Ella le preguntó sobre Ron, aún estaba despierto, Ginny vio que Harry llevaba los zapatos desabrochados, se agacho y los ató por el joven, cuando se puso en pie ambos se miraron. La mirada del otro resultaba hipnótica, se perdían en los ojos del otro, se fueron acercando poco a poco, cuando se iban a besar un ruido se escuchó, eran los mortifagos quienes atacaban la casa. Ese momento, tendría que esperar.
El romance debe esperar, primero el deber. Y lo peor es que fue algo bastante estresante para todos. Pero ya ahí se veía que iba a comenzar un romance.
