One-shot de Pokémon - CUANDO UN CORAZÓN ROTO BUSCA UN SUEÑO, OTROS PUEDEN NACER

Bien después de varios meses de ausencia e historias sin actualizar, he estado sin motivación alguna ya que mi situación fuera del foro ha cambiado mucho y uno tiene que crecer, uno debe apegarse a los constates cambios que le da la vida; motivo por el cual no quiero dejar de seguir en este lugar así que hoy he vuelto con una idea un poco diferente de lo usual, y era algo que venía planeado ya tiempo atrás, pues una especie de continuación de una de mis viajes historias, la cual dejare el link, pues esa sería una segunda parte, que aunque la historia no suceso en hechos tan seguidos para mis demás historias tiene un gran significado, y era algo que no quería dejar sin escribir.

One-shot - Fanfic - El nacimiento de una alma oscura

CUANDO UN CORAZÓN ROTO BUSCA UN SUEÑO
OTROS PUEDEN NACER​

A pesar de que el sol brillaba tranquilamente y la brisa era tan suave; no era un lindo día en aquel húmedo bosque, no para alguien quien tenía una mirada fría y una cara como si habría dormido apenas unas pocas horas, esa era la actitud que tenía un Celebi que flotaba entre ramas de árboles, pero dichas plantas no mantenían su vitalidad cerca de él, cualquier rama que estuviera cerca de tocarlo apenas un metro de distancia, comenzaba a marchitarse de forma extrema, como si en vez de que un bello sol calentara su cuerpo, era como si una fría y ocurra noche lo rodeara quitándole hasta el ultimo rastro de vida; varias ramas y hojas se secaban en el camino de Celebi a quien no parecía importarle el extraño cambio que hacia cerca de ella, solamente pensaba en lo que hacía, buscaba algo impórtate.

— ¿Dónde estás? — susurraba mirando los alrededores entonces se dio cuenta que en una rama de ellas se encontraba algo que llamo su atención, era nada menos que una célula de aquel pokémon que a quien lo llamaban Zygarde y eso era exactamente algo que Celebi sabia y no hizo más que acercarse a ella mientras la rama sobre la que esta se posaba comenzaba a marchitarse, Celebi toco aquella célula y mirando un con profundo odio, esta se secó al ínstate y se convirtió en cenizas — Escúchame — volvió a susurrar mientras miro aquellas cenizas volar por los alrededores.


Esas cenizas no volaban porque el viento las arrastraba volaban hacia su punto de origen, el cual al llegar por una pila de rocas, se filtraron por las gritas en ellas y mientras atravesaban el interior de lo que parecía ser una caverna subterránea, llegaron hacia una gran subterráneo que tenía un profundo lago que brillaba con un hermoso color verde iluminado aquel oscuro lugar, el cual aquellos pequeños fragmentos de polvo estaban a punto de tocar, pero antes de hacer contacto de entre aquella agua, salió un entidad grande que parecía molesta, pero era lo que aparentaba al salir de manera tan brusca de lo que se diría su escondite.


En la superficie mientras Celebi miraba los alrededores del bosque, noto claramente como las hojas de los aboles se movían de forma brusca pues un movimiento terrestre comenzaba a sacudir la zona, a él no parecía importarle tal estruendo, ya que su mirada continuaba de la misma forma.


— ¿Qué haces aquí? — fue el sonido que se escuchó entre toda esa conmoción en el lugar.
— Vine a buscarte — respondió ante la pregunta que le dio y fue justo ahí cuando la tierra exploto y de ella salió Zygarde el cual parecía estar molesto.
— ¡Tú!, ¡Porque emites esa energía tan repugnante?
— Porque es lo que siento — hablo con tal frialdad que Zygarde le sorprendía esa forma de actuar
— ¿Lo que sientes?, he vivido por muchos años protegiendo este lugar y jamás he sentido algo así, tu solamente eres como una plaga que podría matar un hermoso lugar como este, así que te diré que te vallas.
— No me iré sin antes obtener lo que vine a buscar
— ¿Y que es eso que buscas?
— Una alianza
— ¿Alianza?
— Tu eres alguin con un extraordinario poder, y es eso lo que necesito ahora.
— ¿Que te hace pensar quisiera aliarme a ti ?, aquellos que buscan poder lo utilizan únicamente para dominar a otros, si eso buscas olvídate de ello.
— No lo estas entendiendo — hablo con más seriedad — Un guardián como tú se esconde debajo de la tierra mientras que allá afuera hay cientos de individuos que causan un mal lastimando a nosotros quienes solo queremos un mundo mejor.
— ¿De qué hablas?
— Hablo de la raza humana, esa raza que nos controla y nos obliga a luchar sus propias guerras, nos dicen amigos, pero únicamente nos usan para sus propósitos egoístas, nosotros somos mejor que ellos, no lo necesitamos, podemos crear un mundo mejor que este si te un……
— Si eso es lo que viniste a decirme, vete, no tengo interés alguno en tus asuntos — dijo mostrando un muy bajo nivel de importancia mientras le daba la espalda.


Fue un acto que molesto completamente a Celebi y eso ataco sus pocas emociones que tenía al traer una propuesta como esa y fueron esas emociones lo que lo obligaron a actuar si pensar; extendió su mano y presionando su puño, como si de árboles creciendo se tratase, de la tierra surgieron varias raíces secas que se interpusieron ante el gran pokémon verde.

— Si quieres ayudarme, lo harás por las malas— más que seriedad fue una forma amenazante de decirlo.
— ¡No está jugando! — pensó para sí mismo al notar esa mirada, claramente había lo que podría decir, oscuridad en su alma, pero ¿Por qué?, no pudo preguntarse a sí mismo ya que al ínstate muchas raíces salieron a sus pies las cuales lo rodearon y ataron dejándolo casi sin la capacidad de moverse y mientras lo hacia el pokémon hada simplemente floto hacia él —No me provoques — rugió el coloso mientras su cuerpo emitió un brillo muy fuerte y aquellas raíces se rompían debido a la fuerza que emanaba de su cuerpo, un destello muy fuerte que obligo a Celebi a retroceder.


El hada no se mostró intimidado ante el gran poder de su rival, solo contrataco mientras su cuerpo se cubría de cierto manto brilloso atacando con lo que algunos llamarían poder oculto; fue una gran ráfaga de ametrallas blancas que golpeaban como fuertes balas y estas se dirigían directamente hacia Zygarde que se protegió con un velo sagrado haciéndole un buen escudo. Los proyectiles chocaron entre si mientras provocaban una gran cortina de humo nublando la vista de el gran pokémon que simplemente se detuvo a esperar a que el fuego cesara.


Pocos segundos después el ataque de Celebi había terminado de ser ejecutado, mientras Zygarde miro hacia el frente, su rival no se encontraba y fue poco el tiempo de observación ya que si previo recibió una fuerte tacleada se du rival en el costado de su rostro, un golpe veloz y con una fuerza destructora que su rival cayo aparatosamente hacia el suelo destrozando algunos árboles por su caída.


Zygarde se tomó su tiempo para ponerse de pie, estaba sorprendido por aquel gran golpe recibido ya que jamás había pensado en recibir un golpe de esa magnitud, entonces miro a su rival y noto que él estaba agitado, pues al atacarlo de esa forma era una clara señal de que le había costado un gran esfuerzo ya que las gotas de sudor eran notorias sobre su cabeza. Zygarde no era alguien que le hiciera daño a otro, aun si este se mostraba de forma contraria y violenta, pero Celebi lo estaba provocando de manera muy fuerte, sabía que lo próximo que haría debería terminar con esa absurda pelea.


Celebi no se rindió, libero energía de su interior provocando un resplandor muy brillante, su enemigo se sorprendió de la gran aura de su poder, el cual se acumuló en la palma de su mano formando una esfera brillante, aunque la impresión fue más porque aquella energía comenzaba a escurecerse; ante la mirada de Zygarde era como si esa energía que producía se mostrara contaminada, como si una gran oscuridad hubiera nacido del corazón de un pokémon hada como él. No óbstate fue solo una fracción de segundo de su reacción ya que aquella esfera se disparó como un potente proyectil que destrozaba todo a su paso, el potente poder destructivo de aquel ataque atrapo completamente la mirada de Zygarde quien no pudo ni moverse, simplemente recibió aquel gran poder.


El ataque fue una potente bomba que arraso con almenas 10 metros de diámetro de explosión, recudiendo aquel bosque únicamente a un cráter humeante, debido al polvo y cenizas no se podía ver nada dentro de agujero, eso era algo que únicamente Celebi quería asegurar mientras se acercó y ver si su rival esta fuera de combate, trato de ver atravesó de humo y noto el destello luminoso de los ojos de Zygarde sorprendiéndolo de inmediato al recibir un ataque como ese, y cuando trato de mover un dedo, sintió como si un resplandor travesara su cuerpo, Zygarde había usado un aliento dragón que empujo como una fuerte ventisca a Celebi el cual por su tamaño y cansancio salió disparado y en su camino se estrelló contra varios árboles, pero el mayor efecto fue cuando impacto contra una gran muralla de rocas duras que a pesar de la dureza logro hacer un pequeño carácter. Ambos habían usado mucho poder en una riña que no tenía una razón de ser; la confianza de Zygarde ante su rival pequeño lo obligo a usar todo el poco poder que había utilizado regresándolo a un estado infante, era su conocida forma del 10%, era pequeño y verde con una pequeña identificación de color azul en su pecho.


Entre brincos se acercó al maltratado Celebi el cual había caído al suelo entre pequeños escombros de la pared que habías destrozado, estaba totalmente fuera de combate y eso fue aprovechado por el pequeñín verde que lo miro molesto, pero a la vez preocupado.

— Muéstrame el porqué de tus acciones — lo dijo mientras se posó sobre la cabeza de él y con su poder, intento entrar dentro de los recuerdos más profundos de su cabeza.


La mente de Celebi estaba siendo explorada y en ella claramente se podía ver aquellos horrores que vivió durante su vida, desde que construyo la aldea en la que con pokémon y humanos compartió su vida, pero lo que más sorprendió a Zygarde fue el horror que trajo las batallas de ejércitos armados, humanos y pokémon que luchaban por el dominio de tierras y poder, sobre todo el horror que vivió al recibir la aterradora tarea de su amigo al atacar de manera tan cruel contra ejércitos enteros y entre todos esos recursos, la terrible traición de quien consideraba su mejor amigo humano. Cada suceso, cada momento y cada sentimiento fue reflejado en sus recursos, el que su corazón se rompiera de esa forma era un motivo realmente fuerte y eso explicaría por qué ese odio que nace de su corazón, todo era comprensible para Zygarde, que al ser un pokémon como el, entendía lo diferente que era su raza de la de los humanos.


Aquella pelea había sido vista por su contraparte y esa identificación roja en su pecho, el cual había observado todo desde la cima de un acantilado.




En aquella cueva en la cual Zygarde dormía, se encontraba una roca que sobresalía del interior de aquellas aguas brillantes y en ella se encontraba un pequeñín verde con una mancha roja en su pecho, el esperaba a su contraparte, el cual se acercaba dado saltos con una mirada un tanto seria.

— ¿Qué sucedió? —pregunto el pequeñín de mancha roja.
— Nada, solo una pelea por un motivo estúpido— hablo de forma contante mientras comenzaba a adentrarse más en lo profundo de aquella cueva.
— ¿Porque lo dices como si ocultaras algo? — hablo de manera seria
— Aun si lo hiciera, son asuntos míos, déjame en paz, quiero descansar.
— ¿Qué le dijiste Celebi? —aquella pregunta detuvo los saltos del pequeñín azul — Lo vi todo, no se lo que hayas encontrado en su mente, pero quiero saber qué fue lo que le dijiste.
— Le dije que lo que buscaba lo consiguiera en otro lado, fue lo único que pude hacer después de mirar su pasado.
— ¿Su pasado?
— Oye, dime una cosa, si los humanos llegaran destruir el lugar que cuidamos… ¿Qué harías?
— Lo protegería sin importar que
— ?Aun si tuvieras que herir con los humanos.
— ¿QUE! …¡Eso no es una opción?
— Sé que eso harías tú, pero si llega el día en el que ellos decidan destruir todo aquello que protegemos, no dudare en contenerme — fue su última palabra mientras comenzó a saltar de regreso a los interiores de la cueva.

La mirada de su amigo quien era casi igual a él, era una preocupante, era la primera vez que su contraparte mostraba esa actitud, como si algo hubiera cambiado dentro el al ponerse en contacto coa que pokémon hada, aunque no lo sabía, el motivo de Celebi era bastante grande para no darse por vencido y sabía que su contraparte azul era alguien que respetaba eso, pero lo que no se imaginaba era lo que él le había dicho a Celebi






Celebi buscaba una alianza para obtener el poder de cumplir sus propósitos, Zygarde no era el pokémon que le daría eso, así que al menos esperaba que supiera del alguien quien podía darle lo que buscaba, eso pensaba mientras despertaba algo confundido por la paliza que había recibido a manos de lo que ahora era un pequeñín verde que lo había ayudado a recuperarse.

— ¿Te sientes mejor? — el pequeño verde pregunto con pequeña muestra de preocupación. Celebi, aunque su puso en pie, se sentía agotado y era claramente un rasgo que el pequeño verdoso notaba — Se lo que has vivido; he pasado mucho tiempo en esa cueva que no he visto el terrible mal que hay allá afuera — dijo mientras le dio la espalda — Yo no soy alguien que busca venganza o justicia, soy un guardián, pero se de alguien que estaría dispuesto a darte aquello que buscas.
— ¿Quién? — dijo con la poca fuerza que le quedaba.
— Ve hacia al sur de esta región y busca a alguien que se hace llamar un Dios, lo que hagas de ahora en adelante no es asunto mío — fue su última mención mientras entre pequeños saltos se alejó de allí.

Celebi había llegado con un propósito el cual no consiguió en ese lugar, pero ahora tenía una pista para buscar el poder necesario de cumplir el único sueño que tenía en su mente, nuevamente su corazón se sintió tranquilo, a su alrededor se podía notar una paz entre aquellos sonidos como el viento entre las hojas y los murmullos de los riachuelos cercanos; sonrió mientras comenzó a flotar y seguir su camino hacia el lugar el cual Zygarde le había dicho ir. ¿Qué era lo que encontraría allí? No lo sabía, pero sentía su sueño un paso más cerca, que era aquel de construir un mundo mejor destruyendo el antiguo; ahora ese era su único destino.








Bueno, eso es todo, espero que les haya gustado, y recuerden que comentarios y sugerencias son siempre bienvenidos, nos vemos en una próxima historia.