One-shot de Naruto - De tal palo [Naruto-Boruto]

―Boruto, ven.

El niño con algo de duda comenzó a caminar hasta colocarse detrás de su padre, la gran figura que éste imponía le daba la total sensación de seguridad que en esos momentos necesitaba. Se aferró con sus pequeñas manos en el pantalón de Naruto y miró con asombro a la persona que tenían enfrente.

Era una mujer. Alta, voluptuosa, con el cabello rubio sujetado en dos coletas bajas y de ojos color miel, ella le miraba con una sonrisa y con una mano en su cadera.

―Ella es Tsunade, ¿te acuerdas? La Quinta Hokage. ―comenzó a explicar Naruto― Anda, saluda ―incentivó, dándole un pequeño empujón con la mano, haciendo que el pequeño diera unos pasos al frente.

La mujer de nombre Tsunade se acercó también, se inclinó para quedar a su altura y le acarició su rubia melena.

―Qué bueno verte de nuevo, Boruto ―dijo con amabilidad― Cuánto has crecido.

Un tenue color carmesí apareció en las mejillas del pequeño Boruto, desvío la mirada algo apenado, provocando ternura en los ojos de los mayores que lo observaban. La mujer se levantó.

―Es idéntico a ti ―habló dirigiéndose a Naruto. Éste le regaló una gran sonrisa, mientras se rascaba la nuca con algo de vergüenza.

―Me alegra que vuelva a la aldea, Tsunade-sama, aunque sea de visita-ttebayo.

―Bueno, ya sabes que no puedo estar quieta en un sólo lugar ―dijo esbozando una sonrisa nostálgica― Me quedaré unos tres días a más tardar. Todavía me falta por ver a los demás chiquillos ―añadió dejando escapar una pequeña risa viendo a Boruto. Le acarició por última vez sus rubios cabellos― Quizás nos veamos en estos días. Hasta más tarde.

Naruto la vio comenzando a caminar, tomó a Boruto de la mano para regresar a su hogar.

―Tou-chan... Ella es linda ―dijo mirando en dirección a la mujer― Es linda para ser una abuela-ttebasa.

―¡Boruto, no digas eso!

―Pero me dijiste que era vieja, malhumorada, y de mal carácter.

Naruto hacía ademanes desesperadamente intentanto callar a su hijo, quien inocente y ajeno a lo que se le avecinaba seguía hablando tranquilamente.

―Na-ru-to.

―Tsunade-obaachan, e-espere, n-no es lo que piensa...

―Ya veo que Boruto sacó más que sólo la apariencia de ti ― era completamente otra persona. Se acercaba a paso lento mientras se tronaba los dedos y una sonrisa perversa se apoderaba de su rostro― Eres osado, niño. Pero tu padre pagará el precio.

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―¡Naruto-kun! ―exclamó una Hinata asustada, con las manos tapando su boca por la sorpresa―¿Qué pasó? ―preguntó acercándose a su esposo, quien tenía un ojo completamente morado.

―Tsunade-obaachan está de visita en la aldea―respondió un adolorido Naruto entrando a la casa seguido de su pequeño hijo.

Hinata no necesitó más información. Negó con la cabeza en señal de desaprobación, ¿qué habrá dicho su esposo a la Quinta Hokage para recibir semejante puñetazo?

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Gracias por leer <'3