Se lamía las heridas como un perro herido, inutilmente. Tratando de contener la hemorragia de tantas heridas internas, escondidas siempre, con la vergüenza de alguien que se sabe haciendo algo malo. Sabía que podría tratar de gritar, pero ya no le salirían las palabras, ya no, porque había negado su voz tanto tiempo, que al final ya ningún sonido salía por aquella garganta. Sin voz, destrozada por dentro, se sentía vacía. Vacía. Vacía. Vacía Vacía. Y nunca se sintió más completa, que cuando se dio cuenta de su propio vacío interior, porque por fin lo vio. Y se dio cuenta de que estaba completa. Completa. Completa. Completa. Siempre lo había estado.
Entonces estaba vacía o completa(?. Ahora en serio, nunca es agradable sentirse así por dentro, yo me he sentido así durante años y es un sentimiento horrible pero con esfuerzo y mental todo se puede. Me ha gustado la manera que has descrito ese sentimiento y añadiendo la repetición de palabras. Has trasmitido todo a la perfección :D Hasta la vista y espero más cositas tuyas así ^^
En este micro despredo la moraleja: que no hay nada más completo que saber y aceptar quién y cómo se es, asimilarlo puede hacer que una sensación de plenitud llegue y esta emoción logra llenar ese vacío producido por vivir tal o cual circunstancia, en especial es más notable cuando dichas circunstancias producen heridas tan profundas como las del personaje.
Pienso que todos en algún momento nos hemos sentido así de esa forma; por diversas razones, aunque mayormente podría ser por desamores. Por entregarte y salir lastimado en más de una oportunidad. Son esas heridas que dificilmente se curen, quizás se olviden, pero en el fondo sabemos que no sanaran. Llegamos a pensar que algo anda mal con nosotros, pero al final nos damos cuenta de que debemos aceptarnos tal cual somos, con defectos y virtudes. Es lo que me parece que se busca expresar.