a ver al cocinero- ¿Cree que podrá?, algunos platos creo que aun ni se inventan…

    -¿¡Estas bromeando?!, ¡Claro que poder hacerlo sin ninguna dificultad preciosa, ustedes solo tomen asiento y déjenme esto a mí! –se interna dentro de la cocina para realizar dichos pedidos.

    Las tres chicas se retiran con una gran sonrisa para sentarse en la mesa más cercana, pudieron ver que a su alrededor todo estaba completamente vacío, seguramente el conde estaba teniendo mucho movimientos y los residentes estaban combatiendo, era extraño no encontrar ningún buscador u exorcista dentro de La central. Estaba desértico, casi se podía visualizar un esfera de ramas secas pasar por frente de ellas. Por lo que sabían todos llegaban a partir de mañana, incluyendo sus generales.

    -Que sola se ve la orden sin los exorcistas y buscadores… -comenta luna al sentir la soledad del comedor – se nota que ellos son la calidez de la orden

    -Pues obvio… -bufa la rubia mientras hace una mueca de sarcasmo- por ellos es que estamos aquí, en cierta forma, además, estamos…¿Cómo se llamara? Ha si... Fuera de escena, aun no entramos en el capítulo.

    -¿Qué, acaso somos el episodio estreno de la nueva temporada? –Ríe Gabriela- hablando de eso… ¿Exactamente en qué línea temporal del tiempo estamos?

    -Tres años después de la destrucción de la primera Orden, nos situamos en lo que sería o lo que debería ser el Arco de los Segundos exorcistas, solo que no me cuadran las edades –ve la morocha a sus amigas- es como una línea temporal adversa, que no choca con la original.

    -Espera, para tu carro… ¿Me estás diciendo que estamos en D gray-man pero una línea temporal fuera de lo que conocemos?, ¿Ósea que los eventos vividos en el manga ya ocurrieron y estamos presenciando otro?

    -No estoy muy segura, tal vez está equivocada o tal vez no –ve a lila con algo de preocupación- son solo suposiciones, tendríamos estar al pendiente de los eventos que ocurren aquí pasar saber exactamente donde nos encontramos, en que arco o en que trama…

    -Son demasiadas sorpresas en una semana, procesar todo casi de golpe será difícil, nuestros generales llegan mañana, ¿Cómo se supone que enfrentaremos esto?, sin contar que estaremos separadas por estar en grupos distintos, porque realmente dudo que kanda quiera entrenarnos en el mismo salón que donde este Allen.

    -Sueñas muy alto Gabriela, si kanda llega a entrenarme viviré metida en la enfermería ¿Oh quién sabe dónde?, no será fácil pero debemos tener cuidado con que lo que digamos y a quien se lo digamos, para tu desgracia lila, tu mayor enemigo será lavi, debes tener cuidado con lo que hablas con el –ve a la rubia quien vuelve a bufar de molestia, la cual no apartaba su mirada de la puerta del comedor-

    -Lo sé, no es necesario que me lo digas, tendré cuidado hasta que resolvamos toda esta situación

    Pasados los correspondientes 45 minutos, Jerry llego con las bandejas llenas de los pedidos de las chicas, siendo recibido con halagos y abrazos cosa que a él le encantaba mucho debido a la poca presencia femenina que había dentro de la orden, ya que con la única que había tenido un contacto casi de hermandad era con lenalee y tenerlas a ellas tres era algo que le encantaba. Una vez que terminaron su exquisito desayuno preparado por el Afeminado hombre de cabello violeta, las tres procedieron a ir a la biblioteca, lugar donde podrían descubrir no solo el escondite de los bookman, sino también el nuevo misterio que se les presentaba frente a ellas.

    -¿Y bien que se supone que haremos aquí? –Pregunta lila, algo ida de la situación- ¿No se supone que tenemos que alejarlos de Bookman?

    -Bookman debe estar de misión con Lavi, casi nunca lo deja solo deberíamos aprovechar que la biblioteca está sola para ver algo de historia, para ver en qué línea temporal de tiempo nos encontramos exactamente –Responde María, quien ya tenía la perilla de la puerta en su mano-

    -No quiero interrumpir, lo que sería una maravillosa idea luna…Pero tengo una pequeña duda.

    -¿Cuál?

    -¿Sabes leer por casualidad textos bíblicos en hebreo, Italiano o su defecto Japonés?

    -No creo que sean tan bastardos como para tener información en esos idiomas estando en Londres –Bufa la pelinegra- y de ser así el caso, te recuerdo que tenemos traductores en el teléfono…

    -Dudo que mi Iphone 6 Plus agarre señal aquí…-susurra Gabriela resignada- además la batería no le va a durar eternamente

    -Podemos decirle a los de la Sección científica que nos hagan una fuente de poder que pueda cargarlos –Responde Lila- Yo no puedo vivir sin mi Blu Neo Plus

    -Vez, hasta lila está de acuerdo y fue la primera en quejarse –abre con fuerza la puerta, dejando ver algo que dejo a las tres boquiabiertas-

    Frente a ella se encontraba nada más y nada menos que Bookman, quien había puesto su mirada en las tres chicas quienes entraron de manera casi tosca a lo que el consideraba un lugar sagrado, pero supuso que fue porque pensaron que el lugar se encontraba solo debido a las expresiones de sorpresa en la cara de las tres. El cual al ver eso simplemente ladeo el labio en una pequeña sonrisa, ya que como historiador, era algo que tenía que registrar desde su llegada repentina a la orden, su entrada en ella podía significar un cambio del destino para la guerra que se avecinaba a la vuelta de la esquina, o quizás simplemente eran un engaño para que los planes del conde se culminaran, fuera lo que fuera debía estar al pendiente de todo aquello que hicieran.

    Las tres viajeras no sabían cómo reaccionar, se habían metido casi de cabeza en la boca del lobo, ahora el señor frente a ellas seguramente comenzaría a sacarles información que pudiera servir para la historia, no podían permitirse eso. ¿Cómo iban a salir de aquella engorrosa situación en la que se encontraban?. Cada una analizaba una posible salida pero no se les ocurrida absolutamente nada, debían esperar a que alguien dijera o hiciera algo para dejar las cosas en manos del destino y rogar que no comenzaran a marearlas con preguntas. El primero en dirigir palabra fue el Viejo.

    -Pero miren que sorpresa me ha traído el viento –deja los libros que tenía en sus manos para posarse frente a las tres chicas- Me presentare, Un placer soy Bookman Exorcista de la Orden Oscura, y también conocido por registrar todos los eventos importantes que ocurren en el mundo.

    -Un placer –Interrumpe lila casi de golpe, sin permitir que sus amigas pudieran tan solo decir o hacer algo- Soy Lila Rodríguez – inclinándose como acto de respeto, dejando a las dos mayores boquiabiertas- Mis amigas, Gabriela Gómez y María Luna Contreras, las tres pronto formaremos parte del grupo de exorcista y buscadores de la Orden Oscura.

    - El placer es todo mío, eres un joven muy educada… -sonríe el anciano satisfecho por el respeto que tenía la rubia hacia su persona- puedo preguntar… ¿Qué hacen tres señoritas por estos lugares tan apartados?

    -Buscábamos información que nos pudiera ser de utilidad para adaptarnos mejor a este ambiente Señor bookman, lamento si interrumpimos de manera irrespetuosa su lugar de trabajo –Responde lila con una seriedad opuesta a lo que era su personalidad regular.

    -Entiendo, no se preocupen la biblioteca es para todos, pero como notaron yo y mi aprendiz somos lo que más estamos aquí metidos la mayoría del tiempo cuando estamos lejos de las misiones. Por el momento solo me encuentro ya que el estúpido de Lavi se encuentra en una misión, si desean pasar son libre de hacerlo –Responde de manera pausada y calmada con sus pose recta y perfecta de nómada-

    -No creo, preferimos venir en otra oportunidad para no molestarle en su ardua tarea de registrar, somos algo habladoras a la hora de analizar ciertas situaciones –sonríe la pequeña quien no dejaba de impresionar al señor mayor- Fue un gusto conocerle Señor Bookman

    -Una lástima, me hubiera encantado discutir algunos temas, pero será en otra oportunidad –Suspira resignado al ver como las chicas tenían intenciones de retirarse del lugar- El placer fue mío, Señorita María luna, Señorita Gabriela tienen una amiga bastante educada, estoy alagado con su perfecto trato y léxico, espero que podamos tener una grata conversación como la que he tenido con esta agradable señorita –se inclina- Con su permiso

    -Bien pueda, el placer fue nuestro señor bookman. Si nos disculpa también nos retiraremos

    Las tres chicas tomaron su rumbo de nuevo, mientras eran observadas muy fijamente por el Bookman mayor, detallándolas a cada una, sabiendo muy dentro de sí que la intromisión de ellas dentro de la guerra significaría un nuevo comienzo a la orden, y que el balance había vuelto a cambiar, talvez para bien o mal, no se podría saber solo sabía que tenía que registrar cada uno de los momentos a la perfección y dejarlo a la historia. Un poco alejadas ya de la vista del mayor, Luna y Gabriela empezaron a molestar a su amiga más joven por lo ocurrido tan solo unos momentos atrás, ya que ella muy pocas veces era del tipo de chica que se comportaba educadamente y si lo hacía debía de tener una intención por delante de ella, como en ese momento en particular.

    -¡ESO!, ¡Ganando puntos con el que será tu futuro suegro! –Comenta la pelirroja quien no paraba de reír por lo reciente-

    -Lila no duraste nada, comenzaste directo en el camino de conquistar al Joven Bookman Jr, que ternura –Al igual que la pelirroja no paraba de reír-

    -¡Cállense ustedes dos! –Bufa sonrojada la Rubia, pues se sentía abochornada, y no era para menos, se había servido en bandeja de plata para la burla de ambas- Además, Son el Señor Bookman se debe ser educadas, puesto que le gusta una buena presencia y no iba a permitir que ustedes dos mancharan mi nombre ¡hmp!

    -Por favor, no te crees ese cuento ni tu –Responde María sin dejar de burlarse- Pobre anciano, no se ha dado cuenta que acaba de conocer a su yerna… Felicitaciones señorita Rodríguez ustedes a obtenido 10 puntos.

    -Sí, si como sea, de igual manera, sigo siendo la más adelantada de ustedes, así que será mejor que vayan moviéndola –guiña su esmeraldino ojo hacia sus acompañantes-

    -Yo lo necesito un milagro si pretendes que podre conquistar a Kanda en tan solo unas horas –suspira derrotada Luna-

    -Por lo menos tienes esperanza de que algún día se dé cuenta –suspira la pelirroja mientras pensaba en cierto albino- yo siento que con Allen no hay esperanza ni de eso…

    -Dios pero que deprimente son sus vidas, mejor sigamos recorriendo antes que me den ganas de llorar

    -Que cruel eres –Bufan las dos mayores ante el comentario de la menor.

    Durante el resto de la mañana y parte de la tarde, estuvieron recorriendo los lugares más visitados de la orden e inclusive los inexplorados de esta, conociendo desde buscadores, científicos, personal esencial entre otros. También pudieron llegar a todas las habitaciones de cada uno de los exorcistas conociendo las ruta de cada una de ellas, para no perderse en el camino, aunque mucha de estas se encontraban bastante ocultas y la mayoría de los pasillos se parecían con razón Allen se perdía tan a menudo por esos lugares; Inclusive pudieron subir por los pisos de la orden encontrándose más habitaciones las cuales las gran mayoría se encontraban cerradas con candado y sus pisos llenos de polvo. Para cuando dieron las 6 de la tarde las tres chicas bajaron rápidamente hasta la Sección Científica, pues tenían que entregarle los Bocetos a Johnny antes de que este hiciera los trajes genéricos de la orden.

    Las tres llegaron sin ninguna dificultad a los laboratorios, encontrándose con aquel desorden habitual que lo único que producía a las personas inexpertas era salir corriendo de aquella locura. Los Científicos al darse cuenta de la presencia de las jóvenes buscaron inmediatamente a Reveer quien era el que estaba encargado de atenderlas en todo momento junto con el supervisor el cual en ese momento se encontraba “Ocupado” aunque lo más seguro que se estuviera durmiendo debajo de una pila de documentos lo cual era costumbre de él. El mayor al ser informado se acercó a las tres señoritas tomando su atención.

    -Señoritas, ¿A que debo su visita al laboratorio?

    -Buenas noches Reveer, disculpa si interrumpimos su trabajo, pero queríamos hablar con Johnny personalmente sobre un tema –Responde Gabriela- Obviamente si no es molestia.

    -Mm, no, realmente no es ninguna molestia, pero me parece curioso que quieran hablar con el –Las ve mientras levemente alza una ceja, y fuma un poco del cigarro que tiene en su boca- Él se encuentra detrás de las estanterías seguramente resolviendo algunos Problemas.

    -¡Muchas gracias!, ¡Te prometemos que no tardaremos nada! –Alza suavemente la voz María quien no podía contener su felicidad al poder mostrarle lo que con tanto esfuerzo había logrado al chico-

    La morocha comienza a jalar con fuerza a sus amigas ante la atenta mirada del Científico mayor, quien seguía sin cambiar su mirada curiosa sobre ellas, los pensamientos del mayor eran bastante controversiales, pero de una cosa estaba casi seguro, ellas encajarían muy bien dentro de la orden y tal vez regresarían parte de aquella alegría perdida con los años. Las tres jóvenes buscaron entre las incontables estanterías del lugar, hasta hallar lo que parecía ser un cadáver en una de las esquina de estas, se encontraba cubiertos de papeles e incluso podían sentir aquel fétido olor que desprendía asustándolas un poco por el hallazgo, con precaución y algo de miedo las tres se fueron acercando hasta el cadáver, hasta llegar frente a él y proceder a moverlo con lo que parecía ser una regla bastante larga.

    El joven científico quien se encontraba medio muerto “Literalmente” hablando en el piso , sentía como un extraño objeto comenzaba a mover su cuerpo destruido por la falta de sueño y buena alimentación, ya que en los últimos días no había podido ver las luz del día, ni siquiera había visto el comedor debido a la cantidad de trabajo que poseían. Con algo de esfuerzo, logra levantarse de a poco, mientras arreglaba sus lentes que estaban todos desajustados para lograr una mejor visibilidad, solo para encontrarse con tres hermosas jóvenes frente a él, y con una rubia sosteniendo lo que parecía ser, el objeto con el que estaban moviendo su “cadáver”.

    -¿Quién…Quienes son ustedes? –Pregunta el joven científico quien aún estaba aturdido y algo desorientado-

    -Te dije que no estaba muerto –sonríe triunfal la rubia-

    -No dijiste nada Lila, simplemente agarraste la regla del piso y comenzaste a tocarlo –bufa la pelinegra- ¿Te encuentras bien? ¿Quieres que te llevemos a la enfermería?

    -Iré por café, de seguro debe haber en la mesa del Señor Reveer –se levanta con velocidad la pelirroja quien retrocede sus pasos para ir en busca de dicho liquido revitalizador-

    Johnny se encontraba completamente confundido, no sabía quiénes eran las tres jóvenes frente a él, y para ser sinceros jamás en su vida las había visto, en realidad nunca sería capaz de entablar conversación con unas chicas tan bien parecidas como las que se encontraban frente a él, se consideraba una persona muy tímida y de poco habla. Y estaba casi seguro que con la única mujer con la cual había hablado en su vida era Lenalee y eso era porque la consideraba una hermana menor.

    Luna y Lila no dejaban de ver al chico, pues se encontraba realmente confundido o quizás un poco extrañado de no poder reconocerlas, tampoco es que tenían toda una vida allí como el resto del personal, pero si tenían el suficiente tiempo como para que los demás al menos conocieran sus nombres, o parte de su físico y más sabiendo que él había sido el cual mando aquella cantidad de paquetes a la enfermería, tal vez tenía un lapsus mental o ¿No?, creo que era mejor que se presentaran ante el chico antes que le diera un desmayo u algo por el estilo.

    -Bien creo que debemos presentarnos, por tu cara de confusión no debes saber ni siquiera quienes somos… ¿No es así? –Sonríe dulcemente la pelinegra al chico quien asentía ante su comentario-

    -Perdónenme, últimamente ando muy distraído con todos los temas que hay en la Orden últimamente, jejeje… me presentare primero aunque por lo visto ya me conocen, pero es bueno ser educado… Soy Johnny Gill un placer –Extiende sus pequeñas manos hacia ambas-

    -No pasa nada, Soy Maria Luna y la rubia es Lila –señala a su pequeña amiga quien, miraba todo detrás de la morocha con una sonrisa socarrona-

    -¡Hi! –Saluda de chica con su mano alzada-

    -¡Oh por dios!, ¡Ustedes son las viajeras del tiempo!, ¿No es así? –Grita casi al instante de terminar de oír el saludo de la Oji-Esmeralda, al mismo tiempo que se levantaba para tomar con fuerza las manos de una pelinegra impresionada- ¡Dios no saben cuánto había deseado que llegara este día y conocerlas!, ¡Tengo tantas preguntas para ustedes! –Sus ojos brillaban de emoción- ¿Cómo fue que llegaron?, ¿Cómo es su mundo?, ¿Es cierto que nos conocen desde hace mucho? , ¿Cómo es eso posible?, ¿Qué tan avanzada esta la tecnología?, ¿ Como…

    -¡Wow!, ¡Alto allí vaquero, relájate, tenemos todo el tiempo del mundo para responderte, primero deberías calmarte y esperar a tomar algo para que te recuperes de tu llegada del infierno!- Interrumpe la rubia al ver aquella inagotable cantidad de preguntas que tenía el chico para hacerles-

    -Lo siento…

    -No pasa nada, solo queremos que primero estés un poco más lúcido, ¿Si? Ven siéntate –Guía al chico a unas sillas que se encontraban cerca de aquel montón de ¿Basura? Y documentos-

    -Disculpen nuevamente por mi reacción, es que como imagino que sabrán, nunca tenemos casos como el suyo, tan únicos es una avance que nunca pensamos en tener –sonríe feliz- quizás podríamos hasta dejar de tener tantas muertes y detener al conde.

    -La pelinegra sonríe ante los tiernos deseos del chico, pero muy en el fondo sabiendo que era un deseo difícil de realizar, más sin saber el futuro que le deparaba sus vidas en aquel mundo; Lanza un suave suspiro en tan solo pensar en todos los problemas que se avecinaban, le daba dolor de cabeza simplemente de imaginarlo- Bueno Johnny, es un deseo que todos queremos en la orden, terminar esto y poder ser libres…

    -Ni que lo digas, sobre todos de aquellos quienes han estado confinados desde su juventud, no debe ser fácil desear algo y ver que no se cumple con la rapidez con la cual esperabas –responde lila, sin dejar de mirar todos aquellos documentos-

    -Cierto…bueno, a todas estas ¿A que debo su sorpresiva visita? , es curioso que quisieran venir a verme, sus trajes aún no están listos chicas si es lo que venían a buscar, seguramente deben estar ansiosas…-Ríe-

    -Si bueno sobre eso…

    -¡Ya llegue!, traigo el café, me costó mucho conseguir una buena taza y que estuviera caliente, aquí todo el mundo literalmente se lo toma por Intravenosa –Interrumpe la pelirroja a Luna, quien al verla muestra una sonrisa por el comentario que recién salió de su boca- ¿Me perdí de algo?

    -De nada interesante Gómez, calmada, por cierto Johnny ella es Gabriela Gómez es la tercera viajera –Presenta la rubia a su amiga recién llegada-

    -Es un placer –extiende la chica su mano hacia el científico quien la miraba encantado-

    -El placer es todo mío –acepta el gesto con gusto- Le comentaba a tus amigas que es un verdadero encanto tenerlas aquí, son una solución que no esperábamos tener y menos de la forma en la que llegaron… Por cierto Gracias por el café –Vuelve a tomar su asiento mientras agarraba aquella taza de porcelana blanco que contenía aquel delicioso e indispensable liquido el cual daba vida a su organismo-

    -Si bueno, en realidad es una sorpresa para todos, incluso para el bando enemigo si llegasen a enterarse…

    -Esperemos que no, Señorita Gabriela

    -Dime Gaby –Ve con gentileza al chico mientras tomaba asiento al lado de su pelinegra amiga- ¿Ya le dijiste?

    -Estoy en eso…

    -¿Decirme que? –Pregunta curioso-

    -Es… sobre los uniformes, veras me gustaría que consideraras unos diseños que hice, solo si no te molesta obviamente -

    -¿Diseños?, ¿Eres modista o Diseñadora de Modas?

    -Algo así –Empieza a buscar las ilustraciones entre la carpeta que tenía en sus manos- Solo son bocetos, pero realmente me gustaría que los tomaras en cuenta.

    -Pues veamos –Extiende su mano a esperar que le entregue los papeles-

    Las manos de la chica temblaban, y no eran necesariamente por las heridas proporcionadas de su futuro general, eran nervios, ella era de las que poco enseñaba sus trabajos, diseños de vestidos entre otras cosas, realmente prefería mantener todo bajo perfil acción que solo lograba molestar a sus amigas debido a que nadie podía ver el enorme potencial que tenía, dejando pasar oportunidades únicas en la vida. Con fuerza aún mantenía aquellos documentos, mientras mordía sus labios aun temerosa de lo que el chico pudiera decir, podía ser bastante pesimista en cuanto de cosas de ella se trataba; De repente sintió dos manos familiares tocarla del hombro, como dándole fuerzas a seguir su camino, observo de reojo al fijarse de aquellas dos personas que más quería. Gabriela y Lila quienes le sonrían depositando toda su confianza en ella, cosa que ella no tenia, sin preámbulos las chica entrego los bocetos a Johnny quien esperaba ansioso que se los diera.

    El chico tomo entre sus manos aquellos diseños para poder detallarlos mejor , llevándose una gran sorpresa, si bien es cierto los uniformes que había echo la chica no eran necesaria mente algo que usaría la orden pero se notaba a simple vista que estaba muy bien elaborados, incluso tenían anotaciones de los materiales a utilizar en cada uno de ellos, nunca llego a pensar que una de ella podía tener una talento así, y si eso solamente era la punta de Ice-berg, estaba ansioso por saber que podían tener las otras dos de especial. Con una gran sonrisa miro a la nerviosa chica quien no dejaba de temblar esperando el veredicto del científico menor, dejado los bocetos en la mesa y tomar un sorbo de su delicioso café para darle solo un poco de intriga.

    -Bueno, los diseños están muy bien elaborados empezando por allí, tenía mucho tiempo sin ver unos buenos diseños de ropa, me dejaste sorprendido. Aunque debo decirte que para ser utilizados dentro de la orden está un poco complicado, no es habitual que se lleven traje de este estilo, debido a que tienen que deben tener flexibilidad y libertad de movimiento, pero sería un desperdicio de tiempo no apreciar tu esfuerzo, si quieres mi opinión profesional, podemos realizarle unos cambios para que sean más funcionales sin perder la belleza del diseño realizado ¿Te parece?

    -¡SI!

    Contestaron las dos acompañante de la chica por ella, ya que se había quedado en shock por lo comentado dicho el chico, nunca pensó que aceptarían sus diseños, si bien tenía que hacerle cambios no importaba mucho, estaba contenta porque sentía que su esfuerzo era realmente valorado, no podía aguantar aquella emoción de ver cómo quedaría el resultado final, el solo imaginar que dos de los trajes dentro de la orden los creo ella le daba una enorme felicidad y orgullo, era un verdadero honor llegar a esa posición, sentía que podía morir en paz.

    -¿María? ¿Estás bien? –Pregunta preocupado el chico al ver que la chica, aun no daba señales de vida, tenía la mirada completamente pérdida-

    -Déjala Johnny estará un rato así, creo que esta pérdida entre sus pensamientos, ya que tu respuesta le dejo seguramente súper feliz –Sonríe la pelirroja, conociendo lo que pasaba por la mente de la chica-

    -Si tú lo dices, está bien… -Aun preocupado por la reacción de la joven Pelinegra.

    Después de aquellos acontecimientos, las tres jóvenes pasaron el resto de la tarde junto con el chico, hablando y haciéndole cambios a los diseños de la chica, quien aún seguía sin poder contener aquella felicidad que la invadía. A pesar de que todo estaba muy divertido, debían irse, tenían que descansar debido a que al día siguiente llegarían sus respectivos Generales, y seguramente empezarían a entrenar para ir a las misiones en busca de inocencias junto con ellos, claro obviamente si estaban capacitadas para ello; Una vez que se despidieron de chico, las tres fueron de nuevo a la enfermería y proceder a alistarse para dormir ni sin antes acomodar la ropa que usarían para el día de mañana.

    El outfit de Lila consistía en, un short negro de cuero, un top rojo levemente plegado en la unión de los senos, una chaqueta de cuero manga larga que hacia conjunto con la parte de abajo, pantimedias negras lisas y por ultimo uno tacones de cuero rojo amarrados al tobillo. Todas estas prendas la chica las había colocado encima de su mesa, esperando a que amaneciera, pues no podía aguantar la emoción de que pronto sería una Nueva Exorcista.

    Por otro lado el Outfit de Gabriela era más sencillo, consistía en, una falda plegada negra con tirantes que subían hasta los hombros, una camisa de vestir manga larga roja, igual que lila una pantimedia negras lisas, y los mismos tacones que su rubia amiga. La chica coloco sus prendas dentro de una bolsa decorada muy linda, dejándola en la mesa de noche, dentro de su cabeza sus pensamientos se encontraban revueltos debido a los nervios del próximo día ¿Qué podía esperar? ¿Allen las aceptaría como sus alumnas? Muchas preguntas… pocas respuestas.

    Luna por su parte estaba confusa de que podría usar, así que eligió algo sencillo por así decirlo, su Outfit consistía en, un vestido simple negro con falda plegada que llegaba hasta la mitad del muslo, la cintura se encontraba decorada con una cinta roja, en el cuello estaba decorado con un cuello tipo camisa y en los hombros tenía el diseño de manga tipo Tulipán decorado al final con la misma cinta roja, sus manos estaban cubiertas con guantes de cuero rojo, los cuales tapaban el vendaje de las heridas que poseía. Las mismas panti medias negras, y tacones rojos que hacían juego con sus acompañantes; Luna coloco su atuendo dentro de una gaveta mientras suspiraba, tenía miedo de lo que pudiera ocurrir el día de mañana, su mente no estaba preparada para el rechazo de su general, sabía de antemano que se aproximaba una tormenta, una de la cual, sus mente y cuerpo no saldría ileso…¿Cómo lo sabía?, sencillo, conocía más al nipones de lo que él podía imaginar, por ahora solo le quedaba dormir y rezar que todo fuera bien…o eso quería pensar.

    Continuara…
     
    Última edición: 11 Julio 2020
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